EL CONSEJO DE HIGIENE PUBLICA DE CORRIENTES (1883-1922)

Mgter. Alvaro Monzón Wyngaard

I.- Introducción:
El Consejo de Higiene Pública significó una importante bisagra entre la “Medicina Popular” y la
“Medicina Científica”, funcionando como organismo colectivo y cuyos integrantes desempeñaron
sus funciones con espíritu altruista.
Entendemos que este trabajo, que es parte de un trabajo más amplio, podría significar un aporte
para el estudio de la historia de la salud pública correntina; y nos permitiría determinar claramente
los tiempos en los que el Estado asumió su responsabilidad de conducción en el área.
Salud Pública en su conjunto.
La Medicina que era esencialmente individual –desde el modelo hipocrático-, tendría un cambio
sustancial a partir del año 1848. El proceso de las revoluciones liberales, traería aparejado el
nacimiento de una nueva disciplina, la Medicina Social, con excelentes cultores en estas tierras,
como los trabajos de el padre de la Higiene Pública Argentina Guillermo Rawson, ó de su
discípulo el correntino Emilio Coni.
El período que motiva este trabajo es significativo para analizar la transición de las concepciones
para explicar la transmisión de las enfermedades:
Por una parte, la explicación se la disputaban las dos teorías en pugna (Ideas contagionistas vs.
Ideas anticontagionistas) que se basaban en la existencia de seres vivientes que directa ó
indirectamente transmitían la enfermedad de personas enfermas a sanas, mientras que las segundas
postulaban que las enfermedades epidémicas afectaban a un gran número de personas debido a la
influencia de las condiciones atmosféricas, climáticas y del suelo; y,
Por la otra, con los descubrimientos de Koch y principalmente de Pasteur en bacteriología, se
destaca la hegemonía del modelo etiológico basado en el papel de los insectos como vectores,
creando en consecuencia, modelos institucionales donde la teoría del germen interactúa con los
intereses imperialistas.
Precisamente estos años de transición (1880-1922) condujeron a la plena medicalización de la
sociedad, al entenderse que los galenos constituían la primera línea de defensa contra las
enfermedades, y ciertamente este fenómeno está relacionado con la época del imperialismo.
Por lo tanto, pretendemos establecer que la investigación del período en que funciona el Consejo
de Higiene Pública de Corrientes (1883-1922), como investigación en salud (como la práctica y el
saber en este campo), está ligada al proceso de producción económica y, por lo tanto, es
influenciada por las tendencias dominantes que participan en el citado proceso, a través de la
historia.

II.- Antecedentes:
En Corrientes, (con algunos altibajos en tiempos de epidemias de cólera y de fiebre amarilla)
funcionó el Tribunal de Medicina, formalmente creado en 1848 y efectivamente en
funcionamiento desde 1860. Este organismo estuvo encargado de velar por el fidedigno ejercicio
profesional, reprimiendo principalmente al curanderismo, prescribiendo las medidas profilácticas
adecuadas –en caso de epidemias- conforme al criterio médico de la época, y haciendo
recomendaciones médico-legales 1 .
Pero también existieron –al mismo tiempo- otros órganos encargados de velar por la salud
correntina: las Juntas de Sanidad portuaria, el ¨médico de policía¨, el nada desdeñable ¨cuerpo de
sanidad militar¨, y el ¨médico municipal¨, quien a la vez cumplía las funciones de Director del
Hospital.
A principios de 1882, los diarios correntinos publicaban artículos objetando la continuidad del
¨vetusto tribunal de medicina¨ que estaba siendo reemplazado en todo el país, y cuya razón de ser
había caducado ante la gran cantidad de profesionales egresados de las dos universidades
nacionales.
Sin embargo, estos mismos artículos indicaban que era competencia exclusiva del municipio,
entender en las cuestiones sanitarias. Ya que a él: ¨...toca crear este cuerpo verdaderamente municipal, el
que por su funcionamiento regular será un excelente colaborador de sus trabajos en todo cuanto sea de su

