CONALEP JUAREZ II

Concurso del Quijote

Trabajo: “Aprendiendo a vivir”

Ing. Alfredo García Portela

Ing. José Torres Cantero

Ing. Rafael Urtuzuastegui

Ing. Marcelo Rufino

Ing. Oscar E. Martínez González

Función: Prestador de Servicios Profesionales

Clave – 207

Tel – 619-74-43

Dirección: Enebro 5650 Fracc. Amp. Aeropuerto Cd. Juárez Chih.

Zona: Juárez

Localidad: Cd. Juárez

Municipio: Juárez

Director: Lic. Armando Sánchez Acosta

Fecha: 30 de Noviembre de 2010

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 Aprendiendo a vivir…

La lectura te nutre, te vitamina, te fortalece. Te permite conocer lo

desconocido e imaginar lo indescriptible. Es como un vaso de aguan en el medio

del desierto, que te da vida, que te refrezca y renueva tus pensamientos e ideas.

La lectura es pues un regalo de dioses, las puertas abiertas del Olimpo, es el

camino a la iluminacion, es incluso el conduct para conocer a Dios, cualquiera que

sea tu idea de él.

A traves de la lectura nos convertimos en el personaje principal de nuestra

novela favorita, formamos parte de la narrativa de esa historia, como si vivieramos

nuestra propia pelicula de una posible vida deseada, pero que alguien mas

imaginó o vivió.

En el aula, los profesores vivimos dia a dia algo no muy distinto a una

novela, en ocasiones nuestra novela se convierte en una historia de terror, con

monstruous salidos de nuestras peores pesadillas (¡los alumnos, seres de

ultratumba!). Los problemas que enfrentamos dia a dia en el aula son muchos,

desdeel poco o nulo interes de nuestros alumnos hasta la desercion, pasando

pasando por la indisciplina y desacato de unos jovenes mas precoces, por

mencionar algunos.

Pero en otras muchas ocasiones nuestra novela suele convertirse en una

historia de superacion personal, tanto para los alumnos como para nosotros sus

maestros. Historias donde se ve reflejado que nuestros alumnos solo estan un

poco desorientados, pero que si se les trabaja bien, si se les encuentra el modo de
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llegar a su interes por aprender, nos demuestran que son capaces de sorprender a

cualquiera con sus habilidades y desarrollo de su pensamiento y conocimiento.

A continuacion se narran 5 historias, relatos que nos han marcado como

maestros porque dejaron un aprendizaje en todos los personajes de las historias,

que nos han ayudado a estrechar lazos con nustros alumnos, que nos han

permitido ayudarles a crecer educativamente, pero sobre todo, en el aspecto

moral, de valores y autoestima, para forjar jovenes mas entusiastas, responsables

e integrales.

Soy Alfredo Garcia Portela tengo 24 años y soyIngeniero.

Soy Rufino tengo 25 años y soy Ingeniero.

Soy Rafael Urtuzuastegui tengo 22 años y soy Ingeniero en Industrial.

Soy Oscar Eduardo Martínez, tengo 26 años y soy Ingeniero Industrial.

Soy Torres Cantero, tengo 25 años y soy Ingeniero Industrial.

Y juntos, daremos a conocer nuestra experiencia pedagógica en el corto

pero enriquecedor tiempo como prestadores de servicios profesionales en el

Plantel Conalep Juárez II.

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 Historia 1. Portela “Nada es fácil en la vida”

Hace mucho tiempo quise escribir algo, pero no sabía que escribir, era para

mi imposible entender cómo podría plasmar algo que alguien lo leyera y que con

unas simples palabras lo aprendiera o yo lo explicara, y me daba impotencia el no

poderlo realizar, y saber que alguien si entendiera las cosas que nos pasan y que

nadie lo aprecia hasta que le sucede, es por eso que hoy me decidí a hacer esto y

espero que sea de gran provecho para Usted lector que aprecia los valores de la

vida.

