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CONCIENCIA MORAL

Es la capacidad de juzgar un acto humano propio o ajeno, con relación a una norma

moral.

La conciencia moral es el juez que juzga el acto moral; es inapelable, es soberana. No

puede ser conculcada porque es autónoma. Es el imperativo kantiano que percibimos

como algo interno que no procede del exterior, obliga a todo ser humano, y no promete

ningún beneficio distinto a la satisfacción. Por esto Spinoza dice que el premio de la virtud

es la virtud misma.

Por la conciencia moral yo me percibo como sujeto moral, como responsable de mis

actos.

La conciencia moral no es absoluta, sino que está condicionada por la genética y el

ambiente físico y cultural. Cada época y lugar da sello particular a la conciencia moral de

los individuos. Pero no puede volverse la conciencia moral una mera caja de resonancia

de estímulos externos. Estos pueden variarla, pero el núcleo primordial de juzgar el bien y

el mal no varía. La conciencia, podríamos concluir, no es absolutamente autónoma ni

tampoco enteramente heterónoma.

La conciencia moral puede deformarse por culpa del individuo o de la sociedad; pueden

darse unas estructuras sociales corruptas que deformen la conciencia moral de los

ciudadanos. También la conciencia moral puede "opacarse" y una persona o una

sociedad "desensibilizarse", es decir, perder la capacidad de percibir los valores morales.

Donde todos los días se asesina, la comunidad va perdiendo la capacidad de asombro, de

indignación.

La conciencia moral puede equivocarse, ya que depende de la racionalidad, del juicio; si

se equivoca en la percepción o en el planteamiento de los términos, puede errar en el

juicio moral.
Cada persona debe tener sensibilidad moral, es decir, capacidad para percibir los valores

morales. Esta sensibilidad se suele manifestar de tres formas:

Resentimiento: Es cuando padezco una falta moral. Es un sentimiento que no debemos

reprimir porque muestra que somos sensibles a los valores morales, sintiéndonos

ofendidos cuando somos víctimas de una agresión moral.

Indignación: Cuando una persona tiene sensibilidad moral y observa que se comete una

falta moral, siente indignación. Por el contrario, si se falta a la moral y no hay sensibilidad

a los valores morales, no se siente indignación aun si se cometen crímenes atroces.

Culpa: Cuando yo cometo una falta moral, desarrollo el sentimiento de culpa como

manifestación de que mi conciencia me juzga por el acto hecho. Es el remordimiento que

produce el sentimos culpables.

La conciencia sólo se da en sociedad porque en ésta es donde el ser humano sabe qué

es lo malo y qué es lo bueno(1).

La conciencia moral interior de la moralidad

Partamos de un hecho. Dos personas contemplan la misma acción moral. Por ejemplo:

alguien se arroja a un río tormentoso para salvar la vida de otra persona que se está

ahogando. Una de ellas capta la majestad del valor, objetivo que en este caso es

"arriesgar la propia vida por el prójimo". Otra persona puede juzgar que es una idiotez

exponerse al gran peligro de perder la vida para salvar la vida de otro.

La conciencia moral de ambas personas implica dos elementos:

Primero: la capacidad de valorar el acto de sacrificio. Esta capacidad recibe el nombre de

"norma interior de la conciencia".

Segundo: la capacidad de aprehender el valor objetivo de la acción. En nuestro ejemplo:"

Dar la vida por el prójimo".


En el primer caso de nuestro ejemplo, hay adecuación entre "la norma interior de la

conciencia" y el "valor objetivo".

En el segundo caso, la "norma interior de la conciencia" no está de acuerdo con el "valor

objetivo". ¿A qué se debe esta diferencia?

En el primer caso la norma de la conciencia interior está bien formada y es capaz de

captar el valor objetivo En el segundo caso, el egoísmo deformó la conciencia moral, lo

cual impide captar el "valor objetivo". De lo dicho fluye lógicamente que la conciencia

moral debe ser formada para captar los valores objetivos y de esta manera proceder

correctamente.

Dicha necesidad es tan antigua como el hombre. Sin embargo, en los tiempos actuales,

dicha necesidad se acentúa poderosamente. Asoma la pregunta ¿Por qué? Hoy más que

nunca se pone en duda los auténticos valores y muchas veces se los desvirtúa. Ejemplo:

bajo la apariencia de ayudar a los pobres se siembra el odio y se propaga la "lucha de

clases".

Los valores absolutos se relativizan sustituyéndose a Dios.

La verdad es reemplazada por la mentira para conseguir determinados fines(2).

Bibliografía:

1. Vélez Correa L, Sarmiento Díaz J. Etica médica. Medellín, Colombia: Corporación

para investiaciones biológicas; 2003.

2. Lafuente H. Ética: La Conciencia Moral [Internet]. Apocatastasis.com. 2020 [cited

19 July 2020]. Available from: https://www.apocatastasis.com/conciencia-

moral.php

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