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Apuntes de

Educación Ético-Cívica
4o ESO

Instituto San Rosendo


Mondoñedo

Curso 2010/2011
2
Índice

1 ¿Para qué sirve esta asignatura? 7

I Identidad y alteridad 9
2 Quién somos y qué somos 11

3 La dignidad humana 19

4 Nuestras diferencias 25

5 Las emociones y la violencia 31

6 Libertad y responsabilidad 39

II Las teorías éticas 47


7 La ética y la cultura 49

8 Las teorías éticas 57

9 Los derechos humanos 65


4 ÍNDICE

10 Las generaciones de derechos 77

11 La defensa de nuestros derechos 85

12 La discriminación 91

III La democracia y la participación 97


13 La democracia 99

14 Participar en política 105

15 El estado español 113

16 Igualdad y justicia 119

17 Ética y política 127

18 Los derechos constitucionales 135

IV La igualdad entre hombres y mujeres 143


19 Los derechos y las mujeres 145

20 La discriminación de las mujeres 151

21 La violencia contra las mujeres 155

V El multiculturalismo y el interculturalismo 159


22 La cultura humana 161

23 Las actitudes hacia la variedad 167

24 Sociedades plurales 175

VI La ciudadanía global y la democracia 179


25 La globalización 181
ÍNDICE 5

26 Los medios de comunicación 187

27 Los nuevos poderes políticos 195

28 El desarrollo necesario 203

29 Ciudadanos de un solo mundo 209


6 ÍNDICE
Lección1

¿Para qué sirve esta asignatura?

¿Qué es la Ética Cívica?


Es la parte de la filosofía1 que estudia el comportamiento humano, que vive en
una sociedad organizada, y su relación con el bien y el mal.

¿Qué podemos aprender en esta asignatura?


Esta asignatura sirve para aprender:

1. Cómo está ordenada nuestra sociedad y por qué.

2. Qué tenemos que hacer nosotros para contribuir al orden social.

3. Qué necesitamos para que la sociedad progrese y qué podemos aportar


nosotros.

¿Por qué conviene que aprendamos todas estas cosas?


Todas estas cosas nos importan porque nosotros somos miembros de la sociedad,
querámoslo o no y tengamos la edad que tengamos. Es evidente que si la orga-
nización de la sociedad nos afecta, es mejor para nosotros tener conocimientos
suficientes para participar en su control. De esa manera podremos contribuir a
1
Es decir de la investigación de las causas últimas de las cosas, podemos decir, de lo más
profundo e importante de la realidad.
8 ¿Para qué sirve esta asignatura?

que las cosas se hagan según nuestro criterio, para conseguir no salir perjudica-
dos. Si decimos que la política no nos importa, simplemente estamos dejando
gran parte de nuestra vida en manos de otros. De hecho esta asignatura tiene
mucha utilidad en nuestra vida diaria porque hagamos lo que hagamos siempre
seremos ciudadanos, y viviremos mucho peor si no sabemos cuáles son nuestros
derechos.

Hoja de ruta
En este libro aprenderemos las mejores opiniones filosóficas sobre los siguientes
temas:

1. Qué somos.

2. Por qué debemos comportarnos bien.

3. Por qué podemos comportarnos bien.

4. Qué obstáculos tenemos para comportarnos bien.

5. Qué es comportarse bien como individuos.

6. Qué es comportarse bien como grupos humanos.

7. Cómo organizar bien la sociedad.

8. Cómo relacionarnos bien entre hombre y mujeres.

9. Cómo relacionarnos con los inmigrantes.

10. Cómo organizar el mundo entero.


Part I

Identidad y alteridad
Lección2

Quién somos y qué somos

Reconocimiento de la persona como sujeto moral y asunción de los com-


ponentes individuales y colectivos en la construcción de la indentidad y
en el comportamiento moral.

¿De qué se trata?


La identidad es lo que somos, es decir, el conjunto de nuestras características
como individuos y como grupos sociales. La idea de indentidad está relacionada
con muchas ideologías políticas y es causa de muchos conflictos violentos en
el mundo. Mucha gente hace cosas malas porque tiene ideas erróneas sobre su
identidad.

¿Para qué sirve esta lección?


1. Para aprender qué es la identidad humana.

2. Para aprender una concepción de la identidad humana compatible con la


ética, es decir, una concepción buena de la identidad humana.

3. Para aprender que lo más importante de la identidad humana es nuestra


capacidad de ser buenos.
12 Quién somos y qué somos

¿Por qué es importante aprender sobre la identidad


humana?
Porque necesitamos una idea de la identidad que sirva para defender la paz y
el diálogo entre las personas diferentes y no como excusa para la violencia y el
odio.

¿Qué problemas hay que estén relacionados con la


identidad?
En nuestro pasado inmediato1 y ahora mismo en otras partes del mundo, hay
gente que se mata o se maltrata por su identidad, porque cree defender así la suya
propia o rechazar la identidad extraña, porque quiere imponer una u otra identi-
dad a los demás o preservar la suya. Los nacionalistas radicales,2 los racistas,3 los
fundamentalistas religiosos4 hieren y matan por sus identidades. Además, estos
problemas tienen carácter colectivo, pueden afectar incluso a países enteros,5 , lo
cual los hace mucho más importantes que los crímenes individuales.
España, como Europa, es cada vez más un lugar en el que viven gentes que
vienen de muchos sitios diferentes. Cada vez encontramos más caras nuevas,
más colores de piel entre nosotros. Sería triste que no pudiéramos llevarnos
bien todos y que las diferencias entre las personas fuesen excusas para la violen-
cia, el odio o la estupidez. Asimismo, parece que para mucha gente tener una
identidad, decir que se sienten esto o aquello, es importante.

¿Qué necesitamos?
Una concepción de la identidad compatible con la ética, con la racionalidad, la
libertad y la democracia. No se trata del supermercado cultural, de la atomi-
zación del individuo que puede elegir su identidad. Lo mismo que para elegir
1
En los años 1936 a 1939 en España hubo una guerra civil, en la que murieron más de medio
millón de personas y que tuvo un considerable componente nacionalista.
2
En España tenemos un ejemplo de nacionalismo radical en la ETA, que mata gente para
conseguir la independencia del País Vasco.
3
El racismo consiste en creer que las personas que tienen un aspecto físico diferente son
malos o tontos y que por eso está bien maltratarlos.
4
El fundamentalismo es una tendencia de algunas religiones que afirma que toda la sociedad
debe obedecer sus ideas.
5
En los años 90 en Bosnia, Croacia y Kosovo hubo una serie de guerras civiles originadas por
los nacionalismos radicales que pretendían defender sus identidades matando o expulsando a los
que eran diferentes, en lo que llamaban limpieza étnica. Murieron casi un millón de personas.
13

cultura la elección va a depender justamente de la forma de ser, se trata de tener


libertad para ser lo que somos, lo que sentimos que somos.

¿Qué dicen los filósofos?


Para Aristóteles en el ser humano podían distinguirse dos grupos de elemen-
tos: los que él llamaba substanciales, es decir, los más importantes, y los que
él calificaba como accidentales, es decir, los menos importantes. Los elementos
substanciales no cambiaban nunca, pero los accidentales sí que cambiaban a lo
largo de nuestra vida, con toda normalidad.
Lo substancial del hombre es la racionalidad. El hombre es un animal
racional, y esto significa que puede controlar su comportamiento, eliminar lo
malo de él. Para Aristóteles, en nosotros existen muchas emociones que com-
partimos con los animales. Parte de esas emociones, como la ira, la agresividad,
el miedo, la desconfianza, la envidia, etc., son malas y debemos rechazarlas con
ayuda de nuestra razón.

¿Qué es la identidad?
Nuestra identidad es el conjunto de nuestros rasgos. De esos rasgos, el esen-
cial es nuestra capacidad moral. Los otros rasgos tienen orígenes diversos. De
los rasgos, los hay buenos, malos e indiferentes. Nuestra identidad, no es el
conjunto de características que nos distinguen de las demás personas, porque
es obvio que características que compartimos con los demás, también forman
parte de nuestra identidad. La identidad es por lo tanto el conjunto de nuestras
características, comunes con los demás o no.
Los rasgos que podemos considerar científicamente podemos diferenciar-
los por su origen genético, social, histórico, geográfico, psicológico o biográ-
fico. Para aprender sobre nuestra identidad debemos distinguir lo que nosotros
creemos ser y lo que los demás piensan que somos. Igualmente, hay diferencias
en lo que las personas piensan sobre ellas mismas y la opinión que nosotros
tenemos. Para llegar a un verdadero conocimiento debemos contrastar lo que
pensamos nosotros y lo que piensan los demás.

¿Qué son los componentes individuales de la identi-


dad?
Son los rasgos que nos diferencian de los demás. Distinguimos los rasgos genéti-
cos, psicológicos y biográficos. Son rasgos genéticos los que dependen de nuestra
14 Quién somos y qué somos

pertenencia a la especie humana. A veces se trata de rasgos variables, condi-


cionados por los mecanismos de la herencia, de la reduplicación del ADN, de
la adaptación a los diferentes climas de la Tierra, etc. El ser humano es más
que moléculas, células, tejidos y órganos. No somos unos simples animales.
Los rasgos psicológicos son los que derivan de nuestro temperamento y carácter
como personas. No sabemos completamente cuál es la relación entre nuestra
psicología, la genética y las circunstancias de nuestro ambiente, nuestra edu-
cación, etc., aunque existen varias teorías psicológicas que lo intentan explicar.
Durante nuestra vida cambiamos, más o menos, de forma de ser por obra de las
circunstancias. Llamamos rasgos biográficos a lo que nos pasó a lo largo de la
vida. Los sucesos de nuestra vida hacen de ésta algo irrepetible y que sin duda
llega a ser una influencia.

¿Qué son los componente colectivos de nuestra iden-


tidad?
Son rasgos colectivos los que compartimos con muchas personas. Distinguire-
mos los rasgos genéticos, sociales, históricos y geográficos. Los rasgos sociales
varían porque las sociedades no son grupos homogéneos y además cambian con
el tiempo. Si somos animales sociales también es cierto que no somos termitas
ni hormigas, robots programados para cumplir una función social y nada más.
Tenemos nuestras vidas, vidas individuales que se desarrollan en un tira y afloja
con la sociedad. Son rasgos históricos los que compartimos por vivir en nues-
tra época. Aunque el cambio es normalmente accesorio, podemos encontrar
diferencias entre unas épocas históricas y otras. Son rasgos geográficos los que
tenemos por vivir donde vivimos. Hay gente con ojos azules, marrones, grises,
la piel más pálida o más bronceada, etc. Por ejemplo, ser callado o hablador,
ser impulsivo o tranquilo, etc. Por ejemplo, nuestra lengua materna, la clase de
ropa que llevamos, son cosas que aprendemos en nuestra sociedad.

¿Cómo construimos nuestra identidad?


Construímos nuestra identidad por la educación, bien formal o informal. Lla-
mamos educación formal a la que recibimos en la escuela, en el instituto o la
universidad. Educación informal es la que recibimos en la familia, o por estar
con los amigos, durante el ocio, el trabajo, etc. En este proceso6 vamos apren-
diendo elementos culturales. Pero llega un momento en el que podemos elegir,
como individuos, que podemos escoger porque somos libres. El ser humano
6
También llamado inculturación por los sociólogos.
15

tiene control final sobre su identidad, precisamente porque tiene libertad moral.
Naturalmente no todos los elementos de nuestra identidad son rechazables, ni
todas las personas nos damos cuenta de nuestra libertad frente a nuestra identi-
dad, pero la capacidad de cambiar por propia voluntad es un elemento central
de la condición de ser humano. Comportamiento moral, hablar de la influencia
de la personalidad y de la cultura en la moral.

¿Hay algo más?


Un ser humano no es su cuerpo ni su país ni su historia, porque todo eso puede
cambiarse o a las veces hasta destruirse, y la persona sigue ahí. Los rasgos
morales son los que nos hacen verdaderamente humanos. Son, la dignidad,
la libertad, la responsabilidad, la racionalidad y la sensibilidad. Ahora bien,
entre todos estos rasgos hay algunos que pueden perderse. Somos libres, pero
podemos acabar presos o en una dictadura que nos impida hasta pensar. Somos
racionales, pero a veces obramos estúpidamente. Y desde luego demasiadas ve-
ces nos comportamos de modo insensible o irresponsable. Entonces, ¿es que
dejamos de ser humanos? Claro que no. Somos humanos y no animales o cosas
porque tenemos dignidad, y somos mejores personas cuando nos comportamos
como seres responsables, racionales y sensibles. Tenemos que interpretar la dig-
nidad como respecto, como escucha de los otros y como compromiso de no
traspasar sus límites de libertad.

Algunas definiciones
La dignidad es la condición básica que debemos respetar para relacionarnos con
otras personas. La libertad es la capacidad de escoger nuestro comportamiento.
La responsabilidad es la obligación que tenemos de dar cuenta a los demás de
nuestro comportamiento cuando les afecta. La racionalidad es la capacidad de
comportarnos de acuerdo con la lógica y lo que percibimos por los sentido. La
sensibilidad es la capacidad de percibir los sentimientos propios y ajenos.

¿Qué debemos hacer?


Pensar sobre nuestra identidad. No tener miedo de ella, sea cual sea. Respetar la
identidad que muestren los demás, lo cual no significa respetar las cosas malas.
Exigir respeto para nuestra identidad. Debemos rechazar los rasgos malos,
promover los buenos y hacer nuestro gusto en los indiferentes. Igual que a
16 Quién somos y qué somos

veces rechazamos nuestra identidad total o parcialmente, podemos rechazar la


identidad que los demás nos atribuyen.
El ser humano puede elegir un ideal y cambiar su identidad para que se
acerque a él. Podemos juzgar críticamente uno o varios de los componentes de
nuestra identidad. Incluso los elementos que alguien podría considerar centrales
pueden ser rechazados.
Y también podemos rechazar la identidad de los demás, por lo menos en
algunos de sus rasgos. Y ahí comienzan los problemas morales, cuando con-
fundimos rechazar la identidad con rechazar a la persona, porque la identidad
no es la persona, y por supuesto no constituye su dignidad ni es la razón por la
que tenemos que respetarla.
Nosotros exigimos respeto a los demás seamos como seamos, incluso exigi-
mos respeto por nuestros cambios. Igualmente debemos respetar a los demás,
independientemente de sus rasgos de identidad, incluso aunque sus rasgos de
identidad no nos agraden. No debemos pensar que tenemos ninguna obligación
hacia nuestros rasgos de identidad. Sean los que sean, podemos cambiarlos si no
nos gustan.
A veces es un deber moral cambiar ciertos rasgos de nuestra identidad. Nadie
puede exigirnos que los mantengamos, igual que nosotros no tenemos derecho
a exigir tal cosa a nadie. Con frecuencia queremos cambiar algún rasgo de iden-
tidad propio por razones morales, es decir, porque lo consideramos malo. Es
ciertamente una buena razón, pero también podemos cambiar algunos rasgos
de identidad por interés o necesidad, por placer o curiosidad. No hay nada
malo en hacerlo.
Nadie carece de identidad. Tampoco cuando cambia algún rasgo que a al-
guien le pueda parecer esencial. Simplemente adquirimos otra identidad, una
nueva, que pasa a ser la nuestra. Y la vieja queda olvidada o desaparece. En
el pasado, muchos de los rasgos que forman la identidad individual, estaban fi-
jados por la cultura y dependían del lugar y la situación social del individuo.
Esto limitaba notablemente las elecciones de las personas lo que resultaba en
cierta manera más tranquilizador psicológicamente. Cuando no hay que elegir,
la gente tiene poca inquietud. Quizá exista un factor de desasosiego social en el
hecho de la posibilidad de elegir, pero el hecho está ahí.

Conviene recordar
• Lo que somos es fruto de la naturaleza, de la historia, de la gente con la
que vivimos y de nuestras experiencias.

• Muchas de nuestras características son buenas o indiferentes. Pero otras


17

son malas y debemos rechazarlas.

• Tenemos derecho a exigir respeto para nuestras características aceptables y


tenemos la obligación de respetar las características ajenas cuando no son
malas.

• Nosotros somos los únicos dueños de nuestras características indiferentes


y tenemos derecho a cambiarlas si queremos.

• Todos tenemos por igual la capacidad de inquirir y descubrir la verdad, de


percibir y plasmar la belleza y de amar y hacer el bien. Comparadas con
eso, las otras características humanas son irrelevantes.

Ejercicios de la lección
1. ¿Por qué es importante la pregunta quién somos o qué somos?

2. Busca información sobre algún conflicto racista y descríbelo.

3. Busca información sobre algún conflicto causado por el fundamentalismo


religioso y descríbelo.

4. Describe racismo.

5. Describe nacionalismo.

6. Describe fundamentalismo.

7. Escribe cinco de tus rasgos genéticos.

8. Escribe cinco de tus rasgos psicológicos.

9. Escribe cinco de tus rasgos biográficos.

10. Escribe cinco de tus rasgos sociales.

11. Escribe cinco de tus rasgos históricos.

12. Escribe cinco de tus rasgos geográficos.

13. Averigua cuál es el porcentaje de personas que marcharon de España en


el siglo XX como emigrantes y también el porcentaje de inmigrantes que
vienen en la actualidad de otros países.
18 Quién somos y qué somos

Textos a comentar
1. John Stuart Mill, filósofo inglés del siglo XIX, expone en su obra Sobre
la libertad, la necesidad de que los individuos controlen los elementos de su
identidad.
La libertad del individuo debe ser así limitada; éste no debe conver-
tirse en una molestia para otra gente. Pero si se abstiene de molestar
a otros en lo que les concierne, y actúa meramente de acuerdo con
su inclinación y juicio en cosas que le conciernen, las mismas ra-
zones que muestran que la opinión debería ser libre, proban tam-
bién que debería permitírsele, sin molestarlo, llevar sus opiniones a
la práctica a su propia costa. Que la humanidad no es infalible; que
sus verdades, por la mayor parte, son sólo medias verdades; que la
unidad de opinión, a menos que resulte de la más completa y más
libre comparación de las opiniones opuestas, no es deseable, y la di-
versidad no un mal, sino un bien, hasta que la humanidad sea mucho
más capaz que en el presente de reconocer todas las caras de la ver-
dad, son principios aplicables a los modos de acción de los hombres
no menos que a sus opiniones. Así como es útil que mientras la hu-
manidad sea imperfecta haya diferentes opiniones, igualmente lo es
que existan diferentes experimentos de vida; que sea dado libre juego
a las variantes de carácter, si no existe daño a otros; y que el valor
de los diferentes modos de vida sea probado prácticamente, cuando
alguien cree apropiado intentarlos. Donde no el propio carácter de
la persona, sino las tradiciones o costumbres de otra gente es la regla
de conducta, falta uno de los ingredientes principales de la felicidad
humana, y casi el principal ingrediente del progreso social e indivi-
dual.
2. Hannah Arendt, filósofa alemana que vivió en el siglo XX, expone en su libro
La condición humana, el misterio de la identidad humana.
Por otro lado, las condiciones de la existencia humana, la vida misma,
la natalidad, mortalidad, la mundanidad, la pluralidad y la tierra
nunca pueden explicar que somos o responder la cuestión de quién
somos por la simple razón de que nunca nos condicionan absoluta-
mente. Ésta fue siempre la opinión de la filosofía, a diferencia de
las ciencias, la antropología, la psicología, la biología, etc., que tam-
bién se ocupan del hombre. Pero hoy en día casi podemos decir que
demostramos incluso científicamente que, aunque vivimos ahora, y
probablemente siempre viviremos, bajo las condiciones de la Tierra,
no somos meramente criaturas atadas a la Tierra.
Lección3

La dignidad humana

Reconocimiento, valoración y respeto por la dignidad de la persona.

¿Para qué sirve esta lección


Para aprender qué es la dignidad humana y cómo podemos respetarla.

¿Por qué es importante todo eso?


La dignidad humana es la más importante razón que tenemos para respetar a
los demás y para exigir respeto para nosotros mismos. Si no sabemos qué es la
dignidad humana, ¿cómo vamos a respetar a los demás y cómo vamos a defen-
dernos cuando nos faltan al respeto?

¿Qué problemas prácticos hay?


Que la dignidad humana no se respeta en muchos países y situaciones. Que
se den en el mundo las condiciones de vida para todos los seres humanos que
estimamos como consecuencia práctica de que todos aceptemos que debemos
respetar la dignidad humana.
20 La dignidad humana

¿Qué necesitamos?
Una definición de la dignidad humana que sea aceptable por todo el mundo,
independientemente de sus creencias religiosas o de su posición filosófica. Unas
ideas adecuadas sobre la dignidad humana y la necesidad de respetarla que fun-
den nuestro comportamiento ético personal y la demanda de su respeto univer-
sal, por gobiernos, empresas, personas de otros países, etc. Extender y practicar
el respeto a la dignidad humana.

¿Qué podemos pensar?


El problema de los valores y de la dignidad es que no son algo mensurable, y
nuestra cultura, bueno, el ser humano, tiene problemas para reconocer y aceptar
los elementos no mensurables. ¿Cómo llegar a un acuerdo sobre los valores
fundamentales? ¿Cómo no luchar por ellos o no rechazar el de los demás? La
solución puede ser interpretar la dignidad como respeto, como escucha del otro
y como compromiso de no traspasar sus límites de libertad.
La dignidad humana es equivalente a la condición humana. Todos los seres
humanos somos dignos, independientemente de cualquier otra circunstancia.
Ante la dignidad humana, nuestro comportamiento debe ser de respeto. Ex-
plicar qué es el respeto. Todos sentimos que tenemos valor, y que las personas
que amamos tienen valor. Y todos podemos entender que ese valor no depende
de ninguna circunstancia accidental. Se trata de una propiedad esencial, es decir,
algo que reconoceríamos como existente aunque se modificaran otras cosas.
Ahora bien, los demás seres humanos son también esencialmente iguales
a nosotros. No hay ninguna diferencia esencial, aunque puede haber muchas
diferencias accidentales. Por eso reconocemos en los demás la misma dignidad
que hallamos en nosotros y en las personas que amamos.
¿Y qué ocurre con los criminales, con la gente claramente mala, tienen dig-
nidad también? Sin duda. Una persona puede hacer algo muy malo, pero no por
eso deja de ser persona. Al respetarla, estamos respetándonos a nosotros mis-
mos, porque cualquiera persona es una imagen de nosotros. Además, nadie es
completamente malo y todos tenemos la posibilidad de arrepentirnos y cambiar
de forma de ser. Por otro lado, nosotros nunca conocemos completamente las
circunstancias del comportamiento de los demás. Pueden existir circunstancias
atenuantes incluso en los actos más atroces y aunque no sea así, nunca debemos
aprovechar la indignación que podemos experimentar justamente para compor-
tarnos nosotros mal, para ejercer violencia o maltrato a nadie.
La dignidad tiene una dimensión misteriosa. El hombre, que no crea el
mundo y no puede hacerse a sí mismo, puede reconocer, en sí mismo y en
21

las personas que ama, que el ser humano es mucho más que unos kilogramos de
productos químicos. Tampoco la reciprocidad es garantía bastante para justificar
el comportamiento moral. ¿Qué hacer cuando estamos seguros de que la no
reciprocidad no iba a tener castigo? La reciprocidad puede ser un deber, o un
criterio, pero no una explicación.

Algunas definiciones
Las definiciones serían un elemento de partida, los axiomas de partida del ra-
zonamiento. Dignidad humana. Respeto para ella. La dignidad es una carac-
terística que acompaña siempre al ser humano y que debemos siempre respetar
en los demás y en nosotros mismos. Dignidad significa valor que no depende
de ninguna otra característica, que no puede perderse ni cederse y con el que
no se puede negociar. Las personas tienen características plurales de tipo físico,
psicológico, social, cultural, etc. Independientemente que las consideremos re-
levantes, estas características no afectan de ninguna manera a la dignidad de la
persona. Ni la aumentan ni la disminuyen. Después, hay circunstancias que to-
dos consideramos perjudiciales, como enfermedades, discapacidades físicas, etc.
Pero aun en estos casos las personas conservan la misma dignidad que los no
afectados.
Pero, ¿qué es un valor? Un valor es lo que hace que la vida tenga sentido.
¿Qué razón podríamos tener para hacer lo que hacemos, para tomar las deci-
siones que tomamos, para elegir lo que elegimos y rechazar lo que rechazamos?
Cada una de esas razones se llama valor. Naturalmente las personas se pueden
confundir respecto a los valores y creer erróneamente que una cosa es un valor.
Cuando ocurre así hablamos de un antivalor. ¿Qué es respetar? Respetar es
reconocer la dignidad de los demás y la propia.

¿Qué debemos hacer?


Todo nuestro comportamiento debemos realizarlo teniendo en cuenta la dig-
nidad de los demás y la nuestra. Respetar significa no insultar, no maltratar,
no aprovecharnos de los demás, no utilizarlos, no considerar nunca que las per-
sonas son menos importantes que las cosas, no despreciar a la gente porque no
tenga determinada característica que consideramos buena, etc. Nunca debemos
aprovechar la indignación que podemos experimentar justamente para compor-
tarnos mal nosotros, para ejercer violencia o maltrato a nadie. Tener claro que

1. Existe la dignidad humana.


22 La dignidad humana

2. Hay que respetarla.

3. Hay que saber cómo hacerlo.

4. Hay que saber cómo provocar su respeto general.

Conviene recordar
• Dignidad significa valor que no depende de ninguna característica, que no
se puede perder ni cederse y con el que no se puede negociar.

• Un valor es algo que hace que nuestra vida tenga sentido.

• Nuestros valores son las razones de nuestras acciones, decisiones y elec-


ciones.

• Los demás seres humanos son esencialmente iguales a nosotros. Por eso
reconocimos en los demás la misma dignidad que hayamos en nosotros y
en las personas que amamos.

• Las características que forman la identidad de la persona no afectan de


ningún modo a su dignidad.

• Respetar es reconocer en la práctica la dignidad de los seres humanos.

• Todo nuestro comportamiento debemos realizarlo teniendo en cuenta la


dignidad de los demás y la nuestra.

Ejercicios de la lección
1. ¿Por qué decimos que la dignidad acompaña siempre al ser humano?

2. ¿Cómo respetamos la dignidad de los demás?

3. ¿Cómo respetamos nuestra propia dignidad?

4. ¿De qué depende la dignidad humana?

5. ¿Qué es la dignidad?

6. ¿Por qué decimos que la dignidad no se puede perder ni cederse ni se puede


negociar con ella?

7. ¿Para qué pueden ser relevantes las características individuales?


23

8. ¿Tienen algo que ver las características individuales con la dignidad hu-
mana? ¿Por qué?

9. ¿Afectan las circunstancias personales perjudiciales a la dignidad humana?


¿Por qué?

10. ¿Qué quiere decir que la dignidad es una propiedad esencial del ser hu-
mano?

11. ¿En qué sentido decimos que las demás personas son iguales a nosotros
esencialmente?

12. ¿Qué es un valor?

13. Pon cinco ejemplos de valores para tu vida.

14. Pon ejemplos de cinco antivalores, cosas que querrías evitar en tu vida.

15. ¿Cómo puede la sociedad respetar la dignidad humana de los delincuentes?

16. ¿Cuál es la fundamentación religiosa de la dignidad humana?

17. Explica los argumentos estoicos sobre la dignidad humana.

Textos a comentar
1. En su encíclica El evangelio de la vida, el papa Juan Pablo II, expuso el con-
cepto cristiano de la dignidad del ser humano:
El origen divino de este espíritu de vida explica la perenne insatis-
facción que acompaña al hombre durante su existencia. Creado por
Dios, llevando en sí mismo una huella indeleble de Dios, el hombre
tiende naturalmente a El. Al experimentar la aspiración profunda
de su corazón, todo hombre hace suya la verdad expresada por san
Agustín: « Nos hiciste, Señor, para ti y nuestro corazón está in-
quieto hasta que descanse en ti ».25 Qué elocuente es la insatisfac-
ción de la que es víctima la vida del hombre en el Edén, cuando su
única referencia es el mundo vegetal y animal (cf. Gn 2, 20). Sólo
la aparición de la mujer, es decir, de un ser que es hueso de sus hue-
sos y carne de su carne (cf. Gn 2, 23), y en quien vive igualmente
el espíritu de Dios creador, puede satisfacer la exigencia de diálogo
interpersonal que es vital para la existencia humana. En el otro,
hombre o mujer, se refleja Dios mismo, meta definitiva y satisfacto-
ria de toda persona. « ¿Qué es el hombre para que de él te acuerdes,
24 La dignidad humana

el hijo de Adán para que de él te cuides? », se pregunta el Salmista


(Sal 8, 5). Ante la inmensidad del universo es muy poca cosa, pero
precisamente este contraste descubre su grandeza: « Apenas inferior
a los ángeles le hiciste (también se podría traducir: « apenas infe-
rior a Dios »), coronándole de gloria y de esplendor » (Sal 8, 6). La
gloria de Dios resplandece en el rostro del hombre. En él encuen-
tra el Creador su descanso, como comenta asombrado y conmovido
san Ambrosio: « Finalizó el sexto día y se concluyó la creación del
mundo con la formación de aquella obra maestra que es el hombre,
el cual ejerce su dominio sobre todos los seres vivientes y es como
el culmen del universo y la belleza suprema de todo ser creado. Ver-
daderamente deberíamos mantener un reverente silencio, porque el
Señor descansó de toda obra en el mundo. Descansó al final en lo
íntimo del hombre, descansó en su mente y en su pensamiento; en
efecto, había creado al hombre dotado de razón, capaz de imitarle,
émulo de sus virtudes, anhelante de las gracias celestes. En estas
dotes suyas descansa el Dios que dijo: «?En quién encontraré re-
poso, si no es en el humilde y contrito, que tiembla a mi palabra»
(cf. Is 66, 1-2). Doy gracias al Señor nuestro Dios por haber creado
una obra tan maravillosa donde encontrar su descanso »
Lección4

Nuestras diferencias

Asunción de la diversidad y rechazo de prejuicios basados en estereotipos


que supongan cualquier forma de discriminación.

¿Para qué sirve esta lección


Para aprender qué importancia tiene la diversidad en nuestra vida y para tener
argumentos para rechazar los tópicos. Para aprender por qué es mala la discri-
minación.

¿Por qué es importante todo eso?


Para empezar nosotros vivimos en una sociedad donde hay mucha gente diversa,
y cada vez va a haber más, porque la Unión Europea y la globalización apoyan
esa tendencia. Por otro lado, nosotros tenemos que defender nuestra libertad
para ser diferentes de los demás, si eso es lo que queremos.

¿De qué se trata?


Las diferencias entre las personas son frecuentemente motivo de conflicto vio-
lento, tanto entre los individuos como entre los grupos o los países. Tenemos
que aprender qué son esas diferencias y por qué no deben ser usadas como excusa
para la violencia.
26 Nuestras diferencias

¿Qué problemas prácticos hay?


Conseguir un método de diálogo intercultural, conseguir que los países puedan
entender en vez de guerrear. Rechazar la violencia de un modo práctico y eficaz.
Que alguna gente toma las diferencias para excusa de la discriminación o incluso
la violencia. En este caso el problema coincide con la primera lección, porque
la propia identidad se construye por contraposición con las diferencias de los
demás.

¿Qué necesitamos?
(Técnicas de control psicológico y una teoría apropiada del valor de la raciona-
lidad. Esto es de la lección siguiente, la de las emociones y la violencia.) Que se
respeten las diferencias de todos que no sean malas. Exigir respeto para nosotros.
Respetar a los demás. Tener una adecuada concepción de la ética común. Poner
en adecuada relación las diferencias culturales y psicológicas.

¿Qué podemos pensar?


Quizá lo peor de la discriminación es que restringe nuestro campo de experien-
cia. Las ideas que nos cierran la experiencia, los prejuicios, están conectados con
el miedo, con el odio y son con frecuencia mentiras inventadas en algún mo-
mento, normalmente por razones políticas. Los estereotipos faltan al derecho
que tiene cada persona a ser juzgada por sus actos y no por las mentiras que se
cuentan sobre el grupo al que pertenece.
Lo peor del racismo es que imagina que las personas somos como animales,
dependientes sólo de la genética y de los instintos. Los animales son un mal
modelo para las personas, porque son irracionales y no controlan su vida; están
sometidos al hambre, a las necesidades fisiológicas y a las enfermedades. Es
cierto que viven en el campo, en la naturaleza, pero eso significa, bajo la lluvia,
el sol, sobre el barro, el polvo, con los parásitos. Los animales viven sólo con
unas pocas emociones simples, como el miedo, para huir de los depredadores y
la agresividad para buscar alimento. No conocen normas y por eso sus formas
de relación son las amenazas o la violencia. Incluso cuando colaboran lo hacen
impulsados por instintos, como robots, como lo vemos en las hormigas. Los
racistas piensan que las personas somos así, y por eso ellos son partidarios de la
violencia y la ejercen.
El racismo fue una consecuencia del pensamiento materialista y biologicista
del siglo XIX. Conceder una excesiva importancia a los antecedentes biológi-
27

cos del ser humano es malo. Nunca debemos utilizar nuestros pretendidos
conocimientos biológicos para justificar el mal comportamiento ético.
De entre los riesgos de nuestra identidad hay motivos buenos e indiferentes,
que son diversos. Hay diversas expresiones de cosas buenas. Hay diversas expre-
siones de cosas indiferentes. Debemos respetar unas y otras expresiones. Debe-
mos rechazar todas las cosas malas, vengan de donde vengan: también las nues-
tras. Los seres humanos somos diversos por naturaleza. Cada uno de nosotros
es un individuo que tiene particularidades y por lo tanto diferencias con los
demás. Realmente, nosotros también cambiamos a lo largo del tiempo por lo
que se puede decir que también llegamos a ser diferentes de nosotros mismos.
También existen características que sólo afectan a un grupo de personas más
o menos extenso pero no a todos los seres humanos. Normalmente no se puede
encontrar un grupo que tenga dos características comunes excluyentes (poner
lo que sea en vez de esta palabreja). No tiene sentido valorar una característica
humana por el simple hecho de ser algo más o menos extendido. Tenemos que
juzgar las cosas por su valor en sí mismas. Hay características extrañas para
nosotros y que son buenas, malas o indiferentes. Muchas veces pensamos que
nosotros tenemos algo especial, o que otro grupo humano tiene algo especial, y
no es así. Realmente en casi todos los lugares del mundo hay gente con costum-
bres o ideas muy parecidas a las que existen aquí.
Los rasgos culturales, igual que los físicos, están moy extendidos a lo largo
del planeta, porque para el ser humano, comunicarse con los demás, compartir,
mezclarse, es algo completamente habitual y siempre fue una práctica corriente.
Resulta inadecuado pensar que tenemos unas cosas nuestras y que debemos rec-
hazar las cosas ajenas. Todo lo que es bueno debería ser nuestro, independi-
entemente de su lugar de origen, y todo lo que es malo deberíamos rechazarlo
aunque surgiera entre nosotros.

Algunas definiciones
Definición de diferencias. Cuando un rasgo está muy extendido en un grupo
humano, decimos que es normal. Eso significa que es estadísticamente muy
probable encontrarlo. Pero nada más. Ser normal no significa ser bueno, si ser
malo. Sólo ser muy abundante. Hay cosas buenas que son normales y cosas
malas que también lo son. Hay cosas buenas que son muy raras y por lo tanto
anormales. La peor expresión de la tendencia a aceptar estereotipos es la ideo-
logía conocida como racismo. El racismo afirma que existen variedades de seres
humanos determinadas por la genética. Estas variedades tendrían características
intelectuales y morales diferentes lo que debería tenerse en cuenta en la ética
y la política. Hay que definir el concepto de tópico o estereotipo. Tampoco
28 Nuestras diferencias

deberíamos estar cazando rasgos tópicos con los que confirmar el supuesto es-
tereotipo.

¿Qué debemos hacer?


Debemos rechazar los tópicos o estereotipos sobre las personas que no conoce-
mos, porque frecuentemente son generalizaciones exageradas o falsas. Cuando
conocemos una nueva persona, debemos apreciarla por sus rasgos individuales y
no proyectar sobre ella un conjunto de ideas de procedencia y exactitud dudosa.
Los estereotipos pueden conducir a la discriminación porque son por lo general
ideas malas sobre supuestas diferencias de otras personas o grupos.

Conviene recordar
• Todos tenemos diferencias con los demás.

• Existen características que afectan a un grupo de persoas, pero no a todos


los seres humanos.

• Todas las características humanas, incluso las particulares, cambian con el


tiempo igual que podemos encontrar características diferentes si viajamos
por distintos lugares del mundo.

• Las características humanas son buenas, malas o indiferentes y eso no de-


pende de que sean propias o ajenas.

• Las características humanas pueden ser normales, es decir, muy extendi-


das, o anormales, que significa muy poco extendidas.

• Esas calificaciones varían con el lugar o la época y no significan ni bueno


ni malo. Es falso pensar que tenemos cosas nuestras exclusivas y que debe-
mos rechazar las cosas ajenas.

• Todo lo que es bueno debería ser nuestro, independientemente de su ori-


gen y deberíamos rechazar todo lo que es malo, aunque surgiera entre
nosotros.

• Un prejuicio es una opinión moral que no proviene de la experiencia.

• Los prejuicios son malos porque no dejan ver la realidad como es.

• Los tópicos son prejuicios comunes que debemos rechazar.


29

• Toda persona tiene derecho a ser juzgada por sus actos y no por su perte-
nencia a un grupo humano.

• La aceptación de prejuicios causa la discriminación de las personas que


son diferentes.

Ejercicios de la lección
1. ¿Qué es un prejuicio?

2. ¿Qué es un estereotipo?

3. ¿Qué es la discriminación?

4. ¿En qué aspectos somos diversos los seres humanos?

5. ¿Cuál es la razón biológica por la que somos diferentes?

6. ¿Por qué cambiamos a lo largo de nuestra vida?

7. Haz una lista de cosas malas que tenga mucha gente.

8. Haz una lista de cosas buenas que tenga mucha gente.

9. Haz una lista de cosas malas que tenga poca gente.

10. Haz una lista de cinco cosas que consideres propias, distintivas de tu tierra.
Busca información sobre su origen y anótala.

11. Haz una lista de cinco estereotipos que conozcas.

12. ¿Qué es una ideología?

13. Explica cómo se crean y se transmiten nuestros rasgos físicos genética-


mente (no hacen falta todos los detalles).

Textos a comentar
1. Allport pág. 189. 2. En este fragmento, Tocqueville hace una descripción del
encuentro de las tres razas de personas que habitan América del Norte.
30 Nuestras diferencias

Recuerdo que, recorriendo los bosques que cubren aún el estado de


Alabama, llegué un día cerca de la cabaña de un pionero. Yo no
quise penetrar en la vivienda del americano, sino que fui a descansar
algunos instantes al lado de una fuente que se encontraba no lejos
de allí en el bosque. Mientras yo estaba en este lugar, vino una india
(nos encontrábamos cerca del territorio ocupado por la nación de
los Creek); ella sostenía por la mano a una niña de cinco a seis años,
que pertenecía a la raza blanca, y que yo supuse que era hija del pio-
nero. Una negra las seguía. Reinaba en el vestido de la india una
suerte de lujo bárbaro: anillos de metal estaban colgados de su nariz
y de sus orejas; sus cabellos, mezclados con granos de vidrio, caían
libremente sobre sus hombros, y vi que no estaba casada, porque
llevaba aún el collar de conchas que las chicas tienen costumbre de
dejar sobre el lecho nupcial; la negra estaba cubierta de vestiduras
europeas casi en harapos. Ellas vinieron a sentarse las tres al lado
de la fuente, y la chica salvaje, cogiendo a la niña en el regazo, le
prodigaba mimos que podrían creerse dictadas por el corazón de
una madre; por su parte, la negra procuraba por mil inocentes ar-
tificios atraer la atención de la pequeña criolla. Ésta mostraba en
sus movimientos un sentimiento de superioridad que contrastaba
extrañamente con su debilidad y su edad; podría decirse que ella
usaba de una suerte de condescendencia recibiendo los cuidados de
sus compañeras. De rodillas delante de su ama, espiando cada uno de
sus deseos, la negra parecía igualmente dividida entre un cariño casi
maternal y un temor servil; mientras que se veía reinar hasta en la
efusión de su ternura de mujer salvaje un aire libre, orgulloso y casi
feroz. Yo me acerqué y contemplaba en silencio este espectáculo;
mi curiosidad desagradó sin duda a la india, porque ella se levantó
bruscamente, puso a la niña lejos de ella con una suerte de rudeza,
y, después de lanzarme una mirada irritada, se adentró en el bosque.
Me había ocurrido a veces ver reunidos en los mismos lugares a indi-
viduos pertenecientes a las tres razas humanas que pueblan América
del Norte; yo había reconocido ya en mil efectos diversos la prepon-
derancia ejercida por los blancos; pero se encontraba, en el cuadro
que acabo de describir, algo particularmente conmovedor: un lazo
de afecto reunía aquí a los oprimidos y a los opresores, y la natu-
raleza, al esforzarse en acercarlos, hacía más impresionante aún el
espacio inmenso que habían colocado entre ellos los prejuicios y las
leyes.
Lección5

Las emociones y la violencia

Conocimiento, expresión y autocontrol de los propios sentimientos y


emociones y rechazo de la violencia como solución a los conflictos en las
relaciones interpersonales.