Una mañana de verano llegando al colegio me encuentro con un grupo de

mis alumnos jugando y desperdiciando agua, valioso líquido vital para todos los

seres vivos, me acerque para darles una amonestación y hacerles saber que sin el

agua ellos no estarían vivos, que todo ser humano necesita cuidar de este vital

líquido que es imprescindible para la vida, ya que sin el no habría ningún ser vivo

en el mundo y su naturaleza hermosa no existiera, bueno ellos solo escucharon y

reflexionaron ¡Que sucedería si no tuviéramos agua!, y ahí fue donde se

concientizaron del porque de cuidarla. Me dirigí al salón a dar clases; entro y veo

que muchos de mis alumnos estaban afuera y me quede reflexionando, ¿acaso

los jóvenes de hoy no conocen los valores?, ¿Por qué no valoran las cosas que en

realidad importan?

Pero después de pensarlo un poco llegue a la conclusión, que vale la pena

hacerles entender del porqué hay que estudiar para aprender a valorar las cosas!

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 Solo son eso, jóvenes! Comenzando una clase como todos los días con un

calor agobiante, pase lista de asistencia notando que mis alumnos no podían

ocultar la cara de felicidad y las ganas de comenzar con el pie derecho! Empecé a

dar mi clase sobre lo que con tanto esfuerzo y años de dedicación me costó

aprender, “Ingeniería Industrial”, comencé a explicarle a los jóvenes la importancia

que tiene el mantenimiento en la industria, las características y tipos de cada uno

de ellos, así como realizarlos en tiempo y forma, entonces parafraseando fuera del

tema, les comenté que también nuestro cuerpo humano, está sujeto al

mantenimiento, como cuando vamos con un doctor; hasta la cosa más pequeña

que se encuentre en un hogar requiere del mantenimiento, que realizarlo en

tiempo adecuado, puede ahorrarnos muchísimo dinero, ya que el mantenimiento

nos ayuda a preservar el equipo y las instalaciones a largo plazo, continúe mi

clase indicándoles las formas, de cómo mejorar el proceso de mantenimiento y la

planeación del mismo, así como un proceso de reparación de un cilindro

neumático.

Eso fue parte de la clase de ese día de verano a la cual los alumnos

respondieron muy bien en orden y se mostraban interesados, aplicando una

dinámica de diálogo discusión prácticamente no oí el timbre de término de clase

de lo interesante que estaba el tema para todos, entonces la clase ya había

terminado y pase a retirarme del aula de clases y me fui a buscar mi siguiente

grupo que no se encontraba muy lejos de ahí, así que procedí a caminar y al mirar

a mi alrededor, vi esas áreas de tierra solas que podrían estar llenas de plantas de

ornato que mejorarían el entorno del lugar donde pasamos la mayor parte del

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tiempo de nuestras vidas como estudiantes, que levantan la moral de aquel que

pase por ahí, teniendo presente que algo puede hacer cambiar su vida. Siendo las

7:50 a.m. pase a dar mi clase con el siguiente grupo el cual me recibió sentado y

en orden, no sé si fue porque ellos ya sabían cómo era yo por los comentarios de

los alumnos en la escuela acerca de mi persona y de la forma de cómo me

gustaba encontrar el salón ò fue porque eran unos alumnos muy ordenados, pero

aun así me lleno de satisfacción su actitud, y eso me dio más ganas de continuar

con mi día, al ver que estaba cosechando frutos al saber que mi presencia en el

salón infundaba respeto, pulcritud, limpieza y también odio porqué no?, y recordé

que no todo lo que brilla es oro, y que tenemos errores en la vida, pues somos

seres humanos y a veces no le caemos bien a la gente, olvidándome de eso un

poco, por lo tanto procedí a dar mi clase sobre la importancia de la metrología en

la industria, expliqué que para realizar cualquier trabajo de medición hay que tener

medidas exactas para obtener trabajos de buena calidad y con alta precisión

además de explicar la importancia de conocer las medidas de los tornillos, tuercas

y demás en la industria, enseñé las características de un instrumento de medición

directa para que aprendieran a hacer mediciones pero vi que mi estrategia no

estaba rindiendo lo esperado entonces miré a mis alumnos un poco aburridos y

comencé a hacer una dinámica grupal y los puse a medir tuercas, tornillos y

piezas mecánicas y fueron registrando los valores obtenidos en una tabla para

comparar la diferencia de los elementos mecánicos, entonces comenzaron con

todas las ganas y solicitaron cada uno su vernier (instrumento de medición) para

medición de las piezas, recuerdo que a esa hora de la clase, se acercó a mí un

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alumno que se llamaba José María y me preguntó que si era muy importante la

metrología y que no tenia caso que se aprendiera el vernier, pues porque ya

existían en el mercado los “vernier digitales” y que de nada le serviría aprender el

