Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
INTRODUCCIÓN
1.1. FUNDAMENTOS DEL ÁREA
Las Ciencias de la Naturaleza constituyen un conjunto de contenidos que se caracterizan por el estudio
empírico de la realidad natural: la materia no viva y los seres vivos en sus múltiples facetas, niveles de
organización y redes de relación. Se contraponen a las ciencias formales, como las Matemáticas o la Ló-
gica, por utilizar la observación y la experimentación para contrastar sus enunciados; y se distinguen de
otras ciencias empíricas por su objeto de estudio, que es el medio natural.
A lo largo de este último siglo, las Ciencias de la Naturaleza han ido impregnando progresivamente la
sociedad y la vida social. La ciencia ha venido a constituir una de las claves esenciales para entender la
cultura contemporánea, principalmente por sus contribuciones a la satisfacción de necesidades huma-
nas y a la solución de problemas sociales. Por eso mismo, la sociedad ha tomado conciencia colectiva de
la importancia de los logros conseguidos por las ciencias, y de su reflejo en elementos de tanta relevan-
cia personal y social como la salud, los recursos alimenticios y energéticos, el transporte y los medios
de comunicación.
Pero además de la importancia de la ciencia en la cultura actual, el desarrollo económico de sociedades
como la nuestra está cada vez más basado en el componente científico-técnico, y no tanto en los recur-
sos naturales como en el pasado. Este desarrollo económico y el consiguiente bienestar social logrado,
han supuesto en ocasiones también la aparición de graves problemas derivados de un uso no adecuado
de la Ciencia y la Tecnología: agresiones al medio ambiente, sometimiento y dependencia de países y
culturas menos evolucionados, agotamiento de las materias primas, armamentismo, desarrollismo y
consumismo, etc. La solución a los mismos ha de estar sin duda en un cambio de valores sociales y en
el desarrollo de una actitud más critica y responsable ante el uso de los conocimientos científico-técni-
cos.
Un somero análisis de la realidad socio-económica del País Vasco nos lleva a la conclusión de que su te-
jido económico tradicional está en reestructuración. Poseemos en efecto una economía netamente in-
dustrial y productiva que está en descenso, tal como ocurre en los sectores siderometalúrgico y naval,
el de los bienes de equipo, etc. Simultáneamente asistimos a una pérdida de importancia del sector pri-
mario (pesca, agricultura, minería...) sin que a su vez el sector servicios o terciario se haya consolidado
como alternativa.
La necesidad estratégica de mantener un sector productivo competitivo debe hacer que el subsector de
servicios a esa producción crezca, se mejoran las infraestructuras de comunicaciones, se realice una or-
denación del territorio equilibrada que al mismo tiempo atienda a la calidad de vida y a los impactos
ambientales.
Es necesario por tanto que la reestructuración y acomodación al nuevo espacio económico europeo se
haga desde una concepción global, dada la interrelación de los diferentes sectores económicos. En par-
ticular, el alcanzar una nueva situación de estabilidad y progreso será posible, entre otras razones, si
existe una fuerte base científico-técnica que permita nuestra integración en Europa evitando la depen-
dencia y la no competitividad (fomento de la investigación, aplicación de las nuevas tecnologías en sec-
tores básicos, etc.).
No existirá un País Vasco tecnológicamente avanzada si no se invierte de modo importante en el área
cultural y social, y tanto en un caso como en otro el sistema educativo es un factor clave de desarrollo.
Existe, en consecuencia, una intensa demanda social para que la educación obligatoria incorpore conte-
nidos de cultura científica, que forman parte de la cultura en general, y también para que la educación
obligatoria prepare las bases de conocimiento necesarias para posteriores itinerarios educativos, más
especializados en este ámbito, por parte de muchas alumnas y alumnos.
1.2. EL ÁREA EN EL CURRÍCULO
El conocimiento de las Ciencias de la Naturaleza tiene, sobre todo, claro sentido educativo porque dota
a los alumnos y a las alumnas de instrumentos para comprender la realidad natural y poder intervenir
sobre ella. Los contenidos de las Ciencias de la Naturaleza, tanto en sus elementos conceptuales y teó-
ricos, cuanto en los de metodología y estrategias de investigación, contribuyen en alto grado a alcanzar
los objetivos de la educación obligatoria de carácter tanto conceptual como procedimental y actitudinal.
Así pues, y en suma, lograr el acceso de las alumnas y los alumnos al mundo de la ciencia, en particular
a los contenidos de las Ciencias de la Naturaleza, es un objetivo primordial de la educación obligatoria
que este área trata de alcanzar, ayudándoles a adquirir los instrumentos necesarios para indagar la rea-
lidad natural de una manera objetiva, rigurosa y contrastada, e introduciéndoles en el valor funcional de
la ciencia, capaz de explicar y predecir fenómenos naturales cotidianos.
En la Etapa de Educación Secundaria Obligatoria el ámbito de las Ciencias de la Naturaleza, que estaba
integrado con otros ámbitos en una sola área de «Conocimiento del Medio» de la Etapa Primaria, se or-
ganiza como área independiente en correspondencia con el planteamiento más diferenciado, analítico y
metódico, que conviene a las alumnas y a los alumnos en unas edades, entre los 12 y los 16 años, en
que son crecientemente capaces de comprender conceptos, hacer razonamientos e inferencias de carác-
ter abstracto, operando sobre símbolos y representaciones formalizadas. Las disciplinas científicas más
tradicionales relacionadas con los fenómenos naturales que son objeto de estudio en esta área son las
de Física, Química, Biología y Geología. Estas siguen constituyendo el entramado básico del área. Ahora
bien, en las últimas décadas estas disciplinas han conocido un proceso de diversificación, dando lugar a
nuevas ramas, como la Bioquímica, la Geofísica, la Ecología, etc., que responden a la especialización
progresiva del saber científico. Por otro lado, y en estrecha conexión con ellas, hay otros saberes cientí-
ficos de indudable interés para la educación obligatoria, como son la Astronomía o la Meteorología, de
naturaleza claramente interdisciplinar. Deben ser incorporados al currículo elementos de algunas de
ellas.
Esas disciplinas, sin embargo, en la Educación Secundaria Obligatoria se reúnen en la unidad curricular
de una sola área, con la finalidad de mantener una aproximación de conjunto a los fenómenos natura-
les, en la que se subrayen las relaciones y conexiones entre los mismos. El planteamiento del área se
orienta a que las alumnas y los alumnos descubran la existencia de marcos conceptuales y procedi-
mientos de indagación comunes a los diferentes ámbitos del saber científico, adquiriendo, al mismo
tiempo, las ideas más básicas del conocimiento de la naturaleza. Se necesita para ello favorecer o gene-
rar en el alumnado una actitud positiva hacia la ciencia, que vean su utilidad para interpretar y tomar
decisiones ante sus problemas y los de su medio.
Este planteamiento curricular de área, no de disciplinas diferentes, no impide que en el último tramo de
la etapa las alumnas y los alumnos deban empezar a comprender las diferencias, en cuanto a objeto de
estudio y también en cuanto a procedimientos de indagación y de contraste, entre las diferentes disci-
plinas, al mismo tiempo que se profundiza en los conceptos fundamentales de las mismas. Es un plan-
teamiento, además, que deja la posibilidad, para ese último tramo, de un enfoque predominante de
área, o, por el contrario, un enfoque más estrechamente vinculado a las disciplinas que la integran.
1.3. RASGOS DEL ÁREA
La ciencia no es un conjunto acabado y estático de verdades definitivas e inamovibles, establecidas de
una vez por todas, y cuya enseñanza, en consecuencia, pueda consistir en una mera transmisión de co-
nocimientos que los alumnos y las alumnas se limiten a recibir pasivamente y a tratar de memorizar y
recordar. Por de pronto, la ciencia se halla en permanente estado de revisión y no solo de acumulación.
En ella, las teorías constituyen siempre conjuntos de hipótesis revisables; y, de hecho, unas teorías son
reemplazadas por otras con mayor potencial explicativo. La ciencia constituye una actividad siempre en
proceso, y así debe ser considerada más que como un conjunto de conocimientos adquiridos en un mo-
mento dado. Es, además, obviamente, una actividad humana y social, que tiene las características de
otras actividades colectivas y que, por ello, está sujeta a iguales condicionamientos sociales. Así la cien-
cia se ha impregnado de la división de roles sociales asignados a mujeres y a hombres, lo que explicaría
históricamente que las mujeres no aparezcan como partícipes del quehacer científico, salvo excepciones
que han sido categorizadas como personajes excepcionales y en otros muchos casos olvidadas. Se llega
así a interiorizar y conceptualizar este hecho como un rasgo del género femenino. Solo a partir de que
la mujer emerge a ámbitos no adscritos a su sexo, por causas que sería largo de analizar aquí, se dan
cambios por un lado en la integración de las mujeres como científicas, y por otro, aunque de forma inci-
piente, en el objeto mismo del quehacer científico. Esta perspectiva tiene unas derivaciones didácticas
evidentes; asumir esta nueva realidad debería ser una finalidad educativa que tendiera a superar la dis-
criminación de la mujer, y llegar a ser tanto sujeto como objeto de la ciencia.
Todo lo anterior lleva a que en la actual teoría del conocimiento científico, y pese a importantes discre-
pancias de naturaleza filosófica, predomine un concepto de ciencia como actividad constructiva que,
mediante aproximaciones sucesivas, formuladas en las teorías, procede a descripciones y explicaciones
cada vez más amplias, coherentes y ajustadas de los fenómenos. En esa actividad constructiva desem-
peñan un papel tanto los procedimientos de contraste con la realidad, la puesta a prueba de hipótesis
mediante la experimentación y la observación controlada, como los marcos mismos de referencia con-
ceptual, las hipótesis, modelos y teorías, que guían la investigación y que son contrastados en ella.
Esta concepción de la ciencia como actividad constructiva permite hacer un planteamiento didáctico que
realce el papel activo y de construcción cognitiva en el aprendizaje de la ciencia. En ese proceso, inclu-
so, desempeñan un papel los preconceptos, suposiciones, creencias y, en general, marcos previos de
referencia, de los alumnos y las alumnas. Estos construyen el conocimiento científico a partir de sus
ideas y representaciones previas, por lo general, de carácter intuitivo o correspondientes a los concep-
tos popularmente dominantes, ideas tal vez erróneas, y, casi siempre, en todo caso, incompletas y es-
quemáticas. La enseñanza de la ciencia consiste, en consecuencia, en promover un cambio en dichas
ideas y representaciones mediante procedimientos propios de la actividad científica en el tratamiento y
resolución de situaciones problemáticas, que conducirán progresivamente al entramado conceptual y
metodológico de la ciencia actual.
Todo esto modifica el rol del profesorado y del alumnado en la adquisición del conocimiento científico.
Las alumnas y alumnos son quienes construyen los conocimientos a partir de sus concepciones previas,
y ello de manera colectiva trabajando en pequeños grupos y viéndose implicados en una actividad in-
vestigativa en el tratamiento y resolución de las situaciones problemáticas planteadas. El profesorado es
quien guía y orienta este proceso favoreciendo la máxima interrelación entre los grupos e intentando en
última instancia que los alumnos y alumnas sean capaces de aprender por sí mismos de manera cre-
cientemente autónoma.
Las anteriores son grandes líneas acerca de las posibles estrategias en el proceso de aprendizaje y en-
señanza de las Ciencias de la Naturaleza, pero teniendo en cuenta que su aplicación no ha de ser de
forma mecánica, sino creativa y sabiendo adaptarlas a la realidad concreta del aula.
La enseñanza y el aprendizaje de las Ciencias de la Naturaleza en la Educación Secundaria Obligatoria
debe tener en cuenta igualmente las características psicológicas y evolutivas del alumnado y sus conoci-
mientos sobre los fenómenos naturales en el momento de iniciar esta etapa educativa. Dado el carácter
obligatorio de la misma, deberá considerarse como una continuidad de la anterior Educación Primaria,
enlazando con los conocimientos adquiridos en el último ciclo de ella. En ese continuo del paso de una
etapa a otra, se irán realizando aprendizajes por aproximaciones sucesivas, tendiendo al conocimiento
del medio con niveles gradualmente mayores de profundidad, objetividad y rigor científicos. Ello hará
que en la Educación Secundaria dicho conocimiento del medio se pueda realizar de forma más analítica
y específica, en la que los conocimientos físicos y biológicos adquieran independencia respecto a los so-
ciales y tecnológicos.
Así, por ejemplo, al comenzar la Educación Secundaria Obligatoria, las alumnas y los alumnos traen ya
algunos conocimientos adquiridos, sobre todo, en el área de «Conocimiento del Medio»: conocen los se-
res vivos presentes en el entorno, así como algunas de sus características, semejanzas y diferencias;
son capaces de identificar y diferenciar los principales componentes físicos y biológicos del medio; sa-
ben de la existencia de cambios y transformaciones, tanto en los seres vivos, como en la materia no
viva; y son conscientes de la influencia modificadora que ejercen los seres humanos en el medio en el
que viven. Estos y otros conocimientos han de ser consolidados y refinados en el área de Ciencias de la
Naturaleza. En ella se profundizará en las características universales que definen a los seres vivos anali-
zando su diversidad en términos de organización; se explorarán las leyes generales que rigen todos los
procesos de la materia, a la vez que las diferencias entre la materia no viva y la materia viva; se explo-
rarán las interacciones entre los distintos componentes de la materia y factores de energía, así como los
principios que rigen sus cambios y transformaciones; se valorará la influencia transformadora de los se-
res humanos sobre el equilibrio y el entorno natural, y la importancia de estar preparados para paliar
los riesgos derivados de la evolución y de los cambios irreversibles e inevitables.
Paralelamente al enriquecimiento y diversificación del marco conceptual, en el transcurso de la Educa-
ción Secundaria Obligatoria las alumnas y los alumnos adquirirán nuevos procedimientos para el estudio
de los fenómenos naturales y perfeccionarán los adquiridos en el transcurso de la etapa anterior. Así
pues, en la misma línea de profundización y diversificación de las adquisiciones anteriores, en el trans-
curso de esta etapa educativa se desarrollarán las actitudes -rigor, objetividad, flexibilidad, etc.- que
van a permitir al alumno y a la alumna aproximarse a lo que la sociedad considera como propio de un
talante científico .
Este cambio desde una aproximación más global y vivencial a otra más metódica, analítica y generaliza-
dora está respaldado por las características psicoevolutivas del alumnado de la Educación Secundaria
Obligatoria. En efecto, en esta etapa se inicia el tránsito del pensamiento concreto al pensamiento for-
mal del alumno y de la alumna, ampliándose con ello las posibilidades de la enseñanza y del aprendiza-
je de las Ciencias de la Naturaleza.
Los contenidos conceptuales se organizan en este área alrededor de cuatro ejes o núcleos de integra-
ción, que son los de SISTEMAS MATERIALES, CAMBIOS, INTERACCIONES y EQUILIBRIOS. Dichos con-
ceptos estructurantes se contemplan en esta propuesta en un marco conceptual elaborado a partir del
enfoque sistémico de la Naturaleza. En efecto, son conceptos que además de interesar por sí mismos,
facilitan el establecimiento de interrelaciones entre los diferentes contenidos conceptuales del área. Á
través de ellos, por otro lado, se reconoce la importancia de la adquisición de las ideas más relevantes
del conocimiento científico, y de su organización y estructuración en un todo articulado y coherente.
Pero una insistencia no menor que en los contenidos conceptuales corresponde a los contenidos proce-
dimentales. Al sistema conceptual altamente organizado de la ciencia están indisolublemente vinculadas
pautas y reglas que caracterizan métodos científicos de indagación de la realidad. Por ello, los alumnos
y las alumnas han de conocer y utilizar algunas estrategias habituales en la actividad científica a lo lar-
go de los diferentes tramos del proceso investigador: planteamiento de problemas y formulación clara
de los mismos; utilización de fuentes de información de manera sistemática y organizada; construcción
y uso de modelos; formulación de hipótesis y, en ciertos casos, la planificación y realización de experi-
mentos; recogida, organización y análisis de los datos: discusión de conclusiones; comunicación de re-
sultados mediante el oportuno informe.
Con todo ello se favorecen actitudes de curiosidad e interés por todo lo relativo al medio natural, a la
conservación del medio y también al cuidado del propio cuerpo, a la flexibilidad intelectual y a una dis-
posición de rigor metódico y crítico, al gusto por el conocimiento y la verdad, al aprecio del trabajo in-
vestigador en equipo, a la exigencia de razones y argumentaciones en la discusión de las ideas y en la
toma de posturas propias, a la capacidad de distinguir los hechos comprobados de las meras opiniones.
El área de Ciencias de la Naturaleza contribuye de forma decisiva al desarrollo y adquisición de capaci-
dades que se señalan en los objetivos generales de la Educación Secundaria Obligatoria, tales como:
una mejor comprensión del mundo físico, de los seres vivos y de las relaciones existentes entre ambos,
mediante la construcción de un marco conceptual estructurado; la adquisición de procedimientos y es-
trategias para explorar la realidad y afrontar problemas, dentro de ella de una manera objetiva, riguro-
sa y contrastada; el desarrollo de habilidades de comprensión y expresión correcta y rigurosa de textos
científicos y tecnológicos; la adopción de actitudes de flexibilidad, coherencia, sentido crítico, rigor y ho-
nestidad intelectual, y su aplicación a las relaciones humanas; el equilibrio personal, mediante el cono-
cimiento de las características, posibilidades y limitaciones del propio cuerpo, en cuanto organismo vivo,
cuya salud y bienestar depende de sus relaciones con el medio, al cual por otra parte, también es preci-
so cuidar y mejorar.
En particular, el Área de Ciencias de la Naturaleza ha de contribuir a la integración del alumno y de la
alumna en una sociedad altamente tecnificada, con grandes desajustes socioeconómicos y graves pro-
blemas medioambientales, como es la sociedad vasca. Por ello se han de tener en cuenta de manera
muy especial, las relaciones de los contenidos científicos con sus aplicaciones técnicas y las repercusio-
nes sociales de las mismas, en especial las que afectan al entorno y medio natural.
La organización curricular flexible de la Educación Secundaria Obligatoria, se traduce en el último curso
en la posibilidad de optar por alguna de las áreas; entre otras, el área de Ciencias de la Naturaleza.
Pueden citarse varias razones por las que se ha tomado dicha decisión. La primera de ellas se refiere al
hecho de que en este último curso se trabajarían los conceptos más complejos, así como las grandes
teorías integradoras de la Ciencia, que requieren del alumno y de la alumna una mayor capacidad de
abstracción. Por otra parte, la formación científica básica para todo ciudadano, puede quedar suficiente-
mente recogida en los tres primeros cursos de la etapa, estando este último más dirigido hacia las
alumnas y los alumnos que tengan interés en ampliar dicha formación científica. Por último, la optativi-
dad de este área va acorde con el carácter orientativo de dicho curso, ya que permite al alumno y a la
alumna elegir también en función de sus motivaciones.
