Cómo hacerse amigo de un árbol

A los practicantes principiantes del masaje

chino de órganos internos (Chi Nei Tsang) se les
enseña cómo comunicarse con los árboles. ¿No
debería esto ser parte de la educación de todos?

por Mantak Chia

RECOLECCIÓN DE ENERGÍA DEL ÁRBOL

1. Las capacidades curativas de los árboles

Los maestros taoístas observaron que los árboles son
plantas tremendamente poderosas. No sólo pueden
absorber dióxido de carbono y transformarlo en
oxígeno, sino que también pueden absorber fuerzas
negativas y transformarlas en buena energía. Los árboles arraigan
fuertemente con la Tierra, y cuanto más arraigado está el árbol, más alto
puede extenderse hasta el Cielo. Los árboles permanecen muy quietos,
absorbiendo la Energía de la Tierra y la Fuerza Universal de los Cielos.

Los árboles y todas las plantas tienen la capacidad de absorber la luz de las
energías y transformarla en alimento; de hecho, dependen de la luz para la
mayor parte de su alimentación, mientras que el agua y los minerales
terrestres constituyen aproximadamente el 30% de su ingesta nutricional.
Los árboles pueden vivir vidas muy largas.

a. El árbol como sanador y amigo

Los árboles son las plantas más grandes y espiritualmente más avanzadas de
la tierra. Están constantemente en meditación y la energía sutil es su
lenguaje natural. A medida que crezca su comprensión de este idioma, podrá
comenzar a desarrollar una relación con ellos. Pueden ayudarte a abrir tus
canales de energía y cultivar la calma, la presencia y la vitalidad. Puede
corresponderles ayudándolos con sus propios bloqueos y áreas
desvitalizadas. Es una relación mutuamente beneficiosa que necesita cultivo.

b. Elegir un árbol para trabajar

A lo largo de la historia, los seres humanos han utilizado todas las partes del
árbol con fines curativos y medicinales. Los mejores árboles para curar son
los árboles grandes, especialmente los pinos. Los pinos irradian Chi, nutren
la sangre, fortalecen el sistema nervioso y contribuyen a una vida larga.
También nutren almas y espíritus. Los pinos son el "árbol inmortal". La
poesía y la pintura chinas tempranas están llenas de admiración por los
pinos.
Aunque los pinos suelen ser la mejor opción, se pueden utilizar muchos otros
árboles o plantas. Los árboles más grandes contienen la mayor cantidad de
energía. Entre los más poderosos se encuentran los árboles que crecen cerca
del agua corriente. Algunos árboles se sienten más calientes o más calientes
que otros; algunos se sienten más fríos o más fríos que otros. Practique
distinguir las diferentes propiedades de diferentes árboles.

1. Los cipreses y cedros reducen el calor y nutren la energía Yin.

2. Los sauces ayudan a expulsar los vientos enfermizos, eliminar el exceso
de humedad del cuerpo, reducir la presión arterial alta y fortalecer el tracto
urinario y la vejiga.
3. Los olmos calman la mente y fortalecen el estómago.
4. Los arces ahuyentan los vientos enfermizos y ayudan a reducir el dolor.
5. Los árboles de langosta ayudan a eliminar el calor interno y ayudan a
equilibrar el clima del
corazón.
6. Los banianos limpian el corazón y ayudan a eliminar la humedad del
cuerpo.
7. Los árboles de canelo pueden eliminar el frío del corazón y del abdomen.
8. Los abetos ayudan a curar hematomas, reducir la hinchazón y curar
huesos rotos más rápido.
9. Los árboles de espino ayudan a la digestión, fortalecen los intestinos y
reducen la presión arterial.
10. Los abedules ayudan a eliminar el calor y la humedad del cuerpo y
ayudan a desintoxicarlo.
11. Los ciruelos nutren el bazo, el estómago y el páncreas y calman la
mente.
12. Las higueras eliminan el exceso de calor del cuerpo y aumentan la
saliva. nutrir el bazo. y ayudar a detener la diarrea.
13. Los árboles de ginco ayudan a fortalecer la vejiga y aliviar los problemas
urinarios en las mujeres.

No es necesario adentrarse mucho en el bosque para encontrar un árbol

apropiado con el que trabajar. Los árboles que están acostumbrados a tener
gente alrededor entienden nuestra energía y en realidad son más accesibles
y amigables que los que se encuentran en la naturaleza. Los parques
urbanos y los patios suburbanos están llenos de árboles poderosos y
accesibles a los que les encantaría tener relaciones más estrechas con los
humanos que dominan su entorno.