1
Ver Alvaro Monzón Wyngaard El Tribunal de Medicina de Corrientes (1848-1883) (2002)
Corrientes: edición del autor –tesis de Maestría en Salud Bucal-
incumbencia, y casi todo lo municipal es y debe ser familiar a los médicos bien preparados.//Por otra parte, se hace
sentir muy notablemente entre nosotros, la falta de Reglamentos, Disposiciones y hasta leyes que velen y garanticen
á la vez á la población buenos alimentos, buenas bebidas y buenos medicamentes.//Baste citar este hecho en cuanto á
lo primero: los fideos que se espenden en nuestra plaza en su mayor parte son coloreados por cúrcuma en vez de
azafran ó yemas de huevos; la cúrcuma es una sustancia indigesta y malsana.//Las bebidas alcohólicas son de una
horrorosa composición hasta aproximarse á venenos, (cuando no los exeden). El agua en general es buena, pero es
menester que se vele por su conservación sobre todo el río donde se lava la ropa sucia de casi toda la
población.//Muchas veces no sirven los medicamentos que emplean los médicos porque los boticarios no quieren
perder sus drogas á pesar de que se encuentren desvirtuadas. Los mismos boticarios no quieren abrir sus tiendas a
altas horas de la noche como si solo fuera dado enfermarse de día...¨. 2

III.- Material y Método:

En consecuencia, para la presente investigación, seguimos el método histórico y sus respectivas
etapas o pasos a saber:
La Heurística: que correspondió a la búsqueda de las fuentes que nos permite reflejar los sucesos
del pasado correntino en el período propuesto. Para ello recopilamos:
a) mediante fichas de transcripción y de síntesis, las leyes, decretos, acuerdos, minutas y notas
publicadas entre los años 1883 a 1922, en el Registro Oficial de la Provincia de Corrientes y luego
en el Boletín Oficial de la Provincia de Corrientes;
b) los periódicos correntinos “El Progreso”, “El Liberal”, “Las Cadenas”, “La Campaña”, ¨El
Autonomista¨, ¨El Litoral¨, ¨El Trabajo¨, ¨Corrientes¨, ¨La Reacción¨, ¨El Comercio¨, ¨La
Provincia¨, "El Día¨, y ¨La Mañana¨, que se encuentran disponibles, sobre el período mencionado;
c) los “Legajos Administrativos”, archivados por carpetas anuales generalmente con ordenación
numérica y no temática.
Esto se hizo posible por la concurrencia a los repositorios de testimonios más habituales:
1) al Archivo General de la Provincia de Corrientes y en menor medida (búsqueda bibliográfica)
2) a las Bibliotecas del Poder Legislativo y del Museo de Bellas Artes “Juan Ramón Vidal” y del
Museo Histórico,
3) a las Bibliotecas de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas, de la Facultad de
Medicina, ambas de la Universidad Nacional del Nordeste; todos de la ciudad de Corrientes.
Con las fichas de transcripción y de síntesis mencionadas, confeccionamos una base de datos
relacional mediante la utilización de herramientas informáticas, lo que permitió una rápida
clasificación.
La Crítica: etapa en la cual se analizaron, confrontaron y valoraron los testimonios antes
indicados, clasificándolos y desechándolos –cuando correspondía, haciendo desde ya la salvedad
que sólo incidentalmente nos referiremos a la "fiebre amarilla", enfermedad epidémica de
significativo impacto que, por sus características y dimensiones, habremos de abordarla con
exclusividad, en una futura investigación-; y finalmente,
El Ordenamiento y la Exposición: mediante la “recreación intelectual”, con la adecuada
ordenación de esos materiales y la presentación de los resultados, a manera de informe sobre la
salud pública y la economía en Corrientes, durante el período que funcionó el segundo organismo
sanitario de la provincia, su Consejo de Higiene Pública.
Este trabajo pretende ser un estímulo para la realización de otras investigaciones en el campo de la
salud pública y un reclamo, como diría Cueto, de la utilidad de la historia de la salud en la
formación de una identidad de la salud pública de la Provincia de Corrientes; recordando al propio
tiempo que este tipo de tema tiene escasa presencia en la bibliografía histórica correntina, y que
sólo ha sido tratado tangencialmente por los historiadores locales.