No solamente es flexible la organización curricular, sino que este Diseño Curricular Base del Área de
Ciencias de la Naturaleza constituye el primer nivel de concreción presentándose como una propuesta
abierta y flexible. La misma es una primera aproximación a los elementos prescriptivos del currículo. En
el posterior análisis y debate de la presente propuesta se fijarán los aspectos prescriptivos del mismo,
quedando algunos apartados con una función orientativa, de forma que se deberán concretar en poste-
riores niveles curriculares, tanto a nivel de centro en el Plan Curricular de Centro, como a nivel de aula
en el desarrollo de Programaciones de Unidades Didácticas.
III. CONTENIDOS
3.1. PLANTEAMIENTO GENERAL
Esta Etapa de la Educación Secundaria (12-16 años) está comprendida en la enseñanza obligatoria en
la que dado su carácter comprensivo ha de primar más el valor terminal que el preparatorio. Por tanto
los contenidos de las Ciencias de la Naturaleza han de ser los de una Ciencia para todos, independiente-
mente de las posteriores elecciones y trayectorias personales de los alumnos y las alumnas.
Por otra parte, dentro de este Área se encuentran contenidos aportados por las disciplinas consolidadas
históricamente (Física, Química, Biología y Geología), así como por otras de carácter más interdiscipli-
nar (Astronomía, Ecología...). Estos contenidos deben relacionarse por una parte con el Área de Mate-
máticas y, por otra, con las áreas de Ciencias Sociales y Tecnología, dado que con estas dos formaba
parte del Área Conocimiento del Medio en la Educación Primaria y que además la propia ciencia ha de
contemplarse como una actividad humana colectiva y estrechamente ligada al contexto social.
Estas consideraciones, junto a otras de carácter psicopedagógico ya tratadas en la Introducción General
a la Educación Secundaria Obligatoria, conducen a optar metodológicamente por un tratamiento inter-
disciplinar en el Arca de Ciencias de la Naturaleza, que medie entre el tratamiento globalizador de la
Educación Primaria 9 el claramente disciplinar de los Bachilleratos.
.Así y todo, en el Primer Ciclo (12-14) habrá que ofrecer los contenidos más básicos y fundamentales
de las Ciencias, priorizando los aspectos comunes de las distintas disciplinas y proporcionando una pri-
mera introducción donde prime el ámbito de lo experiencial en la aproximación todavía cualitativa a la
realidad más inmediata, y en donde se tenga en cuenta las relaciones Ciencia-Técnica-Sociedad. Con
ello se pretende favorecer la curiosidad y el interés de los alumnos y las alumnas, así como su actitud
positiva hacia las Ciencias.
En el Segundo Ciclo (14-16) se profundizará en las ideas y conceptos más fundamentales, señalando la
distinción entre las diferentes disciplinas y sus diferentes cuerpos coherentes de conocimientos, pero
subrayando las conexiones y relaciones entre los mismos así como la existencia de procedimientos de
indagación comunes. La importancia de estos cuerpos coherentes de conocimientos o marcos teóricos
de las diferentes Ciencias que forman el Área de Ciencias de la Naturaleza, nos debe llevar a nivel di-
dáctico a prestar gran atención al cambio conceptual en las estructuras cognitivas de los alumnos y las
alumnas y a las actividades de indagación centradas en la resolución de situaciones problemáticas, sin
olvidar la adquisición, modificación o afianzamiento de valores y actitudes que se deben conseguir al
mismo tiempo.
Este tratamiento interdisciplinar, así como el objetivo de que los alumnos y las alumnas adquieran un
modelo interpretativo de la Naturaleza que refleje la estructura de las Ciencias y les permita compren-
der y explicar los principales aspectos de los fenómenos naturales a un nivel acorde con su desarrollo
evolutivo, al mismo tiempo que actuar de forma responsable y crítica, es lo que aconseja elegir un en-
foque sistémico de la Naturaleza (punto 3.2.2) .
Dicho enfoque posee un gran poder explicativo y es de gran utilidad a la hora de establecer los Bloques
de Contenidos, pues permite abordar los contenidos conceptuales en torno a ciertos ejes o núcleos de
integración. Puede ser igualmente útil a los profesores y a las profesoras y equipos docentes en la plani-
ficación y desarrollo del currículo. En efecto, la estructura principal de las Ciencias de la Naturaleza está
constituida por conceptos, pero no aislados, sino relacionados entre sí de forma organizada para dar lu-
gar a grandes sistemas conceptuales (teorías y modelos científicos). Pero además, dicho enfoque sisté-
mico no se reduce sólo a los contenidos de las Ciencias, sino que puede ampliarse al resto de los aspec-
tos de la realidad. En particular, y de gran utilidad para el desarrollo del currículo, es considerar que
también el pensamiento del alumno es sistémico (comprende a través de esquemas y redes de concep-
tos), como lo es el aula, el centro escolar y hasta nuestra propia intervención didáctica (p. 4).
Para facilitar la selección y significación de los conceptos a enseñar, así como la labor docente de pro-
gramación de los mismos, se presenta un modelo o marco conceptual que se irá desarrollando progresi-
vamente. A partir de su primera formulación .en el enfoque sistémico de la Naturaleza (punto 3.2.2), se
sintetiza en diez ideas clave (p. 3.2.3), de las cuales se extraen los seis conceptos fundamentales (p.
3.2.4). Con estos últimos se elabora una primera síntesis que se presenta de forma visual como una red
o trama conceptual. Dicha trama se irá posteriormente ampliando para el Área en toda la Etapa, para
cada núcleo de integración y finalmente para cada bloque de contenidos. Desarrollos posteriores son
también posibles, pero han de realizarse ya en el Proyecto Curricular de Centro y en las Programaciones
de aula (segundo y tercer nivel de concreción de este Diseño Curricular), por parte del profesorado y
equipos docentes.
Dicho proceso de sucesivas elaboraciones mediante tramas conceptuales, puede facilitar el trabajo de
programación docente al favorecer las imágenes mentales de los conceptos y su representación, así
como las relaciones entre los mismos y por tanto su comprensión. Además las tramas conceptuales sir-
ven como andamios facilitadores del conocimiento al permitir establecer múltiples relaciones de cada
nuevo concepto adquirido con los ya existentes. Su papel de inclusores y su gran flexibilidad, permiten
tanto visualizar el marco o modelo interpretativo, como parcelas más reducidas del mismo y más próxi-
mas al desarrollo en el aula. En los sucesivos niveles de concreción de este Diseño Curricular Base pue-
de aumentarse el nivel de complejidad conceptual, utilizando para ello esquemas y mapas conceptuales
en los que los conceptos derivados se relacionen ya con ejemplos concretos.
De todos modos las agrupaciones de contenidos que se realizan en torno a los bloques son una infor-
mación para el profesorado de lo que se debería trabajar durante toda la Etapa, pero no constituyen un
temario ni su orden de presentación es una secuenciación. Incluso, dado el carácter abierto y flexible de
esta propuesta, no todos los contenidos aquí presentados habrán de impartirse, respetando en todo
caso los contenidos que en su momento se establezcan como prescriptivos. Para las situaciones concre-
tas del centro y del aula, el equipo docente y cada profesor o profesora seleccionará los contenidos que
han de formar parte de cada Unidad Didáctica, teniendo que elegir de cada bloque aquellos que consi-
dere más adecuados.
3.2. TRATAMIENTO DE LOS CONTENIDOS
3.2.1. Tipos de contenidos y su relación
Entendiendo que todo aquello que se aprende en la escuela puede ser enseñado, y que es mejor hacer
explícito todo el currículo, los contenidos' que se contemplan en todas las áreas curriculares, incluida la
de Ciencias de la Naturaleza, van a ser de tres tipos:
- Valores, actitudes y normas.
- Hechos, conceptos y principios.
- Procedimientos.
La educación, como actividad intencional que es, se dirige primariamente hacia unos objetivos que no
pertenecen al mundo de los hechos, sino al orden de las finalidades, es decir, en todo sistema educativo
hay unas intencionalidades educativas y unos valores sociales, políticos, económicos, religiosos, etc,
que las sustentan o dirigen. No hay ligazón directa entre conocimientos científicos y valores, en el sen-
tido de que son dos campos irreductibles. La ciencia no basta para fundamentar el comportamiento éti-
co, aun cuando desde la Ciencia y la Tecnología, así como desde otros campos del saber, se aportan
nuevos valores como el conocimiento objetivo, la dimensión crítica, etc.
Los valores son proyectos ideales, creencias, opciones personales que mueven la conducta, orientan la
vida y marcan la personalidad. Constituyen un elemento fundamentador y unificador de un proyecto
cultural, no siendo objetivo exclusivo de un área específica o de un momento determinado dentro del
currículo, sino como el contexto global que dinamiza y da significación a la totalidad de las áreas.
La creación de un sistema de valores consensuado es una de las tareas básicas del Proyecto Educativo
de Centro, al cual habrá que hacer referencia cuando se elijan los contenidos, la forma de tratarlos,
etc., en el proceso de elaboración del Proyecto Curricular de Centro. Es por este motivo por lo que se
dice que estos contenidos son los que fundamentan a los demás.
Dentro de los contenidos del primer tipo, los valores son la base para promover determinadas actitudes,
es decir, un concepto más amplio, de forma que un determinado valor puede generar un conjunto más
específico de actitudes, que serían una forma .concreta de reaccionar ante el mismo. Al mismo tiempo,
los valores se instrumentalizan en las normas, que determinarían pautas de conducta sobre cómo debe
hacerse una cosa o cuál es el comportamiento que debe seguirse. Por ejemplo, si se selecciona como
fundamental el valor de trabajar en equipo, conllevará seleccionar una serie de actitudes que lo desa-
rrollen, como puede ser el aceptar las opiniones de los demás. También se deberán arbitrar una serie de
normas como, por ejemplo, el cumplir las tareas asignadas o respetar el turno de intervención.
De la misma forma, los contenidos conceptuales son el referente a la hora de seleccionar los contenidos
de tipo procedimental, dado que la selección de los mismos vendrá mediatizada por el tipo de conceptos
que se van a trabajar. Los procedimientos de la ciencia o propios de la metodología científica, sólo tie-
nen sentido en el marco de cuerpos de conocimientos como punto de partida y de término respectiva-
mente del proceso de construcción del conocimiento científico.
Si enseñar y aprender ciencia consiste básicamente en enseñar y aprender su estructura, es necesario
convenir que las pautas y reglas que caracterizan el método científico de indagación de la realidad apa-
recen en dicha estructura indisolublemente vinculadas a un sistema conceptual altamente organizado y
a una cierta disposición actitudinal. Sin atención a los contenidos conceptuales, la metodología científica
misma queda desvirtuada.
Dada la amplitud y diversidad de los contenidos que deben contemplarse en este Área, es preciso selec-
cionar algún tipo de contenido en torno al cual se organice el diseño curricular, aún cuando siempre se
hayan de tener en cuenta todos los tipos señalados anteriormente.
El elegir uno u otro como organizador dependerá del análisis que se haga del contenido del Área. Pero
teniendo en cuenta que la estructura principal de las Ciencias de la Naturaleza está constituida por con-
ceptos y teorías a través de las cuales entendemos e interpretamos la realidad, se ha tomado como tipo
de contenido organizador del currículo el correspondiente al ámbito conceptual, y ello a través de los
conceptos más básicos y estructurantes que nos servirán de ejes o núcleos de integración de todos los
demás.
En el establecimiento de cuáles son dichos conceptos estructurantes y su relación mutua, es de gran
ayuda el enfoque sistémico de la Naturaleza que se propone a continuación.
3.2.2. Enfoque sistémico de la Naturaleza
El objetivo de las diferentes Ciencias de la Naturaleza es el conocimiento organizado y sistematizado del
mundo material. Su objeto de estudio son las cosas concretas (tanto la materia no viva como los seres
vivos), pero éstas no suelen estar aisladas sino relacionadas formando lo que denominamos sistemas
materiales. De hecho la Naturaleza podemos entenderla como un conjunto de sistemas de complejidad
creciente, que se integran unos en otros y están en continuo cambio y evolución.
La Ciencia Clásica, sobre todo la Física, ha sido fundamentalmente reduccionista, asumiendo como axio-
ma metodológico básico el que para estudiar un objeto hay que reducirlo a sus partes y éstas estudiar-
las aisladamente. Este principio de análisis ha sido enormemente fecundo, pero se manifiesta claramen-
te insuficiente en aquellas disciplinas que como la Biología se ocupan de objetos más complejos que los
puramente mecánicos. El estudio de estos no puede reducirse al de sus partes (el todo es más que la
suma de las partes) y tan importante como el análisis es la integración de las diferentes partes en el
todo, la síntesis.
El enfoque sistémico se desenvuelve en un contexto intermedio entre el reduccionismo, que limita el co-
nocimiento de un objeto al de sus partes, y el globalismo u holismo, que considera al objeto como un
todo pero indefinible a partir de sus partes. El enfoque sistémico en síntesis, considera como central el
concepto de objeto como un todo o sistema, pero éste es definible en función de sus partes y de las re-
laciones existentes entre las mismas. Es además el enfoque más idóneo y coherente con la vía metodo-
lógica interdisciplinar que se ha adoptado para esta etapa.
Se desarrollan a continuación los conceptos o supuestos básicos de este enfoque sistémico de la reali-
dad, agrupándolos en cuatro grandes apartados que servirán posteriormente como ejes o núcleos de in-
tegración para organizar en torno a ellos los Bloques de Contenidos conceptuales.
SISTEMAS MATERIALES
Una cosa u objeto es simple si no tiene partes y compleja si tiene por lo menos dos partes o componen-
tes. A su vez, una cosa compleja puede ser un agregado o un sistema. En el primer caso sus partes no
están relacionadas y en el segundo sí.
Se puede considerar como un sistema material a todo objeto complejo formado por partes o componen-
tes que están relacionados de tal modo que el objeto se comporta como una unidad. En consecuencia,
en todo sistema material se distinguen una composición formada por las partes del sistema, una estruc-
tura constituida por la trama de relaciones que vinculan a las partes en la unidad que es el propio siste-
ma y con los elementos de fuera del mismo, y un entorno o medio constituido por el conjunto de cosas
concretas que no forman parte del sistema considerado pero que actúan sobre el mismo o son modifica-
das por él.
El enfoque sistémico de la Naturaleza ve a la misma como un conjunto de sistemas, pero éstos no son
independientes sino que se relacionan entre sí formando oros sistemas más complejos (son pues sub-
sistemas del gran sistema Naturaleza). A la gran diversidad de sistemas materiales presentes en la Na-
turaleza se añade la característica de que ésta es un todo organizado, es decir, las relaciones entre los
sistemas naturales lleva al establecimiento de otros sistemas con mayor nivel de organización y con una
estructura más compleja. De hecho podemos considerar la existencia en la Naturaleza de una «je-
rarquía de niveles de organización» de complejidad creciente.
En cada nivel de organización encontramos una unidad fundamental de constitución de los sistemas
materiales, la cual permite describir la organización y comportamiento de los mismos: átomo, molécula,
sustancia pura, célula, organismo, Población, comunidad, ecosistema, Tierra, Universo. Paralela a dicha
jerarquía de niveles de complejidad se puede considerar otra con las diferentes disciplinas.
Las diferentes Ciencias de la Naturaleza para estudiar ésta, empiezan por acotar el objeto, considerando
sólo una parte de la misma, lo que hemos denominado sistema material. Lo que diferencia a las distin-
tas Ciencias es la elección de los sistemas materiales objeto de estudio (sistemas físicos, químicos, bio-
lógicos, geológicos, etc.) o bien el diferente enfoque o criterio en el mismo (sal común como cristal en
Geología, como sustancia pura en Química, como nutriente en Biología, etc.). Sin embargo en todas
ellas hay métodos de indagación bastante comunes. Se puede considerar por tanto a los diferentes
cuerpos coherentes de conocimientos de las ciencias, como aproximaciones complementarias en el in-
tento de comprender la Naturaleza. El enfoque sistémico lleva a contemplar tanto la compartimentación
de la realidad para su análisis, como la visión global y de conjunto, lo cual favorece la comprensión del
entorno por parte del alumnado y su desenvolvimiento en el mismo.
En cada nivel se tienen propiedades características y leyes peculiares. Así por ejemplo, los sistemas quí-
micos tienen componentes físicos (átomos o moléculas) pero que interactúan de manera peculiar, a sa-
ber, entrando en reacciones químicas. Estos procesos satisfacen leyes que no son físicas sino químicas,
si bien tienen su raíz en propiedades físicas de los reactivos, tales como sus números atómicos. Lo quí-
mico está pues arraigado en lo físico y emerge de éste con leyes propias. Algo similar ocurre con los or-
ganismos: son sistemas químicos con propiedades emergentes, entre las cuales figuran las leyes típica-
mente biológicas, tales como las leyes genéticas y las ecológicas. Los seres vivos constituyen sistemas
cuyas propiedades básicas, tomadas una por una, son físicas o químicas, pero que se combinan de ma-
nera peculiar en los organismos. Estas combinaciones emergentes de propiedades se llaman leyes bio-
lógicas, y son características de la vida.
Una característica importante de los seres vivos y de los sistemas sociales es que son sistemas abiertos
y necesitan para mantener su organización intercambiar constantemente materia y energía con el en-
torno. Esta característica los diferencia de los sistemas físicos y químicos que son normalmente siste-
mas cerrados y sólo pueden intercambiar energía con el entorno pero no materia. La mayor sencillez de
estos últimos explica el porqué el enfoque sistémico es más utilizado en Biología o en las Ciencias So-
ciales que en Física o Química, donde el enfoque analítico y reduccionista es normalmente el predomi-
nante.
INTERACCIONES
Se ha definido un sistema material como un conjunto de elementos que se relacionan entre ellos y con
el medio. El enfoque sistémico pone especial énfasis en estas relaciones; son efectivamente dichas rela-
ciones o interacciones las que determinan tanto la organización o estructura del sistema, como sus
cambios y estados de equilibrio.
Desde un punto de vista físico toda la materia del Universo está sometida a interacciones, no existe
pues materia aislada. Además las relaciones entre la materia son acciones mutuamente recíprocas, es
decir, son interacciones En Física la interacción se describe con el concepto de fuerza y la enorme diver-
sidad de las mismas puede reducirse a cuatro básicas : electromagnética, gravitatoria y nucleares (débil
y fuerte).
En otros niveles de la jerarquía de mayor complejidad, las interacciones físicas no son adecuadas para
describir las relaciones existentes entre los elementos de un sistema y de éstos con el medio, y se han
de introducir nuevos conceptos. Por ejemplo, el enlace químico entre átomos y moléculas; las relaciones
de competencia, depredación, simbiosis, etc. entre organismos; o la contaminación en el caso de la es-
pecie humana en su relación con el medio ambiente.
Estas diferentes interacciones son específicas de cada nivel, y aunque basadas en las de los niveles in-
feriores, no se reducen a ellas (emergencia). Además, en los sistemas dinámicos, las ligaduras o rela-
ciones no son permanentes; al interactuar entre sí sus componentes dan lugar a nuevos sistemas con
nuevas relaciones, como ocurre por ejemplo en las reacciones químicas o en los seres vivos.
