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Antaki, Ikram. (2009). ¿Qué es el civismo hoy?

En El manual del
ciudadano contemporáneo (pp. 109-128). México: Planeta.

¿Qué es el civismo hoy?

El civismo es una virtud privada, de utilidad pública.


Parte de la ilusión de una sociedad que sería digna del
hombre. Llamar al civismo es recurrente en la historia
política y social. Se denuncia la inmoralidad, la deca-
dencia de las costumbres colectivas, luego se exaltan las
virtudes ciudadanas y las instituciones. El civismo es, a
menudo, objeto de discursos de dramatización, y de con-
fusión. Para algunos, se trata de estigmatizar la desa-
parición del discurso moral, el olvido de la cortesía, la
impotencia del Estado, la exasperación del individualis-
mo; para otros, se trata de denunciar la mundialización de
la economía y de las redes de información. El hecho es
que estamos produciendo una ciudadanía sin civismo.
Es una virtud que da nacimiento a todas las demás
virtudes particulares y manifiesta una preferencia con-
tinua por el interés público. A pesar de ser una invocación
de los derechos y de los dx eberes, a menudo el
civismo se ve reducido a un discurso de las obligaciones,
olvidan-"" "cióse su fondo de solidaridad colectiva.
Orden público, orden moral, orden social, el civismo de
los deberes busca instaurar una obligatoriedad. Pero el
culto de los deberes ya no tiene credibilidad social y el
civismo parece ser un voto piadoso de reconciliación
entre lo universal
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y lo particular. No es una cortesía social, va más allá que :a
la intención generosa y altruista. Decimos: civilidad, ur- ¿QUÉ ES EL CIVISMO HOY? 111

banidad, ciudadanía: se trata de comportamientos muy ciones individuales y el peso de las obligaciones. El com-
cotidianos de negociación con uno mismo. La cuestión portamiento cívico describe una actitud en relación con
del civismo involucra tanto al no-ciudadano como al ciu- la regla colectiva, que trasciende el razonamiento bina-
dadano; trata de la administración pública, de las elec- rio: se trata de respetar la regla más allá de la presión que
ciones, de los comportamientos. Una sociedad compleja esta regla impone. El deber confiere derechos, el dere-
y dividida acerca de sus valores necesita un fundamen- cho impone deberes y supone un compromiso positivo.
to. El acto cívico se refiere a una norma que no existe El civismo es una actitud de adhesión que valora los
fuera de la práctica. Los griegos decían que el ciudadano aspectos del interés general, moviliza la capacidad de
constituye la unidad del sujeto, que debe ser libre, para participación, de contribución, de reciprocidad de las per-
participar en la elaboración de la ley, y eA individuo, que sonas. Aquí, la calidad del individuo está en la concep-
se somete y obedece a esta ley. ción que se hace de lo que es público.
Para garantizar la existencia de una nación ciuda- El ejercicio de la ciudadanía depende de tres condi-
dana, es necesario respetar las dos exigencias. Los in- ciones: la existencia de procedimientos que organizan la
dividuos deben admitir que existe un campo público negociación, la civilidad que permite manejar la tensión
unificado, independiente de las relaciones y de las soli- entre las diferencias sociales, y las fuerzas de coherencia I
daridades religiosas, ciánicas, familiares, y deben res- y de pertenencia. Las relaciones de civilidad hablan de a
petar las reglas de su funcionamiento. Por el otro lado, la historia y del futuro de la sociedad, más que de ideas
la igualdad de la dignidad de cada quien, que funda la políticas o de resultados electorales. Provecho común,
lógica de la nación democrática, no debe ser contrariada unidad pública, bien común, interés general... tienen sus í'í r'
por desigualdades de estatuto en los demás campos de raíces en el derecho romano, en el absolutismo monár-
la vida social, especialmente en el derecho personal. El
civismo compromete lo colectivo, este lugar de me-
quico, en la teología cristiana y en la teoría moderna del
Estado.
