Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
Artículo
Discusión
Leer
Editar
Ver historial
Herramientas
Para otros usos de este término, véase Diamante (desambiguación).
Diamante
General
Categoría Minerales Compuestos y elementos (no metales)
Clase
1.CBº11
0a (Strunz)
Fórmula química C
Propiedades físicas
Color Típicamente amarillo, marrón o gris a incoloro. Menos frecuente azul, verde,
negro, blanco translúcido, rosado, violeta, anaranjado, púrpura y rojo (fancy
diamond).1
Raya Incolora
Lustre Adamantino1
Transparencia Transparente a subtransparente a translúcido.
Sistema cristalino Isométrico-Hexoctaédrico (Sistema cristalino cúbico)
Fractura Concoidal
Dureza 10 (Escalas de dureza)
Densidad 3,5 - 3,53 g/cm³
Índice de refracción 2,4175 - 2,4178
Birrefringencia Ninguna
Pleocroísmo Ninguno
Propiedades ópticas Refractiva simple
Minerales relacionados
Zirconia cúbica, Moissanita, Carburo de silicio
[editar datos en Wikidata]
En la mineralogía el diamante es un alótropo del carbono en el que los átomos de
carbono están dispuestos en una variante de la estructura cristalina cúbica
centrada en la cara denominada. El diamante es la segunda forma más estable de
carbono, después del grafito; sin embargo, la tasa de conversión de diamante a
grafito es despreciable a condiciones ambientales. El diamante tiene renombre
específicamente como un material con características físicas superlativas, muchas
de las cuales derivan del fuerte enlace covalente entre sus átomos. En particular,
el diamante tiene la más alta dureza y conductividad térmica de todos los
materiales conocidos por el ser humano. Estas propiedades determinan que la
aplicación industrial principal del diamante sea en herramientas de corte y de
pulido además de otras aplicaciones.
El diamante es uno de los minerales con más valor del mundo por sus características
físicas y ópticas. Debido a su estructura cristalina extremadamente rígida, puede
ser contaminada por pocos tipos de impurezas, como el boro y el nitrógeno.
Combinado con su gran transparencia (correspondiente a una amplia banda prohibida
de 5,5 eV), esto resulta en la apariencia clara e incolora de la mayoría de
diamantes naturales. Algunas pequeñas cantidades de defectos o impurezas
(aproximadamente una parte por millón) inducen un color de diamante azul (boro),
amarillo (nitrógeno), marrón (defectos cristalinos), verde, violeta, rosado, negro,
naranja o rojo. El diamante también tiene una dispersión refractiva relativamente
alta, esto es, la propiedad de dispersar luz de diferentes colores, lo que resulta
en su lustre característico. Sus propiedades ópticas y mecánicas excelentes,
combinadas con una mercadotecnia eficiente, hacen que el diamante sea la gema más
popular.
Historia
El nombre diamantes deriva del griego antiguo ἀδάμας (adámas), «propio»,
«inalterable», «irrompible, indomable», de ἀ- (a-), «sin» + δαμάω (damáō), «yo
gobierno, yo domo».2 Sin embargo, se piensa que los diamantes fueron reconocidos y
minados por primera vez en la India, donde depósitos aluviales significativos de
dicha piedra podrían haberse encontrado hace muchos siglos a lo largo de los ríos
Penner, Krishna y Godavari. Se considera probado que los diamantes eran conocidos
en la India desde hace al menos 3000 años, y se conjetura que se conocieran hace ya
6.000 años.3
Los diamantes han sido atesorados como gemas desde su uso como iconos religiosos en
la antigua India. Su uso en herramientas de grabado también se remonta a la
historia humana más temprana.45 La popularidad de los diamantes ha ido creciendo
desde el siglo xix debido a su creciente suministro, mejores técnicas de corte y
pulido, crecimiento en la economía mundial, y campañas de publicidad innovadoras y
exitosas.6
En 1813 Humphry Davy usó una lente para concentrar los rayos del sol en un diamante
en una atmósfera de oxígeno y demostró que el único producto de la combustión era
dióxido de carbono, demostrando que el diamante estaba compuesto de carbono.