CAMBIOS
La idea de cambio es algo natural por habitual. De hecho los alumnos y las alumnas en edades tempra-
nas, y todavía en la Educación Secundaria Obligatoria, tienen la tendencia a prestar atención a los esta-
dos de transición de un sistema (cambios) y no a los estados constantes o de equilibrio. Parece que
para ellos el cambio exige una explicación, mientras que las situaciones de equilibrio, dado que no se
produce en ellas modificaciones en el transcurso del tiempo, no requieren tal explicación: las cosas son
así.
El cambio en un sistema material es debido a las interacciones entre los componentes del sistema, o de
éstos con el entorno, las cuales hacen que el sistema tienda de un estado inicial de equilibrio a otro
nuevo en el que el juego de las interacciones logra una situación más favorable o de mayor estabilidad.
Dicha situación es a su vez mantenida o alterada por las mismas interacciones.
Dada la gran diversidad de cambios, sería conveniente clasificarlos, siendo un criterio adecuado el de
las disciplinas tradicionales: cambios físicos, químicos, biológicos y geológicos. Otro aspecto a tener en
cuenta es que, pese a que las interacciones son las responsables de los cambios, aquéllas no siempre
son fáciles de detectar o de tratar, motivo por el cual se introduce otro concepto importante que es la
Energía. Dicho concepto permite describir y analizar los cambios, pues en todos ellos se produce una
transformación de energía de unas formas a otras, de tal manera que su valor total permanece cons-
tante. El poder explicativo, unido a la importancia social, hacen de la energía un concepto clave en las
Ciencias de la Naturaleza.
EQUILIBRIO
Los cambios experimentados por los sistemas materiales hacen tender a éstos hacia un estado de equi-
librio donde su estabilidad sea mayor. Sin embargo los estados de equilibrio posibles son diferentes de-
pendiendo de la complejidad de la materia.
En efecto, en los sistemas aislados o cerrados, como son la mayoría de los sistemas fisicoquímicos, se
tiende hacia lo que se denomina el equilibrio termodinámico, caracterizado por una distribución al azar
de los elementos del sistema (máxima entropía o desorden) en el que se han eliminado todas las inho-
mogeneidades, y el sistema mismo permanece dinámicamente inerte (mínima energía). Es lo que ocu-
rre por ejemplo en el equilibrio térmico o eléctrico, donde las diferencias de temperatura o de potencial
eléctrico se anulan, deja de producirse todo cambio y el sistema permanece en ese estado de forma in-
definida.
Sin embargo, los sistemas abiertos pueden alcanzar estados estables normalmente duraderos lejos del
equilibrio termodinámico, los cuales son radicalmente diferentes de los anteriores. En efecto, dichos sis-
temas no tienden hacia el máximo desorden y la mínima energía, sino que contradiciendo aparente-
mente la segunda ley de la Termodinámica, pueden incrementar su complejidad y organización y vol-
verse más energéticos. En este caso se crean nuevas estructuras y tipos de organización, pero a costa
de importar constantemente energía disponible del medio y de exportar al mismo el desorden creado.
Es el caso típico de los sistemas biológicos y sociales, los cuales mantienen su organización a costa de
un intercambio constante de materia y energía con el entorno (estado estable dinámico).
Además los sistemas lejos del equilibrio termodinámico no mantienen su estabilidad de forma indefinida
como los que han alcanzado dicho equilibrio termodinámico. Tienen umbrales superiores de estabilidad
dinámica que, en un medio cambiante, tienden a ser transgredidos. Se producen entonces inestabilida-
des críticas, entrando los sistemas en una fase transitoria la cual termina, bien con la desorganización
del propio sistema o con el encuentro de un nuevo estado estable dinámico. Los sistemas dinámicos,
dado que no son jamás estructuralmente estables, muestran pues una evolución como respuesta para
restablecer el equilibrio. Esta evolución se realiza a través de saltos e impulsos comparativamente brus-
cos, y siempre en el sentido de creciente tamaño y complejidad, de niveles de mayor organización, ma-
yor dinamismo y más estrecha interacción con el medio .
La diversidad de niveles de organización, y dentro de cada nivel la diversidad de propiedades y formas
de presentarse de los sistemas materiales, surge como respuesta a la diversidad de interacciones y de
entornos, en el intento de adaptarse la materia a los mismos y aumentar así la estabilidad.
El paradigma evolucionista al que conduce este enfoque modifica la clásica concepción determinista de
las leyes científicas. Los sistemas dinámicos como los seres vivos o los sistemas sociales no están so-
metidos a una determinación rigurosa, la evolución es siempre posibilidad, nunca destino. El curso de la
misma es lógico y comprensible, pero no está predeterminado. Además en este enfoque sistémico de la
realidad la evolución es un proceso continuo; todos los niveles de la evolución (físico, biológico y social)
están relacionados y uno prepara el terreno al siguiente. En este marco general comprendemos mejor
nuestra propia situación y el papel que jugamos; el hombre y la sociedad no son extraños en el Univer-
so, sino que forman parte de la gran cadena de la evolución, siendo el horizonte de la evolución huma-
na ya no principalmente genético sino sociocultural.
3.2.3. Ideas clave
El marco teórico anteriormente expuesto se basa en un enfoque sistémico de la Naturaleza, elegido por
su gran poder explicativo y por su utilidad sobre todo en la planificación y desarrollo del currículo por
parte de los profesores y las profesoras y equipos docentes.
Dicho enfoque se utilizará para organizar los contenidos conceptuales de las Ciencias de la Naturaleza
en la Educación Secundaria Obligatoria, previo a lo cual se sintetiza en torno a 10 ideas clave o ideas
fundamentales:
1. En la Naturaleza todas las cosas se pueden considerar como Sistemas materiales o componentes de
Sistemas materiales (Sistema Material = componentes + estructura u organización + entorno).
2. Existe una gran diversidad en los Sistemas Materiales , tanto por sus formas de presentarse, propie-
dades especificas y composición, como por la existencia de una «jerarquía de niveles de organización»
de complejidad creciente.
3. Pese a ello, en todos los Sistemas Materiales se encuentra una unidad de constitución, la cual varía
según el nivel de la jerarquía. Esta unidad se manifiesta también en la organización o actuación del Sis-
tema como un todo.
4. Las unidades que componen un Sistema Material en un determinado nivel interactúan entre sí y con
el medio. Dichas interacciones son específicas del nivel de organización, englobando las de niveles infe-
riores pero apareciendo otras nuevas o emergentes.
5. Las interacciones producen cambios o transformaciones en los Sistemas Materiales, tanto en sus
componentes como en su organización o estructura.
6. Todo cambio va asociado a una transferencia energética, siendo la energía de un Sistema Material
una magnitud que mide su capacidad para producir o experimentar cambios o transformaciones.
7. Las transformaciones de los Sistemas Materiales llevan a éstos hacia el equilibrio o hacia un estado
estable (equilibrio dinámico).
8. El juego de las interacciones hace que todo estado estable se desestabilice con el tiempo (al menos
en los sistemas abiertos lejos del equilibrio termodinámico como es el caso de los seres vivos), por lo
cual el Sistema Material desaparece como tal o evoluciona hasta alcanzar un nuevo estado estable. Esta
evolución implica. en el caso de los seres vivos un aumento de la organización y de la complejidad.
9. Los seres humanos son agentes de transformaciones en los Sistemas Naturales (sobre todo debido al
desarrollo científico-técnico), pudiendo modificar tanto su composición como su organización.
10. La Humanidad tiene responsabilidad en parte de los cambios y desequilibrios que ocurren en la Na-
turaleza. Nuestra cultura es cada vez más quien controla y guía la evolución.
3.2.4. Contenidos fundamentales
Para la selección de contenidos de los tres tipos hemos seguido una serie de criterios, eligiendo los que
son:
- más generales y básicos, siguiendo una jerarquía conceptual
- más adecuados al nivel de desarrollo psicoevolutivo del alumno.
Y por tanto, teniendo en cuenta los dos anteriores,
- más funcionales, contemplando la relación de la Ciencia con la Técnica y la Sociedad
A continuación exponemos los contenidos fundamentales que se han seleccionado y que vertebran el
Área, para lo cual se ha tenido en cuenta la relación entre los tres tipos de contenidos antes citada (p.
3.2.1.), así como el enfoque sistémico de la naturaleza (p. 3.2.2.) y las ideas clave que de él se derivan
(p. 3.2.3.).
a) Valores, Actitudes y Normas fundamentales
1. Respecto a la comprensión y expresión de mensajes científicos.
2. Respecto a la resolución de problemas y al proceso de construcción del conocimiento científico.
3. Respecto al trabajo en equipo.
4. Respecto a la relación de la Ciencia con la Técnica y la Sociedad.
5. Respecto al cuidado y conocimiento del propio cuerpo y el desarrollo de la autoestima.
6. Respecto al medio.
b) Conceptos fundamentales
El marco conceptual resultante que se presenta como ayuda para la planificación
de las Ciencias de la Naturaleza en la Etapa Secundaria Obligatoria, contiene seis
conceptos fundamentales:
- Sistemas materiales.
- Interacciones.
- Energía.
- Cambios
- Equilibrio
- Evolución
c) Procedimientos fundamentales
1. Estrategias y/o habilidades que se deben poner en práctica en el proceso de aprendizaje.
2. Estrategias específicamente relacionadas con el aprendizaje científico.
3.3. BLOQUES DE CONTENIDOS
Como se ha expuesto en el punto 3.1., la elección y organización de los Bloques de Contenidos se reali-
za dentro del marco conceptual presentado y su desarrollo se continúa ahora con una trama o red con-
ceptual para las Ciencias de la Naturaleza en la Educación Secundaria Obligatoria.
Después de la fundamentación del enfoque sistémico de la Naturaleza (p. 3.2.2) y su síntesis en diez
ideas clave (p. 3.2.3), se expresan los seis conceptos que se consideran fundamentales (p. 3.2.4). La
primera trama o red conceptual presentada como síntesis inicial en ese mismo p. 3.2.4., se amplía aho-
ra destacando los conceptos más fundamentales que van a servir como núcleos de integración de cara a
la elección y desarrollo de los diferentes Bloques de Contenidos
De los seis conceptos fundamentales tan sólo se elegirán como núcleos de integración cuatro: SISTE-
MAS MATERIALES, CAMBIOS, INTERACCIONES y EQUILIBRIOS. En su elección se ha tenido en cuenta
tanto la lógica de las ciencias como consideraciones de tipo psicopedagógico.
En efecto, siendo el objetivo fundamental de las Ciencias de la Naturaleza el estudio de los Sistemas
Materiales y sus Cambios, en el proceso de enseñanza y aprendizaje se han de tratar en un primer nivel
de manera más descriptiva y experimental. En un segundo nivel se deberá abordar la causa de los
Cambios en los Sistemas Materiales, que no es otra que las diferentes Interacciones; y también las si-
tuaciones de Equilibrio que dichos sistemas pueden alcanzar. Así mismo, es en este nivel donde han de
abordarse las grandes teorías integradoras de la Ciencia que dan coherencia al cuerpo de conocimientos
anteriormente adquirido.
Este último concepto es tal vez el más difícil de tratar, pero parece fundamental por su carácter integra-
dor que permite entender en el marco conceptual evolucionista presentado contenidos tales como la sa-
lud o los ecosistemas.
Los dos conceptos fundamentales que no se han considerado como núcleos de integración son la Evolu-
ción, porque su dificultad hace aconsejable limitarse en esta etapa a una introducción a dicho concepto
a nivel de las especies vivas, y la Energía, que si bien es un concepto que permitiría ser tomado como
núcleo integrador, sobre todo en la confección de Unidades Didácticas, se ha considerado aquí como in-
cluido en el de Cambios.
En el apartado 3.2.1. se puede ver cuál es la relación entre los diversos tipos de contenidos y la impli-
cación que unos tienen para los otros. Una de las consecuencias de ello es que hay valores, actitudes y
normas que trascienden a varios conceptos, es decir, que se deberá educar en un valor independiente-
mente que se trabaje un concepto u otro. Por ejemplo, el aceptar la provisionalidad del conocimiento
científico no puede ser exclusivo de un concepto determinado, sino que dicho valor deberá estar pre-
sente en todos y cada uno de los conceptos científicos que se desarrollen.
De igual forma, hay procedimientos que serán adecuados para utilizarlos en el aprendizaje de diversos
conceptos, como la emisión de hipótesis, por ejemplo. Sin embargo, otros procedimientos, al igual que
algunos valores, pueden ser más adecuados para tratarse en relación con ciertos conceptos concretos.
Por esto a continuación se exponen los tres tipos de contenidos en forma de listados separados, para
que la visión global de los mismos sea más clara. No por ello deberán ser tratados de forma indepen-
diente en el transcurso del proceso de enseñanza y aprendizaje, siendo necesario relacionarlos en los
siguientes niveles de concreción, tanto en el Proyecto Curricular del Centro como en la elaboración de
Unidades Didácticas.
Hay que insistir en que estos listados no pueden ni deben constituir un temario, ni se pueden considerar
una secuenciación de contenidos, labores ambas que no son tareas de este primer nivel de concreción
curricular, sino de los sucesivos.
Bloques de contenidos sobre valores, actitudes y normas
Se exponen a continuación los valores que se consideran básicos para el área de' Ciencias de la Natura-
leza en esta etapa, así como el desarrollo de las actitudes y normas que conllevan.
La mayor parte de los mismos ya están presentes en la Etapa Primaria, por lo que en ésta se deberá
profundizar más, no tanto en los valores en sí, sino en las acciones encaminadas a su consecución.
Muchos de los valores que se exponen no son exclusivos del Área de Ciencias de la Naturaleza, por lo
que su educación debe contemplarse en coordinación con el resto de áreas y como tarea del equipo de
profesores y profesoras.
Apartado 1: valores, actitudes y normas respecto a la comprensión y expresión del conocimiento cientí-
fico
La precisión en los diversos aspectos del trabajo científico, fundamentalmente en cuanto a la utilización
correcta del lenguaje y en concreto del lenguaje científico deben presidir el proceso de enseñanza y
aprendizaje a lo largo de toda la etapa, tanto en las tareas sencillas como en aquellas más complejas.
Estos valores, como los siguientes irán relacionados de forma directa y global con ciertos procedimien-
tos.
1.1.- El lenguaje científico debe utilizarse con propiedad, eligiendo en cada caso los instrumentos ade-
cuados.
- Desarrollar el gusto por el rigor y la precisión en la recogida y utilización de fuentes de información.
- Valorar de forma crítica las diferentes informaciones que se recojan.
- Interesarse por programas de medios audiovisuales o periodísticos que versen sobre las Ciencias de
la Naturaleza.
1.2.- Es necesaria la existencia de un lenguaje científico universal, reconociendo el derecho de cada
pueblo o comunidad a utilizar sus propias formas de expresión y representación.
- Aceptar las normas internacionales existentes en los diferentes campos de las Ciencias de la Natura-
leza.
Apartado 2: valores, actitudes y normas respecto al trabajo con problemas y al proceso de construcción
del conocimiento científico
La imagen de la ciencia como verdad absoluta y no sometida a revisiones, así como las ideas existentes
sobre los científicos y su trabajo o su pretendida neutralidad, ajena al resto de acontecimientos socia-
les, políticos, económicos, etc., está muy arraigada en los alumnos y en la sociedad en general. Estos
valores irían en la línea de romper dicha imagen y presentar otra más cercana a la realidad.
2.1.- El conocimiento científico no debe ser tomado como algo dogmático sino como algo sometido a
continua revisión y cambio.
- Aceptar la provisionalidad del conocimiento científico y de nuestro propio conocimiento.
- Interesarse por los cambios habidos en ciertas Teorías a lo largo de la Historia de la Ciencia y las ra-
zones de los mismos.
- Interesarse por las teorías científicas más relevantes de la actualidad.
2.2.- Se debe considerar como uno de los aspectos fundamentales del trabajo científico el trabajo con
problemas.
- Reconocer la existencia de problemas y la necesidad de trabajar con ellos.
- Acostumbrarse a utilizar estrategias propias del trabajo científico en la resolución de problemas. Va-
lorar en el proceso la importancia de emitir hipótesis, diseñar experiencias y realizarlas, elaborar con-
clusiones y contrastarlas con las hipótesis inicialmente emitidas.
- Ser conscientes de la importancia de observar normas de seguridad en la realización de las activida-
des.
- Desarrollar hábitos de orden y limpieza en la realización de actividades y en la utilización de mate-
riales.
- Reconocer la importancia de los modelos y teorías científicas.
Apartado 3: valores, actitudes y normas respecto al trabajo en equipo
El individualismo y sus consecuencias están presentes en muchas de nuestras actuaciones sociales y
educativas. Las repercusiones a nivel de interacciones entre los iguales son, a veces, importantes y de-
mandan una actuación educativa concreta. Los roles respecto al sexo, a la coordinación entre alumnos,
etc., son los que se intentan clarificar en este apartado.
3.1.- El conocimiento científico se construye de forma colectiva
- Aceptar y promover el trabajo en grupo sobre proyectos comunes.
- Potenciar actividades de coordinación.
3.2.- El trabajo en pequeño grupo potencia la coordinación entre los miembros y ayuda al avance co-
mún mediante el reparto de tareas, así como contribuye a valorar las aportaciones propias y ajenas.
- Ser consciente de la necesidad del diálogo y practicarlo, como la mejor manera de solucionar discre-
pancias.
- Aceptar el reparto de tareas como algo intrínseco al trabajo en equipo.
- Aceptar las opiniones de los demás valorándolas de forma crítica.
- Ser consciente de la existencia de distintos puntos de vista ante las diferentes cuestiones que se
planteen.
- Ser consciente de las distintas tareas asignadas según los roles sociales a los distintos sexos e in-
tentar superar dicha distinción.
Apartado 4: valores, actitudes y normas respecto a la relación de la ciencia con la técnica y la sociedad
(C/T/S).
Uno de los objetivos de esta etapa educativa es el conseguir desarrollar unas capacidades de análisis y
crítica ante determinadas situaciones o hechos, dirigidas al desarrollo de una personalidad y criterios de
opinión propios sobre los diversos acontecimientos. En el campo de las Ciencias de la Naturaleza cada
vez surgen más polémicas en cuanto a la utilización de algunos saberes y avances científicos para te-
mas tecnológicos, sociales o industriales. Los avances habidos en áreas como la Genética, los nuevos
materiales, la energía nuclear, etc. deben ser conocidos y valorados por los alumnos dependiendo de
sus ideas, intereses y nivel evolutivo.
4.1.- Los avances de la Ciencia o su desarrollo no es algo ajeno a la realidad social, sino que está en re-
lación directa con ella.
- Interesarse por la Historia de la Ciencia para reconocer la relación entre los sistemas sociales y los
avances tecnológicos, enclavando estos dentro de su época histórica.
- Ser conscientes de la interrelación de las CCNN con el resto de las Ciencias.
- Valorar la "neutralidad" de la Ciencia y el uso que se hace de ella.
- Valorar críticamente las aportaciones de las Ciencias de la Naturaleza en la formación integral de la
persona.
4.2.- Algunos avances tecnológicos y científicos pueden ser perjudiciales para los seres humanos y el
medio natural, debiendo ser valorados críticamente, sobre todo aquellos que tienen una repercusión en
el entorno próximo, o en si mismo.
