Necesitas adquirir el hábito de gobernar tu energía. Siéntate varias veces al día y aquiétate.

Aquieta tu ser exterior. Esto permite que se te cargue con energía. Aprende a controlarla y a
ponerla en orden. Si quieres que tu energía esté quieta, mantente quieto. Si la necesitas activa,
ponte en actividad. Tienes que enfrentarte a las cosas y elevarte por encima de ellas. No hay
otra manera.

Meditación del Yo Soy

Nos sentamos cómodos e imaginamos que justo delante de la columna en el interior del cuerpo
hay un canal central, como si fuera un tubo transparente de unos 5 cm, ese tubo esta desde el
perineo hasta el chacra corona, o sea pasa por todos los chacras. Ahora vas a imaginar que por
ese tubo transparente sube una bolita de luz, de esa luz que tu sientas, y cuando inspiras dices
YO y la bolita sube del perineo hasta la corona, y cuando sueltas el aire dices SOY, y la bola baja
desde la corona al perineo, y así permaneces en tu respiración, Yo inspiras…y la bolita sube por
el canal central…Soy…espiras y la bolita baja por el canal central…Yo…Soy……Permaneces así por
unos 5 minutos por lo menos. Esto te va ayudar a ir activando tu canal central y a ir limpiándolo.

Permaneces así por unos 5 minutos por lo menos. Esto te va ayudar a ir activando tu canal
central y a ir limpiándolo.

Después dejas la bolita y respiras en el vientre con el Yo Soy, reposando tu respiración en el

vientre, Yo…inspiras hinchas el abdomen…Soy espiras el abdomen se deshincha….

Llevas ahora la atención al tercer ojo, vas a imaginar como una luz dorada entra por tu tercer
ojo y va en dirección a la nuca, y desde la nuca, imaginas un canal central también en el centro
de tu cabeza, que desde la nuca, sube has la coronilla, y al inspirar entra esa luz dorada por el
tercer ojo diciendo Yo….y al espirar sale fuerte esa luz dorada, por el canal central de la cabeza,
diciendo Soy….Yo….inspiras y la luz dorada entra por el tercer ojo en dirección hacia la nuca y al
expulsar el aire Soy…y la luz dorada sube fuerte por el canal central de la cabeza y sale por la
coronilla

Permaneces así por 5 minutos, esto va ayudar a calmar tu mente de tanto pensamiento y abrir
tu canal central de la coronilla.

Después dejar la luz dorada y llevas la atención al vientre, a sentir tu respiración calmada ahí,
con el Yo al inspirar y el Soy al espirar, y reposas en ese vaivén de tu respiración y el mantra Yo
Soy. Permanece así 2 minutos y después sueltas el mantra y simplemente observas tu
respiración pausada unos minutos, en silencio y ya das por terminada la meditación.

Permíteme mostrarte la diferencia entre la expresión “Dios” y las palabras “YO SOY”. Dios, tal y
como ha sido entendido por la mayoría de los seres humanos a lo largo de los siglos, es una
Omnipresencia en alguna parte. Las palabras “YO SOY” son el anuncio de la “Presencia de Dios
Individualizada” en el lugar del Universo donde te encuentras; la Autoridad, el Poder y la
Sabiduría en acción, cuando realizas esa invocación. Cuando se usa el “YO SOY”, se pone en
movimiento el Poder de Dios y el mismo actúa. No hay absolutamente nadie, ni el más desvalido
de los individuos que está acostado en una cama, que no pueda pronunciar estas palabras, y si
lo hace con suficiente firmeza y determinación, se levantará y caminará.

Cuando tú dices “YO SOY”, pones a Dios en Actividad. Cuando pronuncias las palabras “YO SOY”,
estás anunciando a la Divinidad o a la Deidad en el punto del Universo donde te encuentras, ¡y
no hay creación humana que tenga el poder para enfrentarse a estas Palabras!

