Universidad Autónoma de Manizales 

Valentina Londoño Ramírez 

Ingeniería Industrial 
Logística 

Logística, un componente diferenciador. 

 
Muchos de los acontecimientos históricos fueron raíz y fundamento de las grandes
ramas que existen y se rigen en la actualidad, este caso no es ajeno a un término,
que aunque en un punto desconocido, siempre fue testigo de la evolución humana
en su concepto más primitivo.

La logística desempeñó un papel primordial en la administración de reservas

alimentarias y armamentistas, desde las guerras más arcaicas hasta las más
modernas. Un concepto que resalta a partir de la época del Imperio Romano, y que
posteriormente fue objeto de estudio al mostrar resultados eficientes.

Suministrar en ese entonces, hacía alusión al desarrollo de cálculos, cuyo fin era
aportar beneficios competitivos en materia de aprovisionamiento, distribución y
control de recursos, de hecho, la naturaleza de esta idea no se aleja de lo que hoy
en día se conoce como el campo logístico.

Así pues, con el pasar de los años, cada época se conjugaba como un escenario
propicio para enriquecer técnicas y conocimientos, a fin de desarrollar un
componente diferenciador.

Después de la segunda guerra mundial, es decir, a principios de 1950, el colosal

crecimiento económico fue bandera de una época próspera, sin embargo, la
capacidad de venta y producción tomó ventaja frente al ingrediente distributivo. En
esta escena, se esclarece la importancia de entregar a tiempo los bienes producidos
y más aún de forma eficiente.

El desarrollo de estrategias durante las siguientes épocas iban orientadas a una

máxima capacidad de respuesta, que de algún modo aumentaba la rentabilidad de
las compañías y agregaba un valor potencial. Gestionar los materiales y/o materias
primas, reducir los costes de servicio de transporte, la integración de elementos
tecnológicos y dar apertura a un mercado más globalizado,por nombrar algunos,
son aquellas facetas que impulsaron un movimiento importante y digno de
reconocer dentro del ámbito productivo.
La logística juega un papel fundamental en el crecimiento de las organizaciones e
incluso tiene repercusiones dentro del desarrollo económico de los países.

Para defender dicha tesis, se tiene que la función de este término en definidas
cuentas es alcanzar la competitividad a nivel empresarial, el gerenciamiento óptimo
de la cadena de suministro es un punto fundamental para lograr diferenciarse en
términos de costos y servicios de calidad.

La novedad de este campo radica en el concepto de dirección coordinada de las

actividades interdependientes, en vez de la práctica histórica de manejarlas de
manera separada, además la logística añade valor a los productos y servicios
esenciales para la satisfacción del cliente. Constituye un elemento estratégico que
da aperturas a nuevas oportunidades, profundiza las relaciones de colaboración
entre proveedores y compradores, satisface la demanda e incrementa el nivel de
servicio

Esto aporta valor a la economía en cuanto genera una cantidad de riqueza y de

recursos necesarios para poder materializar funciones, sean meramente productivas
o de distribución física en función de las características de cada país.
 
Aunque suene insistente, vivimos en un mundo de constante evolución, con hambre
de cambios e instauración de necesidades. Todos estos acontecimientos imponen a
gritos la adaptación como medio de supervivencia, siendo análogo al concepto
biológico que ya es conocido.

Potenciar los conocimientos y abarcar estrategias de mejora continua son palabras

claves que muchas organizaciones no solo mencionan sino que también llevan a
cabo, y la logística es todo un ejemplo de ello.