Juan Pancho Teodoro Brígida Pepito Charly Marti Salvador Magdalena Mili Abuela
I
Escenografía:
Living amplio y confortable, muy bien arreglado y con detalles de fina decoración. Sobre el costado derecho, entre las escaleras y la habitación de servicio, un mueble bargueño con un equipo de música. En el centro un amplio sillón de tres cuerpos, y sobre el costado izquierdo un equipo musical. A cada costado del sillón principal, un sillón de un cuerpo, y al medio una mesita ratona. Sobre el fondo a la derecha unos escalones, que supuestamente dan a las habitaciones de arriba. A la derecha y al centro la habitación de servicio y adelante, la puerta de cocina. Sobre la izquierda al fondo la puerta de calle, a su lado un perchero de pie, adelante la puerta del escritorio y al medio una puerta de baño de servicio. Sobre el fondo un ventanal.
II
La escena está vacía, Suena la música de apertura y se va confundiendo con el sonido de cuando comienza a sonar el timbre, pero su sonido es ininterrumpido. Sin pausas. Insistente e interminablemente.
JUAN EN OFF: Ya va!! (El timbre sigue sonando sin parar) Dije que ya va!! (Juan gritando y notoriamente malhumorado, viene bajando las escaleras, con el pelo revuelto, descalzo, sin camisa y abrochándose el cinturón del pantalón) Ya voy!!!!!!! (Llega hasta la puerta de calle, y al abrir entra Pancho, con un paquete y una botella envuelta, y Juan destraba el timbre que deja de sonar) PANCHO: (Entrando) Oiga… Me parece que ese timbre anda mal… JUAN: (Extrañado por su desvergüenza) Perdón?? PANCHO: No tengo qué perdonarle. El timbre es suyo! (Por su vestuario) Interrumpí algo? JUAN: Vos quién sos? PANCHO: Francisco. Algunos me llaman Pancho, otros como mi jefe, el enfermo, porque dice que soy medio estúpido; Otros por teléfono… JUAN: (Interrumpiéndolo) Encantando. Me refiero a… en qué te pudo servir? PANCHO: Usted no pidió servicio de cáterin para hoy? JUAN: Ah, sí! Y cuando llega? PANCHO: (Mostrando el paquete y la botella) Acá está! (Lee un papelito, lo recita como un chico en la escuela con ademanes exagerados, se le acerca a Juan y le da un beso en la mejilla) “Feliz cumple para el amor de mi vida! Firmado: tu marido que te adora y que sin ti no existiría!!” No se ofenda, pero para la próxima, tratemos de evitar esto de los mensajes con besitos, eh? (Juan se arma de paciencia. Le arrebata el papelito, lo lee y se lo devuelve) JUAN: Esta no es esa dirección! Yo pedí un servicio de catering para hoy, para veinte personas y una torta, la cual ayer me la traje yo personalmente. Y para la semana que viene catering completo con desayuno, almuerzo, merienda y cena durante todo el rodaje de la película! PANCHO: (Cotejando otros cientos de papelitos en todos sus bolsillos) Ahhh… Puede ser que se me hayan traspapelado. Usted sabe… Tantos pedidos… (Vuelve a leer otro) Me parece que es éste… (Lee) “La llegada de ese hijo, es un presente divino, y ya no importa que no sepas quién es el padre… ni que lo hayas parido en un colectivo!!”
(Pausa los dos se miran. Juan harto y Pancho dubitativo) En serio lo parió en un colectivo?? JUAN: (Empezando a perder la paciencia) Me podés hacer el favor de volver al negocio y traerme el cáterin que pedí?? Mi dirección es Santa Isabel 48!! PANCHO: (Mientras va saliendo) Como usted diga… (Antes de salir, se detiene en la puerta y lo mira intrigado) En un colectivo?? Por qué no se tomó un taxi??!! JUAN: Decime… Vos me viste bien a mí?? Yo soy hombre!!! PANCHO: Ahhh… ahora si… (Va a salir, pero antes pregunta) Y cómo hizo para quedar embarazado?? JUAN: El cáterin!!!! (Juan lo empuja para que salga y le cierra la puerta) Adiós!!!! (Luego de cerrar, Juan va hasta el perchero del fondo en donde hay una camisa y se la pone. Cuando termina, vuelve a salir hacia escaleras arriba y empieza a sonar el timbre sin interrupción. Comienzan a escucharse golpes secos como de martillazos. Juan, muy malhumorado) Dejen en paz ese timbre!!!! Pero será posible…???!! Qué pasa hoy, que no pueden parar de llamar????!!! (Llega hasta la puerta y al abrir se ve a Teodoro, viste impermeable, con un paraguas de los pequeños plegables, colgando de su brazo, con el rostro desencajado, y con el zapato en su mano, dando golpes enloquecidamente con el taco del mismo, sobre el timbre que está del otro lado de la puerta, hasta que de pronto el sonido se detiene. Teodoro suspira entre aliviado y exhausto. Se seca la transpiración y le dice a Juan que lo mira sin poder creer) TEODORO: No me lo vas a poder creer, Juan… JUAN: Teodoro! Qué pasó?? TEODORO: (Suspenso, mira a uno y otro lado y se le acerca como para decirle un secreto) Se trabó el timbre! JUAN: (Mientras le señala el interior de la casa, para que ingrese. Teodoro entra y llega hasta el sillón) Bueno, no te preocupes… No sos el único. Hace un rato, otro imbécil también lo apretó tan fuerte que se le trabó! (Pausita. Juan repara en lo que dijo, pero Teodoro no. Observa cada rincón de la casa como buscando algo) Ponete cómodo… Qué buscás? TEODORO: Dónde puedo dejar el paraguas y el impermeable? JUAN: (Le señala el perchero a su lado) En el perchero. Pero no entiendo… para qué trajiste todo esto? Hay un sol radiante! TEODORO: (Mientras intenta colgar torpemente el paraguas y éste se le abre una y otra vez) No escuchaste el noticiero a la mañana? JUAN: No. Dijeron que iba a llover? TEODORO: (En tono de seria advertencia) Veinte por ciento de probabilidades de lluvia!!! JUAN: (Irónicamente) Veinte por ciento?? TEODORO: Si, ya sé. Es poco. Pero, y si se da??! (Mientras sigue luchando para cerrar el paraguas y sacarse el impermeable al mismo tiempo por lo que se enreda cada vez más, y hasta intenta pasar el paraguas por una de las mangas) En la ruleta, cuando apostás a un número, tenés una probabilidad de ganar del 2,7 por ciento. Y sin embargo, hay gente que gana, no? Quiere decir que un veinte por ciento, es mucho!! Yo observaba por la calle mientras venía y era el único con paraguas!!! Y todos me miraban! Sabés por qué ? JUAN: Si… porque sos un p…! TEODORO: Previsor, exacto!! Porque se daban cuenta que yo era el único previsor!! Je, je!! Cómo me voy a reír cuando se largue un chaparrón y queden todos empapados! Todos menos yo!! Je, je! JUAN: Bueno… en cuanto aparezca alguna nube, te aviso… Querés tomar algo? TEODORO: Cualquier gaseosa. La que tengas a mano. JUAN: (Va a salir hacia cocina) Okey… TEODORO: Que sea Cola en lo posible. Y dietética. Pero no Pepsi porque es muy dulce. JUAN: Una Coca Cola Dietética! TEODORO: Buena idea!! (Juan sale y Teodoro sigue luchando con el paraguas y el impermeable.) JUAN EN OFF: (Llamando) Teodoro!! TEODORO: (Respondiendo casi en un grito) Voy!!!! JUAN EN OFF: No! No hace falta… simplemente quería saber si la querés con hielo! TEODORO: Me da lo mismo! Pero si es con hielo, que sea con cubitos de agua mineral. El agua de la canilla no me cae bien. Mucho cloro!! Pero si no tenés, no te preocupes… puedo tomar café. Eso sí, sin cafeína. Y que sea del granulado que tiene mayor consistencia. Y con edulcorante, porque el azúcar también me cae mal. (Al intentar pasar el paraguas por la manga del impermeable, desgarra la manga, rompiendo todo. Vuelve a tomar su zapato y comienza a darle golpes al paraguas para que se quede cerrado, pero termina destartalándolo todo) Y si tampoco tenés, no te preocupes demasiado… prefiero tomar un té… (Juan entra con un vaso de gaseosa en la mano y se queda mirando a Teodoro, que a su vez no lo advierte, en el piso, martillando el paraguas con el taco de su zapato, rompiendo todo y desgarrando totalmente el impermeable.) Eso sí, con mucho limón. Pero natural, no de los que vienen en botellitas, porque traen esos conservantes, que me dan urticaria. Y si lo podés cortar con un poquito de leche, mejor. Eso sí, si le ponés leche, que sea té sin limón. Y que la leche sea descremada! Eso es muy importante! Máximo, uno por ciento de grasa! Aunque si tenés de soja, mejor. Ni se parece a la leche. Es asquerosa, pero mucho más sana… Ahora si… Ya está! (Termina de desgarrar y romper tanto el impermeable como el paraguas, y lleva los desechos hasta el perchero, los cuelga como puede y muy naturalmente como si nada hubiese pasado. Vuelve hasta donde está Juan esperando con el vaso en la mano) No es muy oscura para ser leche de soja? JUAN: Es Coca Dietética! TEODORO: Ahhh..! Que suerte! Gracias! Si hay algo que me da asco, es la leche de soja!! (Agarra el vaso y se lo va bebiendo mientras llega hasta el sillón) JUAN: Teodoro… TEODORO: (Igual que antes) Voy!!!! JUAN: No! No te llamaba… simplemente, me llamó la atención que hayas venido tan temprano. Faltan dos horas para el ensayo de la película. Quedamos a las seis, te acordás? TEODORO: Si. Lo sé. Solamente en el 0,28 por ciento de las posibilidades, yo me puedo olvidar de algo importante. Y eso lo comprobé en la escuela secundaria. Solamente en el 0,28 por ciento de los días, me quedé dormido y llegué tarde! Y toda mi vida fue así! JUAN: Ahá… Y yo que porcentaje tengo de saber, por qué viniste tan temprano? TEODORO: Es que… Yo querría hablar a solas con vos… Juancito… (Comienza a alejarse hacia el otro extremo del escenario) No sé si te habrás dado cuenta… o tal vez sí… o no… de que yo soy… digamos…. Un poco inseguro… Algo indeciso, o no… pero lo era… aunque lo sigo siendo… pero no tanto… no sé… O tal vez, sí. JUAN: (Paternalmente, como intentando calmarlo) Teodoro… TEODORO: (Igual que antes) Voy!!! JUAN: No vayas a ningún lado! Ya estamos acá!! Tranquilizate… TEODORO: Me puedo sentar? JUAN: (Con mucha amabilidad) Estás en tu casa. TEODORO: En serio? JUAN: Por supuesto! TEODORO: (Mirando detenidamente la decoración) Pensé que era la tuya! JUAN: (Haciéndose de paciencia) Quiero decir… buéh, no importa! Ponete cómodo y decime cuál es el problema. TEODORO: Es que… Juan… No estoy seguro de poder hacer ese papel. Me parece que no es para mí! JUAN: Teodoro… (Teodoro va a responder pero Juan le tapa la boca para que no hable) Ya lo hablamos varias veces, te acordás? Cómo no vas a poder hacerlo??, Es muy sencillo. Un actor de tus quilates… De tu trayectoria… Con toda tu experiencia… TEODORO: (Inocentemente) Solo hice dos comerciales. Fueron suficientes para todo eso?? JUAN: (Pausita) Pero fueron dos comerciales muy importantes!!! No desmerezcamos!! Cuánto tiempo llevó hacerlos, eh??? TEODORO: Si!! Muchísimo!!! (Orgulloso) Solamente la escena en que tenía que abrir el paraguas me llevó un día entero!!! JUAN: (Mirando el perchero) No me caben dudas!! Por eso te convoqué para esta película! Tenemos el éxito asegurado!! Porque tu rostro está en todas las revistas! En todos los afiches que empapelan la ciudad!! En la tele, en el cine… Tu cara está en todas partes!!! TEODORO: (Contento) En la radio también?? JUAN: (Sin saber qué decir) Está previsto para dentro de poco! TEODORO: Y yo que pensé, que me habías llamado por mi talento… JUAN: (Lo mira sin saber qué decir y cambia de tema) Este personaje, es un cura que se encuentra con su primer amor de la adolescencia… Y ella todavía está enamorada de él… Y quiere volver con él. Por eso trata de seducirlo nuevamente… TEODORO: Y él? JUAN: Él, nada! TEODORO: Le gusta la natación? JUAN: No! Que no hace nada! Ni caso le hace! TEODORO: Por qué? JUAN: Cómo, por qué? No te dice nada que esté vestido de negro? TEODORO: Ahhh… Se le murió un familiar. JUAN: No! No está de luto! TEODORO: Es gay?? JUAN: Es Padre!! TEODORO: De ella??? JUAN: No!! Padre!! Sacerdote!! TEODORO: Padre del sacerdote??? JUAN: No!! Cura!!! TEODORO: Es doctor??? JUAN: (Toma paciencia. Respira profundo. Mira el reloj) Habría que prender la radio… anunciaron que hoy iba a salir una foto tuya. TEODORO: (Muy contento y orgulloso) En serio??? Y no dijeron a qué hora? JUAN: (Lo mira sin poder creer) En cualquier momento… Mientras, sería conveniente que leas un poco el guión de la película, antes del ensayo, no te parece? TEODORO: No hace falta! Lo leí cuatrocientas veces. Ya me lo sé de memoria! JUAN: Ya lo leíste…??? Y si lo sabés de memoria, cómo no te diste cuenta que el cura…?? (Transición. Lo mira sospechosamente) Seré curioso… Si no es mucha molestia, me podrías decir qué papel estudiaste? TEODORO: Desde luego! El de Mario!! JUAN: Mario?? TEODORO: Si… No me digas que no lo conocés?! Es uno de los más importantes! Está en casi toda la película!! JUAN: (Tratando de contener la ira) Yo escribí ese guión!! Sé perfectamente qué personajes hay!! Y no existe ningún Mario!!! TEODORO: (Sacando el libreto de su bolsillo y lo exhibe sobradoramente) Ah no??! Y acá qué dice?? JUAN: Ahí dice “María”!! TEODORO: (Mira el libreto incrédulo) En serio?? JUAN: (Tratando de contenerse) En serio!! TEODORO: No dice Mario?? JUAN: No! No dice Mario!! Dice María!!! (Casi lagrimeando de la impotencia) Estudiaste la letra de un personaje femenino!!! TEODORO: Me pareció que la escena con ese cura era un poco rara! No tanto cuando se acostó con el delincuente… Pero sospeché que algo no estaba bien, cuando en el final aparece embarazado!! Pero en el cine todo es posible… Y como vos sos tan raro…!! Tenés más gaseosa? JUAN: Yo, soy raro??!! (Suena el timbre, pero sin trabarse) Así se toca el timbre, ves?