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El SOLSTICIO DE VERADNO

La palabra solsticio viene del latín "solis statio", lo que se puede traducir literalmente como "Sol
parado o detenido".

(tomado de H:. Luis Alejandro Yáñez)

Los griegos, romanos o celtas celebraban la noche de san Juan con verbena, música y danzas que
incentivan a las fuerzas de la naturaleza, para influir en el destino próximo inmediato, tener
buena suerte, un amor o pedir favor o prosperidad a dichas fuerzas naturales. Para los griegos esta
fecha estaba destinada al culto del Dios Apolo, al que tributaban con procesiones de antorchas,
pidiéndole que no dejase en tinieblas a su pueblo, creían que la magia del solsticio abría las
puertas de lo incógnito y por un breve momento el hombre podría gozar del privilegio de los
dioses de ahí la leyenda griega de poder traspasar los espejos o visitar los mundos paralelos.

Todos celebraban la fiesta del solsticio, en España cuando estaban dominados por los árabes
confraternizaban los judíos, los católicos y los musulmanes en la fiesta del “sol y del fuego”, en
Alemania reunión popular alrededor de la hoguera, en Francia la hoguera solsticial era prendida
por el propio rey, los Hindúes cuyo dios del fuego “Indra”, es adorado entre fogatas y canticos
espirituales, en el caso de los Incas los dos festivales primordiales eran Capac-Raymi (o Año
Nuevo) que tenia lugar en diciembre y el que se celebraba el cada 24 de Junio el Inti-Raymi (o
fiesta del sol) justo en el momento de la salida del astro sol el Inca elevaba los brazos, exclamaba
mirando hacia el cielo para pedirle al sol que desapareciera el frio y trajera el calor, todo el
continente americano conserva este tipo de ritual.

Caldeos, egipcios, cananeos, persas, sirios, fenicios, griegos, romanos hindú, y casi todas las
culturas desarrolladas e imperios han celebrado durante el solsticio invernal el “parto de la Reina
de los cielos”, y la llegada al mundo de su hijo “El joven dios Solar”. En la mitología del culto al sol
siempre se destaca la presencia de un joven dios, que muere cada año y resucita encarnando la
vida cíclica de la naturaleza el sol representa al padre. En la antigüedad civilizada los monarcas de
todos los imperios se hicieron adorar como hijos del sol, en este contexto la antropomorfización
del sol en un dios joven presenta ejemplos bien conocidos en Horus, Mitra, Adonis, Dionisos,
Krisna, Hermes, Buda o el propio Jesús. En el antiguo Egipto se creía que Isis, la virgen Reina de
los cielos quedaba embarazada en el mes de marzo y que daba a luz a su hijo Horus a final de
diciembre. El dios Horus hijo de hijo de Osiris e Isis era la “sustancia de su padre Osiris”, de quien
era una encarnación. Fue concebido milagrosamente por Isis cuando Osiris ya había muerto y
despedazado por su hermano Tifòn, su papel entre los humanos estaba relacionado con el juicio
ya que presentaba las almas a su padre.

LOS ELEMENTOS ADORADOS

La adoración solar ha sido la base de toda expresión religiosa arcaica, desde el hombre primitivo
se le ha concedido al sol todo el poder necesario para el sustento, no solo como insumo vital de la
naturaleza, sino como inductor de los aspectos espirituales. En todas las culturas primigenias el
fuego es considerado purificador, por ello la danza alrededor y sobre el fuego no solo tiene el
poder de ahuyentar a los malos espíritus, sino de proporcionar salud y fortaleza.

El Agua es el complemento del fuego se le acompañaba con un vivificante baño en cualquier río,
estanque o el mismo mar.

El nombre de Solsticio se deriva del latín “Sol quieto” o “Sol detenido” porque durante el Solsticio,
pareciera que el Sol se detuviera y el tiempo se convirtiera en una eternidad.

En el hemisferio Norte el Solsticio de invierno o sol inmóvil es cuando a partir del 21 de diciembre
el sol alcanza su cenit en el punto mas bajo y el día empieza a alargarse poco a poco en
detrimento de la noche, el sol cambia sutilmente su declinación de un día a otro y parece
permanecer en un lugar fijo.

