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l\JINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION

SUBSECHETARIA DE CULTURA

INFORMES
DEL INSTI1,,UTO NACIONAL
DE ANTROPOLf)GIA

RELEVAMIENTO CULTURAL DE LA
PROVINCIA DE MISIONES

INSTITUTO NACIONAL DE ANTROPOLOGIA - BUENOS AIRES - REPU.BLICA ARGENTINA - 1974.


INSTI iU TO NACIONAL DE AN TROPOLOGIA
3 de Febrero 1370/78 ·
tel. 783-6554 Buenos Aires
RepC.blica Argentina
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION
SUBSECHETARIA DE CULTURA

INFOllMES
DEL INSTITU1.,0 NACIONAL
DE ANTROPOLOGIA

RELEVAMIENTO CULTURAL DE LA
PROVINCIA DE MISIONES

I:\"STITUTO NACIONAL DE ANTROPOLOGIA - BUE~OS AIH.ES - REPUBLICA ARGENTINA - 1974


Excma. señora .Presidente de la República Argentina
Doña MARIA ESTELA M.A.RTINEZ DE PERON

S.E. el señor ministro de Cultura y Educación


Dr. OSCAR IVANISSEVICH

S.Sa. el señor Secretario de Estado de Cultura


Profesor CARLOS FRA TTINI

s. Sa. el señor Subsecretario de Cultura


Profesor FELIX COLUCCIO

Señor Director del lnsti tu to Nacional de Antropología


Don JULIAN CACERES FREYRE
3

INDICE

Presentaci6n, por Julián Cáceres Freyre.......................... 5

Colonias europeas en territorio misionero, por Martha Mercedes


Gros so 8

Monumentos y ruinas hist6ricas, por Diana Rolandi de Perrot....... 31

Síntesis geográfica de la provincia de Misiones, por M6nica Marta


Cr an we 11 • • • . • • • • • • • • • • • . . . . . • . • . . • • • • • • • • • . • • • • • • • • • • . • • • • • • 45

Síntesis !~gropecuaria de la provincia de Misiones, por Catallina


Saugy . . . . . . • • • • • • • • • . • • . • . . . . . . . • . . • . . . . . . . . . . . . . . . . . • . • . . . 65

Cultura, educaci6n y recreación, por Silvia Garda de Rossi • . • • • • 81

Grupos indígenas de 1a provincia de Misiones, por Sara Josefina


Newbery . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 93

Los medios de comunicaci6n masiva en la provincia de Misiones, por


Erci 1i a Moreno Chá. . . . . . . . • . . . . . . . . . . . • . • . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 107

Relaciones interétnicas y motivaciones migracionales en algunos gr~


pos étnicos de la provincia de Misiones, por Martha Blache.... 129

Artesanías de Misiones, por Catalina Saugy....................... 143


129

RELACIONES INTERETNICAS Y MOTIVACIONES MIGAACIONALES


EN ALGUNOS GRUPOS ETNICOS DE lA PROVINCIA DE MISIO\IES

Mar tha B 1ache

Sumario

Misiones ha constituído parte de un área configurada por los grupos gua-


ranitizados, por el impacto de la colonización hispánica y por la acción de las mí
siones jesuíticas. A la población que resultó de este proceso la denominamos neo
guaraní. Constituyó el sustrato poblacional del área hasta la llegada del caudai°-
colonizador europeo. Se establece entre el europeo y el neoguaraní una relación
asimétrica que abarca dos ni ve les: horizontal y vertical engendrando 11na si tua-
ción de dominante-dominado. El desarrollo que la colonización europea brinda a
la provincia va a revitalizar el proceso neoguaraní. ·

Con respecto a las motivaciones migracionales se confrontó que básica-


mente responden a las mismas razones apuntadas por estudios antropológicos re_2·
lizados en otras provincias argentinas.

CJ Introducción

El propósito del informe presentado al lnsti tuto Nacional de Antropología


tenía un doble objetivo. Uno, analizar las relaciones entre algunos de los gru-
pos étnicos que componen la población misionera. Nuestro interés era el conjun
to de elementos que los miembros de un grupo interna! iza con respecto a su gru=
poya otros, a fin de aprender a reconocer como credenciales de identidad espe
cífi camente referidos a obreros agrícolas criollos, brasileños y paraguayos. -

El otro objetivo era la confrontación de las motivaciones mi graciana les.


