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La desunión (1820-1835)
La Federación (1835-1852)
Durante los diecisiete años que duró la hegemonía de Rosas en Buenos Aires las
provincias se mantuvieron independientes bajo sus gobiernos locales, no se instauró ningún
régimen que institucionalizara la nación. Pero reinó, sin embargo, una extraña forma de unidad
conocida como Federación. Ésta (vista como el triunfo de los ideales del federalismo) aseguró la
hegemonía de Bs. As. y redujo el crecimiento de las provincias. El puerto de Bs. As. seguía
siendo la mayor fuente de riqueza para el estado y aportaba beneficios a los comerciantes de la
ciudad y también a los fabricantes de cueros y tasajos. Las provincias del interior no participaban
de esas ventajas, por lo tanto la federación acentuó el empobrecimiento de las provincias
interiores, bloqueadas por sus aduanas interprovinciales. Esto nos permite ver que aunque Rosas
hablaba de Federación y consagraba su lema como federal, encabezó un régimen absolutamente
centralista.1 Recaudaba impuestos a través de la Aduana porteña y, en algunos casos, ayudaba
a las provincias que estuvieran muy necesitadas. Esto ocurrió con Santiago del Estero.
Rosas prohibió que las embarcaciones del extranjero naveguen los ríos del interior y esto
dio como resultado que la economía de Entre Ríos se debilitara.
Pese a las convulsiones políticas, la economía experimentó una vigorosa expansión, se
duplicaron las exportaciones de origen ganadero y creció el número de buques de todo el mundo
que llegaban a Buenos Aires con mercaderías para vender en la capital y el interior.
Rosas expulsó a sus adversarios de la administración pública, el clero y el ejército. Todos
fueron obligados a usar la divisa punzó. Se desarrolló un período de glorificación del Restaurador
y los opositores (a los que se calificó de salvajes unitarios) fueron perseguidos y obligados a
partir al exilio, encarcelados o muertos.
En el interior Rosas no era querido para nada; sus grandes represiones preocupaban
mucho a los gobiernos provinciales.
La revolución iniciada por Lavalle fracasó en 1838. En 1839 el gobernador porteño
contuvo los levantamientos del gobernador correntino Berón de Astrada y de Maza.
En 1840 se produjo la sublevación de las provincias del norte, lideradas por Avellaneda
(gobernador tucumano) pero Rosas los venció. A fines de 1841 Lavalle, tras una suma de
derrotas, se retiró hacia el Norte. Pero fue asesinado en Jujuy y todo el Norte quedó subordinado
a la autoridad de Rosas.
Hubo constantes levantamientos y luchas en todo el país.
En 1845 Corrientes volvió a sublevarse y Madariaga, su gobernador, fue derrotado dos
veces por Urquiza (gobernador de Entre Ríos).
Esto debía llegar a un fin para que la nación lograra organizarse, dar garantías y derechos
a sus ciudadanos y poner en vigencia un equitativo reparto de las rentas nacionales.
Entre 1850 y 1851, Urquiza se levantó contra Rosas y lo venció en la batalla de Caseros en
1852 al mando del Ejército Grande.
Tras la derrota, el Restaurador se exilió en Gran Bretaña.
La Federación había terminado.
La Confederación (1852-1862)
Urquiza entró en Buenos Aires para hechar las bases de la organización del país.1 En el
país se sentía la necesidad de la unión. Pero la tarea que esperaba a Urquiza era complicada;
había muchas diferencias económicas entre las distintas regiones.
En 1852 dos grandes partidos comenzaron a enfrentarse: el Partido Federal, en el cual
estaban agrupadas las oligarquías provincianas y presidía Urquiza, y el Partido Liberal, que
encabezaban los antiguos emigrados y predominaba en Buenos Aires.
El caudillo entrerriano designó gobernador interino de Bs. As. a Vicente López y convocó
una reunión de gobernadores en San Nicolás para discutir la constitución política del país. El
acuerdo de San Nicolás se firmó el 31 de mayo. Este convenio proclamaba el Pacto Federal de
1831 como ley fundamental de la República y el federalismo volvía a triunfar; se aseguraba la
libre navegación de los ríos, la distribución proporcional de las rentas nacionales y la libertad de
comercio en todo el territorio. Además, llamaba a un congreso constituyente al que concurrirían
todas las provincias con igual representación.
Finalmente, se designaba a Urquiza Director Provisorio de la Confederación.