Los masones también festejamos la navidad, pero a diferencia de otras filosofías festejamos “el
culto de la naturaleza” celebrada en cuatro ocasiones: los dos equinoccios y en las dos etapas del
solsticio de verano e invierno de acuerdo al hemisferio norte o sur, es un tiempo de silencio de
recogimiento interior y profunda meditación.

(tomado de H:.Luis Alejandro Yañez)

Las sectas, como la religión Católica celebran la Navidad pero un nacimiento de Jesús que según
su doctrina nació para salvarnos para darnos luz y esperanza, antes de la navidad viven un tiempo
de Adviento una preparación para el nacimiento, 4 semanas de preparación en meditación y
simbólicamente prenden un cirio de color morado por tres semanas y a la cuarta rosado par
simbolizar que se acerca el tiempo del nacimiento de Jesús la noche del nacimiento se prende una
vela blanca con la diferencia que se celebra la noche del 25 de diciembre.

Para el Mason, la semilla que se pudre en el interior de la tierra esperando pacientemente a que
llegue el tiempo apropiado para germinar y brotar, son momentos simbólicos en que los Masones
nos recogemos hacia el interior de nuestro microorganismo, y advertimos nuevas verdades
morales y nuevas realidades espirituales para continuar con la obra suprema. El sol rige el
desempeño del hombre en su entorno y en esta fiesta celebramos el inicio de una nueva etapa de
nuestra vida.

Como masones vemos en el astro sol un ejemplo de nuestro deseo de ser fuentes de luz y calor
humanitario, de entregarnos a todos por igual. El solsticio de verano, momento que señala el
inicio de la fase descendente del ciclo anual y que está presidido por San Juan Bautista, "el que
debe menguar", se relaciona con la iniciación a los "misterios menores" y con la entrada en la
"caverna cósmica".
Esto, en la Masonería, está simbolizado con la iniciación del profano, el cual, tras haber sido
introducido en la cámara de Reflexión, es conducido a través de un laberinto subterráneo hasta la
entrada al Templo, símbolo del cosmos, y en el que, tras superar las sucesivas pruebas de
purificación, nacerá a un nuevo estado, muriendo así al mundo profano. Se trata del segundo
nacimiento o regeneración psíquica.

La Masonería, celebra esta fecha con un Ágape ritual, el cual consiste en una operación iniciática
cuyo objeto es transformar el alimento material en alimento espiritual. El masón, formando parte
de los tres mundos, mediante la asimilación consciente de los alimentos que los simbolizan, se
hace parte de la Naturaleza, y por su participación activa en el rito y a través del rito promueve la
obra de regeneración de la Naturaleza y la suya propia, no debemos olvidar que en el ritual de
Ágape se invoca la ayuda del Gran Arquitecto del Universo para abrir las puertas solsticiales, ya
que no es ni será por nuestros méritos propios, sino por Su Voluntad y Su Misericordia hacia
nosotros, que podremos efectivizar la iniciación recibida en el grado que a cada cual le
corresponda hacerlo.

Los festejos solsticiales y en especial este Solsticio de Verano, deben ser para nosotros
los Masones, motivo de honda meditación, por su gran y rico significado simbólico, pues debe
despertar en nuestras conciencias el deseo de ser cada vez mejores, más virtuosos, amantes del
estudio y de la Verdad, amantes de la Sabiduría; como el Sol que despertando a la gota de rocío
hace generar y vibrar a la naturaleza entera, a las flores con sus bellos colores y dulces aromas, a
los seres, a la vida.

(tomado de SIETE MAESTROS MASONES)

SOLSTICIO VERANO SAN JUAN

Desde las épocas más remotas y prácticamente en todas las civilizaciones se han festejado las
fechas en que se presentan los solsticios: en Roma, se dedicaban al Dios JANO, representativo del
Sol, quien presidía los comienzos, las iniciaciones (en latín INITIUM, INITIARE) y en particular el
ingreso del Sol en los dos hemisferios celestes.

Para entender la trascendencia de la adopción de este mito en la Francmasonería, hay que tener
presente que el mito solar, modelo a escala de la magna dinámica del Logos en el Universo, es uno
alrededor de los cuales gira integralmente la estructura simbólica masónica.