En la Argentina las migraciones internas, rural-rural y rural-urbana, han sido
analizadas por algunos autores desde una perspectiva antropológica y me intere-
saba cotejarlas con la_ situación misionera.

Debido a las limitaciones de esta publicación presentamos las conclusio-


nes finales del trabajo elaborado.

Método de trabajo

Para la realización de este trabajo he elegido tres localidades: Azara,


San Juvier y Eldorado para constatar la situación del criollp, brasileño y para-
130

guayo respectivamente (ver mapa nº 7). La población criolla no es fáci 1 de loe~


lizar geográficamente ya que está dispersa a lo largo de la provincia. La sele.f_
ción de las localidades se hizo en base al primer trabajo de campo y a la biblio-
grafía consultada (1 ).

En cada uno de estos lugares se realizaron entrevistas grabadas a pers.2.


nas de ambos sexos y de distinto nivel ocupacional: colonos, empresarios, maes
tros, comerciantes, empleados y técnicos. Fueron estructuradas en el sentido-
que se trató de focalizarlas hacia el tema de interés del investigador, pero se
realizaron con preguntas abiertas. Es dadestacar la buena disposición y cola-
boraci~n de todas las personas entre~·istadas.

Basándonos en el carácter cualitativo y no cuantitativo de 1a inforcnaci ón,


las tres áreas nos proporcionan parámetros de análisis, considerando que los
datos de los informantes seleccionados fueron corroborados con otras personas
y confrontados con bibliografía. Sin embargo, estarros conscientes que estas
fuentes limitan las apreciaciones vertidas sobre el el.emento étnico que nos int~
resa ya que provienen de otro grupo distanciado del obrero rural por distintos
niveles sociales,económicos y educativos.

2 Relaciones interétnicas

Al encarar la situación étnica del poblador rural asalariado en la provin


cia de Misiones nos enfrentamos a una serie de interrogantes que hemos tratado
de ir dilucidando metódicamente.

Nos interesa la influencia cultural que recibieron. El tipo de relación


que establecen con trabajadores rurales provenientes de países limítrofes, en
qué se asemejan y en qué se diferencian. Tipo de relación que establecen con
et .colonizador europeo y estereotipos que estos tienen con respecto a los traba
jagores rurales na ti vos y americanos. Diferencias en el asentamiento del po--
blador americano y el europeo.

A los peones y obreros rurales que constituyen la mano de obra básica


de la provincia de Misiones los denominaremos grupo neoguaraní. Está integra
do por criollos (2), paraguayos y brasileños (3) y sus descendientes nacidos en
la Argentina. Están inc! uídos los nativos de paf ses 1imí trofes asentados•. en nues
tro país y sus descendientes por cuanto está comprobado que la familia constitu -
ye el agente relevar.te en el proceso de socialización y de internalización de pau
·tas y valores semejantes a la de los progenitores. -

El neoguaraní no se refiere a una categoría racial, no involucra determi-


nadas características físicas sino a todos los que son identificados con una for-
ma de vida, con:una cosmovisión particular, con un tipo de ocupación, con un nl
vel de relaciones. Veamos más en de tal le esta categorización:
131

2. 1 Area neoguaranítica

La consideramos área neoguaranítica por ser una porción del continer,te


americano ocupada por distintos grupos que estaban en proceso de guaranitiza-
ción (4).

En estos grupos se produce un proceso aculturativo ~I entrar en contac-


to con la cultura hispánica primero y la portuguesa después. Posteriormente es
te proceso se int.,~nsifica con la implantación de las misiones de la Compañía de -
JesCis que acelerd la guaranitización del área (5).

Por extensión a los habitantes de este sector del continente, que logra-
ron una unidad cultural definida, los denominaremos neoguaraníes. La unidad
cultural se evidencia a través de una serie de rasgos económicos, espirituales y
de organización social. Algunos de ellos han continuado (6) y este sustrato cul-
tural es el que le otorga un carácter regional al área. Por otra parte, este ba-
samento que es más fuerte de lo· que aparentemente se pretende -ya que con fre
cuencia •e insiste en la influencia eur:opea como único elemento de desarrollo--
ha sido el factor determinante en la unificación de ciertas pautas. Algunas de
ellas a su vez fueron adoptadas por el europeo: alimentación (mandioca, maíz,
mate); música (chamamé, polca); técnicas agrícolas (rozado, descoivada); habla
regional; ayuda comunitaria (pucherón o ayutoría); creencias populares que refle
jan el mundo circundante y sus relaciones (Yasy Yateré, lobi s<:>n, pombero, etc;).

