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Sociología I semestre Derecho

FUNDAMENTOS DE LA SOCIOLOGIA DEL DERECHO

La sociología del derecho ha sido un gran acontecimiento de investigación tanto


teórico y político, también se enfoca en la historia, como se enfrenta los métodos
sociológicos holistas con los métodos individualistas. Estos temas son tratados por
diferentes autores sociólogos que han tratado el tema del derecho, se entiende
que el individualismo metodológico como; humanismo y al holismo como; anti
humanismo.

Desde un punto de vista que se da en la sociología como definición del derecho,


es el conjunto de reglas que regulan el comportamiento de los individuos en la
sociedad, los que han desarrollado la sociología del derecho paralelamente con la
evolución de sociología general son: Durkheim y Weber.

En la década de los 60 el antihumanismo marxista, es considerado como el


comportamiento de la conciencia humana, la historia seria la estructura objetiva
donde el hombre sería un elemento más condicionado y nunca determinante, el
antihumanismo en el derecho es la instancia superestructural, es decir, no
económico y depende derecho en el cual regula las diferentes las diferentes
esferas económicas (producción, circulación, distribución), también en la sociedad
(políticas e ideológicas), el ser humano es un buen funcionamiento de las
diferentes estructuras sociales.

Tanto que a Nicos Poulantzas como uno de los destacados contribuyentes de la


sociología del derecho, Louis Althusser y Michel Foucault son de gran valor teórico
los elementos que deben tener en cuenta de este tema tratado. También la
comparación entre el humanismo y el antihumanismo en los intereses teóricos y
políticos sobre la práctica jurídica.
En el punto de vista político, allí se busca contraponer las actitudes que tienen
algún vínculo con el derecho ya sea su derivación perspicaz de las teorías ya
mencionadas.

Por otro lado la parte humanista se encaja en la efectuación de las garantías


jurídicas para la población civil.

Lo antihumanista se basa en la abstracción utilizando un ambiguo análisis:


estratégico y táctico. (No se preocupa por el cumplimiento de las normas
jurídicas).

A continuación se explicaran los tres capítulos: los dos primeros son de modalidad
teórica y el tercero trata de demostrar vestigios y hechos sobre el derecho a la
hora de su utilización.

CAPITULO I
EL HUMANISMO EN LA SOCIOLOGÍA DEL DERECHO

En la edad media se remonta una relación del siervo y no trabajador. Entre este
vínculo ambiguo se describe que el siervo no tenía modo de propiedad (este era el
que realizaba todo el trabajo) siendo el señor feudal al que le correspondía la
producción. Poco a poco este tipo de nexo característico del medioevo, se fue
apagando y teniendo un nuevo rumbo al fundamento material moderno.

Es preciso que de ello se impuso a la realización de la libertad, justicia y la


igualdad aunque irónicamente es una sublimación a la condición de explotación.
Aquella realización es el espejo del contrato de trabajo.

De esta manera los obreros lineales (directos) son liberados de los vínculos del
feudo siendo evacuados a las masas de organización y aparatos como colegios,
alcaldías, embajadas, clínicas, la, la milicia etc.
Idóneamente dicha individualización se constituye como una figura materialista de
las relaciones productivas y jerarquización de la sociedad obrera en el marco de la
centralización capitalista como hecho de la efectuación de las prácticas y las
técnicas del Estado que fabrica y somete ese ente.

Para Michel Foucault, se enfocó en la parte de las nuevas técnicas del poder
como una reforma jurídica más humana:

 En diferencia a la reforma del S.XVIII las penas cambiaron de una


efectividad dolorosa con la violencia y torturas a un modelo de castigo
subjetivo por decirlo así.
 Es por ello que las penas no se aplican hacia el cuerpo del ser humano. Se
tiene una perspectiva a al castigo dirigido a una condición por ejemplo que
se le prive la libertad con cárcel ya sea pena de algunos años o cadena
perpetua.
 De ello se nota y se ve el castigo hacia una condición de espacio-tiempo, es
decir a la privación de la libertad como una tortura no física por excelencia y
más justificada a la modernidad.
 El verdugo (ejecutor) de las sentencias fue reemplazándose por individuos
de diferentes profesiones y ciclos: vigilantes, médicos, clérigos, siquiatras,
psicólogos, educadores etc.
 En base de la independización de las prácticas jurídicas se puede
agradecer a la implementación de un conjunto de mecanismos
administrativos que se responsabilizan de aplicar la ley.

