EL 9º CONGRESO DE CCOO DESDE LA FSAP MADRID

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DE DONDE VENIMOS

Las personas que suscribimos este documento e impulsamos en nuestras

estructuras, las de FSAP Madrid, candidaturas para el proceso congresual que
recorrerá CCOO -desde la Confederación, siguiendo por las uniones territoriales y,
por ende, la Unión de Madrid, pasando por las Federaciones Estatales y
territoriales y alcanzando finalmente a las secciones sindicales-, participamos
hace cuatro años en los procesos congresuales defendiendo las posiciones y
candidaturas de la llamada Alternativa Confederal con el objetivo de defender
un modelo sindical tan activo en la sociedad como en la empresa, de propuesta y
movilización, participativo e integrador, frente al continuismo que representaba la
dirección confederal tras la crisis abierta en el periodo anterior.

Nuestro esfuerzo no ha sido baldío, en nuestra federación estatal hemos

contribuido decisivamente a consolidar un camino integrador, dando a luz en
el congreso de la Coruña, después de muchos años de desencuentro, una
comisión ejecutiva que integra a todas las posiciones. No nos limitamos a
conformar una comisión ejecutiva “pillando cacho” sino que nuestra gente se
implicó desde el principio con responsabilidades y secretarías en el trabajo diario
de la FSAP estatal que se desarrolla con un alto grado de consenso.

En la FSAP de Madrid predicamos con el ejemplo conformando en nuestro

último congreso, el de Alcobendas, una comisión ejecutiva que sumaba además de
nuestra posición, muy mayoritaria, al sector crítico y a la denominada mayoría
confederal. Desgraciadamente, en la FSAP Madrid mientras los esfuerzos de
integración con las otras sensibilidades funcionaron, fue nuestra propia sensibilidad
la que quebró cuando hubo de afrontarse el relevo de Luis Mariscal como
Secretario General, al no respetar parte de sus componentes la decisión colegiada
y mayoritaria de elegir estatutariamente a través del Consejo de la federación a
Julio Novillo como Sº. General y enquistarse en la C. Ejecutiva una crisis de
dirección paralizante.

Los desencuentros han sido muchos y trascendentes: sobre el gobierno de los

recursos sindicales o la negociación colectiva; sobre cómo integrábamos a todas
las posiciones con responsabilidad en los distintos ámbitos, o sobre
incompatibilidades. Respecto a este tema queremos resaltar reformas propuestas a
los estatutos de la Confederación y de la USMR que vienen a darnos la razón
sobre el procedimiento aplicado y que tanto ha sido cuestionado por algunos.

Los intentos para evitar la crisis también fueron muchos e infructuosos y,

finalmente, sólo cupo disolver el órgano con dimisiones para tratar de desbloquear
esa crisis de dirección y que, mediante congreso, fuera la afiliación quien pusiera a
cada uno en su sitio y habilitara con su voto a las personas que la represente en el
próximo órgano de dirección.

En la FSAP Madrid nuestra apuesta por la integración de sensibilidades ha

sido inequívoca tanto en su ejecutiva como en los sectores, también con

1
nuestra clara implicación en cogobernar el SAE estatal, pero también en esto
hemos padecido excepciones como la del SAA que, liderado por gente que se
reclamaba de nuestra sensibilidad, ha excluido sistemáticamente a una de las
posiciones refrendadas por la afiliación, primero dejándoles fuera de las
responsabilidades ejecutivas y después negándoles con excusas y coartadas que
sustituyeran en el órgano a quienes de su misma sensibilidad habían dimitido.

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EN QUÉ ESCENARIO ESTAMOS

Los procesos congresuales para la renovación de ideas y objetivos y de los

órganos de dirección de las distintas estructuras de la confederación se han
iniciado ya.

Las normas que regulan estos procesos son diferentes y aportan novedades
importantes y han contado, salvo en algún aspecto puntual, con un amplio
consenso de las tres sensibilidades confederales.

Ahora, las secciones sindicales realizan en una única asamblea el debate y la

elección de delegados a todos los procesos y no como antes, que para cada
proceso se hacía una asamblea. De septiembre a noviembre se harán las distintas
asambleas congresuales (donde debatimos ponencias y elegimos delegados para
el siguiente proceso) y los congresos (donde se aprueban ponencias y se elige
dirección) de comarcas hasta culminar en diciembre con el congreso confederal;
después se irán celebrando los demás congresos: en febrero la Unión Sindical de
Madrid Región y los sectores estatales, en marzo la federación estatal y los
sectores de Madrid y en abril la federación de Madrid.