Posteriormente esta unidad cultural va a dar lugar a subgrupos definidos


por la bifurcación en el desarrollo histórico hacia distintas nacionalidades: A."'
gentina, Brasil y Paraguay. Como subgrupos tienen elementos comunes y dife..:..-
renciales que actúan en situaciones de ajuste, roce o conflicto, pero esto lo ar'.a
1izaremos más adelante.

Como área y con refer.'encia al neoguaraní ha presentado una situación P.2.


blacional particular:

a) Se dio unidad de proceso lingüístico.

b) Durante un largo período la frontera tuvo una delimitación imprecisa.

c) Recibió oleadas poblacionales lentas y constantes desde los países limítrofes,


intensificadas en algunos períodos.

d) La presencia de representantes nacionales, administrativo,, educacionale5;


de servicio público, se hace sentir tardíamente en el área. Este hecho a su
vez va a tener concomitancias a nivel de integración y de contraaculturación
que exponemos en los puntos e, y f.

e) La llegada de los representantes oficiales provoca el sentido de integración


nacional que hasta entonces estaba orientado hacia la integración grupal o re-
gional (7).
132

f) La presencia de los representantes de las entidades nacionales comienza a pr.2_


ducir, aunque incipientemente, un proceso contraaculturativo. Aguirre Bel-
trán (8) denomina contraacul turación cuando dos grupos de distintas culturas
entrar-i en contacto en zonas fronterizas y a modo de preservar y proteger su
propia identidad cultural exageran los valores de su propia cultura menospr~
ciando 1a otra. -
Tomemos por ejemplo, el dato que nos proporciona el Tomo IV (9) cuando nos
dice que los representantes oficiales "generan estereotipos fuertemente nega
t:ivos hacia la poblacifm_brasi leña". -
Carecemos de datos para verificar que esta actitud existía con anterioridad
pero inferimos que no sería así, porque es el representante oficial quien an-
te el primer impacto tiene la capacidad de percibir la influencia. En tanto
que el nativo, sumergido en el contexto y sin marco referencial con que com
parar lo, lo percibe como una situación natural, precisamente por participar
de ese substrato neoguaraní.

2.2 Grupo neoguaraní

Este grupo ha constituido un aporte úti 1 y positivo para la provincia al


proveer básicamente la méllo de obra rural (10). A continuación analizamos el
nivel ocupacional, los tipos de relaciones que establecen y los estereotipos for
mados alrededor de este grupo neoguaraní. -

2. 2.1.Nivel ocupacional

Los neoguaraní tienen un nivel ocupacional similar: ocupan el último es


calón d'3 la estructura rural misionera y esto se refleja en las condiciones de -
vida. Sam los que presentan los índices más bajos de condiciones habi taciona-
le§, de airmentación, de escolaridad, de acceso a los medios de información,
de_partic:pación soc.ial y de asistencia medica (11 ).

2.2.2 Tipo de relación0establecida

Creo que una posible explicación al tipo de relación que se establece es


que el neoguaraní mantuvo y mantiene una relación de grupo dominado frente al
gr-upo dominante (12).

La colonización hispánica implantó, postulándolo superior, un esquema


estructurado de instituciones y relaciones que impusieron al nativo americano
a un nivel de subordinación, impedido por razones históricas a un desarrollo
autónomo.

De manera que una cultura tecnológicamente más avanzada se impone so:...


bre otra en todos los órdenes, justifica y racionaliza ese dominio en nombre de
una superioridad cultural. Se produce entonces una relación asimétrica que se
puede sintetizar en una estructura dual: dominador-dominado.
133

Este esquema siguió manteniéndose aún después de finalizada la colo


nización hispánica, durante el período de poblamiento de Misiones por migran
tes europeos que asumen el rol del colonizador. -

En las :--elaciones podemos distinguir dos niveles: horizontal entre los


subgrupos neoguaraní y ver ti cal frente al europeo. Estos desnivel es engen-
dran una conceptualización que podríamos esquematizar de la siguiente mane-
ra:( 13)

DOMINANTE

+ -

DOMINADO NEOGUARANI

Subgrupo + Subgrupo + Subgrupo


criollo - paraguayo - brasileño
""------- .
134

Mientras que las relaciones entre los distintos subgrupos dominados se


dan a un nivel horizontal, con el gr~;:><> dominante se dan a nivel vertical.

