Sunteți pe pagina 1din 7

0 4to.

Trimestre

SERMÓN DE VIDA FAMILIAR


Sábado 29 de diciembre

CUANDO SE TERMINA EL VINO EN TU MATRIMONIO

San Juan 2: 1-10


“Al tercer día se hicieron unas bodas en Caná de Galilea; y
estaba allí la madre de Jesús. Y fueron también invitados a
las bodas Jesús y sus discípulos. Y faltando el vino, la madre
de Jesús le dijo: No tienen vino. Jesús le dijo: ¿Qué tienes
conmigo, mujer? Aún no ha venido mi hora. Su madre dijo
a los que servían: Haced todo lo que os dijere. Y estaban allí
seis tinajas de piedra para agua, conforme al rito de la
purificación de los judíos, en cada una de las cuales cabían
dos o tres cántaros. Jesús les dijo: Llenad estas tinajas de
agua. Y las llenaron hasta arriba. Entonces les dijo: Sacad
ahora, y llevadlo al maestresala. Y se lo llevaron. Cuando el
maestresala probó el agua hecha vino, sin saber él de dónde
era, aunque lo sabían los sirvientes que habían sacado el
agua, llamó al esposo, y le dijo: Todo hombre sirve primero
el buen vino, y cuando ya han bebido mucho, entonces el
inferior; más tú has reservado el buen vino hasta ahora”.

Saludo:
Buenos días queridas familias y matrimonios aquí
presentes, me siento feliz de estar con ustedes en esta hora,
es mi deseo y anhelo que a través de la Palabra de Dios
podamos aprender y poner en práctica las normas que rigen
a la familia y el matrimonio, que Dios dejó en su Palabra.

Planteamiento:
Te has preguntado ¿Qué motivó a Jesús a asistir a esa boda?
¿Cuál fue la clave del éxito de esa boda? ¿Qué clase de vino
prefieres?

1.- INVITAD A JESUS A NUESTRO HOGAR


Si hay alguien que conoce perfectamente nuestras vidas es
Cristo Jesús, si existe alguien que por excelencia y detalle a
detalle sabe cómo funciona un hogar y una familia es Dios.
Él es el diseñador del matrimonio, él lo instituyó en el
huerto del Edén con la primera y linda pareja, Adán y Eva.
Dios como creador y diseñador del matrimonio sabe
perfectamente cuál es la solución cuando las aguas negras
puedan inundar la barca del matrimonio, y para que este

OCTUBRE – NOVIEMBRE – DICIEMBRE 269


270

salga a flote se necita solamente una cosa, seguir el consejo


del dueño de la barca.

En una ocasión un hombre conducía su automóvil por la


avenida de una gran ciudad cuando de repente el auto se
detuvo y no arrancó más, el hombre hizo varios intentos
pero no logró que el auto encendiera, se bajó abrió el cofre
para ver donde estaba la falla, después de varios minutos e
intentar él solo sin logar nada, pensó en pedir ayuda,
cuando de repente otro auto se estaciona a la par de él y se
baja un hombre, y sin decir nada se acerca al auto y se dirige
al motor, solamente observó y dio unos golpecitos por aquí
y otro por allá, y enseguida le ordena al que traía el auto -
arránquelo - y de manera mágica y automática el auto
encendió, el hombre quedó tan admirado que le dijo - yo
hice varios intentos y no pude y usted cómo le hizo, ¿cómo
conoció la falla? - entonces él le respondió - este auto es
mío, yo lo hice. Este hombre era Henry Ford.

A veces podemos parecernos al primer hombre de la


ilustración, en estar luchando solos por cuenta propia para
salvar nuestro matrimonio, y es que el luchar no está mal,
sino hacerlo sólo cuando podemos pedir ayuda al que formó
el matrimonio, y qué mejor en pedirle su sabiduría para que
él nos indique que debemos hacer.
Buscar a Dios es una decisión. Los esposos por
voluntad propia, por iniciativa conyugal decidieron
invitar al maestro a su unión matrimonial.
Los novios se preocuparon y no dejaron de insistir
y rogarle a Jesús a que estuviera presente en su
enlace nupcial.
Juan 2:2
Si Dios asistió a esta boda es porque él quería
confirmar lo que instituyó en el huerto del Edén.
Si Jesús llegó a esa boda es porque fue invitado.
No olvidéis jamás que por el aprecio de los atributos
del Salvador debéis hacer que el hogar sea un sitio
alegre y feliz para vosotros mismos y para vuestros
hijos. Si invitáis a Cristo a vuestro hogar, podréis
discernir entre el bien y el mal. Podréis ayudar a
vuestros hijos para que sean árboles de justicia, que
lleven los frutos del Espíritu; la paciencia, la
gratitud y el amor en el corazón, por nublado que
esté el día (Hogar cristiano, CP 1).