“vernier estándar” que yo le estaba enseñando, escuché y parece que paso un

largo tiempo en el cual no comprendía como podría yo hacer que José María

entendiera lo que yo trataba de enseñarles, me puse rojo de la cara y casi

enmudecí pues no sabía que contestarle, siendo que él me había confesado que

estaba aquí en la escuela solo porque necesitaba tener los papeles que

acreditaran sus estudios y que eso era lo único que le interesaba para poder

trabajar, pues él era el hijo mayor de su familia, y tenía que ayudar a sus

hermanos, y a su familia económicamente, reafirmando todo lo que aprendí en la

vida le contesté a José María, no sé cómo ni de donde, pero el ser humano tiene

que comer todos los días, Chema? si te doy un pescado vas a comer nada mas

hoy, pero si te enseño a pescar, vas a comer todos los días, moraleja, tu puedes

hacerlo, piensa diferente; así pues se dio el cierre de esa clase y entonces me

despedí de mi grupo, saliendo a tomarme un merecido receso, me dirigí a mi auto

y me dispuse a desayunar una ligera botana y a revisar mi plan clase, ya que ser

docente implica dedicar todo el tiempo posible a los cinco sentidos, y entonces

después me quedó tiempo para leer un libro mientras me relajaba en una hermosa

sombra que cubría mi pequeño auto del abrazador calor, fue tan grata la

experiencia de estar bajo esa sombra que sin más por un momento soñé

despierto, y llegaron a mi mente grandes innovaciones para la educación y me

puse a fantasear un poco sobre lo bueno que sería enseñar y dar clases en una

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escuela perfecta, una escuela con salones nuevos y amplios con excelentes

profesores y clima en cada aula, salones multimedia con todo lo necesario para

exponer temas en medios, y que las clases fueran más dinámicas y se tuvieran

todos los recursos, donde no fuera pretexto el no querer aprender, donde el

alumno no se aburra y que al contrario disfrute de aprender a aprender, con

pizarrones electrónicos, computadoras para cada estudiante, un buen sistema de

sonido para exponer de una manera más fácil un tema, y así los alumnos puedan

ser innovadores de su vida, donde las horas pasen volando echando a la

imaginación lo que se espera del futuro, y que para los maestros sea más fácil de

enseñar, un salón donde los maestros no fallen y sean amplios de criterio y de

conocimientos, donde los escritorios sean firmes y útiles para respaldar lo que se

ha aprendido, un salón donde los alumnos tengan sus casilleros y guarden sus

objetos personales, así ellos no cargaran en la espalda el conocimiento aprendido

con sus cuadernos ni libros ni material solo lo llevaran grabado en la mente…… en

eso dieron la señal de entrada a la siguiente clase y se borró de mi mente la bella

fantasía y volví a la realidad que estamos viviendo en la actualidad, entonces

camine desde mi automóvil hasta el siguiente grupo, cuando vi una pareja de

alumnos discutir a lo que no interferí pero reflexione de nuevo y me pregunté?.

Adonde es que llegan comprometiéndose tan jóvenes? A caso disfrutan de su vida

como yo lo hacía en mis tiempos?

Y al llegar al siguiente grupo me esperaban los estudiantes sentados, serios

y dispuestos a tomar clase, pero un grupo de adolescentes se quedó afuera del

salón gritando, brincando y jugando, y me dispuse entonces a controlarlos y a

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invitarlos a que pasaran a sus asientos para así continuar mi clase y proseguir con

mi día, pero antes de dar la clase sobre la materia me dispuse a darles una breve

reseña sobre el camino que los jóvenes están tomando hoy día, un camino

distorsionado, comprometiéndose tan jóvenes caminando hacia el mundo de las

adicciones, que esperan esos jóvenes el día de mañana? Estar en la calle tirados

de borrachos? Morir por sobre dosis, vivir el resto de sus vidas sin comprender, sin

