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CONSTRUYENDO REALIDADES: UN ARTE DE LENTES

Lynn Hoffman

En este ensayo intento hacer un mapa de las dimensiones de mi


alejamiento de una analogía biológica-cibernética para la terapia
familiar sistémica. Central a este alejamiento ha sido la teoría de
construcción social que ha surgido conla ayuda de dos otros lentes: la
visión de segundo orden y una sensibilidad al género. Estas
herramientas conceptuales me han ayudado a distanciarme de mi
parada terapéutica previa y a ver un modelo muy diferente, uno que
es menos estratégico e instrumental, más colaborador y menos
cerrado.

Creencias...ese hombre es un animal suspendido en telas de araña


de significado que él mismo ha generado, yo creo que esa tela es la
cultura y que el análisis de esas telas no es una ciencia experimental
en busca de ley sino una ciencia interpretativa en búsqueda de
significado. ---Geertz

Los términos en que se entiende el mundo son artefactos sociales,


productos de intercambios entre personas situados históricamente.
Desde la posición contruccionista, el proceso de comprensión no es
gatillado automáticamente por las fuerzas de la Naturaleza, sino que
es el resultado de una empresa activa y cooperadora de personas
que se relacionan. ---Gergen
Comienzo este ensayo mencionando un desafío masivo al modo de
razonamiento científico que ha dominado nuestro siglo. Este desafío
se ha cristalizado en el término "postmoderno" que es una propuesta
de reemplazar ideales objetivos con una amplia tradición de críticas
constantes en la cual todas las producciones de la mente humana se
toman en cuenta. La teoría y la investigación en las "ciencias"
humanas caen en la categoría de textos escritos que pueden ser
analizados a través de sus muchas veces ocultas agendas políticas y
sociales, más que a través de sus comentarios de hechos
objetivizables.

Mi propio camino para descubrir este punto de vista fue largo y


tortuoso. Hace veinticinco años recogí un lente llamado cibernética
que estaba en el suelo del universo. La cibernética fue el "hijo" de
Norbert Weiner y él lo llamó "la ciencia de la counicación y del
control." Describió la actividad de ciclos de retroalimentación, no sólo
en las máquinas sino que también en los asuntos humanos. Desde
ese momento en adelante, sólo vi círculos, círculos sin tiempo.
Parecían invadir cada esfera. Influenciada por esta metáfora, me
adscribí a una teoría de terapia familiar en la cual un síntoma fue
descrito como parte de un ciclo homeostático que estabilizaba a la
familia. Un terapeuta es una persona que tenía las habilidades para
romper ese círculo y ayudar a la familia a volver a un equilibrio.
Nunca cometí el error de pensar que dichos círculos eran buenos,
pero sí pensaba que habían arreglos ocultos que las familias no
podían ver.

Sólo ha sido gradualmente y con gran dificultad que me he dado


cuenta de este lente y algunas alternativas. La teoría de contrucción
social y mi interés en la filosofía del constructivismo han sido
cruciales en mi desarrollo de darme
cuenta.

Tomando en cuenta una visión histórica, en los años 80 un gran


número de personas en el campo de la familia, incluída yo, nos
enamoramos del constructivismo. Durante esta época, informes del
trabajo del biólogo Humberto Maturana y su colega, Francisco Varela,
Heinz Von Foerster y Ernst von Glasersfeld empezaron a filtrarse en la
consciencia de los terapeutas familiares. Esta consciencia fue
ayudada por los esfuerzos de publicidad de teóricos familiares como
Brad Keeney, Paul Watzlawick y Paul Dell. La investigación de redes
neurales de Von Foerster y los experimentos de visión de color de
Maturana habían indicado que el cerebro no procesa imágenes del
mundo de la misma forma que lo hace una cámara, sino que las
computa como la música en un disco compacto. Sería imposible, por
lo tanto, saber cómo era realmente la imagen antes de que se
computara en el cerebro. Maturana hablaba de poner el objetivismo
entre paréntesis y en sus charlas ponía un ojo esquemático en un
rincón superior de la pizarra. Von Foerster tanbién había enfatizado la
importancia del observador. Él contribuyó el término "sistemas que
observan".

El constructivismo como visión general deriva de la tradición europea


que incluye Berkeley, Vico, Kant, Wittgenstein y Piaget. Von
Glasersfeld llama a su versión "constructivismo radical". Él cree que
los constructos se moldean cuando el organismo hace un "fit" con su
entorno y que la construcción de ideas acerca del mundo se lleva a
cabo en un sistema nervioso que opera como un ciego que intenta
conocer una habitación. El que camina en la oscuridad y no chocó con
un árbol no puede decir si está en un bosque o en un campo, sólo
puede decir que ha evitado pegarse en la cabeza.