fíjj;
diación, de intercambio entre lo privado y lo público, en fH
¿Cómo se anuda la relación social y la política? ¿Có- O
medio de la ambición ideal y las formas concretas del mo se fabrica la ciudadanía? ¿Cuál es el sistema de va- P
ejercicio de la ciudadanía. No es una abstracción; es lores que sirve para construir el sentido de la experiencia
el ejercicio de unos derechos y de unos deberes. Las prác- colectiva y personal, que legitima las reglas de la mora-
ticas cívicas se manifiestan en el espacio público del lidad pública y funda los procesos de pertenencia y de
"querer vivir juntos"; suponen compromisos, enfrenta- reconocimiento? Para la ciudadanía existente, la ciudad
mientos, hacen aceptar a los intereses particulares las de los hombres debe distinguirse de la ciudad de Dios,
leyes votadas en el nombre del interés general. Son la y lo privado de lo público; debe propagarse la creencia
negociación consigo mismo en relación con las situa- en la razón y en la inteligibilidad del mundo, e instau-
rarse la ley. La construcción histórica de la ciudadanía y
el largo proceso de secularización de la moral, llevan a
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la laicidad; son fenómenos complejos que pasan por la pública, o sociedad política, representada por la figura
palabra, los ritos, los símbolos, las constituciones y las simbólica de un Estado garante del interés general, bajo
situaciones económicas y sociales. La nación es una aso- las tres formas de: 1) un desarrollo económico, 2) una
ciación voluntaria de hombres iguales. En el Estado, sólo justicia social, y 3) una integración nacional. Esto ha fun-
quedan el interés particular de cada individuo y el inte- dado el civismo. El Estado benefactor asumía la repar-
rés general. No se permite a nadie inspirar a ios ciudada- tición de los frutos del crecimiento, y e! desarrollo de ios
nos un interés intermedio, y separarlos de la cosa pública derechos individuales y sociales. La igualdad formal y
por un interés corporativo. La república es indivisible, por jurídica de los individuos bastaba para mantener la re-
lo que se necesita un juramento y un compromiso ritual lación social. Cada quien, titular de su derecho y de sus
ante la colectividad. Pero, para ordenar las relaciones derechos adquiridos, los utilizaba para sus intereses pri-
igualitarias entre los ciudadanos, es necesario también vados y actuaba libremente en los límites puestos por
un texto: el código civil, el código por excelencia. la ley.
La educación condiciona la formación del juicio y, El trabajo no es el único medio para crear la relación
por ahí, el acceso al derecho. En los principios de la es- social, pero estructura los comportamientos cívicos. Hoy,
cuela pública, el alumno preguntaba: "¿Para qué apren- sin embargo, vemos cómo se amplía la brecha entre la
der?" Y el maestro contestaba: "el alfabeto te volverá abstracción de los objetivos y la realidad de los funcio-
amo de tu derecho". Aprender a leer y aprender la divisa namientos sociales y las presiones económicas, a la vez
republicana constituyen un solo y mismo deber. El ejér- que nos interrogamos sobre los medios para servir al in-
cito, las instituciones políticas, las asociaciones, y la terés general desde el punto de vista de la actividad po-
escuela laica, gratuita y obligatoria fueron el hogar del lítica. La afirmación de la primacía del individuo en la
aprendizaje de las prácticas cívicas. Los "húsares negros organización social y política, la debilidad de la tradición
de la República" han encarado el ideal del ciudadano- del estado de derecho, hacen que el Estado aparezca ya
soldado, en el momento mismo en que se formaban los no tanto como garante de las libertades, sino como otor-
batallones escolares. El civismo de nuestros abuelos se gador de prestaciones. La voluntad de integración ciuda-
enunciaba así: dignidad, tolerancia, laicidad; descansa- dana está puesta en duda; tenemos una crisis de la relación
ba sobre el mérito, la voluntad individual y la voluntad política, un desarrollo de los corporativismos, un déficit
política. Cada quien era libre de inscribirse en un grupo, de la credibilidad de los hombres políticos y de la legiti-
una asociación, una comunidad que respetaba las leyes de midad de las asambleas electas, y un crecimiento de las
la república; pero esta asociación era un asunto privado. diferentes formas de populismo. Tratándose de los indi-
El espacio social se divide en dos esferas distintas: la viduos, los electores, los ciudadanos, vemos surgir formas
esfera privada, o sociedad civil, suma de individuos que de "retirada cívica" y manifestaciones de comunitarismo.
