Un poco más de Educación

Lic. Raúl A. Poveda Sotillo

Las Naciones marchan hacia el término de su grandeza, con el mismo paso
que camina
La Educación” – Bolívar –
“ESTE BOLÍVAR QUE VIENE DEL AYER, ESTA EN EL HOY Y CUANDO SURJA EL
MAÑANA LO HARÁ COMO SI FUESE UN CIUDADANO DEL PRESENTE” >...
Un visionario como Bolívar, no podía dejar de lado la fuerza de la Educación,
como uno de los medios fundamentales en la superación del atraso dejado
por la desidia, debo apuntar sin temor a equivocarme, que considero a
Bolívar como uno de los Próceres que retoma y resalta la educación por
encima de todas las cosas. De manera que hay que incentivar a los jóvenes
a buscar a Bolívar que con su ejemplo los llevará por el sendero del
progreso patrio y el bienestar personal. Los jóvenes de hoy se encuentran
frente al desafío del desarrollo del país, por lo tanto necesitamos, la legión
de técnicos capaces de colocarnos en el lugar de vanguardia que
esperamos para nuestra amada Patria. Esto que ahora se me ocurre va a los
maestros de este Estado, para que el amor llegue hasta las aulas - aún más
– para que se implementen la Cátedras Bolivarianas, como en su época lo
hacía la Sociedad Bolivariana como ejemplo la de Carabobo, como lo hacía
el Prof. Oscar Emilio Ferriere Marvéz, bolivariano de excepción quien es
eterna fuente de consulta de quien les escribe. Uno de los detalles de mayor
aspiración sería que se proyectara en esencia la pureza del pensamiento
Bolivariano, hacia los medios de comunicación, así como en el campo
cultural, que se esparce a través de las ondas gencianas, donde se ve la
aplicación de poder disfrutar en frecuencia de nuestra música venezolana,
que de esta misma forma los medios se abrieran a dar un espacio semanal
a dar a conocer esa extraordinaria Doctrina Del Pensamiento Político del
Libertador, obra que tuvo en:
Don Ricardo Montilla
El mejor divulgador de sus Ediciones
Hace entonces el Libertador Bolívar algunas consideraciones de orden
psicológico sobre la memoria y el entendimiento. “La memoria demasiado
pronta, dice, siempre es una facultad brillante; redunda en detrimento de la
comprensión”; de manera que un niño que se aprenda las Lecciones de
memoria, se deberá entonces poner en práctica el enseñarle aquellas cosas
que le obliguen a meditar, tales como resolver problemas y ecuaciones;
deberá enseñárseles a aprender de memoria y a recitar composiciones
escogidas de los grandes poetas esto nos lleva a concluir que tanto la
memoria como el cálculo están sujetos a fortalecerse por y con el ejercicio.
Llevándome, esto a recordar a alguien muy nuestro:
Andrés Eloy Blanco, al solo recordar una línea de su poema La Renuncia
que es una interpretación verniana (Por Verne) Cito: Desbaratando
encajes llegaré hasta la punta del hilo, -fin de la Cita.
Y si la colocamos en la mejor parte de los lóbulos cerebrales veremos lo
interesante que resulta su aplicación hasta en la cotidianidad. La memoria
debe ejercitarse todo cuanto sea posible, pero jamás fatigarla hasta
debilitarla, es por ello que aprendemos a pensar y razonar con lógica, visto
que nos enseñan el análisis en todo pasando de lo conocido a lo
desconocido. Saben que uno de esos tantos pensamientos de Bolívar se
permitía y opinaba que la educación es un proceso de toda la vida, donde el
hogar, al igual que la escuela, juega importantes papeles en la formación
integral del individuo. Es así pues, que realizar esta tarea en una forma que
permita servir como guía en esta Venezuela de Hoy, ya que involucra en los
que de una u otra manera impartimos educación, un gran compromiso para
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Lic. Raúl A. Poveda Sotillo
con la juventud. Desde el momento en que el Libertador toma conciencia de
luchar por la libertad, ya no descansará cómo lo juró en el Monte Sacro -
¿Saben por qué?- le están aplicando e inventando frases acomodaticias a
momentos actuales que quien ha pasado por su vista una ojeada al
Pensamiento Político del Libertador con gran claridad se ve que le endosan
unas consideraciones, que cuando analizamos vemos cuán retraídas están.
Será hasta la próxima vez y de verdad que resulto una delicia el repasar los
apuntes del Primer Congreso del Magisterio, de donde bibliográficamente fui
nutrido
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