Existe un cierto rango de tamaños dentro del cual los árboles son más
accesibles para los seres humanos. Cuando un árbol es demasiado pequeño,
no tiene suficiente energía para causarte una gran impresión. Cuando el
árbol es demasiado grande, tienes el problema opuesto, por lo que se
necesita más perseverancia para conseguir que los árboles grandes se
interesen por ti. Como fuente de energía curativa, lo mejor es elegir un árbol
grande y robusto dentro del rango de tamaño accesible. Para una interacción
lúdica, lo mejor es elegir un árbol de tamaño pequeño a mediano. Si bien no
es necesario trepar al árbol para desarrollar una relación, sí abre un mundo
completamente nuevo. Sube con cuidado y cuidado para no dañar el árbol.
c. Establecer comunión con un árbol
Existen ciertos métodos para acercarse, interactuar, alejarse y despedirse de
un árbol. Si sigue pasos específicos, creará un ritual de comunión silenciosa
que tanto usted como el árbol podrán comprender y, por lo tanto, aumentará
el potencial de una interacción armoniosa. Los pasos se derivaron de la
observación del curso natural de los acontecimientos en comunión de energía
sutil, y se aplican a la comunión con casi cualquier cosa: árbol, roca, humano
o animal, aunque lo siguiente se refiere específicamente a los árboles.

En primer lugar, cada árbol, como cada persona, tiene una personalidad,
unos deseos y una vida propia. Los árboles difieren mucho en su gusto por el
contacto humano. Algunos son muy generosos y quieren darte toda la
energía que puedas. Otros están débiles o enfermos y necesitan su energía
reconfortante y curativa. Algunos son simplemente almas amigables que
disfrutan de la compañía humana. Otros te son bastante indiferentes. Puedes
aprender y crecer trabajando con todos ellos. Trate de ser abierto y
respetuoso, en lugar de presionar a los árboles para que sirvan a sus propios
propósitos. De esta manera, te proporcionarán algo más que una fuente más
de Chi: amistad, expresión lúdica y amor.

Los árboles operan en una escala de tiempo más larga que los seres
humanos. Puedes ayudar a cerrar esta brecha volviendo una y otra vez al
mismo árbol, para que se desarrolle una relación. Visítelo con regularidad
para que el árbol sepa cuándo esperarlo y pueda esperar verlo. Es posible
que tengas la clara impresión de que el árbol realmente te extraña cuando
estás ausente por más tiempo de lo habitual.
La comunión espiritual con los árboles se parece más al amor que a cualquier
otra actividad humana. Como tal, debe estar presente una cualidad de
sensualidad y ternura. No siempre es necesario tener el control de la
situación. Deje algo de tiempo para relajarse y fundirse en la comunión. Deja
que el árbol te lleve a las maravillas de su propia vida interior. Trabajar con
árboles de esta manera puede ayudar a aliviar la frustración sexual. Es
posible que descubra que algunas de las prácticas presentadas aquí se
pueden adaptar fácilmente para usarlas al hacer el amor.

2. Practicando con un árbol y la fuerza de la Tierra a. Utilice las

palmas para absorber el Yin Chi y ayudar a equilibrar la energía Yang
(Figura 2-29)
Desde la mañana hasta el mediodía es el mejor momento para practicar con
un árbol.

1. Asume una posición . Párate o siéntate a uno o dos pies frente a un árbol.
 2. Ábrete a un árbol . Relájate y
céntrate. Siente que tus límites
se suavizan. Permítete volverte
más receptivo y algo vulnerable,
listo para hacer contacto con el
árbol. Siente que tu campo de
energía se abre como una flor,
sin emitir ni absorber energía,
simplemente volviéndose
abierto y disponible (Figura 2-
30).
Figura 2-28. Practica con un árbol para absorber la energía del árbol
y luego devolverla al árbol.
3. Ofrecer una bienvenida .
Ciclo Yin: utiliza las palmas y la parte interior de los
brazos. Ciclo Yang: utiliza las yemas de los dedos y la
parte exterior. Extiende tus brazos y mira las
palmas de tus manos hacia el árbol. Extiende tu energía hacia el
árbol con una actitud amistosa de "ofrenda". Cuando el árbol responda
extendiéndote su energía, acéptalo, inspirándolo en tu cuerpo con una
actitud de “bienvenido”. Utilice su mente y sus ojos de la siguiente manera.
Con la parte inferior de los ojos, concéntrate en la punta de tu nariz. Con la
parte superior de los ojos, mira tus palmas y el árbol.