defienden sus intereses particulares, donde cabe el de- Las prácticas cívicas se diversifican, ya no adoptan
sorden de los sentimientos; y, por el otro lado, la esfera forzosamente la lógica de la representación y del voto
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mayoritario. El interés general y las demandas sociales (la asociación), los temas (alojamiento, condiciones de
parecen a menudo contradictorios. Se habla de la necesi- vida en el barrio), revelan una concepción civil de la
dad de los "valores" y de la "vuelta a la moral'"; apare- ciudadanía que ya no es solamente cívica. La formación
cen nuevas formas de control social y de manipulación del juicio se vuelve un propósito democrático y, en lu-
de los comportamientos. Hemos pasado de un sistema de gar de la colectividad, tenemos a colectividades abstrac-
comportamiento centrado sobre la responsabilidad, a un tas cuyas implantaciones ya no coinciden ni representan
sistema fundado y centrado en la victimización. Un in- la estabilidad duradera.
dividuo sin obligación se transforma en "mártir" au- Nuestra cultura cívica está compuesta por la alianza
toprocíamado. Hay ruptura entre la sociedad civil y el de la sumisión a la autoridad y por la rebelión perma-
sistema de gobierno, entre la administración y la repre- nente, por el igualitarismo y por la búsqueda sistemática
sentación; y hay un paso del discurso de la responsabi- de los privilegios. Se desarrollan nuevas formas de
lidad, a un discurso de la indignación. Recurrimos a los acción política, y debemos debatir sus prioridades. El ci-
valores individuales más que al debate público. El sen- vismo no es una petición provisional, es una preocupa-
tido mismo del interés general se ha perdido. Aparecen ción por el interés general. Vemos que, cuando más se
nuevas formas de compromiso; la elevación del nivel de progresa en las categorías socioprofesionales, más crece
formación y de comunicación ha acrecentado las facul- la capacidad de emanciparse de las reglas. El difícil ac-
tades de autonomía personal. La gente rechaza cada vez ceso a la ciudadanía y la confrontación con la desigual-
más las formas de adhesión a una organización colectiva dad de las condiciones nos recuerdan que el ejercicio de i r
(como el sindicato); quiere un compromiso cortado a la la ciudadanía supone garantías contra la ignorancia y la
medida, contratos de ciudadanía para un resultado con- miseria. Esto designa la capacidad de nuestra sociedad !.SP
creto. Los principales motores de la acción son el reco- para asumir la movHidad de las condiciones.
nocimiento, la utilidad y la proximidad. Las asociaciones El orden civil supone compartir valores comunes.
constituyen la expresión pública de las opciones políticas Pero, ¿cuál es el sistema de valores que sirve para cons-
o económicas, o de los modos de vida; toman a cargo truir el sentido de la experiencia personal, que legitima
directamente los objetivos de interés general, llaman a las reglas de la moralidad pública y funda los procesos
la generosidad de los individuos y reclaman el dinero de pertenencia y de reconocimiento? Atenas y Roma de-
público. Ya no se trata tanto de la libertad de asociación, signan, en la historia del pensamiento occidental, el mo-
sino de relaciones cálidas entre asociados. Todo implica mento fundador de la ciudadanía. La participación en la
una participación diferente. dirección de la ciudadanía concierne a un círculo cerrado,
La degradación material de las ciudades nos recuer- un grupo de ciudadanos-soldados, legisladores y jue-
da que, antes del orden público, está el orden civil. La ne- ces, aislados de los esclavos, las mujeres y los extranjeros.
cesidad del debate y el principio de laicidad fundan la El cuerpo cívico contaba con 30 mil o 40 mil ciudada-
cultura republicana. Pero las formas de movilización nos. La oligarquía no rebasaba los tres mil. Ser ciudadano
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era un privilegio y comportaba obligaciones. Había ex- Lutero y Calvino rechazan el sistema católico romano
cluidos de la ciudadanía y había un espacio cívico. El de la doble moral, que funciona en los países de cultura
ciudadano era un soldado, y reinaba la ley. católica; afirman las mismas exigencias para todos y
Más cerca de nosotros, el Dios de Calvino y de Lute- promueven la diferencia entre una ética animada por el
ro impone una nueva forma de comunidad, destruyendo conflicto de las convicciones evangélicas, y un derecho
ios poderes intermediarios, y funda una relación diferente mínimo, que busca fundar pragmáticamente la coexis-
con la ley de Dios, abandonando las leyes mundanas a tencia de diversas convicciones en la misma sociedad.
