Sunteți pe pagina 1din 7

Texto: “Descripción densa: hacia una teoría interpretativa de la cultura” en

La interpretación de las culturas


Autor: Clifford Geertz
I

• Clyde Kluckhohn define el concepto de cultura como

o El modo total de vida de un pueblo.

o El legado social que el individuo adquiere de su grupo.

o Una manera de pensar, sentir y creer.

o Una abstracción de la conducta.

o Una teoría del antropólogo sobre la manera en la que se conduce un grupo de


personas.

o Un depósito de saber almacenado.

o Una serie de orientaciones estandarizadas frente a problemas reiterados.

o Conducta aprendida.

o Un mecanismo de regulación normativo de la conducta.

o Una serie de técnicas para adaptarse, tanto al ambiente exterior como a los otros
hombres.

o Un precipitado de la historia.

• Para Geertz el eclecticismo es contraproducente porque hay muchas direcciones útiles en


las que moverse y es necesario elegir una de ellas.

• El concepto de cultura que propugna es esencialmente un concepto semiótico.

• Considera que el hombre es un animal inserto en tramos de significación que él mismo ha


tejido. La cultura es esa urdiembre y el análisis de la cultura es una ciencia interpretativa
en busca de significaciones y no una ciencia experimental en busca de leyes.

II

• Operacionalismo: Dogma metodológico que nunca tuvo mucho sentido en las ciencias
sociales. Aún así, hizo un aporte que conserva cierta fuerza: Si uno desea comprender lo
que es una ciencia, en primer lugar debería prestar atención a lo que hacen los que la
practican y no a sus teorías, descubrimientos y abogados.

• Etnografía: Es lo que hacen los que practican la antropología social. Desde el punto de
vista del libro de texto, hacer etnografía es establecer relaciones, seleccionar informantes,
transcribir textos, establecer genealogías, trazar mapas de área, llevar un diario, etc... Pero
no son estas actividades lo que la definen, sino un cierto tipo de esfuerzo intelectual que
radica en una especulación elaborada en términos de “descripción densa”.

0
• Ejemplo del guiño como tic y guiño como señal deliberada, dirigida a alguien en particular,
con fin comunicativo, con conformidad a códigos establecidos y sin conocimientos del resto
de los circunstantes.

• La diferencia entre lo que Ryle llama “descripción superficial” y “descripción densa” define
el objeto de la etnografía: una jerarquía estratificada de estructuras significativas. En el
caso del guiño, la descripción densa sería por ejemplo, que el guiño deliberado tiene como
fin practicar una burla.

• Lo que llamamos “datos” son realmente interpretaciones de interpretaciones de otras


personas sobre lo que ellas y sus compatriotas piensan y sienten. La mayor parte de lo que
necesitamos para comprender un suceso particular, un rito, una costumbre, una idea, se
insinúa como información de fondo antes que la cosa misma sea directamente examinada.

• El análisis consiste en desentrañar las estructuras de significación y en determinar su


campo social y alcance.

• La etnografía es descripción densa. Lo que en realidad encara el etnógrafo es una


multiplicidad de estructuras conceptuales complejas, muchas de las cuales están
superpuestas o entrelazadas entre sí. Estas estructuras son extrañas, irregulares, no
explícitas. El etnógrafo debe ingeniarse de alguna manera para captarlas primero y
explicarlas después.

• Hacer etnografía es como tratar de leer un manuscrito extranjero, borroso, plagado de


elipsis, de incoherencias, de sospechosas enmiendas y comentarios tendenciosos, y
además escrito no en las grafías convencionales de representación sonora, sino en
ejemplos volátiles de conducta moderada.

III

• La cultura es un documento activo público. Aunque contiene ideas, la cultura no existe en


la cabeza de alguien; aunque no es física, no es una entidad oculta. La cultura es pública
porque su significación lo es.

• Una vez que la conducta humana es vista como acción simbólica, pierde sentido la
cuestión de saber si la cultura es conducta estructurada, o una estructura de la mente, o
las dos cosas mezcladas.

