Les diré mi opinión sobre éste mundo, trataré de ser lo más honesto posible desde

mi perspectiva; tengo claro que todos los dioses que dicen que existen, Jehová,
Alá y todos los demás son inventados por la humanidad para no sentirse sola y
tener algo que intente explicar la desazón que vivimos aquí en el orbe, también
fueron inventados para continuar la carnicería, para que el sadismo tuviera una
razón de ser, nos gusta matar, porque no tenemos argumentos para demostrar lo
que decimos creer. Así ha sucedido durante milenios, las iglesias han tratado de
convencer a sus opositores por medio de ejemplos como la hoguera y han usado
los métodos más crueles de tortura para hacerse entender.

Suponiendo que nuestra especie se vaya a extinguir, sucederá que todas esas
divinidades van a desaparecer, por haber sido creadas por el bípedo, con lo que
quedará, la posibilidad de un ente superior incognoscible, en el caso de que sea
un ser, es un lunático el que diseñó éste universo, pues debió saber que la
perversidad iba a existir porque somos curiosos, y entonces se iban a presentar
todo tipo de crímenes. De cualquier manera sólo un demente nos puede poner
terminaciones nerviosas en todo el cuerpo para poder sufrir de la manera más
espantosa posible. También solamente un maniático permitiría que el género
humano se reproduzca por medio del placer sexual, porque de ahí surgen los
violadores.

De ese ser o seres, que desconozco, no quiero saber nada, pues no nos dieron la
posibilidad de elegir realmente entre lo bondadoso y lo malévolo, seamos
realistas, simplemente nos estructuramos en una sociedad que nos va diciendo
qué debemos hacer. Todo lo que nos prohíben nos llama la atención, lo que es
socialmente ilegal nos atrae, tenemos una naturaleza pecaminosa que nos
conduce hacia ese tipo de cosas. En el caso de que no exista un personaje
divisando nuestras vidas, sería profundamente doloroso, pues no tendríamos a
quién reclamarle por toda la devastación que vemos diariamente.

Puedo imaginar que los humanos, somos el resultado de otra especie que es
superior, una clase muy inteligente que nos creó y nos condenó a vivir en la Tierra,
si ésta es la verdad, juegan con nosotros, con nuestros sufrimientos. Me he
planteado la posibilidad de crear una especie como la nuestra por experimentos
científicos, (imposible, esto es la más absurda ficción e inmoral), así podríamos
verificar que la humanidad no es tan grandiosa como pretenden que la veamos,
hacia allá deberían dirigirse todos los ensayos de la ciencia, retando a las
divinidades, mostrando que quizás podemos ser más capaces que ellas, y si lo
creado surgió de la nada, con más ánimo podríamos superar la vida como ha sido
dispuesta.
No me asombra nada de lo que veo en éste universo, es como si hubiera sido un
trabajo mal hecho, corríjanme si les parece adecuado tener éste cuerpo con
tejidos ectodérmicos que complejizan nuestros sentimientos de dolor, además de
tener que matar a los animales para alimentarnos, en adición a esto nos volvimos
cosas y números que nacen, crecen, se reproducen y mueren, igual que los
animales. ¿Dónde queda lo que sentimos cuando nos morimos? Por éste tipo de
cosas es que después de vivir 25 años en el mundo de la incoherencia he decidido
oponerme al cosmos en todos sus niveles, no me interesa la política, la ciencia, la
revolución, el arte, la filosofía, la psicología, la psiquiatría, la ecología, la religión,
la economía etc.

Tengo fe en la humanidad, de que algún día se va a dar cuenta de que puede

haber un mundo mejor, pero primero hay que acabar con éste; imaginemos un
universo en el que no haya necesidad de comer y beber ni de ir al baño (¡cuántos
se salvarían de morir de hambre, sed y por ejemplo, de enfermedades diarreicas!);
Que no haya muerte, no sé si se han planteado esa posibilidad (que la vida eterna
fuera una realidad y no una conjetura), que nuestro sistema nervioso fuera mucho
más sencillo y no tuviéramos que sufrir tanto.

Así podríamos extender una lista de imaginaciones que son como quejas ante lo
que existe, mientras sigamos subyugados a ésta realidad, seguirá la matanza,
pero nos fue otorgada la razón con la que tenemos la posibilidad de vencer.
Cuando te admires debido a la naturaleza, date la oportunidad de decir: ¡Qué
mediocridad!