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DESCUBRIENDO Y ROMPIENDO MALDICIONES

Cuando ves un bebé durmiendo tan tierno, tan indefenso y tan


pequeñito, te preguntas: ¿Cómo puede un ser tan pequeño e
inocente tener alguna maldición?

Desafortunadamente un bebé puede aún antes de nacer, estando


en el vientre de la madre, tener maldiciones generacionales o
ancestrales sobre su vida. Es algo muy triste, pero es verdad.

Surge otra pregunta: ¿Cómo puede un hijo de una familia cristiana


ser rebelde y apartarse de la enseñanza de su hogar e ir por su
propio camino, cuando todos los demás hijos están siguiendo el
ejemplo de sus padres?
Una de las razones puede ser que hay una maldición sobre su vida,
que aún para los padres ha pasado inadvertida, o no saben como
romperla.

Isaías 65:23: No trabajarán en vano, ni darán a luz para


maldición; porque son linaje de los benditos de Jehová, y sus
descendientes con ellos.
¡Qué promesa! Veamos ahora porque no se cumple del todo.
Descubramos y analicemos cinco puntos esenciales:

1. ¿Qué es una maldición?


2. Categorías de maldiciones.
3. ¿Cuáles son los síntomas?
4. Causas y efecto de las maldiciones.
5. ¿Cómo romper alguna maldición que esté en mi, en mi
familia, en mis amistades o en alguna otra persona?
¡Estemos atentos y entremos a una nueva dimensión para ministrar
y rescatar a nuestra generación para el Señor!

1. ¿Qué es una maldición?:


Es aborrecer, detestar, execrar, vituperar, condenar a una
persona o cosa. Es atar a alguien con palabras o blasfemias. Una
maldición es una fuerza demoníaca puesta sobre una persona o
una familia a través de: palabras, o por voluntad y acción de
alguien. Las acciones pueden incluir a los propios padres
involucrados en actividades de ocultismo.

2. Cuatro categorías de maldiciones:


a) Maldiciones justas.

Son las originadas por rebeldía contra Dios y que pueden


extenderse hasta la cuarta o aún hasta la décima generación y que
son resultado de los pecados cometidos al romper el pacto con
Dios. Por ejemplo: adorar dioses ajenos
Éxodo 20:3-6: 3 No tendrás dioses ajenos delante de mí. 4 No
te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en
el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra.
5 No te inclinarás a ellas, ni las honrarás; porque yo soy
Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los
padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de
los que me aborrecen, 6 y hago misericordia a millares, a los
que me aman y guardan mis mandamientos.
Se está violando el primer y segundo mandamientos que hablan
en contra de la idolatría y la adoración a dioses o imágenes.
- Involucrarse en alguna forma de ocultismo:

Consultar horóscopos, formas de adivinación, tarot, tabla "ouija",


brujería, magia, astrología, telepatía, proyecciones astrales,
aromaterapia, meditación trascendental, yoga, espiritualismo,
amuletos, péndulo, hipnotismo, lectura de cartas, lectura de la
mano, lectura del café, karate, creer supersticiones, nueva era,
programas de televisión que se presentan usando el Nombre de
Dios pero no se identifican con el pueblo cristiano,(aquí en la ciudad
hay esos que engañan con “agua de sanidad” “manto de
prosperidad” “rosa de la paz” y personas clamando que los pueden
ayudar vestidos como indígenas ó hablando un español raro,
venidos de otros países con el fin de comerciar. etc.

- Nacimiento ilegítimo (sin la bendición de Dios).


La maldición impide la bendición de Dios en la vida de la persona y
tendrá consecuencias en todo lo que haga, hasta que no se
arrepienta y camine con Dios.

b) Maldiciones impuestas.

Originadas en el hombre como resultado de palabras habladas


por alguna persona con odio o enojo hacia otra. ¿Cuántas veces se
ha dicho a alguien o al hijo: eres un "condenado", eres un "maldito"
y no se mide el poder de las palabras, ni la intención con que se
dicen. ¡Cuidado con lo que decimos! La muerte y la vida están
en poder de la lengua... (Pr 18:21a).
Hay maldición al invocar a los agentes de Satanás, como brujos,
adivinos, sacerdotes satánicos, espiritualistas, gitanas, etc., que
saben y están conscientes que actúan por el poder del enemigo.