Deja que tu intuición te guíe mientras respondes al árbol nuevamente con

otro gesto de “ofrecimiento”. Continúe con varios de estos intercambios.
Tómate tu tiempo y siente realmente lo que está sucediendo.

Utilice la palma izquierda, la mente y la parte superior de los ojos para

absorber el Chi.

4. Seguimiento paralelo . Permanece centrado en ti mismo, sin acercarte ni

retroceder, y simplemente observa la relación sutil entre tú y el árbol. Utilice
la concentración meditativa para quedar muy absorto en su conexión con el
árbol, sin intentar activamente cambiar o analizar lo que está sucediendo. No
intentes profundizar la comunión ni disminuirla. Controla tu propia energía y
observa el árbol mientras el árbol controla su propia energía y te observa.
Esto se conoce como seguimiento paralelo. Este estado neutral puede ocurrir
varias veces durante una sesión, tanto en niveles de intimidad profundos
como superficiales.
5. Dibujar y mantener cerrado . Permita que el campo de energía entre
usted y el árbol se intensifique, se espese y se contraiga para atraer y
mantener cerrados a los dos juntos. Puede que haya o no movimiento físico
involucrado. La sensación es que ustedes dos están envueltos en un capullo
de energía mientras más y más núcleos internos están expuestos el uno al
otro. Finalmente se abrazan en un abrazo de profunda intimidad.
Acercarse y mantenerse cerca a menudo ocurre espontáneamente a medida
que el ofrecimiento y la bienvenida aumentan para convertirse en circulación
y compartir, o cuando la circulación y el compartir se mueven a niveles cada
vez más profundos.

6. Guía el Chi . Como ocurre con todas las prácticas del Tao Curativo, es
necesario que entrenes tus ojos y tu mente para mover y guiar el Chi. Esta
práctica también es útil para entrenarse a reconocer y ser consciente de la
calidad de la energía del árbol. Siente la energía del árbol cuando entra en tu
cuerpo. Cuando la envíes al árbol, combínala con la Energía del Plano
Humano (Partícula Cósmica). Observe cómo se siente la energía cuando
regresa a usted desde el árbol: mejorada con una cualidad fresca y curativa.
Observe también cómo cambia la calidad de la energía después de nueve,
dieciocho, 24 y 36 ciclos.

Mueva la parte superior de los ojos para guiar el Chi lentamente hacia arriba
por el lado interior Yin del brazo izquierdo, hasta el hombro izquierdo, el lado
izquierdo del cuello, la oreja izquierda y la coronilla. Desde la coronilla,
mueva el Chi hacia abajo por el lado derecho hasta la parte posterior de la
oreja derecha, hacia el cuello derecho, el hombro derecho, dentro del brazo
derecho y hasta la palma derecha. Proyecta el Chi hacia el tronco del árbol.
Absorber nuevamente el Chi en un círculo (el Círculo de Energía Yin): 36
ciclos para hombres y 24 ciclos para mujeres. (Figura 2-30)

7. Extenderse a un nivel más profundo. Ahora comienza a intercambiar

energía con el árbol en un nivel más profundo. Compartir con el árbol en un
nivel más profundo significa poner una parte particular de tu cuerpo en
contacto con una parte particular del cuerpo del árbol, y respirar la energía
de un lado a otro entre ellas. Circular ahora significa guiar la energía por un
camino que pasa por ambos cuerpos y regresa a su punto de partida. Puedes
guiar el Chi como en (6) arriba. Con el tiempo descubrirás que son posibles
muchos patrones diferentes.

8. Dibujar y retener para terminar con gracia. Dibujar y reprimirse es muy

importante. Le impide absorber más energía del árbol de la que puede
utilizar armoniosamente. También evita que usted drene demasiada energía
de un árbol pequeño o débil, o que deje dicho árbol con demasiada energía
negativa sin procesar. Además, sella las conexiones que has hecho con el
árbol para que no se filtre energía al entorno después de que te vayas. En
definitiva, se trata de una meditación estéticamente completa y una muestra
de respeto por el árbol. Cuando hayas tenido suficiente y desees comenzar a
regresar a la conciencia normal o simplemente a un nivel menos profundo de
comunión, intenta hacerlo lenta y gradualmente para no perturbar la belleza
de lo que acabas de compartir. La sensación es la de regresar gradualmente
a ti mismo, separando la energía que te pertenece de la energía que
pertenece al árbol y restableciendo el límite entre ustedes.