IV.- Resultados:
El Consejo de Higiene Pública de la Provincia de Corrientes, fue creado por ley del 28 de agosto
de 1883 3 , durante la gobernación de Soto.
Estaría integrado por ¨cuatro profesores de medicina¨ -designados por el Poder Ejecutivo de la
Provincia- con título universitario nacional o extranjero revalidado, quienes nombrarían a su
Presidente, Vice-Presidente y Tesorero de entre sus miembros; al par de auspiciar ante el
Gobernador la contratación de un Secretario.
Para poder sesionar válidamente necesitaban tres miembros presentes (art. 6º) y podíanse dictar su
propio reglamento interno.

2
¨La Verdad¨, del 20 de abril de 1882; p. 1
3
Registro Oficial de la Provincia de Corrientes (Año 1883); pp. 60-62
Es interesante destacar que si las recomendaciones del Consejo de Higiene Pública no eran
aceptadas por las Municipalidades, se podía –por unanimidad de sus miembros- insistir en su
dictámen, pero si no se obtenía esa unanimidad, se debería convocar a dos facultativos externos al
Consejo; y al propio tiempo invitar a peritos (uno o más) para realizar los análisis químicos u
¨otros análogos¨ que se necesitaren (art. 9º).
Producidas las infracciones conforme a la normativa vigente sobre el ejercicio de la medicina,
farmacia y demás ramos del arte de curar, así como ¨...de las faltas o delitos que observare al hacer
las inspecciones a que se refieren los incisos 7 y 8 del art. 8º y también a los que introduzcan o
fabriquen materias nocivas a la salubridad...¨, el Alto Cuerpo debía girar las actuaciones a los
tribunales ordinarios competentes al par de adoptar las medidas preventivas necesarias a fin de
impedir el uso o la venta de las materias nocivas (arts. 10º y 11º).
Las atribuciones del Consejo de Higiene Pública de Corrientes fueron esencialmente las mismas
que las del Tribunal de Medicina, aunque la nueva normativa las detalló con mayor especificidad,
a saber:
1) Vigilar el ejercicio de la medicina, de la farmacia y demás ramos del arte de curar,
proponiendo al Poder Ejecutivo las reformas y Reglamentaciones que estimare necesarias;
2) Inspeccionar la administración de la vacuna y fomentar su propagación;
3) Informar a los Jueces u otras autoridades que lo requieran en los casos de medicina legal o
sobre objetos que se relacionen con la institución;
4) Avaluar honorarios en los distintos ramos del arte de curar y ciencias auxiliares, en caso de
controversia o consulta, la avaluación será inapelable;
5) Visitar cuando lo crea necesario o cuando sea requerido por autoridad competente los
Establecimientos públicos o privados en que pueda ser afectada la salubridad pública;
6) Indicar a las Municipalidades o a quien corresponda, las faltas de Higiene Pública que
observe en dichos Establecimientos aconsejando las medidas convenientes a repararlas;
7) Inspeccionar las droguerías y farmacias;
8) Podrá inspeccionar también las bebidas y sustancias alimenticias de consumo general;
9) Aconsejar a la autoridad competente los medios, en general, de mejorar la salubridad
pública, o indicar las medidas profilácticas para combatir o prevenir las enfermedades
endémicas, epidémicas y transmisibles;
10) Pedir la observación de la Policía del puerto en lo relativo a la Higiene Pública indicando las
medidas que convengan a remover las causas que la perjudiquen, pudiendo también proponer
por el término que repute conveniente el establecimiento de cuarentenas rigurosas o de mera
observación; y
11) Solicitar la asistencia de los empleados nacionales que necesite para tomar sus resoluciones,
dirigiéndose en caso necesario al Poder Ejecutivo de la Provincia para que lo pida al
Gobierno Nacional.
El Consejo de Higiene Pública de Corrientes fue integrado en su primera composición, con los
mismos miembros del Tribunal de Medicina 4 -que quedó sin efecto-: Juan Antonio de los Santos,
Eugenio F. Ramírez, José R. Amarilla y Antonio Graciano, y como Secretario don Eduardo
Lotero 5 , y ante una renuncia se incorporó algunos meses más tarde, Tiburcio G. Fonseca (h) 6 .
Sin embargo, los desacuerdos en este grupo fundacional fueron notorios. El periódico ¨Las
Cadenas¨ publicó un artículo en relación a la renuncia del Presidente de los Santos, por ¨...motivos
de delicadeza y no querer consentir la transgresión de las disposiciones del consejo...¨ 7 ,
renuncia que fue retirada ante las garantías que le fueron ofrecidas.
Es dable destacar que los cargos de Presidente y de Vocales del Consejo de Higiene Pública fueron
rentados a partir de enero de 1888 8 . Esta es una distintiva diferencia con el Tribunal de Medicina
de Corrientes, cuyos componentes cumplieron sus funciones con carácter de ad-honorem 9 . Un año