Otras maldiciones son dichas por alguien que odia o rechaza a


otra persona; ésta no sabe que eso es inspirado también por
Satanás.
En Deuteronomio 28 se habla de las bendiciones por la
obediencia a los mandamientos de Dios, o las maldiciones por la
rebelión y la desobediencia a ellos.
Deuteronomio 30:19 : A los cielos y a la tierra llamo por
testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida
y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida,
para que vivas tú y tu descendencia.
La vida es afectada por la bendición y la muerte está en relación a
la maldición.

c) Maldiciones bíblicas:

- La oposición a la autoridad o descubrir (andar hablando del


Pastor, del Líder de ministerio ó aún de la autoridad civil) su pecado
o falta a otros. Por ejemplo: María habló mal de Moisés y quedó
leprosa. Tanto a las autoridades como a los padres se les debe
honrar y respetar, aún no siendo ejemplares, pues Dios es el único
que puede juzgarlos y que no dejará sin pago a quien no sea
integro.
Otro caso cuando Noé salió del arca y plantó una viña y se
embriagó.
Génesis 9:20-23: 20 Después comenzó Noé a labrar la tierra, y
plantó una viña; 21 y bebió del vino, y se embriagó, y estaba
descubierto en medio de su tienda. 22 Y Cam, padre de
Canaán, vio la desnudez de su padre, y lo dijo a sus dos
hermanos que estaban afuera. 23 Entonces SEM y Jafet
tomaron la ropa, y la pusieron sobre sus propios hombros, y
andando hacia atrás, cubrieron la desnudez de su padre,
teniendo vueltos sus rostros, y así no vieron la desnudez de su
padre.
Reflexionemos en esto que trajo la maldición a Canaán. Noé se
embriagó, es un acto de rebeldía y es un pecado; su hijo lo
descubrió ante sus hermanos, es decir, no honró a su padre. La
enseñanza es: si somos testigos de las debilidades de alguno, aún
con evidencias, no debemos comunicarlo a otros, porque puede
acarrearnos maldición.
- Los que maldicen al pueblo escogido por Dios.
Génesis 12:3: Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que
te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las
familias de la tierra.
Si tú quieres bendición para ti, para tu familia, ora y bendice a
Israel; es una promesa de Dios. También cuando se maldice al
cristiano a quien Dios ha bendecido, se atrae maldición sobre sí
mismo.
- El robar a Dios en el diezmar y ofrendar.
Malaquías 3:8-9 8 ¿Robará el hombre a Dios? Pues vosotros
me habéis robado. Y dijisteis: ¿En qué te hemos robado? En
vuestros diezmos y ofrendas. 9 Malditos sois con maldición,
porque vosotros, la nación toda, me habéis robado.
Qué importante es enseñar a los niños desde pequeños a diezmar
y a los jóvenes que trabajan apartar su diezmo para Dios, esto es lo
único que puede romper cualquier maldición de pobreza y ser
protegido y apartado del ataque del enemigo de sus vidas y tener
prosperidad. Estas solo son algunas; hay muchas mas escritas en
la Biblia para que las descubras.

d) Automaldiciones:

Rebeca, madre de Jacob y Esaú, cuando quiso obtener la


bendición para el menor, aunque Dios ya lo había escogido, ella
quiso actuar por sí misma engañando a Isaac para lograrlo.
Génesis 27:6-13: 6 Entonces Rebeca habló a Jacob su hijo,
diciendo: He aquí yo he oído a tu padre que hablaba con Esaú
tu hermano, diciendo: 7 Tráeme caza y hazme un guisado, para
que coma, y te bendiga en presencia de Jehová antes que yo
muera. 8 Ahora, pues, hijo mío, obedece a mi voz en lo que te
mando. 9 Vé ahora al ganado, y tráeme de allí dos buenos
cabritos de las cabras, y haré de ellos viandas para tu padre,
como a él le gusta; 10 y tú las llevarás a tu padre, y comerá,
para que él te bendiga antes de su muerte. 11 Y Jacob dijo a
Rebeca su madre: He aquí, Esaú mi hermano es hombre
velloso, y yo lampiño. 12 Quizá me palpará mi padre, y me
tendrá por burlador, y traeré sobre mí maldición y no
bendición. 13 Y su madre respondió: Hijo mío, sea sobre mí tu
maldición; solamente obedece a mi voz y ve y tráemelos.
En este caso fue una auto maldición conciente, declarada por ella
misma y se hizo acreedora a la maldición con los hijos lejos y
sufriendo hasta morir, sin volver a verlos.
Otras no conscientes pronuncian maldición, o en otras palabras
"profetizan negativamente" recibiendo el efecto de ello.