Es importante tener en cuenta en este momento que si, después de haber

realizado la curación, todavía sientes mucha energía en tus manos, cierra el
punto de la corona para sellarlo y que tu energía curativa no siga fluyendo.

A los árboles les gusta mucho el contacto humano y probablemente estarás

listo para partir mucho antes de que el árbol esté listo para que te vayas.

a. Necesitas retirar gradualmente tu atención del contacto y centrarla más

en ti mismo.

b. Al hacer esto, gran parte de la energía compartida será atraída hacia su

cuerpo. Cuando esto suceda, simplemente “empuja hacia atrás” la corriente
de energía del árbol para evitar que la mayor parte entre en tu cuerpo y al
mismo tiempo permite que regrese tu energía humana.

c. Luego, cuando tus polaridades se inviertan, permite que la energía del

árbol fluya de regreso hacia el árbol, pero mantén tu propia energía
consciente dentro de tu cuerpo.

d. Después de un par de intercambios, el árbol captará la idea y comenzará a

cooperar contigo. En poco tiempo estarás completamente de regreso en tu
propio cuerpo y listo para el cierre.

e. Para desconectarte de un patrón de circulación poderoso, centra

gradualmente tu atención en la zona del ombligo, el lugar donde finalizar la
meditación. A medida que la energía se acumula allí, permita que el exceso
fluya hacia el árbol.

f. Si el árbol intenta alimentarte con energía desde otro punto, rechaza este
flujo de la manera descrita anteriormente.

g. Con el tiempo, el patrón cesará y compartirás energía con el árbol en el

punto seleccionado. Ahora puedes ordenar qué energía te pertenece y cuál
pertenece al árbol para completar el dibujo.

h. Cuando estás muy profundamente en comunión con un árbol,

probablemente tendrás “demasiado camino por recorrer” para retroceder en
un solo paso. En cambio, después de un retiro parcial y de una contención,
retomar la circulación y el compartir, pero de una manera menos intensa.
Gradualmente, después de varios de estos pasos, volverás completamente a
ti mismo.
9. Clausura . Termine siempre con un cierre. El cierre es un gesto preciso y
algo abrupto que rompe la conexión, fija cualquier curación que pueda haber
ocurrido e imparte un sentimiento de buena voluntad, todo en uno o dos
segundos. El cierre puede ser un movimiento, un sonido o simplemente un
cambio en el campo de energía sutil, como un aplauso o un movimiento de
cabeza. Un movimiento suave de un puño en un arco hacia arriba,
finalizando con un pequeño puñetazo hacia abajo, es muy efectivo. Los
sonidos "Ho" o "Amén" que se utilizan para finalizar las oraciones también
son ejemplos de gestos de cierre. También lo es un firme apretón de manos
o un pequeño apretón al final de un abrazo. Siga esto con un pequeño
movimiento de la mano o un beso rápido en el tronco para completar el
cierre.
Las secciones (7), (8) y (9) anteriores se utilizan para intensificar, ralentizar
y finalizar los ejercicios siguientes y se pueden utilizar en cualquier momento
para finalizar su comunicación con el árbol seleccionado.

b. Utilice los dedos para absorber la energía Yang y ayudar a

equilibrar la energía Yin (Figura 2-29 )

1. Párese aproximadamente a uno o dos pies frente a un árbol. Muévete

lenta y suavemente, acercándote gradualmente al árbol. Siente que el campo
de energía que te rodea se vuelve espeso como la miel.

2. Extienda los brazos hacia el árbol con las palmas hacia el árbol y los
dedos extendidos.

3. A medida que ajustas lentamente tu posición para estar cada vez más
cerca del árbol, menos "miel" te separa de las energías brillantes que se
encuentran en su núcleo.

4. De manera similar, tu propio resplandor se revela al árbol.

5. Al mismo tiempo, la energía similar a la miel que te rodea actúa como un

capullo protector y tu conciencia del mundo exterior se desvanece. Cuando
llegas al árbol y lo envuelves en un gran abrazo, tus energías radiantes se
vinculan entre sí y puedes perderte por unos momentos en la dicha de la
unión.
 6. Después de hacer contacto de
esta manera, es posible que
tengas que quedarte quieto por
un tiempo hasta que las
conexiones nuevas y más
profundas entre tú y el árbol se
estabilicen y simplifiquen. Pronto
os encontraréis en el estado de
seguimiento paralelo descrito
anteriormente a partir del cual
se desarrollará la circulación y el
intercambio.

