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RESUMEN
COMPARACIÓN DE LA MATRICES
ENERGÉTICAS BRASILEÑA Y MUNDIAL:
PERSPECTIVAS E INQUIETUDES SOBRE
AGROCOMBUSTIBLES1
La energía es una de las bases centrales de una sociedad. Al ver el precio del
petróleo superando los US$ 100,00 por barril (EFE 2008), o la alerta del Informe
Mundial de Energía (IEA, INTERNATIONAL ENERGY AGENCY 2008), sobre
problemas de abastecimiento energéticos, se nota la preocupación superficial sobre
un problema de fondo (pero no de largo plazo) para la sociedad global.
Por un lado la demanda de energía sigue creciendo. Aunque se haya creado y se
intente dar importancia al concepto de desarrollo sostenible, el índice más utilizado
y foco principal de varias naciones sigue siendo el crecimiento del PIB.
Por otro lado, la oferta de combustibles líquidos se ve en un escenario complicado.
La producción mundial de petróleo puede tocar techo en pocos años (Rifkin
D.L.2002) si se cumplen las predicciones de varios investigadores sobre cuándo
llegaremos a pasar el pico de producción absoluta de crudo.
En ese contexto de gran posibilidad de que la sociedad mundial enfrente una
encrucijada energética, se enmarca el presente trabajo.
Este escrito busca poner en relieve la crisis energética que se dibuja en un
horizonte cercano. Se centra en la posibilidad y significado de que la expansión de
agrocombustibles represente una solución (parcial o definitiva) al problema
inminente que se avecina.
Particularmente, la investigación busca una aproximación al problema sobre la base
de la comparación de matrices energéticas. Por un lado se vislumbrará la matriz
energética mundial, focalizando el sector de combustibles líquidos y su evolución en
1
Versión preliminar. El autor agradece a la ayuda prestada por los colegas Everlan
Elias Montibeler, Esther Solano, Antonio René Iturra y Ana Candida Nascimento
Martins. Los errores son todos de responsabilidad del autor.
2
los últimos años. Por otro lado, se estudiará el caso brasileño, pionero en el avance
de agrocombustibles.
Por fin, aparte de hacer un levantamiento cuantitativo buscando revelar potenciales
y estimativas sobre la configuración de las matrices energéticas, se hace una
reflexión cualitativa sobre lo que supone o puede suponer la progresivamente
mayor participación como insumos energéticos, productos cuyo origen es la mismo
del de los alimentos: la tierra cultivable.
Para eso se siguen 4 apartados. El primero detalla mejor la afirmación hecha de
que se aproxima, probablemente, un gran problema en el sector energético para el
mundo capitalista. En ese mismo apartado ya se expone la matriz energética
mundial como instrumento, bien como el sector de combustibles líquidos. Por fin
también se muestran estimaciones de oferta y demanda mundial de energía.
El segundo apartado desarrolla un análisis parecido, para la economía brasileña,
elegida por pionera y avanzada en sus programas de agro-carburantes (etanol y
biodiesel).
A partir de los dos apartados descritos se construye el tercero, cuyo objetivo es el
de buscar elementos adicionales para sacar a la luz oportunidades, desafíos y
trabas a la expansión relativa de agrocombustibles en la matriz energética mundial
total.
Por último, se cierra el documento con consideraciones críticas y cuestiones
cualitativas sobre que significaría una expansión en las dimensiones citadas de ese
sector.
2
Santana Borges, Rodrigo E. Fragilidade e dependência externa brasileira: Uma
análise do balanço de pagamentos de 1990 a 2003
4
20,90%
10
0,90%
Año
0%
,2
0,10%
16,20%
11
24,80% 45,00%
1973
1,80%
0% 10% 20% 30% 40% 50% 60% 70% 80% 90% 100%
Otros % Hídrica
Nuclear Combustibles Renovables y Basura
Gas Natural Carbón
Petróleo
Fuente:(IEA, INTERNATIONAL ENERGY AGENCY 2006a)
El mismo Gráfico 1 deja visualizar cómo ha disminuido parcialmente la dependencia
del sistema del recurso petrolífero en términos relativos (pasando de representar
poco menos de la mitad a suplir cerca de un tercio de la oferta energética mundial).
