EL MUNDO DE SOFIA

La Novela de Jostein Gaarder hace un recorrido por la historia de la filosofía,

repasa la Edad Media (San Agustín y Santo Tomás de Aquino), el Renacimiento,
el Barroco, Descartes, Spinoza, Locke, David Hume, Berkeley, la Ilustración,Kant,
el Romanticismo, Hegel, Kierkegaard, Marx, Darwin, Freud, y el existencialismo de
Sartre. Todo, relatando la historia de Sofía a quien ha puesto a pensar a través de
unas cartas en su buzón, con interrogantes como ¿Quién eres? ¿De dónde viene
el mundo?

A grandes rasgos el libro habla de los mitos, de los filósofos de la naturaleza

(Tales, Anaximandro, Anaxímenes, Parménides, Heráclito, Empédocles,
Anaxágoras...), de Demócrito, del destino, de Sócrates, Platón y Aristóteles, y del
helenismo (cínicos, estoicos, epicúreos, neoplatonismo y misticismo), de las
grandes civilizaciones.

Mientras Sofía empieza a recibir por correo nuevos conocimientos acerca de lo

que es la filosofía, nosotros los lectores, recibimos una carga de inquietud
filosófica. A ella se le explica a fondo el pensamiento de los filósofos, a nosotros
nos envuelve una novela con personajes cotidianos que luego se mezclan con
conocimiento en filosofía. Esto hizo que yo misma me planteara las mismas
interrogantes que Sofía, “¿Qué es la vida?, ¿Cuál es el propósito del humano en
nuestro mundo?, ¿Por qué la gente se muere?, ¿Qué pasa después de la
muerte?”. Siento que me he metido en el personaje, porque he ido cuestionando
mi entorno y lo visto en clases.

Las primeras noches me debatía entre insomnio y sueños difusos, tratando de dar
forma a los primeros capítulos, especialmente con la tesis de que “Lo único que
se necesita para ser buenos filósofos es la capacidad de asombro” y que tanto me
he conformado con el día a día, y como nos vamos acostumbrando a lo que está,
sumergiéndonos cada vez más en una zona de confort y vamos perdiendo cierto
interés por lo que vendrá o podría venir. Si nosotros no razonamos, nos quedamos
en la ignorancia, como personas que no quieren ver más allá de lo que está
delante de ellos.

Ese trasegar entre filósofos de la naturaleza, presocráticos, Aristóteles e ideas del

pasado, me hicieron pensar en que no estamos tan lejos de ellos, es más creo que
nos llevan ventaja. El cómo buscaban averiguar las causas de los fenómenos
naturales, el origen de todas las cosas, y las causas de por qué algo pasaba. En
fin, mentes brillantes que quisiera tener el gusto de conocer y compartir en estos
días. Algo que no me gustó de Aristóteles fue que pensara que la mujer era un
hombre incompleto, si estuviese vivo le enviaría un emoji de desagrado, pero le
pondría un like por sus aportes en lógica.

Más allá de la novela y sus extraños personajes, está muy bien pensar en los
grandes aportes de los filósofos, porque ellos nos han llevado a muchos
descubrimientos científicos y del hombre. Pienso que Gaarder así nos invita a
dejar de estar en el ocio y pensar un poco más, ser observadores y hacer reflexión
de todo lo que nos pasa y nos rodea.

Para alcanzar el mundo de Sofía, se necesita desarrollar la capacidad de pensar

por sí mismos, de elaborar juicios y argumentos propios, de dar respuestas
satisfactorias a las innumerables preguntas que se formulan sobre el mundo, la
vida, la sociedad, el futuro, la libertad, la democracia, el arte y muchas otras cosas
más.

En conclusión, El mundo de Sofía" es un libro que todas las personas en

formación deberíamos leer, además de ser de mucha utilidad para refrescar
conocimientos de filosofía y poner a pensar, y no sólo eso, sino que también
aprendes a valorar y a hacerte preguntas sobre la mayoría de las cosas que nos
rodean, nos siembra la semilla de la filosofía, ese gusanito que nos lleva a
plantearnos las cosas desde distinto punto de vista, la formación de un
pensamiento reflexivo en la posibilidad de pensamiento, en poder pensar y
analizar los hechos y acciones con la capacidad de juicio crítico, para construir
conceptualmente su mundo y su entorno, desde la pregunta y la indagación,
como pudo lograrlo Sofía.