El beneficioso activo de la porción conyugal.

La porción conyugal es entendida según el artículo 1230 del Código Civil colombiano,
“(..) aquella parte del patrimonio de una persona difunta que la ley asigna al cónyuge
sobreviviente que carece de lo necesario para su congrua subsistencia.”, por lo que
debe entenderse que corresponde a un derecho sucesoral, personal y claramente, un
derecho de crédito, sin embargo, no debe omitirse que en el fondo jurídico esta posee
una naturaleza de carácter indemnizatorio, puesto que al cónyuge supérstite pobre es a
quien se le otorga dicha porción conyugal; entendiendo aquella congrua subsistencia
como la pobreza relativa a la riqueza o estilo de vida que tenía antes del fallecimiento
de su cónyuge. Ahora bien, tras el análisis jurídico que se realiza en el artículo 495 del
Código General del Proceso, en su última línea, “(…) si el cónyuge o compañero
permanente opta por porción conyugal o porción marital, según el caso y abandona sus
bienes propios, estos se incluirán en el activo correspondiente.”, debe entenderse que
la denominación “activo correspondiente” refiere correctamente a que la porción
conyugal contiene solo activos, bajo el supuesto de que el cónyuge supérstite no recibe
dentro de esta porción algún pasivo, puesto que las deudas no gravan la porción
conyugal. No obstante, esta posición debe entenderse desde el siguiente punto, la
porción conyugal es una cuota no limitada pero determinable, puesto que se extrae del
patrimonio del de «cujus» y que logra ser diferente según el orden sucesoral en el que
participe el cónyuge supérstite, siendo así, si se encuentra en el primer orden
sucesoral, actuará bajo la legitima rigurosa como el hijo y esta será tomada del activo
líquido, mientras que en los demás grados herenciales, será tomada como regla
general en ¼. Por ende, se deriva la posición de afirmar que la porción conyugal solo
posee activos, puesto que desde la asignación que corresponda, hablando en este
caso, en un primer orden sucesoral, el cónyuge supérstite no deberá participar en las
deudas dejadas por el causante, sino exclusivamente en los eventos en los que los
legatarios deban hacerlo, y es posible traer a colación la figura del legatario a esta
situación, puesto que este sucede a título singular, ya sean bienes o derechos
determinados, pero en ninguna circunstancia asume el pasivo de la herencia ni las
deudas del de «cujus»; y es así como ambas figuras, son llamados de una cuota del
activo líquido, puesto que ambos van a adquirir exclusivamente los bienes y derechos
que le sean expresamente atribuidos.

Referencias.

Código Civil Colombiano, artículo 1230.

Código General del Proceso, artículo 495.

Corte Constitucional, C-283/2011. M.P: Jorge Ignacio Pretelt Chaljub

Alarcón- Palacio, Yadira Elena y Gómez- Neira Juan José. La naturaleza no alimentaria
de la porción conyugal o convivencial en Colombia, 131 Vniversitas, 65-106 (2015)

Ramón Domínguez Águila - Ramón Domínguez Benavente. Derecho Sucesorio. Tomo

II Parte VI. De las Asignaciones a Título Singular. Responsabilidad del Legatario, 846-
851