¿Para qué sirve esta lección


Para aprender por qué podemos ser buenos, cuáles son los obstáculos que tene-
mos para serlo y cómo podemos superarlos. Para aprender cuál es la relación
entre emociones y violencia y cómo podemos controlar racionalmente nuestras
emociones.

¿Por qué es importante todo esto?


Ser buenos es algo necesario para ser felices y para contribuir a la felicidad de
los demás. Por razones biológicas, las emociones están vinculadas a la violencia.
Por razones biológicas, nuestras emociones perjudican a nuestro pensamiento
racional, llegando a bloquearlo completamente.

¿De qué se trata?


De entender que para ser buenos tenemos que controlar racionalmente nuestras
emociones y saber cómo podemos hacerlo.
32 Las emociones y la violencia

¿Qué problemas prácticos hay?


Aprender a controlar las emociones es un problema porque nuestro organismo
no está construido para hacerlo fácilmente. Tampoco siempre nuestro apren-
dizaje social ayuda. Higiene de las emociones, eliminar las emociones malas.
Promover las buenas emociones, es decir, controlar racionalmente las emociones
desde las normas morales.

¿Qué necesitamos?
La conciencia de que hay emociones malas que debemos controlar. La idea de
que no hay justificación emocional para la violencia, no para el mal, en general.
Métodos psicológicos de control de las emociones negativas, y de sus orígenes
y de producción de emociones positivas. Aunque la voluntad libre es un hecho
de sentido común, tenemos que ser conscientes de la necesidad de educación
de la voluntad, la adquisición de hábitos, un buen esquema cognitivo (es de-
cir, unas ideas correctas sobre la vida) y de reforzar con emociones adecuadas
(buenos sentimientos). A medida que crece la fuerza tecnológica y militar de
los seres humanos es esencial que no nos dejemos llevar por las emociones a la
hora de tomar decisiones importantes. La psicología racionalista no significa
rechazar las emociones o los sentimientos. Sólo evitar los malos sentimientos
y emociones. Debemos aprender a expresar las emociones de un modo pací-
fico. Debemos aprender a respetar la expresión pacífica de las emociones de los
demás. Debemos aprender a controlar racionalmente las emociones.

¿Qué podemos pensar?


Dentro de nosotros, tenemos tendencia,(capacidad) a la ira, etc., emociones
malas que llevan a la infelicidad y a la violencia. Hay problemas reales que
pueden movernos a estas emociones y sentimientos. En la razón, llevada de
acuerdo con la moral, y en la comunicación podemos encontrar el medio para
resolver bien nuestros problemas. Hay muchos sentimientos buenos que son lo
mejor de nosotros y deben ser protegidos por nuestra razón.
Emociones básicas que perjudican la vida civilizada son la ansiedad, la ira y el
miedo. Nuestros antepasados animales sólo tenían tres medios para resolver sus
conflictos. Podían luchar o huir o esconderse. La ansiedad puede evolucionar
en ira o miedo. Los seres humanos heredamos las emociones del miedo y la ira.
Sabemos que esto es verdade porque la anatomía de nuestro encéfalo presenta
partes comunes con la de los animales. Nuestro encéfalo está compuesto por
una sucesión de capas evolucionadas a lo largo del tiempo.
33

Algunas definiciones
Las emociones son cambios de estado de ánimo que están asociados a determi-
nadas acciones con valor de supervivencia. Con valor de supervivencia significa
que los animales que poseen ese rasgo tienen más posibilidades de sobrevivir, y
por lo tanto, de dejar hijos que también poseerán ese rasgo. La ansiedad, que
llamamos nerviosismo, es una respuesta del organismo a la percepción de un
peligro. La ira es la emoción que desencadena la agresividad y permite la lucha.
Los animales luchan contra los depredadores o para defender a las crías o de-
fender el territorio. La lucha es una estrategia normal para muchas especies y
sin ella no podrían sobrevivir, por lo que podemos considerar que en ellos la ira
es una emoción necesaria. El miedo es la emoción que permite a los animales
huir o esconderse y de esa manera evitar un ataque.

¿Qué debemos hacer?


La violencia es un comportamiento que heredamos de nuestros antepasados ani-
males. El ser humano evolucionó para conseguir una herramienta mejor para
resolver sus problemas. Se trata del pensamiento lógico y el lenguaje. En las
relaciones entre las personas surgen conflictos de forma natural. No debemos
asustarnos por eso. La manera de resolver estos conflictos es razonar y dialogar
procurando el bien común. Pero el ser humano tiene una parte más nueva en
el encéfalo, la corteza cerebral, situada en los senos frontales, que nos permite
la comunicación oral, la creatividad y la utilización de la lógica. Es fácil darse
cuenta de que esas capacidades son unas excelentes herramientas para la reso-
lución de nuestros conflictos, mucho mejores que la lucha, la ocultación o la
huida. (dejar claro que no es sólo una cuestión de cerebro). De hecho, nuestra
sociedad evolucionó para permitir la solución de los conflictos mediante la ló-
gica, la creatividad y la comunicación. La huida, la lucha y el ocultamiento no
son compatibles con una sociedad civilizada.

Conviene recordar
• Los seres humanos tenemos emociones y sentimientos, que son modifica-
ciones de nuestro estado de ánimo.
• Muchas emociones son herencia genética de nuestros antecesores, los ani-
males irracionales, y pueden perjudicar a nuestra vida moral racional.
• Ser conscientes de nuestros sentimientos buenos o malos es el primer paso
para controlarlos.
34 Las emociones y la violencia

• Saber expresar nuestros sentimientos y hacerlo habitualmente permite a


los demás tenerlos en cuenta y ayudarnos a controlarlos si es preciso.
• Mediante el desarrollo de hábitos morales podemos controlar nuestros
malos sentimientos.

Ejercicios de la lección
1. Define emoción.
2. Haz una lista de emociones malas. Explica por qué es mala cada una de
ellas.
3. Define ira.
4. Define rabia.
5. Define frustración.
6. Define rencor.
7. Define envidia.
8. Define miedo.
9. Define desconfianza.
10. Define susceptibilidad.
11. Define vida civilizada.
12. Define ansiedad.
13. ¿Cómo arreglan los animales sus problemas?
14. ¿Cómo puede evolucionar la ansiedad?
15. ¿Para qué les sirve la ira a los animales?
16. ¿Para qué les sirve el miedo a los animales?
17. ¿Por qué tenemos los seres humanos las emociones del miedo y la ira?
18. ¿Cómo sabemos que los seres humanos heredamos elementos de los ani-
males?
19. ¿Qué alternativa tenemos los seres humanos al uso de la violencia?
35

Textos a comentar
1. Erasmo de Roterdam, el gran humanista del siglo XV, habla contra la guerra
en su opúsculo La queja de la paz:

Parte grande de la paz es querer sinceramente la paz. Quienes lle-


van hondo en su pecho el amor de la paz, toman por los cabellos
ocasiones de paz de los estorbos que la obstaculizan o no hacen
caso, o los sortean dispuestos a arrostrar, mientras tamaño bien sufra
mengua. En nuestros días, estos pugnaces temperamentos andan en
busca de viveros de guerra; atenúan o disimulan todo cuanto con-
tribuye a la concordia; lo que en la guerra desemboca, lo exageran
y lo exacerban. Da grima enumerar y referir cuántas tragedias han
desencadenado por puras bagatelas y en qué centellica tan pequeña
han encendido tan lúgubres antorchas e incendios tan vastos y tan
asoladores. En estos casos, asalta la mente todo un aluvión de in-
justicias, y cada cual hiperboliza y exagera su propio mal. Y, en
cambio, en el olvido más profundo, yacen los beneficios recibidos,
por manera que jurarás que la guerra es apasionadamente deseada.
Por regla general, es siempre un interés privado del príncipe lo que
levanta en armas a todo el mundo. Más que público, debe ser el
interés por el que se emprende una guerra. Es más: donde la causa
no existe, inventan ellos mentidas razones de discordia, haciendo
empleo abusivo del hombre de los diferentes países, como cebo de
odios nacionalistas; los magnates cuidan de alimentar este error de
la plebe ignorante y abusan de él para sus conveniencias; y no faltan
sacerdotes que también lo fomentan y lo crían a sus pechos. El inglés
es enemigo del francés, no por otra razón, sino porque es francés.
El ciudadano británico lo es del escocés, no por otro motivo que el
ser escocés. El germano está en disidencia con el galo; el español lo
está con el uno y con el otro. ¡Oh, maldad! Separa a los pueblos
el hueco nombre de una localidad. ¿Y por qué no los reconcilian
tantas cosas comunes? Tú, britano, quieres mal al galo. ¿Por qué,
con más sentido común, siendo tú hombre no quieres bien a otro
hombre, y siendo cristiano no amas a otro cristiano? ¿Por qué una
frivolidad es más poderosa que tantos y tantos lazos naturales, y tan-
tos vínculos como entre uno y otro tiende la cristiandad? El lugar
separa los cuerpos, pero no las almas. Allá, en pasados tiempos, el
cauce del Rin separaba el galo del germano; empero, el cauce del
Rin no separa a un cristiano de otro cristiano. Los Pirineos separan
a los españoles de los franceses; pero los Pirineos no dirimen la co-
36 Las emociones y la violencia

munión de la Iglesia. El mar dirime a los anglos de los galos, pero


no rompe la unidad de unas mismas creencias.
2. Platón, filósofo griego del siglo IV antes de Cristo, y uno de los padres de
la cultura europea, narra su concepción del alma humana en su mito del carro
alado:
Sobre su inmortalidad, pues, basta con lo dicho. Acerca de su idea
debe decirse lo siguiente: descubrir cómo es el alma sería cosa de
una investigación en todos los sentidos y totalmente divina, además
de larga; pero decir a qué es semejante puede ser el objeto de una
investigación humana y más breve; procedamos, por consiguiente,
así. Es, pues, semejante el alma a cierta fuerza natural que mantiene
unidos un carro y su auriga, sostenidos por alas. Los caballos y auri-
gas de los dioses son todos ellos buenos y constituidos de buenos
elementos; los de los demás están mezclados. En primer lugar,
tratándose de nosotros, el conductor guía una pareja de caballos;
después, de los caballos, el uno es hermoso, bueno y constituido de
elementos de la misma índole; el otro está constituido de elementos
contrarios y es él mismo contrario. En consecuencia, en nosotros
resulta necesariamente dura y difícil la conducción. Hemos de in-
tentar ahora decir cómo el ser viviente ha venido a llamarse «mor-
tal» e «inmortal». Toda alma está al cuidado de lo que es inani-
mado, y recorre todo el cielo, revistiendo unas veces una forma
y otras otra. Y así, cuando es perfecta y alada, vuela por las al-
turas y administra todo el mundo; en cambio, la que ha perdido las
alas es arrastrada hasta que se apodera de algo sólido donde se es-
tablece tomando un cuerpo terrestre que parece moverse a sí mismo
a causa de la fuerza de aquella, y este todo, alma y cuerpo unidos,
se llama ser viviente y tiene el sobrenombre de mortal. En cuanto
al inmortal, no hay ningún razonamiento que nos permita expli-
carlo racionalmente; pero, no habiéndola visto ni comprendido de
un modo suficiente, nos forjamos de la divinidad una idea repre-
sentándonosla como un ser viviente inmortal, con alma y cuerpo
naturalmente unidos por toda la eternidad. Esto, sin embargo, que
sea y se exponga como agrade a la divinidad. Consideremos la causa
de la pérdida de las alas, y por la que se le desprenden al alma. Es
algo así como lo que sigue. La fuerza del ala consiste, naturalmente,
en llevar hacia arriba lo pesado, elevándose por donde habita la raza
de los dioses, y así es, en cierto modo, de todo lo relacionado con
el cuerpo, lo que en más grado participa de lo divino. Ahora bien:
lo divino es hermoso, sabio, bueno, y todo lo que es de esta índole;
37

esto es, pues, lo que más alimenta y hace crecer las alas; en cambio,
lo vergonzoso, lo malo, y todas las demás cosas contrarias a aquellas,
las consume y las hace perecer. Pues bien: el gran jefe del cielo, Zeus,
dirigiendo su carro alado, marcha el primero, ordenándolo todo y
cuidándolo. Le sigue un ejército de dioses y demonios ordenado en
once divisiones pues Hestia queda en la casa de los dioses, sola. To-
dos los demás clasificados en el número de los doce y considerados
como dioses directores van al frente de la fila que a cada uno ha sido
asignada. Son muchos en verdad, y beatíficos, los espectáculos que
ofrecen las rutas del interior del cielo que la raza de los bienaventu-
rados recorre llevando a cabo cada uno su propia misión, y los sigue
el que persevera en el querer y en el poder, pues la Envidia está fuera
del coro de los dioses. Ahora bien, siempre que van al banquete y al
festín, marchan hacia las regiones escarpadas que conducen a la cima
de la bóveda del cielo. Por allí, los carros de los dioses, bien equi-
librados y dóciles a las riendas, marchan fácilmente, pero los otros
con dificultad, pues el caballo que tiene mala constitución es pesado
e inclina hacia la tierra y fatiga al auriga que no lo ha alimentado
convenientemente. Allí se encuentra el alma con su dura y fatigosa
prueba. Pues las que se llaman inmortales, cuando han alcanzado la
cima, saliéndose fuera, se alzan sobre la espalda del cielo, y al alzarse
se las lleva el movimiento circular en su órbita, y contemplan lo que
está al otro lado del cielo. A este lugar supraceleste, no lo ha cantado
poeta alguno de los de aquí abajo, ni lo cantará jamás como merece,
pero es algo como esto -ya que se ha de tener el coraje de decir la
verdad, y sobre todo cuando es de ella de la que se habla-: porque,
incolora, informe, intangible esa esencia cuyo ser es realmente ser,
vista sólo por el entendimiento, piloto del alma, y alrededor de la
que crece el verdadero saber, ocupa, precisamente, tal lugar. Como
la mente de lo divino se alimenta de un entender y saber incontami-
nado, lo mismo que toda alma que tenga empeño en recibir lo que le
conviene, viendo, al cabo del tiempo, el ser, se llena de contento, y
en la contemplación de la verdad, encuentra su alimento y bienestar,
hasta que el movimiento, en su ronda, la vuelva a su sitio. En esta
giro, tiene ante su vista a la misma justicia, tiene antes su vista a la
sensatez, tiene ante su vista a la ciencia, y no aquella a la que le es
propio la génesis, ni la que, de algún modo, es otra al ser en otro -en
eso otro que nosotros llamamos entes-, sino esa ciencia que es de lo
que verdaderamente es ser. Y habiendo visto, de la misma manera,
todos los otros seres que de verdad son, y nutrida de ellos, se hunde
de nuevo en el interior del cielo, y vuelve a su casa. Una vez que ha
38 Las emociones y la violencia

llegado, el auriga detiene los caballos ante el pesebre, le echa pienso


y ambrosía, y los abreva con néctar. Tal es pues la vida de los dioses.
De las otras almas, la que mejor ha seguido al dios y más se le parece,
levanta la cabeza del auriga hacia el lugar exterior, siguiendo, en su
giro, el movimiento celeste, pero, soliviantada por los caballos, ape-
nas si alcanza a ver los seres. Hay alguna que, a ratos, se alza, a ratos
se hunde y, forzada por los caballos, ve unas cosas sí y otras no. Las
hay que, deseosas todas de las alturas, siguen adelante, pero no lo
consiguen y acaban sumergiéndose en ese movimiento que las arras-
tra, pateándose y amontonándose, al intentar ser unas más que otras.
Confusión, pues, y porfías y supremas fatigas donde, por torpeza de
los aurigas, se quedan muchas renqueantes, y a otras muchas se les
parten muchas alas. Todas, en fin, después de tantas penas, tiene que
irse sin haber podido alcanzar la visión del ser; y, una vez que se han
ido, les queda sólo la opinión por alimento. El porqué de todo este
empeño por divisar dónde está la llanura de la Verdad, se debe a que
el pasto adecuado para la mejor parte del alma es el que viene del
prado que allí hay, y el que la naturaleza del ala, que hace ligera al
alma, de él se nutre. Así es, pues, el precepto de Adrastea. Cualquier
alma, que, en el séquito de lo divino, haya vislumbrado algo de lo
verdadero, estará indemne hasta el próximo giro y, siempre que haga
lo mismo, estará libre de daño. Pero cuando, por no haber podido
seguirlo, no lo ha visto, y por cualquier azaroso suceso se va gravi-
tando llena de olvido y dejadez, debido a este lastre, pierde las alas
y cae a tierra.
Lección6

Libertad y responsabilidad

Asunción de responsabilidades, individuales y colectivas, en el ejercicio


de libertad en la toma de decisiones morales.

¿Para qué sirve esta lección


Para aprender que la voluntad es la clave del control de nuestra vida como indi-
viduos y la herramienta principal para acercarnos a la felicidad.

¿Por qué es importante todo esto?


Porque todos queremos ser felices y si no controlamos nuestra voluntad es muy
difícil serlo. Si no reconocemos nuestra libertad de escoger, podemos llegar a
dejarnos arrastrar por ideologías políticas o religiosas que pretendan imponer
sus normas, tanto socialmente como individualmente.
Si no reconocemos cómo se forma nuestra voluntad podemos llegar a sen-
tirnos impotentes cuando nos enfrentamos a un conflicto de deseos.

¿De qué se trata?


Nuestra voluntad es la capacidad que tenemos de elegir nuestro comportamiento.
Tenemos que saber cómo funciona nuestra voluntad.
40 Libertad y responsabilidad

¿Qué problemas prácticos hay?


Los problemas prácticos son simplemente el control de nuestra voluntad y la
construcción de deseos que nos permitan alcanzar la felicidad.

¿Qué precisamos?
Filosóficamente, una defensa del libre arbitrio que no llegue a los excesos del
existencialismo, por supuesto. En la práctica, un adiestramiento psicológico de
la voluntad, autodisciplina y higiene de los deseos. Que nuestra voluntad sólo
nos permita querer cosas buenas y conseguirlas. Una teoría de la voluntad que
nos otorgue confianza y moderación.

¿Qué podemos pensar?


Nuestros deseos no tienen validez absoluta. Pueden ser malos y entonces debe-
mos rechazarlos. Ocurre lo mismo con nuestros sentimientos. Algunos de ellos
son malos y hacemos bien en rechazarlos. Por otro lado hay sentimientos y
deseos buenos que debemos esforzarnos en tener, porque son buenos. La de-
mocracia puede representarse como un método de decisión grupal. Igual que
el individuo tiene un período de discernimiento, el grupo también. Todo esto
significa, dado que podemos escoger nuestro comportamiento, de lo que se trata
es de pensar bien qué hacemos, de llevar una higiene de nuestros sentimientos
y de ajustar nuestros principios a lo que nuestra razón puede señalar y nuestras
conciencias confirmar como bueno. Si aceptamos la idea de que el alma tiene
partes que vienen de nuestra herencia animal, debe estar claro que no todo sen-
timiento es válido, que sólo lo son los que están de acuerdo con la mejor parte
de nosotros. Aunque la voluntad libre es un hecho de sentido común, tenemos
que ser conscientes de la necesidad de la educación de la voluntad, la adquisición
de hábitos, un buen esquema cognitivo y de reforzar con emociones adecuadas.
La libertad de la voluntad es una de las características básicas del ser hu-
mano. La voluntad se forma por un complejo proceso racional y emocional,
también social. El esquema ético aristotélico es lo mejor para enderezar nuestra
voluntad. La responsabilidad es el correlato de la libertad. La libertad puede
tener una forma colectiva, que es la democracia. También existe la responsabi-
lidad pública. Creo que no es necesario hablar de la justificación filosófica de
la voluntad libre o de la disputa psicológica del conductismo. Todos podemos
comprobar que actuamos porque queremos. El hecho de que la psicología o
la neurología aún no sepa explicar el fenómeno, no significa que el fenómeno
no exista, como respiramos mucho antes de poder explicar el fenómeno de la
41

respiración fisiológicamente. Algo, dentro de nosotros, permite que podamos


desencadenar nuestro comportamiento. Sin duda existen influencias para nues-
tro comportamiento, pero nosotros podemos resistirlas totalmente o cuando no
existe ninguna causa exterior para nuestro comportamiento, nosotros podemos
comenzar el comportamiento igualmente. Lo importante es no confundir la
voluntad con el deseo. A veces decimos que queremos algo, pero no somos ca-
paces de hacerlo, y lo que realmente ocurre es que tenemos dos deseos opuestos
y preferimos uno, aunque no nos lo confesemos. En estos casos mejor sería re-
conocer que nuestro problema no es de falta o debilidad de la voluntad sino de
clarificación de los deseos.

Algunas definiciones
La responsabilidad es el hecho de que, si no hacemos lo que debemos o hacemos
algo malo, nuestros semejantes seguramente van a resultar dañados y por lo
tanto van a pedirnos cuentas. Responsabilidad viene de responder, es decir, de
explicar por qué hicimos lo que hicimos.

¿Qué debemos hacer?


Los seres humanos, dentro de ciertos límites naturales y sociales somos capaces
de elegir nuestro comportamiento como individuos y como grupos. Nuestra fi-
nalidad es siempre nuestro bienestar tal como nosotros lo entendemos. Para
conseguirlo, tenemos que utilizar nuestra inteligencia para valorar lo que es
mejor hacer en cada momento. Y puesto que somos nosotros los que decidimos
nuestros actos, también somos responsables de lo que hacemos. Esto quiere de-
cir que los demás pueden pedirnos cuentas si nuestros actos les afectan. Dado
que sabemos que muchos de nuestros actos afectan a los demás, tenemos que
usar nuestra inteligencia al escoger nuestra conducta para no dañar a nadie. Los
deseos dependen de nuestros valores.
De lo que se trata es de decidir racionalmente cual es la jerarquía de nuestros
valores, y por lo tanto, que preferimos, que debemos preferir. Diríamos que
es una cuestión cognitiva y no propiamente volitiva. Una vez que nuestros
valores están ordenados, la voluntad surge como una roca dentro de nosotros.
Entonces, en la práctica, ayuda mucho preguntarse que valoramos más. Esto es
lo que llamamos discernimiento. Si no estamos seguros, podemos echar mano
de nuestros valores fundamentales o probar con una opción y pasado un tiempo
con otra, por ver cuál se adapta mejor a nuestra forma de ser. Muchas de las cosas
debemos quererlas, simplemente. Debemos reconocer cuál es nuestro deber y
ejercitar nuestra voluntad en quererlo. Cuando algo es malo, por contra, lo
42 Libertad y responsabilidad

que debemos es no querer eso. Y por supuesto hay muchas cosas que son,
o indiferentes o moralmente buenas, pero en las que podemos escoger. Ahí
podemos dejarnos llevar por nuestro gusto y seguir nuestra forma de ser. Por
supuesto que el primer elemento que tenemos que tener en cuenta es nuestra
conciencia. Cuando hacemos algo malo vamos a tener un aviso interior, y eso
porque nuestra conciencia conoce lo que es bueno y lo que es malo. Esto se
llama la ley natural, y demanda de nosotros su cumplimiento.

Conviene recordar
• Somos libres para obrar bien o mal.

• Una sociedad democrática es libre para escoger sus gobernantes.

• Somos responsables de nuestras acciones cuando tienen consecuencias para


los demás.

• Una sociedad democrática es responsable de los gobernantes que elige y


de las decisiones que estos toman.

• Nuestra responsabilidad nos obliga a comportarnos racionalmente y con


buena intención cuando nuestras acciones, individuales o colectivas pueden
afectar a los demás.

Ejercicios de la lección
1. ¿Por qué podemos afirmar que los seres humanos somos libres?

2. ¿Cuáles son los límites naturales de nuestra libertad?

3. ¿Cuáles son los límites sociales de nuestra libertad?

4. ¿Cuál es el objetivo de nuestro comportamiento?

5. ¿Qué tenemos que hacer para conseguir la felicidad?

6. ¿Por qué somos responsables de nuestro comportamiento?

7. ¿Cuándo pueden pedirnos los demás cuenta de nuestro trabajo?

8. ¿Por qué tenemos que usar la inteligencia para no dañar a los demás?

9. La falta de explicación científica para la libertad de la voluntad, ¿es prueba


de la no existencia?
43

10. ¿Podemos resistir las influencias exteriores sobre nuestro comportamiento?


Pon un ejemplo.

11. ¿Podemos iniciar un comportamiento cuando nada nos influye para ac-
tuar?

12. Define voluntad.

13. Define deseo.

14. Define valor.

15. ¿Podemos tener dos o más deseos en conflicto? Pon un ejemplo.

16. ¿Cómo podemos armonizar nuestros valores?

17. ¿Es fácil que surja la voluntad cuando tenemos claros nuestros valores?

18. ¿Cómo podemos aclarar nuestra voluntad?

19. ¿Debemos querer muchas cosas? Pon varios ejemplos.

20. ¿Hay deberes que simplemente debemos aceptar?

21. ¿Podemos elegir nuestro gusto con respecto a las cosas buenas o indiferen-
tes? Pon varios ejemplos.

22. Define responsabilidad.

23. ¿Qué hace nuestra conciencia?

Textos a comentar
1. Santo Tomás de Aquino, filósofo católico del siglo XIII, explica en su Suma
teológica que el ser humano tiene libertad para elegir:

En el hombre hay libre albedrío. De no ser así, inútiles serían los


consejos, las exhortaciones, los preceptos, las prohibiciones, los pre-
mios y los castigos. Para demostrarlo, hay que tener presente que
hay seres que obran sin juicio previo alguno. Ejemplo: Una piedra
que cae de arriba; todos los seres carentes de razón. Otros obran con
un juicio previo, pero no libre. Ejemplo: Los animales; la oveja que
ve venir al lobo juzga que debe huir de él, pero lo hace con un juicio
natural y no libre, ya que no juzga analíticamente, sino con instinto
natural. Así son los juicios de todos los animales. En cambio, el
44 Libertad y responsabilidad

hombre obra con juicio, puesto que, por su facultad cognoscitiva,


juzga sobre lo que debe evitar o buscar. Como quiera que este juicio
no proviene del instinto natural ante un caso concreto, sino de un
análisis racional, se concluye que obra por un juicio libre, pudiendo
decidirse por distintas cosas. Cuando se trata de algo contingente, la
razón puede tomar direcciones contrarias. Esto es comprobable en
los silogismos dialécticos y en las argumentaciones retóricas. Ahora
bien, las acciones particulares son contingentes, y, por lo tanto, el
juicio de la razón sobre ellas puede seguir diversas direcciones, sin
estar determinado a una sola. Por lo tanto, es necesario que el hom-
bre tenga libre albedrío, por lo mismo que es racional.
2. Jean Paul Sartre, filósofo francés del siglo XX, expone en El existencialismo es
un humanismo su creencia en la libertad radical del ser humano:
El hombre es el único que no sólo es tal como él se concibe, sino tal
como él se quiere, y como se concibe después de la existencia, como
se quiere después de este impulso hacia la existencia; el hombre no
es otra cosa que lo que él se hace. Éste es el primer principio del
existencialismo. Es también lo que se llama la subjetividad, que se
nos echa en cara bajo ese nombre. Pero ¿qué queremos decir con
esto sino que el hombre tiene una dignidad mayor que la piedra o
la mesa? Pues queremos decir que el hombre empieza por existir,
es decir, que empieza por ser algo que se lanza hacia un porvenir,
y que es consciente de proyectarse hacia el porvenir. El hombre
es ante todo un proyecto que se vive subjetivamente, en lugar de
ser un musgo, una podredumbre o una coliflor; nada existe previa-
mente a este proyecto; nada hay en el cielo inteligible, y el hombre
será, ante todo, lo que habrá proyectado ser. No lo que querrá ser.
Pues lo que entendemos ordinariamente por querer es una decisión
consciente, que para la mayoría de nosotros es posterior a lo que
el hombre ha hecho de sí mismo. Yo puedo querer adherirme a
un partido, escribir un libro, casarme; todo esto no es más que la
manifestación de una elección más original, más espontánea que lo
que se llama voluntad. Pero si verdaderamente la existencia precede
a la esencia, el hombre es responsable de lo que es. Así, el primer
paso del existencialismo es poner a todo hombre en posesión de lo
que es, y asentar sobre él la responsabilidad total de su existencia.
Y cuando decimos que el hombre es responsable de sí mismo, no
queremos decir que el hombre es responsable de su estricta indivi-
dualidad, sino que es responsable de todos los hombres. Hay dos
sentidos de la palabra subjetivismo, y nuestros adversarios juegan
45

con los dos sentidos. Subjetivismo, por una parte, quiere decir elec-
ción del sujeto individual por sí mismo, y por otra, imposibilidad
para el hombre de sobrepasar la subjetividad humana. El segundo
sentido es el sentido profundo del existencialismo. Cuando deci-
mos que el hombre se elige, entendemos que cada uno de nosotros
se elige, pero también queremos decir con esto que, al elegirse, elige
a todos los hombres. En efecto, no hay ninguno de nuestros ac-
tos que, al crear al hombre que queremos ser, no cree al mismo
tiempo una imagen del hombre tal como consideramos que debe
ser. Elegir ser esto o aquello es afirmar al mismo tiempo el valor de
lo que elegimos, porque nunca podemos elegir mal; lo que elegimos
es siempre el bien, y nada puede ser bueno para nosotros sin serlo
para todos. Si, por otra parte, la existencia precede a la esencia y
nosotros quisiéramos existir al mismo tiempo que modelamos nues-
tra imagen, esta imagen es valedera para todos y para nuestra época
entera. Así, nuestra responsabilidad es mucho mayor de lo que po-
dríamos suponer, porque compromete a la humanidad entera. Si
soy obrero, y elijo adherirme a un sindicato cristiano en lugar de
ser comunista; si por esta adhesión quiero indicar que la resignación
es en el fondo la solución que conviene al hombre, que el reino del
hombre no está en la tierra, no comprometo solamente mi caso:
quiero ser un resignado para todos; en consecuencia, mi proceder
ha comprometido a la humanidad entera. Y si quiero -hecho más
individual- casarme, tener hijos, aun si mi casamiento depende úni-
camente de mi situación, o de mi pasión, o de mi deseo, con esto no
me encamino yo solamente, sino que encamino a la humanidad en-
tera en la vía de la monogamia. Así soy responsable para mí mismo
y para todos, y creo cierta imagen del hombre que yo elijo; eligién-
dome, elijo al hombre.
46 Libertad y responsabilidad
Part II

Las teorías éticas: las exigencias de


justicia y los derechos humanos
Lección7

La ética y la cultura

Análisis de los elementos individuales y del contexto sociocultural que


pueden condicionar los diferentes sistemas de valores. Subjetivismo, re-
lativismo y pluralismo.

¿Para qué sirve esta lección


Para aprender que es la cultura y qué relación tiene con la ética.

¿Por qué es importante todo esto?


Porque muchas veces, nuestra cultura presenta obstáculos que nos hacen difícil
ser buenos. Tenemos que aprender cuál es el valor de la cultura y cómo defen-
dernos cuando no nos deja ser buenos y felices. La cultura se utiliza como excusa
para atacar los derechos humanos, (¿ejemplo en el islam?) Se niega a veces que
exista una ética humana universal. El hecho de las disensiones no es objeción
a la existencia de una ética universal, sólo muestra que la ética tiene influencia
cultural. Estaría bien concebir la ética como una tecnología que puede tener in-
fluencia cultural y al mismo tiempo tiene una base física, en este caso, biológica.
Tampoco es objeción que no se reconociera durante toda la historia. De hecho
todas las tradiciones éticas afirman que hay una única moral. Su diferencia es de
matiz.
Realmente, si las comparamos, las codificaciones éticas son muy coinci-
dentes. Por otro lado, la gravitación universal también es universal, aparte de
que no se pudo explicar durante toda la historia.
50 La ética y la cultura

¿De qué se trata?


La cultura es el conjunto de las cosas que aprendemos en nuestra sociedad.
Muchas veces estas ideas nos hacen comportarnos mal porque nos aportan ma-
los fines y malas técnicas. Tenemos que aprender a defendernos de la cultura.

¿Qué problemas prácticos hay?


Que lamentablemente muchas culturas defienden la violencia, la discriminación,
el maltrato a muchas personas por sus características, el machismo, etc. Como
la cultura es algo muy difícil de eludir, precisamos estar muy bien preparados
para luchar contra ella en nombre del bien y de la felicidad humana.

¿Qué necesitamos?
Argumentos contra el relativismo. Argumentos en favor del iusnaturalismo, de
la paz, de la libertad, etc. Herramientas para construir nosotros una alternativa
a la cultura de la violencia. Justificación del absolutismo moral. Un método
heurístico que acompañe al absolutismo moral.

¿Qué podemos pensar?


Adaptarse significa sacar el rendimiento posible a lo que tenemos en las manos,
de acuerdo con nuestras necesidades e inclinaciones. Por lo tanto la adaptación
depende de nuestra naturaleza, que existe la naturaleza humana, que venimos
al mundo con unas necesidades y unas inclinaciones. Tenemos que reconocer
el concepto de naturaleza humana. Nuestra naturaleza es el conjunto de rasgos
que nos hacen humanos, no sólo lo que heredamos de los animales sino más
bien nuestra capacidad moral.
Ahora bien, la cultura, normalmente es una adaptación a la naturaleza am-
biente, y por lo tanto una concesión a nuestra animalidad. Se ve bien en el
ejemplo de la explicación de la ablación del clítoris, que es simple y brutalmente
un medio anticonceptivo, y por lo tanto un modo simple de reconocer que a
veces la naturaleza impone límites al crecimiento de la población. Pero la natu-
raleza humana permite con su creatividad esencial y con el impulso de dominio
sobre la naturaleza ambiente, la aparición de medios anticonceptivos no perjudi-
ciales y por otro lado la producción material que haga innecesaria es limitación
del crecimiento de la población.
51

Entonces, tenemos que recurrir a la cultura para descubrir los elementos que
están en contra de la naturaleza humana, esos elementos bien podemos elimi-
narlos. Aparte de la cultura que va en el sentido de la animalidad mala, (porque
también hay una animalidad buena, sin duda) podemos ahorrarnos cumplirla.
En el fondo, la interpretación materialista del racismo y el prejuicio de grupo
es muy atendible. Lo que nos molesta es porque tememos que nos quiten el
dinero. Hay que entender que hay dinero para todos y que los prejuicios no son
necesarios, eso aparte de lo malos que son.
Tanto los argumentos utilitaristas como los argumentos deontológicos coin-
ciden en el rechazo de los prejuicios. Adaptarse significa sacar el mejor rendi-
miento posible a lo que tenemos a mano, de acuerdo con nuestras necesidades
e inclinaciones. Por lo tanto la adaptación depende de nuestra naturaleza. Que
existe la naturaleza humana, que venimos al mundo con unas necesidades y unas
inclinaciones.
Es falso que la moral dependa del individuo. Es falso que dependa de su so-
ciedad o época histórica. Ocurre que hay expresiones culturales de cosas buenas,
vengan de donde vengan, respetar las indiferentes y rechazar las malas, vengan de
donde vengan. Todos los seres humanos reconocemos que existes cosas buenas
y malas en nuestro comportamiento. Sin embargo no todos estamos de acuerdo
totalmente con respecto a ciertas conductas o la calificación que nos merecen
algunas situaciones. Esto ocurre porque en nuestras valoraciones influyen ele-
mentos culturales y psicológicos que pueden alterar nuestras ideas sobre el bien
y el mal. La cultura es un modo de adaptarse a la realidad natural y social.
Ahora bien, sabemos que esta realidad es diferente geográficamente y cam-
biante a lo largo del tiempo (aunque muchos de sus rasgos son comunes a todo
el mundo y en todas las épocas). Esas variaciones a veces influyen para que
juzguemos de una u otra manera determinadas conductas (ejemplo: desperdiciar
agua en el desierto y hacerlo en Galicia). Por otro lado, aunque las personas
comparten la naturaleza común, que viene determinada por su especie, cada in-
dividuo es un ser libre y diferenciado de los demás lo que hace que elementos de
su carácter afecten a sus juicios morales, como afectan a cualquier otro elemento
de su vida. Por ejemplo, la cortesía es de ley natural. En un país, ser cortés
puede ser dar la mano y en otro hacer una reverencia. La cultura puede ser una
expresión particular de la norma moral general.
El fin de nuestras acciones es la felicidad. Eso significa que hay una técnica
cosas que pueden llevarnos al fin y cosas que nos alejan significan que el fin debe
concebirse bien. La felicidad es un elemento compuesto, complejo. Tiene una
dimensión intelectual, de visión correcta, otra de placer, otra social. Es proba-
blemente necesaria la combinación de elementos no el eclecticismo, claro. La
felicidad es un sentimiento de contentamiento, de satisfacción, que depende de
unas cualidades objetivas, de situación de nuestro mundo, de nuestro compor-
52 La ética y la cultura

tamiento.

Algunas definiciones
La cultura es un modo de adaptarse a la realidad natural y social. Exagerando
las influencias psicológicas algunos pensadores llegaron a sostener que los juicios
morales son un elemento puramente individual y que sólo tienen validez para
la persona que los hace. Esta idea se llamó subjetivismo moral, y desatiende
el hecho de que el individuo es siempre un miembro de una sociedad y de una
especie, y está vinculado a los demás por relaciones naturales y sociales que son
las que la ética procura regular.
Malinterpretando esos hechos algunos autores pensaron que todos los ele-
mentos de la ética dependían de las creencias sociales, y que por lo tanto no
era posible hacer ningún juicio moral que tuviera valor para todos los seres hu-
manos. Esta postura se llama relativismo cultural y va en contra del concepto de
igualdad de todas las personas, aparte de legitimar muchas evidentes violaciones
de los derechos humanos.
El pluralismo moral es la postura que acepta las diferencias individuales y
sociales mientras que reconoce la identidad esencial de la naturaleza humana.
Para esta postura, los elementos básicos de la ética que son válidos para todos,
pueden recibir formas variadas y expresiones diversas, dependiendo de la cultura
y la psicología del individuo. Esos elementos son respetables si no afectan al
sentido profundo de las normas éticas y no contradicen los derechos humanos.

Conviene recordar
• A veces nuestra calificación moral de ciertas acciones es diferentes. Estas
diferencias dependen de nuestra educación y nuestro carácter.

• A veces defendemos ideas malas por interés egoísta.

• El subjetivismo es una creencia errónea que afirma que las acciones son
buenas o malas dependiendo del punto de vista de cada quien.

• El subjetivismo es erróneo porque las acciones son buenas o malas por su


influencia objetiva en el bienestar de las personas.

• El relativismo es la creencia errónea que afirma que las acciones son malas
o buenas dependiendo de las opiniones culturales o religiosas de la so-
ciedad o de la época en la que se dan.
53

• El relativismo es erróneo porque las acciones son buenas o malas de acuerdo


con la naturaleza humana que es la misma para todas las personas, inde-
pendientemente de su sociedad o de su época.

• Los elementos básicos de la ética son universales, aunque pueden recibir


expresiones variadas dependiendo de la cultura o del carácter del indi-
viduo. Estas expresiones son respetables si no afectan al sentido profundo
de las normas éticas y no contradicen los derechos humanos.

Ejercicios de la lección
1. ¿Qué es la cultura?

2. ¿Qué es la ética?

3. Haz una lista de cinco comportamientos malos.

4. Haz una lista de cinco comportamientos buenos.

5. Escribe una acción que parezca bien a unas personas y mal a otras.

6. Explica por qué ciertas personas creen que la acción es mala.

7. Explica por qué ciertas personas creen que la acción del ejercicio anterior
es buena.

8. Menciona qué elementos psicológicos pueden influir en el juicio moral.

9. Menciona qué elementos culturales pueden influir en el juicio moral.

10. Menciona una influencia geográfica en el juicio moral.

11. Menciona un caso de influencia subjetiva en el juicio moral.

12. ¿Qué es un juicio moral?

13. ¿En qué consiste el subjetivismo moral?

14. ¿Qué es el relativismo cultural?

15. ¿Qué es el pluralismo cultural?

16. ¿Por qué el pluralismo cultural permite el juicio ético?

17. ¿Por qué ni el relativismo ni el subjetivismo permiten el juicio moral?