… con delicadeza, no se traba! TEODORO: Si. Veo. Tendría que practicar un poco. Querés que empiece ahora? JUAN: No!!! Andá a la cocina a servirte lo que gustes! Yo voy a abrir la puerta. (Teodoro empieza a salir hacia cocina) Eso sí, tené cuidado de no abrir la heladera de golpe, porque un soporte está un poco flojo y se puede derramar algo! TEODORO: (Mientras va saliendo y Juan va hacia la puerta de calle para abrir) Confiá en mí! Soy un poquito torpe, pero no para tanto… (Sale. Juan abre y entra Brígida muy ansiosa, vistiendo pollera ajustada, remera y un gran pañuelo de seda sobre el cuello) JUAN: Brígida! Qué hacés acá?? BRIGIDA: Briyit, nene!! Te lo dije un millón de veces!! Mi nombre artístico es Briyít!! JUAN: Briyít!! Se puede saber qué cuernos hacés acá??! Estoy muy ocupado!! BRIGIDA: Si!! Ya me enteré!!! Por eso me vine volando!! Cómo es eso que empezás a filmar la película y no me diste ni un mísero papel??!! Soy tu hermana o qué??!! JUAN: Entendeme, Brígida… BRIGIDA: (Muy enérgica) Briyít!!! JUAN: Briyít! No tiene nada que ver que seas mi hermana!! Esto es un proyecto muy serio, y hay un productor que invierte mucho dinero, entendés?! Para cada papel se hace un casting y se eligen a los mejores! BRGIDIDA: (Desconfiadamente) Y vos… estás seguro que elegiste a los mejores y no te dejaste influenciar por un buen par de piernas, por casualidad?? JUAN: Por supuesto que no!! Soy un profesional!! Elegí a los mejores y los más capacitados!! (Se escucha el ruido de varias botellas que se estrellan contra el piso) TEODORO EN OFF: Upss!!!! BRIGIDA: (Señalando a la cocina) Estás con alguien? JUAN: Si… Teodoro. BRIGIDA: (Gratamente entusiasmada, en voy muy alta) El de la propaganda está acá?? Teodoro???!! TEODORO EN OFF: Voy!!! JUAN: (También en voz alta hacia la cocina) No hace falta, Teodoro. Quedate ahí. Servite tranquilo, lo que gustes!! (Se escuchan otros ruidos de botellas que se rompen) TEODORO EN OFF: Upss otra vez!!! BRIGIDA: (Haciéndose la víctima) Tanto te avergüenzo, que me escondés a todos? JUAN: Cómo voy a hacer una cosa así, Brígida??! BRIGIDA: (Enérgica) Briyít!! JUAN: Briyít! BRIGIDA: Por supuesto que lo hacés! No solamente no me quisiste tomar el casting, sino que ahora tampoco querés que nadie me vea, no?? Te avergüenzo!!! (Juan la abraza) JUAN: No hables pavadas! Sabés cuánto te quiero! BRIGIDA: Si… pero a mí no me tomaste el casting! JUAN: Es que no había nada, digamos, adecuado para vos… Ya tengo el elenco completo!! No hay más lugar… (Piensa. La mira. Duda) salvo que… BRIGIDA: (Entusiasmada) Qué?? Decime!! Hago lo que me pidas!! Lo que sea!! De mucama. De extra. De jarrón egipcio. De doble en las escenas de sexo, lo que quieras!! JUAN: Necesito una ayudante para la maquilladora. BRIGIDA: Es un personaje de la película o…? JUAN: No! Es la ayudante de la maquilladora. Para retocarle el maquillaje al elenco durante el rodaje. BRIGIDA: Buéh… algo es algo, decía una viuda mientras compraba pepinos! Por lo menos experiencia en “retocar”, tengo! (En severo tono de advertencia) Pero eso si…! JUAN: Qué? BRIGIDA: Si por algún hecho fortuito, un accidente o lo que sea, algún personaje queda vacante, lo hago yo! De acuerdo?? JUAN; De acuerdo. (Con intención) Pero intentemos que no haya ningún “accidente”, eh? (Se escucha otro ruido de cosas que se rompen y caen) TEODORO EN OFF: Ooooooooopsssss!!!!! JUAN: Y sobre todo que ese accidente no sea de la protagonista femenina! BRIGIDA: (Haciéndose la que no entendió la indirecta) Por mi podés quedarte tranquilo! Si querés, puedo oficiarle de guardaespaldas! JUAN: No, gracias. Suficiente con ayudante de la maquilladora! Aunque conociéndote, sé que vas a ser la ayudante más cara de la historia del cine! BRIGIDA: (Recordando de pronto) Ahhh! Hablando de eso… Prestame plata, que el del taxi todavía me está esperando, y yo estoy sin cambio chico… JUAN: (Sobradoramente, mientras le da un par de billetes) Y grande? BRIGIDA: (Arrebatándole todo el manojo de billetes) Tampoco! Ya vengo…! (Habla fuerte, tirándole un besito) Te adoro!!!! TEODORO EN OFF: Voy!!! (Brígida sale corriendo por puerta de calle, dejándola abierta, al tiempo que de cocina aparece Teodoro, con los pantalones empapados y todo enchastrado de crema y huevos) TEODORO: Juan… JUAN: (Lo mira) Qué pasó? TEODORO: No te preocupes… Un pequeño inconveniente, pero nada serio. JUAN: Qué se rompió? TEODORO: No pensé que iba en serio lo que me dijiste de la puerta de la heladera, que estaba floja… Y cuando la abrí, así de golpe… Bueno, no tanto, o tal vez un poco, buéh, más o menos… JUAN: Qué se rompió? TEODORO: Unas botellas de aceite… JUAN: En la heladera no había ninguna botella de aceite! TEODORO: No. Ahí estaba la gaseosa. Qué fue la que se cayó al estante de abajo, donde estaban los huevos con la manteca. Yo los quise atajar, pero no vi que en último estante había una torta de crema que al caerse, la pisé sin querer, y al patinarme, fui a parar contra el armario donde estaban la harina y cinco botellas de aceite. JUAN: (Tratando de contenerse) O sea que si te amaso un poquito y te meto al horno, me sale una torta bárbara! TEODORO: (Un tanto asustado) Me harías eso? JUAN: (Sonriendo) No! Es una broma! Cómo voy a hacer una cosa así?? De dónde voy a sacar después un actor con tu… con tu… (No se le curre qué decir) Un actor como vos??!! TEODORO: (Intenta abrazarlo, conmovido) Gracias… JUAN: (Se aparta para que no lo ensucie) Después me agradecés! Primero andá a mi habitación, te lavás un poco, si querés te das una ducha, y yo después te doy algo de ropa para que te cambies… TEODORO: Eso si… tené cuidado cuando entres a la cocina, que está un poco resbaladiza. (Se va hacia escaleras arriba) JUAN: La voy a tener!! (Una vez que Teodoro se fue) Y también, mucha paciencia para no matarlo!! (Mira al cielo) Porqué siempre me tienen que pasar éstas cosas a mí?? Por qué no me puede salir todo como corresponde, sin contratiempos estúpidos, sin problemas estúpidos… (Mira hacia habitaciones) sin estúpidos…??! (Hablándole a Dios) Decime la verdad… Vos tenés algo contra mí, no? Porque no es común, que cuando todo marcha sobre rieles… cuando todo parece que se arregla y la calma se hace dueña de la situación, me mandás algo que me complica todo y me arruina el día…!! (Por Teodoro) Ahora me mandaste a éste… Pero sabés qué? Igual lo voy a sacar bueno… Y la película va a ser un éxito!! (Desafiante) Te quiero ver ahora…!! Qué más se te va a ocurrir para amargarme la vida, eh???!! (Por la puerta de calle aparece Pepi, con un celular en la mano, vestido de Cardenal Católico, con un gran crucifijo colgando hasta la cintura y con los brazos abiertos exclama muy sonriente y en voz alta) PEPITO: Habemus Pepis!!!!!! JUAN: (Hablándole a Dios hacia el cielo) Cuántos recursos tenés, eh?? PEPITO: (Lo abraza y lo besuquea) Juanchi de mi alma!!!! JUAN: (Por el vestuario) Qué pasó? Te ascendieron?? PEPITO: No! Cambié de disfraz porque todo de negro ya me hartó. Estaba buscando algo más adecuado y de repente se me prendió la lamparita: No viste que los cardenales se visten de púrpura? Este color me sienta bárbaro y además me encanta como suena… (Repite exagerando con los labios hacia afuera) “Púrpura”. Cuando lo decís, no te excita?? “Púrpura”!! JUAN: Decime, pedazo de “purpurado”, se puede saber a qué viniste? PEPITO: Ay, Juan! Pobrecito… Tan joven y ya esclerótico! Pero no te preocupes, que cuando tengas ganas de orinar y ya no te acuerdes ni siquiera dónde queda el baño, como tu mejor amigo que soy, yo te voy a llevar, y con tu orín voy a escribir en las paredes: Te amo!! Eso sí, se van a dar cuenta que es mi letra! JUAN: (Irónicamente) A ver? Con las insignificantes y estúpidas preocupaciones que tengo, de qué me olvidé? Hoy es San Pepito o algo por el estilo? PEPITO: (Va hasta un mueble y del mismo toma un sobre. Lo abre y lee, también irónicamente) Te olvidaste nada más ni nada menos, que la semana que viene me caso con Charly!!! Y en la invitación dice muy clarito (Irónico, remarcando las palabras) que “hoy”, es decir “hoy”, con la fecha de “hoy”, hacemos una fiesta de disfraces para celebrar la despedida de soltero de ambos dos, es decir los susodichos Charly y yo, en Santa Isabel 48, planta baja, es decir, acá debajo de tu casa, según un ofrecimiento tuyo, ya que tenés ese lugar tan grande, vacío y sin uso, al que casi te obligué, pero ese es un detalle que no tiene la menor importancia…!!! (Lo encara sarcásticamente ante el estupor de Juan que se quiere morir) Es mucho más que San Pepito! JUAN: (Desesperado, casi con un ataque de pánico) No!!! La despedida…??? Hoy??? Y acá??? PEPITO: (Entusiasmado) Acá, no. Abajo! Y con disfraces!! Si hay algo me que encanta me encanta, con las fiestass de disfraces! Nunca sabés lo que te vas a encontrar detrás de una máscara, o debajo de una sotana!!Charly me prometió que iba a venir de Homo Erectus!! Él homo, ya es, y no te imaginás cuan “Erectus” puede ser!! Ayy!! Ya me lo imagino con el taparrabos de piel y todo el tiempo con el garrote en la mano!!!! Ayyy, se me hace agua… la boca! La Cloti va a venir de Gatúbela, y El manquito de policía… JUAN: (Irónico) El Manquito?! PEPITO: Si! No te acordás que te conté? Ese, el petisito regordete! Que aquella vez, cuando empezó a trabajar en una fábrica, le dieron una máquina nueva para que le vaya agarrando la mano… JUAN: Y..? PEPITO: Y se la agarró, nomás!! Por eso le decimos el manquito! Le cortó el dedo mayor, nada más. Pero igual el apodo le quedó. Por eso cuando te hace así (Levanta el puño cerrado) te quiere decir “Fuck you”, pero nadie se ofende porque le falta justo ese dedo!! JUAN: Suficiente!! No, Pepi!!! Hay que suspender todo!!! PEPITO: De qué hablás?? JUAN: Que no!! Que no podemos hacer la despedida de soltero!!!! PEPITO: Juancito, vos pensás que después de todo por lo que pasé para casarme con Charly, que nos peleamos catorce veces, lo engañé cinco, me perdonó siete… -porque tres veces fue con el mismo, así que dos no cuentan-, y finalmente, cuando ya nos acoplamos… y cómo nos acoplamos! Tendrías que vernos!! Es un terremoto en sensurround! Y después de todo eso, voy a suspenderlo??? Mejor dejá de consumir sustancias raras, Juancito, que te están derritiendo las pocas neuronas sanas que te quedan! JUAN: Casate cuando quieras, y yo voy a ser muy feliz de verte feliz a vos, pero la despedida hoy no la podemos hacer acá abajo!! Suspendí todo hoy! Suspendí mi vida completa! Hasta le dije a Mili, a “mi” novia, la futura madre de mis hijos, que hoy no iba a poder verla, te das cuenta a qué extremo llegué? Porque para mí, hoy… (Se queda dudando) Se lo dije a Mili?? Sí, cómo no se lo voy a decir…! O pensé en decírselo y no se lo dije..? Si no se lo dije, Mili me mata, me ahorca, me despelleja, tira mis tripas a los cuervos y después me abandona. Pero, no! Estoy seguro que se lo dije! Buéh, no importa! La despedida, acá, no!! PEPITO: Por qué no?? Tenés semejante lugar vacío…! Fue lo que acordamos!! JUAN: Entendeme, Pepi… Al parecer hubo unas confusiones con las fechas de ensayos… PEPITO: (Amenazante) Te olvidaste! JUAN: Se traspapelaron los días y los horarios de encuentros al cotejar las agendas de cada uno para… PEPITO: (Aún más amenazante) Te olvidaste!! JUAN: Los ensayos los maneja la producción, y… PEPITO: (Sentencioso) Te olvidaste!!!! JUAN: (Vencido) Si, me olvidé y organicé el último ensayo para el productor de la película, antes de empezar a filmar!!! PEPITO: Y cuál es el problema? Vos ensayás acá y nosotros hacemos la orgí… quiero decir, la fiesta abajo! JUAN: (Acusadoramente) Ves??? A eso me refiero!! Yo sé cómo terminan esas “despedidas de solteros”! No tengo ningún problema con esas cosas, Pepi, pero justamente hoy va a venir el productor!! Te das cuenta, Pepi??! Si llega a ver que yo permití abajo de mi casa semejante descontrol, me quedo sin película!! PEPITO: No exageres!! Quién es?? Torquemada de la Santa Inquisición??! JUAN: Por ahí anda! Se lo propuse, por lo menos a setenta y dos productores distintos, y éste fue el único que aceptó! Para convencerse de poner la plata, -que a decir verdad, es mucha-, le hizo leer el guión a un montón de curas y obispos, y ahora encima está esperando una contestación de un cardenal del Vatican… (Transición. Mira a Pepito, se le ilumina la cara con la idea, pero se arrepiente) No! Ni pensarlo! De esa sí que no salgo vivo! Dejalo así, Pepi!! Casate, sean felices, coman perdices, sushi o lo que quieran, pero la despedida de soltero, acá no! PEPITO: (Haciendo casi una tragedia griega) No lo puedo creer!!! La sorpresa que me embarga no cabe en mi frágil y virginal cuerpecito!! JUAN: (Ya conociéndolo, sin