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Armadura y Sello del Cristiano

Casco de la Salvación
Con la autoridad que el Señor nos ha dado, reclamamos en el nombre de Jesús el casco de la salvación y con el sellar de nuestra mente para que el Señor sea el
centro de nuestros pensamientos, de nuestra psiquis, de nuestro subconsciente, de nuestras ideas y sueños. Nuestros ojos para que nos de esa óptica espiritual y
poder ver mas allá de lo humano. Nuestros labios para que en todo momento lo alabemos y proclamemos su palabra. Nuestros oídos para estar atento a su mensaje.
Todo esto y en el nombre santo de Jesús sellamos este casco de la salvación con la Sangre preciosa de Cristo, en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo,
Amen.

Coraza de Justicia
En nuestro pecho nos ponemos la coraza de la Justicia, para que el Señor sea el centro de nuestras emociones y sentimientos, para que transforme nuestro corazón y
nos capacite para amar y perdonar a quienes nos ofenden. Todo esto y en el nombre santo de Jesús sellamos este casco de la salvación con la Sangre preciosa de
Cristo, en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, Amen.

El Cinturón de la Verdad
En nuestra cintura nos colocamos el cinturón de la Verdad, par que el Señor sea el centro de nuestras vidas, de nuestras familias, nuestros trabajos, nuestros
estudios, nuestros noviazgos, para que sea el centro de nuestro actuar y dar verdadero testimonios en nuestros ambientes reflejando así la luz de Cristo en todo
momento. Todo esto y en el nombre santo de Jesús sellamos este casco de la salvación con la Sangre preciosa de Cristo, en el nombre del Padre y del Hijo y del
Espíritu Santo, Amen.

El Escudo de la Fe
En nuestra mano izquierda nos colocamos el Escudo de la Fe, para que el Señor aumente día a día nuestra Fe y atajar con el escudo las flechas incendiarias del
enemigo que se presentan por medio de perturbaciones y asechanzas. También decimos “Señor Jesús creo en ti pero aumenta mi Fe”. Todo esto y en el nombre
santo de Jesús sellamos este casco de la salvación con la Sangre preciosa de Cristo, en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, Amen.

La Espada de la Palabra
En nuestra mano derecha colocamos la Espada del Espíritu Santo para que el Señor nos de hambre y sed de su palabra, sabiduría para utilizarla y autoridad para
poder realizar su voluntad. Todo esto y en el nombre santo de Jesús sellamos este casco de la salvación con la Sangre preciosa de Cristo, en el nombre del Padre y
del Hijo y del Espíritu Santo, Amen.

Las Sandalias del evangelio


En nuestros pies nos ponemos las sandalias del evangelio para que con ellas proclamemos el evangelio de la paz. También para perseverar siempre en los caminos
del Señor, en medio de la prosperidad y la adversidad y el deseo incansable de servirle más y mejor. Pidámosle al Señor que no permita que nada ni nadie nos aparte
de sus caminos. Todo esto y en el nombre santo de Jesús sellamos este casco de la salvación con la Sangre preciosa de Cristo, en el nombre del Padre y del Hijo y del
Espíritu Santo, Amen.

Ministerio Juvenil Discípulos de Cristo


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