Sunteți pe pagina 1din 2

CULTURA NAZCA ,’YAKU RAYMIFIESTA POPULAR.

LOS
POBLADORES Y ESTUDIANTES DE LA PROVINCIA DE NASCA, AL IGUAL QUE LO HACÍAN
SUS ANTEPASADOS, ESPERAN CADA 14 DE MAYO PARA EL TRADICIONAL YAKU
RAYMI.AGUA AMADA. EL SEÑOR NASCA RINDE HOMENAJE Y MUESTRA LOS CANALES YA
LIMPIOS. RESPONSABILIDAD. LAS COMUNIDADES NASQUEÑAS CUIDAN LOS SISTEMAS
HIDRÁULICOS Y LOS MANTIENEN EN BUENAS CONDICIONES.

Fiesta Nasca del pago al agua


La conexión mística entre el hombre y el agua, en la que el primero reconoce el aspecto sagrado del
líquido, se revaloriza en los acueductos de Achaco Alto, en Nasca.

Tal como lo hacían sus antepasados, los pobladores de la


provincia de Nasca (región Ica), celebran el tradicional Yaku
Raymi o Fiesta del Agua.

Para ellos, el valle de Nasca –ubicado en la cuenca del río Grande– es sagrado. Cuenta
con más de 50 acueductos, de los cuales solo 32 se encuentran en buenas condiciones.
El resto fue afectado por las actividades humanas y fenómenos naturales.

Achaco Alto

El centro poblado de Achaco Alto posee más de un kilómetro de ingeniería hidráulica


con cuatro tramos o ramales revestidos de piedra que mantienen su estabilidad a pesar
de los años. Se ubica, como dicen los choferes, “a 5 soles y 15 minutos” de Nasca.
En el lugar habitan 300 personas que cooperan para cuidar sus acueductos, verdadera
hazaña de ingeniería hidráulica con la que los nascas resolvieron el problema de tierras
eriazas de la costa sur.

“Ya todo está listo. El acueducto limpio, gracias a la intervención de la comunidad, al


comité de usuarios y de instituciones como la Municipalidad Provincial de Nasca, el
Ministerio de Cultura y la Administración Local de Agua Grande”, anunció el
presidente de la Asociación del Centro Poblado, Luis Gutiérrez Sánchez, aquel 14 de
mayo, cuando a las 2 de la tarde empezó el Yaku Raymi.

Ayni en escena

Antes de la ceremonia, la población se dedica a la limpieza, ofrenda y recolección de


objetos. Esta práctica transmitida por los antiguos peruanos es un reflejo del ayni,
actividad en la que la población coopera para la limpieza de sus acueductos.

Cada poblador nasqueño se organiza para cumplir con su turno de trabajo y rendir
tributo a este sistema hidráulico.

En el pueblo, la gente recibe a los más de 2,000 turistas con platos típicos de pallar y
chicharrón mientras se espera la fiesta. Unos minutos después la gente abre filas a los
músicos vestidos como los nascas; es cuando la ceremonia se inicia.

La ceremonia

Ochenta hombres y mujeres integran la caravana ceremonial, como


danzantes y súbditos. Se trata de alumnos del Instituto Superior
Tecnológico Nasca. Ellos trotan, con sus vestimentas nasqueñas, al ritmo
de quenas, zampoñas y tambores, junto al señor nasca y su colla.

El señor nasca inicia el ritual al dios creador Kon recitando plegarias y


cánticos en quechua. Sobresale su respeto por la cultura Nasca y los apus,
dioses representados por montañas, lagunas, ríos, cóndores y pumas.

“Los sabios nascas entendían la importancia del agua para la producción


agraria y las necesidades de la vida diaria; valor y conocimientos que se
transmitieron de generación en generación por medio del arte, la cerámica
y la ingeniería hidráulica”, comenta el profesor Zenón Gallegos Ramírez,
quien representa al señor nasca.

Para él, participar en el Yaku Raymi es identificarse y sentirse orgulloso


por esta riqueza ancestral. “Es manifestar nuestra gratitud por tan
importante legado como los acueductos, que continúan aportando el líquido
vital para nuestros sembríos de camote, pallar, papa y otras especies. Los
dioses nascas nos siguen cuidando y bendiciendo”, dice

S-ar putea să vă placă și