Otras novedades, que buscan incrementar la participación, son la de desdoblar las

asambleas deliberativas y las de elección de delegados, y la de ligar los avales
necesarios para presentar candidaturas en las secciones sindicales al porcentaje,
no de los asistentes a la asamblea, como antes, sino del total del censo de la
misma.

Tres son las ponencias que como afiliados de la FSAP Madrid tenemos
oportunidad de debatir y enmendar, de la Confederación, de la USMR y de la
nueva Federación de Servicios a la Ciudadanía.

Altos grados de consenso alcanzaron en su aprobación inicial las ponencias

confederales y las de la USMR, especialmente esta última, mientras que las de la
Federación de Servicios a la Ciudadanía (FSC) contaron en el Consejo de la FSAP
con la abstención de críticos y el voto en contra de Andalucía y Castilla León,
fundamentado en la oposición a continuar con el proceso de fusión con la
Federación de Comunicación y Transporte. Una posición contraria mantenida en
su día, el del debate en el Consejo Confederal que finalmente dio el visto bueno
mayoritario a dicho proceso de fusión, por el propio Sº General de la
Confederación, Jose María Fidalgo, quien pidió el voto contrario al mismo.

Este proceso de fusión es determinante para la FSAP pues nos transformará, con
la suma de FCT, en la nueva Federación de Servicios a la Ciudadanía. Para

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nosotros un proceso necesario y positivo pues adecuará mejor CCOO a la nueva
realidad: de servicios públicos de gestión directa e indirecta, de servicios públicos y
privados, con regulaciones públicas diversas y algunas aún por definir, trabajadores
que prestan servicios similares o idénticos en ámbitos diferentes dependientes de
la misma administración pero con condiciones de trabajo muy dispares.

Las personas de FSAP vinculadas a nuestra posición que participaron en la

Comisión de la Ponencia de la FSC elaboraron en el mes de julio un documento 1
que expresa las razones de nuestro apoyo a la ponencia y al proceso de
fusión, por las que suscribimos el análisis de la evolución de los Servicios
Públicos en nuestro país, las estrategias en relación a los procesos de
externalización y privatización de servicios y el planteamiento que hace de nuestra
acción sindical, no sólo plenamente aplicables sino especialmente necesarios en
nuestra Comunidad, a tenor del campo de pruebas en que quiere convertirnos
Esperanza Aguirre y su Gobierno dando un acelerón en la privatización y la
externalización irreversible de servicios públicos ya anunciado en las ponencias del
Congreso del PP de Madrid de septiembre.

También trata el documento de responder a las zancadillas de los contrarios a la

fusión, al identificar con rigor que el requisito que arguyen de los estatutos de la
Federación de Comunicación y Transporte y que obligaría al voto favorable de
cuatro quintos de los congresistas para hacer realidad la fusión, es una trampa o
una lectura tendenciosa, pues tal exigencia solo puede ser entendida para fusiones
con organizaciones ajenas a CCOO, dado que las de federaciones ya integradas
en CCOO han de regirse, como es lógico, por los Estatutos confederales y estos,
como podéis comprobar, no establecen tal requisito.

Asimismo, el modelo organizativo, en lo relativo a la estructura y papel de los

sectores de la nueva Federación también ha suscitado polémica. La Federación de
Comunicación y Transporte se configura por 8 sectores consolidados en el ámbito
estatal (telecomunicaciones, postal, artes gráficas, ambulancias y otros, transporte
aéreo, ferroviario, marítimo, por carretera) articulados básicamente en torno a sus
grandes empresas, y una más desigual estructura sectorial en los ámbitos
territoriales. Justo al contrario que nuestra Federación, con solo dos sectores
estatales, SAE y Justicia, (a los que se incorporarán los hoy incipientes de Aguas e
Intervención Social) y de la estructura de la ONCE como sección sindical
intercentros, pero con una fuerte y completa estructura sectorial en los territorios.
En el caso de Madrid, los sectores del Estado, Autonómico, Local, Justicia,
Intervención Social y la SSI de la ONCE.

