Universidad Panamericana del Puerto

Facultad de Ciencias Económicas y Sociales

Cátedra de Planificación Estratégica Operativa

LA ECONOMIA CREATIVA EN LOS INDICADORES MACROECONOMICOS

Autor:
Edgar Otero
Profesor:
Luis Gómez

Puerto Cabello, 24/06/2020

INTRODUCCION

Actualmente es perceptible para la sociedad su enfoque en el desarrollo económico a través de

actividades productivas que permiten individualmente el hacer vida a los individuos que de ellas se
mantienen. Las personas aportan alguna labor principalmente con el interés individual de
subsistencia muchas veces sin darse cuenta la incidencia que tienen en un ámbito mas grande como
la macroeconomía, por ello prospera la necesidad de regulación por parte del Estado a través de
políticas cuyo norte debe ser generar equilibrio y bienestar. Aunque las actividades productivas
dependerán del país de estudio, es posible segmentarlas para su mayor análisis y hace visible
factores comunes en cualquier territorio, uno de estos es el valor humano manifestado a través del
Arte y la Cultura como actividades comerciales, cuyos origienes datan incluso desde los inicios de
nuestro conocimiento como especie. Hoy en día resulta que estas manifestaciones son consumidas
por la sociedad y se les atañe un valor comercial, aportando crecimiento económico con su compra-
venta, esto ocasiona que su incidencia sea un interesante y útil objeto de estudio por lo cual el autor
Felipe Buitrago Restrepo le ha denominado “La Economía Naranja”, la cual define en su obra como:

“Es el conjunto de actividades que de manera encadenada permiten que las ideas se transformen
en bienes y servicios culturales, cuyo valor está determinado por su contenido de propiedad
intelectual. El universo naranja está compuesto por: i) la Economía Cultural y las Industrias Creativas,
en cuya intersección se encuentran las Industrias Culturales Convencionales; y ii) las áreas de
soporte para la creatividad.”

El referido autor infiere que estas actividades comerciales consisten en ideas que se transforman en
creaciones y aunque hace referencia al valor de estas para convertirse incluso en productos
científicos, al referirnos a la propiedad intelectual, se enfoca en los productos con carácter cultural,
en consecuencia es menester que el Arte se refiere a capacidades o habilidades para manifestar
ideas o emociones con fines estéticos y comunicativos; así mismo se den entender la cultura como
un conjunto de costumbres, actividades, conocimientos, creencias y pautas conductuales que atañen
a segmentos sociales.

Dicho esto desarrollaremos brevemente en las siguientes paginas como estos bienes y servicios se
relacionan con las magnitudes económicas y las políticas de nuestro país.
El Estado Venezolano reconoce la cultura como un Derecho fundamental, aceptando con ello que
todo individuo que haga vida en esta sociedad es libre de efectuar practicas inherentes al
conocimiento y costumbres comunes Venezolanas para relacionarse con los demás, incluyendo esto
las actividades de sensibilidad artística, este Derecho fundamental se encuentra consagrado en
Nuestra Carta Magna en su capitulo VI.
‘’Artículo 98 La creación cultural es libre. Esta libertad comprende el derecho a la inversión, producción y divulgación de la
obra creativa, científica, tecnológica y humanística, incluyendo la protección legal de los derechos del autor o de la autora
sobre sus obras. El Estado reconocerá y protegerá la propiedad intelectual sobre las obras científicas, literarias y artísticas,
invenciones, innovaciones, denominaciones, patentes, marcas y lemas de acuerdo con las condiciones y excepciones que
establezcan la ley y los tratados internacionales suscritos y ratificados por la República en esta materia

Artículo 99 Los valores de la cultura constituyen un bien irrenunciable del pueblo venezolano y un derecho fundamental que
el Estado fomentará y garantizará, procurando las condiciones, instrumentos legales, medios y presupuestos necesarios. Se
reconoce la autonomía de la administración cultural pública en los términos que establezca la ley. El Estado garantizará la
protección y preservación, enriquecimiento, conservación y restauración del patrimonio cultural, tangible e intangible, y la
memoria histórica de la Nación. Los bienes que constituyen el patrimonio cultural de la Nación son inalienables,
imprescriptibles e inembargables. La ley establecerá las penas y sanciones para los daños causados a estos bienes.

Artículo 100 Las culturas populares constitutivas de la venezolanidad gozan de atención especial, reconociéndose y
respetándose la interculturalidad bajo el principio de igualdad de las culturas. La ley establecerá incentivos y estímulos para
las personas, instituciones y comunidades que promuevan, apoyen, desarrollen o financien planes, programas y actividades
culturales en el país, así como la cultura venezolana en el exterior. El Estado garantizará a los trabajadores y trabajadoras
culturales su incorporación al sistema de seguridad social que les permita una vida digna, reconociendo las particularidades
del quehacer cultural, de conformidad con la ley.

Artículo 101 El Estado garantizará la emisión, recepción y circulación de la información cultural. Los medios de comunicación
tienen el deber de coadyuvar a la difusión de los valores de la tradición popular y la obra de los o las artistas, escritores,
escritoras, compositores, compositoras, cineastas, científicos, científicas y demás creadores y creadoras culturales del país.
Los medios televisivos deberán incorporar subtítulos y traducción a la lengua de señas, para las personas con problemas
auditivos. La ley establecerá los términos y modalidades de estas obligaciones’’

En la normativa transcrita se puede evidenciar que en el desarrollo de este Derecho, el Estado se

obliga a fomentar el desarrollo de la cultura no solo a través de recursos monetarios, sino también a
través de políticas de respeto a la diversidad cultural, inclusión de medios de divulgación privados
en el ejercicio de esta labor y protección a los individuos de este sector con observancia en sus
derechos de propiedad intelectual. Este aspecto social se desarrolla a través del Decreto con Rango,
Valor y Fuerza de Ley Orgánica de la cultura, donde se desprenden las principales actividades
culturales concebidas por el Estado, tales como Artesanías, Turismo, Literatura, Cinematografia,
Historia, Artes Visuales, Artes Escenicas y Música. En la referida norma se evidencia como el Estado
cuenta con las previsiones legales para promover, difundir, proteger, incentivar y organizar al artista
y cultor, a través de instrumentos tales como fondos concursables, créditos especiales, bolsas de
trabajo, premios y reconocimientos.

