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LAS MUJERES Y LOS OBSTÁCULOS QUE ENFRENTAS PARA ACCEDER

A CARGOS DIRECTIVOS.

Los obstáculos que enfrenta la mujer para ascender a niveles directivos en las
organizaciones es notable, la brecha va en aumento por variadas razones,
entre ellas, la crisis, que ha provocado una “regresión a modelos más
conservadores basado en un modelo productivo obsoleto no adaptado a estos
tiempos de cambio" algunas de las causas: que las mujeres acceden a
trabajos a tiempo parcial y que "son menos exigentes a la hora de negociar sus
condiciones laborales", sin embargo, "cuando en el puesto directivo se marcan
objetivos las diferencias de género no parecen discriminar".

Además, valorando la educación de quienes ostentan los cargos directivos, a


pesar de que son las mujeres quienes tienen un nivel superior de formación en
comparación con los hombres, estos últimos son quienes los ocupan en mayor
porcentaje en comparación con las mujeres.

Es difícil traspasar el “techo de cristal”. Cuanto más alto es el puesto, más


nítida es la brecha entre los géneros. Los estudios prueban que, aun cuando
con frecuencia las mujeres estén mejor educadas y calificadas que los hombres
en un mismo trabajo, aún siguen teniendo que trabajar y rendir más que ellos
para poder progresar en la empresa.

Analizando el régimen jurídico, una de las más altas esferas de derechos


universales, siendo esto los derechos económicos, sociales y culturales; en
donde toda persona sin distinción de género tiene – además de otros-
derecho a la seguridad social y al trabajo en condiciones dignas.

La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos otorga en su


articulado fundamental la Garantía de Igualdad al anunciar que el varón y la
mujer son iguales ante la ley, además que dispone que no se hará distinción,
entre otros motivos, por origen étnico o nacional, por el género, edad,
capacidades diferentes, condición social, salud, religión, opinión, preferencias,
estado civil, o cualquier otra que atente contra la dignidad humana. De esto
podemos trasladarlo a un ámbito laboral e interpretar que los derechos
laborales tanto para la mujer como para el hombre son los mismos, sin
embargo es importante indicar que la mujer por sus condiciones sociales y
físicas contamos con derechos de seguridad social inherentes a la maternidad
y los hijos. En nuestra carta magna también se reconoce el derecho y libertad
de tener un trabajo digno, lícito y socialmente útil.

De igual manera la Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha realizado


una serie de artículos y publicaciones en relación a las mujeres y su acceso a
la esfera laboral, de tal suerte tenemos el resumen efectuado en marzo del
2007 denominado Tendencias Mundiales Del Empleo De Las Mujeres,
donde nos difunde una serie de situaciones y cifras que nos indica la posición
de la mujer en este devenir del tiempo, que en tal razón nos permitimos
manifestar en este trabajo.

La mujer mexicana y el derecho al trabajo. México, ha sido participativo, que


no victorioso en la aplicación de políticas de equidad y género en el trabajo
femenil, toda vez que la participación de las mujeres en el mercado laboral
continúa siendo inferior a la del hombre, persisten las brechas salariales, se ha
incrementado la exclusión social, la discriminación, la pobreza y por ende la
violencia familiar que afecta especialmente los hogares encabezados por
mujeres.

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