prestarle atención) A otro perro con ese hueso! La despedida, acá, no!! PEPITO: Mi mejor amigo…! La esencia de mi alma…! El único objetivo de mis más puros deseos… y de los otros también… Ese, a quien sin miramientos siempre estuve dispuesto a entregarle mi… bueno, todo!!! Ahora me desprecia, me arroja al fango, me abandona…!! (Se hace el que se ahoga) Me falta el aire!!! No puedo respirar…!! No me entra oxígeno!!! Me ahogo!!! Necesito respiración artificial!!! JUAN: (Muy tranquilo) Acá, no!! (Pepito se hace el desvanecido, cayendo sobre el sillón. Pausita. Juan se le acerca al oído y le dice dulcemente) Acá, no! PEPITO: (Abre un ojo. Lo mira y luego se incorpora malhumorado.) Muy bien!! Vos nunca vas a cambiar! Prometés algo, y después no cumplís!! No es la primera vez que me dejás… esperando!! JUAN: Pepi… Entendeme… PEPITO: Nada!! No quiero saber más nada de vos!! (Le da un papel) Tomá! Acá tenés la lista! JUAN: Lista, de qué?? PEPITO: De los invitados. Para que los llames y les digas que se suspendió! Ya vas a ver cuándo el manquito te haga así (Gesto con el puño en alto)! JUAN: (Se lo devuelve) Pepi… Son como sesenta!! Y yo estoy por empezar con el ensayo! No tengo tiempo para eso! Encargate vos! PEPITO: (Casi llorando) Sabés qué?? Tenés razón!! Yo mismo los voy a llamar! Uno por uno!! JUAN: (También enojado) Gracias!!! PEPITO: Sobre todos a los presidentes de las distintas comunidades gay, y les voy a decir que lo suspendiste, porque sos homofóbico!!! JUAN: Qué??? Homofóbico yo?? PEPITO: Vas a ver como en menos de una hora, tenés en la puerta de tu casa una manifestación del orgullo gay, con bombos, platillos y las banderas multicolores!! JUAN: Pepi!! Está por venir el productor! Si ve semejante cosa, me retira todo su apoyo y me quedo sin película!! Vos no serías capaz…! PEPITO: No sabés de lo que puede ser capaz un corazón despechado!! Pero no te preocupes, Juan… a esas manifestaciones no van más de cinco o seis mil personas!!! JUAN: Quéee…??? PEPITO: Máximo, van a tener que cortar las calles adyacentes para que el tráfico se desvíe por… JUAN: (Refunfuñando) Bueno, está bien!! Vos ganás!! PEPITO: (Lo besuquea) Yo sabía que mi juanchi no me podía fallar!! JUAN: Pero eso sí!! El volumen bajo, todas las puerta cerradas, que no entre ni salga nadie por la puerta principal, y mucho menos venir para acá arriba por la puerta de servicio! Nadie, por ningún motivo!! PEPITO: Eso me incluye a mí?? JUAN: Sobre todo vos!!! Está entendido?? PEPITO: No te preocupes que no vas a tener que avergonzarte de mí! (Apoya el celular sobre la mesita y se va hacia el baño de servicio) Dejo esto acá mientras voy al baño, (por la sotana) que con todo esto no están permitidas las urgencias! JUAN: (Por el celular sobre la mesita) Cuando te vayas, no te olvides el celular! PEPITO: Qué celular, si yo no tengo?! JUAN: (Irónico, lo levanta) No, claro! Esto es un camello en celo!! PEPITO: (También irónico) No!! Es una picana!! JUAN: Qué??? PEPITO: El aparatito ese que te da un golpe de electricidad, y está disimulado como si fuese un teléfono celular! JUAN: (Asustado, lo deja otra vez en la mesa) Y para qué querés una picana?? PEPITO: Al principio lo compré para defenderme en la calle, por si me atacaba un delincuente. Vos viste que hoy en día está tan peligroso…… pero después, en un momento de pasión con Charly, lo activó sin querer, y quedó así, tieso, duro, con todo tipo de contracciones musculares… durante quince minutos!! “Todo” duro!! No sabés lo bien que la pasamos!! Le gustó tanto, que desde ese entonces me pide que siempre lo tenga a mano!! Y en lo mejor de la cosa… (Hace gesto de activar la picana) Pzzzkkk…!!! Te lo recomiendo, Juan!! (Va saliendo por baño) JUAN: No, gracias!!! A mí con un whisky me sobra! Así que a tu Charly le gustan las cositas raras? PEPITO: A él le gusta todo. No le importa si es hombre, mujer, travesti o tortuga! JUAN: Y así y todo, te vas a casar con él? PEPITO: Es que además tiene virtudes… Sobre todo una! Enorme!!!! Y eso te hace perdonarle todo!! (Cuando Pepito sale por baño, de calle entra Brígida, malhumorada) BRIGIDA: Qué gente, por favor!!! Por qué no se meten en sus cosas, digo yo??!! JUAN: Y ahora qué te pasó?? BRIGIDA: Arreglé con el taxista pagarle… en especias, digamos… Así que me quedaba con la plata, que ando un poco corta, viste? Total… compro tantas cosas con la misma “tarjeta” que me dije, por qué no también con el taxista… Y cuando estaba casi en el final de la deuda, abre la puerta del taxi, un tipo de traje y corbata, y empieza a los gritos a amenazarme!!! Estaba enloquecido! Como si fuese el peor delito jamás cometido!! Parecía poseído!!! JUAN: Si… hay gente loca en el mundo. Y qué hiciste? BRIGIDA: Qué iba a hacer?? Le di semejante cachetazo que fue a parar contra un árbol y me fui! A mí nadie me grita! JUAN: Y el taxista? BRIGIDA: Yo me tuve que ir. Que él se termine de cobrar a mano! Bueno… a lo nuestro… Dónde están los que hay que “retocar”? JUAN: (Le señala el escritorio) El escritorio va a ser la sala de maquillaje, para que hagan las pruebas tranquilas. Podés empezar a acomodar todos los maquillajes que trajeron ayer, porque todavía es temprano… BRIGIDA: Bueno, dónde están? JUAN: Los puse en el estante de la biblioteca. Vení que te muestro… BRIGIDA: Eso sí, pero primero de todos mandame a Teodoro. A ese bombón hay que retocarlo mucho!! JUAN: Okey… (Salen ambos por puerta de escritorio. Por puerta de calle entra tímidamente Charly, disfrazado de Homo Erectus, vestido tan solo por un con un taparrabo de piel en donde se advierte un exagerado “bulto” como si tuviese una enorme erección y trayendo un garrote en la mano) CHARLY: (Llamando) Pepi…! Pepito…! Por qué me hiciste venir de Homo Erectus? Me gustaba más el Sapiens! Ya soy el quinto con el mismo disfraz! Y justamente yo soy el de la despedida… tengo que cambiarme!! (Por escaleras baja Teodoro, desnudo y envuelto con una toalla por la cintura, como si saliese de bañarse, hablándole a Juan, creyendo que está por ahí) TEODORO: Juan… me probé la que usted tiene en el armario, pero no hubo caso… la suya no me entra! (Advierte a Charly) Disculpe la facha, pero estaba buscando algo más adecuado… CHARLY: Si, yo también tendría que cambiarme…! (Por su disfraz) Esto de Homo, no me va! Ya somos cinco con el mismo vestuario! TEODORO: (Haciendo un chiste) Me imagino… Los homo ultimamente son una plaga, no?? (Ríe solo) Si quiere, puede cambiarse arriba… Hay un montón de ropa! CHARLY: Y habrá algo que me combine? Porque hoy es un día muy especial para mí. No me puedo poner cualquier cosa! TEODORO: Y… pruebe! Qué se yo? A lo mejor de “Lord inglés”! Y en lugar del garrote, puede usar un paraguas… Pero entre nosotros… (Se le acerca como para decirle un secreto) Son muy difíciles de abrir!! CHARLY: (Yendo hacia escaleras) Bueno… voy a probar… (Se detiene y lo mira) Yo no te vi antes a vos? TEODORO: Si! CHARLY: Dónde? TEODORO: Cuando bajaba las escaleras! CHARLY: Entiendo… Permiso… (Se va hacia arriba. Teodoro ve el celular en la mesita y lo agarra) TEODORO: Va a ser mejor que llame a casa para que me traigan algo, no? Total no es tan lejos… (Cuando está por llamar, aparece Pepito de baño y se queda mirándolo) PEPITO: Acabáramos! TEODORO: Monseñor!! Disculpe mi apariencia… pero tengo un pequeño inconveniente… PEPITO: No sea tan modesto que a simple vista “Traslúcidus toallis” no parece tan pequeño! TEODORO: Es que… no sé cómo explicarle… PEPITO: No tema! Ábrase conmigo! Cuanto más abierto, más fácil será todo! Se lo digo por experiencia!! TEODORO: Ustedes siempre están abiertos a todos?? PEPITO: Los de ésta comunidad, ni se imagina! No creo que haya algo más abierto en kilómetros a la redonda!! TEODORO: Me imagino. No sabe cuánto lo envidio. A mí me cuesta mucho abrirme a los demás! Soy un poco inseguro…vio? PEPITO: Deje las inseguridades de lado! Sea decidido!! (Se agacha, dándole la espalda y le dice con intención) Es hora de ir al frente! Vaya al frente! TEODORO: Tiene razón… se lo voy a confesar… Probé y probé, pero la de Juan no me entra!! PEPITO: Acabáramos!! Y yo que pensé que era del otro bando! TEODORO: Y mire que probé con todo lo que encontré… Pero no hubo caso! PEPITO: No probó lubricando un poco? TEODORO: Lubricación es lo que me sobra!! Sabe la cantidad de aceite que tengo encima??! Ya me di por vencido! PEPITO: Error!! Nunca hay que darse por vencido!! Hace muchos años que conozco a Juancito y tampoco me di por vencido!! Yo le voy a traer algo que le va a ayudar… (Se va yendo por calle) No se me vaya, y sobre todo no pierda las esperanzas, que si Juan se convierte, lo vamos a disfrutar todos!!! (Sale por calle) TEODORO: (Dudando. Como para sí) Juan, convertirse?? No sabía que era judío! (Aparece Juan de escritorio y lo mira) JUAN: Teodoro… TEODORO: Voy!!! JUAN: Qué te pasó ahora? TEODORO: (Tratando de ser simpático) Shalóm, shalóm!!! JUAN: (Sin entender) Eh?? TEODORO: Es en hebreo! Tengo amigos de los tuyos y me han enseñado algo… “Mashlomjá ??, Hakól beséder , éifo atá ??” (Sonríe muy satisfecho. Juan lo mira sin poder creer. Luego mira al cielo y le habla a Dios) JUAN: Me imagino cómo te debes estar riendo…! BRIGIDA EN OFF: Juani!!!! Me parece que no tengo rubor!! JUAN: (Hablando hacia escritorio en voz alta) Lo perdiste hace muchos años!! (Va saliendo por escritorio y Teodoro lo saluda con una estúpida sonrisa) TEODORO: Leitraót!!! (Juan lo mira podrido y sale. Teodoro siempre con el celular en la mano, intenta llamar) Bueno, será mejor llamar para que me traigan algo. No es conveniente participar de una reunión, desnudo… (Se pone el celular sobre la oreja, y lo activa sin querer. Comienza a recibir la descarga eléctrica y va teniendo espasmódicas convulsiones. La boca se le tuerce de costado, los ojos casi saliéndose de sus órbitas, y quedando casi totalmente rígido, cae detrás del sillón. (Suena el timbre de calle y queda trabado. Aparece Juan de escritorio y va hacia calle para abrir.) JUAN: Será posible!!! Qué pasa hoy?? Es una procesión de imbéciles?? (Abre la puerta. Al hacerlo entra Marti, vestido con traje y corbata, portando un grueso libro en una mano y en el otro el celular, terminando de sacudirse la ropa y muy malhumorado) MARTI: (Entra hablando por celular, muy enojado) Estamos a un paso de apocalipsis, Magdalena! El mundo ha trastocado todos sus valores!! Sí, claro…! Yo lo vi!! La mujerzuela estaba…! Exacto!!! Por supuesto que lo intenté!! Estoy al borde de un infarto, te lo aseguro! Fue indignante!! No, mujer! No es para tanto! Para qué vas a venir??! Yo solito me arreglo! Seguí haciendo tus compras… Qué estás viendo? Un colgante?? Un colgante importante, o cualquier colgante…? Bueno… No te preocupes… Comprate el colgante que quieras… No! Yo no necesito! Ya tengo un colgante! No soy grosero, me refiero al crucifijo!! No hace falta que vengas… Dije que no!! No sé para qué te digo, si después hacés lo que querés?! Bueno, chau! Si… chau…! (Cuelga) JUAN: (Mientras logra destrabar el timbre que deja de sonar) Aranguren del Solar!! Cómo anda? MARTI: Lamento decirte Juancito, que la sociedad ya camina sin rumbo!! La pecaminosidad ha ganado las calles!!! JUAN: No entiendo… Pasó algo? MARTI: No escuchaste lo que le comenté a Magdalena… JUAN: Quién es Magdalena? MARTI: Mi mujer… Nuestro camino al Elíseo ha sido minado por la concupiscente procacidad!! Te parece poco??! JUAN: (Sin entender) Y eso que anunciaron veinte por ciento de probabilidades de lluvia! MARTI: (Le coloca su brazo por el hombro, paternalmente) Juancito… Desde el principio me di cuenta que sos un hombre especial… JUAN: (Sin saber si es para bien o para mal) Gracias… MARTI: No puede ser casualidad que justo (Exhibe el libro) cuando estoy investigando sobre las Epístolas Joánicas de Juan el Evangelista… tratando de dilucidar si Juan el Evangelista, era la misma persona que Juan el Apóstol… me cruzo contigo, que también te llamas Juan, que estás por hacer una película sobre la vida de un santo sacerdote, que vives en la calle Santa Isabel y que encima, como me has confesado, eres un devoto y ferviente creyente!! JUAN: Yo?? Ah! Claro!! (Sigue sin entender) Qué cosa, no?? Pero… Pasó algo con la película, Don Aranguren del… MARTI: Decime Marti, mejor… JUAN: Marti? De Martín, Martiniano…? MARTI: De Martirio. Es mi nombre. JUAN: Eso sí que es un martirio… Nunca se le ocurrió cambiarse el nombre? MARTI: Si. Pero después de casado, la miré bien a mi esposa, que se hizo protestante y me dije ”nunca un nombre tan adecuado”… Martirio Secular Aranguren del Solar. JUAN: Su mujer es evangelista? MARTI: Protestante. JUAN: Y usted católico? MARTI: Católico, apostólico, romano… Esa es la gran diferencia! Por ejemplo, para nosotros la pascua es sagrada! La mística, la celebración… Los huevos de Pascua! JUAN: Y los protestantes?? MARTI: Ellos rompen la mística, la celebración y en la Pascua... JUAN: Me imagino lo que