Ejemplos: "Yo nunca me casaré para no sufrir como mis


hermanas", "esta enfermedad me va a matar", "tengo miedo de que
me roben y me dejen medio muerto y en la calle", "yo no nací para
tener hijos, son un problema". Sin darse cuenta quien así piensa se
está auto maldiciendo o está maldiciendo a su generación.

3. ¿Cuáles son los síntomas mas comunes de las


maldiciones? :

Tormentos nocturnos, pesadillas, depresión continua, persistentes


dolores de cabeza, fatiga inexplicable, alcoholismo generacional,
confusión, frecuentes accidentes, pensamientos suicidas, lagunas
mentales, explosiones de enojo, algunas enfermedades, muertes
prematuras en la familia, pobreza, o bancarrota o continua.

4. Causas y efecto de las maldiciones: Toda maldición es


producida por alguna causa.
Proverbios 26:2: Como el gorrión en su vagar, y como la
golondrina en su vuelo, así la maldición nunca vendrá sin
causa.
La principal causa de recibir maldición es la rebelión.
Por ejemplo, Adán y Eva. Dios los creó a su imagen y semejanza,
los bendijo y les dijo que fructificaran y se multiplicaran. Por
supuesto con la bendición vino la responsabilidad de obedecer,
pero desobedecieron y la tierra fue maldita, y con ello vinieron
consecuencias.
Otro ejemplo fue luzbel se rebeló contra Dios y fue arrojado del
cielo y recibió maldición.
La humanidad desobedece y le es quitada la bendición.
¡Debemos rescatar a nuestra generación y a tanta gente perdida
que nos rodea, que está en pecado y con maldiciones por su
ignorancia y llevarle a Cristo!.
Las maldiciones se reciben cuando voluntariamente se cometen
acciones en contra de la voluntad de Dios o de su Palabra. Esto
trae consecuencia de maldición en la persona y en su
descendencia.
Uno de los propósitos del enemigo, al cual se le da autoridad por
el pecado de rebeldía o desobediencia, es perpetuar o continuar la
maldición en todas las generaciones posibles; y esto es a través de
los malos espíritus que tienen derecho en la persona, por causa de
la maldición que no ha sido rota, y que impide que la persona pueda
ser libre.
Una pareja estaba viviendo en unión libre, tenía dos hijos.
Empezó a asistir a la iglesia, aceptaron al Señor, oraban, eran
fieles, pero no habían experimentado la bendición en su matrimonio.
Cuando se les preguntó por qué no se habían casado, se vieron el
uno al otro, sólo levantaron sus hombros y dijeron: "pero hemos
estado unidos por muchos años y ya tenemos dos hijos", dando a
entender que ya era tarde. Pero nunca es tarde para recibir la
bendición de Dios.
Se les dijo: "deben casarse". Estos nuevos convertidos no se
habían dado cuenta de las leyes que producen bendiciones o
maldiciones. Al entenderlo se casaron y con ello rompieron la
maldición para ellos y sus hijos. Mire qué fácil.
¿Por qué? Porque el poder para anular la maldición, está en la cruz.
Gálatas 3:13: Cristo nos redimió de la maldición de la ley,
hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito
todo el que es colgado en un madero).
Esta es una de las provisiones de la redención.

