La contaminación de los plásticos en el océano lleva siendo documentada
por investigadores desde 1970, pero no ha sido hasta el año pasado cuando este tema ha saltado a la primera plana de la agenda pública. Las imágenes tristes de playas y mares plagados de bolsas y botellas han creado una alarma social, más que justificada con los datos en la mano. Cada año, se estima que ocho millones de toneladas de plástico terminan en el océano. Un producto que antaño fue alabado como un golpe de genialidad se ha convertido en uno de los problemas ambientales de más rápido crecimiento en el mundo. Puede ser difícil imaginar cuánto son realmente ocho millones de toneladas. El plástico genera grandes problemas para la vida silvestre y para los humanos. Aves, tortugas y otras criaturas oceánicas quedan atrapadas en bolsas, atrapadas en redes de pesca abandonadas y mueren con sus vientres llenos de plásticos. El plástico entra de este modo a la cadena alimenticia y a los alimentos que comemos. De hecho, se ha encontrado plástico en prácticamente todas las especies de peces examinadas, además de en los mejillones y los cangrejos de las nieves. Y esto es solo el comienzo.
En ese sentido proponemos algunas alternativas como:
1. Utiliza menos productos de plástico
El plástico es una de las principales amenazas del océano. Para limitar su
impacto se pueden dejar de utilizar botellas de pet y sustituirlas por termos, y usar bolsas de tela para transportar las compras.
2. Haz compras sostenibles de productos de mar
Muchas especies se están agotando debido a la demanda y las malas prácticas de pesca. Es importante buscar marcas o comercios que vendan productos marinos certificados con prácticas sostenibles.
3. Usa productos biodegradables en las playas
Existen bloqueadores y bronceadores solares biodegradables que no
ocasionan daño a las especies marinas; procura comprar este tipo de productos, que indican en la etiqueta que son amigables con el medio ambiente.
4. No tires basura en las playas
Durante tus vacaciones es importante cuidar los desechos que generas y no
esperar que alguien más se haga cargo. Demuestra tu cultura de respeto ambiental y, si encuentras en tu camino alguna basura, puedes contribuir a recogerla. Con esta acción tan sencilla estarás contribuyendo a no contaminar el mar.
5. Viaja por el mar responsablemente
Si practicas deportes como el kayak u otras actividades que se realicen en
el agua, no tires nada por la borda y sé consciente de la vida marina que habita en las aguas que te rodean. Si estás planeando hacer un crucero, elige la opción que sea más respetuosa con el medio ambiente.
RESPONDA CON IMÁGENES Y DIBUJOS
1. ¿Qué puedes hacer para evitar la contaminación del mar?
2. ¿Qué les espera a las generaciones futuras si derrochamos los recursos naturales?