Por otro lado, parte de esa disminución se ha trasladado a otros fósiles,
5
TRANSPORTE RESIDENCIAL
COMERCIAL INDUSTRIA
TRANSPORTE
19%
27% 26%
RESIDENCIAL
11%
COMERCIAL
INDUSTRIA
52%
5% 15%
PERDIDO EN
GENERACIÓN
Y 7%
TRANSMISIÓN
38%
3
Considerando una eficiciencia típica del 38%, se han gastado cerca de 5TW de
energía para producir los 2TW consumidos.
6
4
168,17 cuadrillones de Btu (British Termal Units) consumidos de un total de 447
(EAI, Energy Administration Information. International energy outlook 2007)
7
33%
52%
6%
6%
3%
5
En 2030, el grupo de arenas de petróleo canadienses, crudos ultra pesados y
transformaciones de carbón a líquido representarán cerca del 62% (contra 68%
actuales).
8
7%
11%
Arenas de petroleo
11% Canadienses
5% 0% Crudos Pesados
3% 14%
5%0% 43%
0% 38%
19% 24% Agrocombustibles
0% Carbon a líquidos
23% 71% 58%
14%
8% Gas a líquidos
0%
22%
* Anillos desde dentro hacia fuera: 1980;1990;2000;2004
Fuente: (EAI, Energy Administration Information 2008)
En el WEO del 2005 se lee: “Global proven oil reserves today exceed the cumulative
projected production between 2003 and 2030”. Lo que queda sin comentario es si
la capacidad de extracción de las reservas existentes es suficiente para acompañar
el aumento de demanda. Teniendo en cuenta las proyecciones hechas en el
informe, se entiende que no habría problemas de escasez de petróleo por décadas.
Incluso se entendería que no podría haberlos gravemente antes del 2030, según los
datos usados en el estudio.
Aunque el volumen de reservas que hay sea mayor que el gasto predicho, analistas
como Hubbert, Robelius, Campbell y Laherrère (Robelius ) y (Rifkin D.L.2002) van
en contra de que el pico de producción de petróleo esté tan lejano. Por la propia
teoría del último autor, que en 1956 ha previsto el pico de producción de petróleo
en Estados Unidos ocurrido en 1970, el volumen de producción de petróleo de
cualquier sitio sigue una curva en forma de campana (Gráfico 5).
La teoría defendida por Hubbert es sencilla. La producción empieza en cero, sube,
llega al pico cuando se llega a la mitad del total explotado de reservas
recuperables, y para después caer hasta que llegue a cero.
Por otro lado, la demanda energética tiene una tendencia claramente al alza. La
población, actualmente en 6,5 mil millones de personas, se estima llegue a 8,05 mil
millones (Nygaard ). Eso significa que, en caso de que se suponga que la demanda
energética por persona actual se mantenga (algo discutible si se supone que el
crecimiento de varios países supone incremento de ese valor), habrá un incremento
anual de demanda energética del orden de 2% anual como mínimo6.
7
C.J. Campbell y J. H. Laherrère, “The End of Cheap Oil”, Scientific American,
marzo de 1998, p. 80
8
Claro está que en ese ejercicio preliminar no están incluidas el total de reservas
aún por descubrir, lo que en esa estimativa inicial añadiría hasta 10 años, en caso
de que el total mundial descubierto pudiese ascender a 3 billones de barriles.
