Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
En los últimos años, la capa de ozono, manto superficial que resguarda a nuestro planeta tierra de
la radiación generada por rayos ultravioleta, se ha deteriorado cada vez más, trayendo como
consecuencias severos daños al clima, debido a la emisión de gases contaminantes.
Uno de los productos que más gases emite a la atmósfera y contamina el ambiente son los
famosos aerosoles. Se utilizan en diferentes medios como: insecticidas (siendo este el que más
afecta), perfumes, desodorantes, pintura, entre otros.
Los envases de aerosoles son contenedores de líquidos presurizados, los cuales no se descargan
totalmente durante el uso habitual, por lo que necesitan un manejo adecuado para la destrucción.
Los aerosoles cuentan con COV en sus sustancias. Los COV son compuestos orgánicos volátiles, es
decir son contaminantes que, cuando entran en contacto con la luz del sol producen el conocido
gas de ozono en la capa más baja de la atmósfera terrestre. Esto permite la formación «smog».
¿Cómo? debido al smog creado por los aerosoles se crea como una capa de niebla en la
atmósfera, el planeta se enfriaría por oscurecimiento.
Además de esto, los aerosoles dañan la pureza del aire por pequeñas partículas de polvo que se
emiten al ser utilizados. A corto plazo es cierto que no causan efectos considerables, pero a largo
plazo, impactan directamente la salud de las personas. Desde enfermedades cardiopulmonares,
pasando por la mortalidad y reduciendo la esperanza de vida. Se estima que por año pueden morir
millones de personas
Incinerox cuenta con un equipo compacto para la destrucción de aerosoles, con altos estándares
de calidad. Todas las piezas móviles son de aleaciones de acero inoxidable aptas para el contacto
de los residuos de los aerosoles.
Los filtros eliminan los líquidos y absorben los olores. Los líquidos generados son enviados a un
proceso de estabilización química, y luego enviarse a Celda de Seguridad o Incineración, lo que
garantiza la disminución del potencial de peligrosidad de los residuos. Este procedimiento aplica a
todos los envases de aerosoles.
Ahora que conoces más sobre la contaminación por aerosoles, toma en cuenta las
recomendaciones para su gestión adecuada, recuerda que puedes asesorarte de nuestro equipo
técnico en caso tengas dudas sobre el tema.
Para entender bien todo sobre este tipo de contaminación ambiental, primero daremos
la definición de smog y sus tipos:
La definición de smog más sencilla es que se trata de una contaminación del aire que se da cuando
se combina niebla con humo y otras partículas contaminantes que flotan en la atmósfera, en zonas
con niveles de contaminación elevada. Así, puede darse cuando hay niebla o bruma y el aspecto
que tiene es que el ambiente está lleno de humo, normalmente de olor extraño y de colores que
pueden ir desde el gris hasta el naranja o rojizo.
Si te preguntas también cómo se forma el smog, ten en cuenta que se produce cuando se mezclan
varios de los agentes contaminantes del aire, que afectan tanto al medio ambiente como a nuestra
salud, con la luz solar y se dan reacciones químicas diversas y en cadena y, además, es más
frecuente en zonas industriales con elevados niveles de emisión de gases de efecto invernadero.
Tipos de smog
Smog industrial o clásico, que también es conocido como smog gris o smog sulfuroso, y es
producido principalmente por la actividad industrial.
Smog fotoquímico.
Así, ante la cuestión de qué es el smog fotoquímico podemos definirlo como el resultado de la
producción de contaminantes secundarios, como el ozono troposférico u ozono malo, que es el
que se queda en la superficie del planeta y no sale a la estratosfera. El smog fotoquímico se
produce cuando hay reacciones fotoquímicas, es decir que los químicos como algunos gases
reacciones a la exposición a la luz solar.
Algunos de estos químicos que reaccionan con la luz produciendo smog son los hidrocarburos
volátiles y los óxidos de nitrógeno, como el monóxido de nitrógeno u óxido nítrico, y en este caso
el resultado es el ozono troposférico, el cual continúa sufriendo reacciones fotoquímicas
produciendo el esmog.