54 La ética y la cultura

Textos a comentar
1. El antropólogo estadounidense Marvin Harris, discute en este pasaje de su
obra Nuestra especie el concepto de cultura en algunas especies animales:

Los simios no son los únicos primates subhumanos que poseen cul-
turas rudimentarias. Los primatólogos del Instituto de Investigación
de Primates de la Universidad de Kyoto informan que los macacos
japoneses disponen de diversas costumbres e instituciones basadas
en el aprendizaje social. Los machos de ciertos grupos, por ejem-
plo, realizan turnos de vigilancia mientras comen los menores. Esta
actividad es característica únicamente de los grupos de Takasaqui-
yama y Takhasi. Asimismo, se han observado otras diferencias cul-
turales. Cuando los monos comen el fruto de un árbol llamado
muku, no escupen el hueso, sino que lo tragan y lo excretan con las
heces. En cambio, los monos de Arashi-yama parten el hueso con
los dientes y se comen la pulpa. Ciertos grupos comen crustáceos
y otros no. Se han observado también diferencias culturales en
relación con la característica distancia que los animales guardan en-
tre sí mientras comen y en relación con el orden que machos, hem-
bras y jóvenes siguen cuando se trasladan por el bosque. De hecho,
los científicos del Instituto de Investigación de Primates observaron
innovaciones en la conducta que se propagaban de individuo a in-
dividuo y pasaban a formar parte de la cultura rudimentaria del
grupo. A fin de atraer a los monos cerca de la costa para observar-
los con más facilidad, los científicos pusieron boniatos en la playa.
Cierto día, una hembra joven empezó a quitar la arena de los bo-
niatos sumergiéndolos en un arroyuelo que atravesaba la playa. La
conducta de lavar se propagó al grupo y sustituyó gradualmente al
viejo hábito de limpiar frotando. Nueve años después, del 80 al 90
por ciento de los animales lavaban sus boniatos, unos en el arroyo
y otros en el mar. Cuando los científicos esparcieron trigo por la
playa, los monos de Koshima lo pasaron mal al principio separando
los granos de la arena. Uno de ellos inventó pronto un método para
quitar la arena del trigo y la conducta fue adoptada por los demás.
(La solución consistía en meter el trigo en el agua. El trigo flota y la
arena se hunde.)La diferencia fundamental entre culturas rudimenta-
rias y culturas plenamente desarrolladas es de carácter cuantitativo.
Simios y monos cuentan con escasas tradiciones, pero los humanos
tienen innumerables. Artefactos, prácticas, normas y relaciones cul-
turales constituyen la mayor parte de nuestro entorno. Los hu-
55

manos no pueden comer, respirar, defecar, aparearse, reproducirse,


sentarse, trasladarse, dormir o tumbarse sin seguir o expresar algún
aspecto de la cultura de su sociedad. Nuestas culturas crecen, se
expanden y evolucionan. Es propio de su naturaleza. De la real-
idad química corriente surge, superándola, la realidad cultural, del
mismo modo que aquélla surge, superándolo, de su sustrato químico
y físico. Cuando nuestros antepasados traspasaron el umbral del de-
spegue cultural, realizaron un avance tan decisivo como la transición
de la energía a la materia o de los aminoácidos a la proteína viva.
2. Platón, en su diálogo Protágoras nos explica en el mito de Prometeo y Epime-
teo el origen de la cultura:
El hombre, una vez que participó de una porción divina, fue el
único de los animales que, a causa de este parentesco divino, pri-
meramente reconoció a los dioses y comenzó a erigir altares e imá-
genes de dioses. Luego, adquirió rápidamente el arte de articular
sonidos vocales y nombres, e inventó viviendas, vestidos, calzado,
abrigos, alimentos de la tierra. Equipados de este modo, (b) los
hombres vivían al principio dispersos y no había ciudades, siendo,
así, aniquilados por las fieras, al ser en todo más débiles que ellas.
El arte que profesaban constituía un medio, adecuado para alimen-
tarse, pero insuficiente para la guerra contra las fieras, porque no
poseían aún el arte de la política, del que el de la guerra es una
parte. Buscaron la forma de reunirse y salvarse construyendo ciu-
dades, pero, una vez reunidos, se ultrajaban entre sí por no poseer el
arte de la política, de modo que, al dispersarse de nuevo, perecían.
(c) Entonces Zeus, temiendo que nuestra especie quedase extermi-
nada por completo, envió a Hermes para que llevase a los hombres
el pudor y la justicia, a fin de que rigiesen las ciudades la armonía y
los lazos comunes de amistad. Preguntó, entonces, Hermes a Zeus la
forma de repartir la justicia y el pudor entre los hombres: «¿Las dis-
tribuyo como fueron distribuidas las demás artes? Pues éstas fueron
distribuidas así: Con un solo hombre que posea el arte de la me-
dicina, basta para tratar a muchos, legos en la materia; y lo mismo
ocurre con los demás profesionales. (d) ¿Reparto así la justicia y el
pudor entre los hombres, o bien las distribuyo entre todos?». «En-
tre todos, respondió Zeus; y que todos participen de ellas; porque
si participan de ellas sólo unos pocos, como ocurre con las demás
artes, jamás habrá ciudades. Además, establecerás en mi nombre
esta ley: Que todo aquél que sea incapaz de participar del pudor
y de la justicia sea eliminado, como una peste, de la ciudad». Ahí
56 La ética y la cultura

tienes, Sócrates, por qué los atenienses, al igual que los demás pueb-
los, cuando deliberan sobre la virtud en arquitectura o en cualquier
otra profesión, sólo a unos pocos les consideran con derecho a dar
consejos. (e) Y si alguien que no sea de éstos se pone a dar consejos,
no le toleran, como tú dices, y con razón, añado yo. Pero cuando se
ponen a deliberar sobre la virtud política, (323 a) toda la cual deben
abordar con justicia y sensatez, entonces escuchan, y con razón, a
todo el mundo, como suponiendo que todos deben participar de
esta virtud o, de lo contrario, no habría ciudades. Esta es, Sócrates,
la causa de tal comportamiento. Y para que no creas que te en-
gaño, he aquí una prueba de cómo todos los hombres, en realidad,
piensan que cada particular participa de la justicia y del resto de la
virtud política: En las demás virtudes, como tú dices, si alguien, por
ejemplo, dice que es un buen flautista o que sobresale en cualquier
otro arte, sin ser verdad, (b) entonces o se burlan o se indignan con
él, y sus parientes, yendo por él, le recriminan como si se hubiera
vuelto loco. Cuando, por el contrario, se trata de la justicia o del
resto de la virtud política, si alguien, de quien saben que es injusto,
se pone a decir en público la verdad sobre su persona, esto, el decir
la verdad, que en el caso anterior se consideraba como sensato, en
éste, se toma como una locura; pues sostienen que todo el mundo
debe decir que es justo, lo sea o no; y que, quien no simula la jus-
ticia, está loco, (c) puesto que no hay nadie que, en alguna manera,
no participe necesariamente de la justicia, a menos que deje de ser
hombre. En resumen, he aquí mi respuesta: Que, efectivamente,
cuando se trata de esta virtud, los atenienses admiten, con razón, el
consejo de todo el mundo, porque piensan que todo el mundo tiene
parte en ella. Que, por otra parte, en su opinión esta virtud no es
por naturaleza ni se desarrolla por sí misma, sino que es enseñable
y que, si en alguien se desarrolla, se debe a su aplicación, es lo que a
continuación voy a intentar demostrarte.
Lección8
Las teorías éticas

Conocimiento de las principales teorías éticas que más han contribuido


a la conquista de derechos y libertades, desde la perpectiva de la felicidad
y la perspectiva de la justicia.

¿Para qué sirve esta lección


Para aprender cuáles son las ideas principales de los filósofos sobre la ética.

¿Por qué es importante todo esto?


Conocer las teorías éticas nos ayuda a ser mejores en la práctica. Por lo menos
conociéndolas podremos saber qué es ser bueno y qué tenemos que hacer para
llegar a serlo. Y recordemos que la bondad es la puerta de la felicidad. Porque
puede aportarnos ideas para buscar la felicidad personal y colectiva. La base
debe ser Aristóteles, con aportaciones del estoicismo en la paciencia, del cris-
tianismo en el amor y el perdón, en el epicureísmo en el placer, en el kantismo
en el imperativo categórico como método heurísticos y en el utilitarismo como
lectura social.

¿De qué se trata?


De aprender las ideas de los principales filósofos con respecto a la felicidad y la
ética. Justificar el eudemonismo, afirmar que el pracer y sólo una parte de la
felicidad, que el ser humano hace bien en escoger ésta como su finalidad y sobre
todo, quizá, equiparar felicidad con bondad.
58 Las teorías éticas

¿Qué problemas prácticos hay?


La persistencia en la virtud cuando empiezan las desgracias.

¿Qué podemos pensar?


Probablemente la verdad también la verdad humana, la ética, es compleja, además
de estar compuesta por muchos elementos. No se trata de eclecticismo. Ahora
bien, la complejidad no es fácil de manejar intelectualmente lo que quizá explica
lo difícil que es ser feliz, eso si ser feliz es el objetivo de la ética. La felicidad
es el fin de las acciones humanas, tanto de los individuos como de los grupos.
La felicidad precisa de bienes materiales, una buena salud, la libertad política,
una buena familia y buenos amigos. Para ser felices tenemos que hacer lo que
hacemos mejor. Ser bueno consiste en ejercitar nuestras virtudes o capacidades.
Cada virtud, prudencia, fortaleza, justicia, templanza, es un punto medio entre
dos extremos de exceso y defecto. Es la inteligencia la que debe indicarnos cuál
es el punto justo.
Definir la felicidad:

1. Desarrollo de nuestras buenas capacidades.

2. Sentimiento derivado de la armonía, contentamiento.

3. Cumplimiento de nuestras inclinaciones buenas.

4. Satisfacción de nuestras necesidades.

La felicidad es un problema porque es algo complejo. Es un problema in-


telectual y práctico, por eso precisamos las virtudes dianoéticas. Esquema del
alma para explicar qué es lo que hay que hacer. La ética es la técnica del com-
portamiento humano. El objetivo del comportamiento es la felicidad, privada
y pública. Somos buenos cuando seguimos las virtudes. La virtud es el camino
medio entre dos excesos. Tipos de virtud.
Consideramos que la concepción ética báscia fue construida en Occidente en
base a las siguientes doctrinas éticas: Tanto eudemonistas como estoicos afirma-
ban la necesidad de organizar correctamente la sociedad y de participar en la
vida política en libertad. Para Aristóteles las virtudes principales son la justicia,
la forrtaleza, la prudencia y la templanza. El error del estoicismo es pensa que
la impasibilidad puede ser un objetivo humano. Está bien no dejarse afectar por
contrariedades triviales, pero está claro que los dolores que nacen de una fuerte
razón debemos sentirlos, y es natural que lo hagamos. El estoicismo nace del
59

mismo error que el hedonismo, el de valorar sólo las sensaciones físicas. Hay
dolores que son buenos igual que hay placeres que son malos.
El hedonismo afirma que el bien es el placer y el mal el dolor, que debemos
buscar el placer y huir de los dolores. El hedonismo afirma el egoísmo porque es
obvio que el placer sólo puede ser nuestro. Por otro lado se llega al pesimismo,
como en el caso de los cirenaicos, porque naturalmente no siempre podemos
obtener placer.

Algunas definiciones
El eudemonismo cuyo formulador principal fue Aristóteles, considera que la
felicidad es el fin del comportamiento humano. Para llegar a ser feliz, basta
con ser bueno, pero la bondad no es fácil de conseguir. Ser bueno consiste
en ejercitar nuestras virtudes o capacidades. Cada virtud (prudencia, fortaleza,
justicia, templanza, etc.) es un punto medio entre dos extremos de exceso y
defecto. Es la inteligencia la que debe indicarnos cuál es el punto medio. El
estoicismo tuvo varios representantes como Séneca, Marco Aurelio, Epicteto,
etc. Para los estoicos debemos seguir la naturaleza humana para ser buenos.
Nuestra naturaleza consiste en la inteligencia y demanda de nosotros rechazar
las pasiones que nos impiden la perfección moral. Los estoicos defendían la
igualdad de todos los seres humanos y su dignidad.

Conviene recordar
• En Europa, las escuelas éticas que procuraron la felicidad y la justicia
fueron el hedonismo, el eudemonismo, el estoicismo, el deontologismo
y el utilitarismo.

• Para el hedonismo, el ser humano debía buscar el placer con su compor-


tamiento.

• Para el eudemonismo, la felicidad era el fruto de las buenas acciones, que


se conseguían mediante una conducta racionalmente equilibrada.

• Para el estoicismo, el repeto a la naturaleza humana requería el control de


nuestros sentimientos.

• Para el deontologismo, existía el deber de comportarnos bien.

• Para el utilitarismo nuestras acciones debían hacerse pensando en el bie-


nestar de toda la humanidad.
60 Las teorías éticas

Ejercicios de la lección
1. ¿Por qué la ética es una técnica?

2. ¿Cuál es el fin del comportamiento humano?

3. ¿Qué es la felicidad?

4. ¿Cómo se obtiene la felicidad?

5. ¿Qué es una virtud?

6. ¿Qué es la regla de oro?

7. ¿Qué es la fortaleza?

8. ¿Qué es la justicia?

9. ¿Qué es la templanza?

10. ¿Qué es la ira?

11. ¿Qué es la mansedumbre?

12. ¿Qué es la envidia?

13. ¿Qué es la empatía?

14. ¿Qué es la lujuria?

15. ¿Qué es la castidad?

16. ¿Qué es la gula?

17. ¿Qué es la moderación?

18. ¿Qué es la pereza?

19. ¿Qué es la diligencia?

20. ¿Qué es la soberbia?

21. ¿Qué es la humildad?

22. ¿Qué es la avaricia?

23. ¿Qué es la generosidad?


61

Textos a comentar
1. Aristóteles, el más grande de los filósofos de todos los tiempos, explica en su
obra Ética a Nicómaco que el fin de todo comportamiento es la felicidad:

Digamos, pues, resumiendo, pues toda noticia y toda elección a bien


alguno se dirige, qué es aquello a lo cual se endereza la sciencia de
república y cuál es el último bien de todos es aquello a lo cual se
endereza la sciencia de república y cuál es el último bien de todos
nuestros hechos. En cuanto al nombre, cierto casi todos lo con-
fiesan, porque así el vulgo, como los más principales, dicen ser la
felicidad el sumo bien, y el vivir bien y el obrar bien juzgan ser lo
mismo que el vivir prósperamente; pero en cuanto al entender qué
cosa es la felicidad, hay diversos pareceres, y el vulgo y los sabios no
lo determinan de una misma manera. Porque el vulgo juzga consistir
la felicidad en alguna destas cosas manifiestas y palpables, como en el
regalo, o en las riquezas, o en la honra, y otros en otras cosas. Y aun
muchas veces a un mismo hombre le parece que consiste en varias
cosas, como al enfermo en la salud, al pobre en las riquezas; y los
que su propria ignorancia conocen, a los que alguna cosa grande di-
cen y que excede la capacidad dellos, tienen en gran precio. A otros
algunos les ha parecido que fuera destos muchos bienes hay algún
bien que es bueno por sí mismo, por cuya causa los demás bienes
son buenos. Relatar, pues, todas las opiniones es trabajo inútil por
ventura, y basta proponer las más ilustres, y las que parece que en
alguna manera consisten en razón. Pero habemos de entender que
difieren mucho las razones que proceden de los principios, de las
que van a parar a los principios. Y así Platón, con razón, dudaba y
inquiría esto, si es el camino de la doctrina desde los principios, o
si ha de ir a parar a los principios; así como en la corrida, dende el
puesto al paradero, o al contrario. Porque se ha de comenzar de las
cosas más claras y entendidas, y éstas son de dos maneras: porque
unas nos son más claras a nosotros, y otras, ellas en sí mismas, son
más claras. Habremos, pues, por ventura, de comenzar por las cosas
más entendidas y claras a nosotros. Por tanto, conviene que el que
conveniente oyente ha de ser en la materia de cosas buenas y justas,
y, en fin, en la disciplina de república, en cuanto a sus costumbres
sea bien acostumbrado. Porque el principio es el ser, lo cual si bas-
tantemente se muestra, no hay necesidad de demostrar el por qué es;
y el que desta suerte está dispuesto, o tiene, o recibe fácilmente los
principios; y el que ninguna destas cosas tiene, oiga lo que Hesíodo
62 Las teorías éticas

dice en estos versos:

Aquel que en toda cosa está instruido,


varón será perfecto y acabado;
siempre aconsejará lo más valido.
Bueno también será el que, no enseñado,
en el tratar sus cosas se rigiere
por parecer del docto y buen letrado.
Mas el que ni el desvío lo entendiere,
ni tomare del docto el buen consejo,
turbado terná el seso y mientras fuere,
será inútil en todo, mozo y viejo.

2. San Pablo, escribe en la Epístola a los romanos una exhortación cristiana a las
virtudes:
Por la gracia que me ha sido dada, os digo a todos y a cada uno de
vosotros: No os sobreestiméis más de lo que conviene estimaros,
sino estimaos moderadamente, cada uno según Dios le repartió la
medida de la fe. 4 Pues a la manera que en un solo cuerpo tene-
mos muchos miembros, y todos los miembros no tienen la misma
función, 5 así nosotros, siendo muchos, somos un solo cuerpo en
Cristo, pero cada miembro está al servicio de los otros miembros.
6 Así todo tenemos dones diferentes, según la gracia que nos fue
dada; ya sea la profecía, según la medida de la fe; 7 ya sea el minis-
terio para servir; en que enseña en la enseñanza; 8 el que exhorta,
para exhortar; el que da, con sencillez; quien preside, presida con
solicitud; quien practica la misericordia, hágalo con alegría. 9 Vues-
tra caridad sea sincera, aborreciendo el mal, adhiriéndoos al bien,
10 amándoos los unos a los otros con amor fraternal, honrándoos
a porfía unos a otros. 11 Sed diligentes sin flojedad, fervorosos de
espíritu, como quienes sirven al Señor. 12 Vivid alegres con la es-
peranza, pacientes en la tribulación, perseverantes en la oración; 13
subvenid a las necesidades de los santos, sed solícitos en la hospita-
lidad. 14 Bendecid a los que os persiguen, bendecid y no maldigáis.
15 Alegraos con los que se alegran, llorad con los que lloran. 16
Procurad tener unanimidad de sentimientos unos para con otros;
no seáis altivos, mas allanaos a los humildes. No seáis prudentes
en vuestra apreciación. 17 No volváis mal por mal; procurad el
bien a los ojos de todos los hombres. 18 A ser posible y cuanto de
vosotros depende, tened paz con todos. 19 No os tomeis la justicia
por vosotros mismos, amadísimos, antes dad lugar a la ira de Dios;
63

pues escrito está: «A mí la venganza, yo haré justicia, dice el Señor».


20 Por lo contrario, «si tu enemigo tiene hambre, dale de comer;
si tiene sed, dale de beber; que haciendo así amontonáis carbones
encendidos sobre su cabeza». 21 No te dejes vencer del mal, antes
vence al mal con el bien.
64 Las teorías éticas
Lección9

Los derechos humanos

Consideración de las dimensiones ética, jurídica y política de los dere-


chos humanos. Valoración de los derechos humanos como exigencia
mínima de justicia.

¿Para qué sirve esta lección


Para aprender qué son los derechos humanos, que son una guía para acercarnos
a la felicidad.

¿Por qué es importante todo esto?


Los derechos humanos son una descripción del tipo de vida que lleva a la feli-
cidad, o por lo menos la favorece. Si conseguimos que se respeten los derechos
humanos, todos podremos ser algo más felices.

¿De qué se trata?


Los derechos humanos son una descripción de la vida que todos desearíamos
tener. Tenemos que aprender cómo conseguir que se cumplan siempre. Quizá
lo principal sea lo de defender el iusnaturalismo desde una perspectiva también
aceptable por los no cristianos. En el fondo la disputa es también la de utili-
tarismo contra iusnaturalismo.
66 Los derechos humanos

¿Qué problemas prácticos hay?


Hacer que todos los gobiernos cumplan los derechos humanos.

¿Qué necesitamos?
Una defensa del iusnaturalismo aceptable para todos. También la armonización
de las diferentes generaciones de derechos. Una justificación de los derechos no
religiosa. ¿Cómo puede haber derechos humanos sin iusnaturalismo? Práctica-
mente, iniciativas para que se respeten, también fuera de los países europeos.

¿Qué dicen los filósofos?


Hay que acudir, a por inspiración, a los iusnaturalistas. Locke? Los iusnatura-
listas del s. XVII? Santo Tomás? Pero para ellos todo partía de Dios.

¿Qué podemos pensar?


Dependen de la naturaleza humana. Aunque los derechos humanos no se crean,
sino que se reconocen, a medida que las sociedades se hacen más instruidas y
mejores (y la conciencia individual mejora) Los derechos humanos son reglas
que definen una vida buena para los seres humanos. Debemos respetarlos como
individuos. Las leyes de todos los países deben adecuarse a ellas. Los gobier-
nos deben procurar que se respeten en todos los países. Los derechos humanos
son una expresión de la justicia, la libertad y la igualdad. La declaración de la
ONU: explicación y discusión. Los derechos humanos son el conjunto de carac-
terísticas que definen los elementos sociales de una vida digna para una persona.
Describen por lo tanto los elementos que deberían fomentar los gobiernos y res-
petar todo el mundo. Son una conquista ética en el sentido de que deben ser el
marco básico para el comportamiento de los individuos. Ninguna persona debe
hacer nada que lesiones los derechos humanos o impida su ejercicio. Las leyes de
todos los estados deben hacerse de acuerdo con los derechos humanos. Nunca
pueden mandar o permitir nada contrario a ellos y siempre deben facilitar el
cumplimiento de los derechos que precisen de unas condiciones materiales. Las
decisiones discrecionales (las que los gobiernos tienen derecho a tomar pero no
están mandadas por la ley) de los gobiernos, deben tener presente el respeto a
los derechos humanos y su fomento como base de las relaciones internacionales
entre estados.
67

Los derechos humanos son una exigencia mínima de justicia. Toda mejora
de la vida de las personas en su aspecto social debe partir de ellos. Los derechos
humanos son los reguladores de la ética cívica. Los criterios éticos deben regular
el comportamiento individual. Ahora bien, el ser humano, en el avance de la
historia, llega a inventar el estado, como elemento de la organización social. El
estado no es ni la organización de la sociedad ni la única estructura de ésta. Es
tan sólo un importante elemento de ella, relacionado con el monopolio de la vio-
lencia, quizá es el ámbito de uso de la violencia como herramienta social, aunque
esta definición es totalmente anarquista. Debemos dejar claro que no se trata de
sacralizar una u otra declaración, y menos aun de sacralizar a la ONU, que tiene
muchas carencias democráticas. La misma existencia de las generaciones de dere-
chos es una prueba de que no se trata de sacralizar nada. El partido nazi pudo
añadir a su programa la promesa de no alterar sus puntos, pero con los derechos
humanos siempre puede haber una adición si es para mejorar. Quizá la mejor
manera de presentar los derechos humanos es como una descripción de la vida
buena. El problema es cómo definir de forma utilitarista el hecho de la inaliena-
bilidad de algunos derechos. No es objeción que exista una contradicción entre
generaciones, porque es legítimo presentar como reclamación o objetivo, por
lo menos, que dos cosas buenas se den al mismo tiempo, y eso aunque no se
sepa cómo lograrlo. Si sólo tenemos legitimidad para proponer lo que ya se sabe
hacer, ¿qué incentivo tenemos para proponernos metas superiores?

La declaración universal de los derechos humanos


Adoptada y proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas el diez
de diciembre de 1948, en su resolución 217 A (III).
Preámbulo.
Considerando que la libertad, la justicia y la paz en el mundo tienen por
base el reconocimiento de la dignidad intrínseca y de los derechos iguales e in-
alienables de todos los miembros de la familia humana;
Considerando que el desconocimiento y el menosprecio de los derechos hu-
manos han originado actos de barbarie ultrajantes para la conciencia de la hu-
manidad, y que se ha proclamado, como la aspiración más elevada del hombre,
el advenimiento de un mundo en que los seres humanos, liberados del temor y
de la miseria, disfruten de la libertad de palabra y de la libertad de creencias;
Considerando esencial que los derechos humanos sean protegidos por un
régimen de Derecho, a fin de que el hombre no se vea compelido al supremo
recurso de la rebelión contra la tiranía y la opresión;
Considerando también esencial promover el desarrollo de relaciones amis-
tosas entre las naciones;
68 Los derechos humanos

Considerando que los pueblos de las Naciones Unidas han reafirmado en la


Carta su fe en los derechos fundamentales del hombre, en la dignidad y el valor
de la persona humana y en la igualdad de derechos de hombres y mujeres, y se
han declarado resueltos a promover el progreso social y a elevar el nivel de vida
dentro de un concepto más amplio de la libertad;
Considerando que los Estados Miembros se han comprometido a asegurar,
en cooperación con la Organización de las Naciones Unidas, el respeto universal
y efectivo a los derechos y libertades fundamentales del hombre, y
Considerando que una concepción común de estos derechos y libertades es
de la mayor importancia para el pleno cumplimiento de dicho compromiso;
LA ASAMBLEA GENERAL proclama la presente DECLARACIÓN UNI-
VERSAL DE DERECHOS HUMANOS como ideal común por el que todos
los pueblos y naciones deben esforzarse, a fin de que tanto los individuos como
las instituciones, inspirándose constantemente en ella, promuevan, mediante la
enseñanza y la educación, el respeto a estos derechos y libertades, y aseguren,
por medidas progresivas de carácter nacional e internacional, su reconocimiento
y aplicación universales y efectivos, tanto entre los pueblos de los Estados Miem-
bros como entre los de los territorios colocados bajo su jurisdicción.
Artículo 1.
* Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y,
dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente
los unos con los otros.
Artículo 2.
* Toda persona tiene todos los derechos y libertades proclamados en esta
Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión
política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica,
nacimiento o cualquier otra condición. * Además, no se hará distinción alguna
fundada en la condición política, jurídica o internacional del país o territorio
de cuya jurisdicción dependa una persona, tanto si se trata de un país indepen-
diente, como de un territorio bajo administración fiduciaria, no autónomo o
sometido a cualquier otra limitación de soberanía.
Artículo 3.
* Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su
persona.
Artículo 4.
* Nadie estará sometido a esclavitud ni a servidumbre, la esclavitud y la trata
de esclavos están prohibidas en todas sus formas.
Artículo 5.
* Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o
degradantes.
Artículo 6.
69

* Todo ser humano tiene derecho, en todas partes, al reconocimiento de su


personalidad jurídica.
Artículo 7.
* Todos son iguales ante la ley y tienen, sin distinción, derecho a igual pro-
tección de la ley. Todos tienen derecho a igual protección contra toda discrimi-
nación que infrinja esta Declaración y contra toda provocación a tal discrimina-
ción.
Artículo 8.
* Toda persona tiene derecho a un recurso efectivo ante los tribunales na-
cionales competentes, que la ampare contra actos que violen sus derechos fun-
damentales reconocidos por la constitución o por la ley.
Artículo 9.
* Nadie podrá ser arbitrariamente detenido, preso ni desterrado.
Artículo 10.
* Toda persona tiene derecho, en condiciones de plena igualdad, a ser oída
públicamente y con justicia por un tribunal independiente e imparcial, para la
determinación de sus derechos y obligaciones o para el examen de cualquier
acusación contra ella en materia penal.
Artículo 11.
* 1. Toda persona acusada de delito tiene derecho a que se presuma su inocen-
cia mientras no se pruebe su culpabilidad, conforme a la ley y en juicio público
en el que se le hayan asegurado todas las garantías necesarias para su defensa. *
2. Nadie será condenado por actos u omisiones que en el momento de come-
terse no fueron delictivos según el Derecho nacional o internacional. Tampoco
se impondrá pena más grave que la aplicable en el momento de la comisión del
delito.
Artículo 12.
* Nadie será objeto de injerencias arbitrarias en su vida privada, su familia,
su domicilio o su correspondencia, ni de ataques a su honra o a su reputación.
Toda persona tiene derecho a la protección de la ley contra tales injerencias o
ataques.
Artículo 13.
* 1. Toda persona tiene derecho a circular libremente y a elegir su residencia
en el territorio de un Estado. * 2. Toda persona tiene derecho a salir de cualquier
país, incluso del propio, y a regresar a su país.
Artículo 14.
* 1. En caso de persecución, toda persona tiene derecho a buscar asilo, y
a disfrutar de él, en cualquier país. * 2. Este derecho no podrá ser invocado
contra una acción judicial realmente originada por delitos comunes o por actos
opuestos a los propósitos y principios de las Naciones Unidas.
Artículo 15.
70 Los derechos humanos

* 1. Toda persona tiene derecho a una nacionalidad. * 2. A nadie se privará


arbitrariamente de su nacionalidad ni del derecho a cambiar de nacionalidad.
Artículo 16.
* 1. Los hombres y las mujeres, a partir de la edad núbil, tienen derecho,
sin restricción alguna por motivos de raza, nacionalidad o religión, a casarse y
fundar una familia, y disfrutarán de iguales derechos en cuanto al matrimonio,
durante el matrimonio y en caso de disolución del matrimonio. * 2. Sólo
mediante libre y pleno consentimiento de los futuros esposos podrá contraerse
el matrimonio. * 3. La familia es el elemento natural y fundamental de la
sociedad y tiene derecho a la protección de la sociedad y del Estado.
Artículo 17.
* 1. Toda persona tiene derecho a la propiedad, individual y colectivamente.
* 2. Nadie será privado arbitrariamente de su propiedad.
Artículo 18.
* Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y
de religión; este derecho incluye la libertad de cambiar de religión o de creencia,
así como la libertad de manifestar su religión o su creencia, individual y colec-
tivamente, tanto en público como en privado, por la enseñanza, la práctica, el
culto y la observancia.
Artículo 19.
* Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este
derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investi-
gar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de
fronteras, por cualquier medio de expresión.
Artículo 20.
* 1. Toda persona tiene derecho a la libertad de reunión y de asociación
pacíficas. * 2. Nadie podrá ser obligado a pertenecer a una asociación.
Artículo 21.
* 1. Toda persona tiene derecho a participar en el gobierno de su país, direc-
tamente o por medio de representantes libremente escogidos. * 2. Toda persona
tiene el derecho de accceso, en condiciones de igualdad, a las funciones públicas
de su país. * 3. La voluntad del pueblo es la base de la autoridad del poder
público; esta voluntad se expresará mediante elecciones auténticas que habrán
de celebrarse periódicamente, por sufragio universal e igual y por voto secreto
u otro procedimiento equivalente que garantice la libertad del voto.
Artículo 22.
* Toda persona, como miembro de la sociedad, tiene derecho a la seguridad
social, y a obtener, mediante el esfuerzo nacional y la cooperación internacional,
habida cuenta de la organización y los recursos de cada Estado, la satisfacción
de los derechos económicos, sociales y culturales, indispensables a su dignidad y
al libre desarrollo de su personalidad.
71

Artículo 23.
* 1. Toda persona tiene derecho al trabajo, a la libre elección de su trabajo,
a condiciones equitativas y satisfactorias de trabajo y a la protección contra el
desempleo. * 2. Toda persona tiene derecho, sin discriminación alguna, a igual
salario por trabajo igual. * 3. Toda persona que trabaja tiene derecho a una
remuneración equitativa y satisfactoria, que le asegure, así como a su familia,
una existencia conforme a la dignidad humana y que será completada, en caso
necesario, por cualesquiera otros medios de protección social. * 4. Toda persona
tiene derecho a fundar sindicatos y a sindicarse para la defensa de sus intereses.
Artículo 24.
* Toda persona tiene derecho al descanso, al disfrute del tiempo libre, a
una limitación razonable de la duración del trabajo y a vacaciones periódicas
pagadas.
Artículo 25.
* 1. Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure,
así como a su familia, la salud y el bienestar, y en especial la alimentación, el
vestido, la vivienda, la asistencia médica y los servicios sociales necesarios; tiene
asimismo derecho a los seguros en caso de desempleo, enfermedad, invalidez,
viudez, vejez u otros casos de pérdida de sus medios de subsistencia por cir-
cunstancias independientes de su voluntad. * 2. La maternidad y la infancia
tienen derecho a cuidados y asistencia especiales. Todos los niños, nacidos de
matrimonio o fuera de matrimonio, tienen derecho a igual protección social.
Artículo 26.
* 1. Toda persona tiene derecho a la educación. La educación debe ser gra-
tuita, al menos en lo concerniente a la instrucción elemental y fundamental.
La instrucción elemental será obligatoria. La instrucción técnica y profesional
habrá de ser generalizada; el acceso a los estudios superiores será igual para to-
dos, en función de los méritos respectivos. * 2. La educación tendrá por objeto
el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento del respeto a
los derechos humanos y a las libertades fundamentales; favorecerá la compren-
sión, la tolerancia y la amistad entre todas las naciones y todos los grupos étnicos
o religiosos, y promoverá el desarrollo de las actividades de las Naciones Unidas
para el mantenimiento de la paz. * 3. Los padres tendrán derecho preferente a
escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos.
Artículo 27.
* 1. Toda persona tiene derecho a tomar parte libremente en la vida cultural
de la comunidad, a gozar de las artes y a participar en el progreso científico
y en los beneficios que de él resulten. * 2. Toda persona tiene derecho a la
protección de los intereses morales y materiales que le correspondan por razón
de las producciones científicas, literarias o artísticas de que sea autora.
Artículo 28.
72 Los derechos humanos

* Toda persona tiene derecho a que se establezca un orden social e interna-


cional en el que los derechos y libertades proclamados en esta Declaración se
hagan plenamente efectivos.
Artículo 29.
* 1. Toda persona tiene deberes respecto a la comunidad, puesto que sólo en
ella puede desarrollar libre y plenamente su personalidad. * 2. En el ejercicio
de sus derechos y en el disfrute de sus libertades, toda persona estará solamente
sujeta a las limitaciones establecidas por la ley con el único fin de asegurar el
reconocimiento y el respeto de los derechos y libertades de los demás, y de
satisfacer las justas exigencias de la moral, del orden público y del bienestar
general en una sociedad democrática. * 3. Estos derechos y libertades no podrán,
en ningún caso, ser ejercidos en oposición a los propósitos y principios de las
Naciones Unidas.
Artículo 30.
* Nada en esta Declaración podrá interpretarse en el sentido de que confiere
derecho alguno al Estado, a un grupo o a una persona, para emprender y desa-
rrollar actividades o realizar actos tendientes a la supresión de cualquiera de los
derechos y libertades proclamados en esta Declaración.

Conviene recordar
• Los derechos humanos son el conjunto de características que definen una
vida digna para las personas.

• Todos debemos respetar los derechos de los demás y exigir el respeto para
los nuestros.

• Ninguna persona debe hacer nada que lesiones los derechos humanos o
impida su ejercicio. Las leyes de todos los gobiernos deben hacerse de
acuerdo con los derechos humanos.

• Las decisiones políticas de los gobiernos deben respetar los derechos hu-
manos.

• Para cumplir mínimamente con la justicia los derechos humanos deben


respetarse en todas las sociedades.

Ejercicios de la lección
1. Explica cada uno de los derechos del 1 al 5.
73

2. Explica cada uno de los derechos del 6 al 10.

3. Explica cada una de los derechos del 11 al 16.

4. Explica cada uno de los derechos del 17 al 22. 5.

5. Explica cada uno de los derechos del 23 al 30.

6. Pon un ejemplo de violación de cada uno de los derechos del 1 al 5.

7. Pon un ejemplo de violación de los derechos del 6 al 10.

8. Pon un ejemplo de violación de cada uno de los derechos del 11 al 16.

9. Pon un ejemplo de violación de cada uno de los derechos del 17 al 22.

10. Pon un ejemplo de violación de cada uno de los derechos del 23 al 30.

11. Pon un ejemplo de cómo defender cada uno de los derechos del 1 al 5.

12. Pon un ejemplo de cómo defender cada uno de los derechos del 6 al 10.

13. Pon un ejemplo de cómo defender cada uno de los derechos de 11 al 16.

14. Pon un ejemplo de cómo defender cada uno de los derechos del 23 al 30.

Textos a comentar
1.El premio Nobel de economía, Friedrich Hayek, explica en su clásico Camino
de servidumbre cuál puede ser la relación entre libertad y seguridad.
Cuando, como en el caso de enfermedad y accidente, ni el deseo de
evitar tales calamidades ni los esfuerzos para superar sus consecuen-
cias son, como norma, debilitados por la provisión de asistencia,
donde, en breve, tratamos con riesgos genuinamente asegurables,
las razones para que el estado ayude a organizar un sistema de se-
guro social son muy fuertes. Hay muchos puntos de detalle donde
los que quieren preservar el sistema competitivo y los que quieren
abandonarlo por algo diferente discreparán sobre estos planes; y es
posible bajo el nombre de seguro social introducir medidas que tien-
dan a hacer la competencia más o menos inefectiva. Pero no hay
incompatibilidad en principio entre que el estado provea de mayor
seguridad de esta manera y la preservación de la libertad individual.
A la misma categoría pertenece también el aumento de la seguri-
dad a través de la asistencia prestada por el estado a las víctimas de
74 Los derechos humanos

tales actos de Dios como terremotos e inundaciones. Allá donde la


acción comunitaria pueda mitigar desastres contra los cuales el indi-
viduo no puede ni intentar protegerse ni tomar medidas contra sus
consecuencias, tal acción comunitaria debería indudablemente ser
emprendida.
2. El filósofo inglés del siglo XVII John Locke, padre del liberalismo político,
escribe en su obra Segundo tratado sobre el gobierno civil acerca de la relación
entre derechos, individuos y estado:
El hombre, por cuanto nacido, como se demostró, con título a
la perfecta libertad y no sofrenado goce de todos los derechos y
privilegios de la ley de naturaleza, al igual que otro cualquier se-
mejante suyo o número de ellos en el haz de la tierra, posee por
naturaleza el poder no sólo de preservar su propiedad, esto es, su
vida, libertad y hacienda, contra los agravios y pretensiones de los
demás hombres, sino también de juzgar y castigar en los demás las
infracciones de dicha ley, según estimare que el agravio merece, y
aun con la misma muerte, en crímenes en que la odiosidad del he-
cho, en su opinión, lo requiriere. Mas no pudiendo sociedad política
alguna existir ni subsistir como no contenga el poder de preservar
la propiedad; y en orden a ello castigue los delitos de cuantos a tal
sociedad pertenecieren, en este punto, y en él sólo, será sociedad
política aquella en que cada uno de los miembros haya abandonado
su poder natural, abdicando de él en manos de la comunidad para
todos los casos que no excluyan el llamamiento a la protección legal
que la sociedad estableciera. Y así, dejado a un lado todo particular
juicio de cada miembro particular, la comunidad viene a ser árbitro;
y mediante leyes comprensivas e imparciales y hombres autorizados
por la comunidad para su ejecución, decide todas las diferencias que
acaecer pudieren entre los miembros de aquella compañía en lo to-
cante a cualquier materia de derecho, y castiga las ofensas que cada
miembro haya cometido contra la sociedad, según las penas fijadas
por la ley; por lo cual es fácil discernir quiénes están, y quiénes
no, unidos en sociedad política. Los que se hallaren unidos en un
cuerpo, y tuvieren ley común y judicatura establecida a quienes
apelar, con autoridad para decidir en las contiendas entre ellos y
castigar a los ofensores, estarán entre ellos en sociedad civil; pero
quienes no gozan de tal común apelación, quiero decir en la tierra,
se hallan todavía en el prístino estado natural, donde cada uno es, a
falta de otro, juez por sí mismo y ejecutor; que así se perfila, como
antes mostré, el perfecto estado de naturaleza. 88. Y de esta suerte la
75

nación consigue el poder de fijar qué castigó corresponderá a las di-


versas transgresiones que fueren estimadas sancionables, cometidas
contra los miembros de aquella sociedad (lo cual es el poder legisla-
tivo), así como tendrá el poder de castigar cualquier agravio hecho
a uno de sus miembros por quien no lo fuere (o sea el poder de paz
y guerra); y todo ello para la preservación de la propiedad de los
miembros todos de la sociedad referida, hasta el límite posible. Pero
dado que cada hombre ingresado en sociedad abandonara su poder
de castigar las ofensas contra la ley de naturaleza en seguimiento de
particular juicio, también, además del juicio de ofensas por él aban-
donado al legislativo en cuantos casos pudiere apelar al magistrado,
cedió al conjunto el derecho de emplear su fuerza en la ejecución de
fallos de la república; siempre que a ello fuere llamado, pues esos,
en realidad, juicios suyos son, bien por él mismo formulados o por
quien le representare. Y aquí tenemos los orígenes del poder legis-
lativo y ejecutivo en la sociedad civil, esto es, el juicio según leyes
permanentes de hasta qué punto las ofensas serán castigadas cuando
fueren en la nación cometidas; y, también, por juicios ocasionales,
fundados en circunstancias presentes del hecho, hasta qué punto los
agravios procedentes del exterior deberán ser vindicados; y en uno
como en otro caso emplear, si ello fuere menester, toda la fuerza de
todos los miembros.
76 Los derechos humanos
Lección10

Las generaciones de derechos

Identificación de las principales etapas en la conquista de los derechos


humanos y valoración de las nuevas reivindicaciones, tercera generación
de derechos.