Durante mucho tiempo, asumí que la teoría del constructivismo y de


la construcción social eran sinónimos. En ambos casos, la idea de una
verdad conocida objetivamente no tenía cabida. Después leí una
visión general de la posición construccionista de Kenneth Gergen. Me
di cuenta que los construccionistas sociales ponen mayor énfasis en
la interpretación social y en la influencia intersubjetiva de lenguaje,
familia y cultura y mucho menos énfasis en las operaciones del
sistema nervioso cuando intenta "conocer una habitación a oscuras".
Esta visión, un producto americano, ha sido conocida en el campo de
la psicología social durante mucho tiempo y es representada por el
trabajo de investigadores como George Kelly con su teoría de
constructos interpersonales; Berger y Luckmann con su libro La
Construcción Social de la Realidad; Kenneth Gergen son su énfasis en
los "textos" que crean identidad; y Clifford Geertz cuyos estudios han
apoyado la idea de que el conocimiento no es localizado.

Básicamente, la teoría de construcción social establece que nuestras


creencias acerca del mundo son invenciones sociales. Gergen dice:
"Las visiones del construccionismo social ven el discurso acerca del
mundo no como una reflexión o mapa del mundo, sino que como un
artefacto de intercambio comunal." Cuando nos movemos a través
del mundo, construímos nuestras ideas acerca de él en nuestras
conversaciones con otras personas. Gergen asocia la evolución de
esta aproximación a la teoría de Kurt Lewin que estaba orientada
cognitivamente. Tomaba el lado idealista en la controversia europea
entre el idealismo (la visión de que el conocimiento deriva de
constructos internos) y del positivismo ( la visión de que el
conocimiento es una representación de hechos y eventos en un
mundo "real"). Derivando de ambas visiones, la teoría del
construccionismo social ve el desarrollo del conocimiento como un
fenómeno social y establece que la percepción sólo puede
evolucionar dentro de una cuna de comunicación.

Inicialmente, me gustó la posición constructivista porque implicaba


que toda interacción se lleva a cabo entre lo que Maturana llamaba
sistemas nerviosos informacionalmente cerrados que sólo se pueden
influenciar entre ellos de maneras indirectas. La analogía que surgió
fue el intento de establecer un diálogo entre distintas especies. Esta
idea subyace el supuesto de que la terapia es un tema de instrucción
o manipulación de una persona por otra, quien era por definición
algún tipo de "experto" acerca de cómo la otra persona debe ser.
Pero no me gustó la idea de que las personas están estancadas en un
caseta aislada. Si se llevaba esta visión a un extremo, se podría decir
que los terapeutas y clientes se comunican como "bajo el agua".

En contraste, la teoría de construcción social propone un conjunto de


significados sin fin que emergen desde las interacciones entre las
personas. Estos significados no están limitados por el cráneo y
pueden no existir dentro de lo que llamamos la mente individual. Son
parte de un fluir general de narrativas en constante cambio.
Entonces, la teoría establece que el desarrollo de conceptos es un
proceso fluido, derivado socialmente. Creo que ayuda que el
terapeuta piense en los problemas como historias que las personas
han acordado contarse a sí mismos. Incluso el "self" puede ser una
historia. Janet Bavelas dijo una vez "La gran decepción es el paquete
biológico; las personas te dan un nombre y tienes que
responsabilizarte de él". Como dice Gergen "El movimiento es desde
una epistemología experiencial a una epistemología social".

Usualmente cito al comediante Steve Wright que dice "Tengo una


colección de conchitas. La dejo esparcida en las playas a través del
mundo". La colección no existe en del mundo exterior, sino que
dentro del intercambio entre el comediante y su público.

Terapeutas familiares como el grupo Galveston están empezando a


interesarse en semánticas, narrativas y linguística postmodernas.
Esta actitud parece marcar un alejamiento de la metáfora biológica-
cibernética que compara una familia a un organismo o a una
máquina. Términos como "homeostasis", "circularidad" y
"autopoiesis" son metáforas espaciales que explican cómo entidades
permanecen iguales. Analogías temporales como narrativas, historias
y fluidos, suponen que las entidades están siempre en proceso de
cambio. Este cambio se enfoca en ríos a través del tiempo en vez de
círculos sin tiempo. Aunque nunca se puede decir que una metáfora
es más verdadera que otra, prefiero los descubrimientos de
científicos como Prigogine y Stengers, con su idea de "fluctuación out
of order", la teoría de catástrofe de Thom que ofrece una descripción
matemática del cambio discontinuo y la versión de Gleich de la teoría
del caos que muestra el orden que se encuentra en la turbulencia.
Creo que estos modelos proponen una analogía mejor que los ciclos
estáticos de la teoría de la cibernética, para describir las trayectorias
cambiantes de grupos humanos.