Respecto a las principales causas del smog fotoquímico, indicamos que hay que centrarse en las
causas de los gases contaminantes que hay en la atmósfera, así como en las causas de la lluvia
ácida, las cuales están realmente ligadas. A modo de resumen, las causas del smog o niebla
fotoquímica son:
Actividad industrial que emite humos con gases de efecto invernadero y otros
contaminantes ambientales, tanto al aire como al suelo y al agua, ya que estos también
terminan en el aire.
Las emisiones de gases de los vehículos que usan combustibles fósiles.
La mala gestión de residuos contaminantes tanto urbanos como en el medio rural.
En definitiva, la razón de que haya esmog fotoquímico es que en el ambiente hay
demasiados químicos nocivos que reaccionan a la luz solar, por tanto, el problema básico es el
incremento de emisiones de gases y otros contaminantes atmosféricos en las últimas décadas.
Como hemos apuntado, la niebla fotoquímica es un problema de contaminación del aire muy
grave y que aumenta a diario. Son diversas las graves y negativas consecuencias de este problema
ambiental, pero para resumirlas y explicarlas de forma sencilla, podemos indicar que
las principales consecuencias del smog fotoquímico, tanto para el medio ambiente como para
nosotros, son las siguientes:
Se modifica el entorno tanto a nivel químico como a nivel visual. Por lo que hay
contaminación ambiental, es decir del aire, y visual que afecta al paisaje y reduce de forma
drástica la visibilidad. Llega a ser imposible ver a pocos metros de distancia, lo que nos
afecta a nosotros, incluso propicia accidentes de tráfico, y también afecta a los animales
de la zona y a las plantas, pues no llega bien la luz solar.
La presencia de esta niebla fotoquímica impide que haya formación de nubes con
precipitaciones, por lo que los pocos días de haber este smog deja de haber lluvias.
Esta capa de contaminación hace que se incrementen las temperaturas por la acumulación
excesiva de gases de efecto invernadero.
Consecuencias del smog fotoquímico para la salud
Seguramente habrás pensado en que la parte más afectada de nuestra salud es la respiración
porque inhalamos los químicos concentrados y esto es correcto. Pero, ¿cómo afecta el smog al
sistema respiratorio? ¿En qué más aspectos afecta a nuestra salud?
Produce inflamación de las vías respiratorias, tanto altas como bajas en casos de densidad
de smog elevada.
Aparece tos, dificultad para respirar y opresión en el pecho.
Empeoran los problemas respiratorios como el asma.
Favorece la aparición de enfermedades cardíacas y las agrava.
En casos en los que se prolonga el problema ambiental, produce estrés, malestar
generalizado, pérdida de calidad de vida, aparición de distintos tipos de cáncer y,
finalmente, la muerte prematura.
Soluciones del smog fotoquímico
Por suerte, hay ciertas medidas que se pueden tomar para reducir este problema ambiental, pero
realmente es necesario incidir en la acuciante necesidad de ponerlas en marcha a nivel global.
Entre las posibles soluciones del smog fotoquímico encontramos:
Mejorar las zonas verdes de las ciudades y sus alrededores, tanto de zonas públicas como
jardines particulares.
Restringir el uso de vehículos particulares.
Fomentar el uso de transporte público y que este use energías renovables y no
combustibles fósiles.
Colocar asfaltos novedosos, con materiales más ecológicos y/o especiales para la
absorción de la contaminación del aire.
Colocar torres especiales que depuran el aire y eliminan el smog.
Mejorar la educación ambiental en las aulas y la dirigida al público en general, a través de
campañas ambientales.
Reducir de forma individual las emisiones de gases contaminantes y fomentar proyectos
que se encarguen de buscar y aplicar estas soluciones, así como contactar con el gobierno
o el ayuntamiento indicado para ello en cada situación.
Hacer uso de las 3R de la ecología en todos los aspectos diarios.
Ayudar a concienciar a los demás de forma constructiva.
Según el Diccionario de la lengua española de la Real Academia Española, al que podemos acudir
para responder qué es la lluvia ácida y, de hecho, es la mejor opción para conocer su definición
estricta, la definición de lluvia ácida es “la precipitación en la atmósfera de las emisiones
industriales de contaminantes ácidos”. Así, se puede definir como la mezcla del agua de lluvia con
la contaminación ambiental o polución del aire. Se trata de un fenómeno atmosférico que supone
serios problemas para el planeta, tanto para toda la naturaleza como para las infraestructuras
artificiales construidas por el hombre. ¿Quieres saber mejor por qué es así?, a continuación, te lo
explicamos.