mirar atrás y comprender el mal que han hecho? Intenté hacerles ver un buen

camino para sus vidas, pero bueno solo fue una breve reseña y comencé dando la

clase de Manejo de Equipos de Predicción en esa aula un poco acogedora para

mis alumnos de sexto semestre, ya que era una aula compartida con el taller de

sistemas automáticos debido a la gran matricula de estudiantes de ese año lectivo,

pero no importaban las condiciones, lo importante era que había que enseñar, que

había que dejar un antecedente escrito en la memoria de estos jóvenes, y que de

forma elocuente casi todos lo agradecieron, pues a pesar de no tener los

instrumentos físicamente, me vi a la tarea de investigación y preparación de mis

clases, para poder aportar los conocimientos necesarios que todo técnico debe de

saber al concluir su carrera profesional técnica, hago remembranza de mi ex

alumna Claudia, que me decía Profe como hace usted para saber tanto, a lo cual

respondí con todo respeto diciéndole, cuando yo era niño mis padres me

inculcaron que tenía yo que estudiar para ser alguien en la vida, y no creas que a

la primera vez se aprende, a veces hay que sufrir para merecer, lo cual te va

haciendo más fuerte, y vas entendiendo poco a poco que si no te preparas,

siempre serás una persona subordinada, hoy día siento una gran satisfacción

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personal de haber sido alguien que contribuyo a los conocimientos de Claudia,

pues en la actualidad sigue cursando su carrera profesional en la UACJ, y siempre

me lo ha agradecido, así pase el día dando mis clases e intentando motivar a mis

alumnos a que estudien y que sean personas de provecho, comencé a platicarles

de las condiciones a las que se enfrentaran día con día a lo que ellos se miraron

un poco incrédulos, pero continué así advirtiéndoles que en su campo de

desempeño profesional se enfrentarían a trabajos y a retos donde tendrían que

aplicar todos los conocimientos adquiridos, y como mensaje, entender que el pez

más grande se come al pez más chico, no por astucia sino por fuerza, y les di un

buen consejo el cual fue “nunca pierdan la esperanza” todo lo que ves lo ha hecho

el hombre, pero siempre hay que buscar el lado bueno de la vida, hay que buscar

una fuente inagotable de conocimientos y continuar con el ejemplo para futuras

generaciones que es lo que le vamos a dejar de herencia a nuestros queridos

hijos.

Durante el transcurso de la mañana me tocaba dar la siguiente clase y

recuerdo que di el tema sobre lo que son los conceptos de presión, temperatura,

flujo y de los instrumentos de medición de dichas variables, donde hay que tener

en cuenta las unidades de medición, conceptos de fuerza, en fin continué

explicando que esos temas les iban a ser de mucha utilidad algún día en algún

trabajo, después de estar dando mis consejos me di a la tarea de decirles toda la

inconformidad que yo tenía en contra de ellos, al ver que siempre había basura

dentro del salón, y que de una forma u otra eran responsables de mantener limpio

el salón como si fuera su casa, haciéndoles hincapié que la basura no se hace,

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uno es el que la produce, y por lo tanto se considera como un valor dentro de una

sociedad, porque a donde quiera que vayan, a donde quiera que estén, deberán

llevar presente este tipo de conducta, recuerdo haberles dicho jóvenes donde no

hay progreso, no hay futuro; a veces es difícil enseñar, le comentaba yo a uno de

mis alumnos, y no se imaginan que la educación es como una escalera, donde

cada escalón significa un paso de conocimientos adquiridos en el trayecto de su

vida y en donde en un futuro lo utilizaran y no serán dependientes de nadie, y

podrán demostrarse a si mismos de la gran responsabilidad que significa esto, en

un país donde la gente tiene educación tiende al progreso en todos los aspectos.