Veamos ahora las maldiciones heredadas:


- Alguna enfermedad puede manifestarse en varias
generaciones de la familia, aún por asunto de raza. Cuando
asistimos al doctor para consultarle, normalmente él hace un
"historial clínico" para descubrir la enfermedad o padecimiento
en ambas líneas genéticas de nuestros ancestros. Los
doctores quieren saber si no hay alguna maldición o herencia
familiar; no lo dicen así, pero eso es realmente, porque
preguntan: "¿Tu padre padeció cáncer? ¿tu madre tuvo
lupus? ¿diabetes? ¿artritis? ¿problemas cardiacos?" etc.
-
Las enfermedades físicas no son las únicas maldiciones
generacionales, muchas más se pueden identificar al observar o
discernir los pecados familiares y los problemas que se repiten o se
intensifican en las generaciones siguientes.
Ejemplos: maldiciones de pobreza, fracasos conyugales,
divorcios, esterilidad, accidentes, madres solteras, locura,
alcoholismo, soltería, muerte, suicidios en la familia etc. Los
canales utilizados para transmitir las maldiciones heredadas son los
genes, los cromosomas y la sangre.
Una pareja sin hijos decidió adoptar un bebé. La trabajadora
social les dió antecedentes de la nena: "aunque la niña es linda y
parece muy sana, la familia de donde procede no es la mejor. El
padre alcohólico, abandonó a su familia. La madre al no poder
enfrentar la situación abandonó a sus tres hijos dejándolos solos en
la casa. Una persona escuchó a un bebé llorando en la casa
obscura y buscó ayuda porque la pequeña estaba a punto de morir
de hambre".
Llegó a la casa cuna y al ser examinada, el médico dijo que
estaba desnutrida, con una infección y fiebre. Estando en el hospital
se descubrió que era alérgica a la leche; al darle substituto mejoró
considerablemente. Se notó que la niña se asustaba con facilidad,
era muy nerviosa y tenía mucha energía. Necesitaba mucho
cuidado y amor. Los padres adoptivos, cristianos por supuesto, le
dieron la mejor educación y mucho amor. La niña se desarrolló
emocionalmente bien, pero al crecer se notó que tenía ataques de
enojo, sin causa aparente y desobediencia; además no estaba bien
en la escuela. Al llegar a la adolescencia (en la secundaria) se
volvió muy rebelde. Se salía por la ventana para andar con
muchachos vagos. Empezó a fumar, beber y drogarse. El director
de la escuela les informó que faltaba con frecuencia y no cumplía
con las tareas. Pedía dinero a la madre, que quedó viuda y cuando
no se le daba, golpeaba a su madre; en una ocasión le tiró dos
dientes.
Finalmente huyó y se unió a un hombre, y después a otro, y así
con un tercero. Siempre consumiendo drogas y embriagándose. En
una ocasión trató de matar a sus cuatro hijos, dos del segundo y
dos del tercer hombre; así como a la pareja con quien ahora vivía.
Se convirtió en una amenaza para ella misma y para otros porque
vivía bajo maldiciones de su linaje, que ni siquiera conoció.
Necesitaba ser libre para que también sus generaciones fueran
rescatadas para Dios.

- Efecto de las maldiciones:


odios en mi familia han muerto a los 39 años.
Mis cuatro hermanas se han divorciado.
Mi madre fue infiel y a pesar de aborrecer esa actitud,
tengo una relación con un hombre casado.
Mis hermanos y hermanas "han tenido que casarse".
Cada varón en mi familia ha sido alcohólico y mi hijo
adolescente está bebiendo mucho.
No veo progreso en mi vida espiritual.
He sido despedido de cada empleo, o las compañías
donde he trabajado han quebrado.
No puedo disfrutar la vida, porque siento que pronto
sucederá una desgracia y así ocurre.

Para entender las maldiciones debemos darnos cuenta que


estamos lidiando con fuerzas poderosas que no podemos ver y que
nuestros sentidos no pueden entender.