2. 2. 2. 1 Relaciones horizontales

Entre los grupos neoguaraní además de las si mi 1i tudes seña ladas encon-
tramos una serie de diferenciaciones:

a) Se distinguen tres idiomas: español, portugués, guaraní.

b) Mientras los brasileños están asociados a la categoría ocupante el paraguayo


lo está a la categoría pe6n.

c) El paraguayo y el criollo son predominantemente católicos, mientras que entre


los brasileños encontramos muchos protestantes que no solo reflejan distintas
prácticas religiosas sino también de estabilidad familiar.
Los paraguayos tienen las tasas más bajas de relación matrimonial oficializa
da y la tasa más alta de relación de acompañamiento y de ilegitimidad de los-
hijos. En cambio entre los brasileños hallamos una de las tasas más al tas de
rnatrimoni os oficializa dos. ( 14).

d) El nivel educativo es más bajo entre los brasileños que entre los paraguayos
(15). Este factor tal vez contribuya a que la mayor movilidad se dé en el pa
raguayo que en el brasileño. Mientras éste emigra hacia las áreas de menor
desarrollo y población de la provincia, los paraguayos lo hacen hacia las más
desarrolladas.
Por otra parte los paraguayos como peones u obreros no tienen las mismas li-
gazones que el brasileño que es propietario ocupante. Si bien, con frecuen-
cia, el productor ocupante comparte su trabajo entre su pequeña explotación y
el trabajo asalariado para otros productores. Predomina entre ellos la pro-
ducción de autoconsumo (16).

e) Entre 1os subgrupos hay fricciones y tensiones que creo que pueden atribuirse
a la similitud de la labor realizada y a la competencia que involucra, como así
también a la tranquilidad que produce un elemento conocido.
El antagonismo a nivel laboral es un medio de defensa de dos grupos asalaria-
do que están compitiendo por la misma fuente de trabajo. En San Javier se
prefiere al trabajador de la zona, al brasileño. Pero esta misma si tuaci6n se
repite en el Al to Paraná, resultando ahí ser favorecido el paraguayo frente al
intruso brasileño. ·
Una interpretación que podría darse a este hecho sería que mientras de la per:.
sona conocida, aunque sea a nivel no formulado conscientemente, se espera
un comportamiento previsible, en tanto el desconocido no se sabe cómo va a
reaccionar y qué actitud se debe adoptar frente a su comportamiento.
Los estereotipos intergrupales generan animosidad entre los subgrupos; fun-
cionan como mecanismos de defensa y de control para cada grupo y como una
forma de asegurarse la fuente de trabajo.
135

2.2.2.2. Relaciones verticales

Con respecto a las relaciones que se estableéen entre el nivel horizon


tal y vertical debemos considerar otros factores:

a) Al emigrar el europeo debe sumergirse en un ambiente geográfico y cultural t.Q.


talmente desconocido para él, mientras que el neoguaraní lo hace en un área
fami 1iar.

b) Teniendo en cuenta la intencionalidad que envolvían estos movimientos tenemos


que, el europeo con su decisión de radicarse definitivamente rompe las ama-
rras con el pa1s de origen. El neoguaraní en cambio mantiene contactos con!!.
nuos y frecuc" ces con el 1ugar de procedencia.

c) En las colonizaciones dirigidas, ya sea oficiales o privadas, el europeo gozó


de privilegios tales como la concesión de tierras, facilidad que no estuvo al
alcance del neoguaraní.

d) La inmigración europea no sustituye al peón rural sino que este queda subor<!l
nado a aquél.

e) El tipo de relación que se establece genera una conceptualización negativa del


grupo dominante con respecto al dominado. Este, por su parte, responde con
una autovaloración de menosprecio para las pautas que involucran progreso
técnico y económico, en cambio considera al europeo como el factor determi-
nante de progreso en la provincia. Pero en cuanto a aptitudes humanas tiene
hacia el grupo.:dominante una percepción negativa. De ahí que entre el nivel
horizontal y el vertical señalemos tendencias negativas y positivas (- +}.

f) El desarrollo económico que los cotonizadores europeos aportan a la provin-


cia contribuye a orientar las migraciones limítrofes hacia Misiones y poc:- en-
de provoca la revitalización del grupo neoguaraní (18).

g) Como se observa, las relaciones con el grupo dominante están tomadas genéri
camente sin tener en cuenta el grupo étnico ni el desarrollo tecnico imperante
en el país de origen. El tema es complejo y se ha tomado una de las posibili-
dades de relación.