Esto fue más de lo que Buenos Aires estaba dispuesta a soportar. Los porteños rechazaron
el convenio y Vicente López y Planes renunció a su cargo. Pero Urquiza actuó con rapidez.
Disolvió la Legislatura de la ciudad, repuso en su cargo a López y Planes y dispuso la
nacionalización de la Aduana.
Pero la oposición dentro de Bs. As. era muy grande, por lo que una revolución en
septiembre de 1852 permitió a los porteños retomar el control de la ciudad.2
Urquiza tuvo que retirarse pero luego de unos meses en Santa Fe se reunieron los
delegados de las provincias sin la presencia de Bs.As., sancionaron la Constitución Nacional de
1853 y eligieron a Urquiza como presidente.
Se extendió una situación bastante peligrosa. Existía por un lado la Confederación
Argentina (que poseía Constitución Nacional, un Congreso y un Poder Ejecutivo con sede en
Paraná) formada por trece provincias, y por el otro, el Estado de Buenos Aires. Ambos se
agredían, competían y se hostilizaban. Había una diferencia muy grande entre el adelanto de
Buenos Aires y el desarrollo económico y político del interior. Esto hacía muy difícil la unión.
Finalmente, en octubre de 1859 se enfrentaron en Caseros las tropas de Buenos Aires,
comandadas por Mitre (ministro de guerra de la prov.), con las de la Confederación, bajo el
mando de Urquiza. Esta triunfó entonces se firmó el Pacto de San José de Flores, por el cual Bs.
As. se declaraba integrante de la Confederación Argentina, aceptando la Constitución Nacional.
Aunque con algunos rozamientos, el pacto empezó a cumplirse y en octubre de 1860, Bs.
As. juró la Constitución Nacional.
Inesperadamente se desató otro conflicto. Una ley de la Legislatura bonaerense declaró
entonces nulo el Pacto de San José de Flores y la Confederación intervino la provincia. Esta
resistió y Urquiza fue derrotado por Mitre en Pavón en septiembre de 1861. Ambos líderes
terminaron haciendo un pacto de no agresión. En octubre de 1862 Mitre resultó elegido
presidente. Buenos Aires estaba ya reincorporada al país y provisoriamente era su capital. La
unidad nacional quedaba consumada.
1880 1916
En 1880 cuando asumió por primera vez su presidencia Julio A. Roca, lo primero que hizo
el Estado fue asegurar la paz y el orden Institucional. La "capital federal" -ciudad de buenos
aires- se transformó en la capital de la Nación. El estado afirma su poder sobre territorios
controlados por indígenas, se definió los límites del Estado como la "Conquista del Desierto" en
1879 y en 1911 se completó la ocupación de los territorios del Nordeste. Se consolidó un fuerte
centro de poder basado jurídicamente en la Constitución Nacional sancionada en 1853. Aunque
estaban ideadas el sistema fiscal; judicial y la administración del Estado, su desarrollo era
precario con escasos medios para fomentar la Educación y la Inmigración. A medida que sus
recursos aumentaron fue expandiendo sus instituciones y adquirió solidez antes que la
sociedad.
Para insertarse en la economía mundial, los sucesivos gobiernos desde 1810, con
preponderancia en 1850 se alinearon comercialmente con Gran Bretaña, hecha potencia, en la
cumbre económica por su desarrollo industrial. Por la aparación en el mercado mundial de
Estados Unidos y Alemania, Gran Bretaña decidió cuidar sus relaciones o compromisos tomados
conviertíéndolas ciertamente en monopólicas.Esta relación se varió desde la exportación de
materia prima de lanas para la producción textil hasta el desarrollo de infraestructura "pública"
como vías ferroviarias y trenes, bancos comercios y préstamos al estado. Además los Británicos
instalaron y desarrollaron el sistema de Frigoríficos que permitía exportar carne envasada.
Desde 1880 el país recibió numerosas cantidades de inmigrantes provenientes de toda
europa, especialmente la mayoría italianos, luego en menor proporción españoles y franceses. El
Estado fomentó la inmigración con subsidios y propaganda.
