Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
Antes de la Entrevista
Conoce todo lo que puedas de la empresa
Repasa tus aptitudes, tu experiencia y tu formación
Lleva el currículum y conócelo a la perfección, ya que se basarán en él
Hazte una relación de tus puntos débiles y prepara argumentos para
defenderlos
Hazte una relación de tus puntos fuertes y prepara argumentos que los
corroboren
Si te citan por escrito, confirma tu asistencia
Comprueba tu apariencia (evita ropa llamativa; bien vestido/a, limpio/a y
afeitado)
Ve solo/a
Sé puntual (5 minutos antes)
Prepara la entrevista, el seleccionador va a hacerlo también
Durante la Entrevista
Crea una buena impresión. Las primeras impresiones son de gran importancia. Muchos
empresarios consideran que tras haber visto entrar por la puerta a un candidato, observar la
forma de dar la mano y sentarse, son capaces de decidir sobre su valía
Haz preguntas
Expresa tu agradecimiento
Después de la Entrevista
Analiza los resultados, anota puntos fuertes y débiles durante la entrevista...puede servirte
para próximas entrevistas en esa o en otras empresas.
Personalidad
Háblame de ti mismo
Háblame de tus actividades al margen de tus estudios/ trabajo
Cuéntame una anécdota de tu vida en la que resolvieras con éxito una
situación problemática
¿Qué gana la empresa si te contrata a ti en lugar de a otro candidato?
¿Qué elemento diferencial aportas?
Si fueras tú el encargado de realizar esta selección y yo fuera el
candidato, ¿qué cualidades te gustaría que yo reuniera?
¿Te gusta trabajar con gente o prefieres trabajar solo?
¿Te consideras como un líder o como un seguidor? ¿Por qué?
¿Cual ha sido la decisión más importante que has tenido que tomar?
Defínete a tí mismo con cinco adjetivos calificativos. Justifícalos.
¿Qué has aprendido de tus errores?
¿Acabas lo que empiezas?
Piensa en......un profesor, un amigo, tu novio/a. Si le preguntaran cómo
eres tú, ¿qué crees que contestarían?
Si todos los trabajos tuvieran la misma remuneración y la misma
consideración social ¿qué es lo que realmente te gustaría hacer?
Describe tu escala de valores
¿Qué personas te sacan de quicio?
¿Duermes bien?
¿Cómo reaccionas habitualmente frente a la jerarquía?
¿Cómo te insertas en un equipo de trabajo?
¿Qué impresión crees que he sacado de ti tras esta entrevista?
Formación
Trabajos anteriores
Empleo
Vida privada
Este consejo básico, tan obvio en apariencia, es quizá el que más frecuentemente queda
incumplido. Para muchas personas, especialmente los jóvenes, llevar un traje sastre o una corbata.
Pero, incluso para aquellas empresas que no fuerzan en sus empleados un código de vestir, cierta
corrección en las vestiduras es importante, especialmente en las primeras ocasiones. Recuerda
siempre que cuando vas a una entrevista de trabajo es primordial causar una buena primera
impresión.
En esta sociedad las cosas siguen entrando por los ojos, y, aunque no tenga nada que ver, un
primer juicio de valor siempre se hace en base al aspecto. Por ello es tan recomendable presentar
siempre un aspecto pulcro, arreglado y aseado. Cuando queremos comprar algo el aspecto del
vendedor nos infunde confianza o sospecha, y de ello dependerá que al final compremos o no.
Pues bien, en una entrevista de trabajo vosotros sois los vendedores y el producto.
Claramente, esta imagen clásica incluye en no pocas ocasiones otros factores aparte de la ropa,
tales como el pelo (su longitud, su color, su estilo) y otros complementos corporales. ¿Dónde
poner el límite? Primero tenéis que conseguir el trabajo, y luego podréis preocuparos de esa otra
cuestión.Una vez os hayáis integrado en la empresa, y tengáis una relación más estrecha con
vuestros compañeros de trabajo, podéis empezar a transgredir un poco las normas no escritas. El
respeto al que tenéis derecho sea cual sea vuestro aspecto es igual al respeto que debéis a las
opiniones que los demás tengan de vosotros por el mismo. Así que, ¿por qué no dejar que se
acostumbren poco a poco?
Cuando vas a una entrevista suele ser porque ya has pasado una primera criba con tu Currículum
Vitae (CV), pero eso no significa que no te vayan a preguntar acerca de él. Por eso, tendrías que ir
preparado para contestar a todo tipo de preguntas, incluso algunas que tienen su respuesta en el
CV. Esto es muy fácil de hacer, basta con ir repasando punto por punto, con el CV delante,
pensando en cómo podrías extender la información que ofreces, qué más datos pueden resultar
interesantes, qué puede despertar la curiosidad del entrevistador... Ahora que empieza a
implantarse cada vez más la costumbre de incluir el epígrafe "Aficiones", no deberías sorprenderte
de que tu interlocutor comparta alguna de ellas, y esto puede jugar a tu favor, siempre que seas
capaz de hablar inteligentemente de ella.