Mi penúltima clase fue una de las más interesantes, pues me tocaba

impartir la sesión de taller y mis alumnos ya estaban cada uno en su computadora,

esperando a que yo les diera la primera instrucción para desarrollar un diagrama

de equipos y sistemas automáticos, era verdaderamente dinámica, pues tenían

que aplicar toda la teoría aprendida en el aula y plasmarla en un diagrama y hacer

la simulación con todos los componentes neumáticos ya aprendidos, lo cual

resultaba interesante para ellos, aunque a veces oía ciertas inconformidades, pues

me decían que querían realizar dichos diagramas físicamente, a lo cual yo les

respondía que la simulación era equivalente a la realización física de cualquier

diagrama de proceso, y que inclusive era más seguro, pues si había algún error en

el diseño, no se afectaba ningún equipo y componente, y que por lo tanto era más

rápido saber el resultado en una simulación, y así fue como a ese grupo lo

comencé a educar sobre su desarrollo en la industria pidiendo que resolvieran

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pequeños diagramas, que conectaran, que se equivocaran y así que aprendieran

sin que hubiera pérdidas materiales ni nada por el estilo.

Así continué mi último grupo tratando de enseñarles de acuerdo a mi plan

clase, algo de provecho, comencé explicándoles lo que son los lubricantes “No

existe en el mundo máquina alguna por sencilla que sea que no requiera

lubricación, ya que con esta se mejora tanto el funcionamiento, como la vida útil de

los equipos y maquinarias.” Al abordar el tema de aceites lubricantes escucharon

con atención todas las características de un aceite, forme grupos e implemente

una dinámica de llaves y respuestas lógicas, y vi con agrado, que querer es poder,

si eres un líder nato dentro de tu grupo, siempre habrá respeto y agradecimiento

por la enseñanza, enseñe como y donde emplear una grasa, tipos y

características, vi con satisfacción ese día, que hasta quisieron ir al taller a

verificar el grado de viscosidad de un aceite, y me volví a preguntar, que es lo que

hace cambiar a la gente?, y yo solo me respondí, la “educación”.

Siguiendo ese verano observe a los alumnos más activos que en otras

estaciones del año, lo que quiere decir que los jóvenes estaban con mas deseo de

aprender o por lo menos eso pensaba yo, pero me di cuenta que entre la

comunidad de estudiantes existen muchas deficiencias y problemas que los hace

reaccionar a algunos con un lento aprendizaje, debido a la desintegración familiar,

problemas socioeconómicos, falta de empleo, inseguridad, y sobre todo que hay

que seguir trabajando como maestro, educando a los jóvenes para que tengan un

mejor futuro y hagamos de este país el mejor.

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 En la tarde de ese mismo día camine y firme el libro de salida y me dirigí a

mi automóvil durante el trayecto a la casa de ustedes iba recordando todo lo que

hice ese día en bien de alguien, con un sentimiento de satisfacción ya que al

enseñar a un grupo de personas o a una sola inclusive es algo que me llena de

orgullo, pensar que esos alumnos algún día también serán padres de familia,

maestros, profesionistas, ò que simplemente serán alguien de respeto en la vida, y

recordé que la “labor de un maestro no es nada mas que la de enseñar, sino

hacerle entender al alumno que está vivo para aprender”, también pensé que mi

deber como instructor, es la de ayudarlos en todo momento a superar sus

problemas y que de una forma u otra me siento comprometido a forjarles un futuro

promisorio en la vida.

Y así llegue a mi casa después de un largo día, comentando con mi esposa,

que todos los días se aprende algo, no importa la edad, el sexo, la religión, y que

por muy significativas que sean las cosas, nunca dejaremos de aprender, después

de un breve descanso me dispuse a comer con mi mujer y posteriormente a

revisar los portafolios de evidencia de mis alumnos y a calificar sus exámenes que

después de varias horas de dedicación registre físicamente sus calificaciones en

el sistema SAE de la educación y me dispuse a preparar mis clases para el día

siguiente, humildemente así terminó un día de trabajo en mi querida escuela.

Historia 2. Rufino

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 Historia 3. Rafael Empezando un día de clases.

Era un día común y corriente cuando me dirigía al trabajo. Mi desempeño

es prestador de servicios profesionales, doy clases en conalep, orgullosamente lo

digo ya que me ha abierto las puertas para desarrollarme en un ámbito laboral

diferente al que un día empiezas a estudiar para dedicarte a la industria así que mi

industria es el impartir mis conocimientos los cuales he ido adquiriendo durante

varios años de grandes esfuerzos, porque sacrificas tiempos libres y desveladas

para lograr aquel proyecto o tarea que quieres que te salga del todo bien.