7. Siente primero la energía del árbol. Cuando sientas el Chi del árbol, utiliza
la mente, los ojos y la parte inferior de los ojos para concentrarte en la punta
de la nariz. La parte superior de los ojos mira a las puntas de los dedos y al
árbol.

8. Utilice los dedos izquierdos, la mente y la parte superior de los ojos para
absorber el Chi hacia adentro.

9. Mueva la parte superior de los ojos lentamente para guiar el Chi hacia
arriba por la parte exterior (lado Yang) del brazo izquierdo, hasta el hombro
izquierdo, el lado izquierdo del cuello y la oreja izquierda hasta la coronilla.
Mueva la energía hacia abajo por el lado derecho, comenzando por la parte
posterior de la oreja derecha, hacia el cuello derecho, el hombro derecho,
fuera del brazo derecho, hacia la palma y los dedos derechos. Proyecta la
energía desde los dedos, combínala con la Energía de Partículas Cósmicas y
guíala hacia el tronco del árbol. Absorberlo nuevamente en un círculo. Los
hombres repiten el ciclo 36 veces; las mujeres repiten el ciclo 24 veces. (Ver
Figura 2-30)

10. Si desea finalizar la experiencia en este o en cualquier punto, siga los

procedimientos de (a)(7), (8) y (9) anteriores para intensificar, disminuir la
velocidad y finalmente romper su conexión con el árbol.

El Círculo de Energía Yang le ayudará a volverse más sensible al dolor

crónico y más superficial, así como a la energía de los órganos Yang
(intestino grueso y delgado, vesícula biliar, vejiga y estómago).

c. Utilice las palmas para absorber el Chi del árbol; el lado yin

1. Siéntese o párese aproximadamente a uno o dos pies frente a un árbol.

2. Extienda los brazos hacia el árbol con las palmas hacia el árbol. (Figura 2-
31)
3. Siente primero la energía del árbol. Cuando sientas el Chi del árbol, usa
tu mente, tus ojos y tus palmas para absorber el Chi a través de tus palmas.
Mueva el Chi hacia arriba por el interior (los lados Yin) de ambos brazos
hasta ambos hombros, ambos lados del cuello y las orejas izquierda y
derecha, hasta la coronilla. Desde la coronilla, mueva la energía por el Canal
Funcional hasta la mitad del entrecejo, la garganta, el corazón, el plexo
solar, el ombligo y el caldero detrás del ombligo.

4. Continúe moviendo la energía hacia abajo desde el caldero hasta el

perineo, hasta las plantas de los pies y luego aproximadamente tres metros
hacia el suelo.

5. Lleva la energía a las raíces del árbol y luego al tronco del árbol. Siente
cómo tu energía fluye a través del árbol y luego emerge del tronco hacia tu
palma. Repita el ciclo nueve, dieciocho, 24 o 36 veces.

6. Practica enviar tu energía a través del tronco del árbol desde la palma
derecha, a través del árbol, hacia la palma izquierda, y desde la palma
izquierda, a través del árbol,
hacia la palma derecha. Los
hombres deben practicar
durante 36 ciclos; las mujeres
deben practicar durante 24
ciclos. Lo más importante es
sentir tu energía penetrar el
árbol.

7. Practica distinguir diferentes

partes del árbol. Comience con
la parte superior del tronco.
Envía tu energía al tronco y
siéntela reverberar. Arrodíllate
lentamente para practicar con la
parte inferior del tronco. Luego
practica con las raíces del árbol.
Siente e intercambia la fuerza
con el árbol.

d. Absorber el Chi del árbol a través de la copa

1. Párese aproximadamente entre dos y tres pies frente a un árbol con los
brazos a los costados. Siente el aura del árbol. (Figura 2-32) Si no lo siente,
puede acercarse.
2. Cuando sientas el aura del árbol, usa tu copa para absorber la energía. La
energía equilibrada del árbol puede sentirse muy suave y tener un efecto
curativo muy poderoso.

3. Atrae la energía del árbol

hacia tu copa y déjala fluir hacia
abajo a través de los Canales de
Impulso o a través del Canal
Funcional hasta el perineo, luego
hacia ambos pies. Mueve la
energía a través de las plantas
de tus pies hacia el suelo. Lleva
la energía del suelo a las raíces
del árbol y luego a su tronco.