La propuesta de la Comisión de Ponencias es mantener la actual estructura de

sectores en este congreso y analizar detenidamente nuevos encuadramientos en el
futuro; asimismo, se establece autonomía a las federaciones territoriales para
organizarse, sin que los órganos y sectores tengan por qué ser miméticos a los
estatales.

1
“Impulsar la recta final de la fusión FSAP y FCyT”. Junio de 2008. Enrique
Gracia, Lola Gómez, Carmen López y Alfredo Valdés.

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La pertenencia de los sectores a la Comisión Ejecutiva ha sido objeto de
controversia hasta el final. Si bien no gozó del acuerdo unánime, como se ha dicho,
en lo que toca a Madrid todos los miembros del Consejo Federal y, por tanto, todos
los coordinadores de los sectores han respaldado la fórmula consensuada: una
Comisión Ejecutiva (que puede contar o no con una Comisión Permanente), un
Comité Federal compuesto por la C. Ejecutiva, las secretarías generales de las
federaciones territoriales y de los sectores estatales y un Consejo Federal
compuesto por el Comité Federal y personas elegidas por las federaciones
proporcionalmente a la afiliación de cada una.

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LOS OBJETIVOS Y LAS PROPUESTAS

Ahora, ante el nuevo proceso toca desde una posición responsable y de

compromiso apostar para que el debate, las propuestas y los acuerdos que se
alcancen permitan la conformación de nuevas y amplias mayorías manteniendo
como objetivo la integración de personas y sensibilidades y su implicación real y
efectiva con responsabilidades, leal y democrática en el trabajo diario. Que
apuesten por el incremento de la participación en la toma de decisiones y por algo
esencial, hacer más útil nuestra organización en beneficio de su afiliación y de los
trabajadores y trabajadoras reafirmando y acentuando nuestra vocación
sociopolítica, influyendo en la toma de decisión política sobre las cuestiones que
configuran el modelo social.

Apostamos en este proceso por la superación de los desencuentros que

arrastramos en la Confederación desde los últimos Congresos y para que se
consoliden en la Unión de Madrid y en la nueva FSC las dinámicas unitarias que en
el último período se han abierto paso, haciendo que esta última nazca haciendo
suya, como seña de identidad, la experiencia integradora de las distintas
sensibilidades y posiciones desarrollada en la FSAP desde su último congreso.
Apostamos por que este proceso alcance también a la FSAP Madrid y que su
contribución a la nueva FSC de Madrid no sea trasladar crisis.

Apostamos por ampliar los grados de consenso con que nacen los
documentos a debate y mejorarlos. Valgan como ejemplos, respecto al debate
confederal, el modelo de dirección que debería aminorar el peso del Secretariado
y aumentar el del Comité Confederal. Los criterios que deben regir las fusiones
de federaciones, siendo necesario matizar la demasiado esquemática propuesta
de excluir fusiones entre federaciones de servicios eminentemente privados con
federaciones de servicios eminentemente públicos, pues la realidad de la
prestación de servicios no responde a límites tan precisos. O, por último, la
necesidad de encuadrar las empresas, trabajadores y afiliados del sector de
Intervención Social en una misma federación –la FSC- y simplificar el caos de
cinco o seis federaciones actuando en un mismo espacio.

Respecto a la ponencia de la Federación de Servicios a la Ciudadanía, creemos

necesario ir más allá de la propuesta de coordinar estatalmente y proponemos
que los sectores Locales y Autonómicos se constituyan en sectores estatales
de la FSC en pie de igualdad con el resto de los que se proponen en atención a la
nueva realidad en materia de negociación colectiva que el EBEP permite para ellos

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y a la necesidad de articular estatalmente los dos sectores con mayor afiliación de
la actual FSAP.

Con todo, lo más importante para nosotros en este proceso, por su proyección
estratégica, es culminar con éxito el proceso de fusión para construir la
Federación de Servicios a la Ciudadanía en los términos políticos, sindicales y
organizativos recogidos en la ponencia, con las salvedades antes citadas, y su
extrapolación y adaptación al ámbito de la FSC de Madrid.