Asi mismo, existen infinidad de actividades artísticas y cultura inherentes a nuestra identidad
Venezolana o externas a nuestras fronteras que pueden formar parte de nuestro entorno nacional.
Todas estas actividades pueden ser concebidas como bienes y servicios comerciales dado su
potencial recreativo para las personas y por ende formar parte de la economía de un país.
Adicionalmente, en el desarrollo de estas, se requieren de recursos como insumos y productos cuya
compra-venta también forma parte del segmento creativo de la economía y por ende su manufactura.

Por otra parte el Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley Orgánica de Turismo establece el
propósito del Estado de formular, planificar, dirigir, coordinar, evaluar y controlar las políticas, planes,
programas, proyectos y acciones estratégicas destinadas al desarrollo sustentable del territorio
nacional como destino turístico, orientado al mejoramiento de la calidad de vida del Pueblo
venezolano y a potenciar la participación y el protagonismo de las comunidades en la actividad
turística. Es deducible nuestro interés de ser como país un destino turístico, a sabiendas de que
existen naciones cuya principal fuente de ingresos se basa en esto, permitiendo administrar un
oneroso fondo para el Gasto Publico.

Indicadores Macroeconómicos y la Economía Creativa:

Habiendo concebido el valor comercial de las actividades artísticas y culturales, podemos deducir su
incidencia en los principales indicadores de la economía, tales como:

Producto Interno Bruto:

Consiste en una magnitud que cuantifica y expresa en valores monetarios la cantidad de bienes y
servicios producidos en un país, tanto por factores internos como externos durante periodos
determinados, lo cual permite calcular el crecimiento económico de un país.

Se puede calcular con la siguiente ecuación:

PIB = C + I + G + (X - M).

En donde: C respresenta el Consumo, I representa Inversion, G representa Gasto Publico, X

representa las exportaciones y M las importaciones.

Definido lo anterior, podemos afirmar que el consumo, producción, compra, venta y manufacturas
de bienes y servicios del sector creativo genera incrementos en el PIB al relacionarse con cada uno
de sus factores, a manera de hacer una vinculación mas visible se exponen los siguientes ejemplos:

Consumo: Compra de Boletos para conciertos musicales.

Inversion: Pago a un diseñador grafico para la creación de logo por parte de una pyme.

Gasto Publico: financiación para el desarrollo de eventos culturales

Exportaciones: Servicio de diseño web prestado desde el país hacia empresa foránea.

Importación: Compra hacia el exterior de equipos tecnológicos para el dibujo digital.

Empleo:

Mide el grado/nivel de ocupación de la población permitiéndole poseer ingresos. Se puede calcular

con la siguiente Ecuación: PEA = PE + SE + DE

Donde P.E Pleno Empleo, S.E subempleo, D.E Desempleo.

Con respecto a este indicador, se puede afirmar que en la medida en que mas cantidad de personas
den un enfoque comercial a sus dones artísticos será mayor la cifra de subempleados y por ende
incrementara la participación de la población en las actividades productivas. A su vez mientras
proyectos creativos sean formalizados comercialmente, pueden generar fuentes de empleos.
 CONCLUSION

La economía creativa es un sector subestimado a lo largo de los años donde comúnmente se ignora
la capacidad que poseen los artistas y cultores en generar riquezas. Es evidente que a pesar de que
existe la intención legislativa de fomentar estos sectores, no hay suficientes esfuerzos para concretar
esto lo que lleva a pensar que para el Gobierno no son consideradas como actividades productivas,
de hecho, no existen publicaciones oficiales de cifras donde se compute la capacidad productiva de
este sector. Por lo cual en nuestra cultura es común generar riquezas laborando para otros tipos de
sectores. Cabe destacar que la situación económica actual ocasiona que el gasto publico sea
orientado a prioridades alejadas del sector de estudio, donde urge mas invertir en alimentación y
medicinas de manera inmediata que realizar una inversión a largo plazo para fomentar actividades
como el turismo, o fomentar mediante el estudio publico de las artes. Esto ocasiona que las personas
que siempre se han dedicado al Arte y la Cultura como carrera u oficio, exporten bienes y servicios
creativos para obtener mayor rentabilidad, esto se consuma en el incremento de emigración de
talentos y proyectos creativos, así como en el teletrabajo. Dicho todo esto se puede concluir que
visto que el sector creativo influye en la productividad de un país, sería una inversión positiva a largo
plazo para el Estado por cuanto el desarrollo comercial de estos talentos genera ingresos tributarios;
bienes artísticos que incluso son gravados por alícuotas suntuarias del IVA, el comercio de los
recursos necesarios para estas actividades no están exentas del IVA, las personas que se dedican
a este ramo son contribuyentes del ISLR.
 BIBLIOGRAFIA

MACROECONOMIA BASICA, 2017, DIEGO PROAÑO Y LUIS LOZADA

LA ECONOMIA NARANJA: UNA OPORTUNIDAD INFINITA, 2013, LUIS BUITRIAGO.