Como ya hemos mencionado, las causas de la lluvia ácida están directamente relacionadas con la
contaminación ambiental, podríamos decir que las causas directas son las actividades humanas a
través de las fábricas, la calefacción, las centrales eléctricas, los vehículos, etcétera, que queman
derivados del petróleo con azufre y también queman carbón.
Ahora que ya hemos aclarado qué es la lluvia ácida, así como también las principales causas de la
lluvia ácida, hay más aspectos a tratar para conocer mejor este problema ambiental. ¿Qué
produce la lluvia ácida específicamente?, ¿cuáles son sus componentes? y ¿cómo se forma? Estas
son dudas comunes sobre este fenómeno atmosférico, ya que para encontrar soluciones hay que
conocer bien el origen del problema. Hay que tener en cuenta que la lluvia contiene dióxido de
carbono, así como cualquier otra forma de agua ambiental como la nieve, el hielo o la niebla. Esto
hace que de por sí esta agua sea un poco ácida, sobre un pH de 5,6, pero la lluvia ácida tiene un
pH de 5, pudiendo llegar hasta uno de 3 cuando es muy ácida.
La lluvia ácida se forma cuando el agua contenida en el aire, es decir la humedad, entra en
contacto y se mezcla con los óxidos de nitrógeno, el dióxido de azufre y el trióxido de azufre.
Estos son gases que junto con el agua producen ácido sulfúrico, ácido sulfuroso y ácido nítrico,
haciendo que la lluvia se torne más ácida de lo que ya es y, al caer, dañe el entorno en el que se
encuentre.
Tras conocer la definición de lluvia ácida, sus causas, su proceso de formación, solo queda un
detalle por aclarar para conocer mejor este problema antes de abordar los efectos y las
consecuencias de la lluvia ácida en el medio ambiente y para las personas. Se trata de conocer
exactamente los componentes básicos de esta lluvia, lo que permite su mejor comprensión y que
sea algo más fácil pensar en soluciones.
Las fórmulas de los componentes primarios de la lluvia ácida, es decir sus precursores, son los
siguientes:
Agua de la humedad ambiental: H2O
Óxidos de nitrógeno: NOx
Dióxido de azufre: SO2
Trióxido de azufre SO3
Las fórmulas de los ácidos resultantes de la mezcla anterior que acidifican la humedad formando la
lluvia ácida en sí son las siguientes:
Ácido sulfúrico: H2SO4
Ácido sulfuroso: H2SO3
Ácido nítrico: HNO3
Efectos y consecuencias de la lluvia ácida
Al combinarse con la humedad ambiental, estas sustancias se precipitan en forma d lluvia ácida,
cayendo sobre la tierra, el agua, los bosques, los edificios, etcétera, dañándolo todo debido a su
acidez. Por tanto, la lluvia ácida deteriora el medio ambiente.
Además, los contaminantes que son expulsados por la quema de derivados del petróleo con
azufre, del carbón, etcétera, no solo contaminan el aire y la humedad de la zona en la que están al
crearse, sino que pueden recorrer largas distancias por el viento, hasta miles de kilómetros, antes
de llegar a combinarse con la humedad, convertirse en ácidos y caer en forma de precipitaciones,
ya sea la propia lluvia o bien nieve, granizo, niebla, etcétera. Esto significa que la contaminación
puede crearse en una parte del mundo, pero la lluvia ácida derivada de esa contaminación puede
precipitarse en otra zona de la Tierra.
Acidificación de las aguas terrestres, como ríos, lagos, mares y océanos. Por tanto, daños
graves en la vida acuática y en la terrestre, al no poder beber de estas aguas ni alimentarse
de los peces y otros animales que habitan en ellas.
Daños importantes en la vegetación, en zonas forestales, selváticas, etcétera, de forma
directa e indirecta. Este fenómeno atmosférico acidificado contiene protones que
provocan que algunos iones bajen hasta entrar en contacto con la tierra, por ejemplo, de
plomo, zinc, calcio, hierro o aluminio, y esto empobrece el suelo, haciendo que pierda
nutrientes. La consecuencia directa de esto es que los vegetales padecen estrés y
deficiencia de nutrientes que las hace enfermar, más vulnerables a contraer plagas e
incluso morir. Dónde esto sucede, hay menos vegetación, menos hábitat y alimento para
animales y personas.
