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HISTORIA DE LA FILOSOFÍA MEDIEVAL Y RENACENTISTA I Tema 10.

Santo Tomás de Aquino

Giovanni Reale y Darío Antiseri


La Historia de la Filosofía, 1.2. (Patrística y escolástica)
“El ente real y la distinción entre esencia y existencia”

Toda la realidad, tanto el mundo como Dios, es ente, porque tanto el mundo
como Dios son, existen. El ente se predica de todo, tanto del mundo como de
Dios, pero de una forma analógica, porque mientras que Dios es el ser, el mundo
Dios es el ser, tiene ser.
el mundo tiene
ser. En Dios, el ser se identifica como su esencia, por lo cual también se le llama
acto puro, ser subsistente.
En la criatura, en cambio, se distingue de la esencia, en el sentido que esta
no es la existencia, sino que posee la existencia, o mejor dicho, el acto gracias al
cual deja de ser lógica y se transforma en esencia real.
Los dos conceptos, constantemente utilizados, de esencia y acto de ser
(actus esendi) son los dos pilares del ente real. La esencia indica “qué es” una
cosa: el conjunto de notas fundamentales por las que un ente –Dios, el hombre,
un animal, la planta- se diferencian entre sí.
Si en lo que concierne a Dios, la esencia se identifica con el ser, en todas
las demás cosas, la esencia significa una simple actitud para ser, es decir, potencia
de ser (id quod potest esse).

Esto significa que, si las cosas existen, no existen por necesidad, también
El mundo y cada podrían no existir, y, si son, podrían perecer, y ya no ser.
una de sus partes Puesto que la esencia de las criaturas no se identifica con su existencia, el
es contingente: mundo en conjunto y cada una de sus partes integrantes, no existe
puede ser y necesariamente: es contingente, puede ser y puede no ser.
puede no ser.

Dado que es contingente, si existe, el mundo no existe en virtud de sí


mismo –su esencia no se identifica con su existencia- sino en virtud de otro, cuya
esencia se identifica con el ser, es decir, Dios. (Este es el núcleo metafísico que
inspira las pruebas de la existencia d Dios de santo Tomás).

El acto de ser, De lo dicho se deduce que, si bien el discurso sobre la esencia resulta
que poseemos fundamental, aún más fundamental es el discurso sobre el ser, o, mejor dicho,
por participación sobre el acto de ser, que Dios posee de forma originaria y las criaturas poseen de
forma derivada, por participación.

“Novedad de la perspectiva tomista


respecto a la ontología griega”
El ser es el acto Se puede definir la metafísica de santo Tomás como la metafísica del ser o
que sirve para o del actus essendi.
actualizar la El ser, en efecto, es el acto que sirve para actualizar la esencia, la cual, en
esencia, la cual, esencia, no es más que un poder-ser.
en esencia, no es Se trata, pues de una filosofía del ser, no de la filosofía de las esencia y de
más que un los entes, del ser que permite que las esencias se vuelvan reales y se transformen
poder-ser. en entes.
Se trata, por tanto, de una perspectiva completamente nueva en
comparación con la ontología griega.
Los interrogantes más típicos de esta filosofía no hacen referencia a las
esencias, sino al ser.

Tema preparado por Mercedes Laguna González. Tutora TAR de la asignatura y Tutora del
1 Campus virtual del Sureste. UNED.
Extraído de Anthony Kenny, “Naturaleza del intelecto”, en
La teoría de la mente en santo Tomás de Aquino. Ed. Herder, Barcelona, 2000.
HISTORIA DE LA FILOSOFÍA MEDIEVAL Y RENACENTISTA I Tema 10. Santo Tomás de Aquino

La metafísica de santo Tomás es la metafísica del ser y aspira a


brindarnos un fundamento del saber más profundo que el de las esencias,
un fundamento que sirva de cimiento a la realidad y a la posibilidad misma
de las esencias.
Una filosofía Esta filosofía es optimista porque descubre un sentido profundo en
de lo concreto el interior de lo que es.
Es una filosofía de lo concreto, porque el ser es el acto gracias al
cual las esencias existen de hecho.

Tema preparado por Mercedes Laguna González. Tutora TAR de la asignatura y Tutora del
2 Campus virtual del Sureste. UNED.
Extraído de Anthony Kenny, “Naturaleza del intelecto”, en
La teoría de la mente en santo Tomás de Aquino. Ed. Herder, Barcelona, 2000.

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