Piensa en todo lo que aparece escrito, ¿cómo fue la estancia en la Universidad, o en el Instituto?
¿Dónde, cómo y por qué conseguiste esas otras habilidades y/o conocimientos que no forman
parte de la vida o el temario académico normal? ¿Por qué dejáste o te echaron de ese otro
trabajo? ¿Qué crees que puedes aportar a la empresa? Para todo esto y más tienes que tener una
respuesta. Incluso para la más desestabilizadora e inesperada de las preguntas, hecha, a menudo,
con la intención de pillarte por sorpresa y tantearte un poco.
Habla con claridad y corrección
No es tan difícil, y en ocasiones puede incluso arreglar una primera impresión negativa. Recuerda
que estamos hablando del mundo laboral, y tú estás tratando de vender una idea, la idea de que
eres óptimo/a para ese puesto. Eso incluye el concepto de que sabes expresarte, y saber
expresarse significa no sólo hablar con un tono claro y seguro, y con confianza (recuerda que estás
sometido a un examen, pero que todas las preguntas que te hagan son preguntas de las que sabes
la respuesta), sino también utilizar un lenguaje correcto. No tienes que ser refinado, ni culto, basta
con ser correcto. Así como no le hablas igual a tus padres que a tus amigos, tampoco debes
hacerlo con tus jefes. Las palabras coloquiales, como las prendas o complementos informales,
déjalas para cuando lleves un tiempo en la empresa y conozcas hasta dónde puedes llegar y hasta
dónde no con tus compañeros o superiores. Piensa que la inmensa riqueza del castellano en
palabras de argot no tiene porqué ser conocida por tu interlocutor. Pero hay palabras más
formales y más comunes que seguro que entiende a la perfección.
Por último, sé amable. Tienes que mostrar que te puedes integrar en la empresa, que vas a
congeniar o que es fácil congeniar contigo, que tu entrada no va a suponer problemas de
adaptación ni para tí ni para tus futuros compañeros de trabajo.
Son muchas las empresas que utilizan los servicios de psicólogos o ejecutivos con un
entrenamiento específico para la lectura del lenguaje corporal. Ten por seguro que todo lo que
hagas en presencia de una de estas personas será analizado en detalle, desde la postura en la que
te sientes hasta dónde y cómo apoyes las manos, pasando por dónde posas la mirada y cómo
mueves las manos. Y todo tiene un significado.
Es normal estar nervioso/a ante una entrevista de trabajo, pero piensa no te van a preguntar nada
que no sepas. Son muchos los gestos que denotan nerviosismo, pero tampoco te tienes que
preocupar por eso, ellos ya saben que estás nervioso/a; buscan otras características en tu
personalidad. Tienes que ser una persona segura de tí misma, y saber exactamente quién eres y
qué es lo que quieres. ¿Qué más tienes que saber?
No cruces ni brazos ni piernas. Eso es adoptar una postura defensiva, parece que te tienes que
cubrir de algo. Como obviamente no tienes miedo del/ de la entrevistador/a, a lo mejor temes que
él o ella descubra algo que quieres ocultar. ¿Quizá en tu CV? Si eres una persona segura de tí
misma no tienes miedo, si no tienes miedo no tienes que cubrirte, si no tienes que cubrirte no
tienes porqué cruzar los brazos o las piernas.
Tampoco exageres tu confianza. Siéntate derecho, con la espalda recta, pues si te recuestas en
demasía das la impresión de estar relajado/a, quizá exagerando para dar una impresión que no es
cierta, o porque la otra persona no te inspira respeto. Nunca quedes como un/a mentiroso/a ni
como un/a irrespetuoso/a.
Las manos, quietas en la medida de lo posible. Los españoles, como pueblo latino, somos dados a
gesticular, y eso no es malo. Pero tampoco hace falta estar siempre con aspavientos, pues si
necesitas gesticular para hacerte entender entonces es que no te estás expresando con claridad.
Mantén las manos apoyadas en las piernas, o en las rodillas. No cojas los brazos de la silla, o del
sillón, ni juntes las manos en tu regazo. No juguetees con nada.
Sonríe. No te quieren contratar por tu simpatía, pero si el ambiente lo permite, no tienes porqué
estar serio/a. Tienes que ser una persona de fácil trato que se va a integrar en su empresa. La
depresión puede ser causa de baja médica, pero ninguna compañía ha tenido que perder nunca
horas de trabajo de uno de sus empleados/as por su alegría o simpatía.
Mira a tu interlocutor a los ojos. Ser tímido/a no es un delito, pero si tienes confianza en tí
mismo/a, tienes que ser capaz de mirar a los ojos a la gente con la que hablas. Si miras a otro lado
o mientes o tienes miedo. Ninguna de estas dos opciones te ayudará a conseguir ese puesto.