Obviamente, la teoría de construcción social es sólo parte de un


cambio ideológico mayor que está ocurriendo en la terapia familiar y
otras ciencias humanas. Podría haber elegido muchos otros términos
como "semánticas postmodernas", "teoría crítica" o
"desconstruccionismo" para el nuevo marco que está tomando forma,
pero me pareció que la teoría de construcción social tenía una historia
y que era un paraguas más conveniente. Muchos estilos de hacer
terapia que podrían competir en otro momento, ahora se juntan bajo
su gran cobertura si todos sus practicantes están de acuerdo en que
toda la terapia toma la forma de conversaciones entre persoans y que
los descubrimientos de estas conversaciones no tienen otra realidad
que la que se le da a través del consenso mutuo. Una buena analogía
se encuentra en la película Peter Pan. Campanita, angustiada y
desapareciendo lentamente, le pide al público que la ayude:
"Aplaudan si creen en mí". Por supuesto todo el público- niños y
padres- responden.

Al pensar de esta forma acerca de la construcción de significados,


uno puede decir que incluso la opción de modalidades sensoriales en
la psicoterapia se deriva socialmente. Hace algunas décadas, basada
en el interés en la psicología humanista, la palabra clave era
"sentimiento". Los modelos cognitivos más recientes han dado
primacía a las formas de "ver". En el futuro, sospecho que el interés
creciente en la metáfora de "voz" va a apuntar a una nueva forma de
"escuchar".

Aun así, este ensayo fue escrito como una ayuda para "ver" en forma
diferente. Y para ayudarme, me apoyo en tres nuevos lentes. Uno es
la teoría de la construcción social. El segundo es lo que llamo visión
de segundo orden y el tercero es género. La teoría de construcción
social es en realidad un lente acerca de lentes. Los otros dos son sólo
ayudantes en cuanto dramatizan y remecen las visiones de mundo en
sus áreas respectivas. Las tres pueden ser aplicadas metafóricamente
a la psicoterapia. Los tres representan conujntos de lentes que
refuerzan un "darse cuenta" de que lo que uno cree que se veía de
una forma, inmutable y eterna, puede ser vista de otra manera. No
nos damos cuenta de que un "hecho" es sólo una opinión hasta que
nos sorprende el descubrimiento de otro "hecho", igualmente
persuasivo y exactamente conrtadictorio del primero. Los pares de
hechos nos presentan un marco más amplio que nos permite alternar
o elegir. Con el costo de dejar absolutos morales y científicos, el
construccionista social tiene un sentido de opción bastante amplio.
Déjenme describir los dos "ayudantes": el concepto de visión de
segundo orden y el género.

EL LENTE DE LA VISIÓN DE SEGUNDO ORDEN

Este término viene de las matemáticas y significa adoptar una


posición que está a un paso de la misma operación, de tal manera
que se puede percibir la operación en forma reflexiva. Estas visiones
son, en realidad, visiones de visiones. Muchas veces nos hacen
darnos cuenta de cómo nuestra relación con la operación influye en
ella o permite que veamos que una interpretación particular es sólo
una entre muchas versiones posibles.

Por ejemplo, cuando mi hija menor estaba en primero medio, llegó a


la casa con una tarea de "matemática nueva" y me pidió ayuda. Yo,
que nunca había logrado conquistar la aritmética, estaba totalmente
sorprendida por esta nueva matemática. Le dije a mi hija que no le
podía ayudar porque la nueva matemática no existía cuando yo fui al
colegio y ella se fue murmurando lo malo que era tener una madre
que creció en el pasado. Yo, sin embargo, quise ponerme al día y le
pregunté a una amiga acerca de las matemáticas nuevas. Me lo
explicó usando el sistema decimal como ejemplo. Parecía que se
podía usar un sistema de numeración basada en grupo de diez, pero
que también se podía usar cualquier otro grupo, por ejemplo doce o
dos. Yo, que siempre pensé que el sistema decimal estaba tallado en
piedra, estaba sorprendida. "Vi" lo que era la nueva matemática. No
era una nueva forma de hacer matemáticas sino que era una nueva
forma de pensar acerca de hacer matemáticas.

Otro ejemplo de una visión de segundo orden fue la forma en que fue
aplicada a la cibernética. La investigación que llevó a la ciencia de la
cibernética fue conectada con experimentos que habían empezado en
la II Guerra Mundial. Después de la guerra, una serie de conferencias
interdisciplinarias llamadas Conferencia Macy surgieron, a las cuales
asistieron investigadores de las ciencias sociales y físicas, y se
unieron con un propósito común: explorar las aplicaciones en varios
campos de la nueva y fascinante idea de que entidades vivientes y
no-vivientes pueden ser gobernadas por loops de retroalimentación
activadas por errores. Al mismo tiempo, el trabajo acerca de los
computadores y la inteligencia artificial estaba ofreciendo lo que se
conoce como la aproximación sistémica a los procesos mentales y al
cerebro.