4
Registro Oficial de la Provincia de Corrientes (Año 1883), Decreto del 5 de septiembre.
5
Alvaro Monzón Wyngaard Ob. cit.; pp. 65-66
6
¨El Autonomista¨; p. 2 del 17 de octubre de 1883
7
¨Las Cadenas¨; jueves 27 de diciembre de 1884
8
¨El Litoral¨; p. 1, domingo 8 de enero de 1888
9
Alvaro Monzón Wyngaard Ob. cit.; pp. 116-117
más tarde el presupuesto del Consejo ascendió a la suma de $ 3056, de los cuales $600 debían ser
destinados al fomento de la Biblioteca 10 .
En 1887 renunció el Dr. Amarilla y fue reemplazado por el Dr. Delfino Pacheco 11 .
Si bien el nuevo organismo ya estaba creado, varios meses después se seguía utilizando el nombre
de ¨Tribunal de Medicina¨ en vez de Consejo. En un artículo publicado en ¨El Autonomista¨ se
sostenía que: ¨...Ayer se ocuparon los miembros todos del Tribunal de Medicina, en la inspección prolija de las
farmacias de esta ciudad.//Terminaron muy tarde el trabajo, trataremos de darle publicidad al informe o memoria
que á no dudar, trabajará ese tribunal.//Aplaudimos el celo y contracción de los miembros que lo componen, y les
12
enviamos nuestras sinceras felicitaciones...¨ .
Un año más tarde, el Consejo de Higiene Pública practicó una ¨visita general de inspección¨ a
todas las farmacias, a fin de ¨asegurar el buen servicio en las oficinas, obteniendo los más
satisfactorios resultados¨, conforme nos indica el Gobernador de la Provincia, en su Mensaje a la
Legislatura provincial 13 .
El accionar del Consejo de Higiene estuvo vinculado –y a veces compitiendo- con otras esferas
gubernativas. Muchas veces se requirió la colaboración de varias instituciones para llevar adelante
sus funciones. A este respecto el períodico ¨La Verdad¨ publicaba en septiembre de 1886 que, para
poder realizar estas inspecciones de farmacias debía designarse un Inspector (proponiéndose para
tal función al Dr. Arturo Billinghurst), al par de solicitar ¨...del Gobierno de la Nación el concurso valioso
del Laboratorio del Colegio Nacional, el que contestó afirmativamente, disponiéndose actualmente de los reactivos
químicos necesarios para el análisis...El pueblo debe saber que á causa de la mala calidad de sustancias medicinales
que espenden indistintamente las boticas del municipio; previenen á los pacientes de los casos de intoxicaciones, que
14
con alguna tenacidad persigue la reputación de los médicos...¨ .
La sede del ¨Honorable Consejo de Higiene Pública¨ estuvo en la calle Independencia nº 95 de la
ciudad de Corrientes, donde se atendía al público todos los días hábiles de ¨4 á 6 p.m.¨ 15 . Este local
se alquiló luego que el Gobernador acordara una suma de dieciocho pesos nacionales mensuales
aunque lo incluyó presupuestariamente en gastos ¨Eventuales del Departamento de Gobierno¨ 16 ;
asignándose un fondo de veinte mil pesos, en 1889, para la adquisición de un terreno donde se
construirían las oficinas citadas 17 .
En 1887, por decreto del Poder Ejecutivo 18 se creó, bajo la dirección del doctor Angel Lomónaco,
la Oficina de Asistencia Pública provincial, bajo la dependencia inmediata del Consejo de Higiene
Pública de la Provincia.
Por decreto del 17 de enero de 1888 se amplió la competencia del Consejo de Higiene Pública, al
ponerse bajo su inmediata dirección a los Hospitales 19 de Mujeres, de Hombres, la Asistencia
Pública y la Oficina de Vacuna; al par de nombrar como Vocal al Dr. Lomónaco y como
Secretario a José Civils 20 , quien fue días más tarde reemplazado por el Señor Fortunato Soler 21 22 .