- Valorar de forma crítica los avances científicos más relevantes en la actualidad.
- Ser consciente de la existencia de fuentes de contaminación y de la necesidad de controlar las prác-
ticas que contribuyen a la misma.
4.3.- La Ciencia ha contribuido de forma eficaz a la mejora de la calidad de vida: salud, alimentación,
transportes…
- Reconocer los avances científicos más significativos que suponen un mayor bienestar para el ser hu-
mano.
- Interesarse por los avances científicos y tecnológicos que se están produciendo en el País Vasco y
valorarlos de forma crítica.
4.4.- Son necesarias normas sociales de seguridad e higiene. Deben conocerse y respetarse.
- Respetar las instrucciones de utilización de medios y aparatos peligrosos.
- Respetar las normas de seguridad e higiene del laboratorio, clase, centro, comunidad…
Apartado 5: valores, actitudes y normas respecto al conocimiento y cuidado del propio cuerpo y el de-
sarrollo de la autoestima
Esta etapa es fundamental para el desarrollo de la autoestima y el afianzamiento del propio autocon-
cepto. En la misma se producen cambios físicos y psicoafectivos fundamentales, tanto en relación a la
familia como a sus propios compañeros y a la comunidad educativa, los cuales influirán decisivamente
en su personalidad futura. El área de Ciencias de la Naturaleza no es la única en la que hay que interve-
nir a este nivel, pero presenta aspectos curriculares que facilitan la inclusión de determinados valores
relacionados con la sexualidad, la salud e higiene, las diferencias personales… Muchos de los contenidos
llamados transversales al currículo tienen relación directa con estos valores.
5.1.- Los hábitos de alimentación, cuidado personal e higiene son factores que influyen decisivamente
en la salud, tanto a nivel personal como colectivo, así como en el medio.
- Ser consciente de las limitaciones del propio cuerpo.
- Controlar actividades que puedan suponer un riesgo para la salud, evitando aquellas que supongan
un especial riesgo, como el consumo de drogas.
- Valorar críticamente los hábitos de alimentación, cuidado personal e higiene, tanto a nivel individual
como colectivo.
- Interesarse por prácticas preventivas en el ámbito de la salud.
5.2.- La sexualidad es una actividad natural en la mujer y en el hombre.
- Aceptar la existencia de diferentes modos de practicar la sexualidad, respetándolos.
- Criticar y rechazar conductas sexuales que supongan perjuicios para otras personas, tanto a nivel fí-
sico como psíquico.
- Valorar la importancia de una educación sexual.
5.3.- Las diferencias personales no deben ser causa de discriminación.
- To
PROCEDIMIENTOS
- Utilización de tablas de propiedades para comparar sistemas materiales.
- Planificación de experiencias para separar fases y componentes de un sistema
- Utilización de técnicas de separación de fases y componentes en sistemas homogéneos y heterogéne-
os
- Clasificación de Sistemas Materiales por orden de complejidad
- Preparación de disoluciones, planificación y desarrollo de experiencias dirigidas a estudiar el poder di-
solvente del agua.
- Reconocer las propiedades de elementos y compuestos químicos importantes por su utilización en el
laboratorio, la industria y la vida diaria.
- Realización de medidas de diversas magnitudes y manejo de instrumentos de medida.
VALORES, ACTITUDES Y NORMAS
- Valorar el importante papel que juegan las disoluciones en la vida cotidiana
- Valorar la importancia de los métodos de separación de fases y componentes de diversos Sistemas
Materiales
- Valorar la importancia social, económica y política de determinadas sustancias que se utilizan en la
vida cotidiana y que han jugado un papel relevante a través de la Historia.
- Reconocer la necesidad de respetar las normas de seguridad en la manipulación de sustancias y en la
utilización de instrumental y materiales de laboratorio
- Adquirir hábitos de orden y limpieza en el trabajo
- Ser consciente de la interrelación de las Ciencias de la Naturaleza con el resto de las Ciencias y en
particular con la Técnica y la Sociedad.
Orientaciones didácticas para el bloque 1.1.
- CARACTERIZACIÓN DE SISTEMAS MATERIALES:
A) Formas de presentarse
Parece conveniente comenzar el estudio de la materia a partir de las características más relevantes de
la misma, es decir, los diversos ESTADOS DE AGREGACIÓN y sus propiedades generales (con especial
énfasis en las del estado gaseoso, ya que nos servirán posteriormente para introducir el estudio sobre
estructura de la materia). Las investigaciones didácticas al respecto, han puesto de manifiesto la dificul-
tad que supone para las alumnas y los alumnos el estudio del especial comportamiento de los gases.
Este aspecto habrá de ser tenido en cuenta a la hora de elaborar estrategias adecuadas de enseñanza.
Entre las ideas previas que tienen los alumnos y las alumnas sobre los gases son de destacar: la no di-
ferenciación clara entre el aire y un gas, el considerar a los gases como algo «casi» inmaterial, etc. Por
esta razón sería recomendable plantear actividades que cuestionen la validez de dichas ideas, diseñan-
do algún experimento de sencilla realización, con objeto de constatar que los gases tienen masa, ocu-
pan un volumen, se encuentran a una determinada temperatura y son compresibles.
B) Propiedades
La gran diversidad de sistemas en cuanto a propiedades y composición debe llevar a plantear la necesi-
dad de una clasificación de los mismos, y por tanto, a la adopción de unas pautas de trabajo a la hora
de resolver los problemas que se plantean, que coincidirán en lo esencial con las del trabajo científico.
De las PROPIEDADES GENERALES de la materia cabe destacar, entre otras, la masa y el volumen, sien-
do conveniente iniciarse en la realización de medidas de ambas magnitudes para el caso de muestras
sólidas, líquidas (agua) y gaseosas (aire), que permitan adquirir una progresiva destreza en la utiliza-
ción de instrumentos de medida: balanza, probeta, pipeta, jeringa, etc.
Algunas de las PROPIEDADES CARACTERÍSTICAS que van a resultar posteriormente útiles para caracte-
rizar las sustancias son: la densidad (conceptualmente complicada para las alumnas y los alumnos, que
la confunden con el peso), las temperaturas de fusión y ebullición, la imantación, conductividad térmica
y eléctrica.. .
C) Composición
En lo que respecta a la COMPOSICIÓN de los sistemas objeto de estudio, se puede centrar la atención
en los diversos procedimientos experimentales de SEPARACIÓN DE FASES Y COMPONENTES (imanta-
ción, evaporación, filtración, cristalización, decantación, destilación, cromatografía...) en SISTEMAS HO-
MOGÉNEOS Y HETEROGÉNEOS, lo cual permitirá establecer múltiples relaciones entre Ciencia, Técnica y
Sociedad, valorando críticamente las mismas y el hecho de que el avance y las aportaciones de la Cien-
cia no son ajenos a la realidad social.
Con objeto de profundizar en el estudio de la composición de los Sistemas Materiales, se podrán tratar
los sistemas homogéneos, comenzando por el estudio de las DISOLUCIONES a través de su amplia utili-
zación en la vida diaria, para pasar posteriormente a estudiar su caracterización, formas de separación
de componentes, tipos y formas de expresión de la concentración (porcentajes en peso y volumen, y
gramos/litro).
El estudio de las disoluciones, va a permitir a los alumnos y a las alumnas la progresiva familiarización
con el trabajo de laboratorio, a través de la preparación de disoluciones acuosas en las que los solutos a
utilizar sean sustancias tan cotidianas como la sal y el azúcar, por ejemplo. Con objeto de fomentar el
trabajo creativo de los alumnos y de las alumnas se pueden plantear actividades a través de un proble-
ma concreto a resolver, por ejemplo: preparación de cierto volumen de disolución acuosa de un medica-
mento con una determinada concentración. Conviene remarcar aquí que la resolución de problemas es
uno de los aspectos fundamentales del trabajo científico y de la construcción del conocimiento en las
Ciencias, teniendo en cuenta los valores al respecto.
A la hora de tratar las relaciones entre cantidades de soluto, disolvente y disolución para calcular con-
centraciones, se deberán tener en cuenta las dificultades que plantea la utilización del razonamiento
proporcional. Por esta razón parece conveniente introducir progresivamente estos aspectos.
A través del conocimiento de las propiedades características de determinados sistemas materiales (den-
sidad, temperaturas de fusión y ebullición, conducción eléctrica...) se podrá llegar a adquirir una con-
cepción del significado del concepto SUSTANCIA PURA. No hay que olvidar aquí las dificultades implíci-
tas en dicho concepto por ser «sustancia» un término utilizado en el lenguaje cotidiano con unas conno-
taciones muy diversas, mientras que en el lenguaje químico tiene un significado muy específico y ceñido
al contexto de esta Ciencia. Convendría partir, por tanto, de las ideas que tienen las alumnas y los
alumnos sobre el término «sustancia» previamente a la introducción del concepto químico. En este sen-
tido sería conveniente hacer mención a sustancias puras de interés en la vida cotidiana, en contraposi-
ción a otros materiales que no lo sean, teniendo en cuenta en su estudio los aspectos de utilidad, segu-
ridad/peligrosidad, beneficio/riesgo que su utilización plantea. El trabajo debería enfocarse hacia valores
y actitudes que desarrollen el gusto por el rigor en el uso del conocimiento científico.
La clasificación en COMPUESTOS y ELEMENTOS, vendrá determinada según sea o no posible su trans-
formación en sustancias más simples.
La distinción entre los conceptos de elemento y compuesto implica haber tratado previamente la noción
de cambio químico, lo cual significa una conexión con el Bloque 2.1 («Los cambios en la materia no
viva»). Esta diferenciación puede ponerse de manifiesto a través de experiencias como la combustión
del magnesio o la electrolisis del agua.
No deben ser estudiadas las propiedades de todos los elementos. Podrán elegirse las propiedades de
aquellos elementos que son constituyentes esenciales de los seres vivos, las de los elementos que for-
man parte de las sustancias cotidianas y las de otros menos cercanas al alumnado pero que tengan in-
terés en medicina, agricultura, industria, etc.
Teniendo en cuenta las propiedades de los elementos, se puede realizar una primera aproximación, a
nivel experimental, a su clasificación en metales y no metales. También convendría estudiar las regula-
ridades de comportamiento de determinados elementos, poniendo de manifiesto la utilidad que esto tie-
ne de cara a simplificar su estudio. Asimismo, debería hacerse referencia (nombre, símbolo y propieda-
des más importantes) a aquellos elementos químicos que tengan un especial interés por entrar a formar
parte de sustancias conocidas o cotidianas, entre los que cabe destacar a los que son constituyentes
esenciales de los seres vivos.
Otra de las grandes dificultades que se citan con frecuencia en la investigación didáctica, es la diferen-
ciación entre los conceptos de compuesto químico, disolución y mezcla. Tal discusión debería centrarse
en la comparación de propiedades características en dichos casos, lo cual puede constatarse a través de
la experimentación, comprobando cómo una sustancia pura, como el agua destilada por ejemplo, tiene
una determinada densidad y temperatura de ebullición (a presión constante), mientras que en una diso-
lución de agua salada estas propiedades características varían en función de la concentración.
- INICIACIÓN AL LENGUAJE QUÍMICO
Los elementos que deberán ser nombrados y formulados serán aquellos a los que se ha hecho referen-
cia anteriormente.
Por lo que a los compuestos respecta, no tiene tanto sentido hacer una clasificación debido a la gran di-
versidad de los mismos, y bastaría con limitarse a conocer (a través de sus propiedades y aplicaciones
más importantes) aquellos que tengan una relación directa con los conocidos previamente por los alum-
nos y las alumnas y aquellos que sean utilizados en el trabajo experimental. Conviene conseguir aquí
una progresiva familiarización con el LENGUAJE QUÍMICO mediante la expresión de las fórmulas de las
sustancias puras a las que se haga referencia. En este sentido, la existencia y la necesidad de un len-
guaje científico universal debe ser aceptada y valorada de forma positiva.
La comprensión del significado de las fórmulas químicas está en relación con conceptos que se tratan en
otros Bloques (1.3. «Estructura y organización de la materia», 2. 1. «Los cambios en la materia no
viva» y 3.1. «Interacciones en la materia no viva») e implica una noción elemental de «valencia» de un
elemento (como «capacidad de combinación de cada átomo del mismo con átomos de Hidrógeno»).
La labor experimental implícita en el desarrollo del Bloque, servirá por una parte para adquirir hábitos
de orden y limpieza en el trabajo, y por otra para resaltar la importancia y la necesidad de establecer
unas normas de seguridad en el desarrollo de dicha labor.
ios.
PROCEDIMIENTOS
- Interpretación de movimientos de la vida real
- Elaboración e interpretación de gráficas distancia recorrida-tiempo y velocidad-tiempo
- Interpretación de fenómenos y procesos térmicos de la vida cotidiana
- Identificación y descripción de los principales fenómenos ópticos y sonoros de la vida cotidiana
- Descripción de algún instrumento musical
- Identificación y descripción de los fenómenos ópticos más importantes
- Planificación y realización de experiencias sencillas sobre propagación rectilínea, reflexión y refracción
de la luz, descomposición de la luz, mezclas de colores, interacción de la luz con distintos materiales,
etc.
- Utilización de instrumentos ópticos y sonoros
- Detección de anomalías audiovisuales y su corrección
- Interpretación de problemas de la vida cotidiana relacionados con fenómenos de electricidad y magne-
tismo
- Elaboración de un modelo elemental sobre el funcionamiento de un circuito
- Construcción y manejo de circuitos eléctricos sencillos de corriente contínua
- Análisis de la influencia de los aparatos eléctricos en nuestra sociedad.
- Identificación en procesos sencillos de transformaciones físicas y químicas.
- Planificación y realización de experiencias sencillas con reacciones químicas teniendo en cuenta las
normas de seguridad.
- Observación de la influencia de ciertos factores sobre la velocidad de reacción.
- Interpretación de ecuaciones químicas sencillas.
- Análisis de la utilidad y de la incidencia medio ambiental de las reacciones químicas.
- Adquisición de diversas técnicas que permitan abordar los diseños experimentales: mapas, fotos, dia-
gramas bloque, aparatos de laboratorio
- Relacionar los cambios con los agentes geológicos causantes de los mismos
- Reconocer en el relieve las huellas de los agentes geológicos
- Uso de lecturas y vídeos sobre las diferentes explicaciones que se han dado al problema de los cam-
bios en la tierra.
- Diseño de modelos sobre deformaciones, volcanes, etc.
- Trabajar con materiales audiovisuales
- Realizar modelos propios con maquetas, posters, etc.
VALORES, ACTITUDES Y NORMAS
- Interesarse por el conocimiento del medio natural más próximo y de la importancia del mismo en to-
dos los ámbitos de la vida
- Reconocer y valorar la importancia que en el desarrollo tecnológico-industrial y en la calidad de vida
tiene la electricidad.
- Sensibilizarse ante ciertas acciones humanas pasadas y actuales que provocan cambios abusivosos en
la Naturaleza: desertización, destrucción de suelos, etc.
- Desarrollar una actitud crítica ante creencias muy arraigadas en el sentido común acerca de los cam-
bios geológicos
- Ser consciente de la influencia de los volcanes y terremotos en la vida de los pueblos, aceptándolos
como fenómenos naturales inevitables y valorando la importancia de su prevención y las medidas que
se adoptan al respecto
- Valorar críticamente los avances científico-técnicos más significativos, tanto en el País Vasco como en
otras comunidades humanas.
Orientaciones didácticas para el bloque 2.1.
- LOS CAMBIOS FÍSICOS
Se puede iniciar en el Primer Ciclo el estudio de los CAMBIOS DE POSICIÓN (movimientos) poniendo de
manifiesto el carácter cotidiano de los mismos, siendo los aspectos más importantes a considerar: la
necesidad de determinar la posición de un móvil a partir de un sistema de referencia y el carácter rela-
tivo del movimiento que esto implica, incluyendo la noción de trayectoria y los diversos tipos de movi-
miento a ella asociados. Los movimientos se pueden caracterizar por la rapidez con que suceden, lle-
gando finalmente a las nociones de velocidad media y velocidad en un instante dado. Conviene también
aclarar la diferencia entre desplazamiento y distancia recorrida. En este punto es de gran interés la ela-
boración de gráficos distancia recorrida-tiempo y velocidad-tiempo, referidos a movimientos reales, así
como su interpretación.
El estudio del movimiento rectilíneo uniforme puede iniciarse a través de algún experimento propuesto
por el alumnado, con expresión gráfica de resultados e interpretación y discusión al respecto. Al final
del Primer Ciclo puede abordarse (de un modo cualitativo, por supuesto) el estudio del movimiento de
caída libre, con objeto de poner en cuestión las ideas de los alumnos y las alumnas respecto a la rela-
ción entre la velocidad de caída y la masa de los cuerpos, lo cual sería objeto de atención más detallada
en el Segundo Ciclo, con la introducción de la magnitud aceleración y el estudio experimental de un mo-
vimiento rectilíneo uniformemente acelerado. También a nivel de Segundo Ciclo, y teniendo en cuenta
que se trata de un tipo de movimiento muy conocido por las alumnas y los alumnos (movimiento de
ruedas, discos, agujas del reloj, etc), se podrá estudiar el movimiento circular uniforme de forma cuali-
tativa.
La introducción al estudio de los CAMBIOS TÉRMICOS puede plantearse a partir de los cambios de esta-
do de los Sistemas Materiales (por ser ésta una de las transformaciones físicas más cotidianas que se
pone de manifiesto con el ciclo del agua), siendo conveniente comprobar experimentalmente la relación
entre el cambio de estado de una sustancia y una temperatura concreta. Los alumnos y las alumnas
conciben el calor como una sustancia que se transfiere de un cuerpo a otro, y piensan en la existencia
de materiales fríos y calientes (según su naturaleza), etc.
Otro de los efectos producidos por el calor sobre la materia (dilataciones) y sus aplicaciones (termóme-
tros...) preparará el camino para una primera aproximación al conocimiento de la naturaleza del calor
como «algo» que se intercambia de un sistema a otro cuando hay una diferencia de temperaturas y
también a la distinción entre calor y temperatura (conceptos que también se recogen en el Bloque 2.3.
«La energía y los cambios»). Por las especiales dificultades que implican, es recomendable reservar
para el Segundo Ciclo el estudio de los factores de que depende la transferencia de calor (masa, tempe-
ratura y naturaleza del material), el equilibrio térmico (Bloque 4. 1. «El equilibrio en sistemas no
vivos») y la interpretación de los cambios de estado mediante la teoría cinética.
En el estudio de los CAMBIOS ÓPTICOS y SONOROS se han de tener muy en cuenta sus relaciones con
el conocimiento del cuerpo humano (órganos de la visión y audición, Bloque 1.2. «Diversidad de la ma-
teria»), así como la importancia de los mismos de cara a la relación de los seres vivos con el medio.
Igualmente se han de poder comprender y explicar el funcionamiento de los principales instrumentos
ópticos y sonoros (espejos, lentes, cámara fotográfica, teléfono, altavoz, instrumentos musicales...).
