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UNIDAD 5

La ética desde la perspectiva de la justicia

La ética desde la perspectiva de la justicia Kohlberg (citado por


Aguía, 2002) es uno de los autores que más ha trabajado el tema
de la ética y del desarrollo moral. Este teórico, propuso seis esta- La ética vista desde
dios de desarrollo de la moral y señaló que cuando una persona la perspectiva de
“completa” el último estadio, puede decirse que ha desarrollado la la justicia señala
moral y puede concebir juicios, tomar decisiones y actuar logrando que la norma es la
distinguir aquello que es bueno o correcto de lo que no lo es. que define lo que
Desde esta perspectiva lo “bueno” o lo “correcto” está definido por
es justo, es decir,
aquello que es justo. Es decir, la noción de justicia es la que va a aquello que es
determinar el campo moral en el que los sujetos se desenvuelven. correcto o bueno de
Es claro que la justicia se encuentra, a su vez, determinada por lo que no lo es.
la normatividad, la cual tiene como objetivo establecer las reglas
que permitan la vida en comunidad. Como señala Ruiz (2011): “La
norma es aquello que permite establecer la noción de comunidad.
La educación moral se expresa principalmente en la posibilidad de
propiciar el aprendizaje de valores morales susceptibles de ser asumidos al tiempo como obligaciones
y derechos, a partir de los cuales se construyen nuestras nociones de justicia y nuestras apuestas por
un orden social justo” (p. 74).

Lo anterior implica que la pregunta fundamental desde esta perspectiva ética se reduce a ¿qué es lo
justo?, lo cual se encuentra limitado por los derechos que se le atribuyen a los ciudadanos (Aguía,
2002), a partir de los cuales se desprenden las normas y, por esta vía, las obligaciones que tienen las
personas, unas con otras, con el fin de conservar el respeto mutuo de los derechos. En este orden de
ideas, la ética vista desde la justicia señala que para hacer frente a los dilemas morales que se pre-
sentan en la vida es necesario basarse en las leyes, sin considerar las características específicas de
cada una de las personas que se encuentran involucradas en tal situación.

Una de las críticas más fuertes que se le hacen a este enfoque ético hace referencia a que, al contem-
plar la universalidad de los derechos y del principio de justicia, se universalizan los sujetos. Esto quiere
decir que se conciben las personas de una forma homogénea. El interlocutor del sujeto moral se convi-
erte en un “otro generalizado” (Benhabid, citada por Aguía, 2002) cuyas características individuales se
desvanecen para que pueda encajar en las reglas generales y formas de comportamiento en el marco
de una cierta manera de concebir la justicia, la determinada por la ley.

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