10
Ley de Presupuesto General para 1889
11
Registro Oficial de la Provincia de Corrientes (1887); pp. 49-50, Decreto del 9 de febrero
12
¨El Autonomista¨; del 9 de enero de 1884.
13
Registro Oficial de la Provincia de Corrientes (Año 1886); p. 196 del MENSAJE del
Gobernador a la H. Cámara Legislativa, el 9 de julio, al inaugurar sus sesiones ordinarias en el
período de 1886
14
¨La Verdad¨, del 8 de septiembre de 1886
15
¨El Litoral¨ del 24 de julio de 1887; p. 3
16
Registro Oficial de la Provincia de Corrientes (Año 1887); p. 60, Acuerdo del 21 de febrero
17
Registro Oficial de la Provincia de Corrientes (Año 1889); pp. 378-379, Ley del 11 de
noviembre
18
Registro Oficial de la Provincia de Corrientes (Año 1887); pp. 4-5, decreto del 7 de enero
19
los hospitales de la capital estaban la administración de comunidades religiosas, aunque el
médico fuere nombrado por el Municipio. En el Interior, las Sociedades de Beneficencia bregaron
por la construcción de Hospitales(v.g. Esquina, etc.) En: Archivo General de la Provincia de
Corrientes; Legajo Administrativo Nº 246, Expediente Nº 18 letra C, del 21 de abril de 1896
20
Registro Oficial de la Provincia de Corrientes (Año 1888); p. 17, Decreto del 17 de enero
21
Ibidem; p. 120, Decreto del 4 de abril
22
El Hospital Santa Rita, en funcionamiento a instancias del desprendido amor solidario de doña
Juan Francisca Cabral, inició sus actividades en abril de 1884. Cuatro años más tarde se habían
atendido 149 enfermos, de los cuales 54 fallecieron; en ¨El Litoral¨; p. 1, del jueves 12 de julio de
1888
En 1889, se incorporó como Vocal el Dr. José Popolizzio 23 , y en octubre se designó al Doctor
José R. Gómez 24 , que vinieron a cubrir las vacancias provocadas por las renuncias de los
miembros Juan A. de los Santos (Presidente) y Delfino Pacheco (Vocal) que fueron electos
senadores 25 . Inter tantum, el Gobernador designó a Gomez, como nuevo Presidente del Consejo de
Higiene Pública 26 27 . En 1890, el doctor Antonio B. Pont, fue nombrado Vocal 28 .
El año de 1897 trajo aparejado algunas novedades dignas de mencionarse 29 : a) ¨las más vitales
conveniencias...(para) la adopción de medidas de higienización, para obtener el mejoramiento de
sus condiciones salubres, tanto que ha empezado a notarse con carácter alarmante la
propagación de enfermedades infecciosas...¨; b) la necesidad de ¨...anticiparse con disposiciones
preventivas a la ley que en oportunidad se pedirá a la Honorable Legislatura para la realización
de un plan general de saneamiento, siendo la principal entre ellas, la de organizar una dirección
general, que se encargue de apreciar a la vez con preparación científica, los datos que servirán de
base a dicho plan...¨; c) razones éstas que ameritaron la creación de una Dirección General de
Saneamiento, repartición que estaría a cargo del reconocido profesional Dr. Emilio R. Coni 30 ; al
que acompañaron en calidad de Consejo Consultivo, los miembros de la ¨Asistencia Pública¨ y del
Consejo de Higiene Pública (¨una vez reorganizado¨) doctores: Tiburcio G. Fonseca, Ricardo
Billinghurst, Antonio Graciano, Dámaso Sanchez Negrete y Alberto Fainardi; d) Para la
realización de los primeros estudios, el Gobernador Valentín Virasoro solicitó a la Legislatura, la
suma de pesos moneda nacional 10.000 31 .
El periódico ¨La Libertad¨ continuó reclamando en 1898 al Poder Legislativo (luego de un año sin
autoridad científica en la capital, la ¨...creación del Consejo de Higiene, y hasta la fecha,
permanece dormido, seguramente en alguna carpeta de las comisiones...¨ 32 ; a fin de evitar que la
¨...suerte de los habitantes de Corrientes...(se encuentre)...a merced de los caprichos de la
fortuna...¨. Y agregaba la publicación indicada que ¨...nuestra población proletaria 33 vive a la de
Dios que es grande, sin que hasta ahora nuestras autoridades se hayan preocupado de su
situación...¨.
Al año siguiente el periódico ¨La Reacción¨ seguía haciendo hincapié en la necesidad de tener un
Consejo de Higiene en funcionamiento, ya que al carecer de uno, no habría garantías frente a las
epidemias, invitando a ¨...Que reflexionen quien en ello debe conocer...¨. 34 .
Esto llevó al Poder Ejecutivo provincial a promulgar una ley reorganizando el Consejo de Higiene
y asignándole un presupuesto mensual de $ 1.050, que se discriminaron de la siguiente manera: $
180 para cada uno de los cuatro miembros médicos; $ 120 para el Secretario; $ 130 para el
Farmacéutico Inspector de Farmacias y Vacunador (con cuarente pesos de viáticos); $ 20 para el
ordenanza y diez pesos para gastos de oficina 35 .
Esto permitió que el Consejo llevare adelante sus misiones en el año 1903 evacuando las
consultas, aunque enfatizando la falta de asignación de fondos para el vacunador, y agregando que:
¨...La salubridad de la Provincia es inmejorable, pues este consejo no ha tenido denuncias del desarrollo de
epidemia alguna en el territorio de ella; salvo en el Sauce en que la Comisión Municipal por temer del desarrollo de
la difteria, por algunos casos aparecidos en esa localidad, solicitó al Consejo la remisión del suero anti-toxico, el que

