Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
EL MES DE JUNIO.
Cuadro y reliquia en el
presbiterio de la parroquia de
San Pedro de Huelva.
Celebración en honor del que
fue su párroco y arcipreste
El Beato Manuel
González, nombrado
Arcipreste de Huelva
el día 16 de junio de
1905
Ildefonso Fernández
Caballero.
Cuando el Cardenal
Spínola llamó a don
Manuel para enviarle a
Huelva no tenía en la
mente sólo la parroquia
de San Pedro, sino la
ciudad de Huelva. La
parroquia de San Pedro
era una parte importante
de Huelva pero no era
toda la ciudad. Otra parte,
importante también, era la parroquia de la Concepción. Lo que el Cardenal necesitaba
era evangelizadores para toda la ciudad. La situación de incultura, consecuencia de la
escasez de escuelas; los miserables jornales de los trabajadores y la pobreza; la
irritante desigualdad de clases y la injusticia; el problema de las viviendas numerosas
en cuevas y chabolas donde se hacinaban sus moradores, con el consiguiente
deterioro de la vida familiar, y el alejamiento de la vida religiosa no eran problemas
de una parroquia, sino de la ciudad entera. Y había que considerar que afectaban a la
totalidad del municipio como una sola unidad pastoral. Sin embargo las dos
parroquias, de San Pedro y la Concepción, estaban divididas: la de arriba y la de
abajo mantenían rencillas estériles. En la conversación del Cardenal Spínola con don
Manuel el horizonte que aparece no es el de la Parroquia de San Pedro sino el de
Huelva: -¿Quiere usted ir a Huelva?.-¿Cuándo quiere que me vaya a Huelva?.
Cuando don Manuel se puso en marcha caminaba ya hacia un trabajo pastoral
conjunto para espantar las rémoras de un parroquialismo a ultranza en las dos
parroquias de la ciudad.
El templo de la parroquia de la Purísima Concepción que, juntamente con la de San Pedro, eran las únicas
existentes en la ciudad de Huelva. El virtuoso sacerdote D. Pedro Román Clavero, párroco de La
Concepción, compartía con D. Manuel preocupaciones apostólicas y sociales.
Don Manuel consiguió que los sacerdotes trabajaran en Huelva con sentido de
equipo. En el acta de la fundación de las Escuelas provisionales del Polvorín, escribe
en plural: “ teniendo en cuenta también el lamentable abandono de esos barrios del
campo, ninguna escuela oficial ni particular, los Párrocos decidimos dotar a aquella
extensa porción de nuestra feligresía rural de Iglesia y Escuelas. Para ello después
de ponerlo todo, como siempre, bajo los auspicios del Corazón de Jesús y de su
Inmaculada Madre la Virgen María pedimos la autorización de Nuestro
Excelentísimo Prelado y alquilamos unos grandes Almacenes existentes frente el
Matadero, que forman esquina a la carretera del Polvorín, por bajo de la Huerta de
los Perales y a la calle que conduce al sitio del Pozo Dulce”.
Se advierte, en este texto fundacional de lo que más tarde serían, en nuevo
lugar próximo, las Escuelas de las Teresianas, el sentido de colectividad con que se
emprende la obra y, por otra parte el vínculo de comunión diocesana con Nuestro
Excelentísimo Prelado.
Poco más adelante continúa el testo: “Como carecíamos de toda clase de
recursos para la obra de adaptación del local, compra de ornamentos y vasos
sagrados, imágenes y utensilios de Iglesia y Escuelas propuse la idea en la Revista
órgano de la Junta Arciprestal de Acción Social, titulada “El Granito de Arena”,
dirigido por el infrascrito Cura Arcipreste y existente desde el mes de Noviembre del
año anterior de 1907, en la cual se invitaba a todos los católicos de Huelva y España
a cooperar a la obra, obteniendose un resultado providencial, pues pudo abrirse este
nuevo templo con todo lo necesario y las Escuelas igualmente, con los donativos
recibidos”.
Leídos en este nuevo contexto, los escritos de don Manuel no han perdido
vigor ni actualidad.
La predicación homilética.
“Todos catequistas”.
Grupo Asturias en
Palomares del Río.
El método catequístico.
Origen
La Institución de Misioneras Auxiliares Nazarenas (MAN), fue fundada por el
Beato Manuel
González García como Institución secular, como tal se dio a conocer en junio de
1933, y fue aprobada por la Santa Sede.
Está formada por consagradas a Dios, que, sin vivir en comunidad, son
llamadas a ser testigos de la vida que brota de la eucaristía, sal, luz y fermento en
medio del mundo viviendo el carisma eucarístico–reparador que el fundador recibió
del Espíritu Santo.
Fue Cofundadora, María Antonia González García, hermana del Fundador (*
26-11-1883 + 14-04-1964).
Unidas a la Congregación de Misioneras Eucarísticas de Nazaret, constituyen
una Institución secular de perfección evangélica, con voto de castidad y promesas de
pobreza y obediencia, reconocidos por la Iglesia
Fines
Lema
Fuente de espiritualidad.
En la participación de la celebración eucarística y la contemplación del rostro
de Cristo. Jesús – Pan de Vida – nos renueva y vivifica.
En la escucha de la Palabra nos dejamos transformar por Jesús, “Buena
Noticia” en evangelios vivos
En la comunión, Pan partido y repartido. Jesús nos abre a la fraternidad y nos
proyecta a la misión