Cuando dices “YO SOY” para realizar cualquier cosa que deseas, estás poniendo en movimiento
a la “Gran Presencia YO SOY” en acción para que cumpla este mandato, y tienes que sentir
profundamente que Ella contiene dentro de Sí el Poder Autosostenido Autoemanado y
Autoexpandido.

No se puede usar por mucho tiempo la afirmación “YO SOY”, aun intelectualmente, sin empezar
a sentir una convicción más profunda, pues: “YO SOY todas las cosas”. Piensa a menudo lo que
estas dos palabras maravillosas significan, y siempre une a su uso la afirmación: “Cuando digo
YO SOY, estoy poniendo en movimiento el Ilimitado Poder de Dios”. Así, recordándote esta
Presencia Invencible, mantienes la puerta abierta para que la Presencia “YO SOY” teja, en tu
manifestación exterior, toda Su Perfección.

Cuando estés consciente del “YO SOY”, que no te importe lo que haga nadie en este mundo; no
debe preocuparte otra cosa que tu propio mundo, ya que tú has realizado que el “YO SOY” está
en todo. No hagas caso a lo que diga nadie. Solo afirma, específicamente, lo que tú quieras
producir.

Una vez que has comprendido que “YO SOY es la Única Inteligencia y la Única Presencia
actuando”, es muy fácil ver que tienes el Cetro entre tus manos físicas y que, a través de esta
“Presencia YO SOY”, puedes hacer que todo lo que necesitas saber te sea revelado. Yo te aseguro
que esto no interfiere de ninguna manera con el libre albedrío de otro individuo, y que no se
comete ningún error ni se produce daño alguno al reclamar y pedir lo que es de uno, pues, al
hacer esto, no se está interfiriendo con nadie.

¡No te equivoques! ¡La Luz, la Substancia Electrónica Universal, ¡está a tu disposición y orden
para que la uses! Tu “Magna Presencia YO SOY” es un Ser Consciente de Sí mismo, y tu conciencia
exterior solo es una parte fragmentaria del mismo. Por lo tanto, puedes hablar con tu propio
Poderoso Maestro Interno tal como lo harías con un Padre amoroso que posee ilimitada Luz,
Amor, Riqueza, Poder, Salud, Felicidad o cualquier cosa que pudieras desear.

Todos necesitan recordarle constantemente a la conciencia exterior, que

cuando se dice “YO SOY” esto o aquello, se está poniendo a Dios en Acción, y que esto es la
propia Vida Individualizada, la Vida del Universo, la Energía del Universo, la
Inteligencia en el Corazón del Universo, gobernándolo todo, absolutamente todo. Es esencial,
vital, recordarle constantemente esta Verdad a la conciencia exterior. Esta conciencia
produce el entusiasmo gozoso que irá aumentando continuamente. Recuerda que al poner en
movimiento o energizar algo, instantáneamente actúa. En ningún momento debe haber una
suspensión en el gozo de este uso, porque es, absolutamente, el Sendero de la Completa
Maestría. Mantente en calma y sereno, sabiendo que Dios es la Única Inteligencia y Poder
actuando en tu mundo y en tus asuntos. “YO SOY” en ti es la Fuerza y la Sanación Autosostenida,
manifestándose en tu mente y en tu cuerpo. Esto te mantiene en mayor armonía. Invoca a Dios
y surgirá siempre la Energía para ordenar cada situación. Las personas que comprenden esta Ley
no están sujetas a la injusticia ni a las condiciones que trata de
imponerles el ser exterior de los demás. Recuérdale esto a menudo a la mente exterior. Asegú-
rate siempre de que no hay nada sino la Presencia y el Poder de Dios actuando en ti y en tus
asuntos.