23
Registro Oficial de la Provincia de Corrientes (Año 1889); p. 289, Decreto del 27 de julio
24
Ibidem; p. 364, Decreto del 31 de octubre
25
¨El Litoral¨; p. 1, Sábado 13 de julio de 1889
26
Registro Oficial de la Provincia de Corrientes (Año 1890); pp. 24-25, Decreto del 14 de enero
27
¨Las Cadenas¨, número 997 destacó que ¨...el gobierno ha hecho un buen nombramiento,
llevando nuevamente al reputado médico Dr. José Rafael Gómez a la presidencia del Consejo de
Higiene Pública de la Provincia de Corrientes, donde sin duda prestará importantes servicios á esta
capital y a la provincia...¨
28
Registro Oficial de la Provincia de Corrientes (Año 1890); p. 332, Decreto del 4 de julio
29
Boletín Oficial de la Provincia de Corrientes (1897); p. 4 Decreto en Acuerdo de Ministros del
24 de agosto
30
quien aceptó la designación por nota, publicada en el Boletín Oficial de la Provincia de
Corrientes (Año 1897); p. 1 del 21 de septiembre
31
Boletín Oficial de la Provincia de Corrientes (1897); p. 3, del 29 de octubre
32
¨La Libertad¨, del domingo 13 de noviembre de 1898
33
las negrillas son nuestras
34
¨La Reacción¨; p. 2 del viernes 19 de mayo de 1899
35
¨La Reacción¨; p. 2, del viernes 29 de diciembre de 1899
fue remitido.//Otro de los puntos que merece la atención de los poderes es el que se relaciona con el aislamiento y
tratamientos de estos desgraciados de la humanidad, los tuberculosos que carecen en absoluto de un local adecuado
para su tratamiento, teniendo impresindible necesidad los Señores médicos de los hospitales á verse obligados a
aoljarlos en promiscuidad con los demás enfermos en salas comunes, gravísima circunstancia que expone a los
demás a adquirir esta enfermedad, pues no es posible por la construcción actual del hospital, proceder mediante la
desinfección de los locales por sus pésimas condiciones higiénicas.//Urge y es necesario poner término a este anormal
estado de cosas...¨ 36 .
En febrero de 1914, el Poder Ejecutivo de la provincia, no hizo lugar a las renuncias a sus cargos
de los Vocales del Consejo de Higiene Pública de Corrientes, presentadas por los doctores Diocles
Gómez, Juan P. de Llano, José Casari y Quirce Pujol 37 .
En diciembre de 1916, se designó Vocal –por vacancia- a Alberto Fages 38 ; en 1917 también era
miembro el Dr. Héctor Desimoni 39 ; y en 1918 se designó –en la misma calidad- al Dr. José
Benítez 40 y se le aceptó la renuncia a Fages, nombrándose en su reemplazo al Dr. Raúl D.
Grandi 41 .
En 1919, y con retroactividad a noviembre del año anterior, el Interventor Nacional nombró como
Vocal del Consejo al Dr. Guillermo A. Perrens 42 . Días más tarde se aceptó la renuncia del propio
Perrens y del Dr. Benítez 43 , y se designó interinamente como Presidente del Consejo al Dr.
Alberto Iglesias 44 45 ; mientras se designó como ¨médicos adscriptos¨ al citado Benitez, y a los
doctores Francisco Grosso Soto 46 y Alberto W. Fitz Simon 47 .
Poco tiempo después sería nombrado Vocal el Dr. Julio C. Rivero, y ante su renuncia se nombró al
Dr. Pedro G. De la Fuente 48 .
En las postrimerías de 1919 y durante el siguiente año, el Consejo de Higiene, luego de manifestar
que "no se registra en los Libros del Consejo, no diré una denuncia por falta de dignidad
profesional grave, o negligencia culpable, pero ni siquiera una discusión por honorarios
profesionales...", ni tampoco graves sobre ejercicio ilegal, comenzó a trabajar en varios proyectos
importantes: la creación de una Escuela de Parteras, un Hospital Regional, la organización de la
Asociación Médica Correntina; y muy especialmente, el proyecto de ley de la Dirección General
de Salubridad de la Provincia, que vendría a reemplazar al Consejo 49 .
Efectivamente, en virtud de la Ley 1920, el Consejo de Higiene Pública de Corrientes fue
reemplazado por la Dirección General de Salubridad de la Provincia de Corrientes.