El empresario rural buscó el máximo posible de ganancias.En el Litoral, donde escaseaba
el ganado y la producción podía trasladarse fácilmente por los ríos, se inclinaron por la
agricultura; allí donde la tierra era barata, optaron por la colonización, que la valorizaba, pero
cuando el valor aumentó prefirieron el sistema de arrendamiento. En la provincia de Buenos
Aires perduró la gran propiedad indivisa y la explotación del lanar, hasta que la instalación de los
frigoríficos hizo rentable la explotación del vacuno refinado con las razas inglesas y destinado a
la exportación. Entonces, las necesidades de praderas artificiales estimularon la colonización
agrícola: las tierras se destinaron alternativamente a cereales, forrajes y pastoreo, con lo que la
agricultura se asoció definitivamente con la ganadería.
Esta combinación resultaba la más adecuada para las condiciones específicas de
entonces. La calidad de las praderas aseguraba altos rendimientos con escasas inversiones; por
otra parte, las condiciones del mercado mundial, extremadamente cambiantes e incontrolables
desde este lejano sur, hacían conveniente mantener la flexibilidad para elegir, cada año, la
opción más rentable. Parecía más razonable mantener la tierra unida para conservar todas las
opciones y encarar explotaciones más bien extensivas. Luego los arrendatarios rurales que
poseían un capital limitado prefirieron alquilar extensiones de tierra antes que adquirir una
extensión propia más pequeña. En 1880 la expansión de la agricultura fue continua. Entre 1892
y 1913 se quintuplicó la exportación y además se agregaron el trigo; el maíz; el lino, la lana y la
carne vacuna congelada y enlatada. Apareció luego el crecimiento del sector ganadero
desplazando la producción de lana hacia el sur.
En este período el Estado modernizó los servicios de higiene y transporte, construyendo
plazas y avenidas. Se construyeron edificios públicos y residencias. El Sector Industrial creció
asociado a la economía agropecuaria y nutriéndose de capitales extranjeros.
Conflictos culturales: al principio poca integración o comunión con otros inmigrantes de
distintas naciones. Distinta lengua y cultura. Hacinamiento en condiciones de vivienda,
inestabilidad en el trabajo, pésimas condiciones sanitarias, epidemias y mortalidad infantil.
Analfabetismo. Estos conflictos fueron atenuándose con la integración social de distintas razas y
culturas, se puede decir que en Argentina se caracterizó el mestizaje. Con la implementación de
la educación además de la Alfabetización los hijos de los inmigrantes y las personas nacidas en
Argentina comulgaron un lenguaje, y permitió el desarrollo de cultural de la sociedad en cierta
forma. Aunque los primeros inmigrantes analfabetos quedaron casi excluidos del sistema y del
desarrollo progresista de la sociedad.
Generación del ´80: Aristocracia “notables” notables de familias ricas. En la cúspide del
sistema político la selección de personal se acordaban entre el presidente, los gobernadores y
otros notables de prestigio reconocido. En niveles más bajos se encontraban los “caudillos”
electorales que ejercían control sobre otros ciudadanos para boicotear padrones. El sistema
estimulaba la escasa participación en las elecciones . El sistema institucional era republicano-
aunque diseñado para mediatizar decisiones más importantes y alejarlas de la voluntad popular.
La prácticas electorales de la época como la injerencia del gobierno desalentaba la competencia
política.
Como dijimos antes la educación pública solo se orientó hacia los jóvenes dejando a la
gran mayoría de los adultos sin formación o analfabetos. Entonces surgieron:
a) anarquistas: tuvieron una relación más estrecha con los adultos-trabajadores y supieron
hablarles en su lenguaje. Promulgando una sociedad más justa sin patrones ni Estado. La huelga
y el levantamiento espontáneo era su instrumento por las luchas específicas de cada gremio.
b)socialistas: promulgaban un estado más justo y equitativo, através de una injerencia o
intervención mayor del parlamento y llegaron específicamente a sectores populares integrados a
la sociedad gralte con educación básica.
c)sindicalismo: predicaron gralte en los sectores industriales tales como los ferroviarios o
marítimos Como los socialistas promulgaban reformas regulares pero se desinteresaron de la
lucha política y se dedicaban a la acción gremial.
Partidos políticos: Ucr: los integraban jóvenes profesionales, comerciantes, empresarios y
chacareros. Representantes: Carlos Pellegrini, hipólito Yrigoyen luego. Objetivo: sufragio
universal y moralización del sector público.Psd: partido demócrata progresista, principal figura
lisandro de la torre, conservador
Socialistas: objetivos y estrategias ya expuestas. Palacios principal figura en su tiempo.
Anarquistas ya expuesto.