11
Pq HIDROELÉCTRICAS
EÓLICA
5,08%
4,54%
BIOMASA ELEC
3,39%
BIOMASA - CALOR
16,94%
Gr HIDROELÉCTRICAS
57,75%
GEOTÉRMICA
0,72%
CALOR GEO
2,16%
SOLAR - CALOR SOLAR
6,78% 0,42%
SOLAR - FUERZA
TÉRMICA
0,03%
FUERZA OCEANICA
(TIDAL)
0,02%
OTROS ETANOL
0,05% AGRO-DIESEL
1,80%
0,32%
9
Incluso haciendo estimativas con distintas capacidades utilizadas de las
hidroeléctricas y añadiendo un sector denominado tentativamente de “biomasa no
comercial y/o basura renovable”, fue posible llegar a valores idénticos para ambos
informes en las proporciones relativas del sector hídrico y el de biomasas. Esa
estimativa será llevada en consideración más adelante pues cambia de forma
significativa la proporción de otras fuentes, como los agrocarburantes, centro de
este artículo.
10
Cabe notar que en el informe utilizado como base para el Gráfico 6 hay datos
respecto a otros usos de la biomasa, pero vienen en número de unidades (hornos,
entre otros) que usan esas otras formas de biomasa. Esa manera de presentar esos
datos ha hecho imposible convertir por el autor esa parte de los datos para
unidades de energía comparables a los demás.
11
Térmica, foto voltaica y otras.
12
Para electricidad y para generar calor
13
13
Gran parte del aumento de producción vino de países de la UE, en particular
Alemania (REN21, Renewable Energy Policy Network for the 21st Century.
RENEWABLES GLOBAL STATUS REPORT: 2006 update).
14
Dada la muy poca relevancia del sector de agro-diesel en el total, y su menor
aporte en el caso brasileño, como se verá más adelante, el trabajo se centrará en el
etanol.
15
Incluso en términos de calidad podemos calificar el etanol en el anídrico y el
hidratado.
14
12%
1%
1%
10%
4%
1%
2% 9% 33%
4% 1%
2%
6% 4% 35%
5% 6% 36%
8% 9%
8%
33%
35%
35%
17
El abordaje más crítico de este tema se hace en la sección 3ª de este documento.
18
Industrialización por sustitución de Importaciones. En la década de los setenta,
los gobiernos militares implementaron una serie de planes para avanzar en el
proceso de industrialización brasileño, particularmente intentando cerrar las
brechas en la industria pesada.
19
Aunque también se note pequeña disminución de la dependencia respecto a este
recurso en el tiempo.
16
6,0%
3,0% 14,8% 12,6% 14,6% 9,6% 37,7%
2006
5,3%
7%
9%
39%
11%
4%
4%
26%
20
Cantidad de energía contenida en productos utilizados en diferentes sectores para
fines no energéticos (BRASIL, Ministerio de Minas y Energía. Balanço energético
nacional 2007: Ano base 2006).
18
10.A* 10.B**
7% 6% 8%
9% 1%
1%
16 %
26%
57% 69 %
21
19
Brasil resulta aún más dominante, con casi el 70% del uso de combustibles
líquidos, bastante más que en el mundo (52%).
Una de las diferencias más notables entre las matrices de combustibles brasileña y
mundial es la participación de agrocombustibles (Gráfico 11). Sumados etanol y
otros oleos, tenemos una participación en Brasil (14,81% del sector transportes en
2005) que llega a ser casi 30 veces la participación de estos carburantes en el
promedio mundial (0,5% del consumo total de combustibles líquidos, cerca del 1%
del sector de transportes).
34,1% OLEO
COMBUSTIBLE
6,1%
GASOLINA
51,5%
AUTOMOT.
50,87%
QUEROSENA
25,92% 55,6% 2,9%
18,7%
ETANOL
3,8%
OTROS*
1,54%
Pese esa gran diferencia, las fuentes fósiles (casi 85%) y particularmente derivados
del crudo (81%) son indiscutiblemente y avasalladoramente las principales en el
sector de transportes. Aunque en el caso de este país se pueda decir que no
solamente ellas tienen papel importante. Existe la característica peculiar del uso del
gas, cuya contaminación es menor y cuyo pico de producción se prevé para algunos
años (quizás más de una década) después del petróleo.