rompen!! Bueno, Marti… pasó algo con la película? MARTI: No. Nada que ver con la película. Es por la indecencia de la gente, de esas cualquieras que andan callejeando a toda hora y sin tener el menor respeto… Y cuando uno las pone en vereda, protegiendo la moral y las buenas costumbres, (Se acaricia la mejilla como dolorido) se ofenden y agreden con violencia!! (Se sienta en el sofá) JUAN: (Dándose cuenta de que habla de Brígida. Sorprendido) No me diga que usted era el del taxi!!! MARTI: (Extrañado) Cómo sabe?? Ya se lo contaron? JUAN: No. Digo, si! Usted sabe cómo corren de rápido los rumores, sobre todo en estos barrios… Ya conoce el refrán: barrio chico, infierno grande! MARTI: No era pueblo chico? Bueno, no importa. Pero si me llego a encontrar otra vez con esa mujerzuela… Ahí me va a conocer!! (De escritorio sale Brígida probándose un rubor en la mejilla. Al verla Juan, se desespera y empieza a hacerle señas a Brígida, que al principio ésta no entiende, hasta que Juan le señala a Marti, adelante, en el sillón, sin que éste los vea. Brígida se enoja al verlo y quiere ir a pegarle nuevamente, pero Juan la frena y le tapa la boca, la envuelve con el impermeable roto de Teodoro y la mete a la fuerza en el escritorio, cerrando la puerta con llave) Adónde hemos llegado!! Pero no voy a cejar en el intento!! Voy a mover todas mis influencias para acabar de una vez por todas con la indecencia! Qué significa todo ese exhibicionismo barato??? (Por detrás del sillón se levanta Teodoro tambaleante y casi sin fuerzas en las piernas que le flaquean y se le doblan, mientras Marti no lo ve por estar sentado en el sillón. Juan al verlo, lo mira intrigado y al escuchar lo que dice Marti, comienza a empujar a Teodoro hacia habitación de servicio, y al empujarlo, lo estrella contra la pared que separa ambas puertas, Y Teodoro queda más atontado todavía, quedando inclinado hacia adelante y sostenido por detrás por Juan como si lo estuviera “apoyando a lo perrito” Juan se desespera por pánico que Marti los vea. Marti gira un poco para hablarle a Juan, y este suelta a Teodoro, siempre inclinado hacia adelante, y que cae detrás del sillón, para que Marti no pueda verlo) Ya no hay límites!! Y es nuestro deber, erradicar la procacidad!! En nuestras manos descansa la fe de un futuro mejor. Más digno! (Por puerta de calle entra Pepito y escucha y observa la escena. Juan le hace señas de que es el que pone la plata, para que lo distraiga) Con los sagrados valores de la tradición que supimos heredar de nuestros ilustrísimos prohombres, que han luchado incansablemente para dejarnos… (No sabe qué decir) esto! (Juan vuelve a incorporar al atontado Teodoro, otra vez sosteniéndolo por la cintura y dando saltitos los dos juntos lo va llevando hacia la cocina) Nosotros somos los encargados de enarbolar las banderas de la moral, de la ética, de luchar sin pausa contra la pornografía barata!! Y hacia ese objetivo estamos abocados! Yo, porque soy el baluarte de la decencia y usted Juan, porque se nota a simple vista, que es un… PEPITO: Reverendo hijo… del Señor!!! (Juan aprovecha la distracción para sacar a Teodoro casi inconsciente, por cocina) MARTI: (Se levanta un tanto emocionado y le besa la mano a Pepito) Monseñor!! No lo puedo creer?! Qué privilegio el mío!! Qué honor el poder compartir una tertulia con un cardenal! Si me permite, quisiera besar su mano! PEPITO: Bese lo que quiera! Es a gusto del consumidor! (Mientras Marti se inclina y besa su mano) Benedictum inocentum!! MARTI: Permítame presentarme… Martirio Secular Aranguren del Solar… Usted es? PEPITO: Habemus Pepis, un verdadero e inacabable placer! MARTI: Igualmente!! Justamente hablábamos con Juancito… (Se da vuelta para señalarlo, pero advierte que no está) Bueno, yo creí que hablábamos de… es decir… Imagino que usted habrá visto la indecencia y el impudor que cotidianamente se exhibe por todas partes, no?! PEPITO: No sólo lo vi, sino que he sido una de sus víctimas! MARTI: No me diga, monseñor!! Lo ultrajaron??! A Usted?? Con sus hábitos???!! PEPITO: Justamente porque mis hábitos son muy conocidos! Y cómo me han ultrajado!!!! Pero eso no fue lo peor…! MARTI: Qué más?? PEPITO: Se querían ir sin acabar… la penitencia!! MARTI: Me imagino! Querían escapar! PAPITO: Si, porque ya estaban exhaustos! Pero yo, nada!! No se los permití!! MARTI: Ese es mi monseñor!!! Que hizo? Los redujo?? PEPITO: Sobre todo eso. Quedaron así de chiquitos!! MARTI: Y ahí los maniató? PEPITO: No hizo falta. Ya estaban esposados a la cama! Y les di con un látigo de varias puntas!! MARTI: Monseñor!! Y escarmentaron? PEPITO: Es más… te diría que hasta lo disfrutaron! MARTI: Qué enfermos!! Cómo hacer Monseñor, para purgar tanto mal?? PEPITO: Yo uso un laxante muy bueno… Lo llaman El Pingüino, porque apenas lo tomás, te pasás el día caminando así!! MARTI: Monseñor… Creo que ha llegado la hora de comenzar a lavar nuestros pecados!! PEPITO: Si es por eso, yo necesitaría una pileta olímpica!! MARTI: Disculpe la indiscreción, pero… tengo la fortuna de conocer a muchos clérigos… y, no lo tome a mal… pero a usted no lo tengo visto… PEPITO: Es natural, porque yo pertenezco a una orden especial, secreta, cuya sede, justamente no es aquí… MARTI: (Maravillado) No me diga que usted viene de… allá?? PEPITO: (Sin que Marti se dé cuenta, señala la puerta de calle) Justamente. De allá!! Pero no hablemos más de mí. Ya le dije que mi orden es secreta, y “si se enterum nos rompum il séculum”. Escuchó hablar del “Código Da Vinci??” MARTI: Por supuesto! No me diga que usted está relacionado con ese código??! PEPITO: No. Yo pertenezco al “Código que le sigue al antebrásico” MARTI: (Sin entender) Entiendo… PEPITO: (Cambiando de tema) Seré curioso… Usted a qué se dedica, además de producir películas, porque estoy enterado de todo! Ha llegado a mis manos ese excelente guión que está a punto de producir! MARTI: Bueno, tampoco es que soy un productor, lo que se dice productor… Apenas si voy a contribuir con unos millones de dólares para ésta película de Juan, pero por sobre todo porque me parece un ser… muy…así…! PEPITO: Así, cómo? MARTI: Probo!! PEPITO: Si… aunque lo que se dice “todo”, no probó! ! MARTI: Y además, soy importador… pero lo que más me apasiona, en realidad, son las investigaciones religiosas… PEPITO: Ah sí? Yo también, soy de curioso! Y que investiga? MARTI: Bueno, en este momento estoy abocado a la epístola de Juan! PEPITO: Acabáramos!! Otro más abocado a las Epístolas? (De cocina sale Teodoro todavía tambaleante y con convulsiones corporales, y detrás suyo Juan asustado como si se le hubiese escapado. Lo toma de la cintura y lo mete otra vez por donde vinieron) MARTI: Por qué? Quién más? PEPITO: Un muchacho que conocí hace un rato! Andaba justo con ese tema! Pero con él, no hay caso. No le entra! MARTI: Y usted, que debe ser un hombre muy leído… supongo que también se habrá entusiasmado con la epístola de Juan! PEPITO: Otra que entusiasmado! Tuve una época en que fue una verdadera obsesión!! MARTI: Logró extraer algo? PEPITO: Bueno, digamos… que no pude! Recuerdo que, cuando llegué, estaba ahí, adormecido después de una ducha, con la casa en silencio, … Como esperándome…! MARTI: La epístola. PEPITO: Ni más ni menos!… Yo la miré, la admiré, la veneré…! Y hasta llegué a tenerla en mis manos! Apenas si la pude estudiar un ratito… habrán sido unas… dos horas! MARTI: (Muy entusiasmado) Y logró sacar algo en limpio?? PEPITO: Limpio, lo que se dice, limpio… Usted sabe. Siempre hay una basurita, un pelito… en fin…!! MARTI: Quiero decir… Qué logró extraer? PEPITO: Nada!! Se ve que ese día estaba más seco que escupida de momia! MARTI: Debo confesar que cuando llegó a mis manos por primera vez la epístola de Juan, quedé impresionado…! PEPITO: Yo también!!… MARTI: Nunca había visto algo semejante! PEPITO: Yo tampoco! Según un estudio publicado recientemente por la el departamento de estadísticas y censos de la “University of hijo de Utah”… hay tres clases de hombres: Small, médium y Oh my god!!! MARTI: Interesante… Me refiero a que… según mi investigación, en la dimensión que toma la epístola, tiene mucho que ver el judaísmo de Juan. PEPITO: Juan?? Judío?? MARTI: Por supuesto! No me diga que no lo sabía?? PEPITO: La verdad que no me di cuenta. Y eso que estudié la epístola! MARTI: Acaso Jesús no era judío también? PEPITO: Si, pero… no comparemos!!! MARTI: No, no! Por supuesto! No era mi intención! PEPITO: (Que se quedó pensando) Quién lo hubiera dicho, no? Quiere decir que antes… era un poquito más grande todavía??! (Aparece Juan desde cocina) JUAN: Marti… PEPITO: Shalóm, shalóm Juaninsky!! (Y se pone a bailar muy contento) “Aba… naguila aba, naguila aba…” (Juan lo mira sin entender) MARTI: Si, Juan… en qué te puedo ayudar? JUAN: Recién me llamó Jesús,…! MARTI: (Muy asombrado) Tuviste un llamado del Señor???!!! PEPITO: Aleluya!! Bienaventurados los que recibís llamados del Señor! JUAN: (Cortándoles el entusiasmo) Jesús González, el contador de la productora… hay que terminar de llenar unos formularios, así que en un ratito va a enviar a un muchacho de las oficinas para que le dé la información necesaria. Asuntos legales, usted me entiende…Pero no puede hacerlo otro. Tiene que ser usted! (Se escuchan golpes) MARTI: Por supuesto, Juancito. No hay ningún inconveniente. PEPITO: (Como haciendo un chiste) Sobre todo si es un pedido de Jesús!! (Ríe solo) Ja, já!! (Se recompone y da una bendición) Benedictum epistolum!! Y que el Señor la conserve en todo su tamañum!! MARTI: Tiene razón! (A Juan) Mientras tanto, si me permitís, voy a seguir profundizando en la epístola, con su eminencia! (Se escuchan más golpes en la puerta de escritorio) PEPITO: Y yo soy una eminencia en epístolas!! Y en esos temas, cuanto más se profundiza, mejor!! JUAN: (Haciéndole señas disimuladas a Pepi, para que se lo lleve de ahí) No gusta pasar a la habitación del ensayo y de paso toman algo… “Monseñor”? MARTI: Buena idea! (Mientras van saliendo por cocina) PEPITO: De acuerdo… “Y que el Señor nos acoja con su epístola”!!! MARTI: Amén! (Pepito y Marti salen. Se escuchan más golpes. Juan va hasta la puerta de escritorio y abriendo con llave, sale Brígida furiosa y desesperada, en bombacha y con la pollera enchastrada en la mano) BRIGIDA: Me podés decir que hace acá ese chauvinista, chupa sirio, retrógrado y gusano apestoso???! JUAN: (Tratando de que baje el volumen) Shhhh!!! Qué hacés así?? BRIGIDA: Se me derramó la base cremosa en la pollera y se me manchó toda! Qué hace ese delincuente acá!!!??? JUAN: Ese chauvinista y gusano apestoso como vos decís, es el productor de la película! Él va a poner unos cuantos millones de dólares para hacerla! Es el millonario del que te conté, te acordás? BRIGIDA: Este???! El moralista??!! (Trans. Cambia a dulce) Ya me parecía que algún encanto tenía! (Trans. Se asusta) Y yo le di una cachetada que casi le saqué dos dientes!!! JUAN: (Intentando llevarla hacia la puerta de calle) Justamente! Lo mejor es que no te vea, porque si sabe que sos mi hermana, me quedo sin película!! BRIGIDA: (Volviendo sobre sus pasos) Ahh, Claro!! Y perderme la oportunidad de mi vida??? JUAN: La oportunidad ya la perdiste con el sopapo!!! Si te ve, se pudre todo!! BRIGIDA: Quedate tranquilo… que si no consigo otra pollera, lo que menos me va a ver, es la cara… MARTI EN OFF: Juancito… si llega el muchacho que esperamos, avíseme! JUAN: (Hablando fuerte hacia adentro) Okey!! Yo le aviso!! (Intenta llevar a Brígida otra vez hacia calle) Andate antes que me pudras todo!! BRIGIDA: (Mostrando su vestuario) Querés que salga así a la calle??? Soy loca, pero no para tanto! (Juan le señala hacia adentro refunfuñando) JUAN: Y qué querés?? Que él te reconozca y se arme un escándalo?? MARTI EN OFF: Juan!!! JUAN: (En voz alta hacia cocina) Si!!! MARTI EN OFF: No encontramos la epístola! JUAN: (En voz alta hacia hab. de serv. Mientras toma el libro) Está acá! Ya se la llevo! (A Brígida, mientras le envuelve la cabeza y la cara, con el gran pañuelo de seda que ella trae en el cuello dejándole al descubierto solo los ojos, como si fuera musulmana) Si llega a venir alguien, decile que el ensayo se va atrasar. Que vuelvan en un par de horas! (Señalando hacia hab. de serv,) Y que él no te vea la cara por nada del mundo, entendiste???? Y después te vas! Así estés desnuda!! MARTI EN OFF: Juan!!! Y la epístola??? JUAN: Voy!!!!! (Sale hacia hab. de serv. Vuelve a sonar el timbre Brígida abre la puerta de calle. Entra Pancho con un paquetito) PANCHO: Buenas… BRIGIDA: (Mirándolo de arriba a abajo) No sos mi tipo, así que el ensayo se va a atrasar un par de horas. Podés volver después! PANCHO: (Entrando despreocupadamente) Y a mí qué me importa su ensayo?? BRIGIDA: Quién sos?? PANCHO: Francisco. Algunos me llaman Pancho, otros como mi jefe, el enfermo, porque dice que soy medio estúpido; Otros por teléfono… Vengo a traer el cáterin que pidió