Durante los años 70, el campo de la cibernética tuvo un cambio. Los


ingenieros y constructores de robots eran una mayoría, pero un
pequeño grupo de disidentes tomó un paso, incluyendo no sólo al
antropólogo Gregory Bateson, sino tambien a Von Foerster, Maturana,
Varela y von Galsersfeld. Von Foerster propuso una cibernética de
segundo orden en vez de una cibernética de primer orden
perteneciente a los científicos "duros". De acuerdo a la ciebernética
de segundo orden, los sistemas vivos no son objetos que pueden ser
programados desde afuera, sino entidades auto-creadores
independientes. Podrían ser máquinas pero eran máquinas no-
triviales, según von Foerster, lo que significaba que no estaban
determinados por la historia ni seguían un camino predecible.

Vi esta distinción como una liberación de los modelos que trataban a


la terapia familiar como un tema puramente de cambio conductual.
Una visión de primer orden en la terapia familiar asumiría que es
posible influenciar a otra persona o familia usando una u otra técnica:
yo te programo, te enseño, te instruyo. Una visión de segundo orden
significaría que los terapeutas se incluyen como parte de lo que debe
cambiar; no se paran afuera. Esta visión permite que aparezca algo
totalmente diferente. Por un lado, la noción de "arreglar problemas"
puede ser vista como parte del problema, como lo dijo la escuela
interaccional de Palo Alto hace algunas décadas. Los modelos de
terapia familiar basados en una idea de familia normal, alienan a
padres que se sienten culpables por ello. La tecnología de la
psiquiatría (etiquetas médicas) intensifica la enfermedad emocional.
Los inetntos de prevenir el uso de drogas sólo lo exacerba.

Forrester de MIT ha llamado este efecto el "principio contra-intuitivo".


En simulaciones computacionales de sistemas económicos, encontró
que las soluciones de sentido común a problemas complejos muchas
veces tienen el efecto opuesto de lo que se quiere lograr. Cree que
este es el resultado de loops de retroalimentación secundarios y
terciarios que están fuera de vista del experimentador. Tal como
estamos de acuerdo en que nunca podremos predecir el tiempo en
forma precisa, debido a su complejidad extraordinaria, también
parece que la conducta de sistemas humanos nunca se va a poder
predecir.

Cuando miré mis 25 años en la terapia familiar, me di cuenta que la


mayoría de los modelos en los cuales me había entrenado, o que
había estudiado, eran modelos de primer orden, que estaban muy
conscientes de la belleza de la intencionalidad pero que no se
percataba de sus peligros. La distinción entre visiones de primer y
segundo orden me permitió considerar cómo se vería una terapia que
permitía las tendencias extremadamente instrumentales de mi
entrenamiento más temprano. Esta idea, que compartí con Harlene
Anderson, Harry Goolishian y otros del Instituto Familiar Galveston,
me alejaron de la noción de "el sistema crea el problema" hacia la
visión igualmente válida de que "el problema crea el sistema".
Anderson y Goolishian fueron aun más allá especificando que un
sistema problema era siempre un sistema linguístico y que los
problemas no tienen una existencia objetiva en sí mismos, sino que
sólo a través de la conversación con otros.

EL LENTE DEL GÉNERO

Me di cuenta del tema de género en la investigación psicológica. El


libro de Carol Gilligan En una voz distinta me impresionó
enormemente. Su investigación cuestionó la visión de mundo
asociada con sistemas valóricos masculinos, especialmente el énfasis
en la independencia, autonomía y control y mostró que las mujeres
tienden a valorar, en contraste, la relación y la conexión. En nuestro
propio campo, libros recientes como el de Carter y McGoldrick, El
ciclo de vida cambiante y el libro de Pappa, Walters, Carter y
Silverstein El web invisible, desafían muchas teorías fundamentales
de la psicología y psicoterapia moderna: esquemas de desarrollo
basados en estudios de maduración masculina, pero aplicados a
todos los seres humanos; dualidades construídas en el concepto de
ciclo de vida familiar que toman al heterosexual pero patriarcal como
norma; la devaluación de cualidades como dependencia y cuidado
que generalmente se asocian a las mujeres. Las teorías de terapia
familiar sólo han empezado a ser investigadas por prejuicios de
género y términos como "madre sobreprotectora" y "familia
aglutinada" están siendo atacados.
Una escuela particular de terapeutas familiares que está siendo
desafiada es la versión de Milán del modelo sistémico. Las feministas
están particularmente en contra de términos como "causalidad
circular" o "complementareidad" para designar la reciprocidad de
elementos en una relación entre un hombre y una mujer. Dicen que,
en el caso de una relación desigual o abusiva, el uso de estos
términos puede enmascarar la responsabilidad del hombre y la
vulnerabilidad de la mujer. Luepnitz destaca una cita de mi libro
Fundamentos de la Terapia Familiar donde digo que, al igual que los
individuales deben caber dentro de una familia, la familia debe caber
dentro de la comunidad y todo debe caber en una ecología mayor.
Escribí eso en el ánimo de misticismo feliz que produce leer
demasiado a Bateson. Ahora me parece un tipo de fascismo ecológico
particularmente ofensivo donde un individuo puede ser sacrificado
por un bien de la totalidad. Por supuesto lo repudiaría, imagino que
Bateson también.