Volviendo al punto positivo del gran uso de etanol, apenas este combustible llegó a
representar casi un quinto del total utilizado en los transportes en 1988 (19,4%).
En 2005 este combustible ha representado cerca del 13,3%. País pionero si no
único (Berg 2004) en que el agrocombustible se utiliza puro (lo convencional es
utilizarlo en mezclas) a parte de las mezclas, en Brasil se ha desarrollado la
20
tecnología “flex fuel”, por la cual los coches funcionan con gasolina, alcohol o
cualquier grado de mezcla. Un éxito representado por cerca del 97% de nuevas
ventas de coches en ese país que en 2006 fueron fabricados de esa
tecnología(Iturra 2007).
Es importante resaltar, no obstante, que la participación relativa de este sector ha
venido disminuyendo desde la década de los 90. Eso se debe en parte por el
periodo de precios bajos del crudo por los que ha pasado el mundo, evento que no
se debe repetir y de otro lado, como ya se ha dicho, por el descubrimiento de
muchos nuevos recursos en Brasil. Igualmente es lícito recordar que en los últimos
años los precios de las commodities han sido elevados, y el producto energético de
la caña compite con su uso como mercancía agrícola (representando ésta su coste
de oportunidad). Y, no menos importante, debido a la continua retirada de
subsidios a ese sector.
El contraste grande de la estructura de oferta entre el mundo y la economía
brasileña abre la perspectiva más claramente sobre cómo se debe tener especial
atención al sector agro-energético.
Asimismo, continuando con el esquema propuesto, se procede enseguida a un
análisis específico de ese sector en Brasil.
22
Dada la limitación de espacio y la poca representatividad del agro-diesel en el
conjunto de la producción de agrocombustibles brasileñas, el artículo se centra más
en la producción de etanol.
21
Pero ninguno de estos factores conseguiría impulsar al nivel que fue la producción
de esa fuente energética. En este sentido tiene un gran mérito el incentivo
gubernamental que fue implementado a lo largo del tiempo. Veamos cómo.
2.3.1.1 Etanol
Las experiencias relacionadas con el etanol para mover vehículos se remontan a la
década de los 20 en Brasil. Ya en 1931 se autoriza la adición de alcohol a la
gasolina, siendo obligatoria a partir de 1938 la mezcla al 5%, pudiéndose aumentar
según la necesidad el porcentual de alcohol. La 2ª Guerra Mundial impulsó esa
iniciativa, fortaleciendo la práctica de la mezcla. En efecto, el gobierno tuvo que
establecer en un 20% la mezcla máxima en 1966. Pero el gran salto hacia los
agrocombustibles se realizó en la década de 1970.
PROÁLCOOL
El programa nacional del alcohol en Brasil fue motivado por la elevación del precio
del petróleo en la década de los setenta, junto con la gran dependencia externa
respecto a ese recurso, lo cual tenía un fuerte impacto negativo en la balanza de
pagos (80% del consumo del crudo era importado).
Entre otras medidas destinadas a enfrentar esos problemas, estuvo la sustitución
de gasolina por alcohol23.
El plan fue realizado en dos etapas. En la primera, de 1975 hasta 1979, se primó
por utilizar la infraestructura existente, establecer y aumentar la mezcla de alcohol
anhídrido en la gasolina obligatoria (20 a 25%). En el segundo momento, con el
agravamiento de la crisis del petróleo, se avanzó al crear una gran infraestructura
de distribución de alcohol por PETROBRÁS, aparte de impulsar la creación y difusión
23
Otras medidas han sido la elevación del precio interno de la gasolina, para inhibir
su consumo; el incremento de las exportaciones de bienes y servicios para
compensar gastos con petróleo; la adopción de políticas externas con países
productores de petróleo, para garantizar el abastecimiento de este producto y
ampliar mercado para exportaciones brasileñas; la elevación de la producción
nacional del petróleo (DORNELLES, Ricardo d. G. Política nacional de
biocombustíveis)
22
2.3.1.2 Agro-diesel
La historia del agro-diesel es más reciente. Las primeras experiencias en el país
remontan a la década de 1940. Las materias primas utilizadas eran babasú, coco,
semilla de algodón.