el padre del chico! BRIGIDA: Qué padre, de qué chico? PANCHO: El que vive acá, ese que tuvo un hijo en el colectivo! BRIGIDA: Un hijo??!! Juan?? PANCHO: Qué se yo como se llama?! El muchacho ese que vive acá, que tiene… (Lo describe, en gestos, ropa, cara, etc.) BRIGIDA: Y, si! Ese es mi hermano! Tuvo un hijo?? Cómo no me dijo nada?? Es nena o varón? PANCHO: No me dijo. Pregúntele, así de paso se saca la duda si es tía o tío! BRIGIDA: (Enfrascada en su sorpresa) Pero cómo no me comentó nada?? Ahhh! Ya entiendo!! Lo quiere ocultar porque (Señalando la hab. de serv.) si el gusano apestoso se entera de que es padre soltero… (Seña de plata) No se la va a querer poner!! Y si no se la pone éste, quién le va a poner todo eso! PANCHO: (Empezando a caminar de espaldas a la salida. Deja el paquetito sobre la mesa y sale por puerta de calle) Conmigo no cuenten!! Yo estoy muy ocupado con el cáterin! En un rato le traigo el resto!! Permiso… (Sale de espaldas a la calle y por detrás lo apoya Salvador, que aparece vestido de traje con remera negra debajo, y una biblia en la mano) SALVADOR: (Exclamando al apoyar a Pancho) Aleluya, hermano!!! PANCHO: (Saltando asustado, llega hasta el sillón) A la pelota!!!! SALVADOR: (Declamando con marcado acento centroamericano) Ha llegado el salvador!! PANCHO: (Se sienta en el sofá) Esta casa es más peligrosa que tiroteo en ascensor!! BRIGIDA: Usted quién es?? SALVADOR: El Salvador! BRIGIDA: Ese no era Jesús? SALVADOR: Si! Pero yo soy Salvador de nombre! Salvador Rogelio Marcelino Pérez Oso del Monte! Más conocido por el reverendo, o el Salvador del monte! O simplemente por el Pérez Oso! Y traigo el mensaje del Señor!! PANCHO. (Tomando el celular que está tirado a su lado) Hablando de mensajes, voy a llamar a mi jefe, porque piensa que soy retardado, vieron? Y si no me reporto cada cuarto de hora, arma un escándalo…! De todas formas, yo de acá no me levanto hasta que se hayan ido todos, sobre todo el Perezoso!! (Empieza a marcar en el celular-picana y sin querer lo activa) BRIGIDA: (A Salvador, señalándole la puerta) Le agradezco, pero no necesito ningún mensaje, no se moleste! Yo hablo directamente con Él! SALVADOR: Son tan solo unas preguntillas para una encuesta, sobre la salvación de las almas!!! (Amenazante, mientras le señala la bombacha) Y por lo que veo, he llegado en el momento oportuno! Tú eres una infiel, un alma pecadora! BRIGIDA: Si! Briyít, encantada! SALVADOR: Y estabas a punto de mancharte con el pecado!! BRIGIDA: (Despectivamente) Yo ya me enchastré hace mucho!! (Pancho recibe una descarga eléctrica y va teniendo espasmódicas convulsiones, hasta quedar tirado sobre el sillón) SALVADOR: Tu alma necesita de la sanación!! Debemos acercarnos más al Señor!! Ha llegado el momento de la salvación de las almas! De alejarse del pecado! Eso dice el mensaje del Señor!! BRIGIDA: En mi Facebook no apareció ninguna notificación! (Repara en Pancho) Y a éste qué le pasa ahora?? (Se le acerca y lo sopapea como para hacerlo reaccionar) Dijo algo como que era medio enfermito, no? O me pareció? (Pancho está acostado sobre el sillón, Brígida arrodillada en el mismo, inclinada hacia adelante mirando la cara de Pancho y Salvador queda parado mirándole la cola muy de cerca a Brígida) Nene!!! Te sentís bien?? Pareciera como que le dio un ataque!! (Sin dejar de observar a Pancho) Usted cómo lo ve? SALVADOR: (Mirándole la cola) Casi perfecto! Le falta hablar, nomás! BRIGIDA: (Mirando a Pancho y dándole cachetaditas para que reaccione) Cómo va a hablar? No ve que está rígido?! SALVADOR: Y además tiene la virtud de contagiar esa rigidez a todo a su alrededor!! BRIGIDA: Me parece que quiere decir algo…!! SALVADOR: Llega a hablar y me muero de un infarto!! (Por cocina aparece Teodoro, todavía envuelto en la toalla. No puede caminar bien, porque una de las piernas se le afloja casi haciéndolo caer. Un brazo lo tiene inutilizado. La cabeza se le bambolea, y por tener la lengua afuera no puede articular palabras. Llega tambaleando hasta donde están los demás e intenta decirle con señas, para nada claras, que quiere orinar) TEODORO: Aduda dídi!! Aduda dídi!! Dóde adada deba didi?? BRIGIDA: Teodoro!!! Qué te pasó??? TEODORO: Didi dudo!! Da dedudá!!! (Señala el celular, enojado) Da doda de du dade!!!! BRIGIDA: No te entiendo!! Qué decís?? TEODORO: (Señalando el celular muy enojado) Da doda de du dade a dedudá!!!! (Cuando está parado, Teodoro solo mueve la pelvis hacia adelante todo el tiempo, como si fuese un movimiento rítmico, al flexionársele una rodilla) BRIGIDA: Algo con el sofá?? TEODORO: (Casi lagrimeando, mientras se retuerce un poco por los movimientos casi espásticos y otro poco porque se está orinando) Aduda dídi!! Dóde adada didi dado?? Aduda dídi!! BRIGIDA: Otra vez con el aduda dídi??!! Qué corno es aduda dídi??!! (Mira a Salvador) Usted qué piensa? SALVADOR: (Como descubriendo un secreto de estado) Creo que intenta decirnos algo! BRIGIDA: (Irónica) Suerte que llegó el Salvador!! TEODORO: Aduda dídi!! Aduda dídi!! BRIGIDA: Y dale con el aduda dídi!! SALVADOR: No será un depravado sexual?? (De espaldas al público, Teodoro se abre la toalla para mostrarle a Brígida y ésta se queda mirando) TEODORO: Dóde adada didi dado?? SALVADOR: Vió??? Qué le dije??! Vade retro Satanás!!! BRIGIDA: (Sorprendida porque Teodoro se abre la toalla) Teodoro!!! (Luego de mirar detenidamente, casi como estudiándolo) Bueno, báh… Teodorito, mejor, no? (Pancho va empezando a reaccionar, pero también va teniendo convulsiones musculares, mientras intenta incorporarse sin que nadie le preste atención) TEODORO: Aduda dídi!! Dóde adada didi dado?? BRIGIDA: (Que se quedó mirándole intrigada) Me parece a mí, o pareciera que está llorando..?? (Trans. Se dá cuenta) Ah, no!! Se está meando!!! Eso me querías decir?? TEODORO: (Contento porque lo entendió) Di!! Di!!!! Aduda didi!!! BRIGIDA: (Intenta ayudarlo a cerrarse otra vez la toalla pero no puede) Bueno, yo te ayudo a ir al baño!! Pero cerrate esa toalla que tengo el entusiasmo fácil!! (Tironea, pero no puede sacar la mano) Lo único que me faltaba… SALVADOR: Qué, ya se entusiasmó?? BRIGIDA: No! Pero se me enganchó el anillo en la toalla y no lo puedo soltar…!!! SALVADOR: No tironee de golpe, a ver si todavía lo deja en… una situación delicada!! BRIGIDA: Es que está muy enganchado! Y es un anillo muy caro!! Esto hay que hacerlo con mucho cuidado!! TEODORO: Aduda dídi!!!!!!! BRIGIDA: Si, ya te entendí!! Si querés, yo después te ayudo y te la sostengo en el baño! Pero este anillo cuesta mucha plata! SALVADOR: Tendría que haber alguna tijerilla por algún lugar, no le parece? BRIGIDA: Voy a intentar romper los hilos con los dientes, pero por las dudas, (Señala el escritorio) fíjese allá…! SALVADOR: Ya mismo! El Salvador en acción!! (Sale por escritorio. Pancho termina de levantarse como puede, con los mismos movimientos que Teodoro y se va yendo hacia cocina. Entra a cocina y de pronto se escucha un tremendo ruido de caída, como si Pancho se hubiese resbalado y vidrios que se rompen.) BRIGIDA: Salvadores como éstos, manejaban el Titanic! (Intentando cortar el hilo con los dientes. Teodoro siempre de espaldas al público, teniendo contracciones rítmicas con la pelvis hacia adelante y atrás) Bueno, vamos a ver si así… logramos… con un poco de suerte… tal vez… Ufff! Qué difícil!! (Por puerta de calle que quedó abierta, entra Magdalena, vestida de gala, como para un coctel y con capelina al tono) MAGDALENA: Marti… Se me hacía agua la boca por el colgante… (Queda enmudecida al verlos) BRIGIDA: (Dándole un chirlo en la cola a Teodoro) Vos también, podrías colaborar un poquito, no?? Si te movés tanto se me escapa de la boca!!! MAGADALENA: Pero por lo visto, no soy la única!! BRIGIDA: (Advierte a Magdalena y le habla con los dientes apretando la toalla) Se me quedó trabado y no lo puedo sacar!! MAGDALENA: Usted es una desvergonzada!! Sepa, señorita… que lo que está haciendo es una indecencia… Y encima maleducada!!… porque sepa, señorita… que no se habla con la boca llena!!! (Magdalena se retira indignada) TEODORO: (Casi lagrimeando del sufrimiento) Aduda dídi!!!!!!! BRIGIDA: Bueno, bueno… está bien!! Ya te llevo al baño! A lo mejor ahí me lo puedo sacar sin forzarlo, mientras vos…! (Comienza a llevarlo hacia puerta del baño. Salen. Por puerta de calle entra Mili) MILI: Juani!!! Mi amor!!! Dónde estás?? (Escucha a través de la puerta de baño y creyendo que se trata de Juan, habla hacia allí) Otra vez dejaste la puerta abierta! Un día de éstos vas a tener un disgusto!! Dulce… Me llevo tu coche, porque el mío se quedó y no lo puedo hacer andar… Yo no entiendo de autos…No sé si será la bomba de aceite, el árbol de levas, el carburador o tengo que cargarle nafta, pero no hay caso. Me llevo el tuyo para ir a buscar a la abuela. Supongo que no te habrás olvidado que hoy la invitamos a cenar, no?? Bueno, mi amor, seguí trabajando, pero no mucho, que después venimos con la nona! Chau, mi amor…! (vuelve a salir por calle, mientras toma un llavero del mueble. De escritorio aparece Salvador con una tijera) SALVADOR: Aquí está la tijerilla…! (Mira. No ve a nadie) Dónde se han metido? Me pareció que me hablaba! Fueron al baño? (De hab de serv aparece Marti) MARTI: (Hablando por teléfono celular) Que no, mujer! Te digo que no!! Pero mirá que sos cabeza dura!! Si viniste aquí, me tendrías que haber visto! Te habrás equivocado de casa!! Te digo que no!! Si yo estoy aquí, casi solo!! Quiero decir, con Juan. El director de la película! Cómo qué película?? No te acordás?? La que voy a producir!! Qué bataclanas?? No hay ninguna bataclana! Son todas actrices serias y respetables!! Que no! Que no hay ninguna mujerzuela!!! Y mucho menos haciendo eso!!! Me hubiese dado cuenta!! No, no sé cómo es eso, pero me han contado!! Por supuesto que nunca me lo hicieron!! Eso es pecado!! Te digo que no!! Con decirte que el que más cerca estuvo, fue el proctólogo…! Bueno, quedate tranquila, que está todo en orden… No, no hace falta que vengas… Te digo que no!! Como vos digas, si cielito! Te espero… Chau…(Marti corta el teléfono y le habla a Salvador) No hay caso…! Nunca tuve suerte con las mujeres! SALVADOR: (Como haciendo un chiste) Conozco gente así! Un amigo tenía tanta mala suerte, que lo invitaron a una orgía y le tocó su esposa!! Já, já, ja!!! MARTI: (Sin reír) Buenas tardes… Usted es el enviado de Jesús?? SALVADOR: Aleluya hermano!! Traigo el mensaje del Señor!! MARTI: Bien, vayamos a las preguntas. No dispongo de mucho tiempo porque estoy abocado a la epístola! SALVADOR: Caramba, qué coincidencia! MARTI: Por qué? Usted también? SALVADOR: Bueno, no. Pero he visto a otra gente también abocados al mismo tema. Mi misión es otra! MARTI: Entiendo… Espéreme un minutito. Voy a traer mis documentos, y luego vuelvo, de acuerdo? Si quiere, (Le señala la cocina) mientras tanto, vaya tomando algo… (Sale por hab de serv.) SALVADOR: Como no… Muchísimas gracias. Me estaba haciendo falta algún traguito de algo chévere…! (Sale por cocina y también se escucha como si Salvador patinase y se cae, oyéndose otra vez ruidos de botellas que se rompen) Ooooopppsss!!!!!! (Por puerta de calle se asoma tímida y asustada, Magdalena) MAGDALENA: (Llamando, pero en voz baja) Marti!! Marti…! No me equivoqué de dirección… Acá mismo era donde estaban haciendo… cosas raras!! (De cocina aparecen Salvador y Pancho. Este último, por detrás de Salvador, con las mismas contracciones pelvianas que tenía Teodoro, aferrado a Salvador, y con una mano, tapándole los ojos sin querer, por lo que Salvador camina a tientas sin ver a Magdalena y arrastrando a Pancho pegado a sus espaldas) SALVADOR: Menudo momento!! Quita de ahí, hombre, que no veo nada!! Y deja de moverte como un perro en celo, que allí en la cocina, por tu culpa, tengo el pantalón totalmente pegoteado!! PANCHO: (Con la lengua afuera de costado, igual que Teodoro) Aduda dídi!!! Adúda dídi!! SALVADOR: Que tú también quieres?? Primero el otro y ahora tú??!! Van a tener que empezar a sacar turnos!! Lo único que me faltaba! Y seguramente tú también necesitas que te la sostengan, como al otro, no?? (Salvador se suelta y Pancho queda en un costado con sus rítmicos movimientos. Pausa. Al girar, Salvador descubre a Magdalena y viceversa. Salvador intenta una vaga explicación) SALVADOR: Esto, no es lo que parece… Yo le puedo explicar… (De pronto se miran a los ojos y se reconocen. Cambio de luces. Suena la música de “Titanic”) MAGDALENA: Salvador, mi príncipe!!! SALVADOR: Magdalena…!! MAGDALENA: Mi Pupi!! SALVADOR: Magda!!! (Los dos se miran enamorados) Tantos años sin verte... MAGDALENA: Mi pupi!! SALVADOR: Tanto tiempo sin escuchar tus clases de lengua y literatura!! MAGDALENA: Pupi!! te gustaban mis clases?? SALVADOR: Nada he disfrutado más que de tu literatura... Y ni hablar de tu lengua!! (Se aproximan uno a otro y se besan apasionadamente . Entra Pepito y se queda