En conjunto, tienes que mostrar respeto, atención, confianza, interés, y facilidad de trato. El
puesto de trabajo es importante para tí, y también lo es quien te entrevista.
Sé tú mismo/a
Aquí viene la contradicción. ¿No te acabamos de decir qué es lo que tienes que hacer? ¿Significa
eso que todo lo que acabas de leer es mentira?
No. Tienes que hacer todo lo anterior, pero sin olvidar nunca quién eres. Tu experiencia,
conocimientos o, simplemente, interés, te hacen la persona adecuada para ese puesto. Tienes que
transmitir esa idea, pero en tu trabajo está siempre incluida la posibilidad de mejorar, y sólo lo vas
a conseguir si te gusta lo que haces. Quien te entrevista no quiere que le des la razón como a los
tontos, sabe que puede escuchar alguna respuesta que quizá no le guste del todo, pero si te das
cuenta de eso, tienes que ser capaz de convencerle de que tienes la suficiente capacidad e interés
para hacer que eso no represente un problema. Si estás haciendo una entrevista para un trabajo
en el que probablemente vayas a estar más de dos meses, la empresa quiere saber de antemano
que tú no vas a representar un problema, que tu personalidad se puede adaptar o complementar
a las de los demás empleados, y eso no pueden saberlo si no les muestras antes cómo eres.
Si contentas como un robot, sin emoción, será más difícil integrarte en el grupo, y para eso
siempre pueden comprar otro ordenador.
Dinámica de Grupo
1. Entrevista Estructurada
Como su propio nombre indica, todo lo que ocurra en el encuentro
está programado y estudiado, la secuencia de preguntas, el tono de la
conversación, los distintos temas a tratar, etc. En estas entrevistas no se
deja margen a la improvisación ni a la personalización ya que todos los
candidatos pasarán exactamente por el mismo proceso.
Visto desde esta perspectiva parece todo muy plano y poco atractivo sin
embargo, ¿para qué tipo de casos puede ser provechosa la entrevista
estructurada? Pues para procesos de selección masivos en los que no hay
tiempo para dedicar un pequeño espacio a cada candidato y los puestos de
trabajo a cubrir están automatizados.
2. Entrevista Libre
Este sería el caso opuesto al anterior. En esta situación el reclutador acude
a la entrevista teniendo muy claros los objetivos que requiere el puesto de
trabajo y las aptitudes que debe tener el candidato, sin embargo no se
sigue ningún guión y la improvisación es la protagonista.
Ésta es una potente arma para que el candidato exponga sus capacidades
comunicativas y conduzca la conversación de forma activa. Su mayor
ventaja es la personalización y su inconveniente es el riesgo de dejarse en
el tintero cuestiones relevantes para el proceso.
4. Entrevista de Tensión
La mayor parte de las entrevistas de este estilo tienen como
finalidad evaluar la capacidad de reacción del candidato ante situaciones
de estrés y presión que se pueden dar en el día a día de un puesto de
trabajo, en el que el control de las emociones y la presión son
fundamentales.Considerada “la entrevista más incómoda” ya que el
reclutador tendrá que utilizar una táctica muy definida con el objetivo de
incrementar el grado de tensión del candidato al máximo. ¿Por qué se hace
esto?
6. "Entrevistas Millennials"
Este es el tipo de entrevista laboral que grandes gigantes como Google,
Amazon o Apple están realizando en la actualidad a todas las personas que
quieran formar parte de sus equipos de trabajo.
Para muchos son consideradas entrevistas absurdas ya que por un lado las
preguntas que se formulan suelen ser bastante inesperadas y para muchos
irrelevantes. Algunos ejemplos serían: ¿Cuántas vacas hay en el Estado
de Texas?, ¿Sabrías nombrar tres ganadores de un premio
Nobel? o ¿Cuales son los objetivos de un cinturón de seguridad?
Ante tal cantidad de información nos puede resultar difícil decidirnos por
cuál será la entrevista laboral más apropiada para nuestra empresa. La
solución está en la diversificación, sentido común y personalización de
cada proceso de selección.
Dentro de una misma empresa existen diferentes perfiles que requieren ser
tratados de forma distinta en función de cada caso. La destreza del
reclutador residirá en saber identificarlos y elegir la entrevista
adecuada en cada situación.
Identificar qué tipo de perfil tienes delante para elegir el mejor formato de
entrevista es clave.
¡Tuitea la cita!
Atrae, contrata y enamora al talento
adecuado para tu empresa, ¡más rápido!
El mundo del reclutamiento está cambiando a pasos agigantados. Ahora los
candidatos tienen más poder de decisión que nunca y las empresas deben
adaptarse a ello. Para llegar a entrevistas al candidato perfecto primero
debes atraerlo.