270
0 4to. Trimestre

Un Matrimonio perfecto no se mide por la menor


cantidad de problemas que enfrenta sino por tener
a Jesús en sus vidas.
La presencia de Jesús en una casa es como un
cerco protector.
¿Cuántos desearemos invitar hoy a Jesús a nuestro
hogar?

2.- OBEDIENCIA.
En esa reunión estaba María la madre de Jesús y cuando ella
se da cuenta que el vino se terminó es interesante notar que
ella no acude al anfitrión de la boda, tampoco va con el
maestresala, menos con los que servían, tampoco va con los
discípulos, la Biblia dice que ella se dirige inmediatamente
a Jesús y le dice “no tienen vino”, de acuerdo a la cultura,
Jesús le responde de manera educada y respetuosamente a
su madre y le dice aún no ha llegado mi hora. Entonces
María le dice a los que servían “haced todo lo que os dijere”
este es el ingrediente indispensable que si se le pone en
práctica en cualquier hogar, familia y matrimonio de seguro
que tal lugar se convertirá en un pedacito de cielo en la
tierra.

Ante todo, Dios siempre va a exigir la obediencia de sus


hijos porque fuimos creados para obedecerle y no estamos
cumpliendo, fuimos creados para amarle y no le estamos
poniendo en primer lugar, siempre cuestionamos y
dudamos.

Juan 2:5
Muchos no estamos dispuestos a pagar el precio de
la obediencia.
Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo
amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella.
Evitemos de caer en el enredo de decir palabras
ásperas, toscas, obscenas y violentas hacia nuestro
cónyuge, que lejos de solucionar un problema lo
hace más grande, hiriendo y lastimando el corazón
y los sentimientos de nuestra pareja provocando
resentimiento a nuestros hijos.
Efesio 5:25.
El Señor manda que amemos, cuidemos y
protejamos a nuestras esposas.
Cuando el maltrato verbal y físico llega al hogar de
parte del esposo hacia la esposa entonces

OCTUBRE – NOVIEMBRE – DICIEMBRE 271


272

podemos preguntarnos ¿estamos obedeciendo a


Dios?
Cuando la infidelidad tanto emocional como física
entre ambos cónyuges se dejan ver y sentir, nos
podemos decir a nosotros mismo si estamos
cumpliendo Juan 2:5
El esposo y padre es cabeza de la familia. Es justo
que la esposa busque en él amor y simpatía (Hogar
cristiano, CP 34).

“Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu


corazón; y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas
estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte,
y cuando te levantes. Y las atarás como una señal en tu
mano, y estarán como frontales entre tus ojos; y las
escribirás en los postes de tu casa, y en tus puertas”.
Deuteronomio 6:6-9.
El segundo aspecto que abarca la obediencia ahora
es en dirección hacia los hijos.
Nos quejamos de que nuestros hijos no nos
obedecen, de que no van a la iglesia, de que no
quieren saber de Dios, pero muchas veces nosotros
como padres no hacemos el menor esfuerzo por
conducirlos a Cristo.
a) No dedicamos tiempo para orar con ellos.
b) No apartamos el espacio para tener el culto
familiar.
c) Si van o no van a la iglesia no le damos la
debida importancia.
d) En nuestras casas no hay reglamento con
respecto a Dios.
Debemos de dedicar tiempo para levantar el altar
caído en cada uno de nuestros hogares.
Al no cumplir con estos requerimientos que Dios
manda ¿estamos obedeciendo a Dios?

3.- ¿QUE VINO PREFIERES?