Para la FSC de Madrid defendemos un modelo organizativo que parte del

modelo consensuado en el ámbito estatal pues creemos acertado y equilibrado
el modelo dual de una estructura funcional que da a los sectores el protagonismo
que les corresponde en el ámbito de la acción sindical y de la negociación colectiva
y una estructura orgánica federal que articula de manera integral a todas las
personas afiliadas y a sus secciones sindicales, con una Comisión Ejecutiva
elegida en el Congreso, un Comité Federal conformado por la Comisión Ejecutiva y
las secretarías generales de los sectores y un Consejo Federal compuesto por el
Comité Regional y personas elegidas por los sectores proporcionalmente a la
afiliación de estos.

Este gran objetivo estratégico que es la fusión y con el que se comprometen las
personas que participan en nuestras candidaturas no termina en sí mismo, lo
concebimos como un instrumento que debe permitirnos trabajar más y mejor en
viejos y nuevos objetivos y reivindicaciones, expuestos en el informe aprobado
por el último Consejo de la FSAP Madrid, celebrado el 29 de enero y que
pueden resumirse en:

- La defensa los servicios públicos, de su extensión y calidad, frente a

privatizaciones y externalizaciones.

- La extensión de la representación sindical y de la negociación colectiva en

todas las administraciones y sectores y en las empresas prestatarias de servicios
públicos.

- La defensa de niveles mínimos comunes de calidad y estabilidad del empleo

y de las condiciones de trabajo en los servicios públicos, independientemente
de que su modalidad de prestación por las administraciones sea directa o indirecta,
mediante la negociación de convenios y acuerdos a aplicar a las plantillas y
mediante la negociación de los pliegos de condiciones técnicas que rijan las
adjudicaciones de servicios, que garanticen esos mínimos.

- El desarrollo en Madrid del Estatuto Básico del Empleado Público en toda su

extensión: tanto en la articulación de Mesas Generales en los distintos ámbitos
(Comunidad de Madrid, Administración Autonómica, Administración Local, cada una
de las administraciones locales) como en el desarrollo de leyes, empezando por la
de Función Pública, y de acuerdos en cada uno de ellos.

- La adaptación de la organización de CCOO a la realidad dinámica de la

prestación de servicios debe permitir una estructura de CCOO que atienda de
manera integral los servicios a la ciudadanía, sean de titularidad y/o gestión

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pública, privada o concertada, y supere –al menos en buena parte- el trabajo en
compartimentos estanco que nos ha hecho menos eficaces y, en ocasiones,
contradictorios. La nueva FSC no englobará todos los servicios a la ciudadanía
(Enseñanza, Sanidad o Actividades Diversas seguirán encuadrando, al menos por
ahora, una parte importante de ellos) pero supone un gran avance en la
racionalización de nuestra estructura y debe complementarse con nuevos
mecanismos de coordinación con esas federaciones, especialmente para procesos
de negociación colectiva compartidos o para la atención de colectivos fronterizos,
para avanzar aún más.

-Igualmente, la adaptación de la organización de CCOO a los nuevos espacios

de representación y negociación colectiva que el EBEP ha configurado, pues
es evidente la necesidad de que, donde contamos con un mismo espacio de
negociación y varias estructuras de CCOO, contemos con un mismo espacio
organizativo (si afecta sólo a nuestra federación no debe haber problema) o al
menos, donde no podamos por afectar a varias federaciones, que actualicemos los
mecanismos de coordinación y toma de decisiones.

- La adaptación de la organización de CCOO a los espacios de interlocución y

de acción sindical que la FSC va a configurar, generando espacios de
coordinación de secciones sindicales, sectores o categorías profesionales en
administraciones o servicios que, aunque no tengan hoy el mismo convenio
colectivo, pueden compartir presupuestos, reivindicaciones o espacios de
interlocución comunes.

-La implantación del sindicato en los centros de trabajo, creciendo en afiliación

y representación, como garantía de un sindicalismo confederal que impida
corporativismos a la postre negativos para los trabajadores y la ciudadanía.

Ahora es el momento de la afiliación, toca el debate y la elección.

Buen trabajo y buena suerte.
Septiembre de 2008

Luis Álvarez Jesús Bretón Berta Luxán

Ángel Franconeti Antonio Moreno Julio Novillo
Julio Pinto Acisclo Ramírez Inocencio Rial
Jose Ramón Roca Miguel Serrano Asunción Servant
Alfredo Valdés