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Aproximaciones desde la Ética para un México Sin Corrupción

Rafael M. de Gasperin Gasperin


Enrique Raul Alanis Davila
José Rodrigo Abud Madrid

Organización México sin Corrupción


http://www.mexicosincorrupcion.com/

Departamento de Filosofía y Ética


http://www.mexicosincorrupcion.com/index.php?option=com_content&view=article&id=48&Itemid=54

Tecnológico de Monterrey
Campus Monterrey

Resumen

La organización de la sociedad civil “México sin corrupción” y el Departamento de


Filosofía y Ética/ Cátedra de Persona y Desarrollo Moral del Campus Monterrey a
través del proyecto honor´s de la materia ética, persona y sociedad, llevó a cabo la
elaboración de un instrumento con el cual es posible promover la transparencia y la
honestidad en los procesos ciudadanos y con ello minimizar las formas de
corrupción.

“México sin corrupción” es una organización ciudadana autónoma, que desarrolla


herramientas que promuevan la cultura de la transparencia y honestidad en el sector
público y privado, contribuyendo a un país más democrático. Su misión se funda en
la promoción de la cultura de la transparencia de los procesos públicos y privados,
pretendiendo con ello, ser una organización que detone una nueva conciencia social
de transparencia y cultura cívica, que coadyuve a transformar las diversas formas
culturales mexicanas, en un motor de cambio.

El instrumento fue elaborado mediante un proceso de reflexión grupal que partió del
conocimiento y comprensión de la ética Aristotélica y Kantiana, para con ello, poder
plantear un decálogo basado en el desarrollo de la virtud y en el principio de
autonomía que sirva como base y fundamento en la gestión de programas de
desarrollo y denuncias ciudadanas públicas o privadas.

Palabras clave

México, transparencia, desarrollo, denuncia, ética, ciudadanía, instrumento.

Introducción

México es un país honesto, de gente trabajadora y creativa que día a día muestra
con su esfuerzo y dedicación el amor que profesa a su nación.

En la historia de nuestra cultura la promoción de la integridad y las justas relaciones


humanas son el motor que anima a cada ciudadano a entrar en relación con el otro y
convivir con el o ella.

Nuestras formas culturales que se manifiestan en el comportamiento humano


personal y colectivo nos han enseñado que es por medio de “la virtud” y “el deber
ser” que se definen los derroteros del quehacer humano tanto singular como plural y
se muestran desde su mayor o menor organización y desarrollo.

La corrupción es un mal endémico que enferma a las instituciones justas y daña las
relaciones entre las personas, por ello, en “México sin Corrupción” nos hemos dado
a la tarea de señalar a manera de un decálogo sustentado en la Virtudes
Aristotélicas y el Deber ser formulado por Kant el marco de una reflexión para la
acción orientada al desarrollo de programas educativos y a la propuesta de nuevas
políticas públicas.

Con la mentalidad “fresca” de una generación cansada de “malas formas sociales” y


con el apoyo de la experiencia teórica de la Cátedra de Persona y Desarrollo Moral
presentamos diez líneas que auspician y patrocinan la autoría de futuros proyectos
éticos y ciudadanos y que se han construido con el Grupo Honors de la clase de
Ética, persona y Sociedad en semestre Agosto Diciembre del 2009 del Instituto
Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), en el Campus
Monterrey, y la colaboración de la Cátedra Ética, Persona y Desarrollo Moral.

Desarrollo

Aristóteles menciona que todo arte y toda investigación científica, lo mismo que toda
acción y elección parecen tender a algún bien; y por ello definieron con toda
pulcritud el bien los que dijeron ser aquello a que todas las cosas aspiran (ética a
Nicómaco p.3) en México sin corrupción se pretende buscar esta noble aspiración a
la que cada ser humano – por su naturaleza- a sido llamado, sin olvidar, que la virtud
moral es fruto de la costumbre de la cual ha tomado su nombre…y que los actos
semejantes nacen de los hábitos. Es preciso, por tanto, realizar determinados actos,
ya que los hábitos se conformarán a su diferente condición. (ética a Nicómaco p.18-
19).

En el trabajo colaborativo realizado por los estudiantes honor´s del curos de ética
persona y sociedad (que en consecuente llamaremos EPS) se realizó la reflexión
sobre la importancia de los hábitos como constructores de virtudes y ello llevo a
buscar en la realidad a cada uno de los estudiantes algo, que denominamos los
“procesos rotos en la vida cotidiana”.

Un proceso roto se definió como una cadena de comportamientos donde los hábitos
personales estuvieran dañando la búsqueda intencionada del bien tanto personal
como común, y por ende llevarán a la creación de círculos viciosos en lugar de
virtuosos individuales o colectivos.