Creo, sin embargo, que Bateson estaría de acuerdo conmigo de que


el énfasis en el poder y control en la familia que se dió
tempranamente en la terapia familiar puede ser vista como un caso
de prejuicio de género. Bateson objetó el uso de la metáfora de poder
de Haley y el rol central que jugaba en su teoría. Bateson usaba su
prtopia terminología peculiar para atacar el concepto de poder
llamándolo un mito o un error epistemológico. Como resultado, ha
sido acusado de decir que el poder no existe. Creo que él quería decir
que no estaba de acuerdo con una filosofía de terapia que
recomendaba una parada de poder del terapeuta, pero que quería
evitar moralizar porque vió que tomaría una posición de poder a su
vez.

En este punto, quisiera incluir un argumento en contra de tomar


demasiado en serio la visión de Bateson. Los activistas sociales
pueden sentirse más cómodos con los modelos estructurales de
terapia familiar que las sistémicas porque por lo menos reconocen el
poder como un factor en lso asuntos humanos. Como pelear con
fuego contra fuego, puede ser necesario a veces pelear el poder con
el poder. El tratamiento reciente de Dell del tema de la violencia hace
una distinción entre el universo de explicaciones científicas en el cual
temas como la responsabilidad persnal y el juicio moral no tienen
cabida y el mundo de experiencia humana- un mundo de descripción
en el cual las personas sienten y hablan acerce de ser victimizadas.
LA debilidad de las vsiiones sitémicas dfe Bateson es que no ofrecen
un lenguaje para describir eventos experienciales.

Dell destaca el hecho de que Bateson sentía ftan fuertemente como


Haley que el uso del poder para controlar a otros era patológico,
excepto que prefirió describir esta práctica como un error de
pensamiento y no un error de acción. Los clínicos generalmente están
de acuerdo con Haley. Muchas veces son enfrentados con la
necesidad de hacer algo acerca de una situacion criminal o cuasi-
criminal en una familia y, en ese caso, muchas veces no teien opción
y deben apoyarse en modelos reformistas lineales que han surgido en
respuesta a un enfoque reciente en la esposa golpeada y el abuso
infantil. Una excepción es la aproximación sistémica no-peyorativa a
la violencia doméstica por equipos como Peggy Penn y Marcia
Sheinberg en el Instituto Ackerman de Terapia Familiar en Nueva
York, o Gerry Lane y Tom Russel en Atlanta Georgia. Ambos grupos
han informado resultados exitosos, aunque no en el cien por ciento de
los casos.

Experimentos como estos cuestioann la creencia central en modelos


estructurales como Haley, que el terapeuta debe siempre tomar una
parada superior en jerarquía. Muchas mujeres y hombres tambien se
sienten incomodos con esta posicion y les va mejor con un estilo
menos autoritario. Muchas escuelas de terapia, individual o de
familia, evitan cuidadosamente una parada basdaa en el poder y
parecen tener el mismo éxito. De hecho, la resistencia que las
terapias basadas en poder parecen encontrar muchas veces
desaparece cuando se usan tácticas más suaves. Como resultado, los
practicantes de estas terapias más suaves han comenzado a a decir
que la resistencia es un artefacto de la forma en que los terapeutas
se presentan más que una característica de una familia porfiada.

Hay otro problema con los modelos estructurales. Ya que derivan en


parte de la teoría organizacional, tienden a mantener un prejuicio
normativo a favor de lineas de estatus, que son desiguales por
definición. Se dice que una familia es disfuncional si no se refuerza la
línea generacional. Pero las familias no necesariamente se
estructuran como las Fuerzas Armadas o la Iglesia, como tampoco un
terapeuta es un general ni es el Papa. Una vez más, uno encuentra un
sistema de valores patriarcal implícito. Como han destacado las
críticas feministas a la terapia familiar, mirar sólo la línea
generacional pueden ocultar la desigualdad entre los roles
domésticos de marido y mujer.

Para mí, la importancia principal del lente del género es que expone
suposiciones establecidas en la teoría psicológicas que se toman
como ciertas, y que no sólo son perjudiciales para las mujeres sino
tambien para los hombres. El libro de Gilligan, en una voz distinta, ha
sido altamente criticado por tomar una vision alfa según Rachel Hare-
Mustin. Esta visión dice apoyar lo "diferente" de la mujer como una
esfera de domesticidad para mujeres idealizadas por los escritores de
la epoca victoriana. Hare-Mustin contrasta esta posición con una
visión beta: la creencia de que los hombres y las mujeres deben ser
tratados igual. Una vsiisón beta busca aboler la diferencia d epoder
entre hombres y mujeres y surge a favor de los derechos de la mujer.