Foucault deja en claro, los puntos anteriores intencionales de la reforma no se


encabezan en sacar adelante algún derecho en criterios más humanos, si no de
fundar cimientos cuya imposición se refleje en los acuerdos a las máximas
económicas de mayor eficiencia con el más bajo costo posible.
Lo más destacado de ello es que en este nuevo poder tratado por el autor
mencionado, el equilibrio del poder en sus ejercicios quiere evitar el castigo en
todas las modalidades, y aun así en los grupos privilegiados donde por pertenecer
en otros cuerpos se enfrentan y se debaten contradictoriamente. Trátese que con
lo anterior es una reestructuración de la instancia jurídica que sustituye los
vínculos antiquísimos interpersonales del siervo y el señor feudo.

La ideología jurídica humanista, son todas aquellas teorías del


conocimiento acerca del derecho que nos permite alcanzar una clara
compresión sobre la relación del derecho moderno con relaciones de
producción incluyendo, los aspectos de las formas en que la matriz espacial
y temporal capitalista, de ello es la organización material del derecho
mediantes las técnicas de ejercicio del poder. Tanto que los juristas ven que
la “ideología jurídica” y “ciencia jurídica” tiene una gran diferencia, no son
sustancialmente relevantes para los objetivos, la definición de “ciencia del
derecho” todas aquellas construcciones teóricas que conforman un
conocimiento objetivo aunque no definitivos, de las relaciones jurídicas.

Dice Althusser, las ideologías teóricas como la “ciencia jurídica” se


encargan de trazar las líneas de demarcación a través de las teorías
sociales para distinguir las ciencias “verdaderas” de las teorías ideológicas.
La relación entre las ideologías teóricas jurídicas y el derecho no pueden
definirse como una interacción de conocimiento, sino más bien un vínculo
dirigida para designar a la sociedad las maneras de bien proceder con
respecto al mismo derecho.

De acuerdo con las necesidades de la sociedad moderna, el


contractualismo se concretó en la más apropiada para tener la balanza de
la justicia a la nueva realidad jurídica.

Se debe reconocer que existen diferencias entre la teoría jurídica y práctica


jurídica. La una con la otra no fundan directamente. Como resultado final es
un conjunto de demasiadas terminaciones en todas las direcciones,
sostenidas en el cuerpo de la economía. Siendo así no se debe tomar la
molestia de buscarle relación alguna, de un medio monolineal.

El contractualismo relata que si un individuo se torna a delinquir, se debe


recordar que este mismo individuo acepto condiciones en caso de ser
culpable. La ley lo reconoce como un ser que jurídicamente se vuelve
paradójico. El castigo penal es, en general, una función entera a la masa
social y a cada uno de sus derivaciones.

Por otro lado EL HUMANISMO DE MARX, el ser humano era la


herramienta en la que podía fundamentar su teoría dentro del concepto del
mundo, y a su vez de su hábito político. Para Marx se posiciona en un
humanismo racionalista que lo hace argumentar que La historia solo es
comprensible a través de la esencia del hombre, que es libertad y razón.

En su segunda etapa (Marx) argumenta en su filosofía que…”El estado


político contiene en sus formas modernas, las exigencias de la razón”. De
allí se interpreta todas las arbitrariedades del Estado como una
contradicción verdadera entre la razón y la no razón y no como un descuido
del mismo.

La relación que tiene lugar entre poseedores de mercancías que


intercambiaban equivalentes; es decir, ve al derecho como una categoría
histórica, perteneciente a un tipo de sociedad (Capitalismo consumista) en
la que sus adeptos se interactúan entre sí según sean dueño de bienes,
sujetos egoístas burgueses y portadores de intereses privados.

Referirse al nivel jurídico como relativamente autónomo implica el


reconocimiento de su cupo en la historia propia, es decir, implica reconocer
que posee una especificidad que le permite intervenir en otras esferas de la
sociedad, no como un simple reflejo del nivel económico, ni como la
expresión de la voluntad de la clase dominante, si no como resultado de su
propia eficacia. No obstante, e independiente de esto, se dice que es una
autonomía relativa, porque el nivel social determinante, en última instancia,
es el económico.