la responsabilidad def los hombres. La Reforma convier- No se debe legislar imponiendo a los demás un régimen
te la sociedad en otro tipo de ciudad. Este civismo se basa político, o moral, que sería sagrado. Durante la Refor-
en la dualidad de la relación protestante con el poder, ma, las ciencias bajan del cielo metafísico para contestar
hecha de obediencia y de rechazo. Generalmente, se per- a la religión, y se establece la separación entre las leyes
cibe al protestantismo como algo cívico. Se acredita a religiosas y las leyes políticas. Las consecuencias fueron
los protestantes la capacidad de dejar su religión en su revolucionarias. El despotismo abrió la vía a la demo-
casa, para entrar en el espacio público con la sola preocu- cracia. El déspota destruyó la estructura de los poderes
pación del interés general. Durante la Revolución fran- intermediarios, volviendo posible el advenimiento de una
cesa, pedían la libertad de conciencia para todos. Fueron política fundada en el interés individual; destruyó el siste-
numerosos los que participaron en los combates y com- ma de lealtades tribales y ciánicas, atacó el separativismo
promisos fundamentales de la república. Los motivos regional y los privilegios locales, impuso una especie de
eran sociológicos: afirmaban el sacerdocio universal (o igualdad sumaria y niveló el universo político. Los desa-
todos sacerdotes, o todos laicos) y destruían las jerarquías cuerdos y las diferencias establecieron nuevas formas
religiosas, para construir asambleas de individuos libres, contractuales de consenso, basadas sobre la responsabi-
unidos por una suerte de contrato voluntario y con deci- lidad y la autodisciplina de sus miembros.
sión colegiada. Aprendían a deliberar, tenían mandatos La ley fue inventada para conservar el mundo e im-
definidos, federaban: "Se ponían de acuerdo todos, para pedir lo peor. El derecho positivo es relativo a nuestra
relacionarse en una asociación común que los defendie- historia humana, marcada por las pasiones y el caos. El
ra contra todos los que perturbaran tal acuerdo", escribe civismo será entonces escéptico, conservador, relativis-
Millón. "Este es el origen de las ciudades y de los esta- ta, sin pasión por las utopías, pero fiel a su ejercicio, que
dos. Ninguna fe mutua era lo suficientemente fuerte, por es el de crear una ética estoica.
lo que instituyeron una autoridad que prohibiera, por la En el siglo xvi nació La Boetie, quien escribió su
fuerza, toda violación de su paz y su derecho común. Tratado de la servidumbre voluntaria. En él, mostró que
Esta autoridad, este poder de autodefensa y de protec- la pirámide de la participación en la tiranía, por medio
ción, reside, por su origen, en cada uno entre ellos y uni- de pequeñas protecciones y pequeños provechos, era lo
tariamente en todos, para su bienestar y buen orden. " contrario del civismo. La servidumbre voluntaria fue
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llamada el "siervo albedrío" por Lutero; consistía en per- posible la ciudad, en un momento de caos crítico entre
der el recuerdo de la libertad original, por temor a ser sociedades tradicionales y sociedades modernas, consti-
autónomo. tuyendo el contratante libre que se necesitaba. A la vez,
Pero el tirano jamás es amado. La amistad supone la el protestantismo creó un modelo de asamblea volunta-
reciprocidad, la igual dignidad de dos seres. Este punto ria, de la cual el individuo era miembro optativo, y que
corresponde exactamente a la ética del contrato, que de- ejercía una disciplina comunitaria. Es así como nació el
sarrollaron los puritanos ingleses del siglo xvil. Calvino 1
burgués liberal. Las convicciones arcaicas desaparecen
construyó su teoría del derecho basándose en la obra de para dejar subsistir sólo las obligaciones morales, que
Séneca De clemencia. La doctrina de la predestinación forman la modernidad. El calvinismo será el primero de
afirma que somos, a priori, elegidos o reprobados por los agentes autodisciplinados de la reconstrucción polí-
Dios. Pero esto no lo sabemos. Así, la dureza teológica de tica y social; construyó un sistema político inventivo, un íl
la Reforma desemboca en la liberación política, moral y civismo puritano y revolucionario, nacido de una tran-
social. La comunidad protestante se somete a un velo de sición entre tradición y modernidad, una sociedad someti-
ignorancia. La predestinación es el equivalente exacto da a un orden de conservación. Este orden civil tomaba
de la deslegitimación, de la imposibilidad de justificar al mundo tal y como era, y buscaba evitar los males. Más
cualquier orden social, político o eclesiástico, ya que la vale, para esta ciudad, un orden injusto que una falta de
salvación escapa a la Iglesia y al Estado. Así se pierde orden. La ciudad está abierta a la crítica, que tiene como
la "fundación divina" del orden social, y se abandona objetivo el mundo tal y como podría ser. El protestan-
1
este orden a la responsabilidad de cada quien. Calvino tismo legisla para que las ciudades nuevas sean casi
se muestra pesimista en cuanto a las capacidades huma- utópicas.