En el Primer Ciclo habrá que centrarse más en los fenómenos de producción, propagación y recepción
de la luz y el sonido (sin profundizar en su naturaleza). En el Segundo Ciclo se podrá estudiar que tanto
en la luz como en el sonido se propaga energía pero no materia, lo cual permitirá introducir el concepto
de onda y tener un modelo para ambos fenómenos (Bloque 2.3). Se podría terminar con el estudio de
las aplicaciones que las ondas electromagnéticas tienen en la vida cotidiana, sobre todo en el campo de
las telecomunicaciones (radio, televisión...).
Tal y como pone de manifiesto la investigación didáctica al respecto, la luz como entidad física diferen-
ciada de la fuente luminosa y de sus efectos no es admitida por la mayoría del alumnado hasta los
13/14 años. La explicación del mecanismo de formación de sombras en muchos alumnos y alumnas de
14/15 años e incluso en edades superiores es admitida como una reflexión del objeto; muchos son los
que admiten que «no es posible la formación de sombras en un día nublado debido a que las nubes ab-
sorben mucha luz». Por lo que respecta a las interacciones de la luz con la materia es de destacar la
idea que se tiene sobre el color, al considerarlo como una propiedad intrínseca de los objetos indepen-
diente de la luz. Otra de las ideas que aún persisten en alumnas y alumnos de 13/14 años respecto al
mecanismo de la visión es considerar que no es necesario que la luz vaya del objeto al ojo o incluso que
se ve mediante «algo que sale de los ojos».
Estas ideas previas de los alumnos y de las alumnas deberán comportar algunas consecuencias para su
enseñanza a la hora de diseñar actividades.
En cuanto a la producción, propagación y recepción de la luz, en el Primer Ciclo se intentará asentar un
modelo para la luz, considerada como algo diferente de las fuentes luminosas y que se propaga en el
espacio, así como un modelo correcto de la visión donde se destaque el papel pasivo del ojo corno re-
ceptor de luz. Estos modelos han de asegurarse previamente a la identificación y descripción de los fe-
nómenos ópticos más importantes objeto de estudio. Entre éstos se podrían tratar, mediante la realiza-
ción de experiencias sencillas, los correspondientes a la propagación rectilínea, reflexión y refracción de
la luz, terminando con el estudio del ojo y el mecanismo de la visión, así como con la utilización de al-
gún instrumento óptico (lupa, microscopio, cámara oscura, cámara fotográfica...) con objeto de com-
prender su funcionamiento.
Sería interesante también tratar la diferencia entre el color y la luz, valorando la importancia de la vi-
sión y la necesidad de una correcta iluminación y de unas medidas de higiene ocular para la conserva-
ción de la vista (detección de efectos visuales y su corrección). Es preciso resaltar aquí las limitaciones
del propio cuerpo, en este caso a nivel de audición y visión, así como valorar críticamente los hábitos de
salud e higiene, sobre todo relacionado con estos sentidos.
Respecto a la producción, propagación y recepción del sonido, sería adecuado tratarlo a nivel de Primer
Ciclo de la forma más experimental posible y relacionado con la vida cotidiana (identificación, descrip-
ción y diferenciación de los principales fenómenos sonoros de la vida cotidiana), planteando problemas
sencillos de propagación del sonido. Habría que destacar cómo en su origen hay siempre un movimiento
vibratorio (cuerdas vocales, membranas...) y que se desplaza con velocidad constante.
En cuanto a su recepción se analizarían las cualidades de intensidad, tono y timbre de manera fenome-
nológica, estudiando el comportamiento y funcionamiento del oído humano. Se podría finalizar descri-
biendo algún instrumento musical (guitarra...) y la importancia de controlar el nivel sonoro. En este
sentido, se debe valorar la importancia que tienen los sonidos para la vida (lenguaje animal, música,
habla), así como la necesidad de conseguir un adecuado nivel sonoro con objeto de evitar la contamina-
ción acústica, fomentando una actitud de respeto hacia las normas de control sonoro (clase, tráfico...).
El carácter ondulatorio del sonido y la luz está relacionado con el Bloque 2.3. donde se estudia la propa-
gación de la energía y se introduce el modelo de onda, estando este apartado claramente indicado para
el Segundo Ciclo. Una vez vista la diferencia entre el modelo de partícula y el de onda, se pasaría a es-
tudiar la naturaleza ondulatoria de la luz y del sonido (energía radiante). Habría que distinguir entre la
necesidad de un medio para la propagación del sonido (onda material) por contraposición a la propaga-
ción de la luz. Ello servirá para introducir de forma cualitativa las ondas electromagnéticas, el espectro
electromagnético y la importancia de las mismas en la sociedad. Podría hacerse una referencia especial
al campo de las telecomunicaciones y a cómo amplían nuestra capacidad natural para la relación con el
medio a través de la prolongación de nuestros sentidos de la vista y el oído.
Una vez estudiadas las condiciones de transmisión y percepción de la luz y del sonido, se podrían expli-
car y reproducir fenómenos naturales ópticos y sonoros.
Por lo que respecta a los CAMBIOS ELECTROMAGNÉTICOS se recomienda realizar un tratamiento a nivel
fenomenológico, dejando la interpretación de los mismos para un tratamiento posterior en el Bloque
3.1. (Interacciones en la materia inerte). Parece conveniente distribuir los contenidos abordando en un
Primer Ciclo los relacionados con los conocimientos previos que tiene el alumnado sobre estos fenóme-
nos: aspectos de electrostática (poniendo de manifiesto la naturaleza eléctrica de la materia), cuerpos
conductores y aislantes, noción de circuito eléctrico y elementos básicos que lo componen, montaje de
pilas y estudio de la corriente eléctrica a partir de los efectos que produce (luminoso, térmico, químico,
magnético, y mecánico) .
A este nivel parece más adecuado hacer un estudio eminentemente experimental, en el que se contem-
plen diversos aspectos relacionados con la corriente eléctrica: construcción de circuitos sencillos
(serie/paralelo) de corriente continua (estudiando las condiciones necesarias para el paso de corriente,
elaborando un modelo elemental sobre su funcionamiento y utilizando la representación simbólica de los
elementos), para concluir con el estudio de los efectos de la corriente eléctrica. A nivel de Segundo Ci-
clo se tratarían los fenómenos magnéticos y las relaciones entre corriente eléctrica y magnetismo (efec-
tos Oersted y Faraday) -centrando la atención de un modo especial en la producción de electricidad-.
Es de resaltar aquí la necesidad de estudiar la relación entre fenómenos eléctricos y magnéticos como
paso previo a la utilización de aparatos de medida (que se desarrollan en el Bloque 3.1.), pudiendo ini-
ciarse este estudio a través de la observación de los efectos de la corriente sobre una aguja imantada,
poniendo de manifiesto la diferencia de intensidad del efecto al aproximar un hilo conductor, o al intro-
ducir dicha aguja en el interior de un solenoide y de una bobina. Posteriormente se pasaría a abordar el
efecto producido por una variación del campo magnético producido por un imán en las proximidades de
un conductor.
La diferenciación entre corriente continua y alterna se debería tratar a nivel cualitativo y con un enfoque
experimental (observando por ejemplo los diferentes efectos que produce sobre la aguja de un galvanó-
metro la conexión a una pila o la conexión a una bobina en la que se mete y se saca alternativamente
un imán).
Debería darse una especial importancia a los aspectos energéticos relacionados con la electricidad (en
relación con el Bloque 2.3. «La energía y los cambios»), donde las múltiples interrelaciones Ciencia-Téc-
nica-Sociedad son tan evidentes al poner de manifiesto el papel relevante que juega la electricidad. En
este sentido son de resaltar las transformaciones de energía eléctrica en mecánica y viceversa (que de-
berían comprobarse experimentalmente diferenciando entre motor y generador), y de energía eléctrica
en energía luminosa y calor. Tiene un especial interés incidir en los aspectos de producción y transporte
de energía eléctrica, así como en las normas de seguridad a tener en cuenta a la hora de utilizar la elec-
tricidad.
- LOS CAMBIOS QUÍMICOS
Numerosas situaciones de la vida cotidiana pueden servir para iniciar (en el Primer Ciclo) el estudio de
los CAMBIOS QUÍMICOS (reacciones de combustión, oxidación, neutralización y fenómenos electrolíti-
cos, principalmente) diferenciándolos de las transformaciones físicas por el cambio radical de propieda-
des características. También en este Ciclo se aconseja representar el proceso seguido en una reacción
química utilizando los nombres y las fórmulas de las sustancias que intervienen, siendo conveniente po-
ner de manifiesto desde un principio la conservación de la masa en dichos cambios.
En un nivel superior se procederá a representar lo ocurrido en el transcurso de la reacción mediante la
correspondiente ecuación química.
Son contenidos más adecuados de abordar en el Segundo Ciclo, por cuanto suponen una mayor dificul-
tad, la ley de las proporciones constantes (que van a permitir predecir lo que ocurrirá en una reacción
desde el punto de vista de las cantidades que intervienen) por una parte y la interpretación de los cam-
bios químicos por otra. Estos cambios pueden entenderse como un reagrupamiento de átomos, para lo
cual se precisará utilizar el modelo atómico de Dalton, siendo conveniente manipular con modelos tridi-
mensionales de bolas y otras representaciones con objeto de visualizar lo que ocurre en el transcurso
de una reacción.
Otros aspectos a resaltar en este bloque son los referidos a las relaciones Ciencia/ Técnica/Sociedad en
sus múltiples facetas. La industria química ocupa un lugar relevante en este sentido por las implicacio-
nes sociales, políticas y económicas que tiene su producción.
La velocidad con que transcurre una reacción y las formas de su control forman parte de la realidad de
los procesos que se llevan a cabo en las industrias químicas. Su estudio cualitativo requiere que los
alumnos y las alumnas hayan adquirido previamente un modelo para interpretar una reacción química
como reorganización de partículas de unas sustancias para dar lugar a otras, por lo que se aconsejaría
abordar este estudio en el Segundo Ciclo. Pueden estudiarse cualitativamente los diversos factores que
influyen en la velocidad de reacción: forma de presentarse los reactivos, temperatura, presión (en el
caso de reactivos en fase gaseosa), concentración (en el caso de reactivos en disolución) y catalizado-
res, relacionando dicho estudio con lo que ocurre con reacciones químicas en la vida cotidiana (conser-
vación de alimentos, administración de medicamentos, etc.).
También se ha de resaltar la importancia del efecto energético de las reacciones químicas, reconociendo
la existencia de reacciones tanto exotérmicas como endotérmicas, aunque debido a la gran importancia
que tienen la atención debería centrarse preferentemente en unas reacciones tan cotidianas como las
de combustión.
Otro aspecto a tener muy en cuenta y en relación con la vida cotidiana es la incidencia medio ambiental
de los cambios químicos, si bien este aspecto también podría desarrollarse en el Bloque 3. 1. al consi-
derarlo como una serie de transformaciones que producen interacciones con la materia viva y no viva.
Alguno de los aspectos en que la Química puede contribuir a mejorar la calidad de vida y el medio am-
biente son: fabricación de fármacos, de abonos, tejidos, colorantes, alimentación, plásticos, derivados
del petróleo, nuevos materiales, purificación de aguas residuales, reciclado de residuos, etc.
Entre los aspectos negativos de incidencia medio ambiental de las reacciones químicas convendría citar,
por la especial relevancia que en sí tienen, los directamente relacionados con los procesos de combus-
tión y alteración de la composición del aire atmosférico: lluvia ácida, efecto invernadero, agujero de
ozono, etc. En cuanto a contaminación del agua merecen ser destacados: la alteración de su acidez y su
composición por vertidos industriales y urbanos (detergentes, fertilizantes, plaguicidas, etc.). Esta inci-
dencia medio ambiental llevará a plantearse la necesidad de compaginar el desarrollo científico-técnico
con unos determinados valores sociales y el papel que juegan la Ciencia y sus aplicaciones en la Socie-
dad. En general se deben asumir y desarrollar valores y actitudes de crítica hacia la contribución de la
Ciencia en la mejora o perjuicio de la calidad de vida para los seres humanos, sobre todo en cuanto a
aplicaciones sociales de avances tecnológicos.
- LOS CAMBIOS GEOLÓGICOS
En el apartado de CAMBIOS GEOLÓGICOS EXTERNOS suele ser aconsejable abordar estos cambios cen-
trándolos en los relieves de la zona y pasar más adelante a los problemas de los cambios en las rocas y
el porqué de la presencia de fósiles.
Los obstáculos que se suelen presentar se relacionan con la percepción del tiempo en los alumnos y en
las alumnas, con las preconcepciones fijistas y catastrofistas asentadas en ellos, preconcepciones que
coinciden, en gran medida, con las que se dieron a lo largo del desarrollo histórico de estos conceptos.
Igualmente tener en cuenta la dificultad de algunos conceptos mineralógicos y físico-químicos que se
manejan. Además están las ya mencionadas en el Bloque 1.2. de DIVERSIDAD.
Por todo esto, es aconsejable su ubicación en el final de la etapa. No obstante, pueden realizarse algu-
nas aproximaciones a este problema en el Ciclo 12-14 en aspectos fáciles de percibir tales como las for-
maciones derivadas de la erosión ysedimentación.
El SUELO se presenta como una formación derivada de la interacción de los sistemas geológicos y bioló-
gicos. Según el grado de profundidad, puede abordarse en toda la Etapa. Su estudio podría perfecta-
mente situarse en los Bloques del eje
EQUILIBRIO.
Los aspectos de Ciencia-Técnica-Sociedad aparecen sobre todo justificados en este último tema. El sue-
lo conecta con muchos campos importantes de la sociedad: agricultura, medio ambiente, etc., pudién-
dose valorar críticamente la utilización que del mismo han hecho y hacen las diversas culturas, recono-
ciendo el papel relevante que ha tenido el suelo en muchos ámbitos de la vida de los pueblos. En el res-
to habría que destacar su conexión con los cambios distorsionadores derivados de la acción humana.
Es un Bloque que se presta a enfoques interdisciplinares con Ciencias Sociales.
En el apartado de los CAMBIOS GEOLÓGICOS INTERNOS las dificultades son mayores, si cabe, que en
el anterior. A los obstáculos ya mencionados hay que añadir el de la imposibilidad de percibir estos cam-
bios internos, salvo algunos casos excepcionales (volcanes, terremotos, etc.).
Son precisamente éstos, terremotos y volcanes, los que, en función del alto grado de motivación del
alumnado hacia ellos, podrían tratarse en el Ciclo 12d14. Quizá también podría hacerse una aproxima-
ción al tema de la formación de montañas.
En los demás conceptos se recomienda su estudio en el Ciclo 14-16. Dentro de éstos es más fácil una
aproximación al caso de las deformaciones tectónicas y a la formación de las Rocas Magmáticas y Meta-
mórficas que a la Tectónica de Placas. La complejidad de esta última aconseja, en caso de tratarse en
esta Etapa, un tratamiento basado en lecturas sencillas, vídeos y otros medios didácticos parecidos.
En magmatismo y metamorfismo habría que tener cuidado con el tratamiento de los conceptos físico-
químicos que aparecen en ellos.
También hemos de destacar la relación de estos temas con el Bloque de DIVERSIDAD (1.3., rocas, fósi-
les).
En cuanto al CICLO GEOLÓGICO, este concepto podría tratarse sin profundizar en el Ciclo 14-16. Lo
más asequible es abordar alguna de sus manifestaciones, en concreto el Ciclo de las Rocas nos parece
el más adecuado. Así, podría servir para centrar los aspectos parciales del mismo que se han comenta-
do anteriormente, reforzando la idea de la naturaleza cíclica de los cambios geológicos, así como las re-
laciones entre los externos e internos.
Aquí aparecen las dificultades ya citadas, percepción del tiempo, fijismo, etc. Se han de añadir, además,
las dificultades propias de estos modelos de síntesis con gran carga abstracta. En consecuencia, no hay
que pretender el significado de ciclo en su totalidad, sino de ir aproximándose a él, introduciendo al
alumnado en la idea de que todo cambio geológico sucede y precede a otro.
Destaca su relación con la Historia de la Tierra. En este punto se trata de que el alumno y la alumna lle-
guen a conocer algunos aspectos de la Tierra en otras épocas. Esto podría centrarse en el trabajo con
fósiles y en las lecturas de Historia de la Ciencia que aborden este problema.
BLOQUE 2.2.- Los cambios en la materia viva
Introducción
Los cambios en los sistemas vivos se manifiestan de manera clara y perceptible, hasta el punto de ser
considerados como una de las características más fundamentales de la vida. Sin embargo no es algo
exclusivo de ellos. Se trata simplemente de un problema de tiempo, de velocidad del proceso, siendo
ésta mucho más alta en los sistemas vivos, sobre todo a nivel de organismo. No se puede decir lo mis-
mo cuando se habla de población y comunidad. Aquí, al igual que ocurría en Geología, aparecen los
obstáculos fijistas ya comentados.
Este bloque, tal como se puede apreciar en la trama general del área, se relaciona de forma directa con
los otros bloques. Así ocurre con el de INTERACCIONES, donde se tratan las causas de los cambios. Por
otro lado, los cambios son los responsables de la DIVERSIDAD de los sistemas. Finalmente, tienen que
ser compatibles con el mantenimiento de la estabilidad del sistema material produciendo como resul-
tante el EQUILIBRIO dinámico que caracteriza a la mayoría de los sistemas materiales y que alcanza su
máxima expresión en los sistemas vivos.
En cuanto al tratamiento de los conceptos a lo largo de la etapa, tenemos que a nivel de organismo los
cambios resultan adecuados para los dos ciclos, variando en todo caso, el nivel de profundidad. En cam-
bio, conceptos tales como adaptación y sucesiones son más adecuados para el 14-16. De cualquier ma-
nera su tratamiento en el ciclo 12-14 debería estar muy ligado al estudio de la diversidad. En cuanto a
la evolución debería abordarse en el 14-16, centrada en la diversidad y los fósiles y siempre teniendo
en cuenta que los aspectos genéticos que la fundamentan son más propios de etapas posteriores.
Habría que trabajar en este Bloque actitudes de respeto hacia el carácter cambiante de la naturaleza,
valorándolo como estrategia para sobrevivir en un equilibrio frágil que, como se verá en otro bloque,
puede ser distorsionado por la acción humana.
CONCEPTOS, HECHOS Y PRINCIPIOS
NIVEL ORGANISMO
• El ciclo Vital. Crecimiento y Desarrollo. Tipos de desarrollo. Algunos modelos de Ciclo Vital entre los
seres vivos
NIVEL POBLACION
• Tipos de cambios. Algunos ejemplos de crecimiento y sus consecuencias. Aplicaciones al caso huma-
no.
• La Adaptación. Concepto. Factores ambientales y genéticos. Algunos ejemplos.
• La Evolución de las especies a través del tiempo. Teorías. Los fósiles como pruebas de la evolución.
NIVEL COMUNIDAD
• Tipos de cambios. Los ciclos de la materia y el flujo de energía.
• Cambios históricos de las comunidades: las sucesiones.
PROCEDIMIENTOS
- Diseño y realización de investigaciones sobre los cambios en la materia viva: por ejemplo, observación
y descripción de ciclos vitales en animales y plantas.
- Observación y detección de cambios en ecosistemas sencillos (acuarios, campos de cultivos, etc.)