Acaba con la vida de microorganismos fijadores de nitrógeno, es decir que reducen el
nitrógeno ambiental.
La lluvia acidificada daña y deteriora la superficie de materiales, es decir tiene un efecto
corrosivo sobre materiales como la madera, la piedra y el plástico, entre otros. Por
ejemplo, muchos edificios, monumentos y estatuas se han visto afectados al corroerse el
mármol o la caliza que los constituye, ya que los ácidos de estas precipitaciones pueden
disolver el carbonato de calcio, que forma parte de los materiales de estas construcciones.
Los ácidos que contienen sulfato en estas precipitaciones provocan un aumento del efecto
invernadero. Aunque pueden ser cantidades de sulfato pequeñas, estas al entrar en
contacto con ciertos componentes presentes en zonas pantanosas, incrementando la
producción de gas metano llevada a cabo por lo metanógenos, los microorganismos que
los producen de forma natural.
En resumen, la lluvia ácida empobrece los suelos, los vegetales y las aguas, daña la vida acuática,
terrestre y aérea y tiene relación con el efecto invernadero.
Tras conocer qué es, las causas y las consecuencias de la lluvia ácida, nos queda pensar las
soluciones. ¿Qué medidas se pueden tomar para disminuir la lluvia ácida? Esta es una duda que
nos hacemos desde la década de los años 80, cuando comenzó a haber conciencia sobre este tema
y a buscarse soluciones a través de tratados y leyes con el objetivo de reducir la contaminación y,
por tanto, la acidez de las precipitaciones y otros problemas ambientales.
Estas son algunas soluciones que dan respuesta a cómo reducir el impacto y cómo evitar la lluvia
ácida, centrándose sobre todo en reducir las emisiones de los agentes contaminantes que
producen el problema:
Reducir al máximo los niveles de azufre y nitrógeno en las emisiones de las fábricas,
calefacciones, vehículos, etcétera, pasando a utilizar nuevas tecnologías que ayuden a
controlar estas emisiones y usando cada vez más las energías renovables.
Impulsar el uso de vehículos privados, mercantiles, de los gobiernos y de transporte
público con sistemas de gas natural, eléctricos y otras opciones alternativas.
Instalar en los vehículos un convertidor catalítico de tres vías, que ayuda a reducir las
emisiones nocivas.
Reducir el consumo de electricidad en el hogar, por ejemplo, no dejarse las luces
encendidas o no usar calefactores.
Reducir el uso de sustancias químicas en los cultivos.
Añadir compuestos alcalinos en estanques, lagos y ríos para equilibrar el pH.
Plantar árboles.
Fomentar la educación entorno a los problemas medioambientales y sus causas,
consecuencias y soluciones.
Conoce más sobre este tema en este otro artículo de Ecología Verde en el que te contamos Cuáles
son las posibles soluciones de la lluvia ácida.
LA CAPA DE OZONO
¿Qué es el ozono?
El ozono es un gas compuesto de moléculas de ozono (O3), que consiste de tres átomos de
oxígeno. Las moléculas de oxígeno (O) en el aire que respiramos están formadas de sólo dos
átomos de oxígeno. Las moléculas se crean en una reacción fotoquímica, que puede describirse
del siguiente modo simple:
Las moléculas de oxígeno reaccionan para formar moléculas de ozono, y, al mismo tiempo, las
moléculas de ozono reaccionan para formar moléculas de oxígeno. Si el número de moléculas que
se crean es el mismo que el de moléculas de ozono que se destruyen, la reacción entra en un
equilibrio dinámico. Como este equilibrio es muy frágil, cualquier intervención puede dañar el
proceso natural de formación y destrucción del ozono, lo que a su vez tiene serias consecuencias
para la vida en la Tierra.
La capa de ozono es vital para la Tierra porque actúa como filtro de la radiación UV, que puede
tener impactos severos sobre la salud humana y el medio ambiente del planeta. Si las moléculas
de ozono se reducen más rápido de lo que pueden recuperarse por las nuevas moléculas de ozono
que la naturaleza produce, el resultado es un déficit de ozono. El agotamiento de la capa de ozono
resulta en una reducción de su capacidad protectora y por ende en una mayor exposición de la
superficie terrestre a la radiación ultravioleta.