Me parece que Gilligan puede estar proponiendo una tercera visión,


que es que mujeres y hombres necesitan ser capaces de elegir la voz
distinta que ha sido asignado a las mujeres. Está hablando de un
repertorio cultural más equilibrado para ambos géneros. Por esta
razón, prefiero llamar su posición "sensible algénero" más que
feminista. En mi propia terapia, he encontrado que esta distinción me
ha ayudado evitar imponer mi propia definición del problema de la
familia mientras me mantengo fiel a una idea de justicia. Tengo otra
preocupación. Al buscar declarar una guerra sobre las ideas de ge
´nero o lasestructuras en las familias, las feministas pueden crear
otro conjunto de etiquetas para la patología mental para garegar a los
que ya tenemos y un nuevo tipo de experto para decirles a las
familias cómo deben ser.
Déjenme terminar essta sección al decir que me siento
particularmente incómoda con el mensaje que los terapeutas
familiares que no usan sus capacidades para pelear contra la
opresión de las mujeres no son correctos políticamente. Al ser criada
en un mundo de artistas Marxistas, soy particularmente alérgica a ese
tipo de idealismo. Otro problema es la efectividad. Aveces dudo que
una terapeuta feminista pueda cambiar actitudes familiares
machistas trabajando a un micronivel de una familia particular. Estas
actitudes sólo cambaiarán frente a una política social reforzada por
acción política. Sin embrago, la posición feminista es valioso como un
tipo de darse cuenta y me ha hecho mirar a los textos sagrados en la
toerí afamiliar, de otra manera y desafiar las injusticias ocultas que
mucha sveces promueven.

LA FALACIA DE ROSETTA STONE

A modo de ilustrar algunas de las ideas que he expuesto en este


ensayo, déjenme incluir una anécdota que describ eun cambio
getsáltico propio. Este caso particular se relaciona con mi darme
cuenta de las implicaciones de la vivisón potmoderna para la terapia
sistémica. Mi historia no empieza con la terapia familiar sino que con
una crítica al aliteratura. Recientemente descubrí la teoría de
desconstrucción, una escuela de críticas literarias que se ha ocpuado
desamntelando una escuela más temprana llamada "LA Nueva
Crítica". Yo era una "Nueva Crítica" en mis días de universidad. Eso
significaba que yo creía que un poema o novela poseía una estructura
de significado oculto- un tipo de arquitectura simbólico- que sólo el
crítico podía discernir. Las creencias sociales y políticas, el género en
el que elegía escribir y su cultura, historia y propio género, no eran
importante comparado a lo que se encontraba en el texto. Se estaba
de acuerdo en que el autor era menso capaz de saber acerca de en
que consistia esa estructura critica comparada con el critico. Y por
supuesto, el lector común y corriente no tenía noción de ella.

Estaba feliz cuando me topé con la investigación del MRI en los 60


porque vi que podía usar la base de la nueva critica, que conocía tan
bien. LA idea de un sistema cibernético en el cual un síntoma esatba
inserto era mandado del Cielo porque ofrecía una metáfora que
calzaba exactamente con mi idea de una estructura oculta de
significados. Usé la analogía de Rosetta Stone para el trabajo de esos
pioneros en el MRI. Estaban decodificando la Rosetta Stone de la
comunicación patológica y yo los iba a ayudar a hacer esto.

Veinticinco años después estaba empezando aalterar mis ideas y a


sentir que era hora de dejar atrás los sistemas, en particular los
sistemas familiares. Solo recientemente, sin embargo, leyendo un
artículo que ataca la visión sistémica por Gerald Erickson llamado
"contra el grano: descentrando la terapia familiar". Que me di cuenta
que mi analogía era un mito que tenía consecuencias hirientes. El
ímpetu de la crítica de Erickson era un movimiento que por alguna
razón había escapado de la atención: el desafío desconstruccionista al
nueva crítica de mis dias de universidad. No quiero entrar en una
descripción de este movimiento excepto para decir que tuvo el efecto
de traer la crítica literaria de vuelta al contexto más amplio de la
política, biografía e historia. Este movimiento tambien ha de acuerdo
a mi lectura prejuiciada, sido responsable de algunos de las posturas
más auto-dramatizantes que la crítica literaria ha visto hace tiempo.

Pero, para volver a mi historia: Erickson argumenta, como lo hacen


los descontruccionistas, que la idea del sistema fue introducida por de
Saussure quien fundó la linguistica estructural. De Saussure propuso
que uno podía discernir un conjunto organizado de reglas para el
lenguaje que no sólo daba cuenta de su evolución a través del tiempo
sino que también de su coherencia en cualquier momento del tiempo.
LA teoria linguistica previa habia enfatizado el desarrollo historico
transversal del lenguaje, el concepto de de saussure de sistema
agregó la idea de una organización de reglas para la gramática en un
ahora sin tiempo.

