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CONTROL GUBERNAMENTAL Y RESPONSABILIDAD DE FUNCIONARIOS

PÚBLICOS
Resumen:
La INTOSAI, la cual es la Organización Internacional de las Entidades
Fiscalizadoras Superiores, precisa lo que representa el control gubernamental
para la gestión pública, señalando que ésta institución de control será una parte
imprescindible de todo un mecanismo encargado de la regulación; esta institución,
va a señalar las desviaciones normativas, así mismo la infracciones a ciertos
principios como el de legalidad, rentabilidad, utilidad y racionalidad de las
operaciones financieras, estas infracciones tienen que ser relevantes, ello con el
fin de que si el órgano es culpable, realice la indemnización correspondiente y que
no se vuelvan a repetir las infracciones en el futuro. De esta manera el control
gubernamental busca enderezar conductas ineficientes, ilegales, irracionales o
antieconómicas de manera eficiente.
Para poder regir el control gubernamental se establecen principios tales como: el
principio de la universalidad, el carácter integral, la autonomía funcional, el
carácter permanente del control gubernamental, el tecnicismo y especialización de
control, el principio de legalidad, el principio del debido proceso de control, el
principio de eficiencia, eficacia y economía, el principio de oportunidad, la
objetividad del juicio, el principio de materialidad o de importancia relativa, el
carácter selectivo del control, la presunción de licitud, el acceso a la información,
la reserva, la continuidad de las actividades, la publicidad, la participación
ciudadana y la flexibilidad.
El principio de universalidad se refiere a que los órganos de control van a poder
efectuar control sobre todas las actividades de la entidad, en todos los
funcionarios y servidores. El carácter tiene que ver con que el control va a tener
acciones y técnicas que van a evaluar los beneficios económicos y sociales
obtenidos en la entidad. La autonomía funcional se refiere a que el control solo se
puede cumplir siendo independiente a la autoridad, los órganos de control deben
de ser independientes. Respecto al carácter permanente del control
gubernamental, es una función que va a vigilar los procesos y operaciones de la
entidad de forma continua. El tecnicismo y especialización de control será el
sustento de la operatividad de éste. El principio de legalidad está referido a que,
para el funcionamiento de las acciones de fiscalización, debe haber una norma
que lo habilite. El principio del debido proceso del control, señala que, en toda fase
se debe garantizar el respeto a los auditados o terceros en las fases de acción de
control. El principio de eficiencia, eficacia y economía, precisa que el proceso de
control debe atender objetivos precisos, con el menor costo y con una buena
utilización de recursos tanto humanos como materiales y financieros. El principio
de oportunidad señala que las conclusiones y recomendaciones de las acciones
de control, deben presentarse en el momento debido y no fuera del tiempo. La
objetividad del juicio, apreciación, conclusiones y recomendaciones, se refieren a
que las acciones de control serán exactas, rectas e imparciales, sin tomar en
cuenta apreciaciones subjetivas. El principio de materialidad o de importancia
relativa, señala que, al momento de realizarse la función de control, ésta se
centrara en las transacciones y operaciones de mayor relevancia. El carácter
selectivo del control, se referirá al hecho de realizar el control en los órganos y
actividades que denotan más riesgo, debido a que no se pueden atender a todas
las instituciones. La presunción de licitud o de inocencia, hace referencia a que los
funcionarios, servidores o autoridades, no pueden ser imputados si no existe
evidencia de su responsabilidad, la cual debe ser obtenida de forma legal. El
acceso a la información se refiere a la facultad que tienen los órganos de control
de examinar todos los documentos acerca de las operaciones de entidad. La
reserva, señala que durante el momento de control se debe guardar reserva para
así no perjudicar o causar daño a la entidad. Respecto a la continuidad de las
actividades o funcionamiento de la entidad, se señala que, el control no puede
impedir u obstaculizar las funciones que tiene la autoridad, por ello no debe dar la
impresión de participación en ningún aspecto. La publicidad hace referencia a que
se debe difundir los resultados de las acciones de control de forma oportuna,
siempre mediante los mecanismos considerados pertinentes por la Contraloría
General. La participación ciudadana, va a permitir que la ciudadanía pueda
colaborar con el control gubernamental. Finalmente se encuentra la flexibilidad, la
cual dará permisibilidad en cuanto a las metas que se tienen con respecto a los
formalismos, pero que no son aspectos relevantes en la decisión final.
Conclusiones:
En conclusión, el control gubernamental se va a encargar de regular la
conducta de los agentes públicos para poder evitar desviaciones que pueda
haber contra las normas, para ello, actuarán sobre los casos necesarios, de
gran importancia y que pueden constituir un mayor riesgo. Todo ello con el fin
de mejorar las instituciones y el poder ayudar al servicio público. Para lo cual,
existen principios que van a regir el control gubernamental, tales como el
principio de legalidad, de universalidad, del debido proceso, entre otros. Cada
principio va a precisar el accionar de éste órgano de control y todos los
principios conjuntamente harán que la Contraloría General de la República
logre un Estado sin corrupción.

Recomendación:
Se recomienda que la Contraloría General de la República, siga cumpliendo con
sus funciones y principios en la máxima medida posible debido a que según el
CPI, que es el Índice de Percepción de la Corrupción, el Perú ha bajado 14
posiciones con respecto al 2019, lo cual indica que el nivel de corrupción ha
crecido más este último año; es por esta razón que la Contraloría General de la
República debe continuar realizando sus funciones de la forma en como lo ha
venido haciendo, siendo regida por principios que se complementan unos con
otros, y tratando de mejorar cada vez más su accionar. Si bien es cierto, por la
pandemia actual, resulta más difícil contar con la ayuda de la ciudadanía, sin
embargo, este no debe resultar un impedimento para que la Contraloría General
de la República siga realizando los controles eficientes como ha venido haciendo a
lo largo de estos años. La función que realiza es indispensable para el desarrollo
del país. Cada persona que trabaja dentro de ésta Institución de Control, va a
cumplir con un rol importante, y es necesario estas personas traten de cometer
errores en lo más mínimo, debido a que tienen una gran carga sobre ellos, que es
un buen manejo de los bienes de Estado que al final va a beneficiar a toda la
población en general.
De la misma forma, la reputación que se ha ido ganando la Contraloría General de
la República, no debe verse dañada de ninguna forma, debido a que manteniendo
una buena reputación, ayudará a que más personas puedan confiar en que los
bienes con los que cuenta el Estado, serán utilizados de una buena forma, y con el
paso del tiempo se espera que la corrupción en nuestro país reduzca
considerablemente, ya que a pesar que se está trabajando en ello, aún queda un
largo camino por recorrer, y en ese camino, los ciudadanos también van a cumplir
un rol importante si empezamos actuando de forma correcta hasta en las cosas
más mínimas.

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