mirándolos) PEPITO: Nunca tan bien dicho: Acabáramos!! Qué romántico!! Sigan, sigan!! No hay nada más lindo que la gente se quiera!! (Los dos se asustan, se sueltan y no saben qué decir. Pepito mira a Pancho, que sigue parado, sosteniéndose con un brazo sobre el respaldo del sillón, con sus movimientos rítmicos de pelvis y le habla casi como en secreto) No te quiero asustar pero… me parecen que te robaron la novia!! MAGDALENA: Es un error! Yo le puedo explicar…! Esto no es lo que parece! SALVADOR: Yo soy el Salvador!! MAGDALENA: Y yo Magdalena!! PEPITO: Y yo un huevo de pascua!! MAGADALENA: Estábamos rememorando una clase de lengua!! PEPITO: Me dí cuenta!! No hacen falta explicaciones! Son un erudito en eso! MAGDALENA: En serio, Monseñor?? Es experto en Lengua? PEPITO: Otra que experto! Doy cátedra!! Eso si, a veces la tengo un poco larga, a veces un tantín venenosa... En fin! SALVADOR: Usted no entiende! Nosotros… Nos conocimos de niños… nos hicimos amigos de púberes… nos enamoramos cuando yo era un adolescente y ella mi maestra! PEPITO: Y yo soy la Madre Teresa!! SALVADOR: Sálvanos Señor del pecado!! Somos acaso culpables de habernos enamorado?? La vida nos ha separado, nos ha vituperado, ha bifurcado nuestros caminos… MAGDALENA: Y nos reencontramos así, después de tantos años…! Como si el tiempo no hubiese pasado..!! Como si todavía fuésemos aquellos chiquilines PEPITO: En el baño hay un espejo! MAGDALENA: En verdad le digo…! No reencontramos después de tantos años… Y con el mismo amor!! Como si todos estos años no hubiesen sido más que un impasse en nuestras vidas… (A Salvador) Te casaste? SALVADOR: Para qué? Nunca me hizo falta! Vivo con dos hermanas que me cuidan, me miman, me dan todos los gustos, se desviven por mí!! Me atienden con tanto esmero…Y me complacen en todo!! MAGDALENA: (Haciéndose la coqueta) Bueno, pero… Tus hermanas nunca te van a poder hacer, lo que te haría una esposa! SALVADOR: Y quién ha dicho que son hermanas mías??! PEPITO: Pero qué reverendo hijo… del Señor!!! Chicos… La charla es sumamente interesante… (Comienza a empujarlos hacia la puerta de salida, junto a Pancho) Pero si Juancito los ve acá, me destierra! Ya les dije, ustedes tienen que estar en la planta baja! (A Pancho que sigue moviendo la pelvis rítmicamente) Sobre todo, vos! Allá seguro que vas a encontrar algo para saciar tus instintos!! Y nada de subir para acá!! Por ningún motivo!! Les va a encantar la fiesta!! Me hace acordar a aquella fiesta, ese año que viajamos al caribe!! Inolvidable…! Todos los días, 28 grados… mar, playa… y ese negro de Martinica de dos metros de altura… Se llamaba Nieve!! Me acuerdo y se me dilata el…corazón! Cuando volví, nadie me creyó que, con 28 grados de calor, todos esos días estuve con 30 centímetros de Nieve encima!!! SALVADOR: No entiende…!! Yo he venido a traer el mensaje del Señor…! PEPITO: Después le mando un Twit!! Vayan de una vez!!! (Los saca a la fuerza) (De hab. de serv. Entran Marti y Juan) JUAN: (Mirando a todos lados) Se fue? PEPITO: El negro? JUAN: El muchacho que envió Jesús! MARTI: Qué raro… Le dije que yo volvía enseguida y mientras tanto que tomara lo que quisiera! PEPITO: No tuve el gusto. MARTI: No entiendo… Y Magdalena tampoco vino por aquí? PEPITO: Magdalena?? JUAN: Si! Su mujer! PEPITO: La mujer del enviado de Jesús? MARTI: No! Magdalena es mi mujer! PEPITO: Magdalena…? Una señora… (La describe de pies a cabeza)?? MARTI: Si! Esa es mi mujer!! PEPITO: Devota de Raimunda! De la gran mártir de los barrios bajos… Sor Raimunda! No! Nunca la he visto en mi vida!! (Juan mira a Pepito como sospechando) MARTI: También es raro, porque me dijo que vino para acá! Y buéh, será cuestión de seguir con la epístola… Permiso… (Sale por hab de serv.) JUAN: (Se le va acercando a Pepito, amenazadoramente y éste va retrocediendo asustado) Pepi… Pepito…!! Pepitito mío…!! PEPITO: Ay, cuando me lo decís así, se me derrite el… alma, mirá!! JUAN: (Empezando a enojarse) Pepito!!! Esa… es la mujer del productor, que va a poner la platita para mi película…! Se puede saber qué hiciste con la señora…??? PEPITO: Me extraña, Juan!! (Haciéndose el inocente) Qué puedo hacer justamente yo, con una señora???! JUAN: Dos minutos con vos, son suficientes para que mañana aparezca en Estambul!! PEPITO: (Despectivamente) Ay, Juan! Estambul! Todo lleno de turcos!! Si por lo menos fuera en Martinica… Nunca te conté cómo me atraganté con Nieve en el caribe?? JUAN: (Comenzando a perder la paciencia) Pepito!! Qué hiciste con la señora??!! PEPITO: (Tratando de esquivar el tema) Y hasta me dio urticaria en las amígdalas!! JUAN: (Muy enérgico) Pepito!!!! PEPITO: La mandé a… (Se rasca la nariz para dificultar el entendimiento de lo que dice) msjfghhsjtces!! JUAN: (Persiguiéndolo) Pepito…!!!!! Hablá claro!!! PEPITO: (Lagrimeando) Por cómo estaban vestidos, pensé que venían a la fiesta de disfraces, y los mandé abajo!! JUAN: (Desesperado) Nooooooooo!!!!!!! Mandaste a la esposa del prod… a la org…??!! Noooo!!! (Se sienta vencido en el sofá) Se acabó el sueño de mi película!!! Qué hago ahora…???!! Dónde voy a conseguir a alguien con tanta plata…?? PEPITO: Conozco algunos políticos que hicieron fortunas… JUAN: (Sin prestarle atención) Se acabó!! Todo se acabó para mí!! Mis sueños, mis planes, mi futuro… mi película… todo se acabó!! PEPÍTO: (Tratando de consolarlo) Ay, Juanchi… a veces son tan trágico..!! Por qué no te presentás al casting para Edipo??! No se acabó nada! El coso este va a poner la plata, y vos vas a hacer tu película! Entendiste?? JUAN: (Irónico) Ah sí?? Claro..!! Sobre todo cuando la mujer le cuente al “coso ese”, que estuvo en una orgía, en mi casa!! PEPITO: Ella no va a contar nada, por dos motivos!! JUAN: Cuales, a ver? PEPITO: Uno, que muy mal no la debe estar pasado porque si no, hubiese vuelto enseguida… y dos… Mientras yo esté aquí, ella no va abrir la boca sobre nada, sin mi permiso! JUAN: (Irónico, señalándole el vestuario) Claro!! Porque ahora sos Cardenal!! PEPITO: (Igual que él) No! Porque yo los enganché a los dos apretando, acá mismo!! JUAN: (Sin entender) A quién??! PEPITO: A su Magdalena con un tipo!! JUAN: Con el que envió Jesús?? PEPITO: No sé si lo mandó Jesús o uno de los apóstoles, pero estaban acá, apretando, con el verso ese de que era un amor de la juventud!!!! JUAN: (Pensando) Entonces… no todo está perdido! PEPITO: (Sobradoramente) Ay Juanchi… Cuando aprenderás a confiar en mí! Cuando te vas a convencer que solo yo, soy capaz de darte esperanzas! Que solo yo te puedo dar alegría! Que solo yo te puedo dar ilusión!!! Y que te quede claro… que algún día, te la voy a dar!!! JUAN: Lo que quieras, pero ahora andá a buscarla! Es muy peligroso que se quede ahí! PEPITO: Mirate Juan… sentado ahí en el sofá. Mirame a mí, parado como una tonta, acá. Miralo al coso ese, mirando la epístola en un libro! No pensás que ella la está pasando mejor que nosotros??? JUAN: Pepi! Traela para acá!! Si por algún motivo, Marti se entera que abajo, en mi casa, hay una orgía y encima que su mujer está ahí con un amante, sabés dónde me voy a meter los rollos de película?? PEPITO: Ay, Juan…!! Puedo ser testigo ocular de ese momento??! JUAN: Andá a buscarla!!! (Lo saca a empujones por puerta de calle) PEPITO: (Mientras sale empujado por Juan) Tengo un lubricante fantástico!!! (Sale. De baño aparece Brígida con la boca abierta por una contractura y le cuesta hablar) BRIGIDA: Juan…! JUAN: Qué te pasó ahora?? BRIGIDA: (Hablando con dificultad al no poder cerrar la boca) Un calambre!! JUAN: Un calambre, en la boca??? BRIGIDA: Qué tiene de raro? Cualquier músculo se puede acalambrar! JUAN: Pero en la boca?? Qué estabas haciendo?? Bostezando?? (Ella lo mira con suficiencia) Está bien! No hace falta que me cuentes! BRIGIDA: Decime… (Mientras Juan le masajea la cara) Desde cuando tenés tantos secretos conmigo?? Cómo no me contaste nada de ese hijo??! JUAN: De qué hablás??? BRIGIDA: (Entra Marti enfrascado en el libro. Juan no lo ve por estar de espalda y Brígida se asusta y trata de contarle) El gusano apestoso!! JUAN: (Mirando adentro de su garganta) Un gusano tuvo un hijo?? No se ve nada!! Adónde?? BRIGIDA: Atrás tuyo!!! (Juan gira y al ver a Marti se desespera y le tapa la cabeza y la cara a Brígida con el pañuelo de seda y disimula) JUAN: Entonces, la odalisca…. Que se viste con el velo, así… entra en escena y baila la danza del vientre…! MARTI: Perdón que me inmiscuya… interrumpo algo? JUAN: Esteee… le estaba explicando unas escenas nuevas… algunos pequeños cambios que estuve agregando… MARTI: Ahhh, qué interesante… Molesto si los veo yo también? JUAN: Es que… ya se lo conté. No hay apuro. Los puede ver después, cuando… MARTI: Ahora estaría bien! JUAN: Pero después, cuando hagamos el ensayo… MARTI: Ahora!! Cuál es el problema?? JUAN: No, ninguno…! Okey… (A Brígida, quiñándole un ojo) Entonces vos entrás en cuadro desde allá, y empezás a bailar… BRIGIDA: (Siempre sin poder cerrar la boca, hablando con dificultad) Vengo desde allá y bailo? JUAN: Es lo que dije, Brígida! BRIGIDA: (Corrigiéndolo) Briyít!! MARTI: Perdón que me inmiscuya otra vez… Porqué habla así? JUAN: Porque es una Agarena!! BRIGIDA: (Con dificultad al hablar, no se le entiende bien, y creyendo que es un insulto) Agarena, las p…!! (Juan le tapa la boca) MARTI: (Interesado) Qué dijo? JUAN: “Encantada, soy su hermana!” MARTI: (Besándole la mano) Mucho gusto. El placer es mío! (Muy seductoramente) Agarena! Permítame besar su mano… (Lo hace muy dulcemente) BRÍGIDA: (Siempre hablando igual) Al contrario! Soy yo quién debería…!! (Se le arrodilla delante y lo toma de las caderas, pero Juan se da cuenta y la levanta rápidamente) JUAN: Dejemos las atenciones para después, mejor, no?? Qué tal si seguimos con el ensayo? MARTI: Tiene razón… Cómo es esa escena nueva? Porque no la conozco… JUAN: Bueno… este… Se trata de… (A Brígida) Cómo te dije, te acordás? BRIGIDA: No! JUAN: Lo que te dije…! Que llega una chica Agarena (Rápido antes que Brígida le diga algo) que significa: Descendiente de Agar, personaje bíblico, esclava de Abraham!! Y cuando lo ve al sacerdote, se pone a bailar la danza tradicional… Okey? Tres, dos, uno… acción!! (Juan activa el equipo de música y suena “old time rock and roll” por Bob Seger. Al principio todos se miran intrigados, pero de a poco Brígida empieza a bailar según la música y se va entusiasmando. Juan no sabe dónde meterse. Marti mira entre intrigado y baboso. Juan se desespera, intenta cortar el sonido, pero no puede, Brígida sigue bailando muy entusiasmada seduciendo a Marti, mientras Juan le dice gritando, con intención, una vez que logra desactivar la música.) Cuando se da cuenta que no era… (Se da cuenta que no hay música y deja de gritar) la música apropiada por los hábitos del presbítero… Quién llega al pueblo en es ese preciso momento…??? Eh?? (Tratando de ganar tiempo para pensar) Quién llega??? Se lo imagina?? Ahá! No se lo imagina… porque no es tan fácil… hay que imaginar rápido!!! Llega al pueblo… (Por escaleras se asoma Charly aún vestido de Homo Erectus, con el garrote en la mano) CHARLY: Perdón… (Señalando hacia la habitación de arriba) Se puede usar el yacusi de arriba?? JUAN: (Ante la mirada interrogativa de Marti. Juan se desespera y sigue inventando y le dice a Marti) El Homo… Erectus! Bajando de las montañas!!! Que como estuvo tanto tiempo allí, necesitaba un buen baño! Tanto oso suelto, se imagina que el tipo tenía un olor encima que…! (Charly, contento al verla bailar a Brígida, sin música, se le acopla. De calle entra Pancho, siempre con sus movimientos convulsos) Entonces se produce entre ambos, una rara metamorfosis, mezcla de misticismo y romance… que acompañada por una música celestial los lleva finalmente al paraíso… (Pancho llegó sin ser visto, todavía tambaleando hasta el equipo de música y lo activa sin querer nuevamente al apoyarse y empieza a sonar “La Bilirrubina” por Juan Luis Guerra. Brígida es seducida en el baile por Charly y y por su “bulto” y ambos se van hacia arriba por escaleras, bailando. Pancho y Teodoro que sale del baño, con los mismos movimientos convulsos, se van cruzando al ritmo de la música y se van cada uno por el lado opuesto casi al ritmo. Pancho se va por baño. Y Teodoro por escritorio. Una vez que han salido todos, Juan corta la música y no sabe qué decir. Se miran con Marti) Y esos, son los tullidos del pueblo, que acompañan en el baile a la odalisca y que simbolizan a... los pobres infelices, que dentro de poco serán decapitados… (Casi como para sí, amargamente) por mis propias manos!!! (Observa a Marti que niega lentamente con la cabeza. Juan comienza a comprender que está perdido) Aunque son sólo ideas, unos primero bocetos que… No sirven para nada…! De todas formas, si a usted le parece… podemos cambiar todo! Todavía estamos a tiempo!!!! Es más… Si quiere, podemos hacer una de dibujitos animados!!! MARTI: (Siempre negando con la