Jamás podré ponderar demasiado la importancia de meditar en el “YO SOY”, tanto como sea
posible, como la Magna y Activa Presencia de Dios en ti, en tu hogar, en tu mundo y en tus
asuntos. Cada respiración es Dios en Acción en ti. Cualquier expresión que únicamente pueda
ser apropiada para ti,
estáincluyendo la Energía y la Actividad de la “Presencia YO SOY”. Utiliza el decreto: “YO SOY

la Pura Esencia Electrónica que llena mi mente y mi cuerpo, y Yo no acepto

nada más”. Dios en ti es el Maestro de todas las condiciones en todo momento. Di a menudo:
“YO SOY siempre la Victoriosa Presencia del Magno YO SOY”.

Mi corazón se regocija muchísimo ante la convicción con la cual algunos están sintiendo la
Majestuosa “Presencia YO SOY” que son. Haz todo lo posible por mantener tus sentimientos en
calma, serenos, y si no lo puedes hacer de otra manera, cierra tus ojos y contempla la Perfección
en todas partes. Vendrán más y más pruebas de la Maravillosa Presencia de esta Verdad. Oirás,
sentirás, verás y experimentarás esa maravilla de maravillas que como niño has vivido, y los
milagros producidos. Se han escrito descripciones y explicaciones del uso de esta “Poderosa
Presencia YO SOY” para tu beneficio.

Necesitas adquirir el hábito de gobernar tu energía. Siéntate varias veces al día y aquiétate.
Aquieta tu ser exterior. Esto permite que se te cargue con energía. Aprende a controlarla y a
ponerla en orden. Si quieres que tu energía esté quieta,
mantente quieto. Si la necesitas activa, ponte en actividad. Tienes que enfrentarte a las cosas
y elevarte por encima de ellas. No hay otra manera.

ANCLARSE EN LA PRESENCIA

Lo más importante para todo individuo es llegar a anclarse en la “Magna Presencia” y siempre
ser fortalecido por Ella, ya que se está valiendo de una Inteligencia, un Amor y un Poder
grandioso, poniéndolo en acción, de manera que este actúe primero en él mismo. Es
relativamente fácil resolver los problemas que vienen, pero yo te pregunto: ¿qué bien hace el
continuar resolviendo los problemas a menos que se tenga algo, en alguna parte, en que uno
pueda anclarse y que lo eleve por encima de la
consideración de cualquier problema? Encontrar tu “Presencia YO SOY” y anclarte en Ella es

lo único que debes desear hacer. Claro es, que hasta que llegues a este punto de anclaje firme
en tu “Gran Presencia YO SOY”, es necesario que resuelvas tus problemas a medida que estos
surgen; pero es mucho mejor entrar y liberar esta Poderosa Presencia, Energía y Acción que
resuelve los problemas antes de que vengan a ti. ¿No es esto más aceptable que encontrar, cada
mañana al despertar, estos problemas enfrente, mirándote a la cara, como si fuesen algo
realmente importante, pero que después de todo no lo son? Sin embargo, estarás de
acuerdo conmigo, que algunos de ellos, por lo menos para los sentidos externos, son de una
importancia tremenda.
Con tu Gloriosa Obediencia al Principio Divino de los Seres Creados, te mantendremos con
nuestra “Armadura de Protección Invencible” puesta, hasta que la intensidad de la misma Luz
en la cual entrarás haga innecesaria la armadura. ¿No vale esto todo el esfuerzo necesario para
que te muevas por siempre en esta Gloriosa Libertad? Entonces, cuando te despiertes por la
mañana, ya no encontrarás a estos visitantes. Mientras he hablado, te he mantenido en el foco
de Mi visión sin tu conocimiento, para que cuando oigas estas palabras, sientas la convicción
interna de las mismas, con un Poder que te agrade.