El uso del término de su¡istema de de Saussure se convirtió en parte


de una contagio de ideas. Muchos otros teoricos sociales y
psicologicos o usaban este termino o la allternaban intercambiandolo
con estructura. Freud, un estructuralista temprano, habia contribuido
a la visión psíquica en su teoría del yo, superyo y ello. Psicologo Jean
Piaget habia posicionado estructuras en el desarrollo cognitivos del
niño. El antropologo Levi-Strauss, habia aplicado esta idea a la
antropologia, encontrando estructuras en la terminologias y en los
mitos de sociedades primitivas. Noam Chomsky descubrió la
estructura profunda de lo que el llamaba gramatica transformacional.
Talcott Parsons construyó una teoría de estructura de roles normativa
para la familia contemporanea. Y los nuevos críticos fundaron una
cultura entera de crítica literaria analizando la estructura de una
novela, poema o obra de teatro.

Erickson, usanod los mismos argumentos que los descontruccionistas


han usado en contra del estructuralismo sugiere que es tiempo de
destronar la terapia familiar. Está cuestionando los conceptos
sistemicos batesonianos. Y creo que tiene razon. Cuando los teoricos
sistemicos generales y los teoricos ciberneticos aparecieron en los
años 50, encontraron el paradigma sistemico a mano. Todo lo que
tenian que hacer era juntar la teoria general de sistemas con el
conepto de servo-mecansimo y estaba listo para partir. Esa ha sido la
nalogía informando la teoria familiar durante varias decadas. Ha sido
la metafora a traves de la cual nos regimos.

Sin embargo, en algunas maneras, es una metafora limitada. Da al


terapeuta , como aquel que analiza el sistema oculto de
comunicación, un poder enorme. Las peersonas primitivas no pueden
darse cuenta del sistema complejo de gramatica que informan sus
comentarios; nio tampoco puede una familia darse cuenta del sistema
de reglas que gobierna sus comunicaciones patológicas. El atribuir
ignorancia a la familia y todo el conocimiento al terapeuta es
inevitable. El terapeuta se convierte en un Interprete Maestro que lo
deja a cargo del campo por definición.

Como resultado, un estilo de terapia ha resultado que se basa en la


necesidad de distancia que solo contiene la distancia profesional ya
dada a los terapeuta por el modelo medico. El terapeuta, bajo estas
circunstancias, esta operando desde un conujnto de suposiciones. Ya
que la mayoria de estas suposiciones (en la terapia familiar e
individual- seamos justos) atribuyen culpa y juicios, tienen que ser
escondidos. En la terapia familiar se trata de frases como "familia
disfucncional" o "juegos psicóticos". Además, la terapia familiar se ha
presentado como un modeloo adversario. Enctonces, tenemos
termins como estrategia, miovimientos en un juego de ajedrez, o
maniobras y contra-maniobras. Esta posición parece incrementar la
moral del terapeuta o del equipo, aun si la familia no sabe que están
siendo considerados de esta forma peyorativa. El resulltado es la
limitación del campo. Ha dificultado el hecho de que los practicantess
de la terapia individual y lo de la terapia familiar encuentren algún
tipo d elenguaje común.

Otra desventaja del modelo sistemico ha sido la abolición de política.


Los nuevos críticos estaban en contra del enfasis de una generacion
previa de criticos en el contexto ppolitico, historico y social del trabajo
literario. De la misma manera, el pensamiento cibernetico distanciado
a la terapia familiar de estas preocupaciones. Los temas sociales se
sienten como externos al trabajo de la terapia, que se oenfoca
principalmente en la familia como sistema. Los terapeutas sistemicos
incluyen al terapeuta en su evaluacion y a veces un equipo estilo
Milan se pone a si mismo como parte del mensaje pero, en la mayoria
d elos casos, el equipo se queda detras del espejo en una posición
tipo-Dios, interviniendo de vez en cuando para reescatar al
entrevistador de ser inducido en la familia y dando opiniones a las
cuales la familia no puede responder. Otros profesionales pueden sre
incluidos en la hipotesis terapeutica pero tienden a agruparse con la
familia como potencialmente dañinos a la terapia si no son
manejados con cuidado. Temas de razas, clase y género han sido casi
invisibles al terapeuta sistémico como muestran activistas
posteriores.

Otra objeción a la visión sistémica se ha focalizado principalmente en


el modelo de Milan y su neutralidad. Las terapeutas familiares
feministas muestran situaciones en las cuales hay abuso o violencia,
acusando al terapeuta sistemico de no tocar esos temas. El grupo de
Milan se defiende diciendo que ese es el trabajo de el agente de
control social y no del terapeuta. Sin embrago, la critica ha mostrado
un punto ciego de una visión sistémica. Esta visión, como ya lo dije,
propone que todos particpan en un patron de conducta mutual-causal
que lleva al episodio violento y por lo tanto no puede asignar
responsabilidad en casos de violencia.