¿Para qué sirve esta lección


Para aprender qué nuevos derechos podemos exigir y debemos respetar.

¿Por qué es importante todo esto?


Porque los derechos son una herramienta importante para conseguir la felici-
dad. Son un criterio para que la sociedad esté ordenada lo mejor posible para
conseguir la felicidad individual y social.
Tenemos que saber cuáles son, para saber qué podemos exigir, para saber qué
debemos respetar.

¿De qué se trata?


Desde que se empezó a pensar que existen derechos, surgieron nuevos tipos de
derechos. Saber eso es bueno para entender por qué aparecen los derechos y
cómo podemos garantizarlos.
78 Las generaciones de derechos

¿Qué necesitamos?
Necesitamos una armonización de los derechos políticos, civiles y económicos
(por no decir ambientales, etc.) Un problema relacionado es cómo justificar los
derechos de un modo iusnaturalista y al mismo tiempo hablar de su oposición
o incluso de su extensión en el tiempo. ¿Es mejor decir que son una ley positiva
descubierta y aplicada de forma utilitarista? Los derechos entendidos de un
modo utilitarista presentan un problema y es cómo justificar su aplicación a
todos los seres humanos, incluso a los que no los reconocen en su sociedad
o los que no tienen estructuras jurídicas como tales. Tampoco ayuda mucho
Rawls. ¿Por qué íbamos a ponernos en la situación original y aceptar el velo de
ignorancia cuando sabemos perfectamente cómo van las cosas?

¿Qué dicen los filósofos?


Los liberales presentan una oposición entre algunos de los derechos, que nace de
que consideran inalienable y probablemente absoluto el derecho a la propiedad.
La tradición liberal no reconoce derechos económicos, justamente porque los
cree contrarios a los políticos y civiles que sí acepta. La tradición socialdemó-
crata se acerca peligrosamente o desciende del marxismo. Con respecto a al dis-
puta entre el liberalismo y la socialdemocracia podemos dejar claro que existen
los derechos económicos y que lo que podemos tener claro es:
1. Que el capitalismo es la mejor fuente de riqueza por lo que su funciona-
miento debe ser preservado.
2. Que se trata de preservar los derechos de hacerlo de un modo u otro. Por
ejemplo, si el derecho a la salud puede garantizarse mejor con un sistema
privado de seguridad social, ¿por qué obstinarse con un sistema público?
Realmente hay que dejar de lado la paranoia anti-socialdemócrata, que puede
estar inspirada por el argumento de Hayek sobre el socialismo de la economía
centralizada. Eso no es la opción hoy. Se puede decir que la exigencia de los dos
tipos de derechos es la mejor de las garantías contra el totalitarismo, porque van
contra la depauperación que es (fue) una de las bases del fascismo/comunismo.
Pasa igual con la generación tercera, no pueden ser derechos absolutos, hay que
cohonestarlos con los demás.

¿Qué podemos pensar?


A veces es necesario disponer las cosas de forma inteligente para que los derechos
no colisionen. Si los derechos son un marco para la mejora de la vida, está claro
79

que a medida que avancen las posibilidades materiales y la conciencia moral los
derechos pueden ampliarse. Cuando el gobierno no era elegido por el pueblo,
los derechos eran salvaguardias. En la actualidad son reglas para dirigir el trabajo
de los gobiernos. Siguen siendo también salvaguardias contra la extralimitación
de los gobiernos.
El problema con las generación de derechos es que, pidiendo todo lo de-
seable, podemos llegar a pedir cosas que son incompatibles, o por lo menos que
sólo podemos conseguir de un modo difícilmente conciliable. Quizá hay que re-
conocer que el capítulo de las generaciones de derechos es excesivo. Los derechos
humanos son las mejores condiciones posibles garantizables socialmente para la
vida humana. Claro que hay otras condiciones que no se pueden garantizar por
la comunidad. Por eso a medida que los derechos humanos están relacionados
con el avance material de la sociedad. Los derechos humanos van renovándose a
medida que cambian las circunstancias de la sociedad. En el pasado no era nece-
sario defender el derecho porque no se podía garantizar materialmente o porque
nada nos privaba de él. Los derechos avanzan a medida que avanza la conciencia
moral, esto es, el progreso.
El concepto de derecho civil nace en el pasado contra los abusos de los reyes.
Los defensores de la libertad individual pretendieron fijar unos límites a lo que el
poder del rey podía hacer legalmente. Así aparecieron los conceptos de habeas
corpus, libertad de prensa, de expresión, de conciencia, etc. Posteriormente
aparece la defensa de los derechos políticos, cuando la democracia substitúe a
la monarquía absoluta. Se trata de defender el derecho de los ciudadanos a la
participación en el gobierno del estado. Por otro lado, con el avance del capita-
lismo surge la necesidad de garantizar un nivel económico mínimo a todos los
trabajadores. Aparecen así el subsidio de desempleo, la seguridad social, etc.,
derechos llamados económicos.
Hoy, en nuestra sociedad postindustrial, aparecen nuevas demandas vincu-
ladas por ejemplo al derecho de preservación de la naturaleza o las invenciones
nuevas (derecho a la privacidad, frente a las invasiones de la tecnología infor-
mática, etc.) Históricamente, los derechos nacen como restricciones de los no-
bles contra el rey, y al principio estaban sostenidos por la fuerza de los nobles
o la amenaza de rebelión (ejemplo inglés). Cuando los derechos se generalizan,
esto se hace previa destrucción de la monarquía. El nuevo gobierno republi-
cano nace justamente para defender esos derechos generalizados. Pero frente a
la tendencia del gobierno a excederse en su actividad, los derechos pueden ser
invocados por el individuo.
Otra presentación es necesaria para los derechos sociales, justamente la exi-
gencia de ellos es la principal razón de que el estado pueda ampliar sus activi-
dades. Por un lado, pedimos al estado que nos garantice tales o cuales elementos,
económicos de seguridad, etc., y por otra somos sensibles a las restricciones de
80 Las generaciones de derechos

nuestra conducta que el estado debe hacer en busca de sus objetivos. Proba-
blemente es triste que nuestros derechos resulten contradictorios en la práctica,
pero es lo que hay.

Algunas definiciones
Un derecho es una conducta que se nos debe. Un deber es una conducta que nos
pueden reclamar. Un deber es algo que nosotros debemos hacer por los demás.
Un derecho es algo que los demás deben hacer por nosotros. El derecho es una
restricción de la conducta de los demás, ya en el sentido de abstención de hacer
algo, o como obligación para hacerlo.

Conviene recordar
• Se llaman derechos civiles y políticos a los que protegen al individuo con-
tra los abusos del gobierno y permiten que los ciudadanos controlen a los
gobernantes.

• Son derechos civiles el habeas corpus, la libertad de prensa, de asociación,


de reunión, la libertad de culto y el sufragio universal, libre y secreto.

• Se llaman derechos socio-económicos los que procuran garantizar unas


condiciones económicas para todos, independientemente de su situación
laboral.

• Son derechos socio-económicos el seguro médico, las pensiones de jubi-


lación, el seguro de desempleo, etc.

• En la actualidad se llaman derechos de tercera generación a los que em-


piezan a demandarse para compensar los problemas surgidos del progreso
tecnológico.

• Son derechos de tercera generación el derecho a la conservación del medio


ambiente, el derecho a la protección contra las invasiones tecnológicas de
la vida privada, etc.

Ejercicios de la lección
1. ¿Qué es un derecho?

2. ¿Qué es un deber?
81

3. Explica la frase un derecho es una conducta que se nos debe.

4. Explica la frase el deber es el correlato del derecho.

5. ¿Qué son los derechos civiles?

6. ¿Qué son los derechos políticos?

7. ¿En qué sentido los derechos civiles y políticos son un freno para el go-
bierno?

8. ¿Cuáles son los derechos socioeconómicos?

9. ¿En qué sentido los derechos socioeconómicos pueden colisionar con los
derechos civiles o políticos?

10. ¿Qué significa ningún derecho es absoluto?

11. ¿Cuáles son los llamados derechos de tercera generación?

12. ¿En qué sentido los derechos de tercera generación son controvertidos?

Textos a comentar
1. John Locke explica en su obra Segundo tratado sobre el gobierno civil por qué
las monarquías absolutas no respetan los derechos:

Porque entendiéndose que él reúne en sí todos los poderes, el legis-


lativo y el ejecutivo, en su persona sola, no es posible hallar juez, ni
está abierta la apelación a otro ninguno que pueda justa, imparcial-
mente y con autoridad decidir, y de quien alivio y enderezamiento
pueda resultar a cualquier agravio o inconveniencia causada por el
príncipe, o por su orden sufrida. De modo que tal hombre, como
queráis que se le tilde, Zar o Gran Señor, o como gustareis, se halla
en el estado de naturaleza, con todos aquellos a quienes abarcare su
dominio, del propio modo que está en él por lo que se refiere al
resto dé la humanidad. Porque dondequiera que se vieren dos hom-
bres sin ley permanente y juez común a quien apelar en la tierra,
para la determinación de controversias de derecho entre ellos, se en-
contrarán los tales todavía en estado de naturaleza y bajo todos los
inconvenientes de él: con sólo esta lastimosa diferencia para el súb-
dito, o mejor dicho, esclavo, del príncipe absoluto: que mientras
en el estado ordinario de naturaleza, goza de libertad para juzgar
82 Las generaciones de derechos

de su derecho, según el máximo de su fuerza para mantenerlo, en


cambio, cuando su propiedad es invadida por el albedrío y mandato
de su monarca, no sólo no tiene a quién apelar, como los que se
hallaren en sociedad deberían tener, sino que, como degradado del
estado común de las criaturas racionales, se ve negada la libertad de
juzgar del derecho propio y de defenderle, y así está expuesto a toda
la infelicidad e inconveniente que pueda temer el hombre de quien,
persistiendo en el no sofrenado estado de naturaleza, se halla, em-
pero, corrompido por la adulación y armado de poder.
2. En su obra Sobre la libertad el filósofo inglés del siglo XIX, John Stuart Mill,
explica cuáles son los límites de la intervención del estado:
De hecho, se puede decir que no existe un principio reconocido para
establecer de modo usual la propiedad o impropiedad de la interfe-
rencia del gobierno. Se decide en este punto según las preferencias
personales. Hay quienes, en cuanto ven un bien por hacer o un mal
que remediar, desearían que el gobierno se hiciese cargo de la em-
presa, mientras que otros preferirían soportar toda clase de abusos
sociales, antes de añadir cosa alguna a las atribuciones del gobierno.
Los hombres se inclinan a un partido u otro, en cada caso particular,
siguiendo la dirección general de sus sentimientos, o según el grado
de interés que tengan en aquello que se proponen que el gobierno
haga, o según su propia persuasión de que el gobierno hará o no
hará la gestión del modo que ellos prefieren. Pero muy rara vez de-
cidirán, con opinión reflexiva y reposada, sobre las cosas adecuadas a
ser acometidas por el gobierno. Creo también que hoy día, a conse-
cuencia de esta falta de regla o principio, un partido puede cometer
tantos errores como otro cualquiera. Con igual frecuencia se con-
dena impropiamente y se invoca impropiamente la interferencia del
gobierno. El objeto de este ensayo es el de proclamar un principio
muy sencillo encaminado a regir de modo absoluto la conducta de la
sociedad en relación con el individuo, en todo aquello que sea obli-
gación o control, bien se aplique la fuerza física, en forma de penas
legales, o la coacción moral de la opinión pública. Tal principio es
el siguiente: el único objeto, que autoriza a los hombres, individual
o colectivamente, a turbar la libertad de acción de cualquiera de sus
semejantes, es la propia defensa; la única razón legítima para usar
de la fuerza contra un miembro de una comunidad civilizada es la
de impedirle perjudicar a otros; pero el bien de este individuo, sea
físico, sea moral, no es razón suficiente. Ningún hombre puede, en
buena lid, ser obligado a actuar o a abstenerse de hacerlo, porque de
83

esa actuación o abstención haya de derivarse un bien para él, porque


ello le ha de hacer más dichoso, o porque, en opinión de los demás,
hacerlo sea prudente o justo. Éstas son buenas razones para discutir
con él, para convencerle, o para suplicarle, pero no para obligarle o
causarle daño alguno, si obra de modo diferente a nuestros deseos.
Para que esta coacción fuese justificable, sería necesario que la con-
ducta de este hombre tuviese por objeto el perjuicio de otro. Para
aquello que no le atañe más que a él, su independencia es, de hecho,
absoluta. Sobre sí mismo, sobre su cuerpo y su espíritu, el individuo
es soberano.
84 Las generaciones de derechos
Lección11

La defensa de nuestros derechos

Implicación en la defensa efectiva de los derechos humanos. Identifi-


cación y rechazo de las actitudes de intolerancia, injusticia y exclusión.

¿Para qué sirve esta lección


Para aprender cómo defender los derechos de todos.

¿Y por qué es importante todo esto?


Porque si esos derechos se cumplen, todos podremos vivir mejor. Los derechos
humanos definen una sociedad en la que nos gustaría vivir, independientemente
de nuestras circunstancias personales (Rawls).
Se trata de entender que lo que hay que defender es una estructura justa para
todos y que eso significa precisamente no defender supuestos derechos como un
lobby egoísta, sino defender la sociedad que nos gustaría para todos. Lo primero
que debemos pensar entonces es qué condiciones concretas queremos para esa
sociedad ideal. La idea de Kant era convertir en un deber personal todo lo que
desearíamos que fuese una norma universal. La idea de Rawls vale también.
Imaginemos que no sabemos cuáles son nuestras condiciones, si somos hombres
o mujeres, blancos o negros, ricos o pobres. ¿Qué sociedad construiríamos para
que, fuese cual fuese nuestra realidad, pudiéramos vivir felices?
86 La defensa de nuestros derechos

¿De qué se trata?


A veces los derechos humanos no se respetan porque no conviene a los poderosos.
Hay que saber defenderlos. Ésta es una cuestión más bien práctica. La idea de
que los derechos van ampliándose puede llevarnos a la idea de que son inventos.
¿Cómo es que no estaban claros los derechos siempre?
Por otro lado parece que las generaciones son «tipos» diferentes. ¿Son tipos
coherentes? ¿No será posible que sean contradictorios? Alguien podría decir
que no es muy relevante que sean contradictorios. ¿Por que no habían de serlo?
Si los derechos son descripciones de vida ideal el problema será modificar la
realidad para que sea coherente. La supuesta contradicción nunca sería lógica
sino material, y probablemente hay que afirmar que no existe tal cosa como
una contradicción material. El problema es de ingeniería social, económica, etc.
Para entender que los derechos aumentan a medida que el ser humano inventa
cosas nuevas.

¿Qué podemos pensar?


hablar de los tribunales sindicatos asociaciones de vecinos asociaciones de otro
tipo ONG de derechos humanos asociaciones de consumidores protestar por
canales administrativas la publicidad como medio de protesta eludir todo ánimo
querulante evitar el egoísmo hablar del límite en la defensa: la ley y el diálogo
como medio de defensa de los derechos hablar de la necesidad de ceder a veces
nuestro derecho consenso/dialéctica social: convivencia. derecho y deber están
unidos. La tarea de promover y defender los derechos humanos es individual,
social y política. Hay que hablar del sistema judicial democrático como medio
de hacer prevalecer los derechos humanos en la sociedad.

Algunas definiciones
La defensa de los derechos humanos tiene una dimensión política, otra civil y
otra judicial, otra ética y otra ideológica. Defendemos los derechos humanos
ideológicamente si los conocemos y sabemos por qué son importantes. Defen-
demos los derechos humanos éticamente si en los comportamos de forma que
nunca perjudiquemos los derechos de nadie. Defendemos los derechos humanos
civilmente se apoyamos las organizaciones que los defienden. Informándonos
de en que lugares del mundo se producen violaciones de los derechos humanos.
Defendemos los derechos humanos judicialmente si acudimos a los tribunales
para exigir su cumplimiento o denunciar su violación. Defendemos los dere-
87

chos humanos políticamente cuando exigimos a los representantes políticos que


los defiendan.

¿Qué debemos hacer?


La defensa de los derechos humanos es una tarea de todos. ¿Cómo podemos
colaborar nosotros?

1. Aprendiendo que son los derechos humanos y porque son importantes.

2. Procurando tener argumentos propios en defensa de los derechos humanos.

3. Apoyando a las organizaciones que vigilan su cumplimiento.

4. Exigiendo de nuestros gobiernos el respeto a los derechos humanos y que


presionen (quitar presionen y poner demanden, soliciten, exijan) a los
gobiernos extranjeros en el mesmo sentido. (Advertir que no se debe
utilizar el apoyo a los derechos humanos como excusa para intervenciones
militares.)

5. Debemos conocer las medidas de defensa de los nuestros derechos y tam-


bién los medios de promover los derechos humanos en los países en los
que no se respetan.

Conviene recordar
• Todos podemos y debemos colaborar en la defensa de los derechos hu-
manos.

• Para defender los derechos humanos tenemos que saber cales son y por
que son importantes.

• Debemos exigir a nuestro gobierno y a los gobiernos extranjeros que res-


peten y favorezcan los derechos humanos.

• Las actitudes de intolerancia, injusticia y exclusión producen violaciones


de los derechos humanos, por lo que debemos rechazarlas.
88 La defensa de nuestros derechos

Ejercicios de la lección
1. ¿Por qué la defensa de los derechos humanos es tarea de todos?

2. ¿Qué son los derechos humanos?

3. ¿Por qué son importantes los derechos humanos?

4. ¿Qué dos argumentos emplearías para defender los derechos humanos?

5. ¿Cómo podemos apoyar las organizaciones que vigilan por el cumpli-


miento de los derechos humanos?

6. ¿Cómo podemos exigir a nuestro gobierno el cumplimiento de los dere-


chos humanos?

Textos a comentar
1. Alexis de Tocqueville viajó en 1831, cuando tenía 22 años, a los Estados
Unidos de América, que entonces era un de los pocos países democráticos del
mundo. A la vuelta escribió De la democratie en Amérique, uno de los clásicos
del pensamento liberal. En este fragmento habla de las asociaciones como medio
de defender los derechos de los ciudadanos.

Está claro que, si cada ciudadano, la medida que se vuelve indivi-


dualmente más débil, y por consecuencia más incapaz de preservar
aisladamente la su libertad, no aprendiera el arte de unirse a sus se-
mejantes para defenderla, la tiranía crecería necesariamente con la
igualdad. No se trata aquí si no de las asociaciones que se forman
en la vida civil y cuyo obxecto no tiene nada de política. Las aso-
ciaciones políticas que existen en los Estados Unidos no forman si
no un detalle en medio del inmenso cuadro que el conjunto de las
asociaciones presenta. Los americanos de todas las edades, de to-
das las condiciones, de todas las inteligencias, se unen sin cesar. no
sólo tienen asociaciones comerciales y industriales en las que todos
toman parte, más tienen aún mil otros tipos: religiosas, morales,
graves, triviales, muy generales y muy particulares, inmensas y muy
pequenas; los americanos se asocian para dar fiestas, fundar semi-
narios, construir albergues, erigir iglesias, difundir libros, mandar
misioneros a las antípodas; ellos crean de esta manera hospitales,
prisiones, escuelas. Si se trata en fin de sacar a la luz una verdad o de
desarrollar un sentimiento por el apoyo de un gran ejemplo, ellos
89

se asocian. Por todos los sitios donde, a la cabeza de una nueva em-
presa, vedes en Francia el goberno, y en Inglaterra a un gran señor,
contad con que en los Estados Unidos veréis una asociación.

2. John Locke explica en su obra Segundo tratado sobre el gobierno civil la natu-
raleza del pacto social:

En segundo lugar, el poder político es el que cada hombre poseyera


en el estado de naturaleza y rindiera a manos de la sociedad, y por
tanto de los gobernantes que la sociedad hubiere sobre sí encum-
brado; y ello con el tácito o expreso cargo de confianza de que di-
cho poder sería empleado para el bien de los cesionarios y la preser-
vación de su propiedad. Ahora bien, este poder, que tiene cada hom-
bre en estado de naturaleza y que entrega a la sociedad en cuanto de
ella pueda cobrar aseguramiento, era para usar, mirando a la preser-
vación de su propiedad, los medios que tuviera por válidos y la natu-
raleza le consintiera; y para castigar en otros hombres la afrenta a la
ley de naturaleza del modo (según su mejor entendimiento) más ade-
cuado para la preservación de sí mismo y del resto de la humanidad;
de suerte que siendo fin y medida de este poder, cuando en estado
de naturaleza se halla en las manos de cada quien, la preservación
de cuántos participaren de su estado -esto es, de la humanidad en
general- no tendrá el poder transmitido a manos del magistrado más
fin ni medida que la preservación de los miembros de dicha sociedad
en sus vidas, libertades y posesiones, por lo que no ha de ser poder
arbitrario, absoluto sobre sus vidas y fortuna, las cuales hasta el úl-
timo posible extremo deberán ser preservadas, sino poder de hacer
leyes y anexarles penas mirando a la preservación del conjunto, por
segregación de aquellas partes, y sólo de aquéllas, ya tan corrompi-
das que amenazaban al bueno y sano: sin cuyas condiciones ninguna
severidad fuera lícita. Y este poder tiene su venero sólo en el pacto
y acuerdo y el consentimiento mutuo de quienes constituyen la co-
munidad.
90 La defensa de nuestros derechos
Lección12

La discriminación

Evaluación de la discriminación positiva desde la perspectiva de las ex-


igencias de la justicia y la igualdad de derechos y oportunidades.

¿Para qué sirve esta lección


Para aprender qué es la discriminación y porque es mala y debemos combatirla.
Para saber cómo evitar practicar y sufrir la discriminación.

¿Por qué es importante todo eso?


Porque todos podemos ser objeto de discriminación y todos podemos llegar la
discriminar a alguien. Todos podemos ser víctimas. La discriminación puede
hacer que la sociedad funcione peor. Puede causar sufrimientos a las personas.

¿De qué se trata?


La discriminación es causa de sufrimiento para mucha gente. Tenemos que
aprender a evitarla.
Quizá hay algo en nuestros genes que nos impulsa a procurar acercarnos a
las personas semejantes con las que probablemente la colaboración es más fácil
y los conflictos más raros. Pero ya no somos animales y el miedo al diferente
no tiene porque dominarnos. La moral debe suponer un juicio de los actos y no
de las personas. Hay actos buenos y malos e indiferentes, pero nadie es sempre
malo ni siempre bueno. Y mucho menos podemos creer que exista un grupo de
92 La discriminación

personas muy grande, un país, una religión, unas características físicas asociadas
permanentemente con la maldad. Lo malo de la discriminación es que con su
juicio apurado, da paso a la enemistad.

¿Qué problemas prácticos hay?


Que en muchos países la discriminación aún es practicada y lamentablemente
consagrada en las leyes.

¿Qué necesitamos?
Un juicio claro sobre la discriminación positiva. Una teoría que justifique la
igualdad y la dignidad humana por encima de las obvias diferencias. Los pro-
blemas son los mismos que tiene la justificación de los derechos humanos. No
acudir a la creencia en Dios y está claro que tampoco al positivismo.

¿Qué podemos pensar?


Sus partidarios reconocen que las medidas que proponen son injustas y van
contar la igualdad de derechos, pero para ellos es más importante que se consiga
una situación de completa equidad en la sociedad, que el respeto a los derechos
individuales y a la justicia. Aquí se puede hablar de la antítesis entre derecho,
entendido como extensión de la libertad y el concepto de igualdad.
Hablar también de las consecuencias prácticas de la política de cuotas: menos-
precio de la persona, discriminada positivamente y riesgo de promoción de la
incapacidad. La discriminación positiva como contrapuesta a la sociedad ciega
para los colores. La igualdad de derechos es necesaria. La igualdad material es
deseable y probablemente sería una consecuencia de la igualdad de derechos,
pero en la discriminación positiva choca.

Algunas definiciones
Discriminar es tratar mal a las personas que son diferentes por el simple he-
cho de serlo. Naturalmente la discriminación es mala, porque viola la necesaria
igualdad de derechos y dignidad entre los seres humanos. Sin embargo, si enten-
demos el concepto de igualdad como igualdad de hecho (por ejemplo, igualdad
de ingresos), muchas veces comprobamos que sería necesario tratar mejor que a
los demás a las personas que pertenecen la grupos tradicionalmente perjudica-
dos para así compensar su atraso. Esta práctica se conoce como discriminación
93

positiva. La discriminación positiva consiste en tratar mejor a la gente que lo


necesita más.

Conviene recordar
• Discriminar es tratar mal a las personas diferentes por el simple hecho de
serlo.

• La discriminación es mala porque viola la igualdad de derechos y dignidad


entre los seres humanos.

• Se llama discriminación positiva a la práctica de tratar mejor que a los


demás las personas que pertenecen la grupos históricamente perjudicados.

• La discriminación positiva intenta compensar situaciones malas que se


mantienen desde hay mucho tempo.

• La discriminación positiva recibe críticas por ser una forma de discrimi-


nación e ir contra la igualdad.

Exercicios de la lección
Textos a comentar
1. El antropólogo Marvin Harris habla de las diferencias físicas entre las per-
sonas en su obra Nuestra especie:

Los rasgos con que determinamos si una persona es caucasoide, ne-


groide, mongoloide, etc., son las partes blandas y superficiales del
cuerpo. Los labios, narices, pelo, ojos y piel no se fosilizan. Al
mismo tiempo, las partes duras, que sí se conservan, no son fiables
como indicadores raciales porque las dimensiones de los esqueletos
de todas las razas coinciden en su mayor parte. Pero hay todavía un
problema más grave a la hora de determinar cuánto tiempo llevan
existiendo las razas. Los genes que determinan las características
utilizadas para definir las razas contemporáneas no forman nece-
sariamente conjuntos de rasgos hereditarios que se den siempre jun-
tos. Las variantes de color de la piel, forma del pelo, tamaño de los
labios, anchura de la nariz, pliegues epicánticos, etc., se pueden com-
binar y heredar independientemente unas de las otras. Esto significa
94 La discriminación

que los rasgos que van asociados en la actualidad no tuvieron que es-
tar necesariamente asociados en el pasado o existir siquiera entre las
poblaciones de las que descienden los grupos raciales actuales. Aún
hoy, existen en el mundo tantas combinaciones diferentes de rasgos
raciales que la simple clasificación en cuatro o cinco tipos princi-
pales no basta para hacerles justicia. En el norte de Africa viven
millones de personas que tienen labios delgados, nariz fina y pelo
ondulado, pero con una tez que va del moreno oscuro al negro. Los
nativos de África meridional, como los san, tienen ojos con pliegue
epicántico igual que la mayor parte de los asiáticos, tez variable en-
tre el moreno claro y el moreno oscuro y pelo muy rizado. En la
India existen personas con pelo liso u ondulado, tez morena oscura
a negra, labios delgados y nariz fina. En las estepas de Asia central,
los pliegues epicánticos están asociados a cabello ondulado, consi-
derable pilosidad facial y corporal y tez clara. Los indonesios pre-
sentan muy frecuentemente pliegues epicánticos, tez entre moreno
claro y oscuro, pelo ondulado y nariz y labios gruesos. Los habi-
tantes de las islas de Oceanía presentan combinaciones que van del
moreno al negro en cuanto a tez, con formas y cantidades de pelo y
rasgos raciales sumamente variables. Los ainos del norte del Japón
presentan una interesante combinación de rasgos: de piel clara y ce-
jas espesas, son el pueblo más velludo del mundo. En Australia es
común tener tez variable entre el pálido y el moreno oscuro y pelo
ondulado de color rubio a castaño.

2. Marvin Harris discute las ideas racistas en Nuestra especie:

La carga del racismo resulta más pesada para quienes sufren el des-
precio de sus supuestos superiores. Pero el precio lo pagan tanto
los vejadores como los vejados. Cuando un pueblo empieza a creer
que el color de la piel o la forma de la nariz garantizan su futura
preeminencia, está generalmente contribuyendo a cavar su propia
tumba. Me pregunto, por ejemplo, en qué medida la humillación
sufrida por el comercio y la industria estadounidense a manos de
los competidores japoneses no se debe al orgullo racial. En la dé-
cada de 1930, los estadounidenses consideraban que los japoneses
fabricaban juguetes baratos, abanicos de papel y relojes cuyos re-
sortes se rompían al darles cuerda por primera vez. Los ingenieros
estadounidenses afirmaban con soberbia que, por mucho que se es-
forzasen los japoneses, nunca podrían alcanzar a las superpotencias
y especialmente a los Estados Unidos. Carecían de esa cualidad
95

innata, especial, que los estadounidenses denominan «ingenio yan-


qui». ¡Con qué seriedad afirmaban los Julio César de la industria
estadounidense que el Japón sólo podía fabricar imitaciones! Nadie
que estuviese en su sano juicio podía imaginar que en cincuenta años
las importaciones de automóviles japoneses pondrían de rodillas a
Detroit y que los microscopios, cámaras, relojes digitales, calculado-
ras, aparatos de televisión y de vídeo, y docenas de otros productos
de consumo fabricados en el Japón dominarían el mercado de los Es-
tados Unidos. Impertérritos ante estos vuelcos, muchos creen que
el África negra constituye una excepción, condenada por su heren-
cia genética al atraso perpetuo. Irónicamente, los japoneses pien-
san de modo parecido (en cierta ocasión, el primer ministro japonés
atribuyó públicamente la decadencia de los Estados Unidos a la pres-
encia de demasiados individuos de linaje africano). El África subsa-
hariana ¿carece en cierta manera de aptitud para crear unos Estados
Unidos o un Japón? Teniendo en cuenta que con frecuencia quienes
están más atrasados en un período adelantan más que nadie en el
siguiente, no creo que los factores raciales merezcan ser considera-
dos seriamente como explicación de la difícil situación de África.
Por lo menos, no hasta que se hayan explorado por completo las
razones históricas del lento ritmo de desarrollo del continente.
96 La discriminación
Part III

La democracia y la participación:
las instituciones democráticas
Lección13

La democracia

Conceptualización de la noción de democracia.

¿Para qué sirve esta lección


Para aprender que es la democracia y porque es buena y debemos apoyar su
funcionamento.

¿Por qué es importante todo esto?


Porque la democracia es buena para la organización de la sociedad y si ésta fun-
ciona bien será mejor para todos. Porque es el mejor sistema de gobierno inven-
tado por el ser humano, es inestable si no es protegido por los ciudadanos. Para
ayudar la que funcione mejor.

¿De qué se trata?


La democracia es el mejor sistema de organización social inventado por el ser
humano. Tenemos que aprender cómo funciona y que podemos hacer nosotros
para colaborar.
El control del estado era de las oligarquías, de todos modos el estado siem-
pre tuvo una parte asistencial. La democracia como sistema de deliberación
(y Habermas, como referente). En el pasado los estados eran organizaciones
violentas que dominaban y explotaban al pueblo en beneficio de una minoría.
100 La democracia

hablar contra el sectarismo que no aparezca nunca la palabra pueblo y sí la pal-


abra ciudadanía. ¿qué es un estado? deliberación como base de la democracia
democracia no es lucha de todos contra todos. nada de sacralizarla, simplemente
forma parte de una precondición de la felicidad.
Hay que dejar claro que de nada sirve el poder de elegir si lo que elegimos
es malo. Si nuestra decisión es catastrófica, mejor hubiera sido ser gobernados
por un autócrata benévolo e inteligente. Por tanto el esfuerzo de unos ciu-
dadanos conscientes debe ponerse en tomar las decisiones políticas adecuadas.
La política no debe ser un medio personal de enriquecimiento o de conseguir
poder. El poder debe ser sólo una herramienta para hacer las cosas que consi-
deramos buenas, no un fin en sí mesmo. Una sociedad es un grupo numeroso
de personas que viven juntas y comparten tradiciones y costumbres, trabajo, in-
tereses y poden comunicarse con facilidad (no poner tradiciones ni nada, definir
la sociedad de un forma funcionalista) Un estado es una organización racional
de la sociedad (tradicionalmente era una concepción patrimonial) la definición
weberiana es irracional porque olvida la dimensión asistencial del estado. En el
se trata de adoptar una definición ultraindividualista, atomista, en la sociedad
debe haber un mínimo razonable de valores compartidos. Hay, por otro lado
una burbuja de privacidad en la que cada un puede hacer el que quiera.

¿Qué problemas prácticos hay?


Que se implante la democracia en todos los países del mundo que aún no la
tienen y que funcione bien en todos, también en los que la tienen. El problema
es que funcione, es decir, ver se corresponde en la realidad con su concepto, una
vez que en principio parece que el su concepto funcione. Es decir, se trata de
problemas prácticos. Por ejemplo como hacer que la democracia no degenere
en partitocracia, evitar la corrupción, evitar el intervencionismo excesivo, evitar
que la democracia participativa degenere en democracia de lobbies y en lucha de
intereses de poder. Hay que contestar a la pregunta ¿qué tiene que ver conmigo
la política?

¿Qué podemos pensar?


A lo largo de la historia el tamaño de los estados dependía de las conquistas o
de los matrimonios de los reyes. Predominaba la concepción patrimonial del
territorio. Los países eran considerados como fincas de los reyes que se am-
pliaban por la fuerza o por matrimonios o herencias. También podían com-
prarse y venderse, cosa que se hacía a veces con las colonias. En la historia
la democracia nace cuando la industrialización y el progreso económico hace
101

aparecer una clase media educada y enriquecida por el comercio y la industria


y que no pertenecía al grupo gobernante tradicional, que era la nobleza ter-
rateniente. Cuando la extensión del progreso económico abarcó toda Europa
y Norteamérica la democracia como modo de gobierno reemplazó las monar-
quías absolutas, en las que el rey y los nobles controlaban el Estado. En algunos
países los partidarios de la democracia derribaron los gobiernos monárquicos y
proclamaron la república, que es una democracia en la que el jefe del estado es
también elegido por los ciudadanos.
La democracia supone el control del gobierno por parte de la población,
por medio de elecciones en las que los ciudadanos substituyen al gobierno que
no actúa de acuerdo con la voluntad de la mayoría de la sociedad, y escogen
un gobierno y una legislatura que presenta un proyecto aceptable. Para la exis-
tencia de la democracia es necesaria la existencia de jueces independientes. El
sistema judicial es el garante de que el gobierno cumpla la ley. Una verdadera
democracia debe ser un estado de derecho. Que no hay democracia fuera del
campo político. La democracia ayuda la determinar la voluntad de la sociedad,
el concepto rousseauniano, o bien es tan sólo un modo pacífico de cambiar de
oligarquía (Schumpeter).
¿Por que la sociedad o el estado debe construirse sobre la idea de voluntad y
el antropomorfismo? Podría construirse sobre la idea de deber, y la democracia
sería el medio de descubrir el que consideramos el nuestro deber. (es el mismo?)
También puede tratarse simplemente de explicar en que consiste la democracia,
que hacer para que funcione bien y dejarse de cuestiones de fundamentación
teórica. La democracia entonces es buena participación bajo criterios éticos, y
respeto por los derechos individuales. Agora bien, ¿respeta por ejemplo nuestro
estado esos derechos? Hay una peligrosa deriva de la socialdemocracia cara al
intervencionismo.

Algunas definiciones
Una ley es una norma legítima refrendada por la fuerza del estado. Una so-
ciedad es un grupo de personas que vive en un territorio y un estado un tipo de
organización que funciona en la mayoría de las sociedades. Lo que caracteriza
al estado es que hace las leyes y pretende ser el único que ejerce la violencia para
defender esas leyes.
Llamamos democracia al régimen político en el que los ciudadanos escogen
a los gobernantes y a los legisladores y el gobierno cumple las leyes y respeta los
derechos de los ciudadanos. En otros países, la presión política de los demócratas
hizo que el rey renunciara a su poder político, permaneciendo como jefe del
estado hereditario. Estos países tienen estados que son llamados monarquías
102 La democracia

constitucionales o parlamentarias. Por otro lado, en las democracias el poder del


gobierno está limitado por las leyes. El gobierno no puede hacer nada prohibido
por las leyes existentes y los ciudadanos poden denunciar al gobierno en los
tribunales si consideran que éste se ha excedido en su actuación. Esto es llamado
estado de derecho.

¿Qué debemos hacer?


Dado que en las democracias el gobierno depende del pueblo, éste debe ser
racional y no arbitrario. Debe ser bueno. De nada sirve tener el poder si elegi-
mos algo malo. La política es un servicio a la comunidad, nunca un medio
personal de enriquecimiento.

Conviene recordar
• Llamamos democracia al régimen político en el que los ciudadanos esco-
gen a los gobernantes y a los legisladores y en el que el gobiernos cumple
las leyes y respeta los derechos de los ciudadanos.

• Los ciudadanos de un estado democrático eligen a los gobernantes y legis-


ladores por el sufragio universal, libre y secreto.

• La democracia es un estado de derecho, es decir, el gobierno y los ciu-


dadanos no deben hacer nada ilegal.

• La separación de poderes en ejecutivo, legislativo y judicial, es un ele-


mento básico de la democracia.

Ejercicios de la lección
1. ¿Qué es una sociedad?

2. ¿Qué es un estado?

3. ¿Qué son las leyes?

4. ¿Qué relación tienen las leyes con los derechos?

5. ¿De qué dependía al largo de la historia el tamaño de los estados?

6. ¿Qué significa concepción patrimonial del territorio?


103

7. ¿A qué llamamos democracia?

8. ¿Qué relación tiene la democracia con progreso económico?

9. ¿Qué es una república?

10. ¿Cuál es el origen histórico de las repúblicas?

11. ¿Qué es una monarquía constitucional?

12. ¿Qué relación tiene la democracia con poder de la ciudadanía?

13. ¿Cómo está limitado el gobierno en las democracias?

14. ¿Qué es el estado de derecho?

15. ¿Qué relación tiene la democracia con el sistema judicial?

16. ¿Qué es el intervencionismo?

Textos a comentar
1. En su obra Consideraciones sobre el gobierno representativo, John Stuart Mill
explica la función del parlamento:

En cambio de la función de gobernar, para la que es radicalmente


inadecuado, el oficio apropiado de una asamblea representativa es
vigilar y controlar el gobierno; echar la luz de la publicidad de sus
actos; obligar a una completa exposición y justificación de todos el-
los que cualquiera considera cuestionable; censurarlos si los encuen-
tra condenables, y, si los hombres que componen el gobierno abusan
de su confianza, o desempeñan su cargo en una manera que choca
con el sentido deliberado de la nación, expulsarlos de sus cargos, y
bien expresamente o virtualmente nombrar sus sucesores. Este es
seguramente un poder grande, y seguridad bastante para la libertad
de la nación. Sumado a esto, el parlamento tiene un oficio no infe-
rior a este en importancia; ser al mismo tiempo el comité de quejas
de la nación y su congreso de opiniones; un espacio en el que no
sólo la opinión general de la nación, sino la de cada sección de ella,
y, tanto como es posible, de cada eminente individuo que ella con-
tiene, puede aparecer a la plena luz y retar a la discusión; donde cada
persona en el país puede contar con encontrar alguien que exprese
su mente tan bien o mejor que podría expresarla él mismo, no a
104 La democracia

amigos y partidarios exclusivamente, sino delante de los oponentes,


para ser probada por la controversia adversa.

2. En la misma obra, Mill explica por qué el derecho a voto tiene que ser uni-
versal:

Independientemente de todas estas consideraciones, es una injusticia


personal retirar de cada uno, a menos que sea para prevenir mayo-
res males, el privilegio ordinario de que se cuente con su voz al
disponer los asuntos en los que él tiene el mismo interés que otra
gente. Si es obligado a pagar, si puede ser obligado a luchar, si se
le requiere implícitamente que obedezca, debería tener legalmente
derecho a que le digan por qué; a que le pidan el consentimiento,
y a que se cuente con su opinión en lo que valga, aunque no más
que en lo que valga. No debería haber parias 1 en una nación adulta
y civilizada; ninguna persona descalificada, excepto por culpa suya.
Cada uno es degradado, sea consciente o no, cuando otra gente, sin
consultarlo, toma poderes ilimitados para regular su destino. E in-
cluso en un estado mucho más avanzado del que la mente humana
ha alcanzado ya, no está en la naturaleza que aquellos que han sido
desatendidos así sean tratados con juego limpio como los que tienen
voz. Los gobernantes y las clases gobernantes están bajo la necesi-
dad de considerar los intereses y los deseos de los que tienen derecho
a voto; pero los de aquellos que están excluidos, es su opción si lo
harán o no, y aunque honestamente dispuestos, están en general de-
masiado completamente ocupados con las cosas que deben atender,
para tener mucho espacio en sus pensamientos para nada que puedan
con impunidad desatender. Ninguna organización del sufragio, por
lo tanto, puede ser permanentemente satisfactoria en la cual alguna
persona o clase es completamente excluida; en la cual el privilegio
electoral no está abierto a todas las personas mayores de edad que
deseen obtenerlo.