- Búsqueda bibliográfica sobre cambios adaptativos y de diferentes teorías sobre adaptación y evolución
- Observación e interpretación de algunos cambios adaptativos en especies conocidas
- Realización de debates sobre la influencia de las ideologías en estos temas científicos
- Realización de ejercicios de comparación entre ecosistemas (naturales, humanizados)
VALORES, ACTITUDES Y NORMAS
- Desarrollar actitudes de respeto de los seres que se puedan manipular en diseños experimentales
- Reconocer la importancia de los cambios en la materia viva para el aprovechamiento energético
- Valorar las soluciones que encuentra la naturaleza ante el problema del reciclaje de materiales y del
aprovechamiento de la energía comparando con el caso humano
- Reconocer la importancia de las fuentes energéticas externas (sol) en los sistemas abiertos
- Interesarse por las actividades conservacionistas de grupos ecologistas y naturalistas de la localidad o
del País Vasco, valorando críticamente sus actuaciones
Orientaciones didácticas para el bloque 2.2.
- ORGANISMOS
Los conceptos que se manejan en este nivel de ORGANISMO son familiares para el alumno y la alumna.
Es fácil de percibir que en los seres vivos hay unos CAMBIOS de tipo cuantitativo (Crecimiento) y otros
cualitativos (Desarrollo).
Más difícil se presenta la relación de estos cambios con las INTERACCIONES (funciones de nutrición, re-
lación, reproducción) que se dan en los organismos. Aquí aparecen algunas de las dificultades. Pensar,
por ejemplo, en el caso del desarrollo embrionario.
Otra dificultad con la que nos encontramos es la derivada del concepto de ciclo vital. Estos cambios (na-
cimiento, crecimiento, desarrollo, reproducción, cambios genéticos) en el organismo como sistema ais-
lado son progresivos. Sólo si se entiende a éste como integrado en su grupo biológico natural, la espe-
cie, adquiere sentido el Ciclo Vital.
Lo más adecuado sería estudiar algunos de los modelos de Ciclo Vital de diferentes grupos de plantas
comenzando por los más familiares: Vertebrados (especie humana), artrópodos (insectos), faneróga-
mas, criptógamas.
Por tanto, creemos que se puede abordar en toda la etapa, en función de la profundidad del tratamien-
to, siendo aconsejable el enfoque experimental de estos conceptos.
- POBLACIONES
En lo referente a cambios en las POBLACIONES aparecen las conocidas dificultades del tiempo y el esta-
bilismo, además de las derivadas del propio concepto de población.
Se presta a un tratamiento procedimental cualitativo (al menos para el 12-14) centrado en entornos co-
nocidos y sencillos. Posiblemente sólo sea recomendable su inclusión en el 14-16. Es interesante traba-
jar el caso de las poblaciones humanas. Esto nos conectará con Ciencias Sociales. Aquí sería convenien-
te potenciar el uso de acuarios, terrarios, y otros recursos, así como el análisis de gráficas de población
humana.
Un tipo de cambios de gran relevancia son los adaptativos. El concepto de adaptación al medio se en-
frenta a las concepciones lamarckistas tan arraigadas en la población escolar. Además, están las dificul-
tades de los mecanismos de la misma. Sería aconsejable su estudio en el 14-16 si bien hay casos senci-
llos que podrían abordarse en el 12-14.
El concepto de Evolución de las especies presenta todas las dificultades que acabamos de citar aumen-
tadas. Además estarían las derivadas de las creencias religiosas y filosóficas. Todo esto, nos lleva a
aconsejar su estudio en el 14-16 de forma aproximativa, sin profundizar. En su tratamiento adquieren
especial relevancia el estudio de los FÓSILES y de la HISTORIA DE LA TIERRA así como su relación con
los bloques de DIVERSIDAD e INTERACCIONES.
Las relaciones Ciencia, Técnica, Sociedad aparecen bastante patentes en aspectos tales como: los pro-
blemas del crecimiento de la especie humana, el medio ambiente, las cuestiones religiosas, etc.
- COMUNIDADES
A nivel de COMUNIDAD hay que centrarse en las consecuencias de las relaciones tróficas de sus compo-
nentes. En concreto, interesa la circulación de la materia (ciclos de materia) y el flujo de la energía a
través de los diferentes niveles del ecosistema que se ven en el bloque de INTERACCIONES.
Aunque la comunidad es posible que resulte más perceptible que sus partes (las poblaciones), estos
conceptos presentan unas dificultades dignas de tener en cuenta: fundamentos químicos de los ciclos,
el propio concepto de energía, etc.
El problema de la sucesión como trasformación de la comunidad a largo plazo participa de los obstácu-
los anteriores a los que hay que sumar el factor tiempo. Habría que buscar ejemplos sencillos para tra-
bajar: acuario, talud, moho del pan, etc. Por tanto, serían contenidos más propios del 14-16.
Con Ciencia, Técnica, Sociedad presenta conexiones muy interesantes en aspectos de tipo medio am-
biental: despilfarro de energía, expoliación de materia, cambios bruscos como consecuencia de la acción
humana, etc. A este nivel se debe valorar críticamente las actuaciones de grupos conservacionistas o
ecologistas de la localidad o la zona, interesándose por sus actividades y desarrollando actitudes de cui-
dado y respeto por los seres vivos.
BLOQUE 2.3.- La energía y los cambios
Introducción
La ENERGÍA forma parte de nuestra vida, sin ella nada es posible; es sin embargo, un bien escaso en
algunos aspectos, necesitamos rentabilizarlo, de ahí la enorme importancia de su estudio.
Pedagógicamente hablando es un concepto claramente integrador, que facilita interrelaciones con otros
contenidos y que permite enfoques tecnológicos y sociales. Los CAMBIOS que se producen tanto en la
materia viva como en la no viva están producidos por INTERACCIONES. Muchas interacciones son difíci-
les de explicar en este nivel de enseñanza y sin embargo sí es relativamente fácil explicar estos cam-
bios en términos de energía.
La energía se trata de manera importante en el Bloque 2.1. asociándola a las reacciones químicas endo
y exoenergéticas, también asociada a los fenómenos sonoros y luminosos; en el Bloque 2.2. al hablar
de flujo de energía; en las INTERACCIONES, tanto de la materia viva (Bloque 3.2.) en los procesos de
nutrición, reproducción y relación, como en la no viva (Bloque 3.1. enlaces químicos, fuerzas, etc.).
Conviene tener en cuenta las dificultades que se plantean al abordar diferentes conceptos de este Blo-
que debido a su nivel de abstracción y a la abundancia de ideas erróneas que existen sobre energía, ca-
lor, temperatura, radiaciones, trabajo, potencia.... por lo que deberían ser tratados inicialmente de for-
ma intuitiva estudiándolos preferentemente en términos de los efectos que producen.
CONCEPTOS, HECHOS Y PRINCIPIOS
ENERGIA Y CAMBIOS
• Energía "almacenada" y energía "en acción".
TRANSFERENCIA DE ENERGIA
• Trabajo. Potencia.
• Calor.
• Radiación.
CALOR Y TEMPERATURA
• Calor y cambios de estado.
• Otros efectos del calor: dilataciones. Termómetros.
PROFUNDIZACION EN EL CONCEPTO DE ENERGIA
• Energía cinética.
• Energía potencial.
PRINCIPIOS DE CONSERVACION Y DEGRADACION
CONSUMO Y FUENTES DE ENERGIA
PROPAGACION DE LA ENERGIA
• Calor
• Sonido
• Luz
PROCEDIMIENTOS
- Identificación y análisis de situaciones de la vida cotidiana en las que se ponga de manifiesto las di-
versas formas de transferencia de energía
- Construcción de termómetros
- Realización de medidas de temperatura con diferentes termómetros y en diferentes situaciones
- Análisis e interpretación de transformaciones energéticas en las que se manifieste tanto la conserva-
ción como la degradación de la energía
- Resolución de problemas sencillos relacionados con la transferencia de energía
- Análisis de comportamiento de materiales conductores y aislantes
- Análisis de algunos aparatos y máquinas de uso cotidiano, comparando su consumo y rendimiento.
- Tratamiento crítico de la información acerca de fuentes de energía
- Estudio experimental de movimientos ondulatorios.
- Elaboración de conclusiones y comunicación de resultados mediante la redacción de informes y la rea-
lización de debates.
VALORES, ACTITUDES Y NORMAS
- Valoración de la importancia de la energía en las actividades cotidianas para la existencia misma de la
vida, el desarrollo económico y la calidad de vida
- Ser conscientes de la escasez de algunos recursos energéticos, así como de sus repercusiones y ac-
tuar en consecuencia
- Valorar los beneficios y perjuicios de las radiaciones
- Valorar de forma crítica los avances tecnológicos habidos en el campo de la comunicación audiovisual
e informática
Orientaciones didácticas para el bloque 2.3.
- ENERGÍA Y CAMBIOS
La ENERGÍA se presenta en los sistemas materiales de dos formas diferentes, o bien almacenada o bien
en acción. Estas formas de energía se transforman entre sí en los CAMBIOS de los objetos o de los se-
res vivos. Se puede decir que el «problema de la energía» se basa en la descripción de estas diferentes
formas, en sus transformaciones y en las leyes que las rigen.
La definición de energía como la capacidad para realizar trabajo es sólo válida para la Mecánica y entra
en contradicción con las leyes de la Termodinámica y el Principio de conservación de la energía; la ener-
gía se conserva, pero no siempre la capacidad para realizar trabajo (2.° Principio de Termodinámica). Es
mejor llegar de forma progresiva a un concepto cualitativo de energía, como una propiedad de los Sis-
temas Materiales que mide su capacidad para producir o experimentar cambios o transformaciones y
que dicha capacidad varía a medida que se realizan los cambios.
Los alumnos y las alumnas de ambos ciclos deben hacer una valoración de la importancia de la energía
en las actividades cotidianas y de su repercusión sobre la calidad de vida y el desarrollo económico.
- TRANSFERENCIA DE ENERGÍA
La energía se transfiere en forma de TRABAJO, CALOR y RADIACIONES. Estos conceptos, aunque son
importantes, suponen muchas dificultades para que las alumnas y los alumnos los aprendan significati-
vamente: a) Se considera el Trabajo, como la medida de la energía transformada o transferida cuando
existe una fuerza y un desplazamiento producido por ella. b) El Calor, como la energía transferida de un
cuerpo de temperatura más alta, a otro de más baja, cuando éstos se ponen en contacto. c) Radiación,
como la energía que proviene de un emisor y se propaga incluso, en el vacío.
Se puede iniciar el tema con ejemplos sencillos y cercanos en los que se ponga de manifiesto que hay
varias formas de transferir energía, así como analizando el papel de aislantes y conductores.
En el 2.° Ciclo parece conveniente introducir la POTENCIA como la magnitud que mide la rapidez en la
transferencia de energía. El rendimiento será un concepto muy útil para valorar la calidad de una má-
quina y para hacerse idea de la realidad de las pérdidas producidas por rozamientos.
También sería importante valorar los beneficios y perjuicios de las radiaciones, su acumulación en los
seres vivos, las radiaciones ionizantes, los rayos ultravioletas, la radiactividad, los rayos X, la fotosínte-
sis, etc.
- CALOR Y TEMPERATURA
Las concepciones que sobre el CALOR y la TEMPERATURA tienen los alumnos y las alumnas, así como
los fenómenos relacionados con ellos difieren de las de los científicos y también de la que en estos nive-
les de enseñanza se trata de impartir.
El calor es asociado por los adolescentes a una «fuente» o a un estado. Para ellos tanto el calor como la
temperatura sirven para designar un estado caliente o frío, representando la temperatura la cantidad de
frío o de calor que poseen los cuerpos. Para la generalidad de las alumnas y los alumnos de 12 o más
años, el calor y el frío son dos cualidades antagonistas, intrínsecas para diferentes sustancias (los meta-
les enfrían las cosas, porque son «fríos», la lana calienta el cuerpo porque es «caliente»). También con-
sideran que tienen características de materia, tipo fluido, algo parecido al aire o al vapor, que «entra en
los cuerpos» o «se evapora». Esta idea del calor, con categoría de sustancia que se tiene y se transmi-
te, es en muchos casos conservada por los alumnos y las alumnas de 15 años.
En lo referente a los procesos que ocurren cuando hay transferencia de energía (dilataciones, cambios
de estado), entienden mejor aquellos que conllevan un cambio de temperatura, y ni tan siquiera a los
15 años los suelen explicar en términos de comportamientos moleculares de la materia. Otro error que
muy comúnmente cometen, es asociar la temperatura de cambio de estado al volumen, por lo cual a las
temperaturas de fusión y ebullición las hacen depender de la cantidad de líquido que realiza el cambio.
Algunos investigadores opinan que en los niveles básicos de la Física no debería introducirse el concepto
de calor y que debería hablarse de energía y transferencia de energía. Según ellos solamente cuando
sea necesario distinguir entre calor y trabajo se debe introducir el concepto de una forma correcta y
concisa.
Para conseguir que los adolescentes no utilicen indistintamente la temperatura y el calor, se puede em-
pezar viendo la TEMPERATURA como una propiedad que tienen los cuerpos, y que decide en qué direc-
ción tiene lugar la transferencia de energía (CALOR). Es también la magnitud que es medida por el ter-
mómetro. Finalmente se puede definir como el índice de la energía cinética media de las partículas que
forman el cuerpo.
La construcción de termómetros y las medidas de temperaturas con diferentes termómetros y en diver-
sas situaciones (mezclas, cambios de estado, dilataciones, etc.) puede ayudar también a diferenciarlos;
en todas estas experiencias el grupo deberá respetar las adecuadas normas de seguridad al utilizar me-
cheros, sustancias quizás inflamables, objetos calientes, que servirán de reflexión para que el alumno
se vaya acostumbrando al respeto hacia ellas.
En este bloque cobra especial relevancia la educación en valores que tienen que ver con el trabajo en
grupo, tanto en la experimentación orientada a resolución de los problemas planteados, como en la
búsqueda, discusión y crítica de bibliografía de cuestiones relacionadas con la energía.
- PROFUNDIZACIÓN EN EL CONCEPTO DE ENERGÍA
Teniendo en cuenta la dificultad conceptual del término «energía» (que generalmente es asociada por el
alumnado a «fuerza», «calor» o «trabajo») y con objeto de efectuar una aproximación al mismo, se de-
bería comenzar analizando la causa de que se produzcan determinados procesos o transformaciones en
situaciones cotidianas: levantar una piedra, evaporación de agua, encendido de una bombilla, etc. Con
todo ello se pretende que los alumnos y las alumnas lleguen a relacionar la «energía» con la causa de
una transformación, diferenciándolo así con los conceptos de «fuerza», «calor» y «trabajo».
Conviene poner de manifiesto que la energía puede presentarse de diferentes formas y que éstas pue-
den reducirse a dos tipos fundamentales: cinética (en relación con la velocidad y la masa de un cuerpo)
y potencial (en relación con su posición).
- CONSERVACIÓN Y DEGRADACIÓN DE ENERGÍA
Para interpretar los resultados de procesos de transferencia de energía, así como la contradicción entre
la indudable CONSERVACIÓN DE LA ENERGÍA y la necesidad de un continuo aporte de energía a los sis-
temas para que funcionen pueden ser utilizados diagramas cualitativos de flujo de energía. Pueden ayu-
dar en este empeño los análisis de transformaciones energéticas en las que se manifiestan tanto la con-
servación (mezclas de sistemas a diferentes temperaturas) como la DEGRADACIÓN (gasto de gasolina
para que un coche funcione, recibo de la luz).
- CONSUMO Y FUENTES DE ENERGÍA
Las FUENTES DE ENERGÍA que son las formas en las que se presenta la energía -es la energía almace-
nada que puede convertirse en energía en acción- son necesarias para solucionar, entre otras cosas, la
degradación. La energía es CONSUMIDA por toda clase de sistemas materiales, tanto vivos (en sus dife-
rentes niveles organizativos: célula, organismos, ecosistemas), como no vivos, utilizándola los primeros
en sus procesos vitales de nutrición (fotosíntesis, respiración, etc.), regulación y reproducción.
Hay que hacer especial mención del sol como fuente primordial de energía en los procesos geológicos y
biológicos.
Las fuentes de energía pueden ser trabajadas por el alumnado más joven, y pasar posteriormente a es-
tudiar el consumo energético. Es además un tema que puede relacionarse con las repercusiones socia-
les, tecnológicas, económicas, políticas... Es importante realizar un tratamiento crítico de la información
acerca de fuentes tales como: el carbón, el petróleo, los elementos radiactivos, las energías renovables,
el gas natural y el ahorro energético.
Una actitud positiva hacia el ahorro energético, como una de las mejores fuentes de energía, así como
un posicionamiento ante su derroche, puede ser un contenido que se aprenda en el Centro con acciones
que eviten el despilfarro de estos recursos energéticos que son limitados.
- PROPAGACIÓN DE LA ENERGÍA
La energía SE PUEDE PROPAGAR de un punto a otro de dos modos radicalmente diferentes: a) por des-
plazamiento de partículas, lo que implica la propagación no sólo de energía, sino también de materia
(movimiento de partículas), y b) merced a la propagación de una perturbación en un medio, de una
manera deslocalizada y sin transmisión simultánea de materia (movimiento ondulatorio); es el caso de
las ondas materiales en la superficie del agua, en cuerdas, muelles, etc. Estos conceptos son claramen-
te adecuados para ser desarrollados al final de la etapa, y se puede hacer estudiando experimentalmen-
te las propiedades de los movimientos ondulatorios y de partículas, viendo sus analogías y diferencias.
Una vez construido el modelo de onda, por contraposición al de partícula, convendría establecer el ca-
rácter ondulatorio del sonido, con lo cual se profundiza en el estudio de los fenómenos sonoros del blo-
que 2. 1.
La necesidad de un medio material para la propagación del SONIDO (aire, agua, etc.), permite plantear
el interrogante de si será posible o no la propagación de la energía en el vacío. Puede realizarse una
aproximación a esta pregunta a través de las formas de propagación del calor: convección (partícula),
conducción (onda material) y radiación (onda no material).
El hecho de que tanto el CALOR como la LUZ puedan propagarse incluso en el vacío, permite iniciar el
estudio de la naturaleza ondulatoria de la luz, completando con ello el estudio de los fenómenos ópticos
descritos en el bloque 2.1. , e introducir cualitativamente el concepto de onda electromagnética (calor =
ondas infrarrojas; luz = ondas del espectro visible; ondas de radio...) haciendo especial hincapié en su
importancia y valorando críticamente los avances tecnológicos de los que son soporte.
TRAMA DE 3. INTERACCIONES
BLOQUE 3.1.- Interacciones en la materia no viva
Introducción
La situación de las INTERACCIONES en el contexto de los grandes ejes va a permitir orientar la elección
de contenidos. Los SISTEMAS MATERIALES producen y experimentan INTERACCIONES que a su vez
producen CAMBIOS en los que se transfiere cierta cantidad de ENERGÍA, manteniendo y alterando los
estados de EQUILIBRIO. A nivel físico las interacciones se describen por FUERZAS Y CAMPOS, por lo que
serán aspectos a resaltar en lo que a contenidos conceptuales se refiere los relacionados con ellos. A ni-
vel químico las interacciones pueden describirse por ENLACES QUÍMICOS, que a su vez se caracterizan
por almacenar energía y por originar diversas formas de organización y estructura de los sistemas ma-
teriales.