2. 2. 3 Estereotipos

Los neoguaraní se ven sometidos a una serie de discriminaciones que oscilan


a varios niveles.

Aludiendo a un tipo ffsico o nivel socio-económico se los denomina los negros,


la .negrada, el menchaje, el tape, val le, el caipira, el serrano.

En cuanto a la capacl dad de trabajo se los considera haraganes, con


hábitos indisciplinados, indoler:tes, poco ambiciosos, incapaces de progresar,
136

que se contentan con v1v1r al día: en cuanto cobran se chupan y se gastan todo.
En contraposición al gringo industrioso, disciplinado, progresista, emprende-
dor.

En cuanto a las valoraciones personales, es relativamente frecuente oir


dec:ir que tan to brasileños como paraguayos son malhechores que vienen escapar::_
do de la justicia por muertes o hurtos cometidos. Consideramos que esta es ur a
forma de encubrir el prejuicio buscando tina racionalización que justifique la a_s
titud discriminativa. Como muchos prejuicios no est~ manifiesto. No ataca di-
rectamente sino que busca recovecos a través de los cuales llegar a su objetivo.

Todos estos estereotipos han contribuído a una concientización de las di-


ferencias_c.ulturales entre los grupos y que a veces !a autovaloración sea de m~
nosprecio a la propia capacidad. Por ejemplo, el paraguayo se define a. .sí mi~
mo como uno de los grupos menos adelantados, juatamente con los criollos y los
brasileños. Como lp indica El estudio del nivel de vida {19), esta objetividad p~
ra autoclasificarse t•contrasta con la emotividad que suele impregnar la eval ua.-
ción grupal tendiente a autoval orarse y menospreciar a los demás grupos".

Teniendo en cuenta la capacidad de trabajo del neoguaraní nos dice ese


mismo estudio (20}: 11 La población local, no sólo ha demostrado una gr·an capaci
dad de trabajo, sino que en muchos casos es la que ofreció a la población euro-:.
pea sus pautas laborales, en otras palabras, le enseñó a trabajar en la zona".

Todas estas valoraciones provocan en el grupo dominante una serie de re


chazos. La encuesta realizada entre alemanes, ucranianos y polacos evidencia-
que la mayor animosidad se pone de manifiesto hacia las uniones matrimoniales
r
con e 1 grupo neo guaran (2 1 }.

Aparentemente las distintas etnías europeas oponnn una mayor resistencia


ara paraguaya (22). Esto, tal vez, podría explicarse porque mientras el crio-
lló- está más di luí do como grupo y el brasileño más marginado, el paraguayo, que
constituye actualmente el contingente más numeroso de e,x!ta>--tJeros en la provin-
clá~ resulta ser la línea inmediata de choque y los que deben soportar los emba-
tes discriminatorios más intensos.

Consideramos que estos ~estereotipos son una manera de racionalizar y


justificar la situación de subordinación por la relación que se originó durante
la colonización (dominador-dominado) y que se man ti ene hasta ahora.

3 Motivaciones mi gr aci onal es

Nos interesa cotejar la situación misionera con otras provincias ar gen ti


n_as donde se han hecho estudios antropológicos de las migraciones internas. (23).

Si bien no existe un consenso general respecto a 1as causas que


13f

motivan las migraciones, ya que para algunos es la presi6n de la pobreza rural


y para otros es la atracción de la ciudad y sus mejores oportunidades, sinteti-
zamos las razones consideradas más significativas:

a) Económicas

b)Ausencia de servicios médicos y sanitarios

c) Escasez de opor tu ni dades educacional es

d) Comun1 caci ones rudimentarias

e) Pocas facilidades recreacionales

f) Atracción de la ciudad ejercida a través de los medios de comunicación funda-


mentalmente los Cé'ininos y la radio (24).