En los tiempos de Jesús la tradición era que en las fiestas de
bodas primero se servía el mejor vino y cuando éste se
terminaba posteriormente se servía el de menor calidad,
pero en las bodas de Caná el mejor vino se sirvió hasta el
final de la reunión.
El primer vino en la fiesta de boda representa en nuestros
días lo que el ser humano puede ofrecer, lo que este mundo
te puede dar, lo que promete por impulso dejándose llevar

272
0 4to. Trimestre

por la autosuficiencia, en el matrimonio y la familia, pero al


final del día termina frustrado y decepcionado de sí mismo
y por ende de este mundo.
Muchas veces decimos:
a. No lo quise hacer.
b. Discúlpame, no volverá a pasar.
c. ¿En qué momento hice esto?
d. ¿Qué me está pasando?

En ese sentido nos convertimos en sobrevivientes.


El segundo vino representa lo que Dios está
dispuesto hacer en tu matrimonio.
El segundo vino representa el milagro que Dios
quiere hacer en tu familia.
El cielo siempre da al final lo mejor que tiene para
los que esperan con paciencia.
El segundo vino representa el nivel de
complacencia que Dios desea que tengamos en la
familia.
Representa el grado de satisfacción que Cristo
Jesús anhela que experimentes en tu hogar.
Así como los hombres presentan el mejor vino
primero y luego el peor, así hace también el mundo
con sus dones. Lo que ofrece puede agradar a los
ojos y fascinar los sentidos, pero no resulta
satisfactorio. El vino se trueca en amargura, la
alegría en lobreguez. Lo que empezó con canto y
alegría, termina en cansancio y desagrado. Pero los
dones de Jesús son siempre frescos y nuevos. El
banquete que él provee para el alma no deja nunca
de dar satisfacción y gozo. Cada nuevo don
aumenta la capacidad del receptor para apreciar y
gozar las bendiciones del Señor.
Lo que el mundo ofrece es temporal y pasajero.
El que puede devolverle el romanticismo a tu hogar,
a tu matrimonio o a tu familia es Dios.
Dios quiere convertir las aguas amargas de tu
matrimonio en un dulce vino.
Dios desea convertir esos pleitos, ese poco amor
que existe, en felicidad.
Puede ser que en tu matrimonio se esté terminando
el vino.
Déjame decirte algo en esta hora, todos los
matrimonios pasan por problemas, es por eso que

OCTUBRE – NOVIEMBRE – DICIEMBRE 273


274

en esta hora te invito a que tomes la iniciativa de


invitar a Jesús en tu hogar.
La única esperanza de redención para nuestra
especie caída está en Cristo.
La Biblia señala a Dios como fuente de todo
conocimiento, sabiduría y poder para remediar las
situaciones.
Los milagros van a llegar a tu hogar cuando seamos
obedientes a los mandatos divinos.
Los milagros ocurrirán en tu familia, en tu
matrimonio cuando nos sometamos a lo que Dios
ordena en su Palabra.
Mateo 6:33 “Busca primeramente el reino de Dios y
su justicia y lo demás vendrá por añadidura”.
Unidos y con oración, el padre y la madre deben
llevar la grave responsabilidad de guiar
correctamente a sus hijos (Hogar Cristiano, CP 53)
El maestresala lo encontró mejor que cualquier
vino que hubiese bebido antes y muy diferente de
lo que se sirviera al principio de la fiesta.
Pero, aunque María no tenía una concepción
correcta de la misión de Cristo, confiaba
implícitamente en él. Y Jesús respondió a esta fe. El
primer milagro fue realizado para honrar la
confianza de María y fortalecer la fe de los
discípulos. Estos iban a encontrar muchas y grandes
tentaciones a dudar. Para ellos las profecías habían
indicado, fuera de toda controversia, que Jesús era
el Mesías. Esperaban que los dirigentes religiosos le
recibiesen con una confianza aun mayor que la
suya. Declaraban entre la gente las obras
maravillosas de Cristo y su propia confianza en la
misión de él, pero se quedaron asombrados y
amargamente chasqueados por la incredulidad, los
arraigados prejuicios y la enemistad que
manifestaron hacia Jesús los sacerdotes y rabinos.
Los primeros milagros del Salvador fortalecieron a
los discípulos para que se mantuviesen firmes
frente a esta oposición.

Conclusión:
Invita a Jesús.
Sé obediente.
El milagro llegará.

274
0 4to. Trimestre

La cura para los males del matrimonio está en


Jesús.

¿Habrá alguna pareja que en esta mañana quiera invitar a


Jesús a su hogar?

Pr. Eligio Morales P.


Asociación Olmeca

OCTUBRE – NOVIEMBRE – DICIEMBRE 275

S-ar putea să vă placă și