24
La implementación de políticas neoliberales en la década de los noventa fue co-
responsable de que la producción de coches a alcohol, que había llegado a tomar
cerca del 90% del mercado de nuevas vendas a finales de los ochenta, cayera casi
a cero entre 1995 y 2000.
23
25
Esta es considerada por la agroindustria de óleos vegetales como buena salida,
sirviendo para regular mercado (POUSA, Gabriella P. A. G., SANTOS, André L. F.
and SUAREZ, Paulo A. Z. History and policy of biodiesel in brazil. p. 5393-5398).
24
Comparando las tres principales materias primas para producir etanol (Berg, 2004),
se nota que la que representa el menor coste por litro es la caña (cerca de U.S. $
0,08), mientras las demás (maíz y remolacha) son cerca de 3 veces más caras
(llegando casi a los U.S. $ 0,25)26.
Por otro lado, la proporción de retorno de energía por la energía invertida para la
caña de azúcar está entre 8,3 y 10,2 (Smeets et al. 2006), mientras en el maíz, por
ejemplo se sitúa en torno al 1,3, y el de remolacha no llega a 2 (Gráfico 12).
El balance energético de agro diesel es aún más favorable. En el caso de extracción
de la palma, por ejemplo, el balance llega a ser más elevado que el de la caña.
Considerando que la madurez tecnológica es mucho menor en este sector, la
perspectiva es positiva.
Aún en el caso de la soja, que en Brasil será probablemente muy usada para
producir carburantes (el país es de los principales productores mundiales de ese
producto), ese indicador es más elevado que las otras dos grandes fuentes de
agrocombustibles: remolacha y maíz.
Comparando los costes por fuentes utilizadas en Brasil (Pousa et al. 2007), se nota
que la semilla de algodón es la de menor coste promedio (US$ 0,42/L), seguida de
la palma (US$ 0,61/L) y la soja (US$ 0,67/L)27.
10
0
Desechos de
Remolacha
Celulosis
Caña de
Palma
Trigo
Colza
Maíz
Soya
Azúcar
vegetales
oleos
26
“En un mercado perfecto, con un coste de US$35 por barril de petróleo, apenas la
caña sería viable. Las demás son remolacha (103$), maíz (81$), trigo (145$),
higuerilla(209$) y celulosa (305$)”. (EVANS-PRITCHARD, Ambrose. Why the price
of 'peak oil' is famine)
27
El menor coste se da para soja en la región que más produce, siendo de cerca de
US$ 0,43/L
25
-Pastos (35)
Tabla 3: Área Potencial Arable según región geográfica del mundo - 1994*
Área en uso del Total potencial arable sin Total potencial
total potencial uso (millones de arable sin uso
arable (%) hectáreas) (% del total)
Africa sub-sahariana 15% 892,5 37,41%
Africa del Norte y Oriente
Próximo 160% 0,0 -1,12%
Asía del Norte, leste de los
Urales 64% 100,4 4,21%
Asia y Pacifico 64% 265,0 11,11%
28
Otros objetivos: aumentar la eficiencia energética en 20%, bajando el consumo
energético; aumentar la participación relativa de renovables en el total de energía
consumida hasta el 20% (CE, Comisión E. EU action against climate change:
Leading global action to 2020 and beyond)
28
29
La AIE sugiere a partir de eso un foco en la mezcla de etanol , por el hecho de
que para la expansión de biodiesel la necesidad de tierra sería mucho más grande.
(IEA, INTERNATIONAL ENERGY AGENCY. Biofuels for transport: An international
perspective)
29
Referencias Bibliográficas
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