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LITERATURA NORTEAMERICANA: EDGAR ALLAN POE

Podemos señalar que Poe planteó una preferencia estética por la forma. Su desafío a las normas sociales o su imagen
de escritor maldito, ponen en primer plano una literatura fundamentalmente imaginativa en medio de un contexto
adverso (a diferencia de Irving e incluso Hawthorne. El primero, aceptando en su obra un paisaje norteamericano
dibujado con rasgos mitológicos; el segundo, quien creía que Norteamérica ofrecía una densa realidad histórica lo que
no permitía la creación de un nuevo género literario que conciliara lo real y lo imaginario). Por lo tanto, al descartar el
didacticismo moralizante como objetivo de la obra literaria, Poe la libera de los criterios de verosimilitud externos. Esto
supuso un gran giro en la literatura norteamericana, un cambio realmente moderno. Poe aspira hacia una estética
narrativa ideal, romántica, antididáctica, sublime y terrorífica. Formula una teoría de la imaginación carente de
fundamentación mística y religiosa. El elemento espiritual es trasladado por Poe desde las regiones sobrenaturales de la
composición, a la mente del artista y del lector. Por lo cual la obra más imaginativa resulta la más espiritual y la búsqueda
mística se plasma estéticamente en la forma técnica y en los efectos literarios.1

LO FANTÁSTICO EN LA LITERATURA DE EDGAR ALLAN POE

LA CAÍDA DE LA CASA USHER, ANÁLISIS DE T. TODOROV

Este relato, señala Todorov, ilustra lo extraño próximo a lo fantástico. El narrador llega una noche a su casa, llamado
por su amigo Roderik Usher quien le pide que lo acompañe por cierto tiempo. Roderik es un ser hipersensible, nervioso,
que adora a su hermana, en ese momento gravemente enferma. Ésta muere unos días después, y los dos amigos, en lugar
de enterrarla, la llevan al sótano de la casa. Transcurren algunos días; durante una noche de tormenta, mientras los
hombres se encuentran en una habitación en la que el narrador está leyendo en voz alta un libro de caballería, los sonidos
descriptos en la crónica parecen ser ecos de los ruidos de la casa. Por fin, Roderik se pone de pie y dice con voz
imperceptible: ¡La enterramos viva!. Y, en efecto, la puerta se abre, y la hermana aparece en el umbral. Roderik y su
hermana se abrazan y caen muertos. El narrador huye de la casa, justo a tiempo para verla desmoronarse en el estanque
del vecino.

Lo extraño tiene aquí dos fuentes. La primera está constituida por las coincidencias (tales como una historia en la
que interviene lo sobrenatural explicado). La resurrección de la hermana y la caída de la casa después de la muerte de
sus habitantes podría parecer sobrenatural pero Poe no deja de explicar racionalmente ambas circunstancias. Acerca de
la casa escribe lo siguiente: “el ojo de un observador minucioso hubiera descubierto tal vez una fisura apenas
perceptible que, partiendo del techo de la fachada se abría un camino en zigzag a través de la pared e iba a perderse
en las funestas aguas del estanque”(pág. 90). Y, acerca de lady Madeleine: “crisis frecuentes, aunque pasajeras, era el
singular diagnóstico” (pág.94). Por consiguiente, la explicación sobrenatural sólo está sugerida y no es necesario
aceptarla.
Según señala Dostoievsky, Poe elige casi siempre la realidad más excepcional, poniendo a los personajes en
situaciones excepcionales en el plano exterior o psicológico. En este cuento lo que perturba al lector es el estado
extrañamente enfermizo de los hermanos. En otras obras lo que habrá de provocar el mismo efecto serán las escenas de
crueldad, la complacencia en el mal y el crimen. La sensación de extrañeza parte de los temas evocados, ligados a tabúes
más o menos antiguos.
Todorov agrega que exceptuando El gato negro y Recuerdos de Mr. Bedloe no hay cuentos fantáticos en sentido
estricto. Casi todas sus narraciones dependen de lo extraño, y solo algunas de lo maravilloso. Sin embargo, tanto
por los temas como por las técnicas que elaboró, Poe está muy cerca de los autores de lo fantástico.

APUNTES DE CLASE: LO FANTÁSTICO EN LOS RELATOS SELECCIONADOS:

La caída de la casa Usher: el cuento tiene una resolución relacionada con lo fantástico extraño. Es decir, según
Todorov, aquellos acontecimientos que a lo largo del relato parecen sobrenaturales, reciben una explicación
racional.
El momento de vacilación: hay dos: cuando la muerta aparece y cuando la casa se desmorona.
La explicación de lo fantástico extraño: Madeleine tenía catalepsia y la casa tenía una fisura.

