INTRODUCCIÓN.

¡Este es el salmo de la añoranza!

En él se respiran aires de las profundas añoranzas del pueblo de Dios que desea
de nuevo estar en el templo.
Pero también aplica para el creyente de hoy, que por motivo de la pandemia no
puede asistir a sus congragaciones. Y cuyo corazón se consume con el deseo de
reunirse con sus hermanos.
Hoy en día en el que esta pandemia nos ha puesto obstáculos y dificultades y nos
ha impedido asistir a nuestras congragaciones. Hoy en día que vemos las puertas
cerradas de nuestros templos. También estamos experimentando una añoranza
similar a la descrita en el salmo 84, añoranza por la casa de Dios, <<anhela mi
alma y aun ardientemente desea los atrios del Señor>>, ¿pero qué es lo que
realmente se añora? No es tanto el edifico material, más bien es la oración, el
canto, la enseñanza, la predicación, la comunión, estas cosas son las que se
extrañan.
Los altares, las vigilias, las diferentes reuniones, todo esto se extraña y se añora.
Añorar es recordar con pena la ausencia o privación de algo muy querido
(rae). En este caso las congregaciones de las que nos hemos visto privados.
Pero a pesar de esto, del anhelo de volver a participar del disfrute de las
actividades en la iglesia, no se debe perder de vista lo fundamental y más
importante: y para ello cito las palabras del gran comentarista Matthew Henry: “Si
no podemos ir a la casa del Señor, podemos ir por fe al Señor de la casa; en él
seremos felices, y puede ser fácil”.
El acceso a Dios no está cerrado, hay puertas abiertas, no te prives de ir a Dios
cada día. Así que, permanezcamos tranquilos y confiados en El señor, que pronto
diremos como el salmista: Alabaré a Jehová con todo el corazón En la compañía
y congregación de los rectos. (Salmo 111:1)
El salmo 84 es descrito por Charles Spurgeon como “La perla de los salmos”
el mas dulce de todos los salmos de paz.
El salmo 84 era el salmo perfecto para expresar los sentimiento tristes y
apesadumbrados de aquellos fieles que por alguna causa se habían visto
excluidos del peregrinaje al tabernáculo o se les hubiera prohibido participar en el
culto devoto de la congragac
I. CUÁN AMABLES SON TUS MORADAS, OH JEHOVÁ DE LOS EJÉRCITOS!
(VR. 1)
a. Los que ven algo especial en las moradas del Señor.
b. Los que no ven nada especial en las moradas del Señor.
El salmista dice: Cuan amables son tus moradas, cuan preciosas, cuan
hermosas. El salmista no dice más porque no puede, no encuentra palabras.
Sus expresiones demuestran que está absorto, incapaz de expresar sus
sentimientos. Lo único que alcanza a decir es; Vr.2 “Anhela mi alma y aun
ardientemente desea los atrios de Jehová; Mi corazón y mi carne cantan al
Dios vivo”.

Por otro lado. Están aquellos negativos que no ven en la casa del señor y los
cultos de alabanza nada “amable” o “hermoso”, estos son dignos de compasión
más que otra cosa. Como dijo Kierkegaard; “Que saben ellos de la alegría de
la fe”.
Y más aun, hay algunos que hay que arrastrarlos a la iglesia, en tanto que
David está clamando por ella.
Ignoran lo que el creyente ha experimentado: que no hay nada más alentador
y refrescante que la reunión con los hermanos para adorar a Dios.

Aplicación.
El creyente si ve en la casa de Dios una bendición invaluable. Ir a la casa de Dios
es un refrigerio en medio de este mundo vil y desbocado.
Para el creyente que tienen su afecto por las moradas de Dios estar ausente de
ellas es lamentable.
El dice junto con el salmista “cuan amadas son tus moradas”
Las moradas de dios para el creyente, para los píos resultan una atracción
excepcional y experimenta hacia ella un amor real. Tiene su afecto en la casa de
Dios
¿Ahora que es lo que hace hermosa la casa de Dios, que es lo que hace
atractiva la iglesia hoy día:? Que la presencia de Dios habita en ella!
Este precioso salmo nos habla de una serie de cosas importantes y
especiales:

1. Bienaventuranzas de estar en la casa de Dios.

2. Bienaventuranza de tener en el corazón los caminos de Dios.
3. La fuerza que en Dios tiene el creyente de cambiar el valle de lágrimas en
fuentes de agua viva.
4. La cobertura que disfruta el creyente en Dios: “Sol y escudo es el Señor”

II. LA PRIORIDAD DEL SALMISTA POR LA CASA DE DIOS.

Vr. 10 Porque mejor es un día en tus atrios que mil fuera de ellos. Escogería antes
estar a la puerta de la casa de mi Dios, Que habitar en las moradas de maldad.
Spurgeon dice: Cada uno ha de hacer su propia decisión y escoger. Lo peor de
Dios es mejor que lo mejor del diablo. La piedra del umbral de Dios es mejor lugar
para descansar que las camas mullidas de los pabellones de los magnates
pecadores, aunque puedan echarse en ellas durante toda una vida de lujos y
comodidades.
El salmista meditaba y Él pensaba que el tiempo pasado en la casa de Dios era
mejor y más valioso que el tiempo pasado en cualquier otra parte.
Le daba un valor grande al hecho de estar en la casa de Dios.

Escogería estar a la puerta. Los hijos de Coré eran los porteros de la casa de
Dios, siempre estaban en el tabernáculo. El portero es el primero que entra y el
último que sale.

No importa los sacrificios que se hagan con tal de estar en la casa de Dios.
Los peregrinajes
Los peregrinajes al tabernáculo eran grandes acontecimientos en la vida del
pueblo judío.
Familias enteras viajaban juntas, formando enormes partidas de peregrinos que
iban creciendo con la adición de nuevos peregrinos en cada hospedería.
Durante ese peregrinaje
Las familias acampaban en claros verdes y soleados, cantaban al unísono
mientras transitaban por los caminos, avanzaban con dificultad subiendo
montañas y cruzando ciénagas; pero sobre todo al caminar juntos acumulaban
memorias felices que jamás olvidarían.
Cuando se hacia el viaje
Anualmente subían a Jerusalén para participar en alguna de las grandes
festividades religiosas.

Aplicación.
Hermano, amigo, date cuenta que entre las prioridades de esta vida, el asistir a la
casa de Dios debe tener un lugar importante.
El reunirnos como iglesia es fundamental y nada sustituye ese hecho, ni las
predicas online.
Nada de eso, el congregarte es algo que nace en el corazón de Dios.
La doctrina bíblica del nuevo testamento nos dice:
- Hebreos 10:25no dejando de congregarnos, como algunos tienen por
costumbre, sino exhortándonos {unos a otros}, y mucho más al ver que el
día se acerca.
No des lugar en tu corazón a la INDIFERENCIA HACIA A DIOS Y SU casa.
 Conclusión.

¿Qué encuentras en la casa de Dios?

- provisiones atesoradas de parte de Dios.
- La compañía que se goza en ellas.
- Restauración de tu vida.

Testimonio de un hombre que se alejó de Dios y pidió se le permitiera estar ahí

en las puertas de la casa de Dios.

El salmist5a dice: Anhela mi alma. Procede de ´Ramagª, que significa lanzar

gritos agudos, en alta voz, como los soldados al comenzar la batalla: ´adelante,
adelante; o bien cuando gritan después de ganada la batalla: ´victoria, victoria,
victoria La palabra hebrea denota un grito resonante, como el de un niño que llora
porque tiene hambre; cuando esto ocurre es todo el niño el que llora: lloran las
manos, el rostro, los pies.