Para los lectores de esta narración de antemano les digo que vale la pena

esforzarse día con día y dedicar el tiempo para formarte profesionalmente, no tires

la toalla, con el tiempo verás reflejado el resultado de esas desveladas y de esos

problemas matemáticos que aun no acabas de comprender.

El ser humano se caracteriza por luchar por aquellas cuestiones que tienen

valor absoluto y universal, así que tenemos por ejemplo: luchar por mantener los

valores tradicionales de la familia, luchar por conservar o transformar

positivamente aquellas cosas que sirven para nuestro propio beneficio o el de la

sociedad, lucha por alcanzar el triunfo y la felicidad. Todas estas vivencias las

guarda en su mente y en su corazón, y de pronto hace un alto y las recuerda, las

siente y las vive.

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 Esto también ocurre cuando se trata de recordar vivencias relativas a tu

formación escolar, donde hiciste amistades, donde conviviste con tus maestros y

donde te sentiste triste o feliz por las derrotas o por los triunfos, es por eso que te

invito a que tú alumno te esfuerces y disfrutes las enseñanzas ya que van a hacer

un factor de apoyo para tu formación humana y eso solo lo lograrás dando tu

mejor esfuerzo en las actividades que desarrolles.

Para obtener mejores resultados dentro del aula escolar me vi en la

necesidad de implementar algunas estrategias en las cuales los alumnos se

interesaran por leer y documentarse en la materia impartida.

Lo primero era reflexionar en colectivo con los alumnos de la importancia de

trabajar para una formación integral, en la que, como la palabra lo dice, hay que

motivar a todos para que se relacionen entre si y se integren a la clase.

Fue necesario comenzar trabajando con los valores, donde iniciamos

definiéndolos y cada día de labores practicábamos uno distinto, el que mas llamó

la atención de los alumnos fue el de la tolerancia y el respeto hacia los demás.

Desde esta perspectiva y con un punto de partida claro y bien definido los

alumnos fueron capaces de desarrollar competencias y habilidades para

contrastar problemas de las situaciones cotidianas en relación con la materia;

inicialmente los alumnos conocieron y dominaron los conceptos teóricos los

cuales pusieron en práctica y demostraron el dominio de ellos y, posteriormente lo

trasladaron a la problemática de la vida cotidiana que atañe a todos los miembros

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de esta honorable comunidad para buscar soluciones a los problemas que se

presentan o puedan presentarse en un futuro y con esto enfocar al alumno a estas

situaciones y que se desempeñe en el ámbito laboral de manera satisfactoria.

Ante los nuevos retos que se presentan en ésta nueva etapa de la sociedad

podemos decir que el conalep se encuentra presente y transformándose

continuamente para ofreces sus servicios a todos aquellos jóvenes que estén

dispuestos a superarse y marcar la diferencia.

Los profesores de esta benemérita institución estamos orgullosos de

pertenecer a ella y hemos adquirido el compromiso para un mejoramiento continuo

en beneficio de la sociedad.

Extendemos esta invitación a los alumnos para que sigan adelante

documentándose y portando orgullosos la camiseta de su escuela. Agradezco a ti

lector por tomar este escrito en tus manos y analizarlo, en hora buena y adelante.

Historia 4. Oscar Martinez Ayudando al cambio.

Un miércoles por la mañana, me disponía a impartir clase en la tercer hora,

con el grupo 4104 de la carrera de electromecánico, el módulo de interpretación

de funciones, con el que, hasta ese momento, él llamaba su peor grupo. Llegó al

salon de clase y lo típico, el grupo completamente en desorden, bancas por todos

lados, muchachos bailando y cantando a gritos, otros jugando futbol, otros

fingiendo que no había llegado aún, un caos total.

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 Trató de poner orden en el salón de clase, de calmarlos para iniciar con el

pase de lista, pero fué imposible. El grupo se aferraba en hacer desorden y en

sacarlo de sus casillas. Les gritó que guardaran silencio, pero ni siquiera así, no

respondian ante absolutamente nada, incluso se acercó a los muchachos que más

ruido estaban haciendo y ni siquiera así dejaban de comportarse de esa manera.