Los científicos han clasificado a la radiación UV en tres tipos o bandas: UV-A, UV-B y UV-C. La
radiación UV-C no llega a la superficie de la Tierra. La UV-B es parcialmente filtrada por la capa de
ozono; la UV-A no es de ninguna forma filtrada por la capa de ozono. Sin embargo, la UV-B es la
radiación que ha provocado los mayores daños a la salud humana y al ambiente.
En los años setenta, los científicos descubrieron que las SAO liberadas dañan la capa de ozono.
Entre las décadas de los setenta y los noventa, las concentraciones de ozono sobre la Antártida
disminuyeron hasta 70 por ciento de la concentración normal.
Este fenómeno de gran escala es llamado a menudo el agujero en la capa de ozono. En 2006 este
agujero en la Antártida alcanzó un récord cercano a 29 millones de kilómetros cuadrados. El
agujero crece a finales de invierno y a principios de primavera a causa de las variaciones
estacionales de temperatura, lo que provoca condiciones ambientales propicias para la
destrucción del ozono en las regiones soleadas.
Las moléculas de ozono son muy sensibles y se destruyen ante la presencia de átomos de cloro o
bromuro que al reaccionar con el ozono forman moléculas de Monóxido de Cloro o Bromo y
quedan libres para atacar mediante “reacción en cadena” destruyendo un átomo de oxígeno a la
molécula de Ozono y convirtiéndola en oxigeno molecular. En promedio un átomo de cloro es
capaz de destruir hasta 100,000 moléculas de ozono, razón por la cual cantidades pequeñas
pueden descomponer suficiente ozono para disminuir de manera significativa la capa de ozono.
Las sustancias agotadoras del ozono (SAO) son sustancias químicas básicamente hidrocarburos
clorados, fluorados o brominizados, que tienen el potencial para reaccionar con las moléculas de
ozono en la estratosfera. Si una sustancia solo está fluorada (no contiene cloro y/o bromuro), no
es una sustancia agotadora del ozono. Una SAO incluye:
• Clorofluorcarbonos (CFC)
• Hidrofluorcarbonos (HCFC)
• Halones
• Hidrobromofluorocarbonos (HBFC)
• Bromoclorometano
• 1,1,1-Tricloroetano (metil cloroformo)
• Tetracloruro de carbono
• Bromuro de metilo
La mayoría de las SAO también son potentes gases de efecto invernadero con un alto potencial de
calentamiento global (PCG). De este modo, el hecho de eliminar las SAO no sólo protege la capa de
ozono, sino que también contribuye a proteger el clima.
En la mayoría de los países en desarrollo, el sector en el que se utilizan más las SAO es el de
refrigeración y aire acondicionado. Los CFC y HCFC son usados como refrigerantes en los circuitos
de enfriamiento. La producción y el consumo de los CFC ha sido eliminado desde 2010.
Los HCFC, sustancias de transición, están siendo eliminados en todo el mundo bajo el Protocolo de
Montreal
Las SAO son utilizadas como agentes espumantes, solventes de limpieza en la industria electrónica
y en el lavado en seco, como propulsor en aerosoles y en inhaladores con dosificador para uso
médico (ID) en el tratamiento de enfermedades pulmonares, así como esterilizantes en hospitales,
como agentes contra incendios, como fumigantes para control de plagas y para cuarentenas y
preembarques y en productos químicos para usos como materia prima en la industria
manufacturera química.
¿Cuáles son los efectos del agotamiento de la capa de ozono para la salud humana y el medio
ambiente?
Salud humana
Una exposición creciente a la radiación UV-B puede reprimir el sistema inmunológico al dañar el
ADN. Los resultados son incidencias mayores a enfermedades infecciosas, así como los efectos
adversos a programas de inoculación. La radiación UV-B causa también cáncer de piel tanto el no
melanoma (menos riesgoso) como el melanoma cutáneo, violentamente maligno. El aumento de
la radiación UV-B daña los ojos también, y el resultado común son las cataratas, principales
causantes de la ceguera en muchos países.
Plantas y animales
El agotamiento de la capa de ozono tiene efectos adversos severos en las cosechas y en los
bosques. La radiación ultravioleta cambia la composición química de diversas especies de plantas.
Entre las cosechas más vulnerables a la radiación UV-B se encuentran los melones. El aumento de
la radiación UV-B también disminuye la calidad de ciertos tipos de tomates, papas, remolachas y
frijol de soya.