1
Parias son personas de casta baja en la India, que no son respetadas.
Lección14
Participar en política

Valoración de la importancia de la participación ciudadana para el fun-


cionamiento de las instituciones democráticas. Distinción entre formas
de participación no institucionalizada y la participación política in-
stitucionalizada. Valoración de la formación de la opinión, de acuerdo
con algún tipo de deliberación, para una participación responsable. Dis-
tinción entre democracia representativa y democracia deliberativa.

¿Para qué sirve esta lección


Para aprender porque es bueno participar en política y cómo podemos hacerlo.

¿Por qué es importante todo esto?


Porque la política influye mucho en nuestra vida y si no participamos en su
control podemos hacer que esta influencia sea buena. La política afecta:
1. La economía
2. La educación
3. La vivienda
4. El trabajo
5. El modo de vida (por ejemplo los matrimonios gays)
6. La libertad individual (por ejemplo, la emigración)
Poner ejemplos de los varios campos.
106 Participar en política

¿De qué se trata?


La democracia permite la participación política de los ciudadanos. La partici-
pación permite que controlemos las medidas públicas que van tener influencia
en nuestras vidas.

¿Qué problemas prácticos hay?


El problema es cómo hacer atractiva la participación, cómo instruir política-
mente la gente y vitalizar los canales institucionales de participación.

¿Qué necesitamos?
Conocimientos sobre cómo participar, una concepción clara que impida que
caigamos en una sociedad de lobbies, de reparto de intereses.

¿Qué dicen los filósofos?


Habermas sería probablemente el referente moderno. También puede mirarse
Apel para la ética del discurso.

¿Qué podemos pensar?


Puesto que la democracia es el gobierno del pueblo, la democracia no puede fun-
cionar bien si los ciudadanos no participan activamente en la política. (Explicar
por qué no).

¿Qué debemos hacer?


1. Ser consciente de que una democracia permite a los ciudadanos controlar
efectivamente el gobierno y las leyes del país. En una democracia quien
manda es el pueblo, la ciudadanía. Eso no es en la teoría nada más, como
pasa en las dictaduras, sino que es real. En el nuestro país quien manda es
la gente, no los políticos. Pero para que eso sea así de verdad es necesario
que los ciudadanos intervengan en la política. Si todos nos desentende-
mos y nos mantenemos al margen, dedicándonos sólo las nuestras cosas
privadas, entonces la política si que puede convertirse en un trabajo de
una casta especializada.
107

2. Formar la propia opinión de acuerdo con una ideología política que esté
de acuerdo con los nuestros principios éticos. Todos los seres humanos
tenemos ideas morales sobre cuestiones privadas, sabemos lo que es justo
y injusto. Fácilmente podemos extender nuestras ideas a temas públicos,
de política o economía. Si aprendemos cuales son las diferentes ideologías
políticas bien podemos escoger la nuestra, la que esté más de acuerdo con
nuestra forma de pensar y sentir. Después, se trata de leer y aprender sobre
la nuestra ideología, para ser capaz de discutir con los demás ciudadanos
y poder procurar juntos la verdad.

3. Informarse responsablemente sobre los asuntos de actualidad que puedan


tener relación con la política. Además de nuestra ideología, para opinar ra-
zonablemente sobre temas políticos necesitamos datos sobre lo que ocurre
en el mundo y en nuestro país. En la búsqueda de datos tenemos que bus-
car la verdad, y ser honrados si los datos llevan la contraria a la nuestra
ideología. No debemos permitir que las ideas deformen nuestra percep-
ción de la realidad. Si las cosas son diferentes de como esperábamos, debe-
mos estar dispuestos a cambiar nuestras ideas.

4. Si nuestras circunstancias lo permiten, formar parte de un partido político.


Para así colaborar personalmente en la aplicación de nuestra ideología a
la vida política. Los partidos políticos, en las democracias modernas, son
los órganos básicos de participación ciudadana. Los partidos se presen-
tan a las elecciones, de ellos salen los alcaldes, diputados, presidentes del
gobierno, etc. Si los partidos cuentan con muchos afiliados, podrán repre-
sentar más adecuadamente a la ciudadanía y estarán más conectado con
esta. Nosotros podemos ayudar la orientar la ideología de un partido y
aportar ideas, proyectos o criterios que ese partido utilizará para influir
en la sociedad.

5. Informarse sobre los programas de los partidos que se presentan a las elec-
ciones, mismo de los partidos minoritarios o poco publicitados. Los par-
tidos presentan programas, es decir, conjuntos de proyectos que piensan
llevar a cabo si llegan al poder o que orientarán su trabajo si están en la
oposición. Si estamos de acuerdo con el programa, podemos votar por ese
partido. Muchas veces la gente critica a los partidos porque cuando ganan
las elecciones no cumplen su programa. Pero si sus votantes conocen el
programa, entonces pueden controlar si partido lo tuvo en cuenta o no.

6. Discutir con las personas de nuestro entorno los temas políticos intere-
santes, siempre con respeto a las opiniones de los demás. No podemos
llegar a tener una opinión madura y razonada si no la compartimos con
108 Participar en política

los demás, si no escuchamos sus objeciones e intentamos responderlas.


También, naturalmente, si creemos en unas ideas, está bien que las com-
partamos con los demás.

7. Votar en todos los comicios, elecciones generales, autonómicas, al Parla-


mento europeo, municipales, posibles referendos, etc. Si no participamos,
no podemos criticar. Mucha gente no se considera representada por los
políticos, pero realmente, las opciones políticas son tantas que es muy
difícil que no exista un partido con el que podemos estar de acuerdo. Si
no votamos, no contribuimos a que los políticos sean una adecuada repre-
sentación de la ciudadanía.

8. Informarse sobre la actuación de los diferentes gobiernos y criticar las


que no consideremos apropiadas. Nuestras críticas, por supuesto, deben
ser racionales, moderadas y bien informadas. No debemos emitir críticas
basadas en prejuicios o sentimientos personales no justificados. Mucha
gente aprovecha los temas políticos para expresar estados de ánimo o in-
cluso ideas negativas que nunca se atrevería a expresar tratando temas más
cercanos o conocidos. No debemos dejarnos arrastrar por las pasiones
negativas al juzgar temas políticos, porque tenemos que tener en cuenta
que si lo hacemos, estaremos contribuyendo a crear un clima negativo en
nuestra propia sociedad que es realmente nuestro ámbito de vida.

9. Intentar modificar las decisiones de los gobiernos que no estén de acuerdo


con la nuestra ideología. (mediante la participación en campañas de pro-
testa, manifestaciones, cartas a los periódicos, escribiendo y debatiendo
en internet, enviando cartas a los nuestros representantes políticos en los
parlamentos o a los gobernantes mismos, etc.). Aunque los políticos es-
tén elegidos para representarnos y gobernar durante su mandato, nosotros
podemos seguir influyendo en ellos y en sus decisiones. Nosotros pode-
mos comunicarnos con ellos directamente, escribiéndoles, y de forma in-
directa participando en protestas públicas bien para intentar detener una
medida que se está considerando o bien para apoyar que se tome una me-
dida que la sociedad estima positiva. Por supuesto que tenemos que tomar
nota del comportamiento de los políticos para tomar las nuestras deci-
siones sobre a quien votamos en las próximas elecciones.

10. No ser pesimista ni cínico con respeto la política o la gente que participa
en ella. Si son malos, nuestro deber es sustituirlos. Si hacen las cosas
mal, nuestro deber y contribuir la que las hagan bien. El cinismo y el
pesimismo, puede ser francamente malo cuando lo aplicamos al juicio so-
bre la política porque puede constituirse en una profecía autocumplida. Si
109

todos pensamos que los políticos son malos, pronto sólo van a querer ser
políticos los bribones. Si creemos que todos los políticos buscan el poder
sólo por su provecho, la política dejará de ser una actividad honorable y
por lo tanto las personas decentes y capaces no se acercarán a ella. Tene-
mos que tener claro que en una democracia, participar en la política debe
ser colaborar para el bienestar de todos y que los políticos deben ser servi-
dores de la ciudadanía. Una actividad política desarrollada de acuerdo con
la propia ideología y procurando beneficiar a todos y no perjudicar a nadie
es éticamente meritoria y las personas que la emprenden deben ser hon-
radas por todos. Naturalmente que los políticos, como todos nosotros,
hacen cosas mal a veces. No debemos juzgarlos con más dureza que lo
haríamos con cualquier otra persona, y debemos tener presente que si es-
tamos muy en desacuerdo con trabajo realizado, bien podemos tratar de
hacerlo nosotros mismos.

11. Privilegiar la ideología por encima de los intereses.

12. Votar por razones, no por simpatías

13. Aprender en general para evitar una aristocracia del conocimiento, no-
blesse de robe.

Conviene recordar
• La democracia no puede funcionar si los ciudadanos no participan en
política.

• Participamos de una forma institucionalizada cuando nos afiliamos a par-


tidos, nos presentamos a las elecciones o cuando votamos en ellas.

• Participamos de una forma no institucionalizada cuando nos preocupamos


por los asuntos políticos, nos informamos sobre ellos y adoptamos una
opinión y la discutimos con los nuestros conciudadanos.

• Para ser un ciudadano responsable es necesario estar bien informado y for-


mar la propia opinión de acuerdo con la nuestra ideología y los nuestros
principios éticos.

• En la democracia representativa los ciudadanos se limitan la votar. En la


democracia deliberativa los ciudadanos participan activamente en la toma
de decisiones.
110 Participar en política

Ejercicios de la lección
1. Explica cada una de las instrucciones sobre la participación política.

Textos a comentar
1. En su obra La democracia en América, Tocqueville comenta las consecuencias
de las elecciones políticas:
Cuando el público gobierna, no hay hombre que no sienta el pre-
mio de la benevolencia pública y que no busque cautivarla atrayén-
dose la estima y el afecto de aquellos en medio de los cuales debe
vivir. Muchas de las pasiones que hielan los corazones y los dividen
son entonces obligadas a retirarse al fondo del alma y a esconderse
allí. El orgullo se disimula; el desprecio no osa hacerse visible. El
egoísmo tiene miedo de sí mismo. Bajo un gobierno libre, siendo
electivas la mayor parte de las funciones públicas, los hombres que
la altivez de su alma o la inquietud de sus deseos hacen sentir es-
trecha la vida privada, sienten cada día que no pueden pasarse sin
la población que los circunda. Ocurre entonces que se sueña en
sus semejantes por ambición, y que a menudo se encuentra de al-
guna manera su interés en olvidarse de sí mismo. Sé que se me
puede oponer aquí todas las intrigas que una elección hace nacer,
los medios vergonzosos de que los candidatos se sirven a menudo
y las calumnias que sus enemigos difunden. Son estas ocasiones de
odios, y se representan más a menudo cuando las elecciones son más
frecuentes. Estos males son grandes, sin duda, pero son pasajeros,
en tanto que los bienes que nacen con ellos permanecen. El deseo
de ser elegido puede llevar momentáneamente a ciertos hombres a
hacerse la guerra; pero este mismo deseo lleva a la larga a todos los
hombres a prestarse un mutuo apoyo; y, si ocurre que una elección
divida accidentalmente a dos amigos, el sistema electoral aproxima
de una manera permanente una multitud de ciudadanos que habrían
siempre permanecido extraños los unos a los otros. La libertad crea
odios particulares, pero el despotismo hace nacer la indiferencia ge-
neral.
2. En su obra Consideraciones sobre el gobierno representativo John Stuart Mill
habla sobre las consecuencias beneficiosas de la participación en política:
Aun más saludable es la parte moral de la instrucción que con-
seguida por la participación del ciudadano particular, aunque sea
111

raramente, en funciones públicas. Él está llamado, cuando está ocu-


pado así, a sopesar intereses no propios; a ser guiado, en caso de
solicitudes en conflicto, por otra regla que la de su parcialidad pri-
vada; a aplicar, en cada momento, principios y máximas que tienen
por razón de su existencia el bien común: y él usualmente encuen-
tra asociados con él en la misma tarea a mentes más familiarizadas
que la suya con estas ideas y operaciones, cuyo estudio significará
aportar razones a su entendimiento, y estímulo a su sentimiento
por el interés general. Se le hace sentir que es uno del público, y
cualquier cosa que es en beneficio del público, es en su beneficio.
Donde esta escuela del espíritu público no existe, escasamente algún
sentido se mantiene de que las personas privadas, en no situación so-
cial eminente, deban ningún deber a la sociedad, excepto obedecer
las leyes y someterse al gobierno. No hay sentimiento generoso de
identificación con el público. Cada pensamiento o sentimiento, ya
de interés o de deber, es absorbido por el individuo o la familia. El
hombre nunca piensa en ningún interés colectivo, en ningún objeto
a ser perseguido juntamente con otros, sino sólo en competición
con ellos, y en alguna medida a su costa. Un vecino, no siendo un
aliado o un asociado, dado que nunca se emplea en ningún empeño
común por el beneficio de todos, es por lo tanto sólo un rival. Así,
incluso la moralidad privada sufre, cuando la pública está en la prác-
tica extinguida. Si este fuera el universal y sólo posible estado de
las cosas, las máximas aspiraciones del legislador o del moralista po-
drían sólo extenderse a hacer del grueso de la comunidad un rebaño
de ovejas inocentemente pastando hierba juntas.
112 Participar en política
Lección15

El estado español

Aproximación al sistema político español. Identificación de las princi-


pales instituciones democráticas y reconocimiento de los principios del
funcionamiento democrático.

¿Para qué sirve esta lección


Para aprender cual es la organización política de España. ¿Por qué es importante
todo esto? Porque se conocemos como está organizado nuestro país podremos
intervenir mejor en su vida política. De la organización del nuestro estado
depende mucha parte de la nuestra vida.

¿De qué se trata?


De aprender qué organizaciones tienen que ver con la política en España.

Algunas definiciones
Los ayuntamientos son instituciones que se encargan de los asuntos más cer-
canos al ciudadano, como los servicios de limpieza, la recogida de basura, etc.
Las comunidades autónomas son las organizaciones de las regiones con carac-
terísticas históricas comunes. Tienen cedidas muchas competencias por el go-
bierno central del estado, como la gestión de la educación pública, la sanidad,
y capacidad legislativa en muchos ámbitos. El gobierno central es la institución
básica de control del estado. Surge del parlamento, elegido democráticamente
114 El estado español

por los ciudadanos. La Unión europea es una organización supraestatal que


vincula países europeos y establece entre ellos un marco económico, político o
social común. Muchas de las leyes que promulga el parlamento español o los de
las comunidades autónomas dependen de las decisiones tomadas por los gobier-
nos europeos asociados en la Unión europea. El principio de legalidad significa
que ninguna institución del Estado puede tomar una decisión que esté en con-
tra de la ley. Incluso no es posible hacer una ley contraria a la Constitución.
El Tribunal constitucional es la institución que controla si las leyes están o no
en contra de la Constitución. Explicar la diferencia entre teoría y práctica y
lo mismo, por ejemplo, con el ecologismo, etc. ¿Explicar aquí las ideologías o
hacerlo en otra parte? Hablar también de la administración civil del estado, es
decir, de los funcionarios.

¿Qué podemos pensar?


Hablar de las diputaciones. España es una democracia. Cuales son las sus institu-
ciones principales. Cuál es la relación de los ciudadanos con ellas. Mencionar los
partidos políticos como canal de participación. En España, el poder del Estado
está distribuido en los ayuntamientos las comunidades autónomas, el gobierno
central y la unión europea. Las normas de los países democráticos están orde-
nadas jerárquicamente. En España la norma más importante es la Constitución.
Después vienen las leyes orgánicas, leyes, decretos-ley, reglamentos y órdenes
ministeriales. Muchas de esas leyes pueden ser creadas por los parlamentos de
las comunidades autónomas. Después están las órdenes ministeriales o de las
consejerías. Por último vienen las normas (como los edictos o las ordenanzas
municipales) dictadas por los ayuntamientos. Nos países democráticos se acepta
el principio de separación de poderes. En el nuestro estado existe el gobierno,
encargado de aplicar las leyes, los jueces, que vigilan la aplicación de las leyes y el
parlamento, que hace las leyes y elige al gobierno. Para que el Estado funcione
bien cada un de estos elementos deben ser independientes de modo que la su
actividad pueda servir como contrapeso de las actividades de los otros poderes.
El control de los poderes de la actividad de los demás ayuda la proteger a los
ciudadanos.

Conviene recordar
• El estado español es una democracia parlamentaria con territorio organi-
zado en comunidades autónomas.

• Las instituciones principales del estado son el parlamento, que hace las
115

leyes, el gobierno, que las ejecuta y el poder judicial que vigila su cumpli-
miento.

• En las comunidades autónomas los ciudadanos escogen gobiernos y parla-


mentos propios que tratan las cuestiones relacionadas con esas regiones.

• La constitución es la ley principal del estado. Ninguna otra ley puede


contradecirla.

• La separación de poderes, el imperio de la ley y la supremacía de la cons-


titución y el respeto a la voluntad popular son los principios básicos del
estado español.

Ejercicios de la lección
1. ¿Cómo está distribuído el poder del estado en España?

2. ¿Qué es un ayuntamiento?

3. ¿Qué es una comunidad autónoma?

4. ¿Qué es la Unión Europea?

5. ¿Qué es una Diputación?

6. ¿Qué son las competencias del estado?

7. ¿Qué es el Parlamento?

8. ¿Qué significa jerarquía de las disposiciones legales?

9. ¿Qué significa separación de poderes?

10. ¿Cuáles son los poderes del estado?

11. ¿Cuál es el concepto de equilibrio de poderes?

12. ¿Qué significa principio de seguridad?

13. ¿Qué es el Tribunal Constitucional?

14. ¿Qué es la administración civil del estado?

15. ¿Por qué los funcionarios son contratados de forma vitalicia?

16. ¿Para qué sirven las oposiciones?


116 El estado español

17. ¿Qué es la Constitución?


18. ¿Cuál es la función de la Constitución?

Textos a comentar
1. John Locke nos habla de la supremacía de la ley en el Segundo tratado sobre el
gobierno civil:
Siempre que la ley acaba la tiranía empieza, si es la ley transgredida
para el daño ajeno; y cualquiera que hallándose en, autoridad ex-
cediere el poder que le da la ley, y utilizare la fuerza a sus órdenes
para conseguir sobre el súbdito lo que la ley no autoriza, cesará
por ello de ser magistrado; y pues que obra sin autoridad podrá ser
combatido, como cualquier otro hombre que por fuerza invade el
derecho ajeno. Ello es cosa admitida por lo que toca a magistrados
subordinados. Quien tiene autoridad para aprehender mi persona
en la calle, puede ser resistido como ladrón y salteador si intenta
forzar mi casa para la ejecución de un mandamiento, con saber yo
él tiene su orden y autoridad legal que le facultaría para detenerme
fuera de mis paredes. Y bien quisiera que me esclarecieran por qué
razón esta defensa que existe contra los magistrados inferiores no
haya de mantenerse contra los más empinados. ¿Será razonable que
el primogénito, por contar con la mayor parte de la hacienda de su
padre, deduzca de ello el derecho a arrebatar cualquiera de las partes
de sus hermanos menores? ¿O que un rico, dueño de toda una co-
marca, tenga por tal título derecho a adueñarse cuando le pluguiere
de la casita y huerto de su pobre vecino? La posesión legal de sumo
poder y riqueza, con gran exceso relativamente a la común fortuna
de los hijos de Adán, lejos de constituir excusa, y mucho menos
razón de opresión y rapiña, que no otra cosa es dañar a otro sin
autoridad para ello, será notable agravante. Porque a sobrepasar los
límites de la autoridad no tiene más derecho el encumbrado fun-
cionario que el más chico, ni fuera ello más justificable en un rey
que en un alguacil. Pero será mucho más grave en aquél en quien se
depositó mayor trecho de confianza, posiblemente por la, ventaja de
su educación y consejeros, que le valen mejor conocimiento, y por
tener menos motivo para hacerlo, pues ya goza de mucha mayor
parte que sus demás hermanos.
2. Mill nos habla de la selección de funcionarios públicos en Consideraciones
sobre el gobierno representativo:
117

Con respecto a ese amplio e importante cuerpo que constituye la


fuerza permanente del servicio público, aquellos que no cambian
con los cambios de la política, sino que permanece para ayudar a
cada ministro con su experiencia y tradiciones, para informarlo con
su conocimiento de los asuntos, y para conducir los detalles oficiales
bajo su control general; aquellos, en resumen, que forman la clase
de los funcionarios públicos de carrera, entrando en su profesión,
como otros hacen, cuando son jóvenes, esperando ascender progre-
sivamente hasta sus mayores grados a medida que avanzan en la vida;
es evidentemente inadmisible que puedan estar expuestos a ser ex-
pulsados, y privados del completo beneficio de sus servicios previos,
excepto por una positiva, probada y seria mala conducta. No por
supuesto, sólo por la delincuencia que los hace condenables por la
ley; sino por la negligencia voluntaria de su deber, o una conducta
que implique que no se puede confiar en ellos para los propósitos
que se les han encomendado. Dado que, por lo tanto, salvo en caso
de culpabilidad personal, no hay modo de librarse de ellos, excepto
cargándoselos al público como pensionistas, es de la mayor impor-
tancia que los nombramientos sean hechos bien en primera instan-
cia; y hay que considerar de qué modo este propósito puede con-
seguirse mejor. Al hacer estos primeros nombramientos, hay poco
peligro por la carencia de una especial habilidad o conocimiento en
los que eligen, pero mucho por la parcialidad o el interés político.
Siendo, como norma, nombrados al comienzo de su edad adulta, no
habiendo aprendido, sino para que aprendan, su profesión, la única
cosa por la cual los mejores candidatos pueden ser distinguidos es el
rendimiento en las ramas ordinarias de la enseñanza: y esto puede
ser establecido sin dificultad, si se toman la requerida molestia y la
requerida imparcialidad los que están nombrados para investigarlo.
118 El estado español
Lección16

Igualdad y justicia

Identificación de la libertad, la justicia y la igualdad como valores en


que se fundamenta la democracia. Valoración de la democracia como
conquista ética.

¿Para qué sirve esta lección


Para aprender que es la libertad, la igualdad y la justicia y porque son impor-
tantes para nosotros.

¿Por qué es importante todo esto?


Porque se existen libertad, igualdad y justicia la sociedad está mejor organizada
y por el tanto las nuestras vidas pueden tener más calidad. La igualdad es un
factor de bienestar y la justicia el medio de conseguirlo. Es importante saber
como conseguir bienestar y justicia para todos.

¿Qué problemas prácticos hay?


En la práctica la cuestión de la relación entre libertad y igualdad tiene relación
con el nivel de intervencionismo que consideramos legítimo para el estado.
Supongo que se trataría de llegar a un equilibrio en línea aristotélica, pero hay
saber como hacerlo sin tener el criterio teórico antes.
120 Igualdad y justicia

¿Qué necesitamos?
Un criterio teórico que permita establecer los límites del intervencionismo es-
tatal.

¿Qué dicen los filósofos?


Los referentes deben ser los partidarios del liberalismo del estado mínimo, no
los anarcocapitalistas. Mirar la obra de Mises, Humboldt, Hayek y aún que
sea contradecirme, Rothbahr. ¿Fundamentaciones de la justicia? ¿Aristóteles?
¿Rawls? Creo que parece más lógico acudir a Aristóteles, aunque leer a Rawls
parece necesario.

Algunas definiciones
La libertad es la capacidad del individuo para realizar en la sociedad las acciones a
las que tiene derecho. Los derechos humanos dependen de la naturaleza humana
y no son una creación del Estado, sino que éste, simplemente los reconoce. En
la sociedad tradicional y en las dictaduras no existe la libertad. La justicia es
la atribución de suyo a cada uno. La justicia está relacionada con el concepto
de recompensa o castigo. Merecemos una recompensa por los actos buenos o
positivos que hacemos. Merecemos un castigo por los actos malos o negativos
que hacemos. La igualdad es la no existencia de diferencias indeseables entre las
situaciones de las personas en la sociedad.

¿Qué podemos pensar?


Fines de la ley, valores democráticos Definición de libertad, relación con la ley
y la cultura. Definición de justicia, relación con la tarea del gobierno. Que es
la igualdad, tipos. Necesidad de cohonestar libertad y igualdad. La democracia
como proyecto ético, que los gobiernos predemocráticos violaban las normas
éticas.
El régimen democrático surgió contra las monarquías absolutas o se crea
contra las dictaduras como un proyecto para conseguir la libertad, la justicia y
la igualdad. Estos valores son una exigencia del pensamiento ético europeo. En
la sociedad tradicional las costumbres y las leyes distribuían, por ejemplo, las
ganancias económicas del trabajo de los campesinos entre los nobles y no entre
la gente que de hecho había trabajado. Asimismo los privilegios legales que
algunos crímenes quedaran sin castigo si los culpables pertenecían a la nobleza.
121

El liberalismo político fue la doctrina que exigió la igualdad ante la ley de todos
los ciudadanos sin ninguna distinción. Puesto que consideramos que todos los
seres humanos son iguales en dignidad y derechos debemos reconocer como
injustas las diferencias que afecten a la dignidad y los derechos humanos. Eso
no significa rechazar las diferencias que afectan a las personas y que derivan de
la naturaleza o de los actos de los individuos libres.
La igualdad es el criterio más difícil de definir y tratar en el campo de la
política. En su origen quería decir tan sólo igualdad ante la ley, es decir, supre-
sión de los privilegios legales. Sin embargo para los autores socialistas, la igual-
dad empezó pronto a significar tener todos unos ingresos semejantes. Clara-
mente vemos que este objetivo es contradictorio con la naturaleza humana.
Modernamente se considera que existen grados de igualdad. A lo que se aspira
es a que todo el mundo tenga un nivel mínimo (decente) de bienestar material,
a que ese mínimo sea creciente y a que no existan diferencias desmesuradas de
nivel de vida. En ese sentido el concepto de igualdad es perfectamente aceptable
y no es contrario ni a la libertad ni a la justicia. Naturalmente muchas de las
diferencias entre las personas son buenas, y bien podemos mantenerlas o incluso
fomentarlas.
Pero otras son injustas o perjudiciales. Entre las diferencias sociales mal con-
sideradas están la discriminación racial, de género, de clase, religiosa, lingüística,
económica, legal, etc. En algunos de estos campos es fácil conseguir la igualdad
pues depende sólo del cambio de las leyes. En otros casos es necesario cam-
biar las ideas malas de las personas, por otras buenas. El sistema democrático
de organización del Estado puede ser considerado como una mejora ética. Los
regímenes no democráticos están basados en la violencia, el fanatismo religioso,
el autoritarismo y la discriminación, y su resultado fue y es, el sufrimiento y
la muerte para millones de personas inocentes a lo largo de la historia. El ser
humano, en su constante progreso, rechazó en muchas partes del mundo los go-
biernos autoritarios y debido a que en la actualidad quedan aún muchos de estos,
todos debemos esforzarnos en mantener la salud cívica de los estados democráti-
cos y a apoyar las medidas que ayuden a que todos los países del mundo sean
democráticos. La educación como la mejor de las restricciones no hay sistema
que funcione si no aceptamos los valores éticos y procuramos comportarnos
según ellos.

Conviene recordar
• La democracia defiende los valores de libertad, igualdad y justicia.

• La libertad es la capacidad del individuo para hacer sin obstáculos cosas


122 Igualdad y justicia

que no son malas.

• La igualdad es la existencia de unas leyes que se aplican a todos los ciu-


dadanos.

• La justicia es dar a cada uno lo que merece. Á hora de distribuir los bienes
comunes debemos respetar los derechos y la dignidad humana.

• En el pasado los gobiernos maltrataban a los ciudadanos y los usaban en


provecho de los poderosos. Aun hoy en muchos países del mundo ocurre
así.

• La democracia supone una mejora real para la vida de las personas que
todos debemos defender.

Ejercicios de la lección
1. ¿Cuál era el proyecto histórico de la democracia?

2. ¿Cuáles son los valores principales de la democracia?

3. ¿Qué es la libertad?

4. ¿Qué es la justicia?

5. ¿Qué es la fraternidad?

6. ¿Qué es la igualdad?

7. ¿En qué sentido el concepto de justicia es controvertido?

8. ¿Cuál es la origen de los derechos humanos?

9. ¿Cuál es la relación entre democracia y derechos humanos?

10. ¿Cuáles son los sentidos que puede tener el concepto de igualdad?

11. ¿En qué sentido los dos conceptos de igualdad pueden colisionar?

12. ¿Cuál es el concepto de estado de bienestar?

13. ¿Qué relación tiene la igualdad con las diferencias de las personas en la
sociedad?

14. ¿Qué tipos de discriminación conoces?


123

15. ¿Por qué podemos decir que la discriminación es mala?

16. ¿En qué sentido la discriminación es un problema cultural?

17. ¿En qué sentido la democracia puede ser una conquista ética?

18. ¿Cómo podemos ayudar todos a la salud de la democracia?

19. ¿Qué relación tiene la educación con la democracia?

Textos a comentar
1. Tocqueville, en De la democracia en América discute ampliamente el peligro
del individualismo:

Pienso, pues, que la especie de opresión por la que los pueblos


democráticos están amenazados no se parece a nada de lo que la
ha precedido en el mundo; nuestros contemporáneos no sabrían en-
contrar su imagen en sus recuerdos. Busco en vano yo mismo una
expresión que reproduzca exactamente la idea que yo me formo y la
busco en vano; las antiguas palabras de despotismo y de tiranía no
convienen. La cosa es nueva, por lo tanto hay que tratar de definirla,
puesto que no puedo nombrarla. Quiero imaginar bajo qué trazos
nuevos el despotismo podría producirse en el mundo: veo una masa
innumerable de hombres semejantes e iguales que se vuelven sobre
sí mismos sin reposo para procurarse pequeños y vulgares placeres
de los que llenan su alma. Cada uno de ellos retirado a lo lejos, es
como extraño al destino de todos los otros: sus hijos y sus amigos
particulares forman para él toda la especie humana; cuando está en
medio de sus conciudadanos, él está a su lado, pero no los ve; los
toca pero no los siente; no existe sino en sí mismo y para él solo, y
si le resta aun una familia, se puede decir al menos que ya no tiene
patria. Por encima de éste se eleva un poder inmenso y tutelar, que
se encarga solo de asegurar su disfrute y de velar sobre suerte. Es
absoluto, detallado, regular, previsor y dulce. Se parecería al poder
paternal si, como ella, tuviera por objeto preparar a los hombres
para la edad viril; pero no busca, por el contrario, más que fijarlos
definitivamente en la infancia; le gusta que sus ciudadanos disfruten,
siempre que sólo piensen en disfrutar. Trabaja a gusto para su feli-
cidad; pero quiere ser el único agente y el único árbitro; les provee
de seguridad, provee y asegura sus necesidades, facilita sus placeres,
124 Igualdad y justicia

conduce sus principales asuntos, dirige su industria, regla sus suce-


siones, divide sus herencias; si pudiera les quitaría enteramente el
trabajo de pensar y la pena de vivir.
2. Mill nos explica en su obra Consideraciones sobre el gobierno representativo
cuáles son los peligros de los gobiernos democráticos:
Mirando a la democracia del modo en que es comúnmente conce-
bida, como el gobierno de la mayoría numérica, es seguramente
posible que el poder gobernante pueda estar bajo el dominio de in-
tereses de clase o de grupo, apuntando a conductas diferentes de las
que serían dictadas por una preocupación imparcial por los intereses
de todos. Supongamos que la mayoría son blancos, la minoría ne-
gros, o viceversa: ¿es probable que la mayoría conceda igual justicia
a la minoría? Supongamos que la mayoría son católicos y la minoría
protestantes o al revés; ¿no existirá el mismo peligro? O que la may-
oría sean ingleses y la minoría irlandeses, o al contrario: ¿no hay
una gran probabilidad de un mal similar? En todos los países donde
hay una mayoría de pobres, una minoría por comparación, pueden
ser llamados ricos. Entre estas dos clases, sobre muchas cuestiones,
hay una completa oposición de interés aparente. Supondremos a la
mayoría suficientemente inteligente para ser consciente de que no
le interesa debilitar la seguridad de la propiedad, y de que ésta sería
debilitada por cualquier acto de expoliación arbitraria. Pero ¿no hay
un considerable peligro de que se lancen sobre los que poseen la lla-
mada propiedad ostensible, y sobre los mayores ingresos, una parte
injusta, o incluso el total, de la carga impositiva y habiendo hecho
eso, aumentar la cantidad, sin escrúpulo, gastando lo obtenido en
modos que supuestamente conduzcan al provecho y la ventaja de
la clase trabajadora? Supongamos, de nuevo, una minoría de traba-
jadores cualificados y una mayoría de trabajadores no cualificados: la
experiencia de muchos sindicatos, a menos que sean enormemente
calumniados, justifica la aprensión de que la igualdad de ingresos
pueda ser impuesta como obligación, y que el salario a destajo, el
pago por hora, y todas las prácticas que permiten que una labo-
riosidad o habilidades superiores ganen una superior recompensa
puedan ser abolidas. Los intentos legislativos para subir los salarios,
la limitación de la competencia en el mercado laboral, los impuestos
o las restricciones sobre la maquinaria y sobre las mejoras de todo
tipo que tiendan a prescindir del parte del trabajo existente, incluso,
quizá la protección del productor nacional contra la industria ex-
tranjera, son un muy natural (no me atrevo a decir probable) re-
125

sultado de un sentimiento de clase en una mayoría gobernante de


trabajadores manuales.
126 Igualdad y justicia
Lección17

Ética y política

Reconocimiento del Estado democrático de derecho como marco formal


para la realización de los ideales éticos.

Se trata de delimitar las esferas privado/público Se trata de consensuar una


ética de mínimos para la vida pública Por otro lado tener en cuenta que estos
mínimos son la base del crecimiento moral del individuo en el campo privado
(ser bueno sin tener que ser un héroe) Para los autores clásicos, Platón o Aris-
tóteles, la ética y la política eran campos correlativos. Sólo los hombres buenos
podían garantizar una sociedad adecuadamente ordenada y recíprocamente, sólo
en un estado bien llevado, podían ser los individuos buenos y felices. Con el es-
toicismo y el epicureismo la cosa comienza a cambiar. Aunque el estoico, si es
rey, puede ser bueno, es bueno tan sólo como individuo. Para estos filósofos,
la bondad tal como la felicidad, es una cuestión individual. De hecho uno sólo
es bueno cuando está en contra, en contra de la sociedad, de las inclinaciones
generales de las personas, de las propias pasiones o de los propios miedos o incli-
naciones religiosas. El cristianismo, si es posible hablar del cristianismo como
de una sola idea, no tiene una elaboración propia, vacila entre las ideas de San
Agustín, el estado al servicio de la iglesia y la idea erastiana, el estado cristiano
debe controlar la iglesia. El estado tiene que estar organizado para ayudar las
personas a ser buenas y vivir felizmente. Un estado no debe hacer cosas que sean
malas. Al final, el estado está compuesto por individuos. No hay una moral es-
pecial para la política. La mentira, la traiciones, la deslealtad, la violencia, es
mala cuando la hace una persona por su cuenta, y también son malas cuando las
hacen las personas por cuenta del estado.
128 Ética y política

¿Para qué sirve esta lección


Para aprender cual debe ser la relación entre ética y política.

¿Por qué es importante todo esto?


La ética es necesaria para la felicidad, e igualmente una buena organización de la
sociedad, es decir, la política. Si existe la relación adecuada entre ellas podemos
maximizar nuestras posibilidades de llevar una vida feliz.

¿Qué problemas prácticos hay?


La necesidad del crecimiento ético y de la mejora política es algo que siempre
existe. Necesitamos un criterio teórico para fijar el límite de la intervención del
estado en la vida social. Una vez exista, la cuestión práctica es fácil.

¿Qué necesitamos?
El mencionado criterio teórico que establezca la correcta relación entre ética y
política.

¿Qué dicen los filósofos?


Remirar Aristóteles, Tomás, Locke, Mill, Mises, Hayek, Rothbahr y los comu-
nitaristas. También Rawls, que olvidé citar en el tema de la justicia. Explicar
la idea aristotélica pero quizá puesta al revés. No, o no sólo, hacernos buenos
para poder tener una ciudad buena, sino sobre todo tener una ciudad buena para
poder ser buenos y por lo tanto felices.

Algunas definiciones
La política es el arte de ordenar la sociedad para permitir la felicidad de los
ciudadanos y lograr el bien común (promover). Definir «dictadura». Definir
«injusticia».
129

¿Qué podemos pensar?


Sólo las personas buenas pueden garantizar una sociedad adecuadamente orde-
nada y recíprocamente sólo en un estado bien llevado pueden ser los individuos
buenos y felices. También hablar de la política como creación de las precondi-
ciones materiales para la felicidad. El ideal ético es la felicidad. Para ser felices
necesitamos ciertas condiciones materiales y sociales. La democracia es el modo
de organización que mejor las garantiza. Que eso no significa que para ser fe-
lices o para ser buenos, no precisemos de nuestro esfuerzo. Crítica de los demás
sistemas y explicación de por que fallan y son malos. La política y la ética son
campos relacionados. Para comportarse bien, una persona necesita que en su
sociedad exista una clara consciencia de lo que es bueno y lo que es malo, pre-
cisa que el bien sea apoyado y estimado y el mal rechazado y criticado. En
las dictaduras, el gobierno difunde ideologías políticas o religiosas erróneas y
malintencionadas, el fundamentalismo religioso, el comunismo, el nazismo, el
nacionalismo radical, el racismo, etc., son ideologías que aprueban la violencia,
el autoritarismo y la discriminación, y que por tanto chocan con las ideas éticas.
Para un individuo normal, puede ser difícil descubrir las falsedades y la mal-
dad de estas ideologías si fue educado en ellas fanáticamente, como acostumbran
a hacer las dictaduras. Por lo tanto podemos concluir que un régimen demo-
crático, que respete la libertad individual y los derechos humanos es un marco
necesario para facilitar la bondad en las personas y constituye algo bueno en sí
mismo.

Conviene recordar
• Sólo en un estado libre podemos ser buenos sin tener que ser héroes.

• Para ser buenos ayuda que en la sociedad exista una clara consciencia del
bien y el mal. Y la sociedad democrática lo permite porque favorece la
libre discusión y el consenso.

• En las dictaduras los gobiernos necesitan cometer maldades para dominar


a la gente.

• Las dictaduras difunden ideologías que justifican el egoísmo, el engaño, la


violencia, el maquiavelismo y el inmoralismo.

• La democracia sólo puede funcionar adecuadamente si los políticos y los


ciudadanos se comportan bien.
130 Ética y política

Ejercicios de la lección
1. ¿Para quiénes eran campos correlativos la ética y la política?

2. ¿Qué significa campos correlativos?

3. ¿Qué cambio en la consideración de la bondad introducen los estoicos y


epicúreos?

4. ¿Cuál es la relación entre ética y estado?

5. ¿Por qué decimos que no hay una ética especial para la política?

6. Pon un ejemplo de una cosa mala hecha al servicio del estado.

7. ¿Qué relación establecemos entre ética, política y felicidad?

8. ¿Qué criterio teórico afirmamos que necesitamos? ¿Qué relación crees que
puede tener este criterio teórico con el respeto a los derechos humanos?

9. ¿Cómo podemos definir política?

10. ¿Qué es una dictadura?

11. ¿Cómo definirías el concepto injusticia?

12. ¿En qué sentido las personas que hacen cosas malas pueden desordenar la
sociedad?

13. ¿Cuál es el ideal de la ética?

14. ¿En qué sentido para ser felices necesitamos de unas precondiciones mate-
riales?

15. ¿Qué necesita, entre otras cosas, encontrar una persona en su sociedad
para comportarse bien?

16. ¿En qué modo, entre otros, chocan las dictaduras con la ética?

17. ¿Por qué es mala una educación fanática?

18. Pon un ejemplo de algún acto malo cometido por gobiernos dictatoriales.
131

Textos a comentar
1. Locke habla sobre las consecuencias de la corrupción de los gobernantes.