CAPITULO II
EL ANTIHUMANISMO EN LA SOCIOLOGÍA DEL DERECHO

Allí se abre paso a una nueva disciplina científica: La ciencia de la historia, en la


que de la mencionada se conocen bases del conocimiento científico del derecho.

A mediados del S. XIX facultades como la historia y la sociología brindaban


comúnmente argumentos concretos ordenados cronológicamente de sucesos
importantes del ayer, como por ejemplo batallas, las fechas de los nacimientos de
ilustres personajes, posesiones entre otros.

La historia ingresa en el campo de las descripciones científicas cuando se dejan


de lado las interpretaciones según las cuales la misma historia es la realización de
la voluntad del hombre o divina. Y ante el descubrimiento de esa ciencia llamada
historia incentivo una bondad a la teoría de las dimensiones magnas, donde el
mérito le llega a Marx.

Sin embargo este descubrimiento no fue producto del curioso e inquieto


comportamiento intelectual de Karl Marx, más bien de otra mente como Lenin con
tres elementos (Tres fuentes y tres partes integrantes del marxismo): La filosofía
alemana, la economía política inglesa y el socialismo francés.

El CAPITAL, de Marx, se mete en posiciones filosóficas materialistas, y es así


como ataca al humanismo burgués, pues este estima al ser humano, no como un
ente generador de las diferentes instancias sociales, sino como emisario de una
función dentro de las estructuras determinadas en las relaciones de la producción.

Es evidente que allí se maneja una crítica antihumanista a la burguesía tal como lo
señala las frases de Marx recogidas por Althusser: “Una sociedad no está
compuesta de individuos” y “mi método analítico no parte del hombre sino del
periodo económico dado”.

Es así como la filosofía humanista es atacada en previa posición. Según la


ideología filosófica de Hegel, se vale de las nociones de dialéctica y espíritu. El
sentido de la realidad y el saber (conocimiento) son dialécticas, es decir lo que los
hace dialecticos en su contradicción.

La dialéctica es la ley del desarrollo de la realidad a través de la conservación y


superación de contradicciones o negaciones que se resuelven en un tercer
término que las supera, son los tres momentos de la dialéctica: La tesis, antítesis y
síntesis. También son: afirmación, negación y negación de la negación.

Desde el punto de vista de Althusser, Marx no pretende reducir las partes a una
totalidad, sino que la totalidad responde a un conjunto de estructuras con
temporalidades diferentes. Es preciso que las partes que componen el todo social
no son reducibles a una contradicción unitaria, de ahí la necesidad de adentrar la
noción de la casualidad estructural.

La filosofía Hegeliana, referida a la consideración histórica guiada por un sujeto


central. Todo lo contrario con Marx, donde desecha la idea de un sujeto central de
la sociedad y de la historia para fijarse de estructuras.

Al dársele relevancia a la explicación científica de la historia se encontró que las


distintas filosofías, lejos de ser productos divinos o el resultado de meditaciones
individualistas notorios, acataban una función social. Una filosofía constituye una
ideología.
La ideología cohesiona a los individuos en sus papeles, en sus respectivos
funciones y relaciones sociales. Ésta impregna las actividades de los hombres,
comprendiendo entre ellas la práctica económica y la práctica política.

Marx avisa que las limitaciones de partir de principios filosóficos tales como
hombre, esencia humana, alienación, etc. rompe con sus concepciones filosóficas
de juventud. Tal ruptura significa para ellos una crítica radical a toda la filosofía
clásica existente, y mediante ella, a toda la ideología de la burguesía.

Los alcances de la ruptura del conocimiento del derecho no escapan a ciertas


interpretaciones marxistas del nivel jurídico. Así como para la explicación de la
sociedad capitalista Marx necesitó construir teóricamente su objeto de
investigación: el modo de producción; también importante para sustentarse en la
teoría científica del derecho construyendo bajo su modo teórico el concepto de su
objeto.

La ruptura epistemológica implica un rechazo de las nomenclaturas filosóficas


tales como: esencia humana, fetichismo de la mercancía, alienación entre otros
que afectan muy especialmente al conocimiento del derecho.