En cuanto a la recurrencia de la tradición juanítica primitiva con el esoterismo cristiano, cabe


señalar una estrecha relación, manifiesta en no pocos textos bíblicos, entre Jesús, nacido en
el solsticio de invierno y Juan Bautista, celebrado en el solsticio de Verano, relación disuelta por
razones teológicas muchos siglos después del inicio de la era cristiana, transponiendo esta
relación de Jesús con Juan Bautista a Juan Evangelista.

Según una acreditada versión a la que hacen referencia varios autores masónicos, la utilización
material del término “Logia de San Juan” dentro de la Mas:. se remonta al tiempo de las Cruzadas,
cuando algunos caballeros masones se unieron a sus similares de la Orden de San Juan de
Jerusalén, mejor conocidos como Templarios, por lo que en un gesto de solidaridad con los
principios de estos últimos, fue aceptado por los primeros. Se cuenta que de ahí en adelante todas
las logias se llamaron “Logias de San Juan”. Tal vez en forma sincrónica San Juan fue también
tomado como patrono por parte de las corporaciones que ya señalamos.

LAS ANTIGUAS COFRADÍAS. SAN JUAN BAUTISTA.

El 24 de junio de 1717 cuatro Talleres de Londres reunidos colocaron la piedra inicial de la


Francmasonería Simbólica y proclamaron a San Juan Bautista como su patrono. Persistieron las
tendencias y las antiguas leyes de las logias pretéritas y de los comienzos de la arquitectura
quedaron sus valiosas, preciadas figuras y signos emblemáticos.

Juan Bautista, salido según toda probabilidad de la secta de los Esenios (que practicaban un
ascetismo semejante a los pitagóricos) fue hijo de Zacarias y Elizabeth, ambos de linaje sacerdotal.
Nació seis meses antes de Jesús en Yutta, ciudad un poco al Oeste de Jerusalén. Pasó los primeros
años en las montañas de la parte oriental de Judea y a los 30 años se presentó como profeta.

La Masonería es fiel a las tradiciones milenarias y, en este aspecto, pone la celebración del
Solsticio de Invierno bajo la advocación de Juan el Bautista y de Juan el Evangelista el Solsticio de
Verano.

El antiguo culto al dios Jano revivió en ellos, pues este era el que presidía la entrada del Sol en uno
de los hemisferios, como genio de los comienzos e iniciaciones de la vida, de los años, de las
estaciones.

Juan significa Puerta y los solsticios junto con los equinoccios son las "puertas" de las estaciones
del año y Jano era el encargado de guardar las puertas que ocultaban el misterio.

Juan Evangelista nació en el seno de una acomodada familia de pescadores de Cafarnaúm y fue
uno de los primeros seguidores de Jesús; creador del Cuarto Evangelio, fue el único de los
apóstoles que estuvo presente en la Crucifixión.

Conclusiones:

Por tal motivo y para concluir lo que acabo de manifestar y expresar en esta síntesis del desarrollo
de mi trabajo, simplemente quiero acotar que como masones celebramos los solsticios de invierno
y verano pues en el Astro Solar mis QQHH:. Vemos un ejemplo de nuestros deseos de ser fuentes
de luz y calor humanitario, de entregarnos a todos por igual en un permanente afán de integridad.
Al igual que la marcha solar, existe en nuestro diario vivir, en nuestros trabajos, en los ascensos y
descensos y por ello es que nos educamos con la Regla de las 24 pulgadas a un pre ordenado
ritmo laboral, con constancia y responsabilidad. En su ejemplo, educamos hacia la tolerancia,
aspirando ser expresión de belleza y bondad, y nuestra Orden e inagotable en sabiduría, nos
estimula a plantearnos en el ámbito filosófico permanentes y continuas preguntas en cuyas
alegorías y símbolos sepamos encontrar respuestas, mismas que sólo lograremos con estudio,
talento y virtud.

“Así como el calor y la luz solar se ofrecen sin condición alguna a todos los hombres, así los
Masones entregamos el trabajo sin esperar recompensa mayor. Trabajamos por el placer que
hallamos en la labor realizada y en la creación regenerante, sin alarde ni ostentación. Ayudando al
necesitado, porque en el compartir nos elevamos por sobre nuestra condición humana.
Combatimos la injusticia y despertamos la adormecida conciencia de los hombres, porque los
elevados valores humanos son los únicos que tienen cabida en nuestros pensamientos y actos”.

Mi palabra VM:.

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