1
POE, EDGAR ALLAN. Relatos. Editorial Cátedra, edición Félix Matín, Madrid, 1997.
1
EL GATO NEGRO
PERSONAJES Y SIMBOLOGÍA

EL NARRADOR: típico personaje de Poe llevado por la locura. Éste proyecta en los animales sus impulsos
destructores.
Plutón, el gato, es una representación del Hades, del inframundo. Además de evocar varias supersticiones, incluida
la idea expresada por la esposa del narrador de que los gatos negros son brujas disfrazadas.
El hecho de sacarle un ojo hace referencia a las parkas.

Al igual que el narrador del Corazón delator, éste tiene una cordura cuestionable. Casi al inicio del relato nos dice
que estaría “loco de veras” si esperara que un lector crea en la historia, lo que implica que ya ha sido acusado de locura.
El alcohol lo empuja a ataques de intemperencia y violencia, hasta el punto de que todo lo enoja, Plutón en particular
(también la falta del ojo del gato, provocada por el narrador, puede verse como sinónimo de su propia ceguera moral).
El momento de vacilación: hay dos momentos: el gato ahorcado que aparece y la mancha del nuevo gato. En el
final del relato, con el chillido que se oye, vuelve a aparecer la vacilación: no se sabe qué sucede.
En este cuento estamos en presencia de lo fantástico puro puesto que esa vacilación se mantiene hasta el final.
No hay ninguna explicación ni resolución del hecho.

LA MÁSCARA DE LA MUERTE ROJA

Su intertexto es el Decamerón.
Momento de vacilación: cuando se quita la máscara y debajo no hay nada.
No pertenece al fantástico ya que hay una interpretación alegórica del suceso: debajo de la máscara está la
muerte.

WILLIAM WILSON
Momento de vacilación: se da durante todo el relato (quién es ese otro???).
No pertenece al género fantástico ya que hay una explicación alegórica de los hechos: ese otro es el propio
personaje, su otra cara.
La alegoría presente en este relato, según Todorov, es de tercer grado porque el lector llega a vacilar entre una
interpretación alegórica y un sentido literal.

William Wilson es la historia de un hombre perseguido por su doble; es difícil decidir si ese doble es un ser humano
de carne y hueso, o si el autor nos propone una parábola en la cual el presunto doble no es más que una parte de su
personalidad, una suerte de encarnación de su conciencia. El parecido absolutamente inverosímil entre los dos hombres
apoya, en particular, esta segunda interpretación: tienen el mismo nombre, nacieron el mismo día, entraron a la escuela
al mismo tiempo, su apariencia y, más aún, su modo de andar son semejantes. La única diferencia importante está en la
voz : “mi rival tenía una debilidad en el aparato vocal, que le impedía alzar la voz por encima de un susurro muy leve”.
Este doble no sólo aparece por arte de magia en todos los momentos importantes de Wiliam Wilson (“aquel que se
había opuesto a mi ambición en Roma, a mi venganza en París, a mi amor apasionado en Nápoles,en Egipto a lo que
sin razón llamaba codicia”) sino que se deja identificar por atributos exteriores cuya existencia es difícil de explicar.
Tales como, por ejemplo, el abrigo, por el escándalo de Oxford: “el abrigo que había llevado había sido confeccionado
con una piel fuera de lo común …el corte era de fantasía, inventado por mí…Por consiguiente, cuando el señor Preston
me alcanzó el que había recogido del piso, advertí, con una sorpresa rayana en el terror, que ya tenía el mío doblado
sobre mi brazo, donde lo había puesto sin duda distraídamente, y que el que me presentabaera su copia exacta en sus
más mínimos detalles”. Como se ve, la coincidencia es excepcional, salvo que se diga que no hay dos abrigos sino uno
solo. El final de la historia nos lleva hacia el sentido alegórico. William Wilson reta a su doble a duelo y lo hiere
mortalmente; entonces, “el otro”, tambaléandose, le dirige la palabra: “tú venciste y yo sucumbo. Pero de ahora en
adelante, también tú estás muerto:¡muerto para el Mundo, el Cielo y la Esperanza! En mí existías; ¡ve ahora en mi
muerte, ve en esta imagen que es la tuya, cómo te asesinaste a ti mismo!”

Estas palabras tratan de explicitar la alegoría, sin embargo, como señala Todorov, no se trata de una alegoría pura
sino que estamos más bien frente a una vacilación del lector.

EL CORAZÓN DELATOR
Momento de vacilación: cuando escucha el latir del corazón,
El cuento tiene una resolución relacionada con lo fantástico extraño.

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