Salió del salón decepcionado,impotente y triste al darse cuenta que no era capaz

de manejar un grupo de alumnos de tales características. Se fue directo con el

prefecto a realizar su reporte.

Después de hacer una revisión de todas estas anécdotas, comenzamos a

pensar cómo podríamos modificar esas conductas, que no eran más que una

alerta sobre la carencia de valores y la poca disciplina en nuestros jóvenes.

Consideramos en ese momento que la actividad más viable para poder sensibilizar

a los alumnos sobre la importancia de los valores, era ofrecer una conferencia.

Buscábamos una conferencia con una temática sencilla, divertida y atractiva

para los alumnos. Una opción viable para ello era la conferencia denominada “El

Decálogo del Desarrollo”, cuyo objetivo es dar a conocer diez reglas

indispensables para el desarrollo de una comunidad basada en valores y

principios, de tal forma que puedan ser puestos en práctica a través de los jóvenes

en este caso. Fabiola Diaz y Laura Estrada conocían de antemano esta

conferencia, ya que habían tenido la oportunidad de participar en ella cuando

realizaban su servicio social en la universidad.

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 Los diez principios del Decálogo del Desarrollo son: Orden, Limpieza,

Puntualidad, Deseo de Superación, Honradez, Respeto al derecho de los demás,

Respeto a la ley y a los reglamentos, Amor al trabajo y, Afán por el ahorro y la

inversión. Juntos estos principios se convierten en una alternativa factible para

aminorar aquellas conductas descritas anteriormente, que son el reflejo del

contexto de nuestros grupos y su falta de práctica de valores.

Redactamos un oficio dirigido al Director del plantel y al Jefe de Formación

Técnica en donde solicitábamos la sala audiovisual de la escuela, señalando la

fecha deseada y asimismo justificando el objetivo de llevar a cabo esta plática.

Después de haber planteado el contexto de México, Luis se dio a la tarea

de explicar qué es “El Decálogo del Desarrollo”, diciéndoles básicamente que eran

diez reglas o principios que a pesar de los años siguen rigiendo un grupo, una

comunidad, una sociedad e inclusive al mundo.

La conferencia transcurrió con la presentación de las diez reglas mostrando,

a su vez, algunos videos referentes a cada uno de los principios ya que permitían

una ejemplificación y por lo tanto una mayor comprensión del tema. Los jóvenes

observaban muy atentos los videos porque eran divertidos; se escuchaban las

risas, comentarios, murmullos, preguntas, y algunos alumnos simplemente

guardaban silencio.

Cabe aclarar que el expositor les habló a los alumnos con un lenguaje

coloquial, lo cual permitió que los jóvenes se expresaran de manera abierta y así

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tuvieran confianza para decir cualquier tipo de idea, ayudando también a que la

conferencia siguiera su curso de forma fluida.

El siguiente paso era determinar cómo podíamos poner en práctica estos

principios en nuestras clases, para que de esta forma se empezara a forjar un

cambio entre nuestros alumnos.

Con las conclusiones obtenidas, establecimos algunas estrategias que nos

podrían ayudar a inculcar y/o practicar estos valores diariamente en el salón de

clase. Aclaramos que todos los principios eran importantes, pero que estábamos

conscientes de que no podríamos obtener cambios tan repentinos; debíamos ser

pacientes, tolerantes, establecer un compromiso real con los jóvenes y sobre todo

predicar con el ejemplo.

A continuación describiremos la forma en que llevamos a la práctica “El

Decálogo del Desarrollo” y explicaremos además, cuál fue la respuesta de los

alumnos a traves de nuestra experiencia de la aplicación de los principios del

decalogo en el grupo 4104 y los resultados que obtuvieron del mismo.

Mientras tanto, después de informarme, decidí llevar a la práctica la

información del decálogo del desarrollo con mis alumnos.