V.- Conclusiones:
La adecuación de la estructura administrativa del estado correntino, transformando el Tribunal de
Medicina en un Consejo de Higiene Pública, tuvo por fin facilitar la implantación del capitalismo
en estas tierras; y sus atribuciones fueron puntualizadas con mayor especificidad que del primero
de los nombrados.
Ambos organismos fueron permanentemente ¨reorganizados¨ aunque la diferencia estribó en que
los miembros del Consejo cobraron sueldos, no así los del Tribunal.

36
Archivo General de la Provincia de Corrientes; Legajo Administrativo Nº 285 (Año 1904),
Expediente Administrativo Nº 142 – Sec. C, Nota al Ministro de Gobierno Carlos M. Reina
37
Boletín Oficial de la Provincia de Corrientes (Año 1914), decretos del 20 de febrero
38
¨La Provincia¨; p. 2, del 2 de diciembre de 1916
39
Boletín Oficial de la Provincia de Corrientes (Año 1917); Decreto del 21 de junio
40
Boletín Oficial de la Provincia de Corrientes (Año 1918); Decreto del 18 de enero
41
Ibidem; Decreto del 4 de febrero
42
Boletín Oficial de la Provincia de Corrientes (1919); Decreto del 29 de enero
43
Ibidem; Decreto del 3 de abril
44
Ibidem; Decreto del 15 de abril
45
¨El Liberal¨; p. 1, del 23 de abril de 1919
46
Boletín Oficial de la Provincia de Corrientes (1919); Decreto del 14 de mayo
47
Ibidem; Decreto Nº 309
48
Boletín Oficial de la Provincia de Corrientes (1922); Decreto del 10 de enero
49
Archivo General de la Provincia de Corrientes; Legajo Administrativo Nº 444; Informe del
Presidente del Consejo de Higiene Pública Dr. J.C. Rivero al Ministro de Gobierno J. Honorio
Silgueira, de enero de 1920
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