En general considero que la película “el origen” encierra gran trama, el uso de gráficos

dentro de la misma es espectacular; dentro de la película podemos observar cómo se

explora temáticamente las diferencias entre nuestra percepción del mundo que nos rodea y
el mundo que realmente es; en el fondo, todos estamos atrapados en nuestros propios
sueños, tal como lo hizo Cobb. No hay ningún tótem que pueda ser usado para confirmar la
realidad. A veces nos quedamos atascados en un mal sueño, como la experiencia de Cobb
en la mayor parte de la película, donde se castigaba a sí mismo, alejándose del mundo de la
felicidad por su culpa. Incluso cuando subimos un nivel, el despertar de un sueño-
desilusión, iluminación, despertar- sigue siendo solo un sueño. Tal vez al final podríamos
hacer lo mejor para aprender de Cobb, aprender a deshacernos de nuestro tótem, nuestra
necesidad de verdad, el deseo interminable de validación o reconocimiento o valor, y
darnos permiso para perdernos en el sueño feliz. En cierta forma, es una película un poco
confusa de comprender en muchos aspectos, ya que conlleva gran variedad de sueños uno
dentro del otro, y a veces es difícil determinar en que momento se habla de la realidad y en
cual se esta soñando, tal como le ocurrió a la esposa de Cobb, quien termina suicidándose
por el hecho de que no se encontraba en si misma, no sabia si soñaba o estaba en el mundo
real.

Al principio de la historia gira la tapa y se pone una pistola en la cabeza, mostrando que
claramente tiene algunos problemas con la realidad y su percepción de ella. Al final, sin
embargo, Cobb gira la tapa y se aleja. Por eso no importa si todo fue un sueño o no... lo
importante es que se niega a dejarse llevar más por ese tema. Ha adoptado una nueva forma
de apreciar su mundo y ha triunfado en el proceso.

Dentro de la historia se desarrolla una temática analógica sobre el pensar sobre el sueño; al
hablar de los diferentes niveles de sueños en “Origen” Cobb y el su grupo usan la
profundidad como una forma de distinguir los niveles. La realidad es el nivel de la
superficie y nuestros sueños están un nivel por debajo. Si tenemos un sueño dentro de ese
sueño, es aún más profundo, y así sucesivamente hasta el Limbo, que es lo más profundo
que podemos llegar.
Para solidificar aún más la analogía, Cobb le dice a la proyección Mal que verá a sus hijos
reales "arriba" como si el mundo real estuviera muy literalmente encima de él, aunque en
ese momento esté ubicado en el mundo real y sólo su mente haya viajado.