• Hay que preguntarse por el sentido y por el valor, lo que se expresa a través de su
aparición y por su intermedio.

• Hay muchas maneras de obscurecer esta realidad:

o Reificación: Es imaginar que la cultura es una realidad superorgánica. La realidad


sería conclusa en sí misma, con fuerzas y fines propios.

o Reducción: Es pretender que la cultura consiste en un craso esquema de la


conducta que observamos en los individuos de una comunidad identificable.

o Etnociencia, análisis componencial o antropología cognitiva: Concepción según la


cual la cultura está situada en el entendimiento y en el corazón de los hombres.
Esta concepción se desarrolló como reacción a las dos posturas anteriores y ahora
está ampliamente sostenida. Sostiene que la cultura está compuesta de
estructuras psicológicas mediante las cuales los individuos o grupos de individuos
guían su conducta. Partiendo de este concepto de lo que es la cultura resulta una
concepción de lo que es describirla: la exposición de reglas sistemáticas, una

0
especie de algoritmia etnográfica que haría posible obrar o pasar por un nativo. De
esta manera, un subjetivismo extremado se vincula en un formalismo extremado.

• La falacia cognitivista de que la cultura consiste en “fenómenos mentales que pueden o


deberían ser analizados mediante métodos formales semejantes a los de la matemática o
la lógica” es tan demoledora para un uso efectivo del concepto de cultura como la falacias
del conductismo y el idealismo, de las cuales el cognitivismo es una corrección mal
pergeñada.

• Decir que la cultura consiste en estructuras de significación socialmente establecidas no es


lo mismo que decir que se trata de un fenómeno psicológico.

• Lo que nos impide captar la significación de, por ejemplo, señas de otros no es tanto la
ignorancia de cómo opera el proceso de conocimiento sino la falta de familiaridad con el
universo imaginativo en el cual esos actos de esas gentes son signos.

• Wittgenstein dice que es importante tener en cuenta que un ser humano puede ser un
enigma completo para otro.

IV

• La finalidad de la antropología consiste en ampliar el universo del discurso humano.


También aspira a la instrucción, al entretenimiento, al consejo práctico, al progreso moral, y
a descubrir el orden natural de la conducta humana. La antropología no es la única
disciplina que persigue esta finalidad, pero se trata de una meta a la que se ajusta bien el
concepto semiótico de cultura.

• Concepto semiótico de cultura: Entendida como sistemas e interacción de signos


interpretables. La cultura no es una entidad, algo a lo que puedan atribuirse de manera
causal acontecimientos sociales, modos de conducta, instituciones o procesos sociales. La
cultura es un contexto dentro del cual pueden describirse todos esos fenómenos de
manera inteligible, es decir, densa.

• Comprender la cultura de un pueblo supone captar su carácter normal sin reducir su


particularidad.

• Nada es más necesario para comprender lo que es la interpretación antropológica que una
comprensión exacta de lo que significa afirmar que nuestras formulaciones sobre sistemas
simbólicos de otros pueblos deben orientarse en función del actor.

• Las descripciones deben elaborarse atendiendo a las interpretaciones que hacen de su


experiencia personas pertenecientes a un grupo particular porque son descripciones,
según ellas mismas declaran, de tales interpretaciones; y son antropológicas porque son
en verdad antropólogos quienes las elaboran. El objeto de estudio es una cosa y el estudio
de ese objeto es otra.

• Como en el estudio de la cultura, el análisis penetra en el cuerpo del mismo objeto. Es


decir, comenzamos con nuestras propias interpretaciones de lo que nuestros informantes
son o piensan que son y luego las sistematizamos. La línea que separa la cultura como
hecho natural y la cultura como entidad teórica tiende a borrarse; tanto más si la última es
presentada en la forma de una descripción desde el punto de vista del actor.