En lo relativo a Sistemas Naturales, las INTERACCIONES entre sus elementos determinan y justifican
las estructuras y originan el CAMBIO permanente.
Las INTERACCIONES en los sistemas no vivos, por ejemplo en los geológicos no son fáciles de percibir.
Resulta muy difícil comprender el incremento de complejidad de los sistemas geológicos (rocas,
relieve). Sin embargo, también se dan aquí, sólo que en otra dimensión del tiempo.
Este dinamismo producto de las INTERACCIONES lleva consigo todo un trasiego de ENERGÍA. Por tanto,
en todos los procesos naturales hay también una interacción de materia y energía.
Por todo lo anterior, se puede comprender que este bloque se relaciona de forma directa con el de OR-
GANIZACIÓN (Bloque 1.3.), de la cual es responsable. Igualmente, es responsable de los CAMBIOS de
los sistemas. Por otro lado, se relaciona con el de conservación y transformación de la ENERGÍA (Bloque
2.3.) la cual depende de las INTERACCIONES.
En cuanto al tratamiento de los conceptos a lo largo de la etapa, vemos que, en general, el bloque pre-
senta mayores dificultades conceptuales que el de CAMBIOS. Probablemente sean algunos procesos ge-
ológicos externos los más asequibles a lo largo de la Etapa. Sin embargo, los procesos geológicos inter-
nos se presentan más apropiados para el final.
CONCEPTOS, HECHOS Y PRINCIPIOS
LAS FUERZAS COMO INTERACCIONES
• Efectos de las fuerzas.
• Fuerzas a distancia y de contacto.
• Principios de la Dinámica.
• Fuerzas gravitatorias.
• Fuerzas de interés en la vida cotidiana.
INTERACCIONES EN FENOMENOS MAGNETICOS Y ELECTRICOS
• Magnetismo.
• Carga eléctrica
• Conductores y aislantes
• Intensidad
• Diferencia de potencial
• Ley de Ohm. Resistencia eléctrica
• Aparatos de medida
INTERACCIONES ENTRE PARTICULAS. ENLACE QUIMICO
• Propiedades de las sustancias debido a su enlace químico. Enlace químico y energía.
INTERACCIONES GEOLOGICAS
• Procesos externos. Agentes geológicos. Erosión. Transporte. Sedimentación. Formación de las rocas
sedimentarias.
• Procesos internos. Principales procesos. Dinámica de placas. Procesos de formación de montañas.
Magmatismo. Metamorfismo. Formación de rocas endógenas.
PROCEDIMIENTOS
- Identificación de fuerzas que intervienen en diferentes situaciones de la vida cotidiana.
- Utilización de máquinas simples e interpretación de su funcionamiento
- Resolución de problemas relativos a movimientos y fuerzas.
- Interpretación de situaciones de la vida real en las que se ponga de manifiesto la gravitación univer-
sal.
- Análisis de los efectos de las fuerzas sobre materiales deformables.
- Utilización de diversos instrumentos de medida: dinamómetro, manómetro, barómetro, amperímetro,
voltímetro,
- Construcción y manejo de circuitos eléctricos sencillos.
- Diseño y realización de experiencias sencillas de electrostática e imanación
- Clasificación de las sustancias químicas en función de sus propiedades
- Relación entre propiedades de las sustancias e interacciones de partículas
- Establecimiento de relaciones entre formación y rotura de enlaces e intercambio energético
- Realizar salidas al campo para observar algunos de los fenómenos externos
- Diseño y realización en el laboratorio de experiencias acerca de ellos: meteorización, acción de aguas
superficiales, etc.
- Emisión de hipótesis sobre el origen de algunas de las formaciones más conocidas de nuestro entorno.
- Introducción al uso del mapa topográfico.
- Formular explicaciones acerca del origen de los volcanes, montañas, etc.
- Localización de volcanes, terremotos, etc. en mapas y su relación con zonas activas y estructuras con
la corteza continental y oceánica.
- Realizar modelos de volcanes y de plegamientos.
- Trabajo con algunas lecturas acerca de estas teorías.
- Recoger información de la prensa con noticias acerca de catástrofes derivadas de los volcanes, terre-
motos, etc.
VALORES, ACTITUDES Y NORMAS
- Ser conscientes de la importancia de las máquinas valorando sus ventajas e inconvenientes.
- Desarrollar actitudes críticas ante creencias pseudocientíficas tan arraigadas en relación a estos conte-
nidos.
- Valorar la importancia del estudio de estas interacciones para la prevención de desastres humanos y
naturales
Orientaciones didácticas para el bloque 3.1.
- INTERACCIONES DESCRITAS POR FUERZAS
Por lo que a FUERZAS se refiere, se ha de tener en cuenta, tal y como pone de manifiesto la abundante
investigación didáctica al respecto, que la existencia de numerosas vivencias personales acumuladas en
la experiencia propia han construido un cuerpo coherente de conocimientos en los adolescentes (la lla-
mada «Física del sentido común») que no coincide en muchos aspectos con los de la «ciencia oficial» al
respeto y que resulta difícil de cuestionar. Son de destacar en este sentido la relación directa que suele
establecerse entre fuerza y movimiento («si un cuerpo se mueve es porque actúa alguna fuerza sobre
él, en el mismo sentido del movimiento») y el concepto aristotélico que relaciona peso con rapidez de
caída («a mayor peso de un cuerpo le corresponde mayor rapidez de caída»), lo cual va a suponer una
gran dificultad para poder comprender los fundamentos de la Dinámica.
Teniendo en cuenta el escollo que va a suponer a los alumnos y a las alumnas el cambiar sus esquemas
conceptuales en este sentido, parece más conveniente que todo lo anterior sea abordado a lo largo de
los dos Ciclos de la Etapa. Se puede partir en este sentido de las ideas que las alumnas y los alumnos
tienen sobre fuerza en relación a los EFECTOS que producen, cuestionando dichas ideas por medio de
alguna experiencia de fácil realización (diseñada por los propios alumnos y alumnas) en la que pueda
realizarse algún tipo de medidas para contrastar las hipótesis de partida. En este sentido cabe resaltar
la necesidad e importancia de acostumbrarse a utilizar estrategias propias del trabajo científico en la re-
solución de problemas.
El concepto de FUERZA A DISTANCIA es imprescindible para poder comprender las atracciones gravita-
torias, eléctricas y magnéticas. En este sentido otro de los problemas que suele plantearse por parte del
alumnado (y que va a dificultar el que pueda asociarse el concepto de «fuerza» al de «interacción» o in-
fluencia mutua), es el de asociar el concepto «fuerza» a propiedad intrínseca que tienen (o que no tie-
nen) los cuerpos. Las experiencias de electrostática y de imantación son una referencia obligada para
cuestionar dichas ideas y pueden ya plantearse en el Primer Ciclo. Asimismo, se pueden utilizar expe-
riencias de este tipo para introducir la noción de CAMPO DE FUERZAS como «zona de influencia» en el
Segundo Ciclo.
También parece adecuado para el Primer Ciclo introducir que todas las fuerzas han de ir siempre asocia-
das a una dirección y un sentido concretos (aunque se trate de una aproximación cualitativa), así como
aspectos que hagan referencia a relaciones Ciencia/Técnica/Sociedad en la construcción y utilización de
máquinas simples.
Respecto a los PRINCIPIOS DE LA DINÁMICA parece conveniente centrar la atención, en primer lugar y
con carácter preferente, en aspectos que hacen referencia al Primer y Tercer Principios. Teniendo en
cuenta las dificultades operativas que presenta el Segundo Principio, parece conveniente abordarlo en el
Segundo Ciclo. También puede ser adecuado para tratar en el último curso del Segundo Ciclo (como
aplicación y síntesis de lo aprendido sobre fuerzas) el problema de la GRAVITACIÓN UNIVERSAL, ha-
ciendo referencia al proceso histórico seguido hasta llegar a la interpretación de Newton, y estudiando
la gravitación terrestre como una manifestación de la misma.
Por otra parte, se puede introducir a nivel cualitativo (en el Primer Ciclo) y posteriormente cuantitativo
(en el Segundo Ciclo) el estudio de los EFECTOS DE LAS FUERZAS sobre materiales deformables, para
poder aproximarse así al concepto de PRESIÓN. Son de destacar en este sentido las deformaciones pro-
ducidas en muelles (que van a permitir abordar el problema de la medida y de las unidades de fuerza) y
los aspectos relacionados con las fuerzas ejercidas por la masa de aire atmosférico sobre la superficie
terrestre (presión atmosférica), aspecto éste último relacionado directamente con el problema del tiem-
po atmosférico y su previsión. También pueden incluirse aquí los efectos de la presión en los líquidos y
la utilización de instrumentos de medida (manómetro y barómetro), poniendo nuevamente de manifies-
to la necesidad de unos patrones universales de medida y aceptando los existentes a nivel internacio-
nal.
Es de destacar también, por el interés manifiesto que tiene, el papel que juegan las fuerzas en la vida
cotidiana, por ejemplo, la postura y el movimiento de los animales están controlados por fuerzas mus-
culares, la construcción de las casas o puentes está relacionada con las fuerzas que soportan sus ci-
mientos, etc. En determinados casos las fuerzas producen situaciones de equilibrio (tal como se expresa
en el apartado de «Estática» que se incluye en el Bloque 4.1. «Equilibrio en sistemas no vivos»).
Los FENÓMENOS MAGNÉTICOS Y ELECTROSTÁTICOS ya han sido abordados con un enfoque cualitativo
en un primer nivel al estudiar fuerzas a distancia (entre imanes, entre imanes y limaduras y entre cuer-
pos electrizados). Asimismo, en el Bloque 2. 1. («Los cambios en la materia inerte») también se han
estudiado este tipo de fenómenos con un enfoque más descriptivo que causal. Por esta razón en este
Bloque debería tratarse con más profundidad este estudio, con objeto de analizar con más detenimiento
el porqué de estos fenómenos, para lo cual se incluirán aspectos cuantitativos.
Á partir de las experiencias de electrización consideradas en el Bloque 2.1., se debería introducir el con-
cepto de CARGA ELÉCTRICA, como propiedad de los Sistemas Materiales que se pone de manifiesto en
los fenómenos de electrización. La mayor o menor facilidad para el desplazamiento de cargas eléctricas
(electrones) a través de un determinado Sistema puede servir para hacer referencia a la existencia de
diferentes comportamientos de los mismos, polarizados en dos tipos principales: CONDUCTORES Y AIS-
LANTES (ya considerados en el Bloque 2.1.).
Con objeto de iniciarse en determinaciones cuantitativas sobre la corriente que circula por un CIRCUITO
ELÉCTRICO en función de las características del generador utilizado y de los elementos de que consta,
se deberán introducir los conceptos de INTENSIDAD DE CORRIENTE y DIFERENCIA DE POTENCIAL (pa-
rece más conveniente reservar la introducción del concepto de fuerza electromotriz al Bachillerato), in-
cluyendo la determinación experimental de dichos valores en los circuitos anteriormente construidos.
Son de destacar aquí las ideas previas que tienen las alumnas y los alumnos sobre funcionamiento de
circuitos («la intensidad de corriente es distinta antes y después del elemento de consumo», «el orden
de colocación de un elemento en un circuito en serie influye en el efecto que produce en el mismo»,
etc.). Una vez conocido el efecto magnético de la corriente eléctrica (estudiado en el Bloque 2. l.) se
puede pasar a utilizar aparatos de medida efectuando determinaciones cuantitativas en los circuitos
empleados, comprobando la invariabilidad de la relación diferencia de potencial/intensidad para un cir-
cuito en el que no se cambian sus elementos y al que se aplican diversas tensiones (LEY DE OHM).
Una vez comprendido el concepto de RESISTENCIA ELÉCTRICA, debería comprobarse el efecto que tie-
ne sobre la intensidad de corriente que circula por el circuito, la asociación de resistencias, su cambio
de posición, etc, con un triple objetivo: adquirir destreza en el manejo de APARATOS DE MEDIDA, cues-
tionar las ideas previas antes apuntadas y adoptar un modelo de circuito más acorde con los hechos ex-
perimentales.
Debería existir una estrecha relación entre el tratamiento que se da a estos conceptos y su aplicación
electrónica en el Área de Tecnología.
- INTERACCIONES ENTRE PARTÍCULAS
Las interacciones entre partículas materiales (átomos y moléculas) que dan lugar a los ENLACES QUÍMI-
COS deberían abordarse en el Segundo Ciclo, con un enfoque eminentemente experimental, realizando
una clasificación de las sustancias a partir de sus propiedades características. Esto nos llevará a carac-
terizar las sustancias en tres grupos que hacen referencia a tres tipos fundamentales de interacciones
submicroscópicas: aquellas que presentan características metálicas (metales), las que tienen comporta-
miento semejante al de las sales (compuestos iónicos) y «otras» que no pueden agruparse en ninguno
de los grupos anteriores (sustancias de tipo covalente).
No parece necesario plantearse, a nivel de Enseñanza Secundaria Obligatoria, el estudio de cómo son
las uniones entre átomos (teorías del enlace químico) que van a determinar el tipo de propiedades ma-
croscópicas de las sustancias, pero sí es conveniente poner de manifiesto el carácter electrostático que
subyace a todas las interacciones entre partículas, lo cual va a permitir interpretar las reacciones quími-
cas como consecuencia de ellas. Es clara la conexión con el Bloque 1.3. («Estructura y organización de
la materia») por cuanto las interacciones entre partículas dan lugar a una determinada estructura y or-
ganización de la materia.
Otro aspecto de interés en relación con las interacciones submicroscópicas que tienen lugar en el trans-
curso de las reacciones químicas, es el relacionado con la ENERGÍA PUESTA EN JUEGO (aspecto ya con-
siderado en el Bloque 2.1.), al poner de manifiesto que las interacciones entre los átomos dan lugar a la
formación de enlaces químicos y que la posterior rotura de estos enlaces y la formación de otros nuevos
que tienen lugar en el transcurso de una reacción, implica un intercambio energético.
- INTERACCIONES GEOLÓGICAS
Tal como se dijo en la introducción, las INTERACCIONES GEOLÓGICAS son más difíciles de percibir que
las biológicas, fundamentalmente por la diferente escala de tiempo, tan alejada de la humana, que se
debe emplear aquí.
Estos procesos abordan conceptos geológicos que se solapan con los comentados en CAMBIOS. En IN-
TERACCIONES se trataría de resaltar la parte causal de estos contenidos y así poder diferenciarlos de
los cambios.
Los procesos externos son los más asequibles para iniciar el Bloque, siempre que se utilicen situaciones
perceptibles y abordables experimentalmente (entorno próximo al Centro). En este apartado son nume-
rosas las preconcepciones detectadas en los alumnos y en las alumnas: estabilismo, origen y transfor-
mación catastrofista de las rocas, creencias sobre corrientes subterráneas, etc. A esto hay que añadir
las dificultades de algunos aspectos químicos.
En consecuencia, si bien puede abordarse el estudio de todos los principales agentes geológicos (atmós-
fera, aguas continentales superficiales y subterráneas, aguas marinas, hielo, aire, seres vivos) habrá
que tener cuidado al secuenciar, dejando algunos procesos, p. ej., químicos, para el final. Debe hacerse
hincapié en estos procesos como generadores de las rocas sedimentarias que se comentaron en el Blo-
que de diversidad (1.2. «Diversidad de la materia»).
En el caso de los procesos internos las dificultades se incrementan. Existe, por un lado, la dificultad de
percibirlos. Por otro, el bagaje fisicoquímico que exigen, además de las preconcepciones.
Se deberían abordar inicialmente los aspectos más perceptibles y familiares: formación de estructuras
tectónicas, de montañas, volcanes y terremotos. Los procesos magmáticos y metamórficos se estudiarí-
an, de manera sencilla, avanzada la Etapa. En todo caso, sería aconsejable un enfoque descriptivo y el
uso de modelos que ayuden a iniciarse en la interpretación de estos procesos.
Finalmente, las grandes teorías, antiguas (Deriva Continental) y actuales (Tectónica de Placas) sólo nos
parecen adecuadas para ciertos trabajos de ampliación, o en todo caso, a modo de motivación, como
una presentación de problemas complejos que son abordados por las teorías científicas, para lo que la
utilización de vídeos puede ser de gran ayuda.
Es de destacar en todos estos procesos geológicos la importancia de la ENERGÍA como fuente de ellos.
Comentar las diferentes formas que actúan en ambos casos (energía solar predominantemente en los
procesos externos, y geotérmica en los internos).
Aquí también habrá que tener en cuenta la naturaleza cíclica de estos procesos geológicos, así como la
relación existente entre procesos internos y externos.
Los aspectos de Ciencia-Técnica-Sociedad son también importantes, sobre todo en los campos de la
Agricultura, Obras Públicas, Medio Ambiente, etc.
A lo largo de todo este Bloque se ha hecho referencia a la conveniencia de la experimentación, lo que
hará necesario el desarrollo de actitudes positivas hacia el trabajo en grupo, reconociendo y valorando
la potenciación de la coordinación entre los miembros del grupo y la ayuda que presta al avance común
mediante el reparto de tareas.
BLOQUE 3.2.- Interacciones en los seres vivos
Introducción
A diferencia de lo dicho en el Bloque anterior, en los sistemas vivos las interacciones, sean del nivel que
sean, resultan mucho más evidentes. Constituyen lo que llamamos FUNCIÓN del sistema, gracias a la
cual es caracterizado cada sistema dotándole de una organización, de un dinamismo y de una compleji-
dad creciente.
Debe destacarse la idea de ser vivo como algo constituido por partes (células y grupos de células) que
interactúan en su interior y no como una simple suma de esos elementos, con lo que nos quedaríamos
en una simple descripción del sistema vivo pero sin llegar a comprenderlo. En esta interacción se produ-
cirá un trasiego constante de materia y energía.
En cuanto al tratamiento de los conceptos a lo largo de etapa, seguramente sean éstas interacciones en
el nivel de organismo las más adecuadas para toda la etapa. De todas formas, hay que tener en cuenta,
de cara a abordar su secuenciación, que se trata de conceptos con un grado de dificultad superior a los
de UNIDAD y DIVERSIDAD de los seres vivos. No olvidemos que en algunos casos aparecerán concep-
tos químicos.
En otros aspectos como relaciones, hay que tener en cuenta la importancia de trabajar la relación es-
tructura-función, es decir, trabajar conjuntamente con los bloques de DIVERSIDAD y ORGANIZACIÓN Y
ESTRUCTURA. Igualmente, considerar sus relaciones con el bloque de SALUD.
CONCEPTOS, HECHOS Y PRINCIPIOS
NIVEL ORGANISMO. FUNCIONES VITALES
• Nutrición. Concepto. Aspectos de la misma. Tipos: Autótrofa, heterótrofa. La fotosíntesis.
• Reproducción. Concepto. Tipos: Sexual y asexual. Aplicaciones.