Al escribir este ensayo, no estoy tratndo de resolver el dilema. Para


mi no tiene respuestas simples. Mi interes principal es llamar la
atencion a las suposiciones tacitas acerca d ela psicologia o
psicoterapia que estan enraizadas en nuestro netrenamiento o en las
ideas menos conscientes que pueden ser puestas bajo el titulo de
"psicologia folk". El antropologo Steven Tyler dice que los etnografos
van al campo con uss ojos vendados con textos. Terapeutas tambien
tienen sus ojos vendados con textos, aunque es facil no dares cuenta
de ello. He encontrado que mis tres concpetos-construcionismo
social, visiones de segundo orden y genero- son valiosos en que me
han ayudado a darme cuenta de mis propios textos. Como resultado,
he ampliado mi vision antigua de la terapia sistemica para incluir una
parada que enfatiza la equidad y la conexión, la experiencia subjetiva
y la neutralidad. Ahora trabajo en forma muy diferente que hace 5
años atrás y espero trabajar diferente en cinco años más.
Lo que me intriga más es la idea de que la metafora cibernetica-
sistemica puede ser reemplazada por una antropologica
postmoderna. Las consecuencias de usar este modelo es hacernos
atodos "etnografos accidentales" como lo llama Judy Davis. Este rol es
opuesto al de experto visitante quien, usando informantes y
esquemas privados y observaciones, hacen un analisis estructural de
la ethos de la tribu. El terapeuta postmoderna entra a la familia sin
una definiciion de patologia, sin ideas acerca de que estructuras
disfucnionales buscar y sin una idea prefijada acerca de lo que debe o
no cambiar. Juntos, mientras hablan, la familia y el terapueta pueden
encontrar algunos entendimientos o ideas de accion diferents de lo
que la familia tenia en mente originalmente y diferente de los que
tenia en mente el terapeuta. (A pesar de mi deseo de creer qu elos
terapeutas deben venir de una posición de no-saber, no puedo creer
que un terapeuta pueda entrar en una sesión sin ideas y siento
firmemente que es mejor estar consciente de estas ideas que no
estarlo.

Otro efecto de ser un etnografo accidental es que puedeno haber un


mensaje o prescripcion final sino que solo otra fecha de reunion. Y
cuando el grupo se junta nuevamente, si lo hace, algo es o no es
diferente. Obviamente, este tema es vital en un grupo terapeutico, ya
que la conversacion terapeutica se organiza en torno a una queja y la
conversacion etnografica no lo hace. Pero los dos tipos de
conversaciones se parecen en que no hay una suposicion de una
estructura patologica oculta en el tema que puede ser evaluado en
cuanto a estandares objetivos. LA entrevista terapeutica es un texto
perfromativo. Este texto va a tomar una forma de acuerdo a lass
cualidades emergentes de la conversación que lo han inspirado y
crearan un dialogo emancipatorio mas que reforzar el dialogo
monolitico o opresivo que generalmente se produce.

Reconociendo la influencia de Anderson y Goolishian, propongo usar


un marco postmoderno interpretativo como una bandera bajo el cual
nuestros experimentos en textos terapeuticos co-construidos pueden
tener lugar. En la terapia, escuchamos una historia y después
colaboramos con las personas que estamos viendo para inventar
otras historias o otrassignificados para las historias que son contadas.
"Terapia Familiar: Parte I" pareciera haber encontrado un final
temporal ya que el paradigma cibernetico parece estar al fin de la
carrera. Como sería "Terapia Familiar: Parte II"? Se llamaría Familia?
Incluirá la palabra sistema? Que pasaría con el termino terapia? Me
estoy uniendo con varias otras personas al usar la frase "practica
sistemica" pero sin duda se presentaran otras posibilidades.

Al igual que hace algunas décadas una nueva teoría familiar-


sistemica tuvo la buena fortuna de favorecerse por el entusiasmo
acerca del estudio de loops de retro alimentación circular, ahora tiene
la oportunidad de favorecerse por otra revolución, esta vez en las
humanidades i ciencias humanas. La visión post moderna
interpretativa propone metáforas para nuestro trabajo que derivan
principalmente de la critica y artes del lenguaje. Ya que la terapia es
un arte de conversación, estas metáforas más cercanas que las
metáforas biológicas y de máquinas que hemos estado usando. Su
fortaleza particular viene del hecho de que son no-objetivistas y al
mismo tiempo sensibles política y socialmente. En el contexto de este
cambio, les pido que imaginen cual podría ser una nueva y diferente
historia acerca de la terapia familiar.

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