CONEXIÓN PERMANENTE

Con el privilegio que representa poder invocar la Luz a la acción, recuerda que te estás
ocupando del Poder del Universo, de tu Vida. No lo has sabido, pero a medida que entiendes tu
conexión con la “Presencia de toda la Vida” en Su Poderosísima Concentración de Acción, por
medio de tu determinación y atención, puedes invocar esta Concentración de Vida, Inteligencia
y Poder para que tome el comando de tus acciones y mundo, produzca Su Perfección y mantenga
Su Dominio allí. Solamente cuando llegas a entender este pleno Poder de la Vida del cual eres el
retrato externo, aquello que estimula tu cuerpo es esta Vida de la que estamos hablando y el
Poder que toca tu corazón, entonces comprendes que no puedes estar desconectado de Él y
seguir reteniendo tu cuerpo físico. Estás constante y eternamente conectado con la “Presencia
de toda Vida”;
y cuando digo “Eternamente”, eso es exactamente lo que quiero decir. Todo esto llega
directamente de la “Presencia de la Vida” que se encuentra sobre tu cabeza. ¡Piénsalo! No
necesitas buscar el contacto permanente con Dios, cuando ya sabes que lo tienes y que siempre
lo tendrás. Tu requerimiento estará acudiendo al Poder de la Vida, manteniendo la armonía en
tus sentimientos por un período de tiempo sostenido, hasta que la efusión de este gran Río de
la Vida brote y se lleve lejos de tu mundo toda la imperfección, implantando y sosteniendo en
él ese pleno Poder y Perfección de la Vida.

INVOCAR A LA PRESENCIA

Adonde sea que te dirijas, invoca los Poderes de tu “Presencia” a la acción

antes de entrar en contacto con otros: “¡Poderosa Presencia YO SOY! ¡Tú estás al mando

aquí! ¡No hay ser humano que pueda dominarme o influenciarme! Por lo tanto, ¡Tú asumes
el comando de esta mente y este cuerpo! ¡Tú actúas allí o hablas aquí!”. Encontrarás que no
habrá deseo alguno por parte de nadie de tratar de intimidarte o dominarte; pero cuando
comiences a ver estas manifestaciones, asegúrate
y cuida que ningún sentimiento de dominar a otros surja dentro de ti. Si lo haces, desharás tu
propia labor. Esto es tan definitivo y práctico como las matemáticas. Si continúas invocándola a
la manifestación, con la misma seguridad y firmeza, los Poderes y Perfección de la “Presencia”
tomarán el comando de tu cuerpo, y no solo producirán fortaleza y salud en dicho cuerpo, sino
que se derramarán dentro de tu mundo, y segura e invariablemente asumirán el Dominio en
todos tus esfuerzos; te harán exitoso y alguien a ser honrado entre los seres humanos. ¿Te das
cuenta de lo que significaría para ti, mientras te desenvuelves dentro de tu propio círculo
personal, ser honrado y admirado como un ministro de la
Justicia Divina? Di a menudo: “YO SOY el Poder que gobierna esta actividad”. Lo que sea que
pidas para ti mismo, pídelo para toda la humanidad. De esta manera estarás

cumpliendo con la Ley; pero cuidado, monta guardia sobre ti mismo de modo tal que, cuando
veas que comienzan a manifestarse tus logros, ninguna cualidad humana empiece a
expresarse. Cada vez que tu parte humana comience a defenderse, hazla callar y
mantenla quieta: “¡‘Poderosa Presencia YO SOY’! ¡Tú eres la Única Presencia en Acción aquí!
¡No permitas que Mi parte humana actúe o perturbe en modo alguno!”. Luego, al mantenere
armonioso en todas las condiciones, encontrarás que los Poderes de tu “Presencia” fluirán
dentro de tu mundo, armonizándolo; entonces, todo será una actividad gloriosa dondequiera
que dirijas tu atención, porque este es un Magno Poder. El estar consciente de que esta
“Presencia” se encuentra allí es hermoso; pero, para disponer de la Todopoderosa Acción de la
“Presencia de la Vida”, de modo que se haga cargo de tu cuerpo y mundo, es esencial la
Invocación a la Vida, que es todavía una acción mayor, la plenitud de la acción. Los seres
humanos no pueden producir ni hacer que se manifieste la “Presencia de la Vida” ni los Rayos
de Luz. Deben invocar a su “Presencia de Vida”, el “Poderoso YO SOY”, para que produzca esos
Rayos de Luz que proyectan la Energía, ya sea dentro y a través de su cuerpo, o directamente
hacia un objetivo determinado, para producir un resultado. Eso viene de Dios, la “Poderosa
Presencia YO SOY”.