Lo primero que hice fue sincerarme con ellos, hablar en el plano de amigo,

no de autoridad o de profesor. Hablé con ellos y les expuse que sería información

muy importante y valiosa, que podían aplicar a su vida diaria y que lo mejor, es

que los ayudaría a mejorar en muchos aspectos. Conversamos durante un buen

rato, los muchachos expusieron las cosas que no les gustaban de mi manera de
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dar la clase, como el hecho de que dictara demasiada información, o que llegara

tarde algunas veces a clase. Decían que las matemáticas eran muy difíciles y no

entendían para que les serviría realmente y que por eso pues no les interesaba.

Finalmente logre que el grupo se uniera y se centrara en poner atención en lo que

era lo mejor para ellos. Llegamos al acuerdo de poner de nuestra parte para sacar

adelante el semestre, basándonos en los 10 puntos del decálogo, tratando de

llegar a una meta como grupo, tratar de mejorar en al menos 3 de los temas

expuestos en el mismo. La información fue expuesta entonces, a manera de lluvia

de ideas, fuimos opinando acerca de cada uno de ellos, dando como resultado,

para todo el grupo los siguientes puntos más importantes en los que había que

mejorar: Puntualidad, responsabilidad y limpieza.

Ya que obtuvimos los puntos medulares en los que trabajaríamos, Pedro, el

unos de los líderes del grupo propuso una idea. “Hey, que les parece si ponemos

un fondo de ahorro, donde paguemos algo de dinero si tiramos basura o si

llegamos tarde…”

A todos nos pareció muy buena idea y entre todo el grupo elaboramos el

plan, y los costos de cada actividad que infringiera la “Nueva Ley” del salón de

clase. Los resultados de las tarifas a pagar fueron los siguientes:

• Tirar basura---5 pesos

• Llegar tarde después de 5 minutos de tolerancia---5 pesos

• No entregar tareas y trabajos a tiempo---5 pesos.

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 • Decir palabras altisonantes en el salón de clase---5 pesos

Este reglamento era aplicable tanto a los alumnos como al profesor,

poniendo como condición el hecho de que si ellos no pagaban sus infracciones se

harían acreedores a un calificación de NP (No Presentó), y si yo como profesor no

pagaba mis infracciones otorgaría una calificación de E (Excelente) al grupo en

general durante esa unidad. Los pagos se realizarían en un tiempo límite de una

semana a partir de la fecha de la infracción al reglamento, con Angel el tesorero

del grupo, a quien se le otorgó una lista de asistencia para que llevara un record

de los alumnos con sus respectivas infracciones y fechas de las mismas para

evitar confusiones.

Después de 3 meses de arduo trabajo, la mejora en las relaciones entre

alumnos y profesor, el no quitar el dedo del renglón en cuanto a cobrar cada peso

de las infracciones a los alumnos y al profesor, el no escatimar y estar bien

convencidos que esto no era para quitarle el dinero a los muchachos, sino que lo

tomaran como una manera de ahorrar para cuando finalizara el semestre con el

dinero recabado hiciéramos un convivio, con el cual celebrar el término del

semestre. A partir de esto, la mejora en el ambiente del grupo cambio

rotundamente, no digo que se convirtieran en los mejores alumnos del mundo,

pero sí hubo un cambio sustancial en su actitud, incluso en la de los alumnos más

indisciplinados.

Se logró mejorar los 3 aspectos que definimos como los más importantes,

donde la causa raíz era el hecho de no querer pagar y cuando tenían que hacerlo

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pues sabían que se les remuneraría. Finalmente la aplicación del decálogo del

desarrollo me fue de gran ayuda para sacar adelante el semestre, pero sobre todo

para ayudar a los muchachos en su formación y hacerles entender lo importante

que es que mejoren en puntos medulares como la responsabilidad, la puntualidad

y la limpieza.

Nos cuestionarnos cuál había sido el impacto de la misma dentro de

nuestro trabajo, y aunque una conferencia no representa una solución ante la

carencia de valores de nuestros jóvenes, si puede ser el inicio hacia un cambio en

nuestra escuela.

Los lazos con mis alumnos se fortalecieron grandemente y su

comportamiento va mas de acuerdo con su edad, al hacerse conscientes de las

responsabilidades que enfrentaran al incorporarse al mundo laboral, sin que esto

signifique que pierdan su alegria o su gozo, pues al fin y al cabo son jovenes con

energia y muchas expectativas para su vida.

Historia 5. Torres Cantero

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