Organismos acuáticos
La radiación UV-B daña a los organismos acuáticos, especialmente a los pequeños como el
plancton, las plantas marinas y las larvas de peces, camarón y cangrejos, todos estos forman la
base esencial de la cadena alimenticia acuática y marina. De esta forma, las pesquerías también se
ven afectadas.
Materiales
Los materiales comunes de construcción tales como la pintura, el caucho, la madera y el plástico
se degradan a causa de la radiación UV-B, particularmente los plásticos y cauchos utilizados en la
intemperie. En las regiones tropicales el daño puede ser severo debido a que el efecto de la
radiación UV-B aumenta con las altas temperaturas y niveles de resplandor solar. Estos daños
pueden representar miles de millones de dólares anuales.
La radiación UV-B incrementa el nivel del smog superficial, especialmente en las ciudades en
donde las emisiones vehiculares y de la industria son la base de las reacciones fotoquímicas.
Estas reacciones tienen de por sí un efecto adverso sobre la salud humana y el medio ambiente.
En general, antes de los años setenta, la comunidad mundial no estaba consciente de que la capa
de ozono estratosférico estaba agotándose, con efectos negativos para la salud humana y el
ambiente. Hoy, la importancia de proteger la capa de ozono es reconocida por todos los países, los
desarrollados y en vías de desarrollo. Hasta la fecha, 197 países y la Comunidad Europea son Parte
en el Protocolo de Montreal, por lo que representa el único tratado ambiental internacional
ratificado por todos los países del mundo.
Hay varias fuentes que son capaces de generar este tipo de contaminación. La mayoría de estas
fuentes proceden de la actividad humana y, sobre todo, cuanto mayor es el avance tecnológico de
la sociedad, por lo que es una contaminación bastante moderna. Te recomendamos que también
leas este otro artículo de EcologíaVerde sobre Cómo afecta la tecnología al medio ambiente para
que te hagas una idea más completa de lo que estamos comentando.
Aunque no se conocen todas las fuentes, algunas de las causas del electrosmog o contaminación
electromagnética son:
Los efectos que produce este tipo de contaminación aun no se encuentran totalmente definidos.
De todos modos, con los estudios ya realizados, por el momento se considera que las
consecuencias del electrosmog son:
Se conoce que hay varias posibles soluciones para reducir o disminuir este tipo de contaminación y
sus efectos sobre los seres vivos. Algunas de estas soluciones para reducir el electrosmog son:
El tamaño de las partículas se encuentra directamente vinculado con el potencial para provocar
problemas de salud. Las partículas pequeñas de menos de 10 micrómetros de diámetro suponen
los mayores problemas, debido a que pueden llegar a la profundidad de los pulmones, y algunas
hasta pueden alcanzar el torrente sanguíneo.
La exposición a estas partículas puede afectar tanto a los pulmones como al corazón. Múltiples
estudios científicos vincularon la exposición a la contaminación por partículas a una variedad de
problemas, que incluye:
Deterioro en la visibilidad
Las partículas finas (PM2,5) son la causa principal de visibilidad reducida (bruma) en partes de los
Estados Unidos, incluidos muchos de los preciados parques nacionales y áreas silvestres. Averigüe
más acerca de visibilidad y bruma
Daño ambiental
El viento puede transportar las partículas a través de largas distancias y luego, estas pueden
instalarse en el suelo o el agua. Según la composición química, los efectos de esta sedimentación
pueden provocar:
El PM puede manchar y dañar la piedra y otros materiales, incluidos los objetos importantes a
nivel cultural, como estatuas y monumentos. Algunos de estos efectos están relacionados con
los efectos de la lluvia ácida sobre los materiales. (en inglés)
Lectura adicional
Los incendios y su salud: El humo de los incendios genera partículas finas de material que pueden
agravar enfermedades crónicas cardíacas y pulmonares.
Preguntas frecuentes sobre el humo de los incendios forestales y los pasos a tomar para
protegerse.
Investigación de la EPA sobre el material particulado aéreo (en inglés): La EPA apoya a la
investigación que proporciona la ciencia crítica acerca del PM y otros contaminantes del aire para
desarrollar e implementar las normas de la Ley de Calidad del Aire que protege la calidad del aire
que respiramos.