• Los escritos antropológicos son ellos mismos interpretaciones y por añadidura,


interpretaciones de segundo y tercer orden. Sólo un nativo hace interpretaciones de 1er
orden. Son ficciones en el sentido que son algo formado o compuesto.

0
• Si la etnografía es descripción densa, la cuestión fundamental en todo ejemplo dado en la
descripción es saber si la descripción distingue, para seguir con el ejemplo del guiño, los
guiños de los tics y los guiños varaderos de los guiños fingidos. Debemos medir la validez
de nuestras explicaciones, atendiendo al poder de la imaginación científica para ponernos
en contacto de la vida de gentes extrañas; no atendiendo a un cuerpo de datos no
interpretados y a explicaciones tenues y superficiales.

• Hay que atender a la conducta y hacerlo con cierto rigor porque es en el fluir de la
conducta o de la acción social donde las formas culturales encuentra articulación.

• Cualesquiera que sean los sistemas simbólicos, tenemos acceso empírico a ellos
escrutando los hechos, y no disponiendo entidades abstractas en esquemas unificados.

• La coherencia no puede ser la principal prueba de validez de una descripción cultural. Los
sistemas culturales deben poseer un mínimo grado de coherencia (sino no serían
sistemas), y la observación muestra que normalmente la tienen. La fuerza de nuestras
interpretaciones no puede estribar en la tenacidad con la que las interpretaciones se
articulan firmemente o en la seguridad con la que se las expone.

• Si la interpretación antropológica es realizar una lectura de lo que ocurre, divorciarla de lo


que ocurre, es divorciarla de sus aplicaciones y volverla vacua. Una buena interpretación
nos lleva a la médula misma de lo que es la interpretación.

• Lo importante es demostrar en qué consiste una pieza de interpretación antropológica, en


trazar la curva de un discurso social y fijarlo de una forma susceptible a ser examinada.

• El etnógrafo inscribe discursos sociales. Lo que inscribe no es el discurso social en bruto


(al cual no tenemos acceso por no ser actores), sino la pequeña parte que nuestros
informantes nos refieren.

• El análisis cultural es o debería ser conjeturar significaciones, estimar las conjeturas y


llegar a conclusiones explicativas partiendo de las mejores conjeturas.

VI

• La descripción etnográfica presenta los siguientes rasgos característicos.

o Es interpretativa.

o Interpreta el flujo del discurso social.

o La interpretación consiste en rescatar lo dicho, en ese discurso de sus ocasiones


perdederas y fijados en términos susceptibles a la consulta.

o Es microscópica: Esto no quiere decir que no haya interpretaciones antológicas a


gran escala de sociedades enteras.

• El antropólogo de manera característica aborda interpretaciones más amplias y hace


análisis más abstractos partiendo de los conocimientos abundantes sobre cuestiones
pequeñas.

• El problema de cómo llegar, partiendo de una colección de miniaturas etnográficas, a la


descripción de los paisajes culturales de una nación, época, continente o civilización no es
fácil de eludir.

0
• Los modelos que los antropólogos elaboraron para justificar su paso desde las veradas
locales a las visiones generales fueron responsables de socavar la empresa antropológica.
De estos dos modelos, los principales fueron:

o Jonesville como modelo microscópico de EE.UU.

o Isla de Pascua como caso de prueba y modelo de experimento natural.

• La idea de que uno puede hallar la esencia de sociedades nacionales, civilizaciones o


grandes religiones en pequeñas ciudades y aldeas “típicas” es un disparate. Lo que uno
encuentra en ciudades pequeñas es vida de ciudades pequeñas. Si la importancia de los
estudios localizados y microscópicos dependiera de semejante premisa (captar el mundo
grande en el pequeño) dichos estudios carecerían de relevancia. Pero no dependen de
eso: El lugar del estudio no es el objeto del estudio, los antropólogos no estudian aldeas,
sino que estudian en aldeas. Uno puede estudiar diferentes cosas en diferentes lugares y
en localidades confinadas se pueden estudiar mejor algunas cosas, pero esto no significa
que sea el lugar lo que uno estudie.