cabeza) No… no… Nunca me había imaginado que esto podía ser así!! (Pausita. Juan llega hasta el estante. Toma un gran destornillador y se apunta a su propio corazón como para clavárselo. Cierra los ojos y escucha que Marti dice:) Es genial!!!!! JUAN: (Abre los ojos. Suelta asustado el destornillador y gira, sin entender) Qué cosa? MARTI: (Casi emocionado) Lo que acabo de ver!! Esta escena!! Esos simbolismos!!! Sobre todo me impresioné cuando apareció el Homo!!!! JUAN: (Desalentado, como para sí) Cagamos! ( A Marti) Lo conoce a éste?? MARTI: Por supuesto!! Una magnífica representación del Homo-Sapiens. Es sublime!! El Cromañón!! Me parece brillante la idea!!! JUAN: En serio me lo dice?? MARTI: (Le palmea la espalda) Te parece que podría poner millones de dólares para cualquier porquería??? JUAN: Si!! Quiero decir… si a usted le parece… MARTI: Esto está destinado al éxito, Juancito!! Vamos a ganar millones!! Nos vamos a cansar de contar plata!!! JUAN: (Lo abraza mientras se van hacia hab. de serv.) Ya que tocó ese tema… necesitaríamos un poco de efectivo, porque con estas nuevas escenas, necesitamos unas cuantas locas más como ésta! Me entiende? MARTI: Locas?? JUAN: (Se da cuenta que metió la pata) Locaciones! Escenarios naturales para filmar. Yo les digo locas, para abreviar! Pero son locaciones! MARTI: (Riendo) Ahhh! Muy bueno! No hay ningún inconveniente… (Sacando la chequera) Si es para las locas, no se escatima!! Já, já!! (Le habla a Dios) Perdón, pero sabe que era un chiste!! (Van saliendo por hab. de serv.) JUAN: No se preocupe que Él tiene mucho sentido del humor! (También hablando hacia el cielo) Hace rato que se está cagando de risa de mí, no es cierto??!! (Salen por hab. de serv. Por escaleras vienen bajando Brígida y Charly. Los dos con el pelo totalmente revuelto y manchas de rouge por todos lados) BRIGIDA: Ahhhh…!! Vos sí que sos un tsunami!!! De qué querés el sándwich? CHARLY: Me da lo mismo! Con el hambre que tengo soy capaz hasta de comerte a vos!! BRIGIDA: (Excitada) Otra vez?? Esto se está poniendo bueno!! Pero todavía no me dijiste de quién es la despedida de soltero? CHARLY: Mía! Por eso hoy se me permite todo! Además ya lo hablamos… Me tengo que vengar, porque me engañó varias veces… Ahora traeme algo de comer que estoy famélico!! (Ella se va hacia cocina) Y cuando vuelvas arriba… (Le habla muy sexy) Vamos a jugar a “La muda” ¡! BRIGIDA: (Encantada e intrigada) Ay, ese no lo conozco!! Cómo es?? CHARLY: Yo apago todas las luces… Después vos entrás a oscuras, y eso sí, -condición “sine qua non”-, vos tenés que entrar bostezando… y de pronto, Zás!! Te tapo la boca y te dejo sin habla!! Y vos tenés que adivinar con qué te tapé la boca… Eso sí, cuando puedas volver a hablar!!! BRIGIDA: Ay, Si!! Me encanta!!!! Andá apagando las luces que ya te llevo algo para comer!!! (Entra a cocina y Charly se va hacia arriba. Cuando Charly desapareció, se escucha un grito de Brígida y ruido de cosas que se rompen, como si se hubiese caído) Aaaayyyy….!!!!!!! (Por puerta de calle entra Mili, apresurada) MILI: Juan… Otra vez dejaste la puerta abierta de tu casa…!! Juan!! Se me quedó tu auto también!! (Hablando hacia escritorio) Decime… no supiste nada del muchacho discapacitado que desapareció del negocio de cáterin?? Pobrecito!! Debe estar asustadísimo!! Me encontré en el camino con su jefe, y me dijo que es un enfermo!! Es el muchachito de anteojos… Te acordás cuando hicimos el pedido para la película? Lo vi un par de veces y parecía, no sé, normal… Quedé tan preocupada que también me ofrecí a buscarlo… pero ya no sé por dónde!! (De baño, aparece pancho, todavía con sus movimientos plagados de convulsiones, ella lo ve y se le ilumina el rostro) Ayyy!! No me digas que sos vos y te metiste acá?? Ayy… Me volvió el alma al cuerpo!! Bien hecho!! Esta casa es más que segura!! Acá nunca hay nadie más que Juan, aunque siempre deja la puerta abierta!! (Lo abraza. Lo toma de la mano, lo sienta en el sillón y tomando el celular se lo quiere dar, pero Pancho le teme y no lo quiere agarrar) Vení!! Vamos a llamar a tu jefe que está muy preocupado… PANCHO: (Muy asustado por el celular) Di ed dedo!!!! Do ed dedudá do do adado! MILI: (Mientras ella intenta marcar en su celular) Bueno, yo le hablo, pero por lo menos marcame el número… Mientras yo le aviso a mi abuela, que hace rato que me debe estar esperando… (Busca el celular en su bolso y va sacando varias cosas, entre ellas dos pequeños aerosoles. Mira la etiqueta de uno) Siempre me equivoco y en lugar del desodorante me traigo la anestesia!! PANCHO: (Mili le pone el celular a la fuerza en la mano de Pancho y éste se activa, dándole otra descarga eléctrica, pero no tan fuerte como la anterior, que Mili no advierte por estar marcando en su celular) Ahhhhhhgggggg!!!!!! MILI: (Hablando por su celular, mientras deja la anestesia sobre la mesita) Hola, abuela… soy Mili… Tuve un pequeño inconveniente y por eso me atrasé… (Mira su reloj) una hora nomás… Es que se me quedó el coche! No! Cómo que ya te pediste un taxi?? Para nada!! Yo te voy a buscar…! No sé, en otro taxi o… No importa si son dos viajes, abuela,. Para qué soy anestesista? Gano bien!… Abuela…! No, abuela!! Te pusiste el aparato o no me escuchás a propósito??! Yo te voy a buscar y venimos a comer a lo de Juan, así por fin lo conocés! Vas a ver, es un ángel!! Sí, es la dirección que te di el otro día, una casa de dos plantas, pero la de abajo está deshabitada…Bueno, Juancito también se muere de ganas de conocerte! Va a ser una noche inolvidable! Si… Chau! (Corta y advierte a Pancho lagrimeando) Qué te pasa? PANCHO: A dóda de du edada!!!! (Lagrimeando) A dóda de du edada!!!! MILI: Qué querés? PANCHO: (Señalándole el baño) Adúda dídi a dado!! MILI: Ir al baño..?? Ahora tiene que ser?? Tu familia te debe estar buscando!! PANCHO: (Haciendo señas de apuro) Adúda dídi!! MILI: Bueno, dale… yo te acompaño…!! PANCHO: A duda de do dadió a dedudá!!! MILI: Bueno! No te impacientes!! Ya estamos yendo!! (Salen por baño y por puerta de calle entran Pepito y Magdalena que está visiblemente mareada por el alcohol) PEPITO: Le dije que no tomara tanto…! Mire cómo quedó?! MAGDALENA: (No pudiendo enfocar la vista en un punto fijo por la borrachera) Tanto lío por una copita… PEPITO: Otra que copita… Copona!! Y no fue una… Fueron varias!! MAGDALENA: (Le cuesta también hablar) No exagere… Era solo un trago largo. PEPITO: No había tragos largos! Me dijeron que desde que llegó, que está tomando de un florero!! MAGDALENA: Qué exagerado… Como si una estuviera mareada… (Trastabilla) Exagerado como mi marido, cuando se mira desnudo al espejo y se dice “Que grande, Marti”!! Y eso porque se compró uno de esos espejos que agrandan todo!! Con decirle que cuando va al baño, tiene que llevarse los anteojos para encontrar algo!! Lo único que tiene grande, es la cuenta bancaria!! PEPITO: (Señalando hacia el costado) Por qué no va al baño y se refresca con un poquito de agua fría, mejor, eh? Mire si su marido la ve en estas condiciones… MAGDALENA: (Muy mareada y bostezando) Si, buena idea… y también me voy a tirar un ratito en alguna camita si no le molesta, porque me agarró un sueñito…! … PEPITO: No hay problema… Los dormitorios están arriba… MAGDALENA: Gracias… (Mientras se va trastabillando hacia escaleras y va subiendo) Una siestita y enseguida se me pasa… No sé por qué, pero tomo una copita de nada, y ya me agarra un sueñito… que hasta que no me duermo unos minutos… (Bosteza) Ahhhhh!!! (Empieza a retroceder de espaldas y Pepito se asusta al verla y debajo de los escalones la contiene por detrás, para que no se caiga, abrazándola, y ella muy mareada se inclina hacia adelante quedando casi en la posición de perritos) Uuuuuuuppppppsssssss…!!! PEPITO: Qué le dije??? Tenga cuidado!! A ver si se da un golpe…! Espere que yo la ayudo!! MAGDALENA: (Excitada, sintiendo algo en su cola) Ay, Monseñor!!! Me parece a mí, o usted tiene algo muy duro…?? PEPITO: No se entusiasme tanto! Es el crucifijo!! Fue un obsequio muy especial. Una noche me lo regaló un señor al que… Buéh, no tiene importancia! MAGDALENA: Ahhhh…! PEPITO: (Intentando subirla por escaleras hacia arriba, en la misma posición de perritos, empujando a cada paso por cada escalón) A ver? Vamos… Despacito… eso es… poco a poco… Otra vez… (Por puerta abierta de calle, entra la Abuela, llega hasta el centro, sobre el foro y se queda observando) Otro poquito más… Eso es… Ya falta menos… Usted podría colaborar un poquito, no?? Deja que yo haga todo el trabajo!! Ya me estoy cansando! MAGDALENA: (Tentada de risa) Es que… (Riéndose a carcajadas) Sentir eso tan duro, que el señor le dio, me llena de fantasías!!! PEPITO: El señor me lo regaló para venerarlo y besarlo, no para apoyarlo en cualquier parte!! MAGDALENA: Y por qué el señor le dio uno tan grande?? La mayoría de los curas lo tienen chiquito! (Vuelve a reír a carcajadas, muy tentada) PEPITO: Es que no todos le dan el uso que le doy yo! MAGDALENA: Lo usa mucho?? PEPITO: Imagínese… Cada una que viene a confesarse, primero lo tiene que besar! MAGDALENA: (Cambia de risueña a llorar) Monseñor!!! Me siento mal!!! PEPITO: Y también, querida, con todo lo que tomaste!! MAGADLENA: (Rompiendo en un llanto lastimoso) Me siento mal porque he pecado, padre!!! PEPITO: (Tratando de mantenerla en pie) Bueno, no te lo tomes así… Quién no se ha echado una canita al aire, alguna vez… o algunas… o varias… o muchas, en fin, no tiene importancia! MAGDALENA: (Se le arrodilla delante de su bajo vientre y le pone las manos en rezo sobre el crucifijo a esa misma altura) No me lo puedo tomar de otra forma…! Monseñor… Si se lo beso, me promete que me va a confesar?? PEPITO: (Va a contestar y recién advierte a la abuela que lo está mirando inexpresiva. Pepito no sabe qué decir. Mira a una y a otra. Sopesa la situación) Bueno… yo… este… MAGDALENA: Tómeme confesión…! Le juro que se lo beso cuantas veces quiera!!! (Tratando de enfocar la mirada sobre el crucifijo trabajosamente por el mareo) Y con lo grande que es, hasta le puedo besar la cabecita!! PEPITO: (A la abuela) Yo le puedo explicar…!! (Por Magdalena) Es un alma en pena!! ABUELA: (Displicente) Me imagino! Que pene nomás!!!! PEPITO: No!!! No es lo que parece!! Cuando ella hablaba de que estaba muy dura, se refería… ABUELA: (Interrumpiéndolo con ironía) Me imagino… A la situación económica! Y qué le quiere besar? La hipoteca?? (Pepito la empuja hacia arriba de escaleras y Magdalena se va bostezando) PEPITO: Es inútil… Y usted, vaya de una vez a refrescarse…! Tenga cuidado de no abrir tanto la boca al bostezar, que se le van a caer las cuerdas vocales! (Ella vuelve a bostezar muy ampliamente y desaparece por arriba, y de pronto se escucha un grito ahogado) MARDALENA EN OFF: Auugghhhhhh!!!!!!!!!! PEPITO: El mismo ruido que hago yo jugando a “la muda”!! (Por escritorio aparece Teodoro todavía tambaleando y con los movimientos pélvicos) TEODORO: Dodadía do adadé! ! Dode edá da uda?? Dodo duda da dodonda!! ABUELA: No me diga nada… Otra alma en pena que se la quiere besar, no? (Sale por calle) PEPITO: (A Teodoro) Qué te pasó?? TEODORO: (Mostrándole el celular) A dóda de du dade a dedudá!! De dio ededididá! PEPITO: (Sorprendido) El celular?? Para qué lo agarraste??! No ves que es una picana??! Cuando lo activás así, te da una descarga eléctrica que…! (Trans. Lo mira sensualmente a Teodoro) Lo activaste y te dejó todo… duro?? TEODORO: Di!! A dóda de du dade!! (Pepito se relame) PEPITO: (Oliendo) Me parece a mí, o acá hay feo olor?? Y viene de vos! (Por el celular) Es que cuando se usa esto, no se controlan esfínteres! …! (Ve el aerosol sin etiqueta que dejó Mili sobre la mesita y lo toma) Acá hay un poquito de desodorante de ambientes… (Le echa todo alrededor de Teodoro y éste se desmaya justo cuando Pepito gira para dejar nuevamente el aerosol sobre la mesa. Cuando vuelve a girar para agarrar a Teodoro, éste ya cayó sobre el sillón) Qué hacés?? (Intenta despertarlo) Justo ahora querés dormir?? Ehh!!! Despertate!!! (Le escucha el corazón) Muerto no está! Ya es algo!! Pero mejor que Juanchi no lo vea así, porque me va a echar la culpa! Y va a tener razón, pero no es el hecho! (Saca una manta y lo cubre íntegramente junto con todo el sofá) Mejor lo tapamos hasta que se despierte… y como segunda medida de seguridad… Nos escapamos lo más rápido posible!!! (A Teodoro no se lo ve, porque está totalmente tapado con la manta. De pronto se escucha el ruido del celular eléctrico que se activa, como si estuviera debajo de Teodoro. Este tiene una convulsión y se detiene. Se escucha nuevamente y luego de otra convulsión se vuelve a detener. ) JUAN: (Entrando con un cheque en la mano, junto a Marti) Mil… qué digo mil, millones de gracias!! Yo creo que por ahora va a ser suficiente. Cualquier cosita le aviso. MARTI: No tengas vergüenza, Juancito! Sobre todo si es para las locas!! Já, já!! (Le firma otros