Fallo O.D.C c/ S.F.J.

Fecha: 7/7/2005

Hechos: En una audiencia del juicio de divorcio, los cónyuges decidieron donar el único inmueble
de la sociedad conyugal a sus hijos menores. La madre en su carácter de representante legal,
aceptó la donación. El padre solicitó su revocación en virtud de la mora de la madre en la
obligación de escriturar. El juez de primera instancia consideró inválida la donación, es decir que
otorgó validez a la solicitud del padre. En la cámara se resuelve el fallo apelado revocándolo y
desestimando el pedido de revocación que le había sido otorgada al padre.

Se aclaran, en principio dos cuestiones, por un lado se considerara aceptada la donación en el

caso de que hubiese sido aceptada por la madre antes de que fuera revocada, al tratarse de una
donación sin cargo ni contraprestación no se aplican las exigencias de los actos de disposición
(art 264 quater). Por otro lado se plantea la cuestión de que uno no puede fundar un derecho en
el incumplimiento de una obligación que pesaba sobre él también.

Bajo el artículo 1810c.c se sostiene que no hubo donación que pueda intentarse revocar, este
establece que cuando tiene por objeto la transmisión de bienes inmuebles ese contrato debe
realizarse por escritura pública, bajo pena de nulidad. Se busca una interpretación en razón de
las particularidades del caso, que pueda otorgar validez sin escrituración, amén de una
perspectiva puramente exegética (literal).

El tema de esta donación, es que la implicancia de esta escrituración, entre ocurrir a un

escribano, preparar la escritura, promesa y consumación, pues podrían arrepentirse o
reafirmarse los donantes.

Se pone de resalto la adjudicación del inmueble realizada por los padres a sus hijos menores, en
todo caso, son ellos los representantes legales, (mientras no designen un tutor que atienda los
intereses de sus hijos) con habilitación para requerir la instrumentación. En un ángulo de
ponderación, se tutela la protección de los menores y su interés, resultarían la parte débil del
negocio jurídico. Esto hace concluir como vinculante la donación.

Se desestima el tema de la perfección de la donación por la

Aceptación, si fue aceptada antes de que fuera revocada o no.

Por último se analiza, si la donataria estaba constituida en mora

En cuanto a la ejecución de la carga impuesta. Una respuesta es que no se le impondría ninguna

a los beneficiarios porque son menores y carecen de capacidad para hacerlo, y la segunda
cuestión es que la carga, en todo caso gravitaría para los dos otorgantes del acto, uno no puede
fundar un derecho en el incumplimiento de una obligación que pesaba también sobre él y sin
siquiera intentar justificar su falta o acreditar que se debió a la actitud de la otra parte.