222. La razón de entrar los hombres en régimen social es la preser-


vación de su propiedad; y su fin al escoger y autorizar un legislativo,
que se hagan leyes y establezcan medidas, como guardas y valladares
de las propiedades de toda la sociedad, para limitar y moderar el
dominio de cada parte y miembro de ella. Porque supuesto que
jamás haya de ser tenido por albedrío social que pueda el legisla-
tivo destruir lo que cada cual se proponía asegurar a su entrada
en la sociedad, y a cuyo fin el pueblo se sometiera por sí mismo
a legisladores de su hechura, siempre que los legisladores intentaren
arrebatar y destruir la propiedad de las gentes, o reducirles a esclav-
itud bajo el poder arbitrario, pondránse en estado de guerra con el
pueblo, quien se hallará en aquel punto absuelto de toda ulterior
obediencia, y quedará abandonado al común refugio procurado por
Dios a todos los hombres contra la fuerza y la violencia. Siempre,
pues, que el legislativo transgrediere esta norma fundamental de la
sociedad, ya fuere por ambición, temor, locura o corrupción, e in-
tentare aferrar para si o poner en manos de quienquiera que fuere el
poder absoluto sobre las vidas, libertades y haciendas de las gentes,
por tal violación de confianza perderá todo derecho a aquel poder
que el pueblo dejara en sus manos para fines totalmente opuestos: el
cual retorna al pueblo, y éste cobra el derecho de reasumir su liber-
tad primera y, mediante el establecimiento de un nuevo legislativo
(del estilo que juzgare oportuno), proveer a su sosiego y seguridad,
que es el fin que a entrar en régimen social indujera a todos. Lo que
dije tocante al legislativo en general, es también cierto por lo que
se refiere al sumo ejecutivo, quien gozando de un doble depósito
de confianza, uno referente a su parte en el legislativo y otro en lo
qué concierne a la ejecución de la ley, obra contra ambos cuando
emprende la instauración de su voluntad arbitraria como ley de la
sociedad. Obra también contrariamente a aquel depósito de con-
fianza cuando se sirve de la fuerza, tesoro y departamentos de la
sociedad para corromper a los representantes y ganarles como vale-
dores de sus fines, y manifiestamente compromete de antemano a
los electores e impone a su elección al persuadido al logro de sus
particulares fines, por solicitaciones, amenazas, promesas u otra in-
ducción cualquiera, y les emplea para conseguir el buen éxito de
quienes hicieron promesa anticipada de lo que irían a votar y a
132 Ética y política

promulgar. Gobernar así a candidatos y electores, con ese nuevo


molde de procedimiento electoral, ¿será algo distinto de cercenar
al gobierno de raíz y emponzoñar el venero cierto de la seguridad
pública? Porque si el pueblo se reservó la elección de sus represen-
tantes como valladar de su propiedad, hízolo por el solo fin de que
éstos fueran siempre libremente escogidos; y, con esta libertad des-
ignados, libremente obraran y aconsejaran sobre las necesidades de
la comunidad política y el bien publico, según después de examen
y maduro debate se entendiera que requieren ellos. Y esto no po-
drán hacer quienes hubieren dado sus votos antes de oír el debate
y sopesar las razones de cada lado. Preparar una asamblea de ese
tenor e intentar establecer a declarados cómplices, por su propia
voluntad, como verdaderos representantes del pueblo y legisladores
de la república es, sin duda, insuperable violación de confianza, y
declaración perfecta del propósito de subvertir el gobierno. Y si a
ello se añadieren las recompensas y castigos visiblemente emplea-
dos con igual fin, y todas las artes que la ley pervertida utiliza para
apartar y destruir cuanto se hallare al paso de tal propósito y no
quisiere plegarse y consentir en la tradición de las libertades de su
país, ya no cabrá duda sobre la naturaleza de la acción. Fácil es de-
terminar qué poder convendrá que tuvieren en la sociedad quienes
así emplean el suyo opuestamente a la confianza que les acompañara
en su institución primera, y nadie puede dejar de ver que el que una
vez intentara acciones de, esta especie no habrá ya de ser tenido por
merecedor de crédito. (Traducción ajena.)

2. Alexis de Tocqueville habla en este fragmento sobre la relación entre ética


y política en los gobernantes democráticos.

Los que están encargados, en los Estados Unidos, de dirigir los


negocios del público, son a menudo inferiores en capacidad y en
moralidad a los hombres que la aristocracia llevaría al poder; pero
su interés se confunde y se identifica con el de la mayoría de sus
conciudadanos. Pueden cometer frecuentes infidelidades y graves
errores, pero no seguirán jamás sistemáticamente una tendencia hos-
til a esa mayoría; y no sucede nunca que impriman al gobierno un
rumbo exclusivo y peligroso. La mala administración de un mag-
istrado, bajo la democracia, es por otra parte un hecho aislado que
no tiene influencia sino durante la corta duración de tal adminis-
tración. La corrupción y la incapacidad no son intereses comunes
que puedan ligar entre sí a los hombres de manera permanente. Un
133

magistrado corrompido o incapaz, no combinará sus esfuerzos con


otro magistrado, por la sola razón de que este último es tan inca-
paz y corrompido como él, y esos dos hombres no trabajarán jamás
de consuno para hacer florecer la corrupción y la incapacidad en
sus descendientes. La ambición y las maniobras del uno servirán,
al contrario, para desenmascarar al otro. Los vicios del magistrado,
en las democracias, son en general enteramente personales. Pero los
hombres públicos, bajo el gobierno de la aristocracia, tienen un in-
terés de clase que, si se confunde a veces con el de la mayoría, suele
ser a menudo distinto. Ese interés forma entre ellos un lazo común
y durable; los invita a unir y a combinar sus esfuerzos hacia una
meta que no es siempre la felicidad del mayor número; no liga so-
lamente a los gobernantes unos con otros, los une también con un
número considerable de gobernados, porque muchos ciudadanos,
sin estar revestidos de ningún empleo, forman parte de la aristoc-
racia. El magistrado aristocrático encuentra un apoyo constante en
la sociedad, al mismo tiempo que encuentra otro en el gobierno.
Ese objeto común que, en las aristocracias, une a los magistrados
al interés de una parte de sus contemporáneos, los identifica y los
somete, por decirlo así, al de generaciones futuras. Trabajan para el
porvenir tanto como para el presente. El magistrado aristocrático
es impulsado a la vez hacia un mismo punto por las pasiones de los
gobernados y por las suyas propias, y podría decirse casi que por las
pasiones de su posteridad. ¿Cómo sorprenderse si no resiste? Así
se ve a menudo en las aristocracias cómo el espíritu de clase arrastra
a los mismos que no corrompe, acomoda poco a poco la sociedad
a su uso, sin darse cuenta y la prepara para sus descendientes. No
sé si ha existido alguna vez una aristocracia tan liberal como la de
Inglaterra, que haya suministrado al gobierno del país, sin interrup-
ción, hombres tan dignos y tan ilustrados. Es, sin embargo, fácil
de reconocer que, en la legislación inglesa, el bien del pobre con-
cluyó por ser a menudo sacrificado al del rico y los derechos del
mayor número a los privilegios de algunos tan sólo. Así Inglaterra,
en nuestros días, reúne en su seno todo lo que la fortuna tiene de
más extremado y miserias que igualan casi su poder y su gloria. En
los Estados Unidos, donde los funcionarios públicos no tienen in-
terés de clase que hacer prevalecer, la marcha general y continua del
gobierno es benéfica, aunque los gobernantes sean a veces inhábiles
y algunas veces despreciables. Hay, pues, en el fondo de las institu-
ciones democráticas, una tendencia oculta que hace a los hombres
contribuir a menudo a la prosperidad general, a pesar de sus vicios
134 Ética y política

o de sus errores, en tanto que, en las instituciones aristocráticas, se


descubre a veces una tendencia secreta que, a despecho de los tal-
entos y de las virtudes, la arrastra a contribuir a la miseria de sus
semejantes. Así es cómo sucede que, en los gobiernos aristocráticos,
los hombres públicos hagan el mal sin quererlo y en las democracias
produzcan el bien sin haberlo pensado.
Lección18

Los derechos constitucionales

Identificación de los valores constitucionales, conocimiento de los dere-


chos y deberes fundamentales reconocidos en la Constitución española y
en el Estatuto de autonomía de Galicia y de la regulación de su ejercicio.

¿Para qué sirve esta lección


Para aprender cuales son los derechos que nos reconocen la Constitución Es-
pañola y el Estatuto de Galicia, que son las principales leyes que afectan a nues-
tras vidas.

¿Por qué es importante todo esto?


Porque esas leyes influyen mucho en lo que podemos hacer o no y por lo tanto,
si conocemos su contenido podemos ordenar mejor nuestra vida.

¿Qué problemas prácticos hay?


Llegar (¿por fin?) a una organización política de España que satisfaga a todos o
por lo menos que permita una estabilidad institucional de un siglo o así (¿por
que tenemos que ser menos que Noruega o que Francia?)
136 Los derechos constitucionales

¿Qué necesitamos?
Criterios claros para organizar en la práctica el Estado. Con respeto a los dere-
chos arreglar la compatibilidad entre Administración central del Estado y Co-
munidades autónomas, hacer que los derechos declarativos dejen de serlo; arre-
glar la su compatibilidad interna.

¿Qué dicen los filósofos?


Los mismos que con respeto a cualquier cuestión de derechos. Para el federa-
lismo vale Kant, Althusius y a ser posible algo más moderno.

¿Qué podemos pensar?


Que no hay que sacralizar la constitución ni el estatuto. que valores defiende la
constitución que valores defiende el estatuto que derechos reconoce la constitu-
ción (exhaustivo) que deberes reconoce la constitución (exhaustivo) regulación
práctica, relación concreta entre la ley y el ciudadano. Explicar que nuestra
actual constitución fue fruto del consenso postfranquista.

Los derechos constitucionales


La Constitución española de 1978 recoge como deberes y derechos fundamen-
tales del ciudadano, entre otros muchos de los derechos humanos que ya cono-
cemos:

1. Igualdad ante la ley. Significa que la ley es igual para todos, hombres y
mujeres, ricos y pobres, blancos y negros, etc. Ninguna circunstancia
puede utilizarse para discriminar a las personas.

2. Derecho a la vida. La pena de muerte no se puede aplicar en ningún


caso. El estado no puede matar a nadie, y por supuesto el homicidio es un
crimen legalmente castigado.

3. Libertad de consciencia Cada quien puede escoger su religión o escoger no


tener religión. El Estado no puede meterse en las cuestiones espirituales
de la gente.

4. Estado laico. El Estado español no tiene religión ni puede favorecer a una


religión más que a otra.
137

5. Libertad y seguridad.

6. Habeas corpus. El Estado no puede detener a una persona sin dar parte
a un juez que controlará que la policía la trate adecuadamente. Si no
se encuentran pruebas contra nosotros, la policía tiene que soltarnos en
breve tiempo.

7. Asistencia letrada al detenido. Cuando somos detenidos, tenemos dere-


cho la recibir la ayuda de un abogado aunque no tengamos dinero para
uno de pago. El Estado debe poner a nuestra disposición un abogado
gratuitamente.

8. Honor, intimidad y propia imagen. Nadie puede ofendernos ni faltarnos


el respeto. Tampoco puede investigar en nuestra vida privada o decir cosas
malas de nosotros que nos hagan quedar mal delante de los demás. Si
alguien hace esto, nosotros podemos denunciarlo en los tribunales que lo
castigarán.

9. Inviolabilidad del domicilio. Nadie puede entrar en nuestra casa sin per-
miso, ni la policía. Sólo puede hacerlo la policía si es evidente que estamos
cometiendo un delito. Si una persona entra en nuestra casa sin permiso
puede ser castigado con la cárcel.

10. Secreto de las comunicaciones. Las cartas que enviamos sólo pueden ser
abiertas por sus destinatarios y por nadie más sin una orden de un juez
para investigar un posible delito. Tampoco nadie puede escuchar nuestras
conversaciones telefónicas.

11. Derecho de circulación. Podemos viajar por todas partes en España y en


el mundo. El Estado no puede limitarnos arbitrariamente.

12. Libertad de expresión. Sin injuriar o calumniar a los demás, todos pode-
mos expresar libremente lo que deseemos sin que nadie pueda impedirlo.
Esto no significa que podamos hablar o escribir donde queramos porque
también tenemos que respetar a los demás.

13. Derecho a la información. Tenemos derecho la recibir información de los


periódicos o la televisión porque los datos sobre lo que ocurre son muy
importantes para poder participar en política o tomar decisiones sobre
nuestras vidas. El Estado no puede censurar ningún medio de comuni-
cación.
138 Los derechos constitucionales

14. Derecho de reunión. Podemos reunirnos pacíficamente con quien quera-


mos para cualquier actividad legal. El Estado no puede impedirnos reu-
nirnos ni en privado ni en público.

15. Derecho de asociación. Podemos asociarnos con quien queramos para


cualquier actividad legal. El Estado sólo puede disolver asociaciones que
estén dedicadas a hacer cosas ilegales.

16. Derecho a participar en los asuntos públicos. A partir de la mayoría de


edad, todos podemos presentarnos a las elecciones y llegar a tener cargos
políticos si los ciudadanos nos eligen.

17. Derecho a la tutela judicial efectiva.

18. No retroactividad de la ley.

19. Derecho a la educación.

20. Derecho a la sindicación.

21. Derecho de huelga.

22. Igualdad dentro del matrimonio.

23. Derecho a la propiedad privada.

24. Derecho al trabajo.

25. En el discriminación laboral por sexo.

26. Libertad de empresa.

27. Deber de defender a España.

28. Deber de sostener los gastos públicos.

Á veces los derechos son exigibles legalmente, otras simplemente orientan el


trabajo de los gobiernos. Hay leyes que nos protegen como trabajadores, como
consumidores, cuando pagamos impuestos o tenemos que hacer alguna gestión
administrativa. Si alguien incumple alguna de estas leyes, siempre podemos de-
nunciarlo y un juez independiente e imparcial escuchará nuestros argumentos y
decidirá de acuerdo con lo que dice la ley correspondiente.
139

¿Qué debemos hacer?


En nuestro país y en nuestra comunidad las leyes fundamentales son la Cons-
titución y el Estatuto de Autonomía. Estas leyes son el reflejo más preciso del
consenso político y de la voluntad política de los ciudadanos, reflejada en las
urnas. La Constitución y el Estatuto de autonomía pueden cambiar si existe el
acuerdo ciudadano para hacerlo; pero, mientras no se cambien, las leyes funda-
mentales son la estructura básica del Estado.

Conviene recordar
• Los derechos que la Constitución reconoce sólo pueden existir si acepta-
mos el deber de respetarlos y contribuir materialmente a su existencia.

• Los derechos que reconocen la Constitución y el Estatuto de autonomía


están inspirados en la Declaración de derechos humanos de la ONU.

• Los derechos constitucionales son la base de nuestro estado social y demo-


crático de derecho.

• Entre los derechos constitucionales están el habeas corpus, la inviolabili-


dad del domicilio, el secreto de las comunicaciones, la libertad de circu-
lación, el derecho de información, reunión, asociación y expresión.

• Entre los derechos sociales la Constitución reconoce el derecho al trabajo,


la sindicación, la huelga, la educación, la propiedad privada, la libertad de
empresa, la no discriminación laboral por sexo, etc.

Ejercicios de la lección
1. Pon un ejemplo de cada uno de los derechos constitucionales recogidos en
la lección.

Textos a comentar
1. En este texto, Tocqueville nos habla de la relación entre centralización y
derechos garantizados por el estado.

Los partidarios de la centralización en Europa sostienen que el poder


gubernamental administra mejor las localidades de lo que ellas mis-
mas podrían hacerlo; esto puede ser cierto, cuando el poder central
140 Los derechos constitucionales

es ilustrado y las localidades no tienen cultura, cuando es activo y


ellas son inertes, cuando tiene la costumbre de actuar y ellas la de
obedecer. Se comprende, incluso, que mientras la centralización
aumenta, más se acrecienta esa doble tendencia, y la capacidad de
una parte y la incapacidad de la otra se hacen más patentes. Pero
yo niego que suceda así cuando el pueblo es ilustrado, despierto en
relación con sus intereses, y habituado a pensar en ellos como lo
hace en Norteamérica. Estoy persuadido, por el contrario, de que
en ese caso la fuerza colectiva de los ciudadanos será siempre más
poderosa para producir el bienestar social que la autoridad del go-
bierno. Confieso que es difícil indicar de una manera cierta el medio
de despertar a un pueblo que dormita, para darle pasiones y luces
que no tiene; persuadir a los hombres que deben ocuparse de sus
negocios, es, no lo ignoro, una empresa ardua. Sería a veces menos
difícil interesarlos en los detalles de la etiqueta de una corte que en
la reparación de su casa común. Pero pienso también que cuando
la administración central pretende reemplazar por completo el con-
curso libre de los primeros interesados, se engaña o pretende en-
gañarnos. Un poder central, por ilustrado y sabio que se le imagine,
no puede abarcar por sí solo todos los detalles de la vida de un gran
pueblo. No lo puede, porque tal trabajo excede las fuerzas humanas.
Cuando él quiere, por su solo cuidado, crear y hacer funcionar tan-
tos resortes diversos, se contenta con un resultado muy incompleto,
o se agota en inútiles esfuerzos. La centralización logra fácilmente,
es verdad, someter las acciones del hombre a una cierta uniformi-
dad que acaban por querer por sí misma, independientemente de las
cosas a las que se aplica; como esos devotos que adoran la estatua
olvidando la divinidad que representa. La centralización logra sin
esfuerzo imprimir una marcha regular a los negocios corrientes; di-
rigir eficazmente los pormenores de la política social; reprimir los
ligeros desórdenes y los pequeños delitos; mantener la sociedad en
un statu quo que no es propiamente ni decadencia ni progreso; man-
tener en el cuerpo social una especie de somnolencia administrativa
que los administradores tienen costumbre de llamar buen orden y
tranquilidad pública. Es excelente, en una palabra, para impedir, no
para hacer. Cuando se trata de remover profundamente la sociedad,
o de imprimirle una marcha rápida, su fuerza la abandona. Por poco
que sus medidas tengan necesidad del concurso de los individuos, se
queda uno muy sorprendido entonces de la debilidad de esa inmensa
máquina. Se encuentra de repente reducida a la impotencia. Acon-
tece alguna vez entonces que la centralización trata, como medida
141

desesperada, de llamar a los ciudadanos en su ayuda; pero les dice:


Obraréis como yo quiera, en tanto que quiera y precisamente en el
sentido que quiera. Os encargaréis de esos detalles sin aspirar a di-
rigir el conjunto; trabajaréis en las tinieblas, y juzgaréis más tarde
mi obra por sus resultados. No es en parecidas condiciones como se
obtiene el concurso de la voluntad humana. Le hace falta libertad
en sus movimientos y responsabilidad en sus actos. El hombre está
hecho así y prefiere permanecer inmóvil, que caminar sin indepen-
dencia hacia una meta que ignora. (Traducción ajena.)

2. Tocqueville nos habla de la relación entre la libertad de expresión y la


organización de la sociedad en De la democracia en América

La división infinita del poder administrativo, más que la gran li-


bertad política y la independencia absoluta de la prensa, es lo que
multiplica tan singularmente los diarios en Norteamérica. Si to-
dos los habitantes de la Unión fueran electores, bajo un sistema que
limitase su derecho electoral a la elección de los legisladores del Es-
tado, no necesitarían sino de un corto número de diarios, porque no
tendrían más que algunas ocasiones, muy raras aunque muy impor-
tantes, de obrar juntos; pero, dentro de la gran asociación nacional,
la ley ha creado en cada provincia, en cada ciudad y, por decirlo así,
en cada pueblo, pequeñas asociaciones que tienen por objeto la ad-
ministración local. De este modo, el legislador ha obligado a cada
norteamericano a concurrir diariamente, con algunos de sus conci-
udadanos, a una obra común, y todos necesitan, por consecuencia,
un diario que les diga lo que hacen los demás. Creo que un pueblo
democrático que no tuviese representación nacional sino un gran
número de pequeños poderes locales, concluiría por poseer más di-
arios que otro cuya administración centralizada existiera al lado de
una legislatura electiva. Lo que mejor explica el desarrollo prodi-
gioso que ha tomado la prensa periódica en los Estados Unidos, es
el hecho de que la más grande libertad nacional se combina entre
los norteamericanos con las libertades locales de toda especie. Se
cree generalmente, en Francia e Inglaterra, que basta con abolir los
impuestos de la prensa para aumentar indefinidamente el número
de periódicos. Esta opinión exagera mucho los efectos de una re-
forma semejante. Los diarios no se multiplican sólo porque sean
baratos, sino según la necesidad más o menos frecuente que tiene un
gran número de hombres de comunicarse y de obrar en común. Yo
atribuiría también el poder creciente de los diarios a razones más
142 Los derechos constitucionales

generales de las que se alegan frecuentemente para explicarla. Un di-


ario no puede subsistir, sino a condición de reproducir una doctrina
o un sentimiento común a un gran número de hombres: representa
siempre a una asociación cuyos miembros son sus lectores habit-
uales. Esta asociación puede ser más o menos definida, más o menos
estrecha, más o menos numerosa; pero siempre existe su germen en
los espíritus, puesto que el periódico no muere. De aquí nace otra
reflexión que terminará este capítulo. Cuanto más iguales se hacen
las condiciones, tanto más débiles son los hombres individualmente,
con tanta más facilidad se dejan arrastrar por la corriente de la mul-
titud y más trabajo les cuesta mantenerse solos en una opinión que
ella abandona. (Traducción ajena.)
Part IV

La igualdad entre hombres y


mujeres
Lección19

Los derechos y las mujeres

Conocimiento de la lucha de las mujeres y de sus organizaciones para


la conquista de la igualdad de derechos y oportunidades y su reconoci-
miento como sujetos históricos, de derechos y de ciudadanía. Distinción
entre igualdad de derechos y igualdad de hecho, y ejemplificación y toma
de conciencia de situaciones en que la igualdad de derechos no se traduce
en igualdad de hecho.

La lección que podemos sacar del estudio de la vida de las mujeres a lo largo
de la historia es que la vida del ser humano depende enormemente de sus condi-
ciones materiales. Es decir, que cuando no hay riqueza suficiente, todo funciona
mal. Aristóteles decía que los esclavos existían porque los telares no andaban
solos y vemos que en gran medida la esclavitud de las mujeres en el pasado tenía
que ver con las limitaciones de la tecnología doméstica y de la economía en gene-
ral. Por otro lado muchas de las ideas de la educación de las mujeres en el pasado
son enormemente buenas y aprovechables: el orden, la limpieza, la abnegación,
el sacrificio por los demás, la responsabilidad, la valoración de la familia y el
hogar, la ternura, la delicadeza, la constancia, la autodisciplina, la orientación
estética, el buen gusto, etc. son cosas que deberíamos mantener y generalizar
todos.

¿Para qué sirve esta lección?


Para aprender sobre la lucha contra la discriminación de las mujeres, en el pasado
y hoy en día.
146 Los derechos y las mujeres

¿Por qué es importante todo esto?


Para comenzar algo más de la mitad de la población está formada por mujeres.
Su discriminación supone por tanto un empeoramiento de la sociedad.

¿Qué problemas prácticos hay?


Como seguir luchando contra la discriminación de las mujeres que tiene expre-
siones inaceptables moralmente.

¿Qué necesitamos?
Ideas sobre como preservar la libertad de las mujeres y acabar con su discrimi-
nación.

¿Qué dicen los filósofos?


El referente es J.S. Mill, y hay que comparar claramente sus dos obras, el Sobre
la libertad y la Sujeción de las mujeres.

¿Qué podemos pensar?


A lo largo de la historia, la situación de las mujeres dependía de la situación
de opresión y explotación en la que vivía el pueblo en las sociedades tradi-
cionales predemocráticas. A las mujeres les tocaba además sufrir la discrimi-
nación porque en la sociedad jerárquica se creía que las mujeres eran inferiores
al hombre, y en la práctica, las mujeres sufrían la violencia como consecuencia
y la explotación por parte de los varones. La historia de la discriminación y
maltrato de las mujeres Que a partir de la Ilustración en Europa, ideológica,
legal y socialmente la situación cambia. Que el cambio social es el más difícil.
El objetivo es la libertad que con normalidad lleva a la igualdad. Que el cambio
social no está conseguido. Como podríamos ayudar nosotros.
En las sociedades agrarias tradicionales existe una desigual repartición del
trabajo. Tanto los varones como las mujeres tienen trabajo fuera del hogar en la
agricultura, pero las mujeres, además, son obligadas a hacerse cargo del trabajo
necesario para mantener la casa y cuidar a los hijos. La causa de esta situación in-
justa es que, en esas sociedades atrasadas, no existen métodos de anticoncepción
eficaces, y tampoco hay tecnologías substitutivas de la lactancia natural. Por
otro lado, debido al atraso tecnológico la mortalidad infantil es muy grande.
147

Para conseguir la reproducción de la población, las mujeres estaban siempre


ocupadas embarazadas o criando los hijos. Para evitar que las mujeres se dedi-
casen a tareas no reproductivas existían fuertes prejuicios sociales e incluso leyes
que privaban de derechos a las mujeres y las dejaban bajo el poder de los sus
padres o maridos.

Conviene recordar
• En las sociedades agrarias tradicionales las mujeres eran consideradas inca-
paces de realizar trabajos y estaban jurídicamente discriminadas.

• Con la llegada de la sociedad industrial muchas mujeres comenzaron a exi-


gir iguales derechos y las mismas oportunidades de vida que los varones.

• Una de las conquistas de la igualdad para las mujeres fue su derecho al


voto.

• Aunque la ley reconozca la igualdad de todas las personas mucha gente


sigue considerando inferiores a las mujeres, cosa que es falsa y contra la
que debemos luchar.

• Muchas veces es preciso cambiar la mentalidad de las personas para que


las mujeres no resulten perjudicadas.

Ejercicios de la lección
1. ¿A qué llamamos discriminación?

2. ¿Con qué podemos decir que tenía que ver la esclavitud las mujeres en el
pasado?

3. ¿Qué ideas de la educación tradicional de las mujeres son buenas y aprovech-


ables?

4. ¿Por qué decimos que la discriminación de las mujeres supone un empeo-


ramiento de la sociedad?

5. ¿Qué significasociedad jerárquica?

6. ¿Que significa explotación?

7. ¿En qué sentido podemos decir que el cambio social respecto a la no dis-
criminación de las mujeres no está conseguido totalmente?
148 Los derechos y las mujeres

8. ¿Cuál es la causa de la discriminación femenina en las sociedades agrarias


tradicionales?

9. ¿Qué función tenían los prejuicios sociales contra las mujeres en la so-
ciedad tradicional?

10. ¿Qué efecto llegaban a tener las leyes sobre las mujeres en la sociedad
tradicional?

11. ¿Qué derecho consideramos muy importante en la consecución de la igual-


dad social y legal de las mujeres?

Textos a comentar
Mary Woolstonecraft, una de las primeras autoras feministas, comenta en su
libro Una reivindicación de los derechos de la mujer las características erróneas de
la educación femenina de su tiempo.

Para excusar la tiranía de los hombres y dar cuenta de ella, se han


avanzado para probar que los dos sexos, al adquirir la virtud, de-
berían intentar conseguir un carácter muy diferente o, para hablar
explícitamente, que no se debe permitir a las mujeres tener suficiente
fuerza mental para adquirir lo que realmente merece el nombre de
virtud. Sin embargo parecería que, al permitirles tener almas, sólo
hay un modo designado por la providencia para conducir a la hu-
manidad a la virtud o a la felicidad.
Entonces, si las mujeres no son un ejambre de efímeros juguetes,
¿por qué deberían ser mantenidas en la ignorancia, bajo el especioso
nombre de "inocencia"? Los hombres se quejan, y con razón, de las
tonterías y caprichos de nuestro sexo, cuando no satirizan nuestras
pasiones obstinadas o nuestros ocultos vicios. Yo diría, ¡mirad el
efecto natural de la ignorancia! Siempre será inestable la mente que
sólo tiene prejuicios en los que descansar, y la voluntad corriente
correrá con furia destructiva cuando no hay barreras que rompan
su fuerza. A las mujeres se les cuenta desde su infancia y se les en-
seña por el ejemplo de sus madres, que un pequeño conocimiento de
la debilidad humana, justamente llamada "astucia", temperamento
suave, obediencia EXTERNA, y una atención escrupulosa a una
forma pueril de propiedad, obtendrá para ellas la protección del
hombre; y si que si son guapas, todo lo demás no hace falta, por
lo menos durante veinte años de su vida.
149

Así describe Milton a nuestra frágil primera madre; aunque cuando


nos dice que las mujeres están formadas para la suavidad y la dulce
gracia atractiva, no puedo comprender su mensaje, a menos que,
en la verdadera vena mahometana, quiera privarnos de nuestras al-
mas e insinuar que somos seres sólo designados para la dulce gracia
atractiva, y la dócil ciega obediencia, para gratificar los sentidos del
hombre cuando ya no puede volar con las alas de la contemplación.
2. John Stuart Mill expone en su obra La sujeción de las mujeres por qué es
difícil su liberación:
Todas las causas, sociales y naturales, se combinan para hacer im-
probable que las mujeres se rebelen colectivamente contra el poder
de los hombres. Están tan lejos en una posición diferente de to-
dos las otras clases de súbditos, que sus amos requieren algo más
de ellas que un servicio real. Los hombres no solamente quieren
la obediencia de las mujeres, ellos quieren sus sentimientos. Todos
los hombres, excepto los más brutales desean tener, en la mujer más
cercanamente conectada con ellos, no una esclava forzada sino una
voluntaria, no meramente una esclava, sino una favorita. Ellos por
lo tanto lo han puesto en práctica todo para esclavizar sus mentes.
Los amos de todos los otros esclavos se apoyan, para mantener la
obediencia, en el miedo; ya el miedo a ellos mismos ya miedos re-
ligiosos. Los amos de las mujeres quieren más que la simple obedi-
encia, y han aplicado la fuerza entera de la educación a efectuar su
propósito. Todas las mujeres son educadas desde sus más tempranos
años en la creencia de que su ideal de carácter justo el opuesto a los
hombres; no la propia voluntad, y el gobierno por el auto control,
sino la sumisión, y ceder al control de otro. Todas las moralejas
les dicen que éste es el deber de las mujeres, y todas los corrientes
sentimentalismos que está en su naturaleza vivir para otros; hacer
una completa abnegación de sí mismas, y no tener vida sino en sus
afectos. Y por sus afectos se quiere decir los únicos que se les per-
mite tener, los de los hombres con los que están conectadas, o los
de los niños que constituyen un vínculo adicional y irrompible en-
tre ellas y un hombre. Cuando ponemos juntas tres cosas, primero,
la atracción natural entre los sexos opuestos; segundo, la entera de-
pendencia de la esposa de su marido, siendo todo privilegio o placer
que ella tiene o su regalo o algo que depende enteramente de su vol-
untad; y últimamente, que el principal objeto que persigue el ser
humano, la consideración, y todos los objetos de la ambición social,
pueden en general ser buscados y conseguidos por ella sólo a través
150 Los derechos y las mujeres

de él, sería un milagro si el objeto de ser atractivas para los hom-


bres no se hubiera convertido en la estrella polar de la educación
femenina y de la formación de su carácter. Y, habiendo adquirido
estos grandes medios de influencia sobre las mentes de las mujeres
un instinto de egoísmo hizo a los hombres proveerse de ellos al máx-
imo como medio de mantener a las mujeres en sujeción, represen-
tante ante ellas blandura, sumisión y resignación de toda voluntad
individual en las manos de un hombre, como la parte esencial del
atractivo sexual.
Lección20

La discriminación de las mujeres

Análisis de las causas y factores de la discriminación de las mujeres Pla-


nificación de alternativas a situaciones, reales o simuladas, de discrimi-
nación.

¿Para qué sirve esta lección


Para aprender sobre las causas de la discriminación de las mujeres y cómo evi-
tarla.

¿Por qué todo esto es importante?


Si sabemos por qué están discriminadas las mujeres y como evitar que lo estén,
será más fácil contribuir la que obtengan la igualdad.

¿Qué problemas prácticos hay?


Igual que hay un peligro en el liberalismo de avanzar cara al atomismo social
es posible en el feminismo pasar a ese atomismo por excesiva «masculinización»
de la mujer por rechazo del papel «tradicional» de la mujer en la familia puede
pasarse al rechazo de la familia en si incluso. La solución puede venir de mano
del propio feminismo que busca «feminizar» al varón, en el sentido de hacerlo
preocuparse por el valor de la familia y distraerlo un poco, o mucho, del ámbito
del trabajo que como mucho tiene el prestigio o los bienes materiales como
recompensa. Es decir, hay que valorar la familia.
152 La discriminación de las mujeres

¿Qué podemos pensar?


Ninguna institución social debería mantenerse si supone el mal trato y la limi-
tación de la libertad y el desarrollo para muchas personas. Por eso la discrimi-
nación de las mujeres debe ser rechazada. Hay que dejar claro que la liberación
de las mujeres no debe dar lugar a la guerra de los sexos. Los hombres deben
simplemente aceptar la pérdida de su dominio como una posibilidad de mejora
moral: pasar de amos a compañeros es mejorar como personas, aunque, como
toda mejora, precise de esfuerzo. Resulta equivocado para cualquiera mujer caer
en el odio contra los varones de hoy, por los indudables errores que cometieron
los varones en el pasado. Debemos repetir que el mal hecho por otros no es
excusa para hacer mal nosotros. El rencor y el odio no son una base buena para
nuestro comportamiento, ni como individuos ni como grupos, y sólo pueden
ser causa de más males.
Muchas veces aparecen en la televisión y los periódicos noticias u opiniones
que hacen aparecer a todos los musulmanes como personas agresivas y repulsivos
fanáticos. Esta idea es falsa, además de estúpida y debe ser rechazada. Si los
musulmanes son casi mil millones, ¿Cómo van a ser mil millones de terroristas
en el mundo? Las personas malvadas o trastornadas siempre son una minoría
en cualquiera sociedad. Las creencias del islam son bastante semejantes a las
que tienen los cristianos, su forma de vida, en las relaciones entre los sexos,
muy parecida, y su concepción de la violencia muy semejante. Simplemente
hay unos pocos fanáticos que creen defender su religión por la violencia. Sin
duda, esos fanáticos deben ser perseguidos y encarcelados cuando cometan actos
ilegales. Pero creer que una persona va a ser terrorista sólo por tener una religión
determinada es tener una idea falsa y que sólo puede mantenerse por el miedo o
por el odio a los que son diferentes.
Un criterio es qué pasa con los disidentes.
Quizá por causas y factores no se deba entender una explicación de histo-
ria/antropología conjetural sino la mención de las situaciones en las que se de
aún la discriminación Hablar de los países pobres en los que el machismo es
consecuencia y causa del atraso. Tras la aparición de la sociedad industrial, los
avances de la ciencia permitieron que las familias escogieran el número de hijos
que querían tener, utilizando medios anticonceptivos. Por otro lado la sociedad
industrial no precisa una gran población para la producción. También el tipo de
trabajo industrial hace menos compatible la maternidad de lo que era con la agri-
cultura. La tecnología médica y higiénica hizo más fácil la supervivencia de los
niños por lo que las mujeres no siempre estaban ya embarazadas. Con los nuevos
inventos, pañales desechables, leches de substitución, alimentos preparados, las
tareas de atención a los niños fueron simplificadas y puestas al alcance de los
varones. Por lo tanto en la sociedad industrial no hay razones para la distribu-
153

ción discriminatoria del trabajo del hogar entre hombres y mujeres. Habíamos
dicho antes que en la sociedad tradicional existían prejuicios sociales y religiosos
contra las mujeres para mantenerlas recluidas en la casa. Por supuesto existían
además leyes contra la igualdad y las costumbres imponían restricciones arti-
ficiales sobre la educación de las mujeres lo que las incapacitaba para trabajos
fuera del hogar. Las ideas sociales tardan en cambiar y se mantienen aunque
ya no cumplan ninguna función. Las tendencias conservadoras en la sociedad
reaccionan para mantener las condiciones del pasado. Hay que tener en cuenta
que en las sociedades tradicionales no existía una conciencia de que los valores
y las ideas morales tuvieran una relación con las necesidades materiales de la
población. Simplemente se creía que esa era la única manera de hacer las cosas.
Por lo tanto sus normas morales funcionaban como prejuicios irracionales, de
fuerte carga emocional y muy difíciles de cambiar aunque sea necesario hacerlo.
Para las mujeres del siglo XIX, pronto estuvo claro que la discriminación no
debía continuar. Las mujeres pobres fueron ocupadas como obreras desde los
comienzos de la industria, por no que seguían trabajando fuera y dentro de casa.
Las mujeres de la burguesía fueron las que comenzaron a demandar educación,
igual que los hombres y libertad para dedicarse a las mismas tareas que estos.
Sus demandas no eran sólo sociales, laborales y culturales, sino también políti-
cas pues las ideas democráticas se desarrollaron en un ambiente machista y no
reconocían el derecho al voto a las mujeres. La lucha principal de las mujeres
se desarrolló en el campo de las ideas. Se trataba de acabar con los prejuicios
misóginos que llevaban siglos siendo difundidos, compartidos por muchas mu-
jeres e incluso defendidos por importantes escritores o líderes religiosos. A veces
incluso por broma literaria. Hablar del tópico literario de las discusiones femi-
nistas y antifeministas (Bocaccio, Talavera, Bernat Metge, etc.) Las afirmaciones
de los filósofos y filósofas, escritoras y escritores feministas pasaban por la de-
fensa de la igualdad real entre hombres y mujeres, y reclamaban que teniendo
en cuenta las capacidades semejantes de las personas independientemente de su
sexo, la sociedad estableciera la libertad legal para que las mujeres escogieran su
camino en la vida.
Se consiguió con dificultad la igualdad de derechos en los países occidentales.
En el mundo entero, sin embargo, quedan muchos países que incluso en el nivel
teórico niegan la igualdad de derechos entre hombres y mujeres. Frecuente-
mente en estas sociedades se profesan religiones que defienden ideas patriarcales
(machistas). Los países en los que la igualdad entre hombres y mujeres no existe
son normalmente países económica y tecnológicamente atrasados, en los que
la industria no está desarrollada. Aun en los países occidentales, la igualdad de
derechos entre hombres y mujeres es un hecho social muy reciente. En muchos
casos quedan prejuicios, sobre todo en las personas mayores, contra la igualdad
y en favor de la separación de los trabajos por sexo. Sin embargo las nuevas
154 La discriminación de las mujeres

generaciones contemplan con normalidad la igualdad legal de hombres y mu-


jeres y que las mujeres trabajen en oficios y profesiones que antiguamente sólo
desempeñaban los hombres.

Conviene recordar
• Las mujeres estaban discriminadas en la sociedad agraria por el atraso tec-
nológico que requería de mucha mano de obra, y no aportaba una medi-
cina eficiente ni medios alternativos para la crianza de los hijos.

• Las mujeres en la sociedad industrial no tienen por que dedicarse sólo a la


casa y los hijos.

• La economía y los cambios legales permiten la autonomía de las mujeres


sin que tengan que casarse y la industria no presiona para aumentar la
natalidad.

• La sociedad industrial y de servicios demanda la educación general de la


población y permite por lo tanto que las mujeres dediquen parte su vida
al trabajo como pueden hacerlo los varones.

• Con el avance económico de los países pobres todas las mujeres del mundo
podrán ser iguales que los hombres.
Lección21

La violencia contra las mujeres

Rechazo de la violencia de género Recopilación de información sobre las


medidas destinadas a la prevención y protección integral de la violencia
contra las mujeres.

Antes de hablar del divorcio, hablar de la paciencia. Más que una retahíla
de leyes, medidas o conductas concretas y una valoración de su eficacia. -policía
femenina -alejamiento -pisos de acogida, etc. Nuestras creencias románticas no
son la mejor preparación para el matrimonio. En el cine y en las novelas vemos
siempre la parte bonita de las relaciones, el enamoramiento, el cortejo, la su-
peración de las dificultades que los malos entendidos o la timidez pueden crear,
el picante coqueteo, el triunfo del amor compartido, las declaraciones de amor
(reordenar). A veces la película remata con el primer beso apasionado. Pero la
vida va más allá que el cine o la literatura. La convivencia en pareja, la forma-
ción de una familia, es un camino de montaña, difícil, con muchas ocasiones
para el placer y la alegría de los buenos sentimientos, pero que también necesita
de esfuerzo moral. Para convivir necesitamos paciencia, comprensión, ternura,
propósito de seguir adelante y la voluntad firme de evitar hacer daño a los que
amamos. Tenemos que tener presente que en toda relación larga van a surgir
problemas por varias causas, el trabajo, las relaciones con las familias políticas y
las diferencias entre las personas, que descubren que se quieren pero que no es-
tán de acuerdo en todo,(es preciso tratar de resolver estos problemas con calma y
por el diálogo, pero si no) pueden causar perjuicios a la relación amorosa si no se
consigue quitarles importancia y resolverlos o soportarlos juntos con paciencia
y cariño.
156 La violencia contra las mujeres

¿Para qué sirve esta lección?


Para aprender que podemos hacer contra la violencia machista.

¿Qué problemas prácticos hay?


