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Introducción

René Spitz, menciona que la existencia de la madre; su sola presencia, actúa como un
estímulo para las respuestas del infante; su acción más pequeña, hasta cuando no esté
relacionada con el pequeño actúa como estímulo.

Significa que el niño tiene su atención puesta en la persona que hace la parte de la figura
materna y que de esa forma aprende, aún si esa figura en momentos no sea visible para él,
es el modelo del cual aprende desde el principio de su existencia.

“El mejor legado de un padre a sus hijos es un poco de su tiempo cada día”.
León Battista Alberti

Instrucciones
Con base en el estudio de estos temas: El papel de las primeras relaciones afectivas y La
importancia de la educación en el cuidado materno, realiza lo siguiente como se indica.

a) Lee atentamente:
- El artículo de Juan Delval “El comienzo de las relaciones sociales: la madre”, p.
179 – 207.
- El texto de René Spitz, El primer año de vida del niño, p. 99 – 137.
- El texto de Juan Antonio García Madruga y Pilar Lacasa, Psicología Evolutiva.
Historia, teoría, métodos y desarrollo infantil, p. 457 – 487.

b) Ahora ya estás en condiciones de responder ampliamente las siguientes preguntas:

1. ¿Qué significa el concepto de carencia materna?


2. ¿Qué significa la “angustia del octavo mes”?
3. ¿En qué se diferencia el concepto de apego de algunas conductas en las cuales se
manifiesta tal apego?
4. ¿Por qué son tan importantes los cuidados del ser humano durante su primera
infancia?
5. Describe de manera sintética los aspectos que hay que considerar en la atención y
cuidado del niño durante:
 La alimentación
 El aseo
 El sueño
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1. Carencia materna: significa que la madre está ausente ya sea física o
emocionalmente; es decir, la relación madre – hijo está rota desde el momento de la
concepción, un niño no deseado tiene serios problemas afectivos, siente el rechazo,
por la falta de un buen cuidado de la madre durante el desarrollo del embarazo que
repercuten en la salud del feto, cuando nace la actitud negativa sigue afectando las
emociones de ese pequeño ser.
2. La angustia del octavo mes: hacia el séptimo u octavo mes del nacimiento, se
forman lazos más estrechos con una o varias personas específicas, cuando esas
personas faltan dentro del entorno afectivo del niño, este suele sentir ansiedad,
disgusto, agitación, ira, miedo, desagrado y lo refleja en su comportamiento.
Esto sucede porque ya distingue entre el amigo y el extraño, sentirá recelo y rechazo
hacia esa persona que significa para él algo peligroso.
3. El apego: es el vínculo que se forma entre la madre, la figura materna u otras
personas con el niño, es decir una atadura invisible que no puede observarse
directamente, que persiste en el tiempo y que se mantiene en la separación y la
distancia.
Las conductas de apego: son las manifestaciones visibles de apego “conductas que
favorecen la proximidad y el contacto” como son: el seguimiento, el abrazo, la sonrisa,
el llanto o las llamadas.
4. El cuidado del ser humano en la primera infancia es importante porque cuando el
niño nace necesita que se le alimente y cuide, también que se le oriente y guie tanto
física como psíquicamente para que pueda regular su conducta y adaptarse a un
medio socio – cultural, es una necesidad vital para su desarrollo.
5. La alimentación: no solo es una necesidad biológica, es también una necesidad
psíquica porque permite la creación de lazos de interacción muy importante para la
supervivencia emocional, cognitiva y social del ser humano; intervienen procesos de
acomodación y regulación entre el adulto que alimenta y el bebé que recibe. La
alimentación debe ser orientada hacia las necesidades del bebé que proporcionen al
niño la oportunidad de sentirse él mismo.
El aseo: las pautas de limpieza no son componentes mecánicos y rutinarios que
puedan realizarse de manera simple, deben atender tanto a la calidad, como al tiempo
y ritmo de realización.
El sueño: la dinámica rítmica del sueño/vigilia debe ser comprendida por las persona
del entorno del bebé para tratar de colaborar selectivamente a su organización,
respetar la necesidad que tiene cada niño de satisfacer su ritmo de descanso – sueño.

Conclusión
Autores como Juan Delval, René Spitz, Juan Antonio García y Pilar Lacasa, nos
muestran la importancia del cuidado del niño por los adultos en la infancia, cómo aprender a
reconocer las necesidades básicas del niño, y cómo enseñar a ese pequeño a adaptarse a la
vida socio – cultural, a la que desde su nacimiento pertenece.

“Solo dos legados duraderos podemos dejar a nuestros hijos: uno, raíces; otro, alas”.
Hodding Carter

Referencias
Delval, Juan “La capacidad de representación”, en El desarrollo humano, 6ª ed., Siglo XXI,
México, 1997, p. 179 - 207.
García Madruga, Juan Antonio y Pilar Lacasa (comps.) Psicología Evolutiva. Historia, teoría,
métodos y desarrollo infantil, UNED, Madrid, 1990, p. 457 – 487.
Spitz, René, El primer año de vida del niño, Fondo de Cultura Económica, México, 1965, p.
99 – 137.

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