Las entrevistas real izadas son ilustrativas con respecto a Misiones. U-


no de los casos más impactantes es el de los colonos de Azara. Esta se convier
te en.zona de expulsión de los jóvenes por la falta de planificación en cuanto a
la distribución de parcelas productivas, el empobrecimiento de la tierra, la im-
posibilidad para el agricultor de extender la unidad económica para dar cabida a
los hijos, la dificultad de competir con otras zonas de la misma provincia en do!J.
de la tecnología y la comercialización se realizan en forma mucho más efectiva.

Con el crecimiento vegetativo natural de la familia no tienen otro recurso


que buscar otras fuentes de ingreso y muchos de ellos vie•~~Jn la migración como
única salida, igual que tantos otros jóvenes de nuestro país.

Vuelven periódicamente a visitar los familiares pero no a radicarse ya


que la ciudad les ofrece una serie de oportunidades laborales, educativas, médi
co-asistenciales, recreacionales que no podrían alcanzar en el lugar de origen~

Otros elementos de expulsión lo constituyen las visitas anuales que atraen


nuevos contingentes de jóvenes ha~ia la ciudad, deslumbrados por el cambio op~
rado en el que migró; también los medios de comunicación como el camino, que
los pone en contacto con el mundo exterior y la radio, que les transmite nuevas
pautas que no pueden satisfacer en el'.ámbito tradicional de la comunidad (25).
Han migrado preferentemente hacia Buenos Aires, el Gran Buenos Aires y La
Plata.

En ;.:>ituación similar a la de Azara estaban los hijos de los colonos de S9n


Javier, pero la implantación de la Cooperativa azucarera retuvo a muchos de los
jóvenes al proporcionarles unanueva fuente de trabajo.

De los peont~s rural es el paraguayo ha si do el que más ha mi grado hacia


el área metropolitana. Como ya se indicó posee un mayor nivel educacional que
el brasileño y como peón no tiene las mismas ligazones que el ocupante.

Tenemos que considerar también que muchos.pequeños productores para


138

i as cosechas se han reducido a 1a ayuda de 1a mano de obra fami 1i ar a 1 no poder


afrontar las regulaciones laborales o migratorias. De manera que el pe6n ha
tenido que desplazarse hacia las ciudades en busca de trabajo.

Las migraciones golondrinas o estacional es durante las cosechas o para


carpidas o changas siguen siendo importantes en la provincia. Son los trabaja-
dores rurales en peores condiciones económicas. Entre ellos encontramos las
tasas más bajas a nivel educacional, médico-sanitario, de vivienda, de alimen-
tación. Algunos se han ido asentando en villas miseria formadas en la periferia
de,a.lgunas ciudades de la provincia que ofrecen oportunidades de trabajo a des-
tajo.

Sintetizando podemos decir que en la provincia de Misiones los motivos


que impulsan las migraciones internas, estacional es y urbanas, son si mi lares a
los señaladofi para otras regiones del país.

Los migrantes al salir del status de pe6n ágrario rompen los niveles a
los que hicimos referencia y si bjen la mayorra continúa en una situaci6n de su!?_
ordinación, tienen al menos mayores posibilidades econ6micas y educacionales
que pueden contribuir a ni velar esas diferend as.

4 Conclusiones

Considero que el análisis efectuado nos conduce a verificar el tipo de


relación que se establece entre el europeo y el neoguaraní y no a constatar una
integración de los grupos que poblaron Misiones -aunque creo justo dejar cons
tancia que el afianzamiento de la provincia fue debido al esfuerzo de todos ellos.

Estamos frente a dos formas de vida que se contraponen y a este respec


to .son i lu~trativas las palabras de Bonfi 1 Batalla: 11 EI pluralismo cultural no es
LJ.nobstáculo para la consolidación nacional; en realidad no es la pluralidad étni
ca lo que entorpece la forja nacional, sino la naturaleza de las relaciones que -
vinculan a los diversos grupos, y en el caso indígena, la situaci6n colonial que
le da origen" (26).