nas de construir una justicia; pero se va formando una res- Se puede revocar un orden existente en nombre del
ponsabilidad individual y comunitaria donde las reglas contrato fundamental. La fuerza del contrato viene de la
no tienen más fuerza que la de un contrato libre. Cal- distribución equitativa de la responsabilidad. Este con-
vino no retorna a los argumentos medievales tradiciona- trato "obliga" y, a la vez, tiene una cierta plasticidad, que
les, no trata con ningún respeto particular a las relaciones surge del sentido de lo posible. Cada generación, frente
familiares y patriarcales. Las autoridades tradicionales só- a su verdad, puede recomenzarlo todo. A la vez, la ideo-
lo podrán durar si se reforman radicalmente. logía de la ciudad corre el riesgo conservador de casarse
El calvinismo, con su realismo político y su sistema con el dogma del mantenimiento del orden, disimulan-
de organización con disciplina, sirvió de soporte ideo- do los conflictos.
lógico a la Reforma. El protestantismo equilibró su lado
conservador con un lado revolucionario, con el fin de Entre un civismo por pesimismo político y un civismo
crear un ciudadano virtuoso, frugal y discipiinado. El por entusiasmo político, cabe la urbanidad. ¿Cómo rein-
protestante cívico será, entonces, un ciudadano que hará ventar una civilidad a la altura de la crisis que atravesa-
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mos? La urbanidad no se opone a. la "rural idad", sino a dad supone igualmente que, en esta diversidad, los ac-
la "incivilidad", tan frecuente en una sociedad que debe tores jueganfairplay, respetan las reglas, construyen un
hacer cohabitar, en un espacio restringido, una gran di- mínimo de coherencia. Esto implica, en los actores, el
versidad de formas de vida y de cultura. Esta incivilidad sentido de las responsabilidades. Esta urbanidad se opo-
tiene dos rostros cómplices: el de una indiferencia gene- ne a la incivilidad de un mundo cuya diversidad sólo se-
ralizada y el de una cerrazón en las diferencias exclusivas. ría el encierro en unas diferencias exclusivas. Cada quien
La urbanidad significa, ante todo, la benevolencia hacia ia pertenece a la vez a varias comunidades, y está obligado
diversidad de las formas de vida y de relacionarse con los a inventar una coherencia. La urbanidad no propone bo-
demás. Hay que renunciar a borrar esta diversidad e in- rrar todas las tradiciones, ni ponerlas unas al lado de oirás,
ventar una urbanidad capaz de tolerar la heterogeneidad. sin cambiarlas, sino que propone autorizar unas civili-
Aquí existe el riesgo de "lo étnico" y de los guetos. Pero dades nuevas.
se puede volver a las diferencias compatibles. La urba- A la desigualdad de ias condiciones, la república opone
nidad moderna se ha construido a través del abandono la igualdad de los deberes ciudadanos, pero ¿de cuál
de las viejas solidaridades étnicas y religiosas, por cau- nación? En este país innegablemente democrático, la
sa del éxodo rural, luego de las diversas migraciones de existencia misma de un dominio político independiente
población. Esto no habría podido efectuarse sin una pro- de los intereses particulares plantea cuestiones agudas. •
funda relativización de la identidad. Para aquel que vive La aparente desafección por la nación política es el signo
el drama de arrancarse de sus estructuras tradicionales de de una república sin ciudadanos y sin civismo. Vivimos el
identificación, una nueva identidad es posible. Nuestra "orgullo de ser mexicanos", a la vez que el cuestiona-
identidad es simplemente nuestra historia mezclada con miento de la unidad nacional.