más) Tomá, acá tenés otro y otro, y otro más para que no tengas que andar pidiéndome delante de la gente…! Qué van a decir si te doy cheques para las locas!!! JUAN: Si… Usted sabe cómo son! Cada una tiene necesidades distintas!! MARTI: Me imagino… habrá que cambiarle cosas… adornarlas, ambientarlas… en fin, ponerlas más lindas…! JUAN: Ya lo creo! MARTI: Y supongo que con las locas, es algo de nunca acabar!! JUAN: Y qué lo diga… MARTI: En el fondo, sabés por qué confío en vos?? Porque demostraste ser un hombre de bien! Que no tiene nada que ocultar! Esa es la gente que me gusta!!! Honesto, talentoso y decente!!! JUAN: Gracias! (Señalando el escritorio) Si me permite, voy a guardar éstos chequecitos… (Va salir por escritorio y Marti lo sigue) MARTI: Una preguntita… Esas locas son por acá cerca o hay que viajar para encontrarlas? JUAN: (Mientras van saliendo ambos por escritorio) Con algunas vamos a tener que viajar… (Salen juntos. Por debajo de la manta se vuelve a escuchar el celular que se activa y a Teodoro que sufre otra descarga. Todo vuelve a quedar en silencio. De cocina aparece tambaleando Brígida, un tanto enchastrada por haberse caído en la cocina. Va a sentarse en el sofá, y cuando está a punto de llegar a sentarse, observa la habitación de servicio y se va hacia allí, saliendo. De baño salen Pancho y Mili. Pancho tiene los pantalones como si estuvieran atascados a la altura de las rodillas y camina con dificultad) MILI: Cómo se te pudo trabar el pantalón??? No entiendo qué hiciste con el cierre!! PANCHO: Do do dé! Dé de do??!! MILI: (Lo lleva hasta el sillón y lo deja ahí mientras ella intenta irse hacia cocina) Vos esperame acá, que yo voy a ver si en la cocina hay un cuchillo o una tijerita para destrabar ese cierre! (Pancho se sienta en el sillón y se escucha otra vez que se activa el celular y Pancho recibe otra descarga. Por el envión de la descarga se abalanza hacia Mili y la abraza) PANCHO: Aaaagggghhhhh!!!! (Queda abrazado a Mili) MILI: Bueno, está bien… No tengas miedo, no te voy a dejar solo! Vení conmigo!! (Salen ambos por cocina. De escritorio aparecen Marti, un tanto apresurado y Juan) MARTI: Es un minutito nomás! JUAN: (Señalándole la puerta del baño) Ahí está el baño. Entre con confianza! Después hacemos los comprobantes de los cheques, para que todo quede registrado… MARTI: No hay apuro para eso… Mi mujer es la que suele llevar las cosas contables. Es muy meticulosa… Por demás, diría yo. Siempre digo que es producto de la edad… Ella es diez años mayor que yo… y a ésta altura, casi no se nota, pero…! Le puedo asegurar que yo sí, lo noto!!!! Permiso… JUAN: No se preocupe, vaya nomás! (Marti entra al baño. De calle entra la abuela, entre temerosa y sigilosamente) ABUELA: Permiso… JUAN: Si…? (Sin saber quién es) ABUELA: Disculpe la pregunta, pero… Usted vio lo que está ocurriendo abajo?? JUAN: Abajo??? Ahhh, si!!! No!!! Yo le puedo explicar!!! ABUELA: No hace falta! Yo ya sé lo que es!! JUAN: Si, me imagino…! Quiero decir, que sí, que sabe! Pero seguramente todo se debió a una mala interpretación de los hechos… ABUELA: Lo de abajo o lo de acá? JUAN: Qué pasó acá?? ABUELA: Me va a decir que lo del “Cardenal” era una mala interpretación??? JUAN: El Cardenal??? Ahhhh!!! Si!! No!!! Quiero decir… Seguramente el Cardenal la envió allí por equivocación!! Pero usted no va a decir nada, no? Porque… (Con intención) “El que esté libre de pecados que tire la primera piedra”…!! Usted me entiende… ABUELA: Qué?? Ya le estuvieron contando sobre mi juventud??? JUAN: Algo… ABUELA: Bueno… Una también tuvo lo suyo… JUAN: Entonces… Puedo confiar que no va a contar nada sobre lo que vio abajo?? ABUELA: Lo de abajo es más natural que lo que vi acá!! JUAN: Y qué hay de raro acá??? (De calle entran Pepito y Salvador que lo trae agarrado por detrás) SALVADOR: No te resistas! Únete a la celebración del Señor!!!! PEPITO: No puedo ser infiel otra vez!! Estoy a punto de casarme! (Se quedan duros al ver al resto) ABUELA: Eso!! MARTI: (Apareciendo del baño con más cheques) Juan, te voy a dar más cheques por si a las locas hay que pagarles por adelantado… ABUELA: Y eso!!! (Marti se queda duro al ver a la abuela) MARTI: No!! No me entienda mal… Yo me refería a… los cheques son para las…!! ABUELA: No aclare, que oscurece!!!(Enseguida, de escaleras baja Charly trayendo a upa a Magdalena muy borracha, que aún en sus brazos le tira besitos)) CHARLY: Casi la ahogo!!! Juro que no voy a jugar nunca más a “la muda”!!! ABUELA: (Siempre a Juan) Y también eso!!! PEPITO: (Indignado, al verlo) Charly!!!!! CHARLY: (Indignado al verlo también) Pepi!!!!! MARTI: Magdalena!!!!! MAGDALENA: (Tirándole un besito a Salvador) Mi Príncipe!!!! SALVADOR: Mi Pupi!!! MARTI: Pupi????? ABUELA: Y también eso!!! (De cocina sale Pancho, todavía con los pantalones por las rodillas, aún con convulsiones, y detrás suyo tratando de sostenérselos, y con un cuchillo en la boca, Mili) PANCHO: Adúda didi!!! Adúda dídi!!! MILI: (Sin advertir a nadie) No te escapes que no te la puedo cortar!!! Mirá si alguien nos ve??? (Advierte a todos y se queda muda) JUAN: Mili!!!!! MILI: Juan!!! Yo te puedo explicar!!! Él es el enfermo!! (Pancho se va por calle asustado y tapándose) PANCHO: (Mientras sale) A duda de dos dadió a dodos!!!! ABUELA: Esto ya es yapa!!! (De habitación de servicio, aparece Brígida, todavía dolorida) BRIGIDA: (Al ver a Marti) El gusano!!! (Se tapa la cara como puede y se pone a bailar, intentando ser sensual, pero muy achacada por los golpes) MARTI: (Señalando para el costado donde están todas) La atorranta!!!! MAGDALENA: (Indignada) Yo??? MILI: (Indignada) Yo??? BRIGIDA: (Aclarándoles, Orgullosa) No. Yo!!! CHARLY: En qué quedamos?? La orgía era acá o abajo??? MAGDALENA: Abajo!! MARTI: (Muy sorprendido) Orgía???!!! MILI: (También indignada a Juan) Orgía??? BRIGIDA: (Entusiasmada) Orgía? Dónde?? MAGDALENA: Para que te abran, tenés que decir la contraseña: “Habemus Pepis”!! BRIGIDA: Ya vengo… (Se va repitiendo para no olvidarse) Habemus Pepis… Habemus Pepis… (Sale por calle) MARTI: (Muy indignado, a Magdalena) Y vos cómo sabés la contraseña??? SALVADOR: Y de dónde se cree que venimos?? (A Brígida mientras sale) Hay que entrar por la puerta de atrás! PEPITO: Es lo mejor! Siempre por atrás!! MARTI: (Se le acerca a Magdalena) Así que, Pupi??? Con que “Habemus Pepis”, No?? Y yo que pensé que estabas ocupada con el colgante!!! CHARLY: Bueno… Justamente el juego de La muda, consiste en… PEPITO: (Indignado a Charly) No me digas que jugaste a La muda con la veterana??!!! CHARLY: Lo de ella fue una confusión!! Fue con la otra!!! Y vos no te hagas el inocente que estaban bien acaramelado con este reverendo… SALVADOR: Salvador! El enviado del Señor! Nosotros acogemos a todos los fieles!!! PEPITO: Y a los infieles también!! MARTI: (Se le acerca a Pepito) Pero… Y la epístola de Juan??? MILI: Y a usted qué le importa?? O también es trolo como el “Cardenal”??? MARTI: Como???? (A Pepito) Usted es…??? CHARLY: (Yendo a abrazar a Pepito) Sin palabrotas peyorativas, eh??? Gay a secas!! Él es mi novia!! Y nos vamos a casar!!! MARTI: (A Juan) Dígame la verdad… Yo me quedé dormido y esto es una pesadilla, no? JUAN: (A Marti) Yo… puedo explicarle todo… O casi! MARTI: Creo que no hace falta… Voy entendiendo… La atorranta es su hermana??? JUAN: Bueno, sí. Pero tenemos muy poca relación… MARTI: Y el Obispo es marica y se va a casar con el Homo Sapiens?? CHARLY: Erectus! Suena mejor! MARTI: (Por Mili) Y ella es su novia… Que se la quería cortar a un enfermo!! JUAN: Eso parecía… MARTI: Mientras organizaba una orgía en la plata baja, a la que llevó a mi mujer! JUAN: En realidad… MARTI: Y allí ella se emborrachó y conoció a… al Salvador!! SALVADOR: Error! Nos conocemos desde los quince años!! MARTI: Desde los quince años???!! SALVADOR: Así es!!! Desde los quince años que me dedico a recoger infieles!!!!Y ella fue una de ellos! No sabe lo infiel que era!! MARTI: (A la abuela) Y usted es…? MILI: Mi abuela! MARTI: (A la abuela) Y también vino a la orgía??? ABUELA: De ninguna manera! (Quiebra a traviesa) No estaba enterada… Y usted no se haga tanto el santurrón!!! Que yo vi que le estaba dando cheques para que contrate locas!!! MAGDALENA: (Sin perder su borrachera) Cómo??????? Sos un sinvergüenza!! MARTI: Nooo!!! No es lo que parece!!! Yo te puedo explicar…!! MAGDALENA: Y me recriminabas a mi unas copitas de más y haber hecho el amor con Salvador??? MARTI: Cómo???? Hiciste el amor con él????? SALVADOR: Pero fue en nombre del Señor, para comprobar si su fe se mantenía intacta!!! PEPITO: A ésa edad ya no queda nada intacto!! CHARLY: (Amenazante a Salvador) Y supongo que también le quiso comprobar a Pepi, si la tenía intacta??? PEPITO: Charly!! No te voy a permitir! Para que sepas, yo todavía tengo muchas cosas intactas…!! CHARLY: Ah sí?? Por ejemplo? PEPITO: El aura!!! ABUELA: Usted mejor no hable! Yo escuché muy bien cuando dijo que antes de tomar confesión se la tenían que besar!! MARTI: Al cardenal????!!! No dijeron que era gay???? JUAN: Si!!! Y la orgía es su despedida de soltero!! MARTI: Y el Vaticano sabe de esto???? PEPITO: No!! No había lugar para invitar a todos!!! MARTI: Yo me voy…! Todo esto me ha superado! No puedo pensar con claridad… (Pasa al lado de Magdalena) No sé si te voy a abrir la puerta cuando vuelvas a casa!! (Sale por calle) MAGDALENA: No te molestes… Tampoco sé si voy a volver a casa!!! JUAN: (Tímidamente a Marti) Supongo que lo de película lo dejamos para otra oportunidad, no? MARTI: Tres o cuatro reencarnaciones serán suficientes! (Se va por calle) SALVADOR: (Tomándola del brazo, también salen por calle) Magdalena…! MAGDALENA: Pupi!!! SALVADOR: Magdalena!! MAGDALENA: Pupi!!! SALVADOR: Qué buena decisión…!! Todavía nos quedan muchos infieles por recoger!! MAGDALENA: Y yo hace tanto que no… recojo infieles!!! SALVADOR: (Casi por lo bajo a Magdalena) Supongo que del divorcio te quedás con la mitad de su fortuna, no? MAGDALENA: Off course!!!! SALVADOR: Entonces, qué esperamos?? Vayamos a recoger infieles una isla del caribe!!! PEPITO: Tengan cuidado con los 30 centímetros de nieve!!! (Salen ambos por calle) ABUELA: (Yendo también hacia calle) Mili, mejor dejamos la cena para otro día… Ah! Y si a la mañana no volví, mandame algo de ropa!! (Antes de salir, se le acerca a Pepito) Habemus Pepis era la contraseña, no?? (También se va por calle, cantando y bailando) “Que vengan los bomberos, que me estoy quemando. Que vengan los bomberos que esto es un incendio…” JUAN: (A Mili en reproche) Ahora veo a quién saliste!! MILI: No tenés vergüenza!!! Justamente vos me decís eso, que organizaste una orgía en tu casa??? JUAN; Yo no organicé nada!! PEPITO: Lo de la despedida de soltero fue idea mía! CHARLY: (En reproche) Y lo de apretarte al “Salvador” también??? PEPITO: Por lo menos no jugué a la muda con la veterana!! CHARLY: Ya te dije que fue una equivocación!! Yo estaba jugando a la muda con la loca!! JUAN: (Haciéndose el ofendido) Lo de loca, es por mi hermana??? CHARLY: No sé! La que estaba paseando en bombacha! JUAN: (Vencido) Sí. Es mi hermana!! PEPITO: (A Charly) Y me lo decís así tan natural???? CHARLY: Quedamos en que hoy yo tenía carta libre para hacer de todo, por las siete veces que te tuve que perdonar! PEPITO: Cinco!! Dos veces no cuentan porque tres fueron con el mismo!! (Todos se ponen a discutir a los gritos y Charly y Mili se van enojadísimos. Desde el sillón, vuelve a activarse la picana y se incorpora como de un salta ) JUAN: (Pepi advierte que Juan se ha puesto a llorar) Se acabó!! El sueño de toda mi vida se acabó así, de golpe… tantos años soñando con hacer ésta película… Tantos años esperando al amor de mi vida hasta que conocí a Mili… Y de golpe, como de un plumazo, todo se esfumó… Y me volví a quedar absolutamente solo…! Sólo como un perro abandonado…!!! Me han quitado la alegría de vivir!!! Cómo voy a hacer para recuperar la alegría???!! Para volver a encontrar algo que me motive nuevamente???!! PEPITO: Tenés que decir las palabras mágicas para ser feliz… JUAN: (Sin entender de qué habla) Qué palabras…? PEPITO: (Se inclina hacia adelante, y levantándose un poco la sotana y mostrándole la cola, dice con sonrisa pícara) Decí: Habemus Pepis y los dos vamos a recuperar la sonrisa!!! (Juan comienza a enojarse pero desde el sillón, debajo de la sábana, salta Teodoro por haberse activado nuevamente la picana y los dos saltan del susto y lo miran) TEODORO: A Duda de dos dadió a dodos!!!!!!! (Se va caminando como puede con sus convulsiones y Juan toma la picana y comienza a perseguir amenazante a pepito) JUAN: Vení, Habemus Pepis!!!! Ahora vas a ver lo que es ponerse “púrpura” de verdad!!!! PEPITO: (Empezando a correr) No, Juan!!!! Cuidado con lo que estás pensando que tengo hábitos benditos!!! Se volvió loco!!! Llamen al Vaticano!!! Traigan el Batimóvil!!! Que venga Batman!!! Socorroooooo!!!! (Salen corriendo y se cierra el