Derechos patrimoniales y extrapatrimoniales

El artículo 15, elípticamente, nos proporciona un concepto del patrimonio al decir que “Las
personas son titulares de los derechos sobre los bienes que integran su patrimonio”, de
manera tal que es coincidente con el artículo 2312 del Código Civil de Vélez Sarsfield que
textualmente decía en el último párrafo que “… el conjunto de los bienes de una persona
constituye su patrimonio”. Los bienes pueden ser: (i) objetos materiales de valor económico
denominados cosas (art. 16); y (ii) bienes que no son cosas que constituyen los objetos
inmateriales.

Es coincidente entre los autores sostener que el único objeto posible de los derechos reales
son las cosas. No obstante el CCCN en el último párrafo del artículo 1883 parece ampliar el
concepto al decir: “El objeto también puede consistir en un bien taxativamente señalado por la
ley”. Pero, ¿qué son las cosas? Si hacemos un mínimo recorrido histórico de esta noción, se
concluye que, lejos de tener un tratamiento uniforme en los distintos derechos, su
conceptualización ha dado mucho de qué hablar a la ciencia jurídica. La noción de cosa parte
del concepto de entidad perceptible por los sentidos, comienza con la percepción material. En
principio, no existe una categoría genérica, por el contrario, solo existen cosas singulares y
determinadas. Se habla de corpora antes que de res para hacer referencia a la materialidad
corpus o corpora en la cosa tangible. Los romanos utilizaron los términos familia y pecunia
para indicar categorías de ellas, no cosas singulares. Las cosas materiales constituyen para los
romanos el núcleo central de la categoría y es por ello que asientan la base del dominio y de
los derechos reales sobre ellas. La evolución de este derecho motivado por el desarrollo de la
economía y el de las relaciones jurídicas impuso la necesidad de extender la primitiva idea. La
palabra res va desplazando a corpora, familia y pecunia, siendo su alcance más comprensivo.
Dentro del vocablo res se distinguen las res corporales que se corresponden con las antiguas
corpora y las res incorporales que son nuevas entidades tomadas en consideración por la ley
como objeto de relaciones jurídicas (ya existentes, pero ahora equiparadas a las corpora en la
noción de res). Las res corporales constituyen una categoría cerrada y su noción continúa
inmutable hasta nuestros días, mientras que las res incorporales conforman una categoría
abierta que se desarrolla en conexión con el desenvolvimiento de la economía y de las
relaciones jurídicas. Para los romanos, las res incorporales son cosas quae tangi non possunt,
que no pueden percibirse con nuestros sentidos pero sí con nuestra inteligencia. En realidad,
para los romanos las res incorporales no eran otra cosa, valga la redundancia, que los
derechos. No obstante, existe una fuerte corriente doctrinaria que limita la noción de cosa a
las cosas materiales, como es el caso de nuestro CCCN y también del Código alemán, y que es
fuertemente criticada por limitar la noción al ámbito de la propiedad o de los derechos reales,
y concluir que los demás derechos no pueden tener a las cosas como objeto. Paralelamente se
emplea la palabra bien o bienes que abarca a las cosas pero las excede. Así, se trata de un
problema terminológico, puesto que los autores y Códigos que cierran el concepto de cosa al
objeto material, colocan a su lado otra categoría denominada bienes inmateriales que de
alguna manera nos retrotrae a la vieja clasificación romana de cosas corporales e incorporales.
Es posible, si se quiere, distinguir bienes de cosas, entendiendo los primeros como utilidad, y
los segundos, como objeto, las cosas inmateriales serán siempre bienes o cosas, según el
distinto punto de vista. La noción o concepto de cosa es utilizada permanentemente por los
Códigos y por la ciencia jurídica, por lo tanto, es un concepto jurídico. Desde el punto de vista
del derecho positivo, cosa es cualquier entidad, material o inmaterial, que sea jurídicamente
relevante; esto es, que sea tomada en consideración por la ley, en cuanto constituye o puede
constituir objeto de relaciones jurídicas. Cosa es la referencia objetiva del derecho subjetivo.