Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
Las fibras son controladas por el sistema nervioso, que a través de impulsos
eléctricos ordena la contracción o el relajamiento del músculo, ya sea de manera voluntaria (como
los movimientos de las extremidades) o de manera pasiva (como los latidos del corazón).
La mayoría de los músculos se encuentran unidos al hueso mediante un tendón, un tejido grueso y
resistente que soporta las tensiones y los impactos del movimiento impidiendo que se produzcan
daños a las fibras o que éstas se separen del hueso.
Extensibilidad: Es la facultad de estiramiento; cuando las fibras musculares se relajan tras una
contracción (acortamiento) pueden estirarse más allá de su longitud de descanso.
Plasticidad: Es la capacidad del músculo para modificar su estructura en función del trabajo que
efectúe, produciéndose una adaptación debida al entrenamiento.
Funciones de los músculos.
Postura: Es la posición adoptada por alguien en un cierto momento o respecto de algún asunto. En
un sentido físico, el concepto de postura este asociado a la correlación entre las extremidades y el
tronco a las posiciones de las articulaciones.
Funcionamiento.
Ese movimiento se consigue de dos formas, de forma voluntaria por indicaciones de las neuronas
motoras o de forma involuntaria, que lleva al funcionamiento de diferentes órganos e incluso los
reflejos del cuerpo humano, que son respuestas automáticas e involuntarias ante estímulos
específicos.
Los músculos necesitan actividad para mantener sus fibras saludables, si no existe actividad
alguna se da la hipertrofia, se atrofian y pierden masa muscular.
Por el contrario, cuando los músculos se exponen a un sobre esfuerzo se hipertrofian, crecen las
células musculares y por tanto, las fibras musculares aumentan de tamaño.
Como hemos explicado antes, la actividad motriz de los músculos hace posible el funcionamiento
del corazón, los vasos sanguíneos y linfáticos, los pulmones y bronquios, el estómago y los
intestinos, la vejiga y el útero.
Los músculos hacen posible el funcionamiento de órganos tan importantes como el corazón, los
vasos sanguíneos y linfáticos.