Definición

Los Cormófitos son las plantas con semilla y los helechos. Se

oponen a los talófitos (algas, hongos
y briofitos) y a protófitos (protistas y algunas algas y hongos).
Son los vegetales diferenciados en
raíz, tallo, y hojas que poseen fibras y vasos y que han
sido capaces de colonizar el medio
terrestre, donde viven en su totalidad (salvo las Zosteras, que han
vuelto a la vida marina de alta
concentración de sales). “Cormo” es el nombre del aparato
vegetativo constituido por raíz, tallo y
hojas.

El moderno Prometeo: cormofitos

Tejidos fundamentales de los cormofitos:

Parénquima: Tejido fundamental de células vivas, poco
especializadas y morfología variable. Puede ser Clorofílico, ergo
fotosintético, o de reserva
Colénquima: tejido de sostén de plantas jóvenes y herbáceas
formado por células vivas y situado generalmente bajo la
epidermis.
Esclerénquima: Tejidos fundamentales de sostén, células muertas,
de paredes gruesas y endurecidas. Mantienen la estructura de la
planta. Compuesto por fibras y esclereidas.
Partes de los cormófitos:
La raíz :
La raíz es el órgano vegetal que posee geotropismo positivo y que
generalmente se encuentra bajo
tierra.
El tallo:
Hay dos tipos de tallos con hoja: Macroblastos y Braquiblastos.
Macroblastos: Tallo con crecimiento ilimitado, continuo. Nudos
alejados unos de otros.
Braquiblastos: Tienen un crecimiento limitado. Sus nudos están
muy próximos unos a otros. Se sitúan sobre macroblastos.
Las hojas
Las hojas son la parte laminar y verde de la planta, y son siempre
aéreas. Nacen de los nudos de los tallos en forma de yema foliar,
que se diferencia según localización en lateral y apical.

Estructura
En los cormófitos encontramos dos estructuras
denominadas teloma y mesoma. El teloma es el segmento
Terminal único de un eje ramificado. El mesoma son las
porciones que quedan en las partes inferiores según el eje
se va ramificando.
Procesos básicos
Existen cinco procesos básicos en cormófitos para la
formación de flores y hojas
Culminación: los cormófitos más primitivos presentan
ramificación dicótoma (las ramificaciones crecen en la
misma magnitud). Según la culminación, una de las ramas
que se forma tendrá más potencia, crecerá más que la otra.
Por lo tanto una de las ramificaciones será principal.
Planación: también llamada aplastamiento. Las
ramificaciones dicótomas de los cormófitos más primitivos
estaban en varios planos de simetría. Por este proceso se
aplastan, quedando todas en el mismo plano de simetría.
Reducción: los ejes ramificados se reducen a un solo eje,
ya que de los meristemos que originaba las dos ramas
laterales uno de ellos desaparece.
Concrescencia: hay dos tipos, dependiendo de si se da en
uno o varios planos. Por crecimiento lateral de los ejes se
forman una serie de tejidos. Se forma una especie de
lámina si están en un plano o de cilindro si hay varios
planos.
Incurvación: los ejes se tuercen, giran y cuelgan por
crecimientos diferenciales de dos zonas opuestas

Epidermis.
La epidermis está formada por una o varias capas de
células, normalmente carentes de platos. Tienen en su
superficie externa un recubrimiento, denominado cutícula,
compuesto por sustancias insolubles en agua, como cutina
y suberina; su función es hacer impermeable la epidermis.
Ni gases ni agua son capaces de traspasar estas cutículas
(lógicamente ni en una dirección ni en otra). Con esto se
impide que el agua del interior se pierda. Pero se
requerirán estomas, que permitan la entrada y salida de
gases (sin ellos la planta moriría por no poder intercambiar
estos gases y agua con el exterior). Los estomas se abren
y cierran dependiendo de las condiciones externas.
Además las plantas de climas más secos poseen un
engrosamiento de la cutícula aún mayor.