• Relación. Concepto. Algunos aspectos sencillos de los Sistemas Nervioso y Hormonal.
PROCEDIMIENTOS
- Emisión de hipótesis sobre la existencia de diferentes tipos de nutrición.
- Diseño y realización de experiencias sobre funciones vitales tanto en plantas como animales.
- Utilización de modelos de laboratorio para comprender las funciones de los seres vivos.
- Búsqueda bibliográfica y utilización de lecturas acerca de alguna aplicación de estas funciones para la
especie humana.
- Elaboración de murales y utilización de modelos en los que se localicen las funciones en los órganos o
aparatos en que se realizan.
- Planteamiento de problemas en relación a los distintos tipos de reproducción, y/o de respiración y/o
de circulación, etc., analizando sus hándicaps y sus ventajas.
VALORES, ACTITUDES Y NORMAS
- Valorar estas funciones como las más características de los seres vivos.
- Valorar debidamente la riqueza de funciones que se da en los seres vivos.
- Interesarse por las implicaciones que dichas funciones tienen en los hábitos
d del fenómeno educativo. En él convergen tantas variables y relaciones que hacen complicada su eva-
luación. Por otra parte, este cúmulo de factores hacen recaer sobre el profesorado una mayor responsa-
bilidad. El nuevo papel que la actual Reforma demanda del profesorado, su nuevo perfil profesional,
puede ahondar ese sentido de responsabilidad.
b) La tendencia a reproducir el modelo de enseñanza-aprendizaje recibido a lo largo de la formación
del propio profesorado. No solamente se reproduce la forma de enseñar, sino también la forma conse-
cuente de evaluar, más congruente con el medir y comparar que con la de ayudar a resituar el proceso.
Hay que pensar que el libro de texto sigue siendo el recurso didáctico más utilizado y el examen clásico
el recurso de evaluación más importante y a veces el único.
c) La confusión de términos análogos a evaluación, ya que incluso en la literatura didáctica no hay
acuerdo en muchos casos en la diferencia semántica entre evaluar, examinar, medir, controlar, calificar...
d) Por último, la nueva interpretación más amplia de «contenidos», asumiendo la necesidad de con-
templar no sólo los conceptos, sino también los procesos y las actitudes hacia unos valores, obliga a ser
contemplados en la evaluación.
A) EVALUACIÓN DEL APRENDIZAJE
Debido a que el aprendizaje y maduración de los alumnos y las alumnas puede y debe ser potenciado
desde todos los ejes posibles, la contribución del Área de Ciencias de la Naturaleza es una más de las
influencias que reciben, pero tiene a su vez especificidades que son aportadas por la misma metodolo-
gía de las ciencias, así como por su propia epistemología.
Así, el desarrollo de las capacidades para establecer relaciones entre los distintos conceptos y de éstos
con los procedimientos y en consonancia con valores específicos, ha de ser uno de los elementos bási-
cos a revisar en la evaluación.
Para ello se han debido programar actividades con la intención de que las consigan. En todo caso, cada
Proyecto Curricular deberá marcar con más precisión los criterios de evaluación y ser consecuentes con
ellos.
En esta evaluación, además del profesorado (que será también calificador), deben participar el grupo y
el propio alumno o alumna, ya que es muy importante que sea consciente de sus propios aprendizajes,
los integre en su red conceptual y tenga oportunidad de mejorar los aspectos más débiles del proceso.
Lo puede hacer, entre otras estrategias, revisando su propio cuaderno con una plantilla de observación
y contestando a cuestionarios preparados por el profesorado o el grupo.
Las estrategias a utilizar por el profesorado pueden estar entre las siguientes: cuestionarios o ítems
para conocer las ideas previas y sus cambios, pruebas objetivas, ejercicios e informes; revisión de los
cuadernos del alumno con una plantilla preparada al efecto y que incluso ha podido ser consensuada
con él, para conocer su expresión, comprensión, el orden en su trabajo...; cuaderno del profesor o pro-
fesora y sesiones tomadas en audio o vídeo para investigar las relaciones en el aula; informes para co-
nocer los aprendizajes; plantillas de doble entrada para ver relaciones entre contenidos; etc.
B) EVALUACIÓN DEL PROFESOR Y DE LA PROFESORA
Para que el alumno consiga estas destrezas y capacidades el profesor o la profesora deberá actuar
como facilitador de ese aprendizaje. También su labor debe ser evaluada, por el alumnado y en su caso
por observadores externos y otros miembros de la Comunidad Educativa.
El profesor y la profesora deben ser evaluadores del alumno, de sí mismo, de las actividades que propo-
ne, de las estrategias que utiliza y del clima que se consigue en el aula.
Lo pueden hacer tomando datos en su cuaderno de incidencias, o con grabaciones ocasionales de audio
y vídeo, encuestas, etc.
C) EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES
El alumno y la alumna aprenderán realizando actividades que, a su vez, han de ser evaluadas para ver
si cumplen condiciones como: si han sido elegidas siguiendo una secuenciación adecuada, si propician la
adquisición de una metodología científica, si atienden al nivel cognitivo, psicológico, y social del alumno,
si son adecuadas para la estrategia pedagógica elegida, etc.
En el trabajo con problemas, habrá de tenerse en cuenta si la investigación llevada a cabo ha seguido
secuencias que estén dentro de los límites de un trabajo científico o son meras tentativas que no pue-
dan calificarse como tales, así como si su resolución ha servido para aprender y no sólo para utilizar
nuevos contenidos de cualquier tipo.
Esta evaluación debe ser hecha por la profesora o por el profesor (tomando notas de las facilidades o
dificultades de cada una de ellas, situaciones que han provocado en clase, etc.) y los alumnos, por me-
dio de cuestionarios, plantillas de doble entrada en la que en uno de los lados estén especificados los
objetivos que se trata de conseguir, etc.
D) EVALUACIÓN DE ESTRATEGIAS
El profesor, y algunas veces los alumnos, organizan los recursos existentes para conseguir un aprendi-
zaje más significativo y muchas veces más lúdico: pósteres, laboratorios, salidas al campo y visitas a
museos y fábricas, audiovisuales utilizados como cine-forum, video-forum, ordenadores para buscar in-
formación y bibliografía... Su evaluación da pie a revisar comportamientos de grupo, además de aportar
datos de aprendizajes de contenidos.
También debe ser evaluada la temporalización que se ha programado para tener datos fidedignos de los
ritmos del proceso seguido y tenerlo en cuenta en futuras programaciones
4.6.3. Cuándo evaluar
Si la evaluación debe ser un proceso permanente, habrá que plantearse una EVALUACIÓN INICIAL para
que sitúe el estado de partida del sistema (alumnado, grupo pequeño, clase), una EVALUACIÓN FORMA-
TIVA y por tanto continua que contribuya al perfeccionamiento de un programa en desarrollo, y una
EVALUACIÓN SUMATIVA que al final del proceso compruebe la eficacia de los resultados del programa.
4.6.4. Criterios de evaluación
La evaluación ha de realizarse en torno al grado de consecución de los objetivos generales del Área de
Ciencias de la Naturaleza. Ahora bien, estos objetivos están expresados en términos de capacidades a
desarrollar, por lo que no son directamente observables ni medibles. Por ello, es preciso definir unos cri-
terios que lo sean, entendiendo por criterios de evaluación aquellas conductas observables y medibles
que puedan servir para aportar indicios del grado de consecución de los objetivos propuestos.
Estos criterios facilitarán pautas para fijar los objetivos didácticos de las Unidades Didácticas así como
el resto de sus partes.
A continuación se explicitan los criterios de evaluación, exponiendo en primer lugar un desarrollo opera-
tivo de los objetivos del Área en la Etapa, seguidos de unas orientaciones sobre los mismos que pueden
facilitar su concreción en los niveles posteriores, tanto en los Planes Curriculares de Centro como en las
Programaciones de Aula. Por último, se indican una serie de posibles conductas observables que pueden
ser indicadoras del grado de consecución de dichos criterios.
1. Utilizar adecuadamente las diversas formas del lenguaje aplicado a las Ciencias.
La capacidad de comprender y expresar mensajes se ha de desarrollar a través de todas las Áreas, y no
sólo en las referidas al lenguaje. En la enseñanza-aprendizaje de las Ciencias se ha de dar gran impor-
tancia al buen uso del lenguaje, tanto al oral y escrito como a aquellos otros sistemas de notación y re-
presentación de los que se valen dichas ciencias para el estudio de los fenómenos naturales.
Para su evaluación serán de utilidad tanto las intervenciones en la clase de los alumnos como su cua-
derno de actividades o los controles periódicos. Se deben proponer también textos científicos breves
para que los lean, identifiquen las ideas centrales, resuman el contenido, expliquen el significado de pa-
labras clave, etc.
Dada la flexibilidad y polisemia del lenguaje cotidiano frente al rigor y univocidad del lenguaje científico,
se habrá de evaluar que el alumnado utilice de forma adecuada términos de uso frecuente como fuerza,
energía, materia, trabajo, sustancia, roca, ser vivo, etc. En el arraigo del lenguaje ordinario se encuen-
tra tal vez una de las dificultades para que se alcance el cambio conceptual, aspecto éste que se debe
tener en cuenta sobre todo al final de la Etapa.
Conductas observables que pueden servir de indicadores del grado de consecución de este criterio serí-
an si:
- Toman datos, los ordenan y los representan.
- Interpretan tablas, gráficas y relaciones.
- Interpretan claves, mapas y modelos.
- Utilizan la nomenclatura y formulación sencilla de las sustancias químicas más comunes en la vida
cotidiana.
- Emiten de forma precisa y comprensible definiciones y descripciones. - Comentan textos científicos.
- Emiten informes de comunicación de resultados acompañándolos de esquemas, gráficas, fotografí-
as, dibujos...
2. Aplicar sus conocimientos científicos y avanzar en la interpretación científica del mundo y de situacio-
nes de la vida cotidiana.
La mejor forma de evaluar el marco conceptual de los alumnos es poniéndolo a prueba en la explicación
de situaciones diversas, y no mediante preguntas directas.
Dado que sus conceptos de partida pueden no coincidir con los establecidos por las Ciencias, habrá que
evaluar en qué medida se ha avanzado en el cambio conceptual, sabiendo siempre que éste es un obje-
tivo no alcanzable a corto plazo, y que tanto el conocimiento científico como su reconstrucción por los
alumnos y alumnas son procesos que se realizan mediante aproximaciones sucesivas. Es por ello que
siempre, pero especialmente al comienzo de la etapa, habrá que procurar favorecer la curiosidad y el
interés de los alumnos hacia las Ciencias y sus explicaciones.
Los instrumentos de evaluación en este caso pueden ser cuestiones razonadas, ensayos, análisis y co-
mentarios de textos, etc.
Conductas observables que pueden servir de indicadores del grado de consecución de este criterio serí-
an si:
- Utilizan teorías, leyes y principios para explicar hechos y fenómenos e interpretar procesos.
- Utilizan modelos sencillos para la explicación de comportamientos o propiedades.
- Reconocen la conservación de ciertas magnitudes o propiedades.
- Manifiestan interés y satisfacción en la búsqueda de explicaciones científicas para interpretar la Na-
turaleza.
3. Aplicar estrategias coherentes con los procedimientos de la ciencia en la resolución de problemas.
El tratamiento y resolución de situaciones problemáticas ha de verse como una actividad fundamental
en la enseñanza-aprendizaje de las Ciencias.
La evaluación de la capacidad de utilizar estrategias de resolución problemas se ha hacer colocando a
los alumnos ante situaciones problemáticas acordes con su nivel de desarrollo. Dichas situaciones pue-
den ser desde problemas que únicamente requieren lápiz y papel, hasta aquellas otras en las que es
necesario la realización de actividades prácticas en la clase o el laboratorio. Han de tenerse también en
cuenta actividades ordinariamente olvidadas, como son la identificación de problemas o el planteamien-
to de hipótesis.
En cuanto a instrumentos útiles de evaluación pueden ser los cuadernos de trabajo, la observación di-
recta, las pruebas de lápiz y papel e incluso la autoevaluación. En todo caso no deben valorarse sólo los
resultados obtenidos, sino también los procesos seguidos.
Conductas observables que pueden servir de indicadores del grado de consecución de este criterio serí-
an si:
- Caracterizan y/o identifican sustancias, objetos, seres vivos y ecosistemas.
- Clasifican y establecen semejanzas o diferencias entre ellos.
- Identifican los cambios y las causas que los provocan.
- Establecen relaciones entre los hechos y sus consecuencias.
- Establecen diferencias entre hechos, funciones o procesos que estén relacionados, pero sean dife-
rentes.
- Trabajan en la resolución de problemas, mediante:
• La identificación y acotación de los mismos.
• La emisión y explicitación de ideas previas.
• La búsqueda, recopilación y selección de la información precisa (observación a simple vista, con ins-
trumentos sencillos, consulta bibliográfica...).
• La formulación de hipótesis propias.
• El diseño y realización de actividades de contrastación y/o de experimentos con instrumentos de ob-
servación y medida.
• La comprobación de relaciones sencillas entre variables.
• La utilización de técnicas básicas de laboratorio y de campo.
• La interpretación de resultados, crítica y comunicación de, los mismos.
4. Desarrollar relaciones de cooperación en las tareas de planificación y realización de actividades de re-
solución de problemas.
El trabajo en pequeño grupo es una de las formas de organización espacial del aula más útil, por lo cual
deberá ser practicada y también evaluada.
En un primer momento se atenderá al establecimiento y consolidación de los grupos y al logro de unas
normas básicas de funcionamiento que aseguren la integración y participación de todos sus miembros.
Una vez conseguido esto, se habrá de poner más énfasis en la eficacia del trabajo grupal.
Instrumentos de evaluación útiles pueden ser la observación directa, la exposición de trabajos, cuestio-
narios, etc., sin olvidar la autoevaluación de los alumnos, tanto personal como de los otros miembros
del grupo.
Conductas observables que pueden servir de indicadores del grado de consecución de este criterio serí-
an si:
- Establecen proyectos comunes y potencian actividades de coordinación para llevarlos a cabo.
- Aplican técnicas organizativas.
- Reparten responsabilidades en el trabajo en equipo.
- Comparten ideas, iniciativas y decisiones tomadas en equipo.
- Son tolerantes con las opiniones de los demás.
- Asumen el reparto de tareas sin distinción de sexo o roles sociales.
5. Poner en práctica hábitos de cuidado y salud personal basados en sus conocimientos sobre el cuerpo
humano, colaborando para la consecución de un medio sano y saludable.
La funcionalidad del conocimiento científico se ha de manifestar en aquellos aspectos más cercanos al
alumno, y en especial en los referentes a su propio cuerpo o al entorno, no sólo para conocer su funcio-
namiento sino también para desarrollar actitudes, valores y hábitos adecuados.
La evaluación de estos hábitos se ha de realizar a través del cumplimiento de las normas establecidas
para el trabajo en el aula, en las prácticas de laboratorio, en las salidas al campo o en las actividades
extraescolares.
Como instrumentos pueden usarse la observación directa, los test de actitud, las entrevistas, los cues-
tionarios, etc.
Conductas observables que pueden servir de indicadores del grado de consecución de este criterio serí-
an si:
- Mantienen hábitos de orden y limpieza.
- Evitan actividades que supongan riesgo para la salud tanto personal como colectiva.
- Respetan las normas de seguridad e higiene.
- Cuestionan sus hábitos alimenticios y de consumo.
- Reconocen la existencia de distintas conductas sexuales.
- Asumen la diversidad a nivel físico y psíquico como fuente de riqueza colectiva.
- Deducen de los procesos fundamentales de los seres vivos aplicaciones prácticas para su vida.
- Relacionan la salud con determinadas características de otros sistemas (agua potable, aire puro...).
6. Participar en la conservación y mejora del medio.
Dado que los seres humanos somos hoy el principal agente de cambios en el medio natural, se han de
tener en cuenta y evaluar aquellas actitudes y hábitos que desde las Ciencias ayuden a su conserva-
ción, mejora y un adecuado disfrute.
Será importante que el alumnado tome conciencia de la problemática medioambiental de su entorno
concreto y participe en actividades de conservación y mejora.
Conductas observables que pueden servir de indicadores del grado de consecución de este criterio serí-
an si:
- Disciernen los elementos que forman parte de los ecosistemas, sus relaciones y las consecuencias
que de ellas se deriven.
- Respetan todas las formas de vida.
- Distinguen los distintos aspectos que hacen idónea o no una alternativa de recuperación o mejora
del entorno.
- Identifican las causas que contribuyen a la degradación del medio. - Hacen un uso racional de la
energía y otros recursos.
7. Elaborar criterios personales y razonados para valorar fundamentadamente las aportaciones de la
Ciencia al desarrollo tecnológico y social.
La importancia de las Ciencias viene marcada hoy por su contribución al desarrollo tecnológico y social,
aspectos éstos que tienen que destacar en su enseñanza.
Una forma de hacerlo es conectando esta enseñanza con los problemas sociales o del entorno más pró-
ximo, y valorando la importancia de las Ciencias de la Naturaleza en su solución. Dados los aspectos ne-
gativos que pueden derivarse para las personas o el medio, han de realizarse valoraciones y contrastes
desde diferentes puntos de vista.
Los instrumentos de evaluación pueden ser debates, juegos de simulación, trabajos monográficos, etc.
Conductas observables que pueden servir de indicadores del grado de consecución de este criterio serí-
an si:
- Desarrollan capacidades de iniciativa, interés y curiosidad científica (lecturas, documentales científi-
cos de T.V., etc.).
- Usan adecuadamente los recursos bibliográficos.
- Reconocen las principales aportaciones de la Ciencia al desarrollo y bienestar social.
- Desarrollan una actitud rigurosa y crítica ante las cuestiones científicas y tecnológicas con la ayuda
de medios audiovisuales, informáticos y escritos.
8. Reconocer el conocimiento científico como un proceso de construcción colectiva en revisión y evolu-
ción continua.
En la enseñanza de las Ciencias se ha de resaltar su carácter de proceso de construcción colectiva, en
donde los conocimientos adquiridos no son nunca acabados y definitivos.
La mejor forma tal vez de poner esto de manifiesto y evaluarlo es a través del trabajo en grupo en el
tratamiento de situaciones problemáticas, en donde la solución si es posible alcanzarla, puede lograse
por diferentes caminos y a diferentes niveles de profundidad.
Como instrumentos de evaluación pueden ser útiles los comentarios de textos, los cuestionarios, y so-
bre todo las cuestiones con problemas abiertos que no sean meros ejercicios de aplicación.
Conductas observables que pueden servir de indicadores del grado de consecución de este criterio serí-
an si:
- Modifican sus ideas previas, incorporando las nuevas y planteándose con ellas dar explicaciones a
nuevos problemas.
- Identifican algunos de los grandes cambios habidos en los conocimientos científicos a lo largo de la
Historia.
- Aceptan que los conocimientos científicos actuales no son verdades absolutas e inmutables.
- Ejercitan la creatividad aportando todo tipo de recursos en la construcción de sus propios conoci-
mientos.
- Aportan sus ideas y recursos al grupo de trabajo, debatiéndolos, para la resolución de las situacio-
nes problemáticas planteadas.