Cuando se habla de predominio se refiere a la forma en lo que lo económico


interviene en las demás instancias sociales. Lo que pasa en el predominio se
refleja a través del desplazamiento del papel dominante a otra sesión o nivel. Un
ejemplo de ello es la ideología religiosa infundida en el feudo la que tenía dominio.

La sociedad capitalista requiere de una reproducción ampliada, esto implica un


cierto cálculo estratégico por parte de las diferentes fracciones del capital mismo.
Esta realización se puede llevar a cabo si se tienen algunos elementos que
permitan la previsión. Esto se puede debido a la axiomática judicial.

Una de las razones que explican lo especifico del derecho del capitalismo solo
puede sentirse en miembros de la sociedad gracias al ya mencionado sistema
jurídico axiomatizado y en relatividad, el desvinculo de la práctica económica.
En la sociedad capitalista la compleja estructura jurídica debe permitir a las
diferentes fracciones de la burguesía la prueba exigente de sus riesgos y
oportunidades permitiendo una reducción a la imprevisibilidad.

Desde la perspectiva de EL CAPITAL de Marx, trata de enfatizar que la violencia


física como el respaldo imprescindible del punto de partida que dio lugar al modo
de producción del capitalismo.

El derecho constituye un elemento de importancia capital en la reproducción de la


dominación burguesa, aunque no está al servicio exclusivo de una clase, como
ciertas tendencias reduccionistas del marxismo pretenden mostrarlo. Hoy se sabe
bien que el derecho no es la voluntad de una clase, convertida en ley, como
señala Marx y Engels en el “Manifiesto del partido comunista”, sino que expresa la
claridad de una correlación de fuerzas en las instancias jurídicas, es decir, la
representación superestructural de la lucha de clase surgida en la base
económica.

Carácter positivo del derecho, son funciones represivas e ideológicas del derecho
hacen del novel jurídico uno de los niveles principales en la producción capitalista.

Ahora desde el punto de vista de las clases trabajadoras la cuestión s otra, la


lectura que se hace de la formalidad y abstracción de la igualdad y la libertad de la
sociedad capitalista dejar margen para observar un aspecto positivo.

Las formaciones sociales son estructuras concretas en cuyo interior se realiza en


forman dominante la matriz de un modo de producción determinado, así puede
decirse que tal formación social corresponde a un determinado modo de
producción, mientras que los demás modos de producción se articulen entorno a
él.

Desde la perspectiva humanista del marxismo tanto en sus versiones economistas


como voluntaristas, el desarrollo histórico es concebido como lineal, donde un
sujeto central, la base económica o el sujeto clase, dirigen el conjunto de la
estructura social hacia un objetivo final.

En este marco los desajustes existentes entre la superestructura jurídica y la base


económica son interpretados como avances o retrocesos de una estructura con
respecto a la otra, desde la complejidad estructural de la formación social por el
contario se pueden comprender en toda su dimensión los desajustes históricos
entre las instancias con temporalidades propias.

Poulantzas dice que estos desajustes históricos de lo jurídico con relación a lo


económico no constituyen avances o retrocesos de la estructura del derecho sobre
la estructura económica.

Forman parte de una misma estructura que es la del conjunto de una formación
social determinadas con niveles que poseen historicidad propias cuyo de
desarrollo de desigualdad es función de esta estructura misma.

CAPITULO III

EL DERECHO A LA COYUNTURA

Lo que se puede considerar como los dos extremos del humanismo, esto es el
humanismo clásico y la escuela critica latinoamericana. La primera concentra su
propuesta en la concretización de las normas jurídicas formales y abstractas por
su parte la escuela critica partiendo de un análisis coyuntural mas razonable,
formula su propuesta entorno en la vigencia del derecho humanitario.

No obstante este carácter fundamental del derecho moderno, ciertas tendencias


filosóficas tradicionales insisten en la necesidad concretizar las norma jurídicas
formadas abstractas y formalmente.
Para la efectiva realización de los derechos es fundamental según esta corriente
(DERECHO MODERNO), este es capaz de aportar dentro de un marco real de
acondicionamientos favorables concurrentes una herramienta útil para que el
derecho alcance efectividad y reconocimiento.