Hemos tratado de exponer cómo los ne~guaraní se relacionan con otros


grupos y subgrupos étnicos y los discrímenes que se generan. Tanto relaciones
como estereotipos no han sido implantados en forma apriorística por el investi-
gador sino que existen en la estructuración de la sociedad misionera. Por lo tan
·to consideramos que deben tenerse en cuenta para toda poi ítica cultural o educa-
cional a desar!"ol lar en la provincia. -

Notas

(1) El primer viaje lo realicé en setiembre de 1973 con la Srta. Lucrecia Ave-
139

llaneda y nuestro objetivo de est.udio era la dinámica de !a población. Al fi-


nallzar el trabajo de campo presentamos un informe preliminar orientado a
responder al plan de colaboración y apoyo que la Subsecretaría if>odría pro-
veer a 1a provincia. En e 1 segundo vi aj e, en abr i 1 de 197 4, debido al cam-
bio de orientación en el proyecto como se indica¡.en la presentación general,
debí modificar el tema de estudio. ·

(2) El término criollo resulta confuso por las distintas acepciones con que se lo
ha empleado. Nosotros nos referimos al argentino nativo que no reconoce u
na filiación cultural con un grupo extranjero determinado.

(3) No descendientes de europeos o no reconocidos como tal es.

(4) Lafón p. 39.

(5) 11 La acción de los jesuítas canalizó ese proceso /aculturativo/, contribuyen-


do a darle una configuración definitiva que estructuró la cultura criolla que
Furlong llam6 11 misionero-guaraní 11 • El mestizaje físico y cultural fue la ba-
se. La.unificación y expansión del idioma guaraní uniformó la expresión y co
municación 11 • Lafón p. 151. · -·

(6) No nos referimos a una continuaci6n estática, de mantenerse tal cual se da-
ba. sino con el dinamismo que involucra todo proceso cultural.

(7) Situación similar a la deschpta por José Luis de lmaz para Tierra del Fue
go.

(8) "El proceso de aculturación"·

(9) Estudio sobre el nivel de vida de la población rural de Misiones, Tomo IV,
p. 922.

(10) "Los aportes limítrofes no pueden juzgarse a partir del desdén nacido de las
discriminaciones fundadas en pretendidas distinciones raciales o en estereo-
tipos construídos por la acentuación y la generalización ligera de algunos he
chos, sino en función de: a) la determinación del volumen global y:: de las es-
pecificaciones concretas per ti nen tes de la inmigración que el país necesita o
va a necesitar periódicamente para cubrir su déficit de mano de obra, o que
se estima necesario o úti 1 para e><pandir su crecimiento demográfico ••• 11 • Na
tale, Osear. Algunos aspectos cuantitativos de la población extranjera ori9T
naria de países limttrofes, p. 66.

(11) Estudio sobre el nivel de vida de la población rural de Misiones. Tomo 11.

(12) Bonfil Batalla, Guillermo. El concepto de indio en América, p. 105-125.

(13) Relacion.es armónicas(+); antagónicas(-).

(14) Estudio sobre el nivel de vida. Tomo IV, p. 723.


140

(15) "El nivel educativo formal es baj:fsimo (para los brasileños), la mayoría de
los productores, ya sean ocupantes o propietarios, no tienen educación fo.e.
mal o es muy baja". Estudio sobre el nivel de vida. Tomo IV, p. 907.

{ 16) Estudio sobre el nivel de vida. Tomo 111, p. 598.

( 17) Es el grupo más difíci 1 de determinar porque tanto en el trabajo de campo


efectuado como en la bibliografía consultada, no hemos encontrado un cri t~
rio uniforme y diferenciador hacia este grupo.

(18) Si tenemos en cuenta que el 86% del perímetro de la provincia es frontera


internacional entre Paraguay Y Brasi 1 y si consideramos las facilidades
de penetración por no presentar barreras que entorpecen o dificulten el ac
ceso por la similitud de suelo y clima, y que la zona argentina ha presenti"
do mayor dinamismo económico para este sector ocupacional, podemos com-
prender la sigiificación para la provincia de la inmigración de países limí-
trofes.

( 19) Tomo IV, p. 805.

(20) Estudio sobre el nivel de vida. Tomo IV.

(21) Estudio sobre el nivel de vi da. Tomo IV, p. 848.

(22) Estudio sobre el nivel de vida. Tomo IV, p. 858.

(23) Mario Ma,rguli s (La Rioja), Hugo Rati er (Corrientes), Santiago Bilbao (Sa.!J.
ti ago dei. Estero).

(24) Margulis, Buttenworth.

(25) Margulis.

(26) Bonfil Batalla, p. 124.

Bibliografía.

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