• El concepto de “laboratorio natural” es pernicioso porque la analogía es falsa y conduce a


la creencia de que los datos procedentes de estudios etnográficos son más puros,
importantes, sólidos, menos condicionados que los datos derivados de otras clases de
indagación social. La gran variación natural de las formas culturales es el gran recurso de
la antropología, pero también es el terreno del mayor dilema teórico: ¿Cómo puede
conciliarse semejante variación con la unidad biológica del género humano?

• Los hallazgos etnográficos no son privilegiados sino particulares. Considerarlos algo más
los deforma y deforma sus implicaciones.

• Lo importante de las conclusiones del antropólogo es su carácter específico y


circunstanciado. La clase de material producido en largos plazos y en estudios cualitativos,
con amplia participación del estudioso y realizado en contextos confinados y con criterios
microscópicos, es lo que puede dar a los megaconceptos con los que se debaten las
ciencias sociales contemporáneas, esa clase de actualidad sensata que hace posible
concebirlos no sólo de manera realista y concreta sino, lo que es más importante, pensar
creativa e imaginativamente con ellos.

• El problema metodológico que presenta la naturaleza microscópica de la etnografía es real


y de peso. Ha de resolverse comprendiendo que las acciones sociales son comentarios
sobre algo más que ellas mismas y que la procedencia de una interpretación no determina
hacia dónde va luego de ser impulsada. Pequeños hechos hablan de grandes cuestiones.

VII

• El vicio dominante de los enfoques interpretativos de cualquier cosa (literatura, sueños,


síntomas, cultura) consiste en que tienden a resistir la articulación conceptual y escapar así
a los modos sistemáticos de evaluación. La interpretación es presentada como válida en sí
misma o como validada por la supuestamente desarrollada sensibilidad de la persona que
la presenta. Esta actitud no cabe en un campo de estudio que pretende afirmarse como
ciencia.

• No hay razón alguna para que la estructura conceptual de una interpretación sea menos
formulable (y por lo tanto menos susceptible de sujetarse a cánones explícitos de
validación) que la de una observación biológica o un experimento físico; salvo la razón de
que los términos en que puedan hacerse estas formulaciones son casi inexistentes. Nos
vemos reducidos a insinuar teorías porque carecemos de los medios para enunciarlas.

0
• Existe una serie de características de la interpretación cultural que hacen al desarrollo
teórico mucho más difícil de lo que suele ser en otras disciplinas:

o La necesidad de que la teoría permanezca más cerca del terreno estudiado de lo


que permanece en el caso de las ciencias capaces de entregarse a la abstracción
imaginativa.

• El quid de un enfoque semiótico de la cultura es ayudarnos a lograr acceso al mundo


conceptual en el cual viven los sujetos. La tensión entre la necesidad de aprehender y
analizar es muy grande y esencialmente inevitable. Cuando más se desarrolla la teoría,
más profunda se hace la tensión.

• Primera condición de la teoría cultural:

o La teoría cultural no es dueña de sí misma. Como es inseparable de los hechos


inmediatos que presenta la descripción densa, la libertad de la teoría para forjarse
de conformidad con su lógica interna es bastante limitada. Las generalidades a la
que logra llegar se debe a la delicadeza de sus distinciones y no a la fuerza de sus
abstracciones.

o El análisis cultural se desarrolla según una secuencia discontinua pero coherente


de despegues cada vez más audaces. Todo análisis cultural serio parte de un
nuevo comienzo y termina en el punto al que logra llegar antes de que se le agote
su impulso intelectual.

o Un estudio antropológico representa un progreso si es más incisivo que los


estudios precedentes. El nuevo estudio no se apoya masivamente sobre los
anteriores, sino que se mueve paralelamente a ellos.

o El ensayo es el género natural para presentar las interpretaciones culturales y las


teorías que en ellas se apoyan.

o La tarea esencial en la elaboración de una teoría es hacer posible la descripción


densa, no codificar regularidades abstractas y no generalizar a través de casos
particulares, sino dentro de estos. Generalizar dentro de casos particulares se
llama “inferencia clínica”. Esta inferencia comienza con una serie de significantes
presuntivos e intenta situarlos dentro de un marco inteligible. En el estudio de la
cultura los significantes son actos simbólicos o haces de actos simbólicos y aquí la
meta es el análisis del discurso social.