Dice Raul Zafaroni, uno de los representantes más destacados en esta corrientes,
existen actualmente dos tendencias alternativas a la postura neoliberal agrupados
bajo el nombre del nuevo realismo criminológico estas son el “abolicionismo” y el
“derecho penal mínimo”.

La primera sostiene que la respuesta punitiva solo es una forma de resolver


conflictos sociales que el sistema penal opera criminalizando al azar, en su forma
actual, podría suprimirse con gran ventaja reemplazándola por las restantes
alternativas que permitan la solución de conflictos: La reparación, la conciliación
etc. La segunda alternativa penal considera la reducción al mínimo de la solución
punitiva de los conflictos sociales, en atención a l efecto frecuentemente
contraproducente de la injerencia penal del estado.

Desde un primer momento reconoce Zafaroni, apoyado en un realismo razonable


que las relaciones de poder hacen del sistema penal un elemento imprescindible
para la preservación de la sociedad tal cual esta formulado. Aunque no por esto no
deja de plantar un objetivo a largo plazo digno de ser considerado, esto es; “la
abolición del sistema penal y su reemplazo progresivo por distintos modelos de
resolución de conflictos.

Históricamente los derechos humanos reconocen raíces muy lejanas. Su origen


puede remontarse a las especulaciones de los sofistas griegos y su permanencia
nos dice Zafaroni.

Llega hasta nuestros días como un saber inherente a la condición humana. No


obstante su formulación moderna proviene del S,XVIII. A comienzos del S.XIX,
época en que los dueños del capital hicieron uso de los derechos del hombre en
su disputa con la nobleza feudal por la hegemonía del poder.
Toda la tradición humanista rescatada por Zaffaroni, que se extiende a un conjunto
considerable de documentos internacionales desde la declaración de los derechos
humanos de 1948 hacia el reconocimiento en las constituciones nacionales de
casi todos los países, admiten un origen común la revolución francesa y su
constitución de 1971.

Para que los sectores sociales más oprimidos se liberen de su situación


necesariamente deben romper con la estructura de justificación del sistema de
explotación capitalista, aunque considerando los impedimentos propios de cada
situación concreta.

Teniendo en cuenta las condiciones objetivas en la realidad jurídica se constata


que resulta irreflexivo plantear la disminución de los niveles de abstracción de las
normas jurídicas. De este modo, la propuesta política del materialismo considera
la especificidad del derecho, tal cual está dado, y propone un doble análisis interno
y externo. Según este análisis internamente hay que respetar la estructura
especifica del derecho mientras que externamente hay que poner la derecho en
dirección correcta en los fundamentos económicos de la sociedad.

Ante la imposibilidad de prescindir lisa y llanamente de la especificidad de la


estructura jurídica, Poulantzas propone llevar a cabo el análisis de esta instancia
en dos niveles, por un lado, tener en cuenta la especificidad axiomática normativa,
mientras que por otro considerar la relación estructural entre la superestructural
jurídica y la realidad concreta de la base económica.

Es interesante destacar que la especificidad del derecho, tal cual la hemos


considerado aquí, con un rigor inalterable, actúa en forma diferente acuerdo a
circunstancias económicas contraías, es decir, favoreciendo o perjudicando a las
fracciones económicas dominantes.

De acuerdo a los acuerdos o contradicciones con sus intereses materiales, pero


en realidad as características específicas del derecho no son rígidas, sino que
ellas también están atravesadas por la lucha de clases, por lo que los grupos
hegemónicos, a la larga terminado adaptando la súper estructura a sus
necesidades históricas.

Con esto nos estamos acercando con lo que hemos denominado análisis externo.

En efecto externamente se busca la relación directa entre la más económica y la


superestructura jurídica. Desacuerdo con Paulantzas, esto puede lograse de dos
modo diferentes. En primer lugar de acuerdo con las recomendaciones de Marx
puede entenderse la relación entre las normas abstractas y lo económico
mediante la comprensión de las normas más próximas a la base.

Indudablemente la complejidad de la realidad social exige mayores precisiones.


En el análisis de situaciones concretas las contracciones no se reduce al asimile
oposición entre burguesía y proletariado, propio del modo capitalista de
producción definida en su abstracción teórica sino que se tiene en cuenta el
comportamiento de las diferentes fracciones de esta clases, así también fuerzas
sociales características de otros modos de producción.