otras; por un lado, lo que recibimos, por el otro, nuestra El civismo, virtud particular del ciudadano, encauza
obra. Sólo aceptan parecerse y juntarse los que aceptan la relación del individuo a la cosa pública, pero también
relativizar sus diferencias. ¿Cuál es la forma de la urba- postula el ejercicio de las virtudes en la esfera privada.
nidad contemporánea, a la vez capaz de responder a una El punto de unión se realiza en la calidad del individuo
búsqueda de la identidad y de hacer frente a los neotriba- y en la concepción de lo que es público. Estamos en el
lismos? La urbanidad comporta una dimensión de civis- registro de las prácticas y de los comportamientos, no
mo en el sentido republicano, que define una esfera de de las posturas. ¿Cuáles relaciones, para con el interés
legitimidad homogénea, donde los actores hablan el mis- colectivo, se involucran en las prácticas de trampa y de
mo lenguaje y se adhieren a los mismos valores de inte- fraude que son nuestro deporte nacional? Existe una dis-
rés general, de solidaridad y de participación. La civilidad tancia entre la imagen socialmente aceptable de nosotros,
que buscamos supone la aceptación del hecho de que, en aquella que formulamos, y las realidades sociológicas que
la ciudad, todo el mundo no habla el mismo lenguaje, y están enjuego en los actos de incivismo. Las relaciones
hay una pluralidad de esferas de legitimidad. La civili- con la regla y con su transgresión dependen siempre de
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MANUAL DEL CIUDADANO CONTEMPORÁNEO
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los actos sea tan flagrante como el tránsito. El ciudadano ; r
los medios de los cuales los individuos disponen para conductor negocia consigo mismo el color de los semá- <¿>5
mii -i*
sustraerse a la regla. La relación que los ciudadanos te- foros. Conducir bien y conducirse bien son testimonios
jen con las reglas (el fraude fiscal, por ejemplo) define
una trama social y marca el nivel de su cohesión. Estas
mayores de pertenencia al grupo. Cuando el código de
tránsito deja de ser un código de buena conducía, las con-
,1*
relaciones y su transgresión representan nuestro estado. secuencias van más allá del tránsito. o
Somos una sociedad que delinque sin cesar. La falta de La fuerza de ios corporativismos reside desde siem- 3?
respeto a las reglas parece arraigada en las costumbres; re- pre en la simbiosis entre los principios más nobles y los
chazamos el carácter impositivo de la regla de vida en intereses más cínicos. La administración debería ir más
sociedad. Engañamos en la vida diaria. La atomización allá, pero la magnífica idea de "administración pública"
de los individuos, la impersonalidad de las relaciones hu- ha sido progresivamente descalificada; podría reencon-
manas, desregulan el contrato social. Una cultura indi- trar su vocación original y reinventar el interés colecti-
vidualista, refractaria a toda noción de bien colectivo y vo. La construcción de la identidad personal se hace por
de valores cívicos, nos rige. Por supuesto, tenemos que el estado civil, la filiación, la socialización por la escue-
distinguir entre los diferentes niveles de fraude: aque- la y el trabajo, y la confrontación con la regla. Estos son
llos que ponen enjuego conveniencias sociales (no res- los fundamentos de la vida colectiva. Pero las dos últi-
petar la fila), aquellos que surgen del medio familiar (no mas generaciones se han construido sobre la denuncia y
respetar el horario de trabajo, copiar en un examen, men- la emancipación de la moral y el orden social, la duda
tir al seguro), y aquellos que ponen en juego la relación y la ironía, luego la caída de las ideologías y las rupturas
del individuo con la colectividad entera (robar al fisco, de la vida colectiva. ¿Acaso se puede volver hacia el in-
no declarar su trabajo). Entre los diferentes escalones de dividuo virtuoso capaz, él solo, de reordenar lo político
esas prácticas existe una permeabilidad extrema. No hay en la ciudad? Nuestra generación se ha equivocado so-
una frontera precisa entre faltar a las reglas básicas de la bre casi todo.
cortesía y de la sociabilidad, y violar más gravemente El Estado benefactor, las instituciones de socializa-
los fundamentos colectivos de la sociedad. Tomarse liber- ción (escuela, asociación), mantuvieron en los espíritus
tades con las primeras reglas lleva a una predisposición los valores del civismo republicano: probidad, trabajo,
para rechazar las otras. dignidad. El desarrollo de la cuestión urbana plantea la
Vivimos una forma de anarquía blanda. La extrema interrogante del interés general y de los objetivos del ser-
liberalización de las relaciones sociales nace de la indi- vicio público, de la naturaleza de la representación en una
vidualización creciente, que nos lleva a una pérdida de sociedad fragmentada, de los valores de la participación.
