TALLER CONCEPTO DE NORMALIDAD Y CLASIFICACIÓN DE LOS
TRASTORNOS MENTALES.
1. Mencione y explique los criterios de normalidad.
Criterio normativo o social: El comportamiento normal, es el que satisface
lo que está establecido en un determinado entorno cultural. Es fundamental a la hora de valorar la salud y la enfermedad mental. Distintas épocas y distintas culturas han entendido diferentes estados del individuo como patológicos o normales. Los patrones de conducta desadaptativos del trastorno de la personalidad son considerados en un determinado contexto cultural. Esto sería así porque cada grupo o sociedad, dispone de un sistema de normas y no existen conductas humanas que sean normales o anormales en absoluto, sino con respecto a un contexto.
Criterio estadístico: Lo normal es lo que aparece con mayor frecuencia. Se
han señalado dos deficiencias notables a este criterio no discrimina ni matiza las anormalidades que, por exceso o por defecto, se sitúan en los extremos de la curva de Gauss (p. ej., los superdotados y las oligofrenias). No queda aclarada la esencia de la normalidad, así como tampoco los límites de salud y de enfermedad.
Criterio de estado no patológico : Parte del criterio médico de normalidad en
el cual se diferencia claramente entre enfermedad y salud. Esta última supone taxativamente la ausencia de síntomas. Bajo este prisma, que puede parecer muy pragmático, se escapan todos aquellos trastornos que implican problemas de relación inter o intrapersonal, como las neurosis de carácter o las psicopatías, pero sin clínica aparente. Margina, obviamente, la posible profilaxis.
Criterio adaptativo: Capacidad de adaptación de un individuo en un sistema
de oferta y demanda y de costo beneficio. Esta tiene límite. «La salud mental es la adaptación de los seres humanos al mundo y a los otros, con un máximo de eficacia y felicidad» (Karl Menninger). Es un criterio social. Luerton define la enfermedad como un modo de adaptación particular del individuo entre objetivos culturalmente aceptados y medios institucionalizados para adaptarlos.
Criterio funcional: Individuo proactivo, responsable de su propio cuidado y
de su salud física y mental. El comportamiento se adecua a las normas y mantiene una actitud crítica frente a su comportamiento individual y colectivo.
2. Mencione y explique los criterios de conducta anormal.
-Sufrimiento: La anormalidad produce sufrimiento.
No todo lo que produce sufrimiento es patológico.
-Desadaptación: Un comportamiento ha de ser funcional y adaptativo, ha de
permitir conseguir unos objetivos: Supervivencia Bienestar
-Irracionalidad e incomprensibilidad: Los comportamientos incomprensibles
(sin significado racional) tienden a considerarse anormales.
-Pérdida de control: El comportamiento de las personas que nos rodean ha
de ser predecible, ha de tener consistencia y control -Excentricidad: Comparador: normal o anormal en función del nuestro Frecuencia: poco frecuentes se consideran anormales (excepto los dones)
-Incomodidad para el observado
-Violación de normas morales
Se considera normal ser leal, fiel, no ser demasiado ambicioso, agresivo, tímido.
3. El concepto de normalidad está influenciado por algunos factores.
Menciónelos y explique como lo hacen.
El concepto está influenciado por factores históricos, culturales, sociales,
económicos y políticos, así como diversos elementos antropológicos y epistemológicos; determinando de esta manera las diferentes posibilidades conceptuales y de intervención que se desprenden de cada una de las perspectivas. El concepto de normalidad puede ser muy relativo según el tiempo y el espacio que se vive, es por eso que para lograr definir “la normalidad psíquica” nos valemos de ciertos criterios que brindan una visión clara y logran aterrizar el concepto según la necesidad, pero además de la influencia de dichos criterios encontramos también la participación de diversos factores que logran delimitar el concepto para hacerlo más comprensible sobre el entendimiento del individuo, dentro de los cuales se encuentran las habilidades, actitudes, condición física, que constituyen sus características personales y que pueden ayudarlo a enfrentar la naturaleza de diferentes situaciones para lograr una correcta adaptación y no caer en un estado de anormalidad psíquica.
4. Cree usted que clasificar las enfermedades en categorías diagnosticas es
correcto. Sustente su respuesta.
Si, lo considero correcto porque al categorizarlas permite una mejor
intervención, facilitan su tratamiento y posteriormente la recuperación que necesite la patología a la que se esté enfrentando el paciente.
5. Mencione al menos tres cambios en las categorías diagnosticas entre el
DSM IV revisado y el DSM V. Se hace una división de la sección de Trastornos afectivos en dos unidades, una en Espectro bipolar y trastornos relacionados y la otra en Trastornos depresivos. Este cambio nos parece que resalta la importancia de separar estas entidades en categorías diferentes, reconociendo la heterogeneidad que implicaba el término "Trastorno del estado de ánimo". Además, se añadió un especificador de "síntomas de ansiedad" tanto para las secciones bipolar y depresiva, lo cual debería fomentar la atención que merece este dominio de síntomas y reconocer que esta comorbilidad es bastante frecuente.
En la categoría de los trastornos depresivos, el duelo no excluye el diagnóstico de
depresión. Este es quizás uno de los cambios más polémicos. Si bien los autores han esgrimido múltiples razones para omitir dicha exclusión, consideramos que la nota aclaratoria que intenta resolver esta difícil distinción entre duelo y depresión mayor puede resultar insuficiente para el clínico en formación y podrá llevar a la medicalización innecesaria de una de las experiencias más comúnmente vividas por todos los seres humanos, especialmente dado que hay mucha variabilidad individual y cultural en su afrontamiento (19-20). Quizá si queremos eliminar el estigma y los prejuicios que hay alrededor de la patología psiquiátrica, incluso desde otras ramas de la medicina, es importante evitar patologizar situaciones normales.
El espectro obsesivo compulsivo, una nueva categoría diagnóstica, consideramos
que reconoce la creciente evidencia que estos trastornos están relacionados entre sí en términos de una serie de validadores de diagnóstico (21). De hecho, al ser incluido como un subtipo de trastorno de ansiedad, el trastorno obsesivo compulsivo muchas veces veía reducida su complejidad a la aparición o no de síntomas ansiosos, desconociendo sus demás diferencias con los otros trastornos de este grupo. Además, los especificadores de "insight" para el TOC creemos que han quedado redefinidos de una manera más clara en términos diagnósticos y terapéuticos.