El problema práctico sería, naturalmente reducir o eliminar completamente es-
tos fenómenos. El problema de como colaborar a que dejen de ocurrir estas
cosas. · Ver si es posible acudir sólo a la ley · ver si realmente es una cuestión de
machismo · Ver si es posible que la psicología (terapia de pareja, etc) ayude a las
familias con problemas.

¿Qué necesitamos?
Ideas claras sobre cuales son las causas de la violencia machista y como atajarlas.

¿Qué dicen los filósofos?


El referente puede ser Mill para el feminismo y para el rechazo de la violencia
puede ser Buber, por ejemplo.

Algunas definiciones
La violencia contra las mujeres puede aislarse como fenómeno específico que
atenta contra la igualdad entre los sexos y contra la libertad de las mujeres
además de contra su integridad física. La violencia contra las mujeres se acom-
paña normalmente de amenazas y tiene un carácter de continuidad que llega a
impedir la vida normal de las agredidas y en muchos casos acaba con su asesi-
nato.

¿Qué podemos pensar?


Que es la violencia de género Como puede evitarse medidas sociales medidas
legales. En los países europeos la violencia dentro de las familias es uno de
los fenómenos criminales más alarmantes, teniendo en cuenta que se trata de
sociedades con una criminalidad muy baja. Las víctimas de estos delitos suelen
ser mujeres atacadas por sus parejas masculinas o bien niños y niñas atacadas
por sus progenitores o cuidadores.
157

¿Qué debemos hacer?


La lucha contra este fenómeno tiene una dimensión legal y otra socio-cultural.
Naturalmente el Estado debe disponer las leyes necesarias para castigar y di-
suadir a las personas que incurran en estas conductas. Sin embargo, tenemos
que tener claro que ninguna ley puede eliminar ningún comportamiento delic-
tivo. Para acabar con estos hechos es necesario hacer un esfuerzo de cambio
de las ideas sociales sobre las mujeres y las relaciones de pareja. Los varones
no pueden considerar a las mujeres como su propiedad y deben respetar su au-
tonomía y libertad. Las decisiones de la familia deben ser tomadas por consenso
tras un diálogo que tenga en cuenta los deseos y los sentimientos así como las
opiniones de sus miembros y que procure el bien común. En caso de disen-
sión o desacuerdo irrecuperable, que motive el rompimiento de la pareja, es
necesario disolver los vínculos familiares de una forma civilizada, no hostil, te-
niendo en cuenta que en muchas ocasiones existen hijos, que tienen derecho a
que sus padres permanezcan como referente ético y afectivo (modelo de buen
comportamiento y fuente de amor) y a que sus relaciones sean un modelo por
lo menos de buena comunicación y mutuo respeto.
La ruptura nunca debe suponer una mala relación. De la carencia de amor
debe pasarse al respeto y no al odio. Cuando cesa la convivencia, debe per-
manecer el respeto y nunca debe aparecer el odio.
Para prevenir, hablar de la terapia de pareja, dejar de hablar de lucha, que
parece cosa de consigna maoísta.

Conviene recordar
• La violencia contra las mujeres va contra la igualdad entre los sexos y
contra la libertad de las mujeres.
• La lucha contra la violencia machista se hace por la ley y también debe
hacerse por la opinión pública.
• Los varones no pueden considerar a las mujeres como su propiedad y
deben respetar su autonomía y libertad.
• Las decisiones de la familia deben ser tomadas por consenso, tras un diá-
logo que tenga en cuenta los deseos y los sentimientos, así como las opi-
niones, de sus miembros.
• Ante el conocimiento de un caso de violencia machista es necesario de-
nunciarlo para evitar un agravamiento de la situación.
158 La violencia contra las mujeres
Part V

El multiculturalismo y el
interculturalismo
Lección22

La cultura humana

Identificación y respeto por las diferencias sociales y culturales y valo-


ración de sus manifestaciones en actitudes, costumbres y formas de vida
distintas a la propia, como enriquecedoras de la convivencia en una
sociedad plural.

Hay que dejar claro que no se trata de apoyar el ultraindividualismo y el «su-


permercado» de las culturas, pero en última instancia esto sería mejor que el
totalitarismo. hay que poner resto de la naturaleza "dejar claro que la cultura es
una continuación de ella, para no divinizarla al tiempo no enfatizar demasiado
que somos animales para... Hablar en positivo: existe la cultura humana y las di-
ferentes contribuciones, expresión, que todos podemos aceptar y contribuciones
malas que todos debemos rechazar.

¿Para qué sirve esta lección?


Para aprender qué es la cultura, qué importancia tiene en la nuestra vida y cómo
debemos relacionarnos con ella.

¿Por qué es importante todo esto?


La cultura es el principal medio que tiene el ser humano para relacionarse con
los demás y con la naturaleza. Si tenemos ideas apropiadas sobre ella podremos
sacarle más provecho.
162 La cultura humana

¿De qué se trata?


La cultura es nuestro modo de relacionarnos con la naturaleza y con los demás
y tiene mucho poder en nuestra vida. Si tenemos una concepción falsa de la
cultura podemos llegar a hacer cosas muy malas.

¿Qué problemas prácticos hay?


Los de la convivencia de las culturas, la supervivencia de la sociedad industrial y
la ciencia moderna.

¿Qué necesitamos?
Una concepción que ponga la cultura en su sentido verdadero, quitando armas al
nacionalismo y las ideas de «choque de civilizaciones». Cómo quitar la espoleta
al pensamiento reaccionario. Necesitamos un entendimiento de las culturas que
nos permita verlas no como una amenaza sino como una fuente de riqueza.

¿Qué dicen los filósofos?


Sobre la cultura, paradójicamente sería Marx el autor de referencia, por lo menos
en el estricto nivel filosófico. Realmente autores como Marvin Harris son cien-
tíficos que siguen un paradigma, nada más.

Algunas definiciones
La cultura es el conjunto de elementos que los seres humanos utilizan para sacar
provecho de la naturaleza. Los animales tienen una dotación genética con unas
capacidades físicas y unos instintos para utilizarlas. Los seres humanos, poco
dotados físicamente, tienen gran inteligencia y posibilidad de comunicación para
organizar la sociedad al servicio de las necesidades humanas.

¿Qué podemos pensar?


El ser humano tiene una base biológica común que determina necesidades y
posibilidades. La cultura es un modo de adaptarse a las condiciones materiales
163

de la naturaleza. Las tradiciones culturales pueden ser malas y buenas o indife-


rentes. En las sociedades modernas conviven muchas personas con tradiciones
culturales distintas. Sólo hay una cultura humana, con múltiples aportaciones.
Lo bueno y lo indiferente debemos respetarlo, venga de donde venga, y lo
malo rechazarlo igual. La cultura humana presenta muchos elementos variados,
hasta el punto de que muchos autores hablan de diversas culturas. (poner en
positivo todo esto, no como un contraargumento) Hablar de culturas en plural
es peligroso. Casi tan peligroso como hablar de razas. Para comenzar, alguna
gente puede pensar que esas culturas son realidades aisladas, completamente di-
ferentes, y que los miembros de ellas son totalmente diferentes, que unos y otros
no podemos comprendernos. Sin embargo esto no es cierto. La construcción
y el uso de los elementos culturales es algo que se aprende. Cualquiera puede
aprender (y olvidar) elementos culturales de su cultura de origen o de otras. El
proceso de adquirir nuevos elementos culturales es natural, y también es normal
olvidar cosas de nuestra cultura de origen. Tenemos que tener presente que los
elementos de la cultura (costumbres, instrumentos, tradiciones, creencias, etc.)
son tan sólo unas herramientas para sacar provecho de la naturaleza, obtener
bienes materiales para nuestras necesidades y mantener organizada la sociedad.
Nuestra inteligencia nos permite detectar nuevos métodos para servir a nues-
tras necesidades. De hecho, incluso podemos elegir la importancia relativa de
esas necesidades. Los seres humanos tenemos los mismos derechos y la misma
dignidad independientemente de los elementos culturales que aprendiéramos de
niños. Conservamos dignidad y derechos aunque cambiemos de elementos cul-
turales (idioma, religión, país, forma de vestir, de alimentarnos, etc.) Ahora
bien, todos los seres humanos tenemos cultura, usamos elementos culturales,
porque es nuestra forma de relacionarnos con el resto de la naturaleza y con
los demás. Los elementos culturales pueden ser valiosos y dignos de conservar
siempre que no olvidemos su carácter utilitario y no les sacrifiquemos valores
superiores. Esta observación es necesaria porque en muchas ocasiones la discri-
minación, la xenofobia y el racismo, se cobijan en una supuesta defensa de la
cultura (por ejemplo, rechazamos la una persona por no saber hablar nuestra
lengua, o en el vestir como nosotros).
No existe una cultura propia o ajena. Cualquier persona puede aprender
algo que es tradicional en otro lugar, y puede olvidar algo que ya no valora y que
aprendió en su lugar de origen. Todo esto es normal. Es el individuo quien debe
tener libertad para escoger su cultura y quien debe recordar siempre el valor
del ser humano por encima de sus costumbres y conocimientos. Las sociedades
tradicionales eran culturalmente homogéneas porque estaban aisladas por la di-
ficultad de comunicación y transporte. El progreso económico y tecnológico
hizo que en las sociedades modernas aumentara la inmigración y los medios de
comunicación comenzaron a presentarnos también formas de vivir característi-
164 La cultura humana

cas de personas que viven en lugares alejados. Muchos de los nuevos elementos
culturales son indudablemente atractivos. Lenguas extranjeras, nuevos alimen-
tos, ropas nunca vistas, músicas agradables, etc., son cosas que muchos acepta-
mos con gusto. Sin embargo hay otros elementos que para algunas personas
resultan negativamente sorprendentes, que causan miedo o rechazo. La reac-
ción negativa contra esos elementos culturales puede extenderse a las personas
que los poseen. Hacemos bien cuando contemplamos con interés, curiosidad y
respeto los elementos culturales hasta ahora desconocidos. Debemos recordar
que no se trata de una competición, sino de una riqueza aportada por personas
de muchos lugares del mundo que incluso podemos incorporar a nuestra vida y
en cualquier caso debemos respetar. (convendría hacer una lista de los elementos
normales de una "cultura" para ver cuál es su real importancia)

¿Qué debemos hacer?


Muchos de los elementos de nuestra cultura, como en las demás, son indiferentes
y podemos dejarlos tal como están. Otros son realmente buenos y por supuesto
podemos mantenerlos e incluso hacerlos crecer sí es posible. Pero hay otros que
son malos. Igual ocurre con las culturas ajenas. Es decir, lo que es necesario es
tener un sentido crítico hacia nuestra cultura y las ajenas, entender cuáles son los
referentes éticos comunes para toda la humanidad es juzgar desde ellos nuestra
herencia.

Conviene recordar
• La cultura es el conjunto de elementos que los seres humanos utilizan para
sacar provecho de la naturaleza y organizar la sociedad.

• Teniendo en cuenta la diversidad de grupos humanos, podemos hablar de


culturas en plural.

• Las culturas nunca están aisladas, ni son completamente diferentes.

• Todos podemos aprender nuevos elementos culturales si es preciso.

• Los seres humanos tenemos la misma dignidad y derechos independiente-


mente de la nuestra cultura.

• La actitud correcta hacia las formas culturales desconocidas es de respeto


e incluso de interés, porque son una riqueza más, aportada a nuestra so-
ciedad.
165

Ejercicios de la lección
1. ¿Qué es la cultura?

2. ¿En qué sentido podemos hablar de la cultura?

3. ¿Por qué es peligroso hablar de cultura en plural?

4. ¿Qué relación hay entre cultura y aprendizaje? ¿Cuáles son los compo-
nentes de una cultura?

5. ¿Qué finalidad tienen los componentes de una cultura? Pon ejemplos.

6. ¿Qué es el cambio cultural?

7. ¿Qué relación hay entre inteligencia y cambio cultural.

8. ¿Qué relación hay entre dignidad y diversidad cultural?

9. ¿Cuáles son los valores superiores del ser humano? ¿Dependen los valores
superiores de la cultura? ¿Por que?

10. ¿Qué relación tiene a veces la llamada defensa de la cultura con la xenofo-
bia, el racismo y la discriminación?

11. ¿Por qué se puede decir que no existe una cultura propia o ajena?

12. ¿Es normal cambiar de cultura? ¿Por que?

13. Haz una lista de cinco elementos de tu cultura e imagina por que otros
podrías sustituirlos.

14. ¿Cuáles son las causas del aumento de la inmigración en la sociedad mo-
derna?

15. Escoge un país alejado e indica algún elemento cultural tuyo que venga de
allí.

16. Menciona algún elemento cultural de un país muy alejado que te resulte
simpático.

17. ¿Por qué decimos que la cultura no es una competición?

18. ¿Cómo podemos respetar los elementos culturales diferentes de los nues-
tros?
166 La cultura humana

Textos a comentar
1. Conviene poner algún texto de Marx, sobre la cultura como elemento de
relación con la naturaleza. La cultura es el conjunto de elementos que los seres
humanos utilizan para sacar provecho de la naturaleza y ordenar la sociedad.
Los animales tienen una dotación genética con unas capacidades físicas y unos
instintos para utilizarlas. Los seres humanos, poco dotados físicamente, tienen
gran inteligencia y posibilidad de comunicación para organizar la sociedad al ser-
vicio de las necesidades humanas. La cultura humana presenta muchos elemen-
tos variados, hasta el punto de que muchos autores hablan de diversas culturas.
Hablar de culturas en plural es peligroso. Casi tan peligroso como hablar de
razas. Para comenzar, alguna gente puede pensar que esas culturas son realidades
aisladas, completamente diferentes y que los miembros de ellas son totalmente
diferentes, de lo que se trata es de entender que la cultura no es una amenaza
por venir de otro lugar. Que la "propia" cultura no puede, no debe imponerse
a los demás, y que en un mismo país pueden vivir en paz personas de muchas
religiones, de muchas lenguas, colores de piel, músicas, gastronomías, etc. Y es
dentro de esta pluralidad donde el individuo puede tranquilamente dedicarse a
escoger los elementos culturales que más le gusten y que nadie debe imponerle.
Lección23

Las actitudes hacia la variedad

Análisis de las posiciones más frecuentes ante el multiculturalismo y re-


flexión sobre los problemas éticos que de ellas se derivan: etnocentrismo
y discriminación, problemas éticos del relativismo cultural.

¿Para qué sirve esta lección?


Para aprender cuál es la actitud buena con respeto a las diferencias que encon-
tramos entre nuestros conciudadanos.

¿Por qué es importante todo esto?


Porque nuestra sociedad es cada vez más diversa, y si no sabemos cómo reac-
cionar bien ante las diferencias, podemos llegar a tener conflictos con las per-
sonas que no son como nosotros en algún aspecto.

¿De qué se trata?


La variedad es una realidad básica de las sociedades modernas. Tenemos que
aprender a llevarnos bien con las personas que son diferentes de nosotros.
168 Las actitudes hacia la variedad

¿Qué problemas prácticos hay?


Algunos partidos europeos de ultra-derecha pueden tratar de sacar beneficio de
las dificultades de convivencia. El problema es que mucha gente reacciona hos-
tilmente aún frente a las realidades culturales desconocidas. En unas sociedades
crecientemente plurales como nuestras esto causa problemas de convivencia.
Realmente hay que ser consciente del fondo epicúreo de toda la ética social con-
temporánea.

¿Qué necesitamos?
Una conciencia clara del valor positivo de las diferencias culturales en nuestra
sociedad y herramientas críticas para saber qué es bueno y qué es malo, de lo
nuestro y de lo ajeno.

¿Qué dicen los filósofos?


El referente aquí puede ser J. S. Mill para la concepción individualista. Habría
que buscar algún autor de orientación más «comunitarista» para compensar.

Algunas definiciones
La postura ideológica conocida como etnocentrismo es una reacción hostil a la
diversidad cultural. Los partidarios de las ideas etnocéntricas creen que existe
un sólo conjunto de elementos culturales que son buenos y que de alguna man-
era en los pertenecen la gente de aquí. En el hay fundamentación genética para
justificar la existencia de razas. Y decir, claro está que los rasgos físicos que agru-
pamos y identificamos como razas tienen una causa genética, pero los genes re-
sponsables existen en todas las poblaciones humanas y no están agrupados ni son
dependientes unos de otros. Por eso encontramos a veces rasgos aparentemente
extranjeros en personas que sabemos que no tienen origen en otro país. De esta
manera la genética confirma lo que sabemos por sentido común. Aunque los
rasgos intelectuales o morales obedecen a causas genéticas, si bien no sabemos
lo suficiente para establecer una causalidad concreta, lo que caracteriza a la in-
teligencia humana es su versatilidad, flexibilidad para responder a los cambios
del ambiente. Ahora bien, el ambiente humano más importante es la misma so-
ciedad. Y la sociedad es cambiante, justamente por estar basada en la inteligencia
y el lenguaje. Sabemos que la evolución, la selección natural, que es el proceso
que controla nuestros rasgos genéticos necesita de largos períodos de tiempo.
169

Y simplemente, nunca existió una realidad social durante un tiempo tan largo
como para seleccionar un rasgo genético. Todas las características humanas de-
terminadas genéticamente son previas a la existencia de la cultura. Por otro lado,
¿qué sentido tendría un rasgo desadaptativo, es decir, perjudicial para los que lo
llevan, como la estupidez?

¿Qué podemos pensar?


Que la variedad cultural siempre fue normal Que en la sociedad contemporánea
lo es más aún. Que el etnocentrismo es falso. Que la discriminación es algo
malo. Que el relativismo es falso. Que no hay que confundir el iusnaturalismo
con el etnocentrismo. Razonamientos que lo demuestran.
Las sociedades contemporáneas son plurales, también en su cultura. Existen
personas que provienen de muchos lugares y que contribuyen al nuestro bie-
nestar económico. Existen personas que olvidaron o rechazaron elementos que
eran comunes en la atrasada sociedad agraria (lenguas, religiones, determinados
alimentos, vestidos, roles de género, etc.) Nosotros mismos somos libres de
escoger que elementos culturales queremos para nuestras vidas, ya no tenemos
porque aceptar sumisamente lo que en nos transmiten los antiguos o la presión
de la sociedad. Por eso la actitud incluso ante la variedad cultural puede ser
también muy diferente y no siempre beneficiosa o aceptable.
Alguna gente reacciona hostilmente hacia los elementos culturales que le
resultan extraños o desconocidos y lamentablemente incluso con agresividad o
rechazo hacia las personas que poseen esos elementos. La postura ideológica
conocida como etnocentrismo es una reacción hostil a la diversidad cultural.
Los partidarios de las ideas etnocéntricas creen que existe un sólo conjunto de
elementos culturales que son buenos y que de alguna manera nos pertenecen
a la gente de aquí. Olvidan que la cultura es esencialmente una corriente de
elementos que son transmitidos, aceptados, rechazados, modificados a lo largo
de la historia y de todos los lugares del planeta. No hay gente de aquí o de allí
porque todo el mundo puede cambiar de lugar de residencia y es un derecho
humano hacerlo. Igual que nosotros podemos emigrar, otros pueden inmigrar.
Todos podemos juzgar los elementos culturales que queramos, pero es absurdo
pretender que casualmente todo lo bueno es nuestro y sobre todo pensar que
todo lo malo es de los otros.
Naturalmente todos podemos encontrar elementos negativos en las cosas
que aprendimos en nuestro lugar de origen y cosas buenas en los elementos
culturales que nos resultan nuevos y desconocidos. Y eso es así porque somos
capaces de hacer la comparación con nuestras ideas sobre lo que es mejor para el
ser humano en sí, independientemente de su lugar de origen o de los elementos
170 Las actitudes hacia la variedad

culturales que posee. En el nivel práctico la actitud correspondiente al etnocen-


trismo es la discriminación. Discriminar es tratar mal a la gente que es diferente
por el simple hecho de serlo. La discriminación ven normalmente vinculada al
prejuicio, que es tomar una decisión contra una persona antes de saber nada so-
bre sus características como individuo. La gente que discrimina a los diferentes
y lo hace porque piensa que alguien que posee determinado elemento cultural
o físico es malo. Esa gente no deja que el carácter, la forma real de ser de la
persona recién conocida entre en contacto con ellos y por lo tanto pierden una
posibilidad de convivir con ella.
El racismo es otra de las teorías elaboradas contra la pluralidad cultural y so-
cial. Todos sabemos que aún que pertenecemos a la misma especie, las personas
podemos tener rasgos físicos diferentes. Somos más altos, más bajos, más gordos
o más flacos, nuestra piel puede ser más o menos obscura, nuestro pelo de este o
de ese color. Todas estas variaciones ocurren de forma natural porque están en
nuestras posibilidades genéticas. Ahora bien, en el pasado, muchos grupos hu-
manos vivían en zonas aisladas y los matrimonios se producían entre personas
con algún grado de parentesco, y por lo tanto de proximidad genética. De esa
manera, al correr del tiempo, varios rasgos físicos se concentraron y acabaron
por caracterizar ese grupo de personas. Así surgió el concepto de raza. Lo que
afirman los racistas es que los rasgos físicos de la gente tienen que ver, están
asociados, con rasgos morales o intelectuales, de forma que habría razas malas
o estúpidas, lo que en su opinión, justificaría que las personas pertenecientes
la ellas fuesen maltratadas. El racismo como teoría y como práctica es com-
pletamente falso y rechazable. Los rasgos físicos no tienen unidad ni persisten
cuando las poblaciones se mezclan, lo que es una prueba de que las razas son
simplemente fruto del aislamiento de las poblaciones. Las razas son una con-
strucción, y no una realidad original. Las pruebas antropológicas demuestran
que la especie humana surgió de un sólo tronco.

¿Qué debemos hacer?


Recordemos que la selección natural hace que los individuos que poseen un
rasgo negativo sean superados por los que tienen mejores características y por
el tanto su rasgo negativo nunca puede generalizarse. Aun que pudiera ser acep-
table la idea de la inferioridad objetiva de los miembros de un grupo humano
con respeto la otros, esto nunca sería razón para maltratarlos sino todo el con-
trario, motivo para ayudarlos la compensar su situación o la salir de ella. Por
otra lado, en muchas ocasiones, calificamos como estúpidas o malvadas conduc-
tas simplemente por su diferencia con lo que nosotros estamos acostumbrados a
ver o practicar.
171

Es muy difícil medir objetivamente la inadecuación moral o intelectual de


una realidad y resulta totalmente irresponsable tomar decisiones con tal base
para juzgar a una persona o un grupo grande de ellas. El racismo es una doc-
trina que puede causar una discriminación mucho peor que el etnocentrismo.
El etnocentrismo, al referirse a cuestiones culturales, admite por lo menos en
la teoría, la posibilidad de una reconciliación entre comunidades humanas dife-
rentes (bien que siempre pretenda la sumisión del grupo culturalmente inferior
al superior. Pero el racismo cierra la puerta a todo tipo de convivencia. En
el caso más leve llega la proclamar la necesidad de la segregación de los grupos
racialmente diferente (caso del apartheid). Prohíben los matrimonios mixtos e
incluso la residencia compartida o el uso de elementos culturales en común. En
el caso peor, el racismo reclama la necesidad de matar a las personas del grupo
considerado inferior.
Como idea contrapuesta a las teorías racistas y etnocentristas fue reactivado
el concepto de relativismo cultural. Sus defensores afirmaban que los criterios
que las personas podemos usar para juzgar las culturas, pues para ellos es evi-
dente que existen varias, pertenecen a una cultura determinada, y no tienen por
lo tanto validez fuera de ella. Denuncian los intentos de emitir juicios univer-
sales como ejemplos de etnocentrismo.
Para estos autores cada persona pertenece a una cultura y es la cultura la
que le proporciona todas las ideas que esa persona tiene. Los defensores del re-
lativismo cultural niegan la creatividad de los individuos y la su posibilidad de
cambiar o reinterpretar los elementos culturales que reciben y de rechazarlos
en favor de otros, niegan que exista una naturaleza humana común. El simple
hecho de que personas de todo el mundo, que poseen elementos culturales dife-
rentes puedan criticar elementos que han aprendido igual que critican elementos
venidos de otros lugares basta para demostrar que el relativismo cultural es una
doctrina errónea. Cuando juzgamos lo nuestro y decimos que está mal, lo hace-
mos porque contraponemos lo que vemos con lo que pensamos que las cosas
deberían ser. Y ese deber ser lo tomamos no de lo que conocemos sino de lo
que consideramos que es el ser humano como tal y de lo que pensamos que le
corresponde.
El relativismo cultural pudo ser una idea bien intencionada, se reactivó en
un momento histórico en el que pretendió librar a las comunidades primitivas
de la influencia occidental, teniendo en cuenta que muchas veces esta influencia
era destructiva para las personas que la sufrían. El relativismo era un intento de
hacer que Occidente dejara en paz a estas personas. El problema es que en la
actualidad, personas que compartimos diferentes elementos culturales convivi-
mos en las mismas sociedades y este fenómeno, que es completamente natural,
va a más a medida que el progreso se extiende por el mundo. Ahora bien, la
convivencia necesita de un marco común de ideas morales, y de unas bases co-
172 Las actitudes hacia la variedad

munes de diálogo. Si creemos que las diferentes tradiciones culturales no tienen


nada en común y son inconmensurables, ¿cómo establecer este diálogo nece-
sario? ¿Cómo vamos a creer que hay actos que están bien o mal según sea para
nosotros o para ellos, como si ellos y nosotros no fuésemos seres humanos,
miembros de una misma especie y sociedad? ¿Vamos a tener leyes basadas en el
color de la piel, en la lengua que hablamos o en la ciudad en la que nacemos?
Sin duda nada de esto es posible ni aceptable.

Conviene recordar
• En las sociedades contemporáneas hay personas que provienen de muchos
lugares y contribuyen a nuestro bienestar económico.
• A veces la actitud hacia la variedad cultural de nuestra sociedad no es la
correcta. Los errores más frecuentes son el etnocentrismo, la discrimina-
ción y el relativismo cultural.
• El etnocentrismo es la creencia errónea que afirma que la nuestra es la
única forma correcta de vivir. La verdad es que en todas las culturas existen
cosas buenas y malas y que todos podemos aprender de todos.
• La discriminación y tratar mal a los que tienen una cultura diferente es
una práctica mala, porque viola la igualdad de los seres humanos y sus
derechos.
• El relativismo cultural es la creencia errónea que afirma que es imposible
juzgar las culturas. La verdad es que por encima de las prácticas y creencias
culturales están la naturaleza humana y los derechos.

Ejercicios de la lección
1. ¿Qué significa que las sociedades contemporáneas son plurales?
2. ¿Hubo algún cambio en nuestra sociedad en el paso de la vida agraria a la
industrial? Explícalo.
3. ¿Por qué somos libres para escoger o rechazar unos u otros elementos
culturales?
4. ¿A qué contribuyen los inmigrantes en nuestro país?
5. ¿Por qué crees que hay gente que reacciona hostilmente ante los nuevos
elementos culturales?
173

6. ¿Qué es el etnocentrismo?

7. ¿Qué olvidan los partidarios del etnocentrismo?

8. ¿Por qué se puede decir que no hay gente de aquí o de allí?

9. ¿Por qué podemos juzgar como buenas o malas cosas de todas partes?

10. ¿Qué actitud práctica se corresponde con el etnocentrismo?

11. ¿Qué es discriminar?

12. ¿A qué va vinculada normalmente la discriminación?

13. ¿Qué es un prejuicio?

14. ¿Por qué discrimina la gente que lo hace?

15. ¿Qué tiene de malo la discriminación?

16. ¿Qué es el racismo?

17. ¿Por qué ocurren las diferencias físicas?

18. ¿Por qué los rasgos físicos están agrupados por zonas geográficas?

19. ¿Qué afirman los racistas con respeto a los rasgos físicos, morales y inte-
lectuales?

20. ¿En qué sentido decimos que las razas son un resultado?

21. ¿En qué sentido decimos que no hay fundamentación genética para justi-
ficar la existencia de razas?

22. ¿Por qué la evolución no pudo seleccionar genéticamente rasgos intelec-


tuales o morales?

Textos a comentar
1.Uno 2.Dos
174 Las actitudes hacia la variedad
Lección24

Sociedades plurales

Valoración del interculturalismo como proyecto ético y político y refle-


xión sobre los valores mínimos de una ética cívica.

¿Qué problemas prácticos hay?


Que las diferencias de costumbres de las personas que viven en nuestras so-
ciedades lleguen a causar prejuicios y por lo tanto conflictos. como tiene, creo
que el libro de Marina, hay que poner una hoja de elementos básicos de economía,
algo parejo a lo que ocurre con las instituciones políticas.

¿Qué podemos pensar?


El mejor método de organización política es la democracia La democracia supone
el respeto a las tradiciones culturales que no afectan a la ley natural. La actitud
ante las diferencias puede ser de benevolente contemplación. Es el diálogo lo que
puede afianzar el acuerdo de todos en torno a una ética común. El intercultura-
lismo se presenta como la única solución éticamente válida a los problemas que
supone la pluralidad cultural en las sociedades modernas. El interculturalismo
consiste en la creencia de que por encima de las diferencias culturales es posible
descubrir o construir una ética común aceptable por todos los miembros de una
sociedad plural y ulteriormente aceptable por todos los seres humanos indepen-
dientemente de su origen o localización geográfica. Por eso la determinación
de una ética común no tiene por qué significar la desaparición de religiones o
tradiciones morales particulares, siempre que sean asumidas libremente por sus
176 Sociedades plurales

partidarios. La ética común ha sido llamada ética de mínimos. ¿Cómo llegar


la codificar la ética de mínimos? Se han propuesto varios métodos. El teólogo
Hans Küng propuso basarse en las principales tradiciones religiosas del mundo
y obtener los puntos de contacto. En efecto, muchos elementos de las morales
religiosas son coincidentes. Sin embargo hay algunos puntos en los que las reli-
giones presentan diferencias centrales y otros en los que presentan posturas muy
restrictivas, difícilmente aceptables para los que no las comparten (moral sexual,
por ejemplo)
El filósofo Jürgen Habermas propuso llegar la un acuerdo social entre todos
los ciudadanos. Para llegar a ese acuerdo es preciso, en su opinión, comprome-
terse éticamente a tener presentes los intereses de los demás, y a dialogar sin
hacer trampas (sin engañar o hacer uso de la retórica, etc.)
El filósofo John Rawls propuso un experimento mental para llegar a las
condiciones ideales de una sociedad aceptable por todos. Se trata de imaginar
en qué tipo de sociedad querríamos vivir si no supiéramos nada sobre que ca-
racterísticas individuales íbamos tener. De esta manera, probablemente, todos
elegiríamos una sociedad en la que nadie pueda ser perjudicado completamente,
independientemente de su situación personal. Una vez definida esa caracterís-
tica, resultaría fácil obtener las normas de comportamiento aceptables para to-
dos. Los elementos de una ética mínima sin duda deben incluir garantías para
la libertad individual, la igualdad de derechos y la justicia social. Las diversas
declaraciones de derechos humanos realizadas a lo largo de la historia pueden
ofrecer un buen punto de partida.
Interculturalismo es una palabra extraña y desagradable que nombra algo
bueno y deseable, a saber, vivir y dejar vivir y mirar a todo el mundo con
benevolencia.
Realmente vamos mal si necesitamos de una justificación filosófica o de
cualquier otro tipo para comportarnos decentemente.

Conviene recordar
• El interculturalismo es la creencia en que por encima de las diferencias
culturales es posible descubrir o construir una ética común aceptable por
todos los miembros de nuestra sociedad plural.

• Para el interculturalismo son buenas todas las formas culturales que no


estén en contra de los derechos humanos.

• El interculturalismo propone la adopción de unos puntos básicos de acuerdo


sobre lo que está bien o mal. Estos puntos formarían una llamada ética de
mínimos que todo el mundo debería respetar.
177

• La ética de mínimos, basada en los derechos humanos no tiene porque


significar la desaparición de las tradiciones culturales o religiosas cuando
son compatibles con el respeto las personas.

Ejercicios de la lección
1. ¿En qué consiste el interculturalismo?

2. ¿Supone la ética común la destrucción de todas las tradiciones culturales?


¿Por qué?

3. ¿Qué método propuso el teólogo Hans Küng para el reconocimiento de


la ética común?

4. ¿Qué método propuso Jürgen Habermas para la construcción de una ética


cívica común?

5. ¿Qué método propuso John Rawls para el descubrimiento de una ética


cívica común?

Textos a comentar
1.Uno 2.Nueve
178 Sociedades plurales
Part VI

La ciudadanía global y la
democracia
Lección25

La globalización

Toma de conciencia del nuevo orden global e identificación de los proce-


sos que contribuyen a su formación: la integración de los mercados y del
espacio político y social. o bien puede contestarse a las críticas basadas
en ideologías de izquierda.

¿Para qué sirve esta lección?


Para aprender que es la globalización, que cosas tiene de bueno y que tiene de
malo y como podemos participar en ella de un forma buena.

Por qué todo esto es importante?


Porque vivimos en un mundo cada vez más globalizado.

¿Qué es la globalización?
Llamamos globalización al proceso de progresiva unificación de la humanidad.
La globalización tiene dimensiones económicas, políticas, demográficas y cul-
turales.
182 La globalización

¿Qué causas tiene la globalización?


1. El progreso del conocimiento científico que da lugar al avance tecnológico.

2. La mejora de la sensibilidad moral.

3. El aumento de los conocimientos sobre otros países del mundo.

¿Qué problemas prácticos hay?


El problema obvio es globalizar lo que es bueno sin perder las cosas buenas y
particulares y eliminar del globo las malas.

1. Supervivencia de alguna de las dictaduras comunistas o de movimientos


guerrilleros y terroristas y peligro del surgimiento de oposiciones geopolíti-
cas sin base ideológica (Rusia) o con una falsa base ideológica (países musul-
manes).

2. Pérdida del control ciudadano de las decisiones políticas. Desencanto de


la ciudadanía y burocratización de la política.

3. Substitución de la ideología por la tecnocracia. Sustracción del discurso


ideológico e imposición de una falsa ortodoxia (ejemplo: socialdemocracia
en Europa o neoliberalismo en Mercosur). Falta de democracia o legiti-
mación de regímenes no democráticos (ONU).

4. Eliminación de las características culturales particulares. Expansión de


una cultura global de mala calidad.

5. Aislamiento del individuo con respeto a su ambiente cercano, refugio en


el mundo virtual.

6. Cambios repentinos en la economía, fluctuaciones imprevisibles.

7. Empequeñecimiento del mundo.

8. Pérdida de la magia, de lo exótico.

9. Trivialización.

10. Pérdida de la cultura rural y del contacto simbiótico con la naturaleza.

11. Empeoramiento de las condiciones de salubridad del ambiente humano.

12. Aumento de la carga psicológica (stress, depresión, etc.)


183

13. Trivialización de la cultura.

14. Comercialización de la cultura

15. Pérdida de la variedad.

16. Conversión de los individuos en consumidores, no-creadores de cultura.

17. Creación de castas de trabajadores sin derechos.

18. Aparición de la xenofobia o el racismo.

19. Fenómenos de terrorismo de respuesta.

20. Alienación y radicalismo como reacción.

21. Maltrato policial a los inmigrantes.

22. Criminalización de la inmigración.

23. Aumento de la marginación y de la criminalidad.

24. Crecimiento de las barreras egoístas (fronteras, visados, etc.)

25. Revoluciones violentas animadas por buenos sentimientos y impaciencia.

26. Riesgo de intervenciones armadas de Occidente con pretensiones supues-


tamente de salvación.

27. Nacimiento de hoaxes y campañas globales de amedrentamiento sin fun-


damentación racional.

28. Falta de instituciones globales democráticas para tratar los problemas reales.

29. Utilización de tecnología muy contaminante e insalubre, repetición de


esquemas de explotación manchesteriana.

30. Pérdida de tejido productivo, crisis económica derivada de la necesidad


de adaptación. Depresión económica de zonas no aptas para el sector
terciario, proletarización de los países no occidentales.

31. Aparición de entidades con influencia política y económica y nulo control


democrático. Posibilidades de fraude.
184 La globalización

¿Qué podemos pensar?


La globalización es el proceso de modernización y progresiva unificación de la
humanidad. Las culturas eran diversas porque las sociedades estaban aisladas por
el atraso tecnológico. De ese modo las comunidades antiguas dependían de la
adaptación al medio ambiente, que era muy diverso por la geografía y el clima.
La globalización no es un proceso nuevo. Lo natural para el ser humano es el
viaje, el intercambio, la mezcla. Durante toda la historia hubo difusión de ideas,
en la cultura, que por lo común eran mejoras, hubo invenciones y prácticas
aprendidas de los demás. También siempre fue normal el movimiento de las
poblaciones, por razones económicas o por deseo de aventura. Lo que tiene de
nuevo la globalización en el presente es que tenemos consciencia de ella, de que
por primera vez podemos tener delante de nosotros todos los productos de la
cultura humana y escoger los mejores y rechazar los malos. Por otro lado, ahora
los movimientos de población pueden ser completamente pacíficos.

Ventajas de la globalización
La globalización presenta las siguientes ventajas

1. Supresión de los bloques políticos.


Durante el siglo XX, muchos países del mundo vivían bajo dictaduras
comunistas que estaban en contra de la democracia y del capitalismo. En
estos países la gente era pobre y vivía oprimida, sin que les permitieran
relacionarse con los países libres. Una idea que favorece la globalización es
la aceptación mundial de la democracia y el capitalismo como los mejores
sistemas políticos.

2. Potenciación de las organizaciones supraestatales.


Muchos de los problemas del mundo no pueden ser resueltos por un sólo
país sino que necesitan de la ayuda internacional. Para coordinarla surgen
nuevas organizaciones políticas y económicas como la Unión Europea o
Mercosur.

3. Interconexión de la población por los nuevos medios de comunicación.


Por medio de internet, de la telefonía móvil, etc., las poblaciones del
mundo pueden intercomunicarse. La información puede circular si la
censura de los gobiernos y en las relaciones personales puede llevarnos
a la destrucción de los prejuicios.
185

4. Facilidad del transporte.


El transporte abarató el costo de los productos que ahora pueden venderse
en la otra punta del mundo. Los mercados se amplían y las personas
pueden conocerse más fácilmente aunque pertenezcan a países más dis-
tantes.
5. Urbanización.
6. Secularización.
7. Moralización de la religión
8. Adopción de elementos culturales no-perjudiciales: cultura global.
9. Aumento de la emigración.
10. Difusión de la democracia y los derechos humanos.
11. Preocupación común por (reales o supuestos) problemas globales (ecológi-
cos, por ejemplo).
12. Industrialización de los países agrícolas.
13. Terciarización de los países industriales.
14. Potenciación de las acciones cívicas.

Conviene recordar
• Llamamos globalización al proceso de modernización cultural y progre-
siva interrelación económica de los países del mundo. La globalización,
como toda realidad tiene elementos buenos y malos.
• La difusión de la tecnología hace que cada vez más países del mundo
puedan tener producción industrial y participar en el comercio mundial.
• Cada vez más países reconocen que la democracia es el mejor sistema para
la organización de la sociedad.
• Cada vez más países en todo el mundo reconocen que los derechos hu-
manos deben respetarse en todas las sociedades.
• La cultura occidental, basada en la ciencia y en la libertad del individuo
está difundiéndose por todo el mundo permitiendo la formación de una
única sociedad planetaria.
186 La globalización

Ejercicios de la lección
1. Investiga cuáles son las dictaduras comunistas que sobreviven en el pre-
sente y cuál es el nivel de vida de las personas de esos países.

2. Averigua cuales son las ideas políticas del fundamentalismo islámico shií
(Irán)

3. Averigua cuales son las ideas políticas del fundamentalismo islámico sunní
(Al Qaeda)

4. Averigua que decisiones políticas toma la Comisión Europea y quien elige


a sus miembros.

5. Averigua que decisiones políticas toma el Parlamento Europeo y quién


elige a sus miembros.

6. Compara las informaciones obtenidas en las preguntas dos preguntas an-


teriores. ¿Qué conclusión sacas?

7. Define tecnocracia.

8. Define ideología.

9. Define ortodoxia.

10. Averigua cantos de los países de la ONU son democráticos.

11. Haz una lista de elementos que creas que pertenecen a la cultura global.

Textos a comentar
1. Allport 2. Tocqueville
Lección26

Los medios de comunicación

Identificación de los recursos básicos del poder de los medios de comuni-


cación (la selección de las noticias, el lenguaje de la publicidad...) y su
incidencia en la construcción de la realidad y en nuestras decisiones y
opiniones.

¿Para qué sirve esta lección?


Para aprender qué son los medios de comunicación modernos, qué tienen de
bueno y de malo.

¿Por qué es importante todo esto?


Porque necesitamos la información que nos aportan los medios de comuni-
cación y de hecho ellos son parte de nuestra vida.

¿De qué se trata?


