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Ubicación geográfica
Distrito : pilchaca
Provincia : tayacaja
Region : huancavelica
La adecuada gestión del riesgo de desastres en el sector agrario permite reducir los riesgos
asociados a peligros y vulnerabilidades o minimizar sus efectos, así como evitar la generación
de nuevos riesgos, además de contribuir a la mejor preparación y atención de parte de los
agentes agrarios ante situaciones de desastres como el fenómeno El Niño, entre otros. Esto
con el fin de proteger los activos productivos y evitar afectar la economía del productor
agrario, sobre todo de aquellos que residen en zonas de menor desarrollo y que presentan una
mayor vulnerabilidad. La política de gestión del riesgo de desastres en el sector agrario busca
manejar la exposición a los riesgos que enfrenta el sector, al permitir la continuidad productiva
y sus medios de vida, en un contexto del cambio climático, considerando que el Perú en
muchas partes de su territorio presenta condiciones de alta vulnerabilidad a desastres.
Desarrollo de capacidades
Acceso a mercados
La mayor articulación de los pequeños y medianos productores agrarios a los mercados local,
regional, nacional e internacional, a través de una oferta competitiva, contribuye al aumento
de sus ingresos y a la mejora de sus medios de vida. La generación de una oferta de productos
agrarios competitivos se da en el marco de procesos de agregación de valor y calidad a nivel de
cada eslabón de las cadenas productivas del agro nacional, con el fin de incorporar en mayor
medida, a grupos, organizaciones y empresas de la pequeña y mediana agricultura. Esto
permitirá aprovechar las oportunidades que se identifican en el mercado interno y externo, en
un marco de apertura comercial e integración al mercado internacional a través de los
distintos acuerdos comerciales y de demandas cada vez más exigentes de los consumidores.
Desarrollo institucional
El Ministerio de Agricultura y Riego como órgano rector del sector agrario diseña, coordina,
ejecuta y evalúa la Política Nacional Agraria, a través de intervenciones públicas de alto
impacto, a fin de avanzar en la construcción de un sector competitivo, integrado y sostenible,
priorizando al pequeño y mediano productor agrario y a las comunidades campesinas y
nativas. Bajo este contexto, se considera de alta relevancia la participación activa del Sector
Público Agrario (SPA), que incluye al Gobierno Nacional, los Gobiernos Regionales y los
Gobiernos Locales, en la implementación de la Política Nacional Agraria, siendo necesario
contar con elementos claves para esta intervención conjunta: i) manejo de la heterogeneidad
agraria sobre la base de la tipología del productor y la aplicación de políticas diferenciadas, ii)
gestión agraria al nivel territorial, que implica el desarrollo de capacidades del SPA, y iii)
articulación intrasectorial e intersectorial, en el marco del desarrollo rural y la seguridad
alimentaria.