5. ¿Cómo romper las maldiciones en mi, en mi familia y en


otras personas?:
El primer paso es arrepentirse de permitir llegar a la
maldición.
Tomar autoridad en el Nombre de Jesús y aplicar la
sangre de Cristo para romperla.
Si tú, tu familia, o alguna persona que es víctima de
maldición, se ha involucrado en alguna forma de ocultismo,
arrepentirse y renunciar rompiendo cualquier atadura.
Si alguna pareja se va a casar, romper cualquier cadena
de su pasado. También puedes hacerlo si ya tienes años de
casada; no podemos saber todo lo que previamente hubo en
nuestro linaje.
Sacar y destruir todo objeto, libro o imagen relacionada
con la maldición.
Josué 6:18: Pero vosotros guardáos del anatema (objeto de
maldición); ni toquéis, ni toméis alguna cosa del anatema, no
sea que hagáis anatema el campamento de Israel, y lo turbéis.

Turbar el campamento también es afectar nuestra casa!!!!!.

Romper y renunciar a cada maldición generacional del


linaje del padre y la madre.
En Cristo somos un nuevo linaje, un nuevo árbol genealógico por
medio del madero de la cruz, donde toda iniquidad de los padres
fue clavada y redimida.
Si hay alguna maldición a través de un brujo, o siervo de
satanás se puede usar la Palabra,
Salmos l09:17-20: 17 Amó la maldición, y ésta le sobrevino; Y
no quiso la bendición, y ella se alejó de él. 18 Se vistió de
maldición como de su vestido, Y entró como agua en sus
entrañas, Y como aceite en sus huesos. 19 Séale como vestido
con que se cubra, Y en lugar de cinto con que se ciña siempre.
20 Sea este el pago de parte de Jehová a los que me
calumnian.
Volverá a aquel de quien procede y no tendrá un efecto en la vida
del cristiano obediente.
Perdonar y bendecir a la persona que pronunció o produjo
maldición en tu vida, especialmente si fueron tus padres.
Las parejas cristianas que adoptan bebés, romper las
maldiciones generacionales y si conocen, tanto mejor. Renunciar
a ellas y a cualquier asignación que el enemigo tenga en su vida
en el Nombre de Jesús. Aplicar la sangre de Jesús al pasado y
proclamar un futuro para ti y el bebé en Cristo.
Isaías 28:18a: Y será anulado vuestro pacto con la muerte y
vuestro convenio con el Seol no será firme...".
El nuevo pacto de la sangre de Cristo es efectivo.

Por último algo muy importante para las mujeres. Así como
satanás llegó a Adán a través de Eva, muchos hombres son
atrapados por las mujeres, tanto las ajenas que quieren destruir las
familias, como las esposas que frustradas por tener un esposo
inconverso o inmaduro, toman la autoridad y el lugar del esposo,

Para que una mujer pueda romper cualquier maldición en la


familia, primero tiene que entrar al orden divino, respetando al
hombre como su cabeza y estando bajo su cobertura y protección.

Así mismo, el varón debe cumplir con su responsabilidad de ser


cabeza, autoridad, proveedor y protector para la familia. Las familias
que no están en el orden espiritual son un blanco seguro para las
maldiciones.
Tenemos la promesa:
Malaquías 4:6: El hará volver el corazón de los padres hacia
los hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres, no sea que
yo venga y hiera la tierra con maldición.
Hemos de entrar al orden de Dios y a la obediencia; de lo
contrario se recibirá maldición.

En conclusión:
Hay maldiciones permitidas por Dios en nosotros y en
generaciones, por romper el pacto con El al desobedecerle.
Los hijos ilegítimos son víctimas de maldición, así como el
involucrarse en formas de ocultismo o adorar dioses falsos.
También hay maldiciones impuestas o auto-impuestas, por palabras
o acciones.
Muchas más son bíblicas, porque Dios ha dado leyes que al ser
violadas, evitan la bendición. Tales como:
el no diezmar, el no ser generoso, el maldecir al pueblo de Israel, el
no honrar y obedecer a los padres, así como no respetar u
obedecer a las autoridades espirituales y civiles.
Siempre habrá una causa que originará la maldición que
normalmente es transmitida por el linaje.
Gracias a Dios que siendo hijos obedientes, temerosos de Dios,
podemos romperlas y cambiarlas por bendición, porque ahora
somos de Su linaje.
Isaías 65:23: No trabajarán en vano, ni darán a luz para
maldición; porque son linaje de los benditos de Jehová, y sus
descendientes con ellos.

Llamado a salvación:

Llamado a la Iglesia.

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