Todos esos análisis tienen una importancia positiva primordial, permite que todas
las actividades de la d fuerzas sociales opositoras se orienten hacia un objetivo
común que permite a construcción de una estrategia política.

En el análisis coyuntural en el concepto de correlación de fuerzas es preferible por


sobre el derecho el de correlación de clases. Esto porque no importa en las
situaciones concretas no es la situación de clase definida de acuerdo a la posición
en la relación de producción, sino la posición que sumen diversas fuerzas
sociales.

En síntesis los objetos estratégicos de la organización política hegemónica deben


ser planteados en dos niveles fundamentales, a nivel político el objetivo principal
debe apuntar el logro de la socialización de los medios de producción que plantee
el análisis de la correlación de clases de una situación en particular.
En efecto el humanismo latinoamericano representado por el penalista Zaffaroni,
sostiene que la actual ofensiva neoliberal, con su revolución tecnológica amenaza
a los países de latino americano con un genocidio sin precedentes mucho más
implacables que el producido por las revoluciones mercantil o industrial.

Por otro lado y como plan a largo plazo esta corriente reconoce un objetivo
diferente, este es la abolición del sistema jurídico y sus sustitución distintos
mecanismo de resolución de conflictos.

En definitiva, si el humanismo crítico latinoamericano sostiene del mismo modo qu


el materialismo marxista, como plan táctico la defensa de los derechos humano
como objetivo estratégico la supresión de sistema jurídico.

Otro aspecto no revisado por los análisis de Zaffaroni, en le comportamiento de los


grupos subalternos en relación con las actividades legales o ilegales, aunque
criticas posturas coyunturales de este autor inducirían a pensar que esta de
acuerdo con la postura del materialismo, este es la que la legalidad (el
comportamiento dentro del marco de la ley) es una posición táctica, que debe ser
abandonada sin prejuicios de ningún tipo, si la situación coyuntural así lo exige.

La corriente crítica latinoamericana de Zaffaroni, se evidencia que los objetivos


prácticos inmediatos afecta a todo su sistema teórico, en efecto, puede
descubrirse a lo largo de toda la obra Zaffaroni la contradicción esencial entre
interpretaciones exactas de las correlaciones de fuerzas a nivel internacional
internacional, basadas en lo que llaman realismo crítico e intentos de conciliar
estos análisis con un humanismo ampliamente inconveniente en el análisis
objetivo de la realidad.

Los principio teóricos tanto el humanismo como el antihumanismo en le


conocimiento del derecho, en ese nos propone indicar las consecuencias políticas
que ocasiona partir de sus puestos filosóficos tan diferentes.

Los argumentos del humanismo para enfrentar la abstracción y la formalidad del


derecho moderno, para esto se debe tomar dos corrientes a la que considera
como representativas del resto, la escuela clásica y la escuela critica
latinoamericana por su parte se analiza la propuesta política del materialismo
considerando dos niveles de análisis.

Para la defensa d la primera afirmación se apeló ambos argumentos más


profundos de las filosofías humanistas que domina en los análisis sociológicos del
derecho. Esto condujo a la investigación a los cambios efectuados en las
relaciones de producción que elevaron al capitalismo como clase dominante

La práctica jurídica de la fragmentación social se hace presente mediante la


constitución de los individuos en sujeto jurídicos aislados capaces de comprar y
vender aunque mas no sea su simple fuerza de trabajo. La práctica teórica
fundada en la nueva matriz espacio-temporal obtiene sus categorías de la práctica
jurídica por eso fue calificada no como una práctica científica si no como una
ideología teórica orientadas en última instancia, al mantenimiento de las relaciones
de producción independientes de sus propósitos.

La ruptura epistemológica implico el abandono de las filosofías humanistas


sentando de esta forma bases sólidas para la formación de una ciencia de la
historia y particularmente del derecho.

Este análisis puede concluir que la ciencia del derecho exige la construcción
teórica que su objeto en forma relativamente independiente de las demás
instancias sociales y el segundo que le derecho moderno necesita para cumplir
con la reproducción ampliada de la sociedad capitalista un conjunto de
características particulares.

BIBLIOGRAFIA

1. ATIENZA, Manuel. Introducción al derecho. 1985.

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