La “Gran Presencia de Vida”, que no tiene límites, contestará tu llamado. ¡Debes hacer esta
invocación, este llamado! Jamás tendrás más de la Vida que lo que actualmente está fluyendo
hacia tu mundo, a menos que hagas esta invocación. La humanidad entenderá esto una vez que
tenga la oportunidad de hacerlo.

“YO SOY” LA PRESENCIA Comprenderás que la Presencia que late en cada corazón es Dios, que
la esencia que surge para vitalizar la forma exterior es Dios en Acción, que la actividad
que hace circular la sangre por todo el cuerpo es Dios. Procura mantenerte, tanto
como sea posible, en el gozo y entusiasmo de la “Presencia YO SOY”. Entrégale todo el Poder
y no mantengas preguntas en tu mente. Tira todo a los cuatro vientos, entrégaselo todo y
espera sus revelaciones mágicas. Entonces, amado estudiante, pon atención a lo siguiente: ¿No
ves cuán grande es el error de hundirse en la ignorancia del ser exterior y sentir dolor, molestias
o perturbaciones, todo creado por la ignorancia y actividad de ese ser, cuando unos momentos
de meditación te harán comprender que solo puede haber una Presencia, una Inteligencia, un
Poder, que es Dios actuando en la mente y el cuerpo? ¿Ves ahora cuán sencilla, aunque
Poderosa, es esta Conciencia dentro de ti, que puede descargar el pleno reconocimiento de la
Pura y Gran Actividad de Dios en la mente y el cuerpo, y que permite que la maravillosa y
trascendente Esencia
llene cada célula hasta derramarse? Vuélvete constantemente hacia Él. Ámalo, alábalo,

ordénale que surja en cada célula de tu cuerpo, en cada necesidad de la actividad externa.

La Maravillosa y Milagrosa Presencia puede resolver todas las cosas, todos los problemas, y
contestar todas las preguntas que necesiten revelación y
respuesta. Una grandiosa afirmación de inmensa ayuda es: “YO SOY la Milagrosa Presencia

trabajando en todo lo que necesito que se haga”. La libertad de todo dominio o interferencia
solo puede venir por medio de esa Presencia “YO SOY”, Dios en Acción, en la vida del
individuo. La primera premisa para cada estudiante de la Tierra que desea alcanzar el
logro permanente es recordarse a sí mismo: “YO SOY la Presencia y la Actividad Inteligente”.
Este es el primero de todos los principios; con él no puedes extraviarte jamás. El próximo paso
es determinar: “YO SOY la Presencia Iluminadora, por la cual nada que necesite saber me
puede ser negado, ya que YO SOY la Sabiduría, YO SOY la Perfección, YO SOY el Poder
Revelador que trae todo ante mí, para que pueda comprender y actuar de acuerdo”.

Afirma a menudo, ante cada cosa que quieras que se haga: “YO SOY la Presencia”. Esto abre
el canal para que actúe el Poder de Dios, trayéndote lo justo.

Tu “Poderosa Presencia YO SOY”, la Fuente de la Vida, es el Único Conocedor, la Única

Inteligencia, el Único Hacedor. La forma humana solo es el vehículo a través del cual Ella actúa.
Cuando entiendas esto y sepas que puedes volverte hacia la “Presencia” en momentos de gran
necesidad, Su Energía Inteligente, Su Valentía y Fuerza fluirán dentro y a través de tu cuerpo,
hacia el interior de tu mundo, para armonizar cualquier discordia de la manera más magnífica
que el ser humano haya atestiguado jamás. Por lo tanto, Amado, tú no estás sujeto por más
tiempo a las condiciones que existen en el mundo actual.

Texto extraído del libro: Sagrado Libro del Yo Soy, Saint Germain