Posteriormente demostró que, en una atmósfera desprovista de oxígeno, el diamante
se convierte en grafito.7
El uso más familiar de los diamantes hoy en día es como gemas usadas para adorno,
un uso que se remonta a la antigüedad. La dispersión de la luz blanca en los
colores espectrales es la característica gemológica primaria de las gemas
diamantes. En el siglo xx expertos en el campo de la gemología han desarrollado
métodos para clasificar a los diamantes y otras gemas, basándose en las
características más importantes de su valor como gema. Las cuatro características,
conocidas informalmente como las cuatro C, desarrolladas por GIA, son usadas ahora
de un modo común como descriptores básicos de los diamantes: estos son carat, cut,
colour y clarity 8(peso, talla, color y pureza).
Propiedades materiales
Artículo principal: Propiedades físicas del diamante
El diamante y el grafito son dos alótropos del carbono: formas puras del mismo
elemento, pero que difieren en estructura.
Un diamante es un cristal transparente de átomos de carbono enlazados
tetraedralmente (sp3) que cristaliza en la red de diamante, que es una variación de
la estructura cúbica centrada en la cara. Los diamantes se han adaptado para muchos
usos, debido a las excepcionales características físicas. Las más notables son su
dureza extrema y su conductividad térmica (900–2.320 W/(m·K)),9 así como la amplia
banda prohibida y alta dispersión óptica.10 Sobre los 1.700 °C (1.973 K / 3.583 °F)
en el vacío o en atmósfera libre de oxígeno, el diamante se convierte en grafito;
en aire la transformación empieza aproximadamente a 700 °C.11 Los diamantes
existentes en la naturaleza tienen una densidad que va desde 3,15–3,53 g/cm³, con
diamantes muy puros generalmente extremadamente cerca a 3,52 g/cm³.12
Los diamantes naturales más duros en el mundo son los de los campos de Copeton y
Bingara, ubicados en el área de New England en Nueva Gales del Sur, Australia.
Fueron llamados can-ni-faire ("no puede hacerse nada con ellos"—una combinación del
inglés "can" = poder, italiano "ni" = no y el francés "faire" = hacer15) por los
cortadores en Amberes cuando empezaron a llegar en cantidades desde Australia en la
década de 1870. Estos diamantes son generalmente pequeños, octaedros perfectos a
semiperfectos, y se usan para pulir otros diamantes. Su dureza está asociada con la
forma de crecimiento del cristal, que es en una sola etapa. La mayor parte de los
otros diamantes muestran más evidencias de múltiples etapas de crecimiento, lo que
produce inclusiones, fallas y planos de defectos en la red cristalina, todo lo cual
afecta a su dureza.16 Es posible tratar diamantes regulares bajo una combinación de
presión y temperatura altas para producir diamantes que son más duros que los
diamantes usados en dispositivos de dureza.17
La dureza de los diamantes contribuye a su aptitud como gema. Debido a que solo
pueden ser rayados por otros diamantes, mantienen su pulido extremadamente bien. A
diferencia de otras gemas se adaptan bien al uso diario debido a su resistencia al
rayado —tal vez esto contribuye a su popularidad como la gema preferida en anillos
de compromiso y anillos de matrimonio, que suelen ser usados todos los días durante
décadas—.
Tenacidad
La tenacidad se refiere a la habilidad del material de resistir la ruptura debido a
un impacto fuerte. La tenacidad del diamante natural ha sido medida como 2,0
MPa·m1/2,25 y el factor de intensidad de tensión crítica es 3,4 MN·m−3/2.26 Estos
valores son altos comparados con otras gemas, pero bajos comparados con la mayoría
de materiales de ingeniería. Como con cualquier material, la geometría microscópica
de un diamante contribuye a su resistencia a la fractura. El diamante tiene un
plano de fractura y de ahí es más frágil en algunas orientaciones que en otras. Los
cortadores de diamantes usan este atributo para quebrar algunas piedras, como paso
previo al facetado.13