¿Qué criticas se hacen a los medios de comunicación?
Los problemas son:

1. Que podemos limitarnos al telediario.

2. Que no seamos conscientes del interés tras la comunicación.


188 Los medios de comunicación

3. Que no contrastemos la veracidad de lo que oímos.

Vamos a enumerar las críticas más repetidas por filósofos de diferentes escue-
las. No pretenderemos ordenarlas, ni tampoco relacionarlas con el resto de las
ideas de esos filósofos. Lo que si vamos a hacer es dar algunas respuestas a ellas.

1. Frecuentemente representan intereses políticos que debemos desenmas-


carar o identificar para no ser sus víctimas. Muchos medios de comuni-
cación, sobre todo los periódicos, las cadenas de televisión y de radio son
propiedad de grandes empresas cuyos dueños tienen una ideología política
que desean, a menudo no buscan tan sólo la ganancia económica sino in-
fluir políticamente en los ciudadanos.
Bueno, el rollo es que los periódicos, las radios y las televisiones son de
empresas que tienen ideologías, ¿por que no iban a expresarlas? ¿Por que
no iban a intentar difundirlas, convencer a alguien? La única acusación se-
ria es al tiempo completamente estúpida, a saber, que no hacen referencia
explícita a su ideología todos los días, diciendo, apoyamos al partido tal o
a la ideología tal. Para empezar si que lo hacen frecuentemente, pero aún
que no lo hagan expresamente, claro que lo hacen para quien sabe algo del
tema; la objeción es irrelevante. Por otro lado, sin negar que exista la obje-
tividad, lo cierto es que es prácticamente imposible separarla del esquema
de valores, y probablemente es inútil. La efectos prácticos basta con saber
quien es el dueño de la empresa y de que partido está más cercano.

2. A veces los medios están controlados por los gobiernos, por ejemplo, casi
siempre es así en el caso de los medios públicos (informativos o campañas
institucionales), por lo que las noticias que aportan están sesgadas para dar
una buena imagen de los gobiernos.

3. Eliminación, por omisión, de muchos elementos culturales.


Aquí tendríamos que dar la razón a los críticos si hablamos sólo de las
cadenas principales de televisión. Ya no es así incluso si hablamos de las
radios principales, y menos aún de los periódicos. Si hablamos de internet,
la crítica es simplemente falsa. La cuestión es que no podemos depender
del único que sale en la tele a las nueve de la noche. Tenemos que acos-
tumbrarnos a consultar más medios de comunicación que el telediario.

4. Sobredimensionamento de los elementos de la realidad por colocarlos en


el prime time y de una forma repetitiva.
De nuevo la solución consiste en consultar más medios de comunicación
y en entender que noticia significa cosa sorprendente, y no todo lo que
189

ocurre es noticia. Lo normal, lo bueno, lo razonable, muchas veces queda


fuera de la atención periodística justamente porque no sorprende. Pero
debe formar parte del nuestro conocimiento de la realidad.

5. Se perjudica la atención y la concentración por culpa del formato spot.


Aquí podríamos preguntar que es primero, si el problema o la solución.
Probablemente lo que hacen los publicitarios es acomodarse al tiempo
mínimo de atención que se puede captar sin decir algo relevante. Por otro
lado los spots son algo que la gente sufre, no algo que disfrute. En cuanto
puede, se pasa a la televisiones sin ellos, que no cortan los programas.
La dificultad de la alta cultura está realmente en el vocabulario y en las
referencias, es decir, en la cultura que se necesita para seguirla. Cuando
se tiene, el lapso de atención crece. Realmente el lapso de atención que
es corto en la gente es el lapso de atención sin entender nada que están
dispuestos a dar.

6. Disminuye o se estanca el nivel cultural de la población por alimentación


única de telenovelas, cotilleos o programas sensacionalistas.
De nuevo es dudoso que el nivel sea algo impuesto por la televisión (de
nuevo realmente todas estas críticas son sólo aplicables a la televisión «ge-
neralista», por otro lado la seguida mayoritariamente por la población) en
vez de algo a lo que la televisión se acomoda, justamente porque económi-
camente quiere ser la primera. Las televisiones son empresas, se creyeran
que iban a vender más publicidad poniendo ballets de Chaykovski eso
es lo que harían. La audiencia que tienen estos ballets, por ejemplo en
Radio Clásica pone de relieve que realmente no hay ningún intento de
manipular nada, y que la tele lo que hace es adaptarse al nivel del país. Sin
un despotismo ilustrado es difícil que un medio de comunicación perviva
mucho tiempo sin acomodarse a lo que quieren de él. Y el problema con
los despotismos ilustrados es que les dura poco la ilustración.

7. Promoción de una escala de valores sólo basada en los bienes comerciales.


Esto es algo que se dice siempre, incluso en uno de los libros de ética
cívica se decía que nuestra cultura estaba basada en un «consumismo de-
saforado». Hay que repetir que nadie, salvo casos psiquiátricos, compra
por los objetos en si mismos, sino por su valor social, como símbolo, o
bien por el placer que queremos obtener de ellos. Ahora bien, el placer es
parte de la felicidad, innegablemente. Hay que ver que clase de austeridad
pretenden esos críticos, que ofrecen en cambio.
190 Los medios de comunicación

8. Difusión de tópicos, o incluso falsedades, que acaban siendo aceptadas


como verdades.
Esto si que parece un problema, aunque difícilmente podemos echar la
culpa a los medios de comunicación. Siempre que no hay contrastación
de las informaciones que creemos tenemos el peligro de acabar timados.
Probablemente la pluralidad de los medios de comunicación y la necesidad
de no limitarse a un de ellos es de nuevo la mejor de las cautelas. Viene
muy bien citar el caso del «cambio climático» como ejemplo de verdad
supuesta que parece casi impuesta por repetición.

9. Para mucha gente, una reducción de la realidad a lo que sale por la tele-
visión.
De nuevo la solución única es no limitarse, consultar varios medios.

10. Creación de un discurso único. Ídem.

11. Saturación de información, lo que paradójicamente quizás, produce una


insensibilidad a los nuevos datos que llega a aislar al individuo de la reali-
dad.
Como solución obviamente de lo que se trata es de limitar los inputs, lo
que por otro lado es contradictorio con la recomendación de contrastar
las informaciones. Probablemente, en un mundo tan diverso, es necesario
asumir la necesidad de limitarse, la imposibilidad de abarcarlo todo.

¿Qué necesitamos?
Que los contenidos sean veraces, que la gente pueda criticarlos y que los medios
no sean simple canal de manipulación de las empresas de comunicación y de los
políticos. Para tomar decisiones correctas en nuestra vida necesitamos conocer
la realidad. Igualmente para tomar decisiones políticas, como miembros de una
democracia, tenemos que conocer qué pasa en el mundo. Los medios de comu-
nicación pueden aportar parte de los datos que necesitamos para ejercer parte de
nuestras responsabilidades como ciudadanos. Sin embargo, tenemos que tener
en cuenta que las características de los medios de comunicación presentan peli-
gros de los que debemos ser conscientes.

Elementos beneficiosos masas


1. Presentación de un modelo cultural relativamente homogéneo que per-
mite el diálogo entre personas que antes habrían sido muy diferentes.
191

2. Difusión de los bienes producidos por el sistema económico capitalista, lo


que puede difundir la necesidad de la modernización y industrialización
en los países atrasados.
3. Difusión de informaciones veraces sobre la realidad.
4. Difusión de elementos culturales, música, literatura, ciencias naturales,
historia, etc.
5. Aportación de contenidos valiosos para el ocio (deportes, programas mu-
sicales, etc.)
6. Promoción de realidades culturales minoritarias que vale la pena conser-
var (lenguas, etc.)

¿Qué podemos pensar?


Añadir el papel de internet hablar también de la saturación de la información
Que son los medios de comunicación Por que son necesarios Que males pueden
producir. Por que Como arreglarlos.

¿Qué debemos hacer?


Como norma deberíamos establecer que deberíamos formarnos sobre las cues-
tiones axiológicas y debemos informarnos en serio sobre los grandes temas con-
trovertidos. Hoy en día los temas controvertidos son:
1. La amenaza ecologista.
2. La cuestión nacional (en España).
3. La cuestión económica (si hay algo más allá del intervencionismo, más o
menos socialdemócrata).
Distinguir el concepto «noticia» y el concepto «es lo que pasa». Realmente
lo que pasa va mucho más allá que las noticias. Sin duda lo que hay que hacer
es tener clara la diferencia entre formación y información. La información sólo
puede ser mala cuando falta formación. Una vez presente la formación, es decir,
una vez que tenemos un armazón de ideas correctas sobre el ser humano y el
mundo, los detalles sobre la actualidad, que es lo que llamamos «información»,
deben ser contrastados. Claro que no se trata de contrastar cada información,
pero sí las que puedan utilizarse como base para tomar decisiones muy impor-
tantes.
192 Los medios de comunicación

1. Hacerse conscientes del sesgo ideológico o empresarial de los medios.

2. Cotejar las informaciones con otros puntos de vista aún contrarios a nues-
tra ideología para no caer en un ciego sectarismo.

3. Utilización de otras fuentes de información además de los medios de masas


(libros, informes, enciclopedias, estudios académicos, etc.)

4. Esfuerzo por contextualizar las realidades que presentan los medios, desde
un punto de vista histórico, sociológico, estadístico, etc.

5. Profundizar en las noticias es preciso. Procurar información complemen-


taria.

6. Procura de otros elementos de ocio, aparte de la televisión.

7. Elaboración de nuestra propia escala de valores y colocación de los bienes


de consumo en su lugar apropiado.

8. Aprendizaje serio sobre nuestra realidad.

9. Relativización de las aportaciones de los medios de comunicación de masas.


Es decir, tener claro que tampoco lo que cuentan los medios es tan impor-
tante como a las veces ellos quieren hacer creer.

Conviene recordar
• Para tomar decisiones correctas en nuestra vida necesitamos conocer la
realidad. Igualmente para contribuir la toma de decisiones políticas nece-
sitamos conocer lo que pasa en el mundo.

• Los medios de comunicación son importantes porque aportan parte de


los datos que necesitamos para ejercer nuestras responsabilidades como
ciudadanos.

• Los medios de comunicación deben decir la verdad, separar las opiniones


de los datos y emitir juicios moderados.

• Tenemos que ser críticos con los contenidos de los medios de comunica-
ciones seleccionando los que tengan mayor calidad y rechazando la men-
tira, el sensacionalismo y la vulgaridad.
193

Ejercicios de la lección
1. Haz una lista de cinco cadenas de televisión y radio que conozcas y averigua
cual es su tendencia ideológica.

2. Imagina como podría variar el modo de dar una nueva para beneficiar al
gobierno.

3. Imagina como podría variar el modo de dar una noticia para perjudicar al
gobierno.

4. Haz una lista de cinco elementos culturales que tú conozcas y que no


aparezcan normalmente en la televisión.

5. ¿Que significa prime time en el lenguaje de la televisión?

6. Explica el concepto de televisión-basura.

7. Investiga acerca de las noticias falsas que aparecieron en la televisión a lo


largo de su historia.

8. ¿Por que necesitamos la información?

9. ¿En que pueden ayudarnos los medios de comunicación?

Textos a comentar
1. Brown? 2. Tocqueville?
194 Los medios de comunicación
Lección27
Los nuevos poderes políticos

Reconocimiento de la crisis del estado-nación y valoración de la globa-


lización económica y la fragmentación de la autoridad política como
riesgo para la protección efectiva de los derechos civiles, económicos y
sociales. Información sobre los movimientos comprometidos en la de-
fensa de los derechos humanos y reconocimiento de su labor.

¿Para qué sirve esta lección?


1 Para aprender cuáles son las estructuras políticas infraestatales y supraestatales
y como podemos contribuir a que funcionen mejor.

¿Por qué es importante todo esto?


En nuestro país existen estructuras infraestatales, las comunidades autónomas y
el nuestro país forma parte de varias estructuras supraestatales como la Unión
Europea y la OTAN. Si sabemos cómo funcionan podemos colaborar para que
funcionen mejor y evitar que nos perjudiquen.

¿De qué se trata?


Algunas definiciones
Hablar sin duda del federalismo, y plantear se España es un estado federal. Pro-
poner la cuestión de si Europa no sería mejor una federación. En esta lección
196 Los nuevos poderes políticos

vamos llamar sub-estados a las instituciones políticas que tienen influencia sólo
en territorios que también forman parte de un estado. Según nuestra definición,
las Comunidades Autónomas españolas, los Länder alemanes, los estados de los
USA, etc. son sub-estados. Vamos a llamar supra-estados a las instituciones
políticas que tienen influencia en varios estados. Son supra-estados la ONU, la
Unión Europea, la OTAN, etc.

¿Qué problemas prácticos hay?


El peligro de los sub-estados, el nacionalismo radical, el aldeanismo, la opresión
del individuo, xenofobia, racismo, etc. El peligro de los supra-estados, tecnocra-
cia y pérdida de la democracia.

¿Qué podemos pensar?


Por que los estados tienen el tamaño que tienen Por que nacen los supraesta-
dos Por que nacen los infraestados Que cosas buenas tienen los supraestados
Que cosas malas tienen los supraestados Que cosas buenas tienen los infraesta-
dos Que cosas malas tienen los infraestados Como podemos arreglar esas cosas
malas.

¿Qué debemos hacer?


El tamaño de los estados tiene relación con los sucesos políticos y militares de
la historia. La naturaleza no establece un tamaño fijo para los estados ni las
supuestas fronteras naturales son tal cosa.
Dejar claro que no existe correspondencia entre etnia y nación, nación y
estado o nación y lengua. A partir del siglo XIX aparece la idea de estado-nación
que pretende substituir la legitimidad de las dinastías reales tras la aparición de
los regímenes burgueses. Durante el siglo XX, tras la descolonización de África
y Asia, este concepto se extiende por todo el mundo, incluyendo territorios
históricamente ajenos a la idea de nación o a la estructura estatal. Desde finales
del siglo XX, en los países occidentales, se reconocen tendencias políticas que
exigen estructuras políticas de menor tamaño que los estados tradicionales, para
dotar de autonomía a algunos territorios y tratar más cercanamente problemas
de pequeña escala. Por otro lado también existen tendencias a la construcción
de estructuras de poder que comprenden varios estados.
197

Elementos buenos de los sub-estados


1. Acercamiento de la política al ciudadano.

2. Normalmente los sub-estados agrupan territorios pequeños o medianos,


regiones naturales que tienen características comunes y por eso resultan
más comprensibles y más próximos para la gente. Naturalmente todos
podemos opinar y decidir mejor cuando lo hacemos sobre una realidad
que conocemos.

3. Reducción del poder de dañar de los políticos por la redimensión de su


área de influencia.

4. El poder militar asociado a los grandes estados con la presencia de armas


de destrucción masiva es por ejemplo algo que puede desaparecer por la
fragmentación del poder político (Por ejemplo, algunos de los nuevos es-
tados que surgieron en el territorio de la antigua URSS se deshicieron
voluntariamente de las armas nucleares que los gobernantes comunistas
habían instalado allí).

5. Cuando los políticos están más cercanos a los ciudadanos, éstos pueden
controlarlos mejor y hacer de ellos unos verdaderos servidores del pueblo.

6. Valoración de elementos culturales o, en general, de particularidades de-


sestimadas por estructuras más grandes. (elementos culturales o de medio
ambiente)

7. La reducción del ámbito de trabajo y de influencia de los políticos permite


que lleguen a conocer algunos problemas relacionados con territorios pe-
queños que en caso de gobiernos más extensos podrían quedar sin atender.

Elementos malos de los sub-estados


1. Reaparición del caciquismo (clientelismo político).
El caciquismo es la existencia de políticos que ofrecen favores a los elec-
tores a cambio de sus votos. La democracia no puede funcionar bien si lo
único que la gente quiere es obtener privilegios del gobierno. La demo-
cracia supone que todos votamos no por nuestros intereses egoístas, sino
pensando en lo que es mejor para el país, de acuerdo con nuestra ideolo-
gía. Los políticos que conocen muy de cerca a sus votantes pueden estar
tentados de sobornarlos con favores para conservar su poder.
198 Los nuevos poderes políticos

2. Reactivación del nacionalismo radical y del provincianismo (pérdida del


horizonte político suprarregional).
Ninguna comunidad humana debería pensar tan sólo en su pequeño te-
rritorio porque querámoslo o no, sepámoslo o no, todo nuestro mundo
está interconectado. Tenemos que ser conscientes de los problemas de los
demás y ser solidarios con ellos. Centrarse demasiado en lo que cono-
cemos y tenemos a mano puede dar lugar al nacionalismo radical que es
una forma de egoísmo. Además, el mundo, especialmente en la economía,
no está organizado como un juego de suma cero. Cuando algo perjudica
a alguien, acaba por perjudicar a todos los demás. Por eso ser egoísta y
perjudicar a los demás supuestamente buscando un beneficio propio es a
largo plazo perjudicarnos también nosotros.

3. Activación del egoísmo regional, de la competitividad basada en unidades


territoriales, fiscalidad, medidas proteccionistas, nacionalismo económico.

Elementos buenos de los supra-estados


1. Homogeneización económica y política de grandes áreas del planeta.

2. Superación de los egoísmos regionales y nacionales.

3. Desestimación de las diferencias no relevantes (lengua, cultura, aspecto


físico, extracción geográfica, etc.) en la concordancia ideológica sobre los
principios de la organización social.

4. Facilitación de los viajes de las personas por áreas supraestatales.

5. Facilitación de los intercambios culturales entre ciudadanos de diferentes


estados.

Elementos malos de los supra-estados


1. Pérdida del control por el ciudadano de la actividad de los políticos.

2. Conversión de la política de ideología en tecnoburocracia.

3. Supeditación de los intereses de los estados pequeños a los estados grandes.

4. Reproducción del egoísmo estatal en unidades más grandes (por ejemplo,


la Europa blindada).
199

5. Conversión de la estructura supraestatal en un mercado de trueque de


intereses económicos.

6. Colocación de la estructura supraestatal bajo el control o la influencia de


lobbies.

7. Como las estructuras supraestatales tienen mucho poder, se ven tentadas


de intervenir en la economía en perjuicio de otras personas (proteccionismo,
restricción de la inmigración, etc.)

Posibles soluciones
La mejor garantía de que los peligros que acechan al fenómeno que estamos
estudiando no llegan a dañar a nadie es que los ciudadanos sean conscientes de
sus derechos y de su deber de controlar la acción de sus representantes políticos.
Precisamos tener claro cuáles son las diferentes ideologías políticas que con-
stituyen opciones válidas, necesitamos conocimientos sobre los problemas reales
del nuestro mundo para tomar decisiones apropiadas. Debemos exigir a nues-
tros representantes el cumplimiento de sus programas y que den cuenta de su
trabajo.
Si estimamos que no existen alternativas válidas entre los partidos mayori-
tarios, debemos estar preparados para apoyar nuevos partidos o para reorientar
los partidos existentes.
Debemos recordar que la protección efectiva de los derechos de los ciu-
dadanos es tarea de la propia ciudadanía. Los gobiernos democráticos normal-
mente respaldan los derechos civiles, sin embargo los ciudadanos deben per-
manecer vigilantes para evitar los abusos de los poderes políticos. El problema
es que las estructuras infra-estatales pueden estar animadas por radicalismos na-
cionalistas y las estructuras supra-estatales pueden ser animadas por tendencias
tecnocráticas. (hay que hablar de la tecnocracia por extenso) Estas realidades
coinciden en su anti-individualismo, en su exigencia de que las libertades indi-
viduales sean sacrificadas bien al concepto de nación, tal como lo entienden los
nacionalistas, o a las medidas de la burocracia que frecuentemente adopta un
discurso único tecnocrático.

Una ONG que trabaja por los derechos humanos


Ejemplo noble de la preocupación ciudadana en todo el mundo por los derechos
humanos está en las diversas ONG que vigilan el comportamiento de los gob-
iernos. Una organización no gubernamental compromete mucho su actuación
200 Los nuevos poderes políticos

si recibe dinero de los gobiernos. Está claro que, a veces, las organizaciones que
vigilan el comportamiento de los gobiernos deben criticar sus actuaciones. Y
esto se hace difícil si al mismo tiempo las ONG están pagadas por los gobiernos.
La ONG Amnistía Internacional vigila las violaciones de los derechos humanos
alrededor del mundo, cometidas por gobiernos, grupos terroristas, guerrillas,
etc. Sus socios pagan una cuota y reciben informaciones sobre violaciones de
los derechos humanos de las que son víctimas algunas personas en otros países.
Se trata de gente que sufre torturas, encarcelamiento o sentencias de muerte por
sus ideas políticas o religiosas, etc. Los miembros de Amnistía Internacional
protestan públicamente por estas situaciones y escriben cartas a los políticos re-
sponsables de ellas y en muchas ocasiones sus presiones consiguen la liberación
de prisioneros o la suspensión de las sentencias de muerte.

El tamaño de los estados


Hay que dejar claro que el tamaño de los estados hasta la llegada de la democracia
depende de la arbitrariedad de los reyes, de las vicisitudes bélicas o dinásticas.
No hay ninguna naturalidad en la existencia de las naciones. Dejar claro que
el derecho de autodeterminación existe. Hablar quizá de los tipos de ONG,
de desarrollo, asistenciales, de derechos humanos, etc. Plantear claramente el
problema de su financiación. En la antigüedad los estados consideraban normal
la utilización de la violencia para conquistar otros territorios. La finalidad de las
invasiones o las conquistas era a veces económica, a veces de simple prestigio o
religiosa o ideológica.
Se consideraba glorioso para el gobernante extender su poder sobre nuevos
territorios y oprimir otros pobos. Frecuentemente para justificar estas guerras se
acudía a la religión y se decía que los dioses habían ordenado la invasión. Otras
veces se presentaba la invasión como el cumplimiento de un pacto o el castigo
de un pueblo por su supuesto comportamiento hostil. Apareció así el concepto
de casus belli, expresión latina que significa motivo de la guerra. Por lo común
el motivo alegado era una excusa para el ejercicio de la violencia y la conquista.
En la edad media se utilizaba con frecuencia la concepción patrimonialista del
estado.
Se creía que los reyes poseían los estados como si fuesen fincas de su propiedad
y los conflictos de las herencias daban lugar a muchas guerras. Con la llegada
de la edad moderna se difunde la idea de que los gobiernos están al servicio
del pueblo y que son los ciudadanos los que tienen derecho a decidir en qué
estado quieren vivir. Las ideologías nacionalistas surgidas en el siglo XIX por
un lado apoyan los deseos de algunas comunidades de formar estados propios
pero por otro lado, a veces alientan las tendencias imperialistas de algunos gob-
201

iernos. (explicar las tres formas de los nacionalismos, irredentista, imperialista


y separatista) El fin de la I guerra mundial supuso en Europa la aparición de
muchos estados nuevos por la aplicación del derecho de autodeterminación de
los pueblos.
La II guerra mundial fue causada por el nacionalismo imperialista de los go-
biernos de la Alemania nazi y del Japón, Alemania invadió Austria y Checoslo-
vaquia y con la invasión de Polonia provocó la guerra. El final de la II guerra
mundial supuso una reactivación del imperialismo comunista en Rusia, que in-
vadió muchos territorios que antes habían sido independientes.
Contrariamente, Francia, Inglaterra y Portugal comenzaron a deshacerse
más o menos voluntariamente de sus imperios formados por países africanos
y asiáticos. Estos formaron nuevos estados o recuperaron su vieja independen-
cia.

Conviene recordar
• En la sociedad contemporánea, los ciudadanos demandan cada vez más
que el poder político ayude a resolver los problemas cercanos.

• La globalización económica hace que surjan instituciones políticas que


unen varios países y que a veces son muy difíciles de entender para el
ciudadano.

• Los ciudadanos debemos siempre permanecer vigilantes para que inde-


pendientemente de su tamaño los poderes políticos respeten los derechos
humanos y la voluntad de los votantes.

• Algunas organizaciones no gubernamentales están especializadas en la de-


fensa y promoción de los derechos humanos y su labor merece el nuestro
apoyo.

Ejercicios de la lección
1. ¿Con qué tiene que ver históricamente el tamaño de los estados?

2. ¿En qué consiste la idea del estado-nación?

3. ¿En qué se basaba la legitimidad de las monarquías del antiguo régimen?

4. ¿En qué sentido la ideología del estado-nación tiene un carácter legiti-


mador?
202 Los nuevos poderes políticos

5. ¿Qué problemas da el concepto de estado-nación?

6. ¿Por qué existen tendencias a la regionalización en los estados contem-


poráneos?

7. ¿Por qué existen tendencias a la internacionalización en los estados con-


temporáneos?

Textos a comentar
1. Tocqueville 2. Friedrich Hayek también propone en Camino de servidumbre
el federalismo como solución a las relaciones internacionales:

La forma de gobierno internacional bajo la cual ciertos poderes


estrictamente definidos son transferidos a una autoridad interna-
cional, mientras en todos los demás respectos los países individuales
permanecen responsables por sus asuntos internos, es, por supuesto,
la de la federación. No debemos permitir que los numerosos, mal
considerados y a menudo extremadamente tontos llamamientos a
favor de una organización federal de todo el mundo durante el auge
de la propaganda por la Unión federal obscurezcan el hecho de que
el principio de federación es la única forma de asociación de pueblos
diferentes que creará un orden internacional sin forzar una indebida
tensión sobre su legítimo deseo de independencia. El federalismo
es, por supuesto, nada más que la aplicación a los asuntos interna-
cionales de la democracia, el único método de cambio pacífico que
el hombre ha inventado hasta ahora. Pero es una democracia con
poderes definitivamente limitados. Aparte del ideal más impractica-
ble de fundir diferentes países en un estado único centralizado (lo
deseable de lo cual, dista de ser obvio), es el único modo en cual
el ideal de la ley internacional puede ser hecho realidad. No debe-
mos engañarnos a nosotros mismos acerca de que, en el pasado, al
invocar las normas de la ley internacional, no estábamos haciendo
más que expresar un pío deseo. Cuando queremos impedir que la
gente se mate entre sí, no nos contentamos con declarar que matar
es algo indeseable, sino que damos a una autoridad el poder de evi-
tarlo. Del mismo modo, no puede haber una ley internacional si un
poder para hacerla cumplir.
Lección28
El desarrollo necesario

Identificación de los medios y iniciativas, tanto individuales como colec-


tivos para procurar un desarrollo humano sustentable.

¿Para qué sirve esta lección?


Para aprender que es el desarrollo, por que es necesario y que condiciones lo
hacen posible.

¿Por qué es importante todo esto?


Porque el desarrollo es bueno para todos y si conocemos cómo funciona pode-
mos colaborar en él.

¿Qué impide el desarrollo de los países pobres?


1. Analfabetismo. En los países pobres mucha gente es analfabeta. La falta
de acceso a la cultura escrita hace que la ciencia y la tecnología estén poco
difundidas.
2. Desconfianza hacia las novedades. A veces en los países pobres, por ra-
zones religiosas o de costumbres la gente rechaza las novedades.
3. Falta de democracia. Los países pobres son por lo común dictaduras,
regímenes militares, supervivientes del comunismo, teocracias fundamen-
talistas.
204 El desarrollo necesario

4. Estados intervencionistas.

5. Aranceles. Aranceles son los impuestos que los gobiernos cobran por las
mercancías importadas. Esto hace más difícil a los productos de los países
pobres competir en el mercado.

6. Intervenciones en la moneda (inestabilidad financiera).

7. Proteccionismo.

¿Qué necesitamos?
1. Para conseguir la libertad necesitamos buenas condiciones políticas y cul-
turales.

2. Para conseguir la abundancia material necesitamos buenas condiciones


económicas, tecnológicas y culturales.

Por nuestro conocimiento de la historia, sabemos que la democracia y el


capitalismo son los sistemas sociales que garantizan el mayor grado de libertad y
bienestar económico conocido hasta ahora en todo el mundo. Por lo tanto, para
conseguir el desarrollo sostenible, necesitamos la extensión de la democracia y
el capitalismo por todos los países del mundo.

Algunas definiciones
Llamamos desarrollo a la construcción de una sociedad en la que el ser humano
pueda realizar todo su potencial, y por el tanto, conseguir la máxima felicidad
posible. Las condiciones del desarrollo son la libertad individual, y la abundan-
cia de bienes materiales. Nunca debemos entender el desarrollo sólo como una
cuestión económica. Para los seres humanos, los elementos materiales son un
medio para lograr fines que normalmente son psicológicos, afectivos, etc. Sin
embargo para conseguir esos fines casi siempre necesitamos los bienes materia-
les. La sostenibilidad es la situación en la que algo puede continuar indefinida-
mente. Una situación en la que un grupo de países es rico y sus ciudadanos libres
mientras que una gran población del mundo permanece en la pobreza, sufriendo
problemas que el ser humano ya sabe resolver, es, naturalmente una situación
insostenible. Es una situación injusta, ofende nuestro sentimiento de solidari-
dad, perjudica a muchas personas inocentes, da lugar a inestabilidad política, a
guerras, a dictaduras, etc.
205

¿Qué dicen los filósofos?

¿Qué podemos pensar?

Que significa desarrollo no sólo económico Que precondición política tiene: la


democracia Que precondición económica tiene: el capitalismo Que problemas
puede tener: la desigualdad, es decir, que no se de el desarrollo, el perjuicio para
la naturaleza Posibles soluciones para los problemas. Algunas dictaduras co-
munistas del siglo XX intentaron defenderse afirmando que sus súbditos vivían
con relativa comodidad económica. Independientemente de que el dato fuese
verdadero, lo cierto es que una dictadura no puede nunca satisfacer las necesi-
dades psicológicas y culturales del ser humano. Por el conocimiento de la his-
toria, sabemos que la democracia, la economía de mercado son los sistemas so-
ciales que, sin ser perfectos, garantizan el mayor grado de libertad y bienestar
económico conocido hasta ahora en todo el mundo.

¿Qué debemos hacer?

¿Por qué necesitamos libertad y bienes materiales para conseguir la felicidad?


Los seres humanos somos por nuestra naturaleza individuos, que nos senti-
mos mal cuando somos obligados a hacer cosas que no queremos. A pesar de
pertenecer a la misma especie animal, todos somos diferentes en muchas de nues-
tras características y necesitamos espacio para vivir de acuerdo con esas caracte-
rísticas. Asimismo para todo lo que queremos hacer, normalmente necesitamos
disponer de objetos, máquinas, herramientas, bienes de consumo, etc. La po-
breza nos impide llevar la cabo muchos deseos y satisfacer nuestras necesidades.
Desarrollo no significa ni mucho menos sólo abundancia de bienes materiales,
puede hablarse aquí del índice de desarrollo humano. El peligro del ecologismo
es que tomado radicalmente puede poner en peligro las bases económicas o ma-
teriales de la civilización. Sin duda la riqueza sola no da la felicidad, pero la
pobreza engendra y mantiene mucho sufrimiento.
La agricultura tradicional lleva al machismo. Igual la falta de los anticoncep-
tivos. Sin industria avanzada los niños no pueden estar en la escuela por culpa
del trabajo infantil. Sin industria no es necesaria tampoco la alfabetización ge-
neral de la población. Sin tecnología no hay ciencia moderna. Sin ciencia no
hay medicina científica, sin medicina hay mortalidad infantil y puerperal.
206 El desarrollo necesario

Conviene recordar
• Llamamos desarrollo sustentable al progreso económico y tecnológico
que no perjudica a la naturaleza.

• Debemos adoptar los métodos tecnológicos más limpios y menos agre-


sivos disponibles.

• En nuestra vida diaria podemos contribuir al ahorro de materias primas y


energía.

• Debemos exigir a los gobiernos que vigilen el cumplimiento de las leyes


de protección de la naturaleza.

• Podemos preferir los productos de las empresas que respetan el entorno y


apoyar las ONG y asociaciones de defensa de la naturaleza.

Ejercicios de la lección
1. ¿ Por qué necesitamos de algunas condiciones políticas y culturales para
ser libres?

2. ¿Por qué necesitamos de algunas condiciones económicas y tecnológicas


para ser felices?

3. ¿Hay algún otro régimen político mejor que la democracia? Razónalo.

4. ¿Hay algún otro sistema económico mejor que el capitalismo? Razónalo.

5. ¿Qué necesitamos para conseguir el desarrollo sustentable en todos los


países del mundo?

6. ¿Qué es el desarrollo?

7. ¿Qué es realizar al máximo el potencial de una persona? Pon ejemplos.

8. ¿Cuáles son las necesidades del desarrollo?

9. ¿Qué elementos más existen en el desarrollo además de la economía?

10. ¿Qué es la sostenibilidad?

11. ¿Por qué es insostenible la presente situación del mundo?

12. ¿Qué características tiene la presente situación del mundo?


207

13. ¿Por qué las dictaduras no pueden satisfacer las necesidades del ser hu-
mano?

14. ¿Por qué necesitamos libertad y bienes materiales para conseguir la felici-
dad?

Textos a comentar
1. El economista americano Julian Simon explica en su libro El ultimo recurso
las relaciones entre inventiva humana y aprovechamiento de la naturaleza:
Contaremos de nuevo la historia importante: Los seres humanos
han creado duran miles de años mucho más de lo que han des-
truido. Esto es, el total de lo que han buscado producir y de los
sub-productos ha sido, como balance, positivo. Esto es el hecho más
fundamental de todos sobre el progreso de la civilización que se evi-
dencia por (a) el estándar creciente de vida material disfrutada por
generación tras generación, (b) la decreciente escasez de recursos na-
turales, medida en sus precios a lo largo de la historia, y (c) el más ex-
traordinario de los logros, vida más larga y mejor salud. Los tesoros
de la civilización que una generación deja en herencia a la siguiente,
la herencia de cada siglo más grande que la del anterior prueba el
mismo punto; creamos más de lo que destruimos. El corazón de
la herencia, por supuesto, es el conocimiento productivo que una
generación incrementa y pasa a la siguiente generación. Si los seres
humanos hubieran destruido más de lo que produjeron como me-
dia, la especie se habría extinguido hace tiempo. Pero de hecho la
gente produce más de los que consume y el nuevo conocimiento de
cómo superar problemas materiales es el más precioso producto de
todos. Cuanta más gente hay en la Tierra, más problemas nuevos,
pero también más mentes para resolverlos y más grande la herencia
para las futuras generaciones.
2. El estadístico danés Bjorn Lomborg, puso a prueba las creencias populares
sobre el medio ambiente en su libro El ecologista escéptico. Aquí presentamos
parte de sus conclusiones:
A nivel mundial, me parece obvio que los mayores problemas siguen
siendo el hambre y la pobreza. Aunque hemos sido testigos de
grandes mejoras en la alimentación de más gente cada vez, cada
vez mejor y en sacar más y más gente de la pobreza, y aunque esas
tendencias positivas probablemente van a continuar en el futuro,
208 El desarrollo necesario

todavía hay alrededor de 800 millones de personas hambrientas y


alrededor de 1.200 millones de pobres en el mundo. En términos
de asegurar una mejora a largo plazo de la calidad ambiental del
mundo en desarrollo, asegurar el crecimiento tanto como para ele-
var a esta gente fuera del hambre y la pobreza es de la mayor im-
portancia, dado que nuestra experiencia histórica nos dice que sólo
cuando somos suficientemente ricos podemos empezar a pensar en
los problemas ambientales, a preocuparnos por ellos y a tratarlos.
Con respecto al mundo desarrollado, hemos visto grandes mejoras
globales y también dentro del área ambiental. Estos desarrollos pos-
itivos no implican que no tengamos que hacer más por el medio am-
biente. Al contrario, en muchas áreas, con el paso del tiempo, será
razonable invertir incluso más en una gestión sensata del medio am-
biente: como la discusión sobre la contaminación del aire dejó claro,
aunque la contaminación por partículas es probablemente más baja
ahora que en ningún momento desde el siglo XVI, bajar las emi-
siones incluso más será probablemente un inteligente uso de los re-
cursos. Sin embargo, tenemos que darnos cuenta de que invertir en
un ambiente cada vez mejor es sólo uno de los muchos modos en
que podemos invertir en un mundo mejor, y que tendríamos que
priorizar el medio ambiente por delante de una mejor educación,
mejor sanidad y mejores infraestructuras así como de mejorar las
condiciones en el Tercer Mundo.
Lección29

Ciudadanos de un solo mundo

Reconocimiento de la pertenencia a una ciudadanía global e identifi-


cación y valoración de los procesos que podrían contribuir a una globa-
lización ética.

¿Para qué sirve esta lección?


Para aprender que es la ciudadanía global y como podemos ejercerla bien.

¿Por qué todo esto es importante?


Porque vivimos en un mundo globalizado, ser buenos ciudadanos de él es la
mejor manera de contribuir a que funcione bien.

¿De qué se trata?

¿Qué problemas prácticos hay?


Como tomarse en serio una ciudadanía sin estructura política, y desde luego sin
estructura democrática.
210 Ciudadanos de un solo mundo

¿Qué necesitamos?
Ideas prácticas sobre cómo colaborar para que en el mundo prosperen y se
propaguen las cosas buenas y desaparezcan las malas.
1. Entender qué es la globalización.

2. Saber por qué es buena.

3. Saber qué peligros tiene.


El pacifismo como un derecho de ciudadanía global. Como el mundo em-
pieza a ser una realidad común todos tenemos que tener una actitud nueva hacia
la convivencia social. La ciudadanía global aún no es una cuestión de legislación.
No hay un gobierno mundial ni una legislación común. Aun hay gobiernos que
no respetan los derechos humanos y no son democráticos. Hay mucho por
hacer en el campo de economía la política y la ética para que algunos países
lleguen al nivel de los países desarrollados. La ciudadanía global es pues una
actitud ética y política. Se trata de contribuir a la globalización sintiéndonos
ya conciudadanos de todas las personas del mundo y procurando influir en la
política para conseguir la modernización y democratización de todos los países
del mundo.
En esta lección hay que preparar una lista de cosas que podemos hacer para
participar igual que el tema «participar en política» Adaptar cada uno de los
puntos a las cuestiones internacionales (y Repetirlos con las modificaciones)
La ciudadanía global Precisamos ideas sobre la comunidad de intereses y la so-
lidaridad humana en economía hay que explicar lo malo del proteccionismo
económico que es un egoísmo ciego, nacionalismo, intereses gallegos intereses
españoles, que sólo funciona a corto plazo. hay que explicar porque el liber-
alismo económico es bueno para todos, y el miedo que producen las reconver-
siones de la agricultura, de la pesca, etc.

¿Qué dicen los filósofos?


Séneca, Montaigne, Kant sin duda podemos encontrar razones para el cosmopo-
litismo en Erasmo también. Tradicionalmente no había guerras nacionalistas.
Ahora, sí, De lo que se trata es de quitar razones para hacer la guerra. Tanto
nacionalismo como religión. Hay que contradecir la idea del choque de las civi-
lizaciones (Huntington).
Que es la globalización ¿Por que ocurre la globalización? El ser humano
tiende a comunicarse con los demás, es curioso, está siempre a la búsqueda de
cosas nuevas
211

Que dimensiones tiene para el ciudadano global? económica política social


cultural Que es la ciudadanía global? Por que se necesita? Que necesitamos para
ser ciudadanos globales? Como podemos ayudar al proceso?

¿Qué debemos hacer?


Todos los seres humanos somos libres y iguales en dignidad y derechos. Ninguna
de nuestras diferencias naturales tiene importancia a la hora de establecer las nor-
mas que debemos seguir o de escoger nuestros valores. Sexo, raza, aspecto físico,
lengua, religión, preferencias sexuales, lugar de nacimiento, etc., ninguna de es-
tas características justifican el maltrato o la discriminación entre las personas.
Aunque las personas estamos divididas en muchos estados, y aunque existen
partidarios de la creación de más estados, todos debemos considerarnos como
miembros de una sola comunidad, formada por todos los seres humanos, con
los mismos derechos y deberes que nosotros. De lo que se trata es de pensar
en principios, no en intereses. Los principios son derechos y deberes, comunes
para todos. La extensión del federalismo puede llevarnos a un gobierno mundial,
como paso previo de una verdadera sociedad de naciones y como requisito de
una paz perpetua. Ahora bien, no tiene sentido pedir un gobierno mundial
cuando aún hay muchos gobiernos no democráticos.

Conviene recordar
• Puesto que el mundo está cada vez más unido, nosotros debemos empezar
la considerarnos ciudadanos con responsabilidad hacia la situación general
del planeta

• Debemos apoyar la democracia en todos los países del mundo porque es


el mejor método de gobierno.

• Tenemos que favorecer el desarrollo económico de los países pobres para


que todos los seres humanos disfruten del mismo bienestar que nosotros.

• Debemos presionar a los gobiernos para que cumplan los derechos hu-
manos en todo el mundo.

• Debemos aceptar la convivencia con personas venidas de otros países y


valorar como una riqueza sus aportaciones culturales a nuestra sociedad.
212 Ciudadanos de un solo mundo

Ejercicios de la lección
Textos a comentar
1.catorce 2.quince

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