Al tener un conjunto de ejemplos donde estos sucede en la vida cotidiana se


procedió a clasificar cada uno de “los procesos rotos”, y para ello se tomo como
base las virtudes dianoéticas enseñadas por el estagirita, haciendo mayor énfasis en
los procesos de justicia que es la virtud ética por excelencia, ya que, ésta virtud no
se enseña pero si se aprende. Aristóteles llama justo a lo que produce y protege la
felicidad y sus elementos en la comunidad política (ética a Nicómaco p.59) y se
consigue por medio de la práctica de la misma.
Una vez terminado el proceso de clasificación de los procesos rotos y habiendo
seleccionado los que atañen a la justicia y que por ende laceran tanto la felicidad
como el bien común, procedimos al siguiente paso.

El segundo paso consistió en la lectura de los imperativos categóricos en el texto de


la Fundamentación de la metafísica de las costumbres de I. Kant.

Kant enseña que existen imperativos categóricos a los que define como aquellos
que sin poner como condición ningún propósito a obtener por medio de cierta
conducta, mandan esa conducta inmediatamente (Fundamentación de la metafísica
de las costumbres p.59).

Por ello, la tarea consistió ahora, en preguntarnos si los procesos rotos que
habíamos encontrado y clasificado como injusticias siguiendo las definiciones de
Aristóteles podían tener un carácter formal diferente al que expresaban en la
realidad cotidiana.

Esto se resolvió haciendo a cada uno de los procesos rotos la pregunta de si debían
ser así o tenían otro orden de posibilidad.

Las preguntas eran:


¿Es posible que las cosas se hagan siempre así?
"Obra sólo según una máxima tal que puedas querer al mismo tiempo que se torne ley universal"
¿Debemos tomar como una ley la forma en que este proceso se lleva a cabo?
"Obra como si la máxima de tu acción debiera tornarse, por tu voluntad, ley universal de la
naturaleza"
¿El proceso convierte a la persona en un medio?
"Obra de tal modo que uses la humanidad, tanto en tu persona como en la persona de cualquier
otro, siempre como un fin al mismo tiempo y nunca solamente como un medio"

¿Si tú fueras el legislador aprobarías un proceso así?


"Obra como si por medio de tus máximas fueras siempre un miembro legislador en un reino universal
de fines"
Con ello se logro construir un decálogo que desde la virtud Aristotélica y el principio
de autonomía Kantiana darán fundamento a futuros programas de desarrollo
educativo y/o denuncias ciudadanas de organismos públicos y privados.

El decálogo fue el siguiente:

1. Anteponer el valor de todo ser vivo sin importar sus diferencias.


2. Reconocer y respetar la dignidad de las personas, animales y naturaleza.
3. Conocer las raíces de los problemas sociales y culturales que impiden la
consolidación de una identidad cultural nacional.
4. Buscar la identidad social y cultural de cada comunidad para fomentar el sentido
de pertenencia.
5. Reconocer como obligación ciudadana que todas las acciones generan
consecuencias que afectan tanto al individuo como a su entorno.
6. Proponer soluciones a aquellas situaciones con las que se difiera siempre
fundamentando las razones.
7. Ser agente de cambio en tu persona y promover el cambio en los demás.
8. Promover las acciones del individuo a favor de la comunidad.
9. Fomentar la educación integral para impulsar altos estándares de crecimiento
social.
10. Comprometerse con el desarrollo social por medio de la educación integral y de
la transparencia.

Por lo que cualquier proceso individual o colectivo que vaya en contra de estas
declaraciones será considerado como un proceso roto al cual deberá observarse
cuidadosamente como el inicio de un foco de corrupción que violenta el desarrollo de
la virtud publica o privada y debe ser motivo de denuncia para su reflexión.

El mecanismo utilizado para tal proceso se lleva a cabo por medio de la página web.
http://www.mexicosincorrupcion.com/
Conclusión

Saber construir decisiones con fundamentos éticos Aristotélicos o Kantianos dio a


los estudiantes honor´s del curso de EPS el conocimiento y competencia del manejo
de ambas filosofías morales y con ello fortaleció la seguridad en la toma de
decisiones virtuosas y autónomas alrededor de un contexto complejo que busca un
México sin corrupción.

Capitalización.

Además del aprendizaje de las dos grandes teorías éticas que han marcado el
comportamiento de los habitantes de la cultura occidental, en éste curso se dio el
logro de la construcción consensada de un decálogo que se constituye como el
primer paso para construir programas educativos y propuestas para nuevas políticas
públicas o privadas junto con los alumnos de los siguientes semestres y siempre de
la mano de la asociación México sin corrupción.

Bibliografía

Aristóteles (2000) Ética Nicomaquea. Versión Antonio Gómez Robledo. México:


Porrúa.

Bilbeny, N. (1997) La revolución en la ética. Hábitos y creencias en la sociedad


digital. Barcelona: Anagrama.

Kant (1921) Fundamentación de la metafísica de las costumbres traducción Manual


G. Morente. Madrid: Calpe

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