• Segunda condición de la teoría cultural:

o La teoría cultural no es predictiva.

o En el estilo clínico de la formulación teórica, la conceptualización se endereza a la


tarea de generar interpretaciones de hechos que ya están a mano y no a proyectar
resultados de manipulaciones experimentales o a deducir estados futuros de un
determinado sistema. Eso no significa que la teoría no tenga que ajustarse
solamente a realidades pasadas, también debe contemplar intelectualmente
realidades futuras. El marco teórico dentro del cual se hacen dichas
interpretaciones debe ser capaz de dar interpretaciones defendibles a medida que
aparecen a la vista nuevos fenómenos sociales.

o En cada estudio no se crean de nuevo enteramente las ideas teóricas. Las ideas
se adoptan de otros estudios afines y refinadas en el proceso se las aplica a
nuevos problemas de interpretación

0
o La distinción existente en las ciencias experimentales entre “descripción” y
“explicación”, se da en nuestro caso como una distinción aún más relativa. Ésta se
da entre “inscripción” (“descripción densa”) y “especificación” (“diagnóstico”); es
decir, entre establecer la significación que determinadas acciones sociales tienen
para sus actores por un lado, y enunciar lo que el conocimiento así alcanzado
muestra sobre la sociedad al que se refiere por el otro.

o La doble tarea consiste en descubrir las estructuras conceptuales que informan los
actos de nuestros sujetos (lo dicho del discurso social) y construir un sistema de
análisis en cuyos términos aquello que es genérico de esas estructuras se
destaque y permanezca frente a los otros factores determinantes de la cultura
humana.

o En la etnografía la función de la teoría es suministrar un vocabulario en el cual


pueda expresarse lo que la acción simbólica tiene que decir sobre sí misma, es
decir, sobre el papel de la cultura en la vida humana.

• La meta es llegar a grandes conclusiones partiendo de hechos pequeños pero de


contextura muy densa, prestar apoyo a enunciaciones generales sobre el papel de la
cultura en la construcción de la vida colectiva relacionándolas con hechos específicos y
complejos. No es solamente interpretación lo que se desarrolla en el nivel más inmediato
de observación, también se desarrolla la teoría que depende conceptualmente de la
interpretación.

• Las formas de la sociedad son la substancia de la cultura.

VIII

• El análisis cultural es intrínsecamente incompleto.

• Abrazar un concepto semiótico de la cultura y un enfoque interpretativo de su estudio


significa abrazar una concepción de las enunciaciones etnográficas esencialmente
discutible. La antropología interpretativa es una ciencia cuyo progreso se caracteriza más
por el refinamiento del debate que por el perfeccionamiento del consenso.

• Se debe tratar de mantener el análisis de las formas simbólicas lo más estrechamente


ligado posible a los hechos sociales concretos, al mundo de la vida común y tratar de
organizar el análisis de manera tal que las conexiones entre formulaciones teóricas e
interpretaciones no quedaran obscurecidas.

• Siempre está el peligro de que el análisis cultural pierda contacto con las duras superficies
de la vida y con las necesidades biológicas y física en las que se basan. La única defensa
contra este peligro y contra el peligro de convertir así el análisis cultural en una especie de
esteticismo sociológico es realizar el análisis de esas realidades y esas necesidades en
primer término.

• Considerar las dimensiones simbólicas de la acción social (arte, religión, ideología, ciencia,
ley, moral, sentido común) no es apartarse de los problemas existenciales de la vida, sino
sumergirse en el medio de ellos.

S-ar putea să vă placă și