4. Siente cómo absorbes la

Energía de la Tierra y la energía
del árbol.
(Figura 2-33) Sienta cómo
purifican su energía, eliminando
la negatividad y la energía
enferma. Cuando lo sientas
emerger del tronco del
árbol, absorbe la Energía del Plano Humano (Partícula Cósmica) y devuelve
la energía a tu corona. Sentirás que las energías combinadas nutren tu
cerebro, glándulas y órganos. Repita el proceso nueve, dieciocho o 36 veces.

e.Comparte con el
Árbol desde el Corazón

En este patrón, la energía

del árbol pasa por los
brazos y el centro del
corazón. Puede usarse
para limpiar los brazos de
un sanador de la energía
enferma acumulada en el
trabajo, o simplemente
para abrir el corazón.

1.Asuma cualquier
posición cómoda en la
Figura 2-33. Absorber el árbol Chi encl que sus manos puedan
Tierra L nergía a través de la copa
 alcanzar fácilmente una rama.

2. Extiende un brazo para tocar el árbol con la palma o las yemas de los
dedos. Sienta la energía vital justo debajo de la corteza y haga contacto con
ella, dejando algo de tiempo para que se desarrolle el contacto.

3. Después de un rato, sentirás que el intercambio comienza como una

suave respiración de un lado a otro entre tu mano y el árbol.

4. Extiende gradualmente el proceso hasta que estés respirando energía a lo

largo de todo el brazo, de ida y vuelta desde el centro de tu corazón hasta el
árbol. Dejemos que este intercambio de ida y vuelta continúe por algún
tiempo.

5. Luego, involucra el otro brazo. Puede descansar en la misma rama, cerca

del otro lado, o puede descansar en una rama completamente diferente.

6. Permita que la energía del árbol fluya a lo largo de un brazo, se mezcle

con su propia energía en el centro del corazón y salga por el otro brazo. De
vez en cuando invierta la dirección del flujo en uno o ambos brazos.

7. Para una experiencia más profunda, intente extender el flujo desde el

corazón hasta el ombligo, dejándolo ir del árbol al corazón, al ombligo y de
regreso.

8. ¿A dónde va la energía después de que sale de tus manos y entra al

árbol? Siguiéndolo con la mente, empezarás a descubrir más sobre la sutil
anatomía del árbol.

9. Es posible que encuentre áreas bloqueadas o congestionadas en las que

pueda trabajar haciendo pasar energía de una mano a la otra. Siente la
respuesta del árbol a tus esfuerzos y deja que la intuición te guíe.

f. Absorber la energía de la Tierra

1. Crea calidez en tu ombligo y lleva la energía hasta la coronilla.

2. Proyecta el Chi hacia la copa del tronco del árbol. Entra en el árbol y
siente que tienes una conexión con él.

3. Durante este proceso, puedes pararte más lejos del árbol (de diez a diez
pies). A medida que continúa tu práctica, puedes proyectar tu energía
fácilmente desde lejos hacia el árbol. Deja que el árbol absorba tu energía
negativa o enferma. La energía que recibas de vuelta estará equilibrada.
4. Deja que tu energía fluya por el tronco del árbol hasta sus raíces y hacia
la Tierra. (Figura 2-34) Deja que la Energía de la Tierra purifique tu energía.
Lleva esta energía combinada hacia arriba a través de las plantas de los pies
hasta el perineo y luego hacia arriba.
5. a través de los Canales de Empuje, o a través del Canal Gobernador que
sube por la columna vertebral. Deja que la energía fluya hasta la coronilla y
proyéctala nuevamente hacia afuera. Repita el proceso nueve, dieciocho o 36
veces.

Cuanto más repitas el proceso,

más se refinará y aumentará tu
energía. Notarás que los
Canales de Impulso y la Órbita
Microcósmica están más limpios
y brillantes. Una vez que hayas
establecido una buena conexión
con el árbol, puedes enviar tu
energía enferma al árbol desde
una distancia lejana para refinar
tu energía o mejorar tu salud.

g. Meditar sentado bajo un

árbol
Una vez que hayas desarrollado
la capacidad de sentir el Chi del
árbol, podrás sentarte debajo
del árbol y meditar. Atrae la
energía del árbol hacia ti a
través de las estaciones
(puntos) de la Órbita
Microcósmica. (Figura 2 35)