las referencias morales estructurales. Es necesario rea- El papel de la escuela fue inmenso en el aprendizaje
firmar un sistema colectivo de valores que impediría la cívico. La república se edificó sobre una referencia per-
emergencia de iracturas sociales importantes. Hay pocos manente al civismo. La educación obligatoria y laica de
campos en los cuales la oposición entre el discurso y
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los futuros ciudadanos era un asunto político. Respeto ¿QUÉ ES EL CIVISMO HOY? 125
de sí, amor a la familia, a la patria, trabajo y probidad, El Estado debe enseñar los deberes y las virtudes. La
estaban inscritos en el pizarrón; pero su enseñanza se ha neutralidad va a la par con la obligación escolar. Se trata
desmoronado. La educación cívica no es una disciplina de transformar en ciudadanos a los que eran subditos.
como otras; es un objetivo de formación. ¿Qué vamos a Sin embargo, la enseñanza del maestro está situada en
hacer en el futuro? Los padres ya no piden que la escuela unos límites tales, que nada de lo que dice debería poder
primaria enseñe a los niños a "pensar recto", sino que les ser rebatido por un padre de familia. Concretamente, se
dé una solución social. Lo que amenaza a la enseñanza es le permite enseñar la organización y las competencias
la inversión de todos en el interés privado; el éxito de las instancias electas del Estado, las relaciones de los
individual le ha ganado a la formación del ciudadano. poderes entre sí, los derechos y deberes del ciudadano.
Nos preguntamos si el civismo se enseña en la escuela, Yuxtapuesta a esta enseñanza, una instrucción moral en-
si la escuela forma ciudadanos. ¿Acaso se puede apren- señaba a los niños sus deberes hacia la patria, la fami-
der civismo como se aprenden las tablas de multiplicar? lia, sus parientes y ellos mismos. No se les dice que, si
Tenemos que referirnos al interés público. El civismo es bien hay desgracia en ser oprimido por la fuerza, hay
el heredero de los valores morales hijos del Estado lai- también vergüenza en mostrarse servil. Son la sucesión
co. ¿Cómo ha sido examinada esta cuestión por los de- de los conflictos, las dudas sobre la identidad, los cons-
más? ¿Cuáles son hoy los elementos de un aprendizaje tantes cambios de las administraciones políticas, los que
cívico? ¿Sobre qué estamos de acuerdo? La escuela debe van a acabar con la enseñanza cívica y moral. Antaño se
tener su parte en la transmisión. Pero ahí se detiene el decía que "se inculcan valores morales". ¿Acaso esto es
consenso. No se admite que la escuela sustituya a la fa- aún actual? ¿Acaso es la escuela la que puede decir a los
milia. Transmitir los valores es papel de esta última. Tam- jóvenes que le son confiados cuáles son esos valores?
poco es el papel de la escuela tratar algunos aspectos del ¿Cómo hablar de los valores del trabajo, el esfuerzo, la
conocimiento ligados al civismo, como la política; ni ha- gratuidad del gesto, cuando triunfan la facilidad, la ren-
blar de moral sexual. ¿Entonces, de qué puede hablar? tabilidad y la ganancia fácil?
Danton proclamaba que todo se encoge en la educación El civismo es el papel y el peso de la ley en una so-
doméstica, y todo crece en la educación común. Pero de- ciedad. ¿Qué pasa con la idea de ley? El valor de ejemplo
cimos que la escuela no tiene el derecho de interponerse de los comportamientos, y la reflexión, son los verdaderos
entre padre e hijo, siendo la familia anterior al Estado. medios para aprehender los valores morales de una so-
El civismo aparece como el pariente pobre de los progra- ciedad. No se puede obligar a un individuo a ser libre.
mas escolares. Para Condorcet, la laicidad escolar consiste La libertad se ejerce. Si tenemos la ambición de restau-
en ser independiente de todos los poderes o, entonces, la rar la ciudadanía a través de la escuela, la instrucción cí-
enseñanza del civismo será la de la religión política del vica debe volverse una disciplina seria, con programas
Estado. que relacionen entre sí a las demás disciplinas escola-
res. La educación cívica y moral es una edificación pro-
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gresiva de las civilizaciones. A los 18 años, edad de la co alemán y los problemas del desarrollo, las condicio-
mayoría, muchos alumnos ya son ciudadanos. Para mu- nes del desarrollo del nacionalsocialismo (la crítica his-
chos estados, la educación de la ciudadanía pasa por la tórica).
educación de los derechos del hombre y éstos compren- En Gran Bretaña, la disciplina escolar es a veces du-
den los derechos del niño. ra, conformista, busca desarrollar el espíritu de equipo.
¿Qué hacen otros países? La escuela alemana.no va- La noción de ciudadanía, o de civismo, parece extraña a
cila en atribuirse objetivos de moralización de los alum- la mentalidad británica. A todas las edades de la vida, el
nos, incluso en la enseñanza cívica. El alumno alemán individuo es miembro de un grupo bien identificado (es-
es considerado como un ciudadano, sujeto de derechos cuela, club, empresa), cuyas reglas de existencia, valores
independientes. El derecho a la libre expresión de las opi- y ambiciones comparte con los demás: tiene el sentimien-
niones de los alumnos, incluyendo la libertad de prensa to de pertenecer a esta comunidad restringida y es cons-
escolar, es real, como el de crear asociaciones. La cen- ciente del privilegio que esto le confiere. Hay diferentes
sura de los textos publicados por los alumnos sería ile- ciudadanías en función de los medios. La importancia de
gal. Los jóvenes alemanes practican cotidianamente sus la conciencia comunitaria es el equivalente británico
derechos. La escuela debe transmitir el saber, las habili- de la ciudadanía. El civismo escolar es cotidiano y se ex-
dades y las aptitudes, volverlos aptos para el juicio crítico presa a través de la school assembly. En esta instancia se
y autónomo, el comportamiento responsable y la acti- crea el sentimiento de pertenencia a la comunidad: pri-
vidad creativa; educarlos para la libertad y la democra- mero, la escuela; luego, la ciudad; luego, la nación. La
cia, la tolerancia, el respeto de la dignidad del otro y el institución de los tutores y las reglas implícitas que rigen
respeto de la convicción del otro; despertar en ellos una el funcionamiento del grupo ayudan en esta tarea. Ahí
convicción pacífica que busca el entendimiento entre los rigen dos nociones: 1) la de pertenencia al grupo, con los
pueblos, volver comprensibles las normas éticas y los va- derechos y deberes que conlleva; y 2) la del consenti-
lores culturales, alentar en ellos la disposición a la ac- miento. Se enseña el civismo por la práctica de la vida
ción social y a la responsabilidad política, calificarlos escolar.
para el ejercicio de los derechos y deberes en la socie- La libertad de asociación constitutiva de la sociedad
dad, e informarlos sobre las condiciones del mundo del civil, las prácticas asociativas, cuna de la sociabilidad,
trabajo... reanudan la relación cívica. Espacio altruista de com-
La enseñanza cívica empieza entonces por la prác- promiso, de integración, de reconocimiento, la asocia-
tica de la ciudadanía escolar y sigue en la educación ción se vuelve un espacio político cuando su objetivo va
secundaria, a través de la enseñanza de las ciencias po- más allá de la suma de los intereses particulares de sus
líticas y sociales, con el objetivo de la educación cívica miembros y consiste en encargarse del interés general.
nacional. Los temas de la enseñanza son: la noción de La interiorización de las reglas de la vida social, mo-
democracia, los derechos del hombre, el sistema políti- tor de la emancipación individual y del trabajo, estructura
128 MANUAL, DEL CIUDADANO
CONTEMPORÁNEO
los comportamientos cívicos y ocupa un lugar importante
en la concepción de la ciudadanía. Quedarse fuera del
mundo del trabajo es una agresión a la vida colectiva, a
la relación política, al sentimiento de solidaridad. Que-
darse sin trabajo fragiliza los fundamentos de la vida
común.
La ciudad es el espacio de la sociabilidad, es el pri-
mer lugar del ejercicio de la ciudadanía. Tiene que volver
a ser un espacio de calidad, tener límites y referencias, así
como espacios públicos.
II

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