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y la adolescencia de estudios
psicológicos
Unidad didáctica 1: Aspectos evolutivos básicos de las principales áreas del desarrollo
• La vida del niño consiste básicamente en explorar y conocer su propio cuerpo. El niño
mira su mano, juega con sus dedos, se agarra los pies. Más adelante, progresivamente,
sonríe cuando ve su imagen en el espejo, palmea en este, acaricia la figura reflejada y
mira el movimiento de la mano reflejada en él. A los tres meses reconoce a su madre. A
Primer año los ocho se aparta de los extraños. Hacia los nueve meses responde a su nombre.
• El niño de un año tiene un sentido fragmentario de la identidad personal y casi ningún
sentido de posesión personal. Al año y medio ya empieza a diferenciar entre tú y yo, y
pide lo mío, aunque sin un sentido muy claro de la posesión. Hacia el final de esta etapa
empieza a llamar nene a los otros niños.
• Ampliación del sentido de sí mismo y mayor comprensión de que los otros son
entidades separadas con las que tiene cosas en común y diferencias.
• Se muestra ansioso por crecer.
4 años
• Es una interesante combinación de independencia y sociabilidad.
• Tiene facilidad para encontrar pretextos. La fama de embustero de esta edad viene dada
por su incapacidad para realizar una distinción realista entre verdad y fábula.
• Acepta como cosa natural a los demás y a sí mismo. Está seguro de sí mismo y confía en
los demás.
• Es bastante independiente y puede adaptarse a un tipo simple de cultura.
• La madre es el centro de su universo, con la que está estrechamente vinculado y con
5 años la que se halla seguro. Le gusta que le cuenten historias sobre la propia infancia de su
madre.
• Es bastante realista con sus posibilidades. Le gusta imitar la conducta de los adultos.
Empieza a preparar y planear los acontecimientos del futuro, ya no espera pasivamente a
que ocurran. Pero vive fundamentalmente el presente, y su principal interés radica en sus
propias experiencias inmediatas.
• Está en camino de adquirir una mayor conciencia de sí mismo. Parece que no oye a los
demás cuando le hablan porque está absorto en sí mismo, parece vivir en “otro mundo”.
• Teme perder la propia identidad, por ello puede desagradarle que le corten el pelo o le
compren ropa nueva. Teme que los demás no le quieran, le preocupa lo que puedan
pensar de él, puede pensar que ha sido adoptado, que no pertenece a su familia.
• Siente que la gente es mala e injusta.
7 años
• Su mundo se ensancha y trata de situarse en el mundo social y físico y esto explica en
parte su necesidad de tener su propio lugar en cada uno de los ambientes en los que se
halla, en la mesa del comedor, en el coche, en el escritorio, etc.
• Es consciente de su cuerpo y se vuelve pudoroso.
• No es demasiado realista y espera mucho de sí mismo. Pero es prudente en su
acercamiento a todo lo nuevo.
• Tiene ya una conciencia creciente de sí mismo como persona. Piensa acerca de “sí
mismo”. Está en proceso de convertirse en un individuo, en un miembro del mundo
social. Habla de sí mismo con mayor libertad.
• Los padres empiezan a pensar que tiene su propia “personalidad”; por ejemplo, ven que
sus expresiones faciales y gestos son “de él”. Tiene clara conciencia de sus diferencias con
los demás.
8 años
• Le disgusta que le traten como a un niño y quiere ser como el adulto y saber tanto como
él, está impaciente por crecer. De todos modos, puede encontrarse en una lucha interna
entre crecer y seguir siendo como es.
• Aumentan los contactos sociales, se interesa por las personas y lugares distantes en el
tiempo y en el espacio.
• Intenta vivir según las normas de los demás.