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El ponente de la Asamblea manifestó, que el examen de los trabajos del


Comité de Protección a la Infancia ponían de relieve que se ha preocupado de
« tener en cuenta las recomendaciones del Consejo acerca de sus métodos de trabajo.
Añadió que, al mismo tiempo que muestra su voluntad de no descuidar ninguno de
los numerosos problemas que suscita la protección a la infancia, el Comité se aplica
a permanecer estrictamente en ese terreno y a consagrar sus esfuerzos, sobre todo,
a la preparación de anteproyectos destinados a hacer posible que los Gobiernos
concluyan acuerdos suscepibles de promover progresos sociales en favor de la in-
fancia, bajo la égida de la Sociedad de las Naciones ».

4. — ESCLAVITUD (')

Sobre la cuestión de la esclavitud fueron sometidos a la Asamblea dos informes.


Uno, del Consejo, trataba de la abolición progresiva de la esclavitud y demás
situaciones análogas. Ese informe contenía datos facilitados por Etiopia, Persia,
Portugal y Sudán.
El otro, del Secretario General, se basaba en las comunicaciones de 48 Estados.
La Asamblea pudo comprobar que el número de ratificaciones o adhesiones
definitivas al Convenio sobre la esclavitud, de 1926, había pasado desde el año
último, de 29 a 34. Además, varios Gobiernos que no han ratificado todavía el Con-
venio o que no han adherido a él, se preparan a hacerlo próximamente.
Sin embargo, la Delegación británica, estimando que los métodos seguidos basta
ahora no han permitido obtener datos suficientes sobre la esclavitud, ni formar juicio
sobre el valor de las informaciones obtenidas, propuso la creación de una Comisión
permanente de la Esclavitud, cuya misión consistiría en examinar las comunicaciones
de los Estados signatarios del Convenio y proceder, en su caso, y con el consenti-
miento de los Gobiernos interesados, a encuestas sobre el terreno. La Delegación
británica veía en la creación de esa Comisión un medio de vencer las dificultades que
se oponen todavía a la supresión de la esclavitud y de la trata.
Esa proposición fué combatida por varias delegaciones. Unas invocaron razones
de principio sacadas de la concepción de la soberanía de los Estados y que les pare-
cían excluir la institución de cualquier órgano de fiscalización. Otras delegaciones,
sin querer pronunciarse definitivamente sobre el proyecto británico, lo juzgaron
prematuro, estimando que no podría condenarse ya el procedimiento establecido
por el acuerdo de la Asamblea de 21 de septiembre de 1929, puesto que el tiempo
transcurrido desde entonces era relativamente corto.
Finalmente, la Asamblea decidió por maoría de votos (once contra seis y una
abstención) aplazar provisionalemente el estudio de las modificaciones que con-
vendría aportar eventualmente al procedimiento seguido hasta aquí. Asimismo invitó
a los Estados a completar las informaciones que ya han remitido, a fin de ilustrarla
no solo sobre las condiciones que reinan en sus propios territorios, sino sobre la situa-
ción general en materia de esclavitud.

5, —- ADMINISTRACIÓN PENAL

El informe elaborado por el Secretario General de la Sociedad acerca de la mejora


de la administración penal, y la colección de las reglas para el trato aplicable a los
encarcelados preparada por la Comisión internacional Penal y Penitenciaria, sir-
vieron de base a las deliberaciones de la Asamblea sobre la reforma penal (*).
Esa cuestión fué sometida al Consejo en mayo de 1929, por una petición de la
« Howard League for Penal Reform », apoyada por diversas organizaciones. Estas
pidieron a la Sociedad, que adoptase medidas para la mejora de la administración

( I ) Véase Acuerdos de la Asamblea.


(a) Véase Bolelin Mtnsual, enero de 1930, p. 33, asi como los Acuerdos de la Asamblea.

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