Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
PRÁCTICA TILDACIÓN
TEXTO 1
Para mi solo traes el peor te que encuentras, mas si el te lo pide entonces si te esmeras
por conseguir el te mas caro y mejor. Algun dia sabre donde fian y ya no necesitare de ti
ni de tu te.
Ahora, regresando a lo que ha sucedido ayer, ¿por que me preguntas solo a mi, no ves
que aqui estamos muchos? Ademas, si quieres saber la verdad, preguntaselo a el, porque
el si lo sabe. Yo solo se lo que el me conto.
Lo que si te puedo decir es que al mediodia llego el alferez de la gendarmeria a indagar
por el accidente. Y cuando este estaba dirigiendose hacia el capataz de la mina, don Cesar
Belaunde le ordeno con estentorea voz y le dijo: de, ahora mismo, una informacion escrita
del numero de victimas a la comisaria mas cercana; mas procure no colocar el numero
exacto, porque la noticia de Marras puede provocar un motin de los indigenas.
TEXTO 2
TEXTO 3
Aun en los momentos mas dificiles del motin el capitan Teofines Napoleon Bermudez
mostro energia. Yo se lo que hago, decia. No quiero que nadie de un paso en falso. Solo
los que han perdido la razon creeran que estoy solo para conducir la embarcacion. Mas
estan equivocados. Pues deben saber que tambien estoy para velar por la salud y la vida
de quienes como tu, tu y tu estan bajo mis ordenes. Quien incentivo a la tripulacion a
alzarse contra mi hizo mal. Quien, oculto en el anonimato, esta alentando la rebeldia es
un cobarde. ¿Quien es el? No lo se, mas pronto lo sabre. Y a el le digo: se hombre, sal de
tu guarida; se valiente, enfrentate: ¡saca la cara! No te quedes alli, que se yo donde,
tramando sabe Dios que otros planes mas, sin pensar en el daño que me estas haciendo y
sin meditar, un instante. Cuando te dejaras de hacer que se yo que barbaridades mas.
TEXTO 4
Don Walter, padre de Elias, empezo con la perorata de reproche: “Se cortes y prudente
hijo, y seras apreciado por mi, como el mas serio y docil; porque yo oi no se que cosas de
ti, mas no di credito ya que nosotros los Rodriguez adonde estuvimos nadie nos tacho.
Como te digo, tu como primogenito debes dar el ejemplo, si no es asi, adonde llegaremos,
que sera de tu vida. Cuando me entere no supe que pensar ni a quien preguntar, en mi
UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN CRISTÓBAL DE HUAMANGA
decia: como es posible que se haya portado asi, conclui pensando. Como se te ocurrio
tratarle con malcriadez a el si, como te dije, el es tu tio. Cuanto te adverti al notar tu
rebeldia, ademas te digo: “lo cortes no quita lo valiente”, mas tu cual rapaz patan ofendiste
no solo a tu tio, sino tambien al maestro Hector Rios. Ahora cual es tu disculpa. ¡Cuan
ingrato fuiste! ¡Que desagradecido! El, el maestro te enseño las primeras palabras…”
TEXTO 5
TEXTO 6
TEXTO 7
comprendi que debia correr a Bermudez. Cuando llegue ahi todo estaba en silencio, solo
de rato en rato se oia el llanto de un niño y los gritos de una mujer colerica. No habia nada
que hacer…pobre animal estaba lamiendose el lomo. Sobre su cabeza note una lamina
rojiza sin pelos: todo era una llaga viviente. No se quejaba, pero tenia las orejas gachas y
el cuerpo le temblaba cada vez mas. Cuanta pena me dio verlo asi: flacido, sumido como
en vahido anemico, pero eso si, aun altanero (…)
TEXTO 8
Me recibio de lo mas bien. Estaba en su oficina solo, firmando unos documentos. Cuando
me vio se puso de pie y me invito a pasar. Se sento y se quedo largo rato mirandome: creo
que no me reconocia muy bien (a mi me dio la impresion). El habia cambiado mucho
desde la ultima vez que lo habia visto. Estaba no se si mas viejo o solo mas cansado; mas
no estaba como yo lo recordaba. Algo tenia en si que me decia de remotos sufrimientos:
esa cicatriz bajo el pomulo, la cornea lacrimosa, las arrugas en la frente – tenues aun, pero
indelebles ya, marcas de profundisimas preocupaciones.
Se que usted tiene algo que decirme, dijo. Le ruego que sea breve, porque luego de usted
aun debo atender a mas personas, recalco. Si, le respondi. He creido necesario venir a
entregarle el trabajo que se me encomendo acerca de la crisis economica de nuestro pais.
Aun no esta concluido, mas debe conocerlo: creo que hemos avanzado mas de lo que se
esperaba. Lo alcance, me lo recibio. Se quedo en silencio. Lo veia aturdido. Se frotaba
las manos: le temblaban. Hizo un esfuerzo, balbuceo palabras que no entendi, y me
alcanzo un memorando. Sospechaba algo. Lei su contenido con avidez increible: me
decian que estaba despedido. Me sorprendi. Me mire las manos: estaba tiritando como
transido de frio. Todo me daba vueltas. Un sopor extraño invadio mi ser. En esos instantes
llegaba a mi la voz severa de mi padre: Se como aquel- decia refiriendose al joven Saenz-
el si que es una persona importante, es el mas habil estudiante de su seccion y jamas ha
decaido en sus estudios. No te metas en politica. Terminaras como esos en la misma calle.
Acudia tambien a mi memoria la imagen de mi madre, la veia sentada alli, en el viejo sofa
de la casa, calentandose bajo el timido sol invernal. Ella tambien me repetia inquisidora:
Se como el. La cabeza me dolia con fuerza. En eso senti que alguien torciendome el brazo
me empujo hacia atras. Empece a gritar mas nadie me oia. Me vi en el vacio, caia,
caia…Pretendi cogerme de algo por ese instinto que tenemos los hombres de abrir las
manos frente al peligro. Me agite. Patalee. Grite…Sobresaltado, me incorpore con
desesperacion. Solo habia sido un